Con mi tío, Mario
Follé con mi tío casado en una reunión familiar sin que nadie se enterase.
Hola. Os voy a contar la historia de cómo el hermano de mi padre me folló salvajemente y con el resto de mi familia en el piso de abajo.
Tengo 19 años, y desde siempre he sabido que soy gay. Siempre he tenido cierta predilección por los maduritos, sobretodo si están casados. Yo mido 1,78, soy moreno, de ojos verdes y un buen culo.
Mi tío tiene 39 años, se llama Mario y mide 1,85 cm, un cuerpo bastante trabajado en el gimnasio, moreno y de ojos verdes. Él está casado y acaba de tener un hijo.
Todo comenzó en Semana Santa, donde nos reunimos toda la familia de mi padre en casa de mis abuelos. Allí comimos y tuvimos todos una conversación muy amena, hay que destacar que en la familia de mi padre somos muchos.
Yo no paraba de mirar a mi tío Mario, con ese cuerpo de pecado, con esos ojos verdes, esa boca para comerla y... ese paquete que siempre estaba muy marcado. Ese día mi tío iba con una camiseta blanca de tirantes y unos vaqueros muy ajustados, lo que hacía que su culo y su paquete estuvieran aún más marcados.
Yo me pasé la mitad de la comida medio empalmado y viendo como ese macho jamás sería mío.
Después de la comida, la gente se fue dispersando y cada cual hablaba con quien quería. Yo rápidamente me dirigí a hablar con mi tío Mario, que estaba sólo con su pequeño recién nacido. Hablamos sobre temas sin importancia, cómo te van los estudios, ...
De repente me pregunto que si tenía novia. Yo me puse un poco nervioso y le contesté que no... sin darme cuenta había puesto mi mano en su pierna!! tenía los muslos muy duros, era todo un macho.
Él me miró y puso una sonrisa maliciosa, lo que me dejó desconcertado. Cuando fui a quitar mi mano de su pierna me dijo que no hacía falta, que le gustaba.
Ahí me tranquilicé un poco, pero al momento me di cuenta de que estaba muy pegado a mi tío en un lugar lleno de gente, que además era nuestra familia!!
Mario se levantó, su paquete se veía mas abultado que de costumbre... Le dio el bebé a su mujer y le dijo que subía conmigo a su habitación (en el piso de arriba) para enseñarme unos cd´s que tenía.
Salimos del comedor y empezamos a subir las escaleras. No nos mirábamos el uno al otro pero la tensión sexual era evidente.
Llegamos a su habitación... no cerró la puerta y ya había empezado a manosearme!! Cerró la puerta con pestillo y ahí comenzó todo. Le quité la camiseta y vi que tenía un pecho muy trabajado, depilado y unos brazos muy musculosos.
Él empezó a besarme en la boca y a tocarme el culo con mucha pasión. Pero de repente se paró:
Antes de seguir tenemos que dejar algo claro.- Me dijo
¿Qué pasa?
Llevo tres meses sin follar por lo del nacimiento de mi hijo. Me has puesto muy cachondo hoy, pero esto no volverá a pasar. ¿De acuerdo?
Sí.- Me fastidiaba saber que sólo podría tenerlo una vez pero con eso era suficiente.
Lo segundo es que cuando empiece no voy a parar. Tengo muchas ganas de follarte. Soy muy bestia follando y nunca he partido un culo. Te voy a hacer daño, tengo la polla bastante grande.
Me da igual que me hagas daño. Hoy soy tu puta.- Esto le puso a 100 y empezó a desnudarme.
No teníamos mucho tiempo para preliminares ya que estaba toda nuestra familia abajo, por lo que empecé a chuparle la polla.
Su polla era perfecta. Unos 21 cm, no muy gruesa, y muy caliente y venosa. Se la chupé como yo sólo sé hacerlo (todos mis amantes me dicen que la chupo de vicio).
Nunca me la habían mamado tan bien!!!!
Mario empezó a moverme la cabeza a un ritmo bestial. Me estaba follando la boca. Salía précum muy bueno de ella, el cual me tragaba dado su rico sabor. Notaba como su polla estaba a punto de estallar pero aún quedaba mucho polvo por delante.
Ya me has llenado la polla de saliva, ya puedo follarte a gusto. Espero saber meterla en un culo, jeje.
Es lo mismo que un coño, pero más cerrado.- Le dije
Me puso a cuatro patas, apoyado en la cama. Ahí vio por primera vez mi ano, el cual está bastante abierto.
De repente, sentí un dolor inmenso. Mi tío me había metido la mitad de su polla de un golpe!!. Pequé un pequeño grito de dolor, por lo que mi tío me tapo la boca con una mano. En ese momento sentí miedo, ya que alguien de nuestra familia podía habernos escuchado.
Mientras tanto, Mario me metió el resto de su pollón poco a poco. Notaba como mis músculos y los suyos se tensaban. Este hombre era un semental!!
Cuando ya me acostumbre a tener su polla dentro, él poso todo su cuerpo sobre mí, por lo que estábamos los dos tumbados boca abajo, yo encima de la cama, y el encima de mí, rompiéndome entero.
Las embestidas no se hicieron de rogar, y mi tío estaba dándome todo el sexo que no había tenido en meses. Yo me preguntaba como un macho como este podía estar sin sexo tanto tiempo.
Nos cambiamos de posición, poniéndome yo en frente de él y con los pies en sus hombros.
Empezó a decirme cosas en bajo mientras me follaba:
Joder, que culo! Cómo me gusta! No sabía que follarme un culo iba a ser tan bueno! Qué bien follas putita!!
En ese momento me levanto, me puso de cara a la puerta y me la volvió a meter de un golpe, empotrándome contra la puerta. Estuvo follándome así unos 10 minutos, sacándola y metiéndola entera. Yo gemía como una puta en celo y él como el toro que es.
Cariño, me voy a correr en tu culo!! Vas a ser mío!! A partir de hoy te he marcado!! Ahhhh Ahhhhhh qué rico!!! Mmmmmmmmm!!!
Sentí una gran cantidad de leche en mi interior. Me dijo que había soltado mas de 7 chorros de leche calentita.
Si fueras una tía te habría dejado preñada.
Los dos nos reímos y nos besamos. Nunca había tenido un polvo tan bueno y especial, quizá por eso de que fuéramos familia y él follase tan bien y estuviera tan bueno.
Llegó el momento de bajar con los demás. Estaba nervioso y veía que mi tío también. Pero al bajar todos estaban a su rollo, sin enterarse de nada y sin echarnos en falta.
Lo único que la mujer de Mario me preguntó si me había gustado la música que me había enseñado mi tío.
No sabes cuánto.- Le dije mientras pensaba en cómo le había dado a mi tío lo que esa zorra no era capaz.
Durante toda la tarde estuvimos Mario y yo mirándonos con disimulo, mientras yo notaba como de mi culo salía líquido todo el tiempo. Una vez que fui al baño pude comprobar cómo mi calzoncillo estaba manchado de semen de mi tío mezclado con un poco de sangre que me había causado con esas embestidas que me dio.
Por lo demás, mi tío me volvió a llamar, en muchísimas ocasiones, llegando a tener una relación clandestina. Me decía que le encantaba, que no quería follar con su mujer, que quería follar conmigo. Incluso se ponía celoso cuando yo me follaba a otros, aunque lo entendía ya que él no podía quedar siempre.
Si queréis contactar conmigo, ya sabéis: estoyaqui203@hotmail.com
Besos.