Con mi hermanito

Lentamente, empecé un lento movimiento, sin meterla aún. Me deleite con el roce de su polla con mis labios, despacio, hasta que no aguante más y empecé a metermela lentamente.

Estaba en mi cuarto, otra noche más escuchando como hacía disfrutar a otra mujer distinta. Los fines de semanas se me hacían eternos, era una constante entrada y salida de bellezas, junto a él. Me daba las buenas noches y comenzaba la acción. Hace ya mucho que ya no le miro como un hermano, que es alguien más, que provoca una revolución dentro de mi. Algún que otro hombre ha pasado, ha intentado llenar el vacío que él me provocas, pero nadie lo ha conseguido. ¿Cuándo empezó esto? Aún no lo sé. Estuvimos los dos solos, nuestros padres se fueron, has sido quien me ha criado. Empecé a ser mujer, y como otra cualquiera, enamorada de ti. ¿Quién se resiste a tu encanto? Alto, musculoso, moreno y con ojos verdes, además de ser cariñoso y atento. Aún recuerdo una de las primeras noches.

Estaba en mi cama, intentado despejarme cuando te escuché entrar. Oí algunas risas acompañadas del ruido de unos tacones. Minutos después, las risas pasaron a gemidos que llamaron mi atención. Sabía lo que pasaba y no pude detenerme. Mi curiosidad me llevó a observarlo detrás de la puerta y fue ahí cuando le vi, poseyéndola. Ella le cabalgaba, gemía, mientras que él disfrutaba. Veía su polla sobresalir, ver como salía y entraba de ella. No pude evitar sentir un sentimiento de frustración, de celos, pero sobretodo, de excitación. Mi sangre corría más rápido, sentía calor dentro de mi y sin poder evitarlo, bajé mi mano por dentro de mi pijama. Mis pupilas se dilataban, no podía apartar la vista, me excitaba verle dentro de una mujer e, irremediablemente, acabé con un orgasmo que hizo temblar mi cuerpo cayéndome de rodillas. Por un momento pensé que me vistes y que incluso me sonreíste. A la mañana siguiente hiciste como si no pasara nada y continuaron los días con total normalidad. Los fines de semana se convirtieron en una rutina, tú te follabas a cualquiera mientras yo me satisfacía detrás de la puerta. Se convirtió en mi perdición, le deseaba, ya no era solamente mi hermano. Cada día me vestía más provocativa. Empecé a ir sin sujetador por casa, me ponía pantalones cortos. Tenía curvas, un precioso culo y un provocativo escote, el cual lucía con orgullo para él. Llegó ese día, no aguantaba más. Fue raro que se quedara en casa y no lo pensé más. Estábamos los dos viendo una peli, yo con una camiseta suya que no dejaba mucho a la imaginación, con un tanga negro que se veía perfectamente y sin sujetador. Empecé a recostarme hasta quedar totalmente tumbada sobre él, con mi cabeza en su entrepierna. Aburrida de la película cogí el mando y cambié de canal hasta llegar a uno porno. No dijo nada, solo sonrió. Sentí como su polla crecía, poco a poco, provocando que el tanga se empapara. Empecé a mover la cabeza para sentir el roce de mi cara con su entrepierna. Ya estaba completamente empalmado, no aguantaba más.

  • Vaya hermanito, estás contento, ¿no?
  • Bueno, poniéndome las cosas que me pones..
  • Jajajajaja venga, que sé que esto es por mi
  • Hombre, ya eres una mujer y uno no es de piedra
  • Ah, ¿si? ¿Te gusta tu hermanita?
  • Si me vas provocando..
  • Por algo será

No pude evitarlo, me estiré y aprovechando me agarré al cuello de su camiseta. Me incorporé y me quedé a pocos centímetros de su cara

-Eres mi hermana, no puedo

-¿Por qué? No creo que haya nada de malo en divertirnos

Me acerqué más y le besé, con la pasión que tanto le había estado reservando. En un principio, fue reacio pero poco a poco, se dejó. Empezó una lucha entre los dos, sus manos apresaban mi cuello y las mías su camiseta. Me puso encima suya, sintiendo como su poya estiraba sus boxers, haciendo presión en mi entrepierna. Me quito la camiseta y tus manos fueron a mis tetas. Mis pezones estaban durísimos, y no era por el frío. Las cogió, las acaricio, me revolucionaba. Suspiré, gemía mientras chupaba mis pequeños pezones. Mis manos bajaron hasta mi entrepierna, donde rozaban con su polla y mi coño. Me cogió por el culo y me llevó hasta tu cuarto, donde me tiró bruscamente contra tu cama, mientras abría mis piernas, dejándole todo al descubierto. Se abalanzó sobre mi, dándome besos, poco a poco bajando hasta mi coño. Me bajó el tanguita negro empapado y vio mi coño totalmente depilado.

  • ¿Por qué no hicimos esto antes enana?
  • No hables

Acaricio suavemente mi coño y gemi. Introdujo un dedo, poco a poco dos y al final, cuatro. Siguió ayudándose de su lengua, chupó mi clítoris haciendo que me retorciese de place. Grité con mi primer orgasmo.

  • No es justo que sea la única aquí sin ropa..

Bajé sus bóxers y su polla resaltó ante mis ojos. Tenía algunas gotitas y con cuidado, se las quité del prepucio llevándomelas a la boca. Le di unos lametones, disfrutándolo. Gimio bajito hasta que, de repente, me metí toda su polla en la boca provocando que saliese un gruñido suyo.

  • No sabía que lo hacías tan bien enana
  • Sabes tan poco de mi
  • Pero no pares!

Me supo mejor de lo que pensaba, agrio pero dulce a la vez. Su polla no llegó a caberme completa, me ahogaba, pero de una forma buena. Seguí hasta que sentí que se iba a correr. Paré haciendo que se refunfuñara y lo tiré sobre su cama. Me puse encima suya, apuntando su polla directamente a mi vagina. Lentamente, empecé un lento movimiento, sin meterla aún. Me deleite con el roce de su polla con mis labios, despacio, hasta que no aguante más y empecé a metermela lentamente. Sentí como me llenaba, el mejor placer de todos. Le cabalgué, al igual que hizo la primera chica con el que le vi. Gemi fuerte, mis tetas rebotan mientras aceleraba el ritmo. * No tardaré mucho nena como sigas así.. Ahhhh * Sigue, sigue, me corro!

Termine con el mejor orgasmo que he tenido, mientras sentía como toda su leche me llenaba por dentro. Me tumbe junto a él y le besé. * Buenas noches enana * Buenas noches hermanito

Sonreí, mientras me abrazaba a él para dormir. No hay mejor sensación que sentir como su leche corría por mis piernas junto a mis jugos.

Es mi primer relato en todorelatos.com Espero que les guste y me dejen sus críticas para poder mejorar!

Saludos, Celinfinitehot