Con Manuel y Karina (1)
Primera parte de mi historia entre mi pareja y mi amiga donde pasamos momentos de pasión y buen sexo.
CON MANUEL Y KARINA 1
Hola amigos, después de mucho tiempo sin escribir por motivos personales, vuelvo a enviarles una historia que espero les guste, para los que no me recuerdan les cuento que soy de Argentina, tengo 30 años, soy de pelo castaño y mis medidas son 100 62 92.
Esta historia comienza cuando vuelvo a casa después de estar un mes fuera por motivos de trabajo, no tuve sexo en ese tiempo y deseaba ansiosa encontrarme con mi pareja Manuel y les cuento como se desarrollaron los acontecimientos bien calientes y excitantes.
Llegué a casa y entré casi corriendo, lo buscaba, lo deseaba tanto y estaba tan caliente que no podía esperar más, lo encontré en la cocina, lo abracé y lo besé con pasión, devolvió mi beso abrazándome con fuerza, su lengua invadió mi boca, sus manos recorrieron mi cuerpo, y rápidamente buscaron bajo mi falda, me tomó por las nalgas y me apretó fuerte contra él, dejando sentir su verga dura contra mi sexo, lo abracé por detrás de su cuello, su boca besaba el mío, llegaba hasta el nacimiento de mis pechos, sentía mis pezones duros clavarse contra su pecho, me tomó fuerte y me llevó contra la pared, besó mi boca, mi cuello, tomó mi camisa con sus dos manos y la abrió de un tirón, los botones saltaron por el aire, metió sus manos debajo de mi sostén y tomó mis pechos sacándolos por fuera y se lanzó a comerme mis enormes tetas, las chupaba, comía mis pezones duros, los mordía, yo gemía de placer, metió su mano bajo mi falda y dentro de mi tanguita, sintió mi conchita mojada, la recorrió con sus dedos de arriba hacia abajo, excitándola, mis jugos corrían por sus dedos, los que sentí al penetrarme, profundo, fuerte, me cogía con sus dedos y no dejaba de comerse mis pechos excitados.
Tomó mi tanguita por los costados y me la arrancó de un tirón, vi como sacaba su pija enorme y dura, me tomó por las nalgas y me montó sobre él, lo tomé por el cuello con mis dos manos y crucé mis piernas por detrás de él, sentí su dura y caliente verga acariciar los labios de mi conchita ardiente y la acomodó en su entrada, de una embestida me clavó profundo, dejando entrar su verga completa dentro de mi, ahogue un gemido de placer, pero la deseaba, me excitaba y le pedí mas, me cogió mas duro, sacó su verga por completo y nuevamente me la clavó toda, profundo y caliente, me comenzó a coger duro y fuerte, yo gozaba y le pedía mas y mas, me daba mas duro, me besaba, chupaba mis tetas, yo cabalgaba su verga que me llenaba toda, ambos gemíamos y gozábamos.
Comencé a dar gritos de placer, iniciando mi orgasmo, comencé a acabar de manera intensa y fuerte, sus embestidas fueron más salvajes llevándolo también al orgasmo, su leche caliente inundó mi interior, era abundante, me llenaba toda, prolongando mi orgasmo, mi conchita extasiada, exprimía su verga, quedamos abrazados, extasiados, su verga aun estaba dentro de mi y a pesar de la acabada seguía dura, entonces me salí de ella, me arrodille frente a él y la lleve a mi boca, tragándomela completa, toda hasta mi garganta, gimió de placer, se la chupaba fuerte y profundo, tomó mi cabeza y la empujó contra su verga, ahogándome en ella y empezó a moverse, cogiendo mi boca, su enorme pija entraba y salía completa de entre mis labios, gozaba, acaricie sus bolas y seguí chupandosela fuerte, aumente mas el ritmo y noté su verga hincharse anunciando su acabada, me la comí toda, sintió como tocaba mi garganta y allí explotó, su leche comenzó a correr por mi garganta, tragándomela toda, sentía mi boca succionar su verga que no paraba de lanzar leche caliente, me empujó la cabeza haciéndome comer su verga, hasta que mi boca trago toda su lechita.
Entonces me hizo levantar y nos besamos con pasión, compartiendo su leche en mi boca, mientras nos fuimos desnudando por completo, me tomó en brazos y me llevó hasta nuestra habitación, me recostó en la cama y me dejó allí, desnuda y caliente, se sentó a mi lado y sus manos comenzaron a recorrer mi espalda hasta llegar a mi culito, y luego comenzó a besar mis piernas, por mis muslos, hasta llegar a mis nalgas, abrió mi culito y sentí su lengua deslizarse dentro de mis nalgas y sobre mi agujerito, subió besando mi espalda y se acomodó detrás de mi haciéndome sentir su verga dura contra mi culito, me hace girar, mis enormes senos quedan con mis pezones muy duros apuntando hacia el techo, los devora con pasión, siento su boca sobre ellos, los muerde suavemente, me hace gemir, su lengua juega sobre mi pezón y mi aureola, devora mis pechos, los come con deleite, baja por mi vientre, juega con su lengua sobre mi ombligo y baja mas hasta llegar a mi pubis depiladito, juega con los bellos sobre su boca, comienza a sentir mi humedad sobre su boca, abre bien mis piernas, se devora mi conchita húmeda, deseosa.
Se pone sobre mí, cruzo mis piernas por detrás de su espalda, siento su verga dura y caliente en la entrada de mi conchita y comienza a deslizarse dentro de mí, lo hace suave y lentamente, hasta el fondo, su enorme pija me llena y me hace gozar, me coge profundo y mientras lo hace, se come mis pechos, le pido mas verga, me das mas duro y fuerte, acelera el ritmo, su cuerpo pegado al mío, me besa en la boca, mis pechos se clavan contra el suyo, mi cuerpo se convulsiona y acabo fuerte, exploto de placer, giro y me montó en su verga, lo cabalgo fuerte, rápido, profundo, hasta que él también explota, inundándome con su semen caliente, me llena la conchita y eso me encanta, caigo rendida sobre su cuerpo y me duermo con su verga aun dentro de mí.
Desperté y ya era el mediodía, mi cabeza descansaba sobre su pecho, lo veía dormir profundo, ambos estábamos desnudos, habíamos hecho el amor toda la noche, podía sentir su semen por sobre todo mi cuerpo, perdí la cuenta de mis orgasmos y los suyos, pero notaba su leche en el interior de mi conchita y mi culito, pegada sobre mi pubis y mis pechos y también su sabor en mi boca y mi garganta. Recostada en su pecho podía ver su verga, blanda y exhausta, me acerque a ella y la bese, pude sentir el sabor de su semen y mis jugos, la lamí un poco y la saboree, pero de pronto sonó el timbre de la puerta.
Entonces recordé que mi amiga Karina iba a venir a verme porque sabía que había regresado, Manuel seguía dormido, me levanté, me puse apenas una remera y fui a abrirle, al abrir la puerta y verme mi amiga sonrió y me dijo que veía que había tenido una noche intensa, me abrazó y me dio un beso y volviendo a sonreír, me dijo que también la noche había dejado rastros sobre mí, evidentemente reconoció el olor de su semen sobre mi cuerpo y creo que eso la excito un poco.
Le dije que iba a ducharme, pero para no dejarla sola, le dije que viniera conmigo, pero que fuera en silencio porque aun dormías, al entrar a la habitación de pronto me di cuenta que estaba desnudo, pero ya Karina había entrado, no era un problema, con ella tenemos mucha confianza e incluso de solteras hemos tenido sexo y también compartimos algún hombre, pero nunca con Manuel.
No me importó que lo viera desnudo, pero no me espere que él tuviera una muy dura erección, al verlo Karina me dijo que parecía que no había tenido suficiente, la mire y le dije que tal vez necesitaba mas de una mujer para estar satisfecho... ella me abrazó y me dio un gran beso en la boca, nuestras lenguas se unieron y sentí mis pechos y los suyos endurecerse, en un instante las dos estábamos totalmente desnudas, acariciándonos y besándonos, mi amiga es una mujer hermosa, de pelo largo y rubio y con un cuerpo como el mío, solo sus pechos son un poco mas pequeños que los míos, pero también tiene un enorme culito con unas nalgas redondas y duras.
Nos metimos en la cama, y ella tomo su verga grande y dura en su mano, me miro diciéndome que tenía suerte de tener una verga rica y enorme como la suya y de un bocado la metió en su boca, chupandosela golosamente, yo comencé a besarlo y lo fui despertando, entre dormido y cansado me sonrió, pero enseguida notó algo extraño, no era mi boca la que comía su verga, le sonreí y le dije que mi amiga Karina había venido a visitarnos, miró hacia abajo y pudo ver como su verga desaparecía en su boca, ella se incorporó, le dio un fuerte beso en la boca y volvió a acomodarse y tragarse su verga gruesa y dura, tome mis tetas y se las ofrecí, para que las comiera, lo hizo con gusto y placer, lamía mis pezones, los mordía y ahogaba en mis enormes pechos sus gemidos de placer que mi amiga le brindaba comiéndose su pija, baje junto a ella y juntas nos la devoramos, ella comía su tronco y yo sus huevos, y luego cambiábamos, él nos acariciaba las cabezas y disfrutaba, luego nos hizo acostar a las dos y comenzó a comerse la conchita mojada de mi amiga y metía los dedos en la mía, y luego cambiaba, su boca pasaba de una conchita a otra, saboreando sus jugos.
Mi amiga lo deseaba y se lo pidió, quería que la cogiera ahora mismo, Manuel se puso sobre ella, refregó su verga dura y caliente sobre su clítoris, por sus labios húmedos, la hacía desear y ella le rogaba que la cogiera ya, colocó su verga entre sus labios y de una embestida la dejó ir completa en su concha empapada, Karina gimió de placer, cruzó sus piernas por detrás de él, que empezó a embestirla fuerte, entrando y saliendo completo de su sexo mojado, ella gemía mas fuerte, yo me coloque sobre ella, de frente a él, para que me comiera la conchita, sentí su lengua entrar en mi sexo, Manuel la cogía cada vez mas duro y fuerte, ella ahogaba sus gemidos en mi concha, mientras la cogía me comía las tetas, ella pedía mas y él le daba mas fuerte y profundo, la llevó al clímax y la hizo acabar dando fuertes gritos de placer.
Karina quedo recostada de espaldas, extasiada, yo me puse en cuatro patas, delante de ella y comencé a comerme su conchita mojada, mientras Manuel se acomodó detrás de mí y me cogía fuerte, sentí su enorme verga deslizarse hasta el fondo de mi sexo, me embestía duro y salvaje, los dos estábamos cerca del orgasmo, me cogió mas duro, haciéndome acabar fuerte e intensamente, sentí su verga por explotar, entonces me recosté junto a mi amiga y él se puso a un costado de nosotras, pajeandose fuerte, su verga estalló, fuertes y gruesos chorros de leche cruzaron sobre nosotras, cayendo en nuestras tetas, sobre nuestras caras y cuellos, nos bañó en su leche caliente, entre las dos le limpiamos la verga hasta la ultima gota...
Nos quedamos los tres acostados, la habitación olía a sexo, pero todavía deseábamos mas, mi amiga me dijo algo al oído, yo me reí y le dije que se lo pidiera, que Manuel siempre estaba dispuesto a ayudar a una amiga. Él preguntó que quería, ella lo miro con ojos de putita y le dijo, QUIERO QUE ME COJAS POR EL CULO!!!!!
Él sonrió y dijo, no me puedo negar a un pedido así.
Lo que paso después se los cuento en la próxima historia.
Continuara...