Con mi vecino Salustio

Con mi vecino Salustio a mí lado terminé este relato en el cual incluí fotos suyas y ante su pedido incluí una mía.

MI VECINO SALUSTIO

Hace unos días que ocuparon el departamento del segundo piso, porque su ocupante una señora de mas de 90 años ya no podía vivir sola y por eso la internaron en un geriátrico.

Al subir al ascensor me encontré con el nuevo vecino, un morenazo de más de 1.80 de estatura que se presentó dándome la mano y diciéndome con un cantito caribeño:

-Soy Salustio, supongo que somos vecinos.

Su mano era tremendmte cálida, me extrañó la suavidad de ella y el rato que tuvo la mía apretada con ella pero lo que más me sorprendió fue que al soltarla la arrastró hasta posarla sobre su bragueta donde pude percibir un montículo muy apetecible.

Bastante disgustado por su actitud, rápidamente quité mi mano de su bulto, le dije mi nombre y luego cerré la puerta del ascensor para subir a mi piso sin siquiera decirle " Buenas tardes".

Que se habrá creído este tipo, tan solo presentarse y ya quería un encame conmigo o a lo mejor es una costumbre de su país ofrecer su verga como acto de amistad??!!

No voy a negar que el moreno estaba apetecible, pero no para llegar al extremo de tener una relación tan vertiginosa, reconozco que me fui para mi casa bastante molesto sin dejar de pensar en él y en la delicia que tenía escondida en el sitio donde había posado mi mano.

A la noche cuando volví a mi casa lo vi que estaba en la cochera verificando donde pondría su coche, por supuesto que lo ignoré bajé de mi coche y me dirigí a la salida.

-Oye! Chico andas muy apurado!

Me detuve ante semejante saludo, decirme chico a mí un veterano de casi cincuenta años!!

-Oye muchachote no soy ningún chico!!

-Disculpa, es que en mí país se acostumbra a decirle chico a todo el mundo.

-Está bien de donde eres?

Ya más calmado le respondí porque hay que ser amables con los extranjeros porque cuando nosotros somos los extrajeros nos gusta que nos traten bien y yo de eso sé mucho porque he tenido la suerte de haber visitado muchos países en tres continentes.

-Solamente quería pedirte si me dejas hacer una llamada telefónica porque mi celular no funciona y mi teléfono aun no me lo conectaron.

Estaba muy bien vestido de traje y corbata que contrastaban muy bien con su piel oscura.

Acepté prestarle el teléfono por esos subimos hasta mi depto. donde le señalé donde estaba el aparatito y al verlo Salustio me dijo:

-Perdóname chico, si no te importa tengo que llamar a casa, después te pago lo que diga la operadora porque ni idea tengo de cuanto cuesta telefonear de tu país a Cuba.

No me gustó para nada que hiciese una llamada tan lejos porque a lo mejor era muy cara, pero no pude negarme para no parecer descortés.

De a poco iba conociendo algo más de mi nuevo vecino, era moreno, con un bulto muy grande, manos suaves, ahora sabía que era cubano y quien sabe que otros secretos más ocultaría dentro de su agradable presencia.

Desde la cocina lo vichaba porque mientras hablaba se pasó todo ese rato rascándose la verga y alisándose el pantalón con su mano sin importarle que yo pudiese verlo, aunque él sabía que no estaba en la misma habitación.

Habló como quince minutos en los cuales por discreción me fui para la cocina, mientras me preparaba la cena me llamó diciendo que había terminado su conversación y al aparecer yo en el living me dio el importe que le había dicho la operadora.

-Sabes, mi mamá me extraña mucho porque primero me fui para Venezuela y luego el banco en que trabajo me mandó para acá como secretario de uno de los gerentes...

-Puedo ofrecerte un trago? Tengo whisky...

-Andale chico, te estoy muy agradecido por la llamada, por eso estoy en deuda contigo vente a mi departamento y te tomas un mojito conmigo...

-Espérame que guardo lo que había sacado de la heladera y voy a tomar ese mojito contigo.

Que otra cosa podía hacer que aceptar su gentileza y por qué voy a mentir quería "husmear" que había en su departamento.

Al entrar me dijo:

-No te fijes en que esta medio vacío, todavía no compré el mobiliario porque la empresa no me dio el adelanto para hacerlo, luego podrías recomendarme algún lugar donde comprarlos o algún decorador que lo haga... pero eso será después ahora tomaremos el mojito.

Fue a la cocina y volvió con dos vasos con hielo, luego les vertió el ron y una hojas de hierbabuena y brindamos por su estancia en mi país.

Me puse nervioso porque el tipo parecía tener ladillas, se rascaba mucho y a través de la fina tela de su pantalón se notaba como su bulto crecía cada vez más, por eso decidí apurar el trago y despedirme antes de tener una altercado con el extranjero porque se notaba que estaba sediento de sexo y quería que yo fuese su victima o su victimario.

Cuando intenté despedirme me dijo:

-Ándale!! ¿Qué apuro tienes?

-Discúlpame, tengo que ir a cenar porque son más de la medianoche mañana tengo que ir a trabajar y me quiero acostar temprano.

-Quería mostrarte un DVD de Cuba para que conozcas mi tierra...

-Otro día será...

Estaba allí de frente a él imaginándome como sería su verga porque con todos esos toqueteos y rascadas que se había estado haciendo todo ese rato que estuve en su casa su bulto había adquirido unas muy buenas dimensiones ostentando la grandeza de lo que ocultaba su pantalón de vestir.

Más resignado aceptó que yo tenía que irme y me acompañó a la puerta donde me dio la mano, esa misma con la que se había acariciado su verga pero al tomar mi mano para despedirse me atrajo hacia él dándome un tremendo beso en los labios que me dejó sin aliento por la sorpresa impactante de ese hecho inesperado.

De ahí en más todo pasó sin proposiciones como un hecho normal, pude sentir su verga dura sobre la mía, cuando él me abrazó apretándome las nalgas con sus manos a la vez que me decía:

-Me gustaste desde que te vi en el ascnesor y no sabía con que excusa traerte a mi casa para disfrutar del sexo contigo pero ya ves estamos haciéndolo.....

Luego de interminables besos en los cuales no resistí la tentación de tocar su pija por encima de su pantalón Salustio me dijo:

-Puedo ser activo, pasivo o lo que tú quieras pero hazme gozar porque hace muchos días que no tengo sexo placentero... hace poco que llegué a tu país y solamente fui con un taxiboy que vi en el periódico, pero sabes que ese tipo de relaciones son muy mecánicas.

-Quiero ver como te pajeas, porque tu pija aparenta ser de muy buen tamaño.

Salustio sin más preámbulos muy delicadamente bajó la cremallera de su pantalón extrayendo por esa pequeña abertura una verga de tamaño considerable, de cabeza muy roja, de cuerpo bastante achocolatado y con un brillo escandalosamente apetecible para hacerle una buena mamada o para cualquier cosa que a uno se le ocurriese en esos momentos.

Era más grande que la mía, pero lo que la hacia muy apetecible era ese brillo tan intenso por lo cual no dudé en alargar mi mano para tocar ese pedazo de carne que me haría pasar un buen rato y que hizo que me olvidase de que no había cenado.

Esa noche mi cena sería VERGA a la CARTE o de cualquier forma que el cocinero la presentase.

Estuvo unos instantes corriendo el prepucio, descubriendo esa cabeza rojiza hasta que decidió bajarse los pantalones para mostrarme todo el conjunto.

-Que conjunto!!!

Sus bolas morenas estaban de acuerdo con el pedazo de pija que portaba mi nuevo vecino dos ciruelas violáceas colgaban atrás de su verga, con tanta carne colgando igual percibí que su ropa interior era de un blanco purísimo contrastando terriblemente con la oscuridad que manaba de su entrepierna.

Al ver todo ese espectáculo no pude soportar más, mi propia pija me dolía por lo dura que se había puesto por eso le di la libertad haciendo caer mis pantalones hasta la mitad de mis piernas a la vez a que la fui acariciando para que mi vecino viese que también era apetecible.

-Chúpamela!!

Fue la única palabra que dije al descabezarla totalmente y notando que mi vecino se relamía los labios, solamente le di esa orden que fue cumplida inmediatamente con mucho fervor.

En cuclillas sobre el living de su departamenteo se la fue metiendo en su boca, acariciándomela con la punta de su lengua y apretándome la base con sus suaves manos, más que una chupada de hombre parecía un bebé con una mamadera.

Cuando notó que mi verga latía mucho la dejó y me dijo:

-No quiero que te corras tan pronto, vayamos al dormitorio y en la cama podremo disfrutar mejor.

Ya en su recámara nos desnudamos completamente antes de ubicarnos sobre su cama en donde comenzamos un 69 furioso, en el cual besé ese glande colorado y jugoso para luego tratar de introducírmelo inútilmente en mi boca porque era demasiado grueso para mí.

Mi anfitrión estaba tan entusiasmado chupándome la pija, haciéndola entrar hasta su garganta que ni se percató del problema que yo tenía por no poder saborearla a mi entera satisfacción pero mi boca fue cediendo hasta que hizo como las fauces de las víboras, logró estirarse hasta que ese glande hubo pasado mis labios para poder deleitarme con su sabor, textura y por supuesto los jugos que iban manando de allí.

Un buen rato permanecimos en esa posición, Salustio a la vez que me la chupaba me estiraba el escroto con las bolas dentro, hurgaba con sus dedos en mi culo, mientras yo trataba de hacer lo mismo pero como mi boca estaba empalada por ese vergajo poco podía hacer para chuparle las bolas como él más tarde me hizo antes de seguir el camino hasta que depositó su lengua en mi ano para dilatarlo con ella y por supuesto con sus dedos haciéndome salir una tremendas exclamaciones de placer desde los más recóndito de mi garganta las cuales se filtraron por los huecos que su verga dejó libre entre mi paladar y mi lengua.

Daba gusto chupar y paladear esa verga morena, por eso demoré lo más posible en sacarla de mi boca mientras sentía que mi esfínter anal cada vez se estiraba más dando cabida a un trío de los dedos de Salustio que pugnaban por entrar allí haciéndome latir mucho esa parte junto con mi glande que palpitaba dentro de su boca de una manera fantástica.

Salustio se excitó muchísimo con todo ese trabajo bucal que le hice, pero para aumentar más su placer saqué esa verga palpitante de mi boca y me dediqué a hacerle con mi lengua una interminable dilatación hurgando su esfínter, por supuesto que ayudado por mis dedos: en suma fue un 69 que terminó en un agotante 69 anal.

Ese día ni me acordé de tomarle fotos, pero en otras oportunidades que lo vi con su teléfono móvil, me dejó fotografiarle el culo del cual había disfrutado y por supuesto su verga, pero se negó a dejarme fotografiare el rostro para que no lo identificasen sus patrones o algún compañero porque le dije la verdad que escribía relatos y quería poner sus fotos para que mis lectores viesen con lo que había gozado mucho en esos días que tuve encuentros con él.

Pero volvamos a lo que sucedió esa primer noche que tuve un encuentro con él...

Se puso fuera de control con el tratamiento que estaba recibiendo su orto, por lo que no pudo contener más su excitación y en un incontenible alarido me gritó:

-Clávamelaaaaaaaaaaaaaaaa... no aguantooooooooooooo mááááááássssssssss

Yo también estaba bastante excitado con la verga doliéndome porque quería entrar en algún agujero para que con el roce que se produciría mi semen fuese expulsado y me calmase, por eos eché un escupitajo sobre el agujero que se me ofrecía y con los dedos fui introduciendo esa saliva espesa dentro del recto de mi nuevo vecino.

Mi pinga (como el la llama) muy fácilmente se fue deslizándose hacia sus profundidades porque Salustio tiene un esfínter muy dilatado por eso al ir metiéndosela le pregunté:

-¿Por acá te entró un camión?

-Ahh!! Lo dices porque no me dolió al entrar. Es que en mi tierra hay pingas muy grandes y yo me he comido de las mejorcitas...

Así en cuatro patas lo tuve un buen rato taladrándole el orto con mi "pinga" hasta que me cansé y le propuse que me cabalgara.

Muy contento me dijo que "Jinetear" era lo que más lo complacía.

Efectivamente el jineteo duró un buen rato, demostrándome sus muy buenas dotes de amazona y mientras cabalgaba clavado en mi pija se fue pajeando hasta que un gran chorro de leche blanca y espesa salió disparando de su verga para estrellarse en mi cara, con ese placer que recibió no pudo contenerse y fue aumentando la furia de la jineteada para hacerme expulsar mi leche la cual quedó contenida dentro del condón que me había puesto antes de penetrarlo.

Descansamos un poco hasta que Salustio me fue tocando el culo con sus dedos, luego acercó su lengua y me lo lamió de una manera suave hasta que finalmente sus dedos se abrieron paso separando las paredes de mi recto para dar paso a su glande pero en ese momento le dije que no me la metiese toda porque me dolía.

Y era cierto porque la calentura ya se me había ido y por eso solamente metió el glande y otro poco de verga fue admitido dentro de mi orto, él muy complaciente tan solo se conformó con eso y mientras metía y sacaba ese trozo de carne caliente me agarró la verga con las dos manos para hacerme una paja muy rápida logrando que se le llenasen las manos de leche para luego saborearlas con su lengua antes de que sintiese que su eyaculación me pegaba en las entrañas.

Lo dejé solo en su departamento únicamente acompañado con el sabor de mi esperma en su lengua y al llegar al mío me bañé para sacarme todos los fluidos que mi cuerpo había expulsado en todo ese rato de ardua labor.

Al otro día me vino a buscar para repetirlo y fue cuando le pedí el teléfono móvil con cámara par sacarle las fotografías que voy a poner en este relato y al pedirle que posara para mí le tuve que confesar que escribía relatos en esta página.

Esa segunda vez no me pude zafar ya que Salustio había traído un buen relajante muscular con algo de xilocaína para que no me doliese su penetración, la cual me hizo ver las estrellas no de dolor sino de placer.

Que bien que manipula la pinga este cubano!!!

Ahora estoy terminando este relato con Salustio a mi lado, está muy asombrado de lo bien que describí todo lo que hicimos por eso se está masajeando la pinga que ya la sacó para afuera de su pantalón y espera que yo abandone el teclado para que me prenda de ella para extraer el jugo que tiene guardado dentro de sus bolas oscuras y peludas.

Pero al ver las fotografías me dijo:

-Eres un egoísta porque tus lectores solamente van a ver mis fotos y no las fotos de tu pinga la cual me hace gozar muchísimo cuando la tengo dentro del culo o de la boca.

Después de pensarlo un poco y para complacerlo voy a agregar una fotografía mía en este relato, la cual muchos de mis fieles lectores han visto porque se las he mandado cuando me escribieron pidiéndome fotos mías.

Por hoy me despido esperando que disfruten mi relato, ya que me voy a chupar esa verga oscura que tengo a mi lado y que pide agitadamente que sea atendida.

Salustio se está riendo porque le parece de lo más divertido que para que nadie lo identificase, le puse ese nombre tan diferente de suyo real

OMAR

Espero comentarios como siempre en omarkiwi@yahoo.com