¿Con el tío o el sobrino? xvii
Había llegado a imaginar cómo disfrutaría restregarle en la cara a Sergio que alguien más ocupaba su lugar en mi vida y que esa persona era su sobrino
Si algo me había dejado claro la discusión con Alfonso era que definitivamente él no era la persona indicada para tratar de olvidar a Sergio, lo cual realmente lamente, había llegado a imaginar cómo disfrutaría restregarle en la cara a Sergio que alguien más ocupaba su lugar en mi vida y que esa persona era su sobrino, pero fue algo que era muy difícil, Alfonso desconocía muchas cosas de mí, pero aun así lo sentía muy desconfiado y posesivo, siempre imaginándose lo peor de mí sin razón alguna, no porque yo fuera un jovencito inocente, sino porque él ni siquiera se imaginaba lo que hacía a espaldas de todos
Aunque tenía decidido apartarme tanto de Sergio como de Alfonso, mi primito tenía una aliada en mi vida, Rebeca, mi mejor amiga, quien desde que se enteró de que era gay insistía en idealizarme con Alfonso, de lo cual Alfonso se percató, en varias ocasiones él había aprovechado los momentos en los que me encontraba solo con mi amiga para pedirme que nos escabulléramos o se comportaba como todo un conquistador, razón por la que Rebeca insistía en que debía darme una oportunidad con Alfonso, pero ella desconocía sus arranques de celos, sabía que si mi amiga se llegaba a enterar del comportamiento de Alfonso tendría que explicarle las razones del mismo, lo cual me llevaría a contarle sobre Sergio, por lo que termine excusándome con mi amiga diciéndole que para mí era imposible ver a Alfonso como un interés romántico por considerarlo parte de mí familia, pero ella también sabía que él y yo ya habíamos estado juntos, lo cual contradecía mi argumento, además de que en ese entonces estaba detrás de alguien a quien a Rebeca no le agradaba
Aún en contra de los consejos de Rebeca, decidí mantener mi distancia con Alfonso, Sergio también trato de acercarse a mí, pero le pedí que me dejara tranquilo, que no esperara que yo quisiera algo con él después de saber sus múltiples aventuras, que si lo que buscaba era con quien coger, tenia de donde escoger, aunque mi intención era hacer sentir mal a Sergio, quien termino herido en esa conversación fui nuevamente yo, Sergio me dijo con una actitud muy prepotente que si yo quería que dejara de buscarme, así lo haría, que yo tenía toda la razón en decir que él muy fácil podría buscar a alguien más, además de decirme que estaba seguro de que sería yo quien terminaría buscándolo nuevamente, pues siempre era así
Como si nada, los días pasaron y al iniciar las vacaciones de diciembre mi primo Israel me dijo que estaría esperándome en la hacienda, prácticamente me suplico que hiciera lo posible por visitar a su familia, que había algo que quería enseñarme, pero tras comentarle los planes de mis padres de pasar las fiestas de fin de año con mis abuelos paternos, termino aceptando que nos veríamos hasta el cumpleaños de mi tío Omar, pues ya era tradición que cada año mi tío Héctor viajara a la ciudad para esa fecha
Aunque si pasamos las fiestas de Navidad en la casa de campo de mis abuelos, sorpresivamente ellos decidieron pasar las fiestas de año nuevo en nuestra casa, por lo cual regresamos al país antes de lo pensado, mi tío Omar y mis primas habían decidido pasar las fiestas en la hacienda, pero por motivos de trabajo mi tío Omar se vio forzado a regresar a la ciudad por unos días, por lo que el día que pensaba regresar a la hacienda me invito a acompañarlo, mis papás al saber que sería únicamente una noche la que terminaría pasando en la hacienda, aceptaron la propuesta de mi tío de llevarme con él, además de que la relación de mis papás no estaba muy bien, pero yo realmente no quería poner ni un solo pie en la hacienda de mis tíos, solo pensar en tener que ver a Florencia, la esposa de mi tío Héctor, me generaba un sentimiento de desprecio que era incapaz de contener, por lo que termine quedándome en casa con mis papás y mis abuelos, la cena de fin de año no termino siendo lo que esperaba, mis abuelos se cansaron temprano y se fueron a dormir, mis papás seguían peleados desde la cena de Navidad y justo esa noche mi mamá volvió a beber, por lo que termine por irme a la cama antes de media noche
Al día siguiente desperté queriendo iniciar el año de la mejor manera, pero horas después un muy molesto Israel me llamo, no esperaba que él terminara enterándose que había tenido la oportunidad de pasar la noche anterior con él y que yo me había negado a ello, a eso se sumaron los reclamos de que siempre era él quien me llamaba los domingos por las noche o los lunes cuando según me dijo, esperaba que fuera yo quien lo llamara al no saber nada de él la noche anterior, quizás había sido la tensión del día anterior, pero termine diciéndole que si lo que quería es que ya no habláramos, no tenía ningún problema en que lo dejáramos de hacer, al llegar el cumpleaños de mi tío Omar, efectivamente mi tío Héctor llego de visita como todos los años, pero esta vez acompañado de Franco, aunque me sentía mal por lo ocurrido con Israel no hice nada por arreglar nuestra situación, incluso decidí no llamarlo el día de nuestro supuesto aniversario y en cambio le pedí a Franco que le entregara a su hermano el anillo que Israel me había regalado para mi cumpleaños con la excusa de que Israel lo había olvidado en su última visita, estaba decidido a enterrar lo vivido con Israel y esa era mi manera de hacérselo saber, según yo sería algo muy fácil olvidarme de él, casi ni lo veía, él vivía muy lejos y obviamente yo no pensaba visitarlo, me había jurado no volver a aquel sitio donde sabía que no sería bien recibido, Israel entendió muy bien el mensaje, pues perdimos toda comunicación entre nosotros, estuvo ausente en los momentos en los que necesite un hombro donde llorar, ni en mi fiesta de cumpleaños número dieciocho pudimos vernos y eso que después de varios años, fue él quien me llamo para confirmar su asistencia
Alfonso también aprovecho la visita de mis abuelos para pasar tiempo conmigo, él le conto a mi abuelo de como supuestamente yo abandone el equipo de natación del colegio después de molestarme por haber perdido contra él en una pequeña competencia organizada por el entrenados, por lo cual mi abuelo nos pidió competir en casa de mi tío Omar para saber qué tan mal perdedor y buen nadador era, obviamente termine perdiendo, por lo que mi abuelo se comprometió a ayudarme a mejorar y le pidió a Alfonso darme la revancha días antes de que él se marchara, pues en su juventud mi abuelo había sido preparador físico, durante esos días mi abuelo sumo las prácticas de natación a nuestras tardes juntos, además de que él ya se encargaba de que cada madrugada me ejercitara, durante los constantes entrenamientos con mi abuelo me fue muy difícil cumplir con sus exigencias, tiempo atrás por dármelas de chulo termine lastimándome el brazo en el gimnasio, además de que durante mi estadía en casa de mi abuelo, él me puso a hacer tareas que según él, todo hombre debe hacer, por lo que no me atreví a quejarme del malestar que estaba sintiendo en mi hombro izquierdo, el cual se intensifico durante esos días, pero quizás era mi ego o el no querer decepcionar a mi abuelo lo que me hizo ignorar nuevamente aquel dolor y esforzarme en enorgullecer a mi abuelo
Estando en la última semana de la visita de mis abuelos, mi abuelo termino por deprimirse al enterarse de la muerte de alguien que al parecer él admiraba mucho, lo cual aproveche como excusa para prepararle una sorpresa y así abandonar las prácticas de natación, lo cual molesto demasiado a Alfonso y aún más al enterarse que dejaba a un lado las practicas con él y mi abuelo por mis lecciones de guitarra, Alfonso insistía en que mi interés de mis lecciones de guitarra con David eran un pretexto para poder pasar tiempo con su hermano Javier, pues Alfonso me había pillado hace tiempo en un momento comprometedor con Javi y yo simplemente deje que pensara que sus sospechas eran ciertas, aunque quien realmente me interesaba era David
Después de que mis abuelos se marcharon, un sábado, cuando me dirigía a la celebración del cumpleaños de la madre de David y Javier, mi mamá me pidió que antes pasara dejándole una gargantilla a mi tía Carla, pues ella se la había pedido prestada para un evento al que acompañaría a Luis, su esposo, para mi mala suerte ese día Alfonso se encontraba solo en casa, pero al saber el motivo de mi visita me dijo que mi tía se encontraba en su habitación, que subiera a entregarle lo que mi mamá le había enviado, tras tocar varias veces en su habitación sin recibir respuesta de mi tía, Alfonso termino por confesarme que nos encontrábamos solos, como muchas otras veces intento sujetarme y besarme, pero en esa ocasión si me opuse con todas las fuerzas que tenía, él insistía en que quería intentar algo serio conmigo, pero tras contestarle que ni loco tendría algo con él nuevamente intento someterme, tras algo de forcejeo logre llegar al borde de las escaleras, de las cuales por poco llegue a caerme, pero Alfonso logro sujetarme y tras darse cuenta que me había lastimado decidió dejarme ir
Ese mismo día, mientras regresaba a mi casa, termine teniendo un accidente en una motocicleta con David, que me llevo a tener el brazo izquierdo enyesado, el doctor les dijo a mis padres que lo que me había ocurrido era una luxación en el hombro y que muy posiblemente ya había tenido algún tipo de lesiones anteriores al accidente, lo cual confirme, pues llevaba semanas con dolor y por restarle importancia nunca se lo dije a mis papás, pero Alfonso se sentía culpable al pensar que él había tenido la culpa de que aquel accidente hubiera tenido consecuencias más fuertes para mí, pues al sujetarme mal del brazo cuando estuve por caer de las escaleras de su casa y jalarme con fuerza, él noto que el brazo me había dolido y me pidió varias veces perdón por lo ocurrido y se culpaba por mi situación, lo cual nunca le aclare, pues vi en su confusión la oportunidad de alejarlo de mí, pues ya estaba cansado de su insistencia obsesiva
Alfonso no era el único que se sentía culpable por lo ocurrido, por lo que casi todos los días tenia visita en mi habitación, mi mamá había empezado a ir nuevamente a un grupo de apoyo por sus problemas con el alcohol, por lo que mi tía Carla se encargaba de cuidar de mi todos los lunes en compañía de mis primos y cada lunes tenía que escuchar las disculpas de Alfonso y de lo felices que seriamos si yo lo aceptara, los jueves y sábados los pasaba con mi compañero del accidente y sin poder hacer nada para evitarlo, los viernes recibía la visita de Sergio, en mi estado fue imposible evitar verlo, pues prácticamente mis papás me mantenían postrado a mi cama
Aunque había sido muy claro con todos en que no quería recibir visitas de nadie los días domingos al ser el único día en el que tenía a mi papá a mi lado a todas horas, llego San Valentín y Alfonso apareció por la mañana en mi casa con la excusa de que creyó que me quedaría solo en casa y que había llegado para acompañarme, por lo que al hacerle ver que estaba equivocado y que mis padres se quedarían en casa conmigo, le pedí que se marchara, lo cual hizo después de entregarme una caja de chocolates, los cuales tire en el cesto para basura que tenía en mi habitación frente a él antes de que se marchara, mi amiga Rebeca también llego antes de mediodía, pero termino marchándose muy molesta después de la llegada de David, a pesar del mal momento con Alfonso, había pasado un buen San Valentín, mucho mejor de lo que esperaba, pero el día aún no terminaba y quede sorprendido al ver a mi mamá arreglándose para salir, aunque ya habían transcurrido tres semanas desde que tenía puesto el yeso, mi papá se apresuró a subir las escaleras para ayudarme a bajar, por lo que no pude evitar reír y decirles que debían dejar de tratarme como a un niño y que me alegraba no arruinarles la noche de San Valentín, a lo que mi mamá me respondió que había aceptado salir con mi papá únicamente por haber conseguido una buena niñera
Tras el comentario de mi mamá empecé a preguntar quién sería esa supuesta niñera, a lo que mi papá me corrigió diciéndome que se trataba de un niñero, seguidamente me conto que Sergio tenía dos reservaciones para parejas en un buen restaurant y que una de ellas se las había obsequiado a sus padres y al encontrarse sin pareja, decidió regalarle la segunda reservación a ellos, además de ofrecerse para acompañarme mientras ellos se encontraban fuera de casa, por más que trate de persuadir a mis papás de dejarme solo en casa, ellos no accedieron, incluso me llegaron a decir que si tanto era mi molestia por quedarme con Sergio, entonces ellos terminarían por cancelar sus planes, por lo que termine disculpándome por mi actitud, justificándome con sentirme algo incómodo al tener que ser cuidado por alguien más, lo cual me hacía sentir como un niño pequeño, no quería que mis padres se llegaran a preguntar del por qué no quería pasar aquella noche acompañado por Sergio, después de casi media hora, Sergio llego a mi casa y mis papás se marcharon despidiéndose de mi con un beso, mientras Sergio se despedía de mis padres desde la puerta aproveche el momento para subir y encerrarme en mi habitación, a los pocos segundo ya tenía a Sergio tocando a mi puerta
S: Andy, mi amor, abre por favor
A: Sergio estoy cansado, déjame dormir
S: aún es muy temprano, necesitamos hablar, mi amor por pavor
A: ya se ha dicho todo entre nosotros, déjame tranquilo por favor
S: me quedare aquí tirado frente a tu puerta y si tus padres vienen y me encuentran aquí espero tengas una buena explicación, me has escuchado… Andy sigo aquí… Mi amor solo quiero hablar… Ábreme por favor… Perdóname… Te amo…
Mientras Sergio seguía hablándome desde la puerta, yo estaba entre mis sabanas llorando por querer creer en lo que estaba escuchando, pero estaba decidido a mantenerme alejado de él, hasta que algo que dijo me hizo enojar tanto que termine abriendo la puerta para hablarle viéndolo a los ojos
S: sabes que a pesar de todo te amo, a mi manera, pero te amo, siempre lo he hecho… Andy abre la…
A: ambos sabemos que eso es mentira
S: claro que no
A: yo solo he sido la opción más fácil de tener sexo, admítelo, que me amas, por favor, tu no amas a nadie, lo único que buscas es con quien coger, sin importarte los sentimientos de los demás o no recuerdas que tú mismo me dijiste que nuestra primera vez ocurrió solo porque te habían dejado con ganas
Estaba tan enojado que ni me percate de lo cerca que estaba de Sergio y como el tonto que era, Sergio termino callándome con un beso, pero como pude lo aleje con un solo brazo
A: por favor vete
S: una última oportunidad, por favor, sé que no he sido un santo y que no la merezco, pero por favor
A: tengo sueño, por favor cierra la puerta al salir
Después de eso me dirigí a mi cama para acostarme, Sergio seguía parado en la entrada de mi habitación y sin importarle lo que le había pedido, cerró la puerta quedándose dentro de la habitación, se quitó los zapatos, camisa y pantalón y tras apagar la luz se metió a mi cama
S: les prometí a tus padres que cuidaría de ti esta noche
Intente levantarme de la cama, pero si estando bien físicamente Sergio era más fuerte que yo, con el yeso en el brazo no era más que una marioneta para él
A: ¿piensas forzarme a estar contigo?, ¿acaso no ves cómo estoy?
S: claro que no y es así como pienso demostrarte que realmente te amo, esperare el tiempo que tenga que esperar para que confíes en mi nuevamente y decidas hacer el amor nuevamente conmigo, pero no me pidas que me mantenga lejos de ti, porque no pienso alejarme
Tomándome de mi brazo derecho me hizo acostarme de nuevo y me acerco a su pecho para terminar durmiendo abrazado por él, sabiendo que sería tonto resistirme, pues Sergio terminaría venciéndome, además de que aunque me doliera admitirlo, me sentía bien en sus brazos y termine quedándome dormido apoyando la cabeza en su pecho, horas después desperté al escuchar voces en la puerta
C: ¿qué piensas hacer?
V: solo quiero asegurarme de que Andy este bien
C: Sergio ya nos escribió para avisarnos que Andy se ha quedado dormido
V: pero también nos dijo que se había sentido mal
C: y justo por eso Sergio se ha quedado a dormir con él, ven, mejor vamos a la habitación, sabes que Sergio está cuidando de Andy
Sergio se había quedado dormido y yo reía por cómo se las había arreglado para pasar la noche conmigo y aún más al saber que mis papás me creían seguro al lado de Sergio, después de unos minutos me levante para ir al baño y al regresar a la cama note que el teléfono de Sergio se encontraba sobre la mesa de noche, por curiosidad tome el teléfono pero inmediatamente lo regrese a su lugar, al hacerlo termine tirando su billetera y al recogerla encontré un preservativo en ella, lo cual me hizo enfadar mucho, Sergio y yo no habíamos usado protección las veces en las que habíamos estado juntos, por lo que era obvio que ese preservativo era para estar con alguien más, pero además de eso tome el preservativo y con los dientes rasgue un poco la esquina del empaque y deje las cosas de Sergio como estaban, minutos más tardes ya me encontraba riéndome de mi mismo, sabía que si llegaba a revisar nuevamente la billetera de Sergio días después era más que seguro que no me encontraría con el mismo preservativo
A la mañana siguiente desperté e inmediatamente me dirigí a la ducha, ya se me había hecho tarde para ir al colegio, Sergio me pidió compartir la ducha, según él así podría ayudarme, pero le dije que ya tenía practica en ducharme solo, pero antes de cerrar la puerta del baño terminamos dándonos un beso, mientras me duchaba pensaba en que haría con Sergio, algo en mi quería darse una nueva oportunidad con él, pero sabía que terminaría siendo solo un entretenimiento para él, tras salir de la ducha Sergio me pregunto si ya me había decidido a darle otra oportunidad, lo cual tras hablarlo acordamos iniciar una extraña e inusual relación, en la que él me demostraría que yo realmente le importaba y que él tendría que esperar a estar conmigo nuevamente hasta que yo estuviera convencido de sus sentimientos hacia mí, razón por la cual busque alejarme de David, con quien después del accidente que sufrimos juntos tenía más complicidad, además que en más de una ocasión habíamos cruzado la línea entre ser amigos y ser algo más que amigos, yo hasta ya me había duchado estando totalmente desnudo junto a él y David también había aprovechado a manosearme una noche en la que me quede en su casa, mientras yo fingía estar dormido, pero con lo ocurrido con Sergio todo eso ya no importaba y me sentí forzado a abandonar mis planes de intentar algo con David
Las semanas siguieron pasando y Sergio llegaba todos los viernes a mi casa tras salir de la universidad, incluso antes de que me quitaran el yeso del brazo me dijo que empezaría a llegar los sábados también, pero le pedí que no lo hiciera, que ya era demasiado extraño que cada viernes se lo pasara metido en mi casa, pero realmente no quería que Sergio se entrometiera en mis lecciones de guitarra con David, a quien veía como un gran amigo o al menos eso quería creer, marzo inicio y después de seis semanas desde que sufrí mi lesión, el doctor que estaba tratando mi caso decidió retirarme el yeso, pero me coloco una férula de hombro, la cual tenía que usar por dos semanas, justo ese día Sergio me dijo que le encantaría quedarse el resto de la tarde conmigo, pero que sus amigos lo habían invitado a una fiesta, la verdad no estaba seguro de si Sergio era sincero conmigo o no, pero el tomo mi actitud como si me hubiese molestado con él cuando realmente solo me sentí decepcionado, pues yo todo emocionado con la noticia de ya no tener puesto aquel yeso, quería disfrutar de ese momento junto a él, razón por la que fue la segunda persona en verme así, ni a mi tío Omar permití que le avisaran por pasar tiempo con él y él me salía con que solo había pasado a saludar, por lo que termino diciéndome que no saldría y se quedaría conmigo, hasta que le dije en más de una ocasión que no me molestaba que saliera con sus amigos y termino marchándose, siendo sincero me hubiera gustado que Sergio se hubiese quedado a mi lado, no porque se sintiera forzado a hacerlo para evitar que me molestara con él, sino que él así lo hubiese querido, después de que se marchó , yo aún estaba muy contento por haberme desecho de aquel incomodo yeso, me sentía como niño con juguete nuevo con la férula y sin pensarlo le escribí a David para celebrar con él, después de todo él había sido mi compañero de accidente y era mi amigo
Cuando finalmente tuve el hombro recuperado y libre, el doctor me dijo que no abusara, pero que si tratara de ejercitarlo, pero después de ocho semanas con el brazo inmovilizado, si tenía cierto temor de levantar cosas, ejercer fuerzas con ese brazo, incluso decidí no regresar de inmediato al gimnasio, lo cual el doctor me había dicho que si podía hacer, siempre y cuando fuera cuidadoso, Sergio se enteró de todo y me insistía en que le pidiera permiso a mis papás para regresar al gimnasio y de esa forma poder recuperar nuestra antigua rutina de los viernes, pero yo seguía en mi postura de no tener sexo con él, sabía que con el tiempo Sergio terminaría por aburrirse y aunque me doliera, finalmente se terminaría aburriendo de mí, después de todo esa era mi intención desde que iniciamos nuestra relación semanas atrás, durante esa misma semana le agradecí a mi tía Carla por cuidar de mí, pero que ya no era necesario sus visitas de todos los lunes por las tardes, con Alfonso no fui tan cordial, le pedí que me dejara tranquilo, incluso lo llame acosador y aunque tras marcharse me sentí culpable por como lo trate, llegue a pensar que finalmente me había desecho de él
Sergio no estaba acostumbrado a dar explicaciones de sus visitas semanales en mi casa, pero en una ocasión mi papá llego a casa dos días antes, por lo que al ver llegar a Sergio y que mi mamá comentara que ese día se le había hecho tarde, llegaron a tener una conversación sobre él porque de sus constantes visitas, aunque mi papá no fue tan directo, pero Sergio se las arregló para evadir aquel interrogatorio, incluso termino por pedirle a mi mamá que no cocinara, que esa noche la cena correría por su cuenta, al ver a Sergio en aprietos no pude evitar reír por breves momentos, lo cual él noto, todo parecía haberse normalizado, pero horas después aparecieron en mi casa David y Oscar, pues este último quería hablar con mi papá sobre el pago anticipado de las mensualidades del gimnasio que mi papá había realizado y que obviamente yo no estaba aprovechando, David comento que se encontraba allí únicamente para indicarle a Oscar en donde vivíamos, mis papás se llevaban muy bien con David, lo cual fue evidente cuando se saludaron, pero cuando me saludo a mí, en vez de hacerlo con un apretón de manos como lo había hecho con mi papá, lo hizo con un abrazo, algo que quizás es muy común entre amigos, pero que me hizo sentir incomodo, pues durante ese abrazo era objetivo de la mirada fija de Sergio
La conversación entre mi papá y Oscar se centró en el pago anticipado que Oscar pensaba reembolsar por el tiempo que me había ausentado en el gimnasio, pero mi papá no estaba de acuerdo con ello, por lo que se empezó a sentir cierta fricción entre ellos, por lo que David termino pidiéndome dejar solos a los adultos, por lo que salimos de mi casa, Sergio algo molesto, termino acompañándonos y estando fuera coloco su brazo sobre mis hombros en forma de abrazo, volviendo aquel momento más incómodo para mí
S: ¿David verdad?
D: si
S: creo que ya es muy tarde para que estés fuera de tu casa, lo mejor será que te marches, ya cumpliste con traer a… ¿Cómo es que se llama?
A: Oscar
El tono con el que hablaba Sergio hacía sentir que prácticamente estaba echando a mi amigo, pero él solo me volteo a ver esperando a que quizás yo le pidiera quedarse
S: ¿qué esperas, acaso tienes que esperar a Oscar?
D: realmente no, y tú ¿traes tu auto? si quieres puedo pasar dejándote a tu casa
S: gracias, pero tal vez termine pasando la noche aquí, es normal que lo haga
A: gracias por todo David, vete con cuidado
Después de eso David termino por marcharse, dejándome solo con Sergio fuera de mi casa, pues mis papás aún seguían conversando con Oscar
A: fuiste muy grosero con David
S: ¿qué es lo que tienes con ese imbécil?
A: me está ayudando con la guitarra, lo conozco hace años, incluso antes de vivir cerca de tu casa su familia vivía a unas calles de aquí
S: no me trates como a un retrasado, ustedes dos tienen algo, dime, ¿es por él que no quieres estar conmigo?
A: pero según yo si estamos juntos
S: sabes a lo que me refiero
A: piensa lo que quieras
En ese entonces yo si era consciente de que había cierta atracción entre David y yo, pero aunque me había rehusado a acostarme con Sergio, tampoco quería intentar algo con David, sabía que hacerlo sería como engañarlo por segunda ocasión, pues la forma en que me había acercado a David no había sido la más honesta, además de que consideraba que él no se merecía ser la segunda opción de nadie, él era tan tierno, amable, tan atractivo, casi podría decir, la pareja perfecta, por lo cual no se merecía perder su tiempo conmigo, asimismo sabía que si Sergio realmente estuviese únicamente conmigo y llegara a descubrir que yo tenía relaciones con alguien más, yo terminaría siendo el malo en la relación y el culpable de que todo terminara entre nosotros y terminar con Sergio sintiéndome de esa forma ciertamente no estaba en mis planes, después de lo ocurrido esa noche y de cierta manera evitar que mi papá terminara odiando a Oscar, decidí regresas al gimnasio
A la semana siguiente Sergio llego justo cuando estaba por terminar de preparar mis cosas para salir rumbo al gimnasio, por lo que llego a preguntarme si ese día terminaríamos dirigiéndonos al motel que solíamos frecuentar, pero le dije que era algo imposible, que Oscar estaba más atento de mí en el gimnasio y que ahora se mantenía en contacto con mis papás, por lo que no podíamos arriesgarnos, muy molesto por lo que le dije, Sergio se despidió de mi mamá y termino ofreciéndose para llevarme al gimnasio, ese día era mi primer viernes de gimnasio después de mi accidente y ya tenía planes de ir por un café con David, quien se había ofrecido a llevarme a mi casa, pero al salir al estacionamiento Sergio se encontraba esperándome, estaba estacionado en el mismo sitio donde lo había dejado hace unas horas, no llego a donde yo me encontraba, simplemente salió del auto y tocando el claxon me llamo hacia él, teniendo que dejar a un lado los planes con David
A: no esperaba que regresaras por mí
S: nunca me fui, estuve esperándote por si cambiabas de opinión y decidías fugarte conmigo
A: perdón por hacerte perder el tiempo
S: es lo menos que puedo hacer como tu novio, además, de no haberme quedado no sé qué habrías acabado haciendo en el auto de tu amiguito
Después de eso Sergio permaneció en total silencio, yo tampoco quise hablarle, por algún motivo me sentía mal por las dudas de Sergio, más aun después de lo que él me dijo, finalmente me veía como su pareja, lo cual me hizo pensar en que quizás si había futuro para nosotros dos, al día siguiente Sergio y sus papás nos acompañaron durante el almuerzo, fue una gran sorpresa cuando los vi llegar, pero mis papás sabían de esa visita desde la mañana y habían olvidado comentármelo, por lo que al terminar de comer me despedí de Irma, Saúl y Sergio y subí a mi habitación por mi guitarra, pues debía ir a mis lecciones, pero justo cuando estaba por salir de mi habitación apareció Sergio, se veía molesto y quitándome mi guitarra, la lanzo hacia mi cama
A: ¿qué te pasa?
S: desde hoy se acabaron las lecciones de guitarra, ¿me entendiste?
A: tú no eres mi padre para darme órdenes
S: pero si tu novio
A: es la segunda vez que dices que eres mi novio
S: y la última si no te dejas de jueguitos estúpidos
A: ¿de qué hablas?
S: de que te daré una semana para que pienses si realmente quieres algo conmigo o no, ya me canse de jugar a los novios que se toman de las manos
A: creí que esperarías todo el tiempo necesario hasta que yo confiara nuevamente en ti
S: ¿y crees que yo puedo confiar en ti? si quieres que sigamos juntos tendrás que dejar de ver al tal David y a cualquier otro que no me agrade, ya sabes, piensa bien las cosas que no soy tu juguete y de una vez te aviso que el viernes vendré por ti, espero tomes muy bien tu decisión
Después de que Sergio se marchó de mi habitación, termine llamando a David para cancelar nuestra lección del día, pase el resto del día con mis padres y las visitas, quienes terminaron marchándose hasta después de la cena, muchas cosas daban vueltas en mi cabeza, finalmente había llegado el momento en el que todo acabaría con Sergio, pero era algo que no quería del todo, aunque odiaba admitirlo, yo lo amaba, no había otra explicación para lo que sentía por él, hasta llegue a considerar ceder y acostarme con él, pero sabía que al hacerlo sería como aceptar ser siempre la segunda opción o quizás ni siquiera la segunda, pero de repente el recuerdo de Sergio llamándose mi novio empezó a invadir mi mente, aunque en el momento me sentí muy feliz al escucharlo, estando solo en mi habitación empecé a reírme de lo ingenuo que había sido por haberme hecho ilusiones al escuchar aquellas palabras, si ahora resultaba que yo ocupaba el lugar de novio era obvio que alguien más ocupaba el lugar de amante, pensar en ello fue lo que me dio las fuerzas suficientes para decidir rechazarlo
Llego el viernes y nuevamente Sergio llego antes de que me marchara al gimnasio, frente a mi mamá nuevamente se ofreció a llevarme y al salir de casa, antes de subir a su auto me pregunto por mi decisión, no quise evadir su pregunta y directamente le dije que no pensaba faltar al gimnasio, que él podía tomar cualquier decisión, que por mi estaría bien, tras escucharme no dijo nada más, simplemente termino por subirse al auto y se marchó dejándome allí varado, por lo que empecé a caminar hasta llegar a mi destino, al día siguiente Sergio apareció en mi casa, él sabía muy bien que me encontraba solo, mis papás se encontraban de paseo desde muy temprano con los suyos, pues se habían puesto de acuerdo la semana anterior, pero a pesar que haber transcurrido algunas horas de la última vez que nos habíamos visto, muchas cosas ya habían cambiado, yo estaba dispuesto a hacer a un lado a Sergio para intentar algo con David
A: ¿qué haces aquí?
S: quise acompañarte para que no estés solo
A: pero no me molesta estar solo, además todo entre nosotros ya se acabó, me lo dejaste claro ayer cuando me dejaste
S: estaba muy molesto mi amor, pero puedes aprovechar que estamos solos para contentarme
A: Sergio ya estoy harto de todo, si tú no decides dejarme, entonces seré yo quien lo haga, ya no me interesa nada contigo
S: no mientas, basta con ver cómo te pones cuando me acerco a ti, cuando acaricio tu piel, cuando te beso
Sergio no mentía, me era imposible no reaccionar a sus caricias y besos, clara prueba era ese momento en el que correspondí al beso que estaba dándome, esa mañana yo tenía puesta una pantaloneta, la cual le facilitaba a Sergio el acceso a acariciarme el trasero, por mi parte no pude evitar acariciar su bulto sobre el pantalón, al sentir la firmeza de su pene aprisionado dentro me hizo ceder ante Sergio, quien termino por quitarme la playera que llevaba puesta, mientras él también se quitaba la camisa, fue cuando pude acariciar su pecho desnudo el momento en el que decidí detenerme, sabía que si no lo hacía en ese momento, no podría detenerme después, además ese día había quedado en verme con David, quien no demoraría en llegar, por lo que con toda mi fuerza de voluntad que aún me quedaba termine por empujar a Sergio
S: ¿qué te pasa?
A: ya te ha dicho que esto se acabó, vete por favor
Sergio se veía eufórico y molesto, incluso al acercarse a mi llegue a sentir miedo, pero él solo lo hizo para tomar mi mano y llevarla hasta su pene, el cual aun dentro de su pantalón se llegaba a sentir muy duro
S: ves cómo me tienes y sé que tú estás igual, así que dejémonos de estupideces, ambos queremos esto
A: ya te he dicho que no quiero estar contigo
A pesar de intentar separarme de Sergio, no pude hacerlo, él me tenía sujetado muy fuerte, incluso habíamos terminado sobre uno de los sillones de la sala, estaba totalmente dominado por Sergio, quien había empezado a deslizar hacia abajo mi pantaloneta con todo bóxer, fue en ese momento en el que me di cuenta que de nada me serviría resistirme, parecía que mientras más resistencia ponía más se excitaba Sergio, por lo que decidí dejar de luchar por alejarlo
S: ya ves que también quieres
Aunque ya no intentaba alejar a Sergio tampoco correspondía a sus caricias, simplemente deje que él hiciera lo que quisiera, incluso llegue a parecer un muñequito de trapo, un muñequito que a pesar de no poder alejar a Sergio con sus fuerzas, podía hacerlo con sus palabras, era lo único que podía intentar, quizás haciéndolo sentir que estaba abusando de mí se detendría
A: no me importa si quieres tomarme a la fuerza, yo solo sé que te quiero fuera de mi vida
Sin tener que decir nada más Sergio termino por detenerse, tomo su camisa que se encontraba por el piso, se empezó a vestir y antes de marcharse, desde la puerta hizo un último intento para que yo lo detuviera en el último segundo
S: ¿estás seguro de quererme fuera de tu vida?
Sergio espero unos segundos mi respuesta, pero ante mi silencio termino por irse, aunque Sergio no estaba tan equivocado respecto a David al sentir celos de él, lamentablemente termine por creer que había arruinado toda posibilidad con David ese mismo día
A pesar de lo ocurrido el fin de semana, Sergio decidió aparecerse fuera del gimnasio el viernes, yo me sentía algo deprimido ese día, David se encontraba molesto conmigo y lo que menos quería era caminar por donde varias veces lo hice acompañado de él, por lo que acepte que Sergio me llevara a casa, Sergio me dijo que sería la última vez que me buscaría, que no había querido hacerlo, pero que no pudo evitar querer verme ese día, tras mi respuestas cortantes decidió preguntarme por David, pues no lo había visto salir del gimnasio, ante mi silencio Sergio termino por decirme: “creo que nadie más que yo pueda aceptarte tal y como eres, nadie te conoce como yo y es por eso que siempre me vas a pertenecer, solamente yo puedo tomarte enserio y eso es porque somos tan parecidos, imagino que tu amigo David solo te cogió para pasar el rato y es por eso que hoy no te vi con él”, las palabras de Sergio terminaron por hacerme llorar y justo antes de bajar del auto Sergio se acercó a mí, tanto que llegue a creer que llegaría a besarme, pero no lo hizo y teniendo su frente pegada a la mía me advirtió “si has terminado lo nuestro por alguien más, te juro que te vas a arrepentir”, mentiría si dijera que esas últimas palabras de Sergio me hicieron sentir algo de temor, pero realmente no tenia de que preocuparme, David no quería saber nada de mí, además de percatarme que Sergio finalmente había aceptado que lo nuestro había terminado, aunque estaba muy arrepentido por cómo había hechos las cosas, en mi intento de matar mi amor por Sergio había terminado confundido entre lo que sentía por alguien en quien ya no podía confiar y alguien a quien había herido y no creía merecer
Durante el resto de la noche no podía dejar de recordar el momento con Sergio, al parecer él tenía razón, siempre le pertenecería, que más clara prueba que a pesar de todo deseaba profundamente que Sergio me hubiese besado, ese momento en el que nuestras frentes se encontraron me había dejado hambriento de sus labios y me odiaba por ello, a pesar de mis esfuerzos no podía dejar de sentir cosas por Sergio
Durante el fin de semana seguí cometiendo más errores, no tenía suficiente con el drama de haber estado con dos personas que eran tío y sobrino, que termine completando un par de hermanos en mi historial acostándome con Javier, ese fin de semana también se celebró el día de las madres, por lo que el domingo por la mañana mis papás y yo acompañamos a mi tío Omar y a mis primas al cementerio a visitar la tumba de mi tía Olivia, durante la tarde toda la familia se reunió en casa de mi tío, asistieron mi tía Carla, Luis, Alfonso, Emilio, Irma, Saúl, mis padres y yo, Sergio me había enviado algunos mensaje diciéndome que no me preocupara por tener que verlo esa tarde, que sabía muy bien que ese día era especial para mí y no querría arruinármelo con su presencia, Saúl se disculpó con todos por la ausencia de su hijo, excusándolo diciendo que tenía un compromiso de la universidad que no pudo cancelar, ese día termine tan de mal humor que me daba exactamente igual cuál era la verdadera razón de la ausencia de Sergio, había tenido una conversación algo fuerte con mi prima y lo único que quería era que llegara la hora de marcharme a mi casa
Durante el almuerzo mi papá hizo público su obsequio para mi mamá por el día de las madres, el cual consistía en pasar el fin de semana siguiente en un hotel que contaba con espacios recreativos, spa entre ellos, pero no era la primera vez que ellos terminaban dejándome un fin de semana mientras ellos dos se divertían, la sorpresa fue cuando mi papá invito a su viaje a mi tía Carla y a Luis, según mi papá las reservaciones ya estaban pagadas para ellos cuatro, saldrían de viaje el sábado por la mañana y regresarían el lunes por la tarde, tras solo escuchar la noticia, Irma inmediatamente intervino para decir que Emilio y Alfonso podían pasar el fin de semana con ella y Saúl, mientras mi tío dijo lo mismo respecto a mí e incluso les dijo a mis primos que si ellos lo preferían podían pasar el fin de semana con nosotros
Luis no se veía tan convencido por el viaje, pero al saber que ya todo estaba pagado termino por aceptar, Emilio y Alfonso tampoco estaban muy contentos con el viaje de sus padres, pero antes de concluir con la reunión familiar terminaron por anunciar que pasarían el fin de semana en su casa, que ya eran lo suficientemente grandes para quedarse solos, lo cual Luis apoyo y antes de que todos nos marcháramos a nuestras respetivas casas, Emilio termino por invitarme a pasar el fin de semana con él y Alfonso
Los días pasaron y por suerte Sergio parecía haber aceptado alejarse nuevamente de mí, no solo había decidido ponerle fin a mi relación con Sergio, sino que también había puesto fin a cualquier oportunidad con David, por lo que menos quería era pasar un fin de semana justo frente a la casa de David y Javier y mucho menos pasar tiempo con Alfonso, por lo que en varias ocasiones termine por decirle a Emilio que no aceptaba su invitación de pasar el fin de semana en su casa, pero el viernes después de clases, termine en casa de mi tía Carla, ella quería asegurarse de que Emilio terminara ese día todas las tareas del colegio, pues estaba segura que en su ausencia mi primo no tocaría ningún libro, además de que yo había decidido no volver al gimnasio los días viernes para tratar de evitar ver a David
Después de terminar todas las tareas, mi tía Carla me había pedido avisarle para que fuera ella quien me llevara a mi casa, pero antes de hacerlo Emilio insistió en que pasara el fin de semana en su casa, a lo que me negué, pero mi primo como muchas otras veces termino echándose sobre mi haciéndome cosquillas, eso era algo muy común entre nosotros, incluso como muchas veces termine en el suelo pidiéndole que me soltara, pero Emilio me aseguro que no se detendría hasta que aceptara pasar el fin de semana con en aquella casa, yo realmente ya no podía con tantas cosquillas que empecé a suplicar que me soltara, lo cual Alfonso, quien recién estaba llegando, malinterpreto lo que estaba pasando y termino empujando a Emilio con mucha fuerza haciéndolo caer al suelo, yo me sentía muy apenado por lo ocurrido, mis primos empezaron a discutir entre ellos y tras aclararse todo, Emilio nuevamente me pregunto si pasaría el fin de semana con ellos pero en esta ocasión diciéndome que hasta ya se había llevado un buen golpe tratando de convencerme, por lo que termine aceptando
Al día siguiente ya me encontraba con mis padres en casa de mi tía Carla antes de las 06:00 horas, Luis subió el equipaje en el auto de papá mientras mi tía me decía que me sintiera como en mi casa, lo que me llevo a pedirle permiso para pasar las noches en su habitación para no incomodar a mi primos, lo cual me autorizo sin ningún problema, mis primos seguían durmiendo y yo aproveche e momento para instalarme y volver a dormir un poco, unas horas después fui despertado por Alfonso, quien se encontraba tocando a la puerta preguntando si yo me encontraba dentro de la habitación de sus padres, pues previniendo que él llegara a buscarme había cerrado la puerta con seguro, por lo que solo le confirme mi presencia y le pedí que me dejara dormir
Durante el día todo parecía normal, la casa estaba limpia, por lo que esa mañana nadie tuvo que hacer limpieza, los tres desayunamos cereal en la cocina y para el almuerzo Irma fue a dejarnos suficiente comida para la tarde y la noche, prácticamente pase todo el día pegado a la televisión con Emilio y Alfonso salió tras almorzar avisándonos que volvería en una hora, pero termino regresando casi a la hora de la cena, al volver nos contó de unos amigos con los que se había encontrado y con quienes había pasado toda la tarde, pero ni a Emilio y mucho menos a mí nos interesó su explicación, durante la cena Alfonso pregunto si ya había decidió con quien dormiría esa noche, pero Emilio se me adelanto diciéndole que dormiría en la habitación de sus padres, tras levantar los platos fui yo quien termino lavándolos nuevamente, parecía que mis primos pensaban acumular una montaña de platos sucias hasta que mi tía volviera, pero en esa ocasión Alfonso decidió ayudarme a pesar de que le había dicho que no era necesario, momento en el que Alfonso nuevamente me conto de su tarde con sus amigos, lo cual se me hizo extraño, pero después de que Alfonso fuera muy explícito en que con quienes había estado eran simplemente amigos y que él seguía soltero comprendí el propósito de tantas explicaciones, por lo que tuve que dejarle claro que mi estadía en esa casa era simplemente por complacer a Emilio después de tremendo golpe que él le había propiciado por mi culpa y que me era indiferente si él estaba con alguien o no
Después de lavar platos, los tres terminaos en la sala viendo un partido de futbol, el cual no estaba tan interesante, pues el equipo al que le iban mis primos iban ganando con gran diferencia, durante los últimos minutos del partido Emilio se retiró a su habitación para poder hablar con Brenda, su novia, quien lo había llamado y se había molestado cuando mi primo le dijo que era inoportuna al llamar a esa hora, por lo que tuvo que disculparse inmediatamente con ella, justo en esos minutos anotaron un nuevo gol a favor del equipo que iba ganando con diferencia de tres goles y Alfonso se mostró tan eufórico, lo cual se me hizo tan fuera de lugar, pero él con su entusiasmo que llegue a creer fingido, termino abrazándome y besándome tomándome por sorpresa, Emilio al escuchar a Alfonso inmediatamente bajo a la sala para saber qué había ocurrido, por lo que al percatarme de la presencia de Emilio inmediatamente celebre junto a Alfonso para justificar como nos había encontrado
Al terminar el partido inmediatamente subí a donde dormiría muy molesto con Alfonso por lo ocurrido, quien al levantarme del sillón de la sala intento retenerme tomándome de la mano, pero Emilio estaba volviendo a la sala por lo que Alfonso tuvo que soltarme, al llegar a la habitación inmediatamente me cerciore de que la puerta tuviera puesto el seguro, aún seguía nervioso por pensar en que Emilio pudo haber visto el beso con Alfonso aunque Emilio no hizo ningún comentario que me hiciera pensar que si lo había hecho, por lo que decidí olvidarme del tema e ir directo a la cama en la que no tarde casi nada en quedarme dormido, no sabía cuánto tiempo había transcurrido, pero al sentir los besos de alguien en mi cuello y los brazos que estaban rodeándome no fue muy difícil despertar, además de que claramente despertarme era la intención de Alfonso
Alf: Andy, despierta, tenemos que aprovechar que estamos solos
Obviamente al escuchar a Alfonso me lleve un gran susto, además de preguntarme cómo había logrado entrar a la habitación cuando lo primero que había hecho al entrar había sido asegurarme de que eso no llegara a ocurrir
A: ¿cómo has entrado?
Alf: en la cocina hay una copia de las llaves de todas las puertas de la casa, ¿te he sorprendido verdad?
A: Alfonso para, acaso no entiendes que significa un no, por favor
Alf: es que no puedo, yo enserio te quiero, no me importa que tú no sientas lo mismo por mí, yo me conformo con tan solo me dejes dormir abrazado así a tu lado, te prometo no intentar nada más
A: pues lo que estoy sintiendo en mi trasero me dice que no te estarás quieto
Alf: ¿y te agrada lo que estas sintiendo?
A: ¡ves! , dices que no intentaras nada más y con lo que me sales
Alf: perdón, no puedo controlarme, si tan solo aceptaras darnos una oportunidad, piénsalo, bien podríamos encontrar oportunidades como esta para poder estar juntos, ambos somos hombres pero no habría gran problema en estar juntos, el lazo de sangre que nos une realmente ni existe, solo es el cariño que nuestras familias se tienen, además de que nuestra diferencia de edad no es tanto como la que tienes con…
A: y allí vas otra vez
Alf: perdóneme
A: y si todas tus sospechas resultaran ciertas, si yo realmente tuviera algo con Sergio, incluso con Javier, ¿aun así quisiera algo conmigo?
Alf: ¿por qué lo preguntas?
A: porque estoy seguro de que si tuvieras la certeza de que tus dudas son una realidad terminarías despreciándome
Alf: por supuesto que no, si tú realmente tuvieras algo con Sergio, incluso con Javier, yo simplemente me dedicaría a tratar de convencerte de elegirme a mí, esforzarme por ganarme tu afecto
A: ¿y crees que yo valdría ese esfuerzo?
Alf: es lo que he estado haciendo todo este tiempo, sé que tengo mis defectos, pero yo te quiero para mí
A: pero hay muchas cosas que tú desconoces, una de ellas es que Sergio y yo si…
Alf: no me importa
A: pero tienes que saber que…
Alf: si quieres contármelo significa que... ¿estás dispuesto a intentar algo conmigo?
A: eso no importa, si me dejas hablar te darás cuenta que yo… que yo soy el tipo de personas que no se pueden tomar en serio, de los que no valen la pena, de los que coges para pasar el rato
Externar como me sentía me hizo llorar nuevamente como tantas veces lo había hecho en las últimas semanas, era así como me sentía y aunque trataba de contener mi llanto, simplemente no pude y allí estaba yo llorando como niño pequeño acurrucado en el pecho de Alfonso, quien mientras trataba de limpiar mis lágrimas, me dio un tierno beso
Alf: Claro que vales la pena y mucha, te amo, eso es lo más importante, ya te lo he dicho, no me importa si hay alguien más en tu vida, si tú te decides a darme una oportunidad, podemos iniciar desde cero en este mismo momento, yo también he estado con otras personas, pero si tú me dices que sí, desde hoy solo importaremos tu y yo, pero debes prometerme que yo seré el único
No podía creer en todo lo que había escuchado, en especial por quien me lo había dicho, pero sabía que eso era lo que quería, alguien dispuesto a quererme sin importar mi pasado, aunque dudaba en que esa persona fuera Alfonso, aun así no perdería nada en intentarlo y con eso en mente le di un beso a Alfonso, un beso con el que intente demostrarle a él que realmente quería intentarlo y tras separar nuestros labios simplemente dije un: “si acepto”, para luego volver a besarnos, sinceramente la situación me tenía con la excitación al máximo y Alfonso parecía estar en las mismas, quien hasta ese momento se encontraba únicamente con su bóxer puesto, término quitándoselo, quedando totalmente desnudo, para después tratar de desvestirme
A: tranquilo, has dicho que solo quieres que durmamos abrazados
Alf: eso fue antes de…
A: enserio espero que cumplas con todo lo que has dicho
Alf: de acuerdo
Esa noche Alfonso cumplió con su promesa y después de acurrucarme en su brazo realmente no intento nada más conmigo, de haberlo hecho hubiese dudado en ponerle un alto nuevamente, yo no era de piedra y pues mi primito estaba muy bien, lo cual pude contemplar a la mañana siguiente al despertar, la luz del sol ya entraba por la ventana, la cama donde habíamos dormido era lo suficientemente grande incluso para que tres personas durmieran en ella y se me hizo gracioso que ambos estuviéramos casi al borde, apunto de que Alfonso cayera al piso, en mi cabeza vino el pensamiento de que nunca había despertado abrazado a alguien como lo había hecho esa mañana, lo que hizo que inmediatamente vinieran a mi mente recuerdos con Israel, lo que me hizo sentir culpable, al decirle la noche anterior a Alfonso que si quería intentar algo con él, realmente lo había hecho de corazón, lo que me hizo pensar para mí mismo, ¡Andy, empezamos mal!
Después de mi autollamada de atención por pensar en alguien más mientras estaba con Alfonso, quise despertarlo para que se corriera al centro de la cama, pero al retirarle la sabana que lo cubría lo vi totalmente desnudo, lo cual se me había olvidado, estaba muy seguro de que Alfonso seguía durmiendo, pero su amiguito de entre las piernas estaba ligeramente despierto, por lo que no pude resistirme a despertarlo de otra manera que no fuera con una mamada, me acomode y sin rodeos me fui directo a su pene, mientras con mi mano lo tomaba de la base para correr su escroto y descubrir su glande y metérmelo por la boca, Alfonso despertó de inmediato, al hacerlo intento alejarme, imagino que lo había tomado por sorpresa, por lo que se disculpó y yo seguí disfrutando de aquel miembro que no tardo en ponerse totalmente duro, tenía tiempo de no ver con tanta claridad el pene de Alfonso en todo su esplendor, su pene ya alcanzaba quizás unos diecisiete centímetros, con un grosor normal, pero con una curvatura que era cada vez más perceptible
Llevábamos quizás unos diez minutos en plena mamada, los gemidos de Alfonso eran más perceptibles a mis oídos, los cuales me hacían sentir tan bien, ninguno de los dos se había percatado de la hora, yo había hecho de cuentas que teníamos todo el tiempo del mundo, por lo que trataba de meterme gran parte del pene de Alfonso en la boca, sin introducírmelo por completo, movía mi cabeza a los lados para poder saborear muy bien aquel miembro, además de tener mucho cuidado de que absolutamente todo fuera placer para Alfonso y no llegara a lastimarlo, el sentir en mi paladar el sabor de su precum fue para mí como una señal a pasar a algo más que una mamada, el único vestido en la habitación era yo, por lo que inmediatamente empecé a desvestirme, a lo que Alfonso me ayudo, yo quería convertir aquel momento en algo más que sexo, por lo que estando totalmente desnudo me acomode sobre su cuerpo, mientras besaba su pecho, para luego seguir por su cuello y terminar por besar sus labios, estábamos tan perdidos en nuestros besos que ambos nos sobresaltamos al escuchar que tocaban a la puerta
E: ¿primito, ya estas despierto?
Al escuchar a Emilio inmediatamente me quite de encima de Alfonso y al escuchar que trataban de abrir la puerta sin saber si tenía puesto o no el seguro termine por buscar una sábana para cubrirme mientras Alfonso termino por caer de la cama, desconociendo si había sido por causa mía, por suerte la puerta si tenía seguro y Emilio toco nuevamente a la puerta mientras Alfonso y yo tratábamos de contener la risa
E: Andy despierta, se supone que el holgazán soy yo
A: déjame dormir, aunque sea cinco minutos más
E: date prisa, soy el único que se ha despertado, hasta tuve que preparar el desayuno o al menos intentarlo
A: bajo en un momento
Después de eso me vestí y me dirigí al baño para lavarme la cara, Alfonso insistía en que termináramos lo que habíamos empezado pero tuve que decirle que no, le di un último beso antes de salir de la habitación y le pedí esperar unos minutos para bajar en lo que yo llevaba a Emilio la cocina, lo cual acepto de muy mala gana, al bajar un extraño aroma me llevo a la cocina, Emilio había intentado de preparar tortitas para el desayuno y gran parte de ellas ya estaban quemadas, no tuve que hacer nada para retenerlo en la cocina, el distribuyo las tortitas en tres platas, dejándole a Alfonso las más quemadas y sirviéndose él las más decentes, cuando Alfonso apareció por la cocina se sentó directo a desayunar, a pesar de haberlo dejado con media erección en la habitación, él estaba muy sonriente, tanto que ni hizo ningún reclamo por lo que estaba desayunando
Tras terminar de desayunar Emilio nos advirtió que tendríamos que arreglárnosla sin él para la limpieza de la casa, que él ya había hecho su parte preparando el desayuno y que pasaría todo el día fuera, el único que parecía preocuparle el hecho de que Emilio no estuviera en casa era a mí, por lo que empecé a cuestionarlo de a dónde iría, con quiénes estaría y exactamente a qué horas pensaba regresar, a lo que él únicamente respondió que trataría de llegar a tiempo para la cena y que si llega su abuela lo cubriéramos
Yo realmente estaba preocupado por si Irma llegaba a descubrir que Emilio estaría fuera de casa todo el día y mucho más si llegaba a enterarse mi tía, pero tras marcharse Emilio, Alfonso trato de calmarme, diciéndome que su abuela le había dicho que pidiera comida para el almuerzo y la cena, al parecer ella no podría estar al pendiente de nosotros ese día, por lo que Alfonso sugirió que era momento de retomar lo que habíamos dejado pendiente, lo cual le dije que concordaba con él y tras saber el desastre que estaba en la cocina lo envié a encargase de la limpieza de ella mientras yo me encargaba del resto de la casa, a regañadientes acepto, no sin antes advertirme que después de que termináramos no saldríamos de la habitación de sus padres en todo el día
Al iniciar con la limpieza me arrepentí de haberle asignado solo la cocina a Alfonso, la habitación de mis tía y Luis no tenía más desorden que la cama, mientras que las habitaciones de Alfonso y Emilio estaban hechas un desastre, por lo que Alfonso se encargó de limpiar toda la planta baja y llevar la ropa a la lavadora, habíamos hecho un buen equipo, aunque al terminar Alfonso me dejo muy claras sus intenciones al ayudarme, insistía en ducharnos juntos, pero yo temía que Emilio o Irma, quien también tenía llames de aquella casa, llegaran y nos encontraran a los dos juntos dentro del baño, por lo que nuevamente tuve que decirle un no a Alfonso
Minutos después de que Alfonso se me metió a duchar tocaron a la puerta, al dirigirme a abrir estaba convencido de que se trataría de Irma, creyendo que iba a dejarnos comida y a la vez me felicitaba por no irme a duchar con Alfonso, pero sorpresivamente quien estaba del otro lado era Javier, con quien a pesar de haber tenido sexo, ambos habíamos acordado quedar como amigos y como tal lo trate y lo invite a pasar, imagine que buscaba a Emilio, por lo que le hice saber que mi primo no se encontraba, pero él me dijo que ya lo sabía, que ambos habían acordado en ir a jugar futbol con unos amigos pero que al hablar por teléfono con él se disculpó por haberlo olvidado, pero que le había sugerido invitarme en su lugar, pues yo me encontraba en su casa y quizás hasta Alfonso terminaba uniéndose al plan
A: Alfonso se está duchando, ¿esperas o te llamo para decirte que decidimos?
J: y si mejor vamos solos tú y yo o si prefieres le dices a tu primo que iras a jugar futbol pero a cambio vamos a jugar a mi habitación
A: tranquilo donjuán, por enésima vez, solo somos amigos
J: pero podemos ser amigos y un poco más que eso, no sabes cuantas pajas me he hecho solo en recordar la vez que estuvimos juntos
A: prometiste que dejarías el asunto por la paz
J: y tú prometiste que no volverías a meterte con David y ahora resulta que hasta acordaron en que te dejarías coger por él cada vez que él quisiera, ¿dime es eso verdad?
A: claro que no y baja la voz por favor
J: y de que estuvieron juntos el lunes, ¿también es mentira?
A: Javi podemos dejar esto pendiente para otro día por favor
J: entonces es verdad
A: te prometo que mañana te explico todo, pero lo mejor será que te marches por favor
Después de que Javier se marchó subí al baño para asegurarme de que Alfonso seguía duchándose, pero lo encontré vistiéndose en su habitación, se veía algo molesto, por lo que inmediatamente entre en paranoilla pensando en que había logrado escuchar los casi gritos de Javi, pero al preguntarle que tenía simplemente me dijo que ya podía ducharme ahora que él ya había salido, observándolo únicamente con su bóxer puesto, aproveche el momento en el que se disponía a poner una camiseta para abrazarlo por la espalda, estaba tan asustado que creí que terminaría apartándome, pero no fue así, incluso termino por darme un beso y diciéndome que me fuera a duchar y que ahora él estaría vigilando por si alguien llegaba, al escucharlo sentí como si el alma me volvía al cuerpo, por lo que nuevamente besándolo le dije que me ducharía en el baño de sus papás, pues además de ser más grande, este se encontraba dentro de la habitación, además de decirle a Alfonso antes de salir que esta vez sí dejaría la puerta de la habitación sin seguro
Durante la ducha ensaye varias formas de contarle a Alfonso todo sobre Sergio y obviamente de lo ocurrido con David y Javier, que al parecer seguirían siendo una piedra en mi camino, pero estaba tranquilo, tenía la certeza de que a Alfonso no le importaría, quizás sería más celoso respecto a ellos, pero yo tampoco pensaba mantenerme cerca de ninguno de ellos tres, incluso después de esa tarde comprendí que lamentablemente Javier y yo ya no podríamos ser ni siquiera amigos, estaba tan contento que al ser tomado por sorpresa y empujado a la cama por Alfonso al salir del baño llego a parecerme un tipo de juego, que no dude en seguirle lo que yo creí en ese entonces un juego
A: pero que fuerte, ¿acaso piensas hacerme algo?
Alf: si, destrozarte el culo
A: ¿enserio crees que podrás hacerlo?
Alf: obsérvame
Alfonso me tenía bocabajo presionado sobre la cama, con los brazos sujetados por detrás, yo creí que su actitud se debía a las veces que le había cortado el rollo desde la noche anterior, pero inmediatamente sentí una pulsación en mi ano, el cual se encontraba algo húmedo al haber salido del baño y haber puesto demasiado interés en tenerlo totalmente limpio, pero fue imposible no sentir dolor al ser penetrado de una estacada por Alfonso
A: Alfonso me duele, sácala despacio por favor
Alf: desde anoche moría por estar dentro de ti, ¿a los vecinos también les distes largas o con ellos si te la dejaste meter a la primera?
A: déjame explicarte
Tras decirle eso ultimo a Alfonso, el saco de golpe su pene y nuevamente me la clavo de golpe, la situación me estaba superando, tanto que empecé a llorar, ya ni sabía si mis lágrimas era por el dolor o por sentirme descubierto ante Alfonso, pero una tercera penetración sin piedad vino, la cual me hizo tratar de quitarme a Alfonso de encima
A: basta, si no quieres escucharme, al menos suéltame
Desde mi accidente había tenido miedo de ejercer fuerza de más en mi brazo izquierdo, pero el dolor que me estaba provocando Alfonso era tanto, que no me importaba lastimarme de nuevo al tratar de liberarme, pero al intentarlo un golpe fue directo a mi mandíbula
Alf: quieta zorra
Aunque el dolor del golpe era fuerte, aún más lo era el de las embestidas de Alfonso, sin nada más que hacer creo que fue la primera vez que termine mordiendo las sabanas de una cama mientras me cogían, Alfonso me seguía penetrando y los insultos hacia mí no se hicieron esperar, llegando incluso a escucharlo llorar mientras me recriminaba como una y otra vez jugaba con sus sentimientos, después de varios minutos el dolor empezó a disminuir juntamente con las embestidas de Alfonso, quien se había colocado sobre mi espalda, los quejidos de mi parte habían parado, pero me rehusaba a emitir ni un solo gemido, pero Alfonso encontró otra forma de torturarme, sentí como sus dientes empezaron a clavarse por toda mi espalda, según él para que Sergio, David o Javier supieran que había sido de él la próxima vez que estuviera con alguno de ellos
En ese momento me sentía tan lleno de ira y tan humillado, que creí que la situación no podía empeorar, pero cuando finalmente Alfonso se me quito de encima después de sentir como había eyaculado, me gire y al verlo me di cuenta de algo que pensé en voz alta
A: ¿usaste protección?
Alf: No creíste que me arriesgaría después de saber que te dejas coger por cualquiera que se te ponga enfrente, pero será mejor que me duche de nuevo, no quiero oler todo el día a zorra
Después de que Alfonso salió de la habitación me duche de nuevo, realmente me dolía el culo como nunca antes, pero aun así recogí mis cosas y me fui a mi casa, le escribí a Emilio para avisarle que pasaría la noche en mi casa y que no le dijera a nadie, que ahora tendría que ser él quien me cubriera la espalda, al día siguiente no tenía ánimos para ir al colegio, así que falte, además de que se me había puesto morado el golpe en mi cara, pase la mañana pensando en que le diría a mis padres al verme, Rebeca decidió ir a verme al salir del colegio, Emilio le había contado que había pasado la noche solo en casa y al verme solamente le conté que Alfonso me había golpeado al enterarse de lo mío con David y Javier, ella se sorprendió por la actitud de Alfonso, pero le dije que había decidido seguir su consejo de intentar algo con Alfonso y que justamente en eso habíamos quedado el sábado en la noche y por esa razón él se molestó tanto
Mi amiga muy enojada por lo que le había contado, me ayudo a preparar una cuartada para mis papás, me hizo darme cuenta que mis primos debían ayudarnos, que Alfonso quisiera o no tendría que hacerlo y fue ella quien se encargó de hablar con ellos, a Emilio le dijimos que el golpe lo había recibido al salir con Rebeca, pero que los padres de Rebeca no se podían enterar , por lo que Emilio cumplió con su parte, diciendo a mis padres que yo me había ido a mi casa esa mañana y que había faltado al colegio por el golpe que había recibido al pelearme con alguien en un partido de futbol al que había ido con él, por lo que Emilio y yo nos llevamos un regaño por haber salido sin permiso y Alfonso por dejarnos salir
Rebeca y yo dejamos de dirigirle la palabra a Javier, obviamente yo tenía razones de sobra para estar furioso con él, pero aún más en estar furioso y hasta odiar a Alfonso, quien desde la tarde del lunes insistía en hablar conmigo, me hacía llamadas que cortaba al instante y me enviaba mensajes de texto que terminaba por borrar sin siquiera leer, estaba decidido a vengarme de Alfonso a cualquier costo, incluso si mis papás llegaran a enterarse de todo, pero el miedo de que Alfonso llegara a arrastrar a Sergio me detuvo, por lo que tuve que idear otra forma de vengarme
Llego el jueves y una idea para vengarme de Alfonso estaba tomando forma en mi cabeza, pero ese día al salir del colegio fui tomado por sorpresa por la presencia de mí papá, quien había ido por mí, era la primera vez que lo hacía, lo cual se me hizo muy extraño y aún más cuando en vez de llevarme a casa me llevo a comer y luego al centro comercial, por suerte mi papá me dijo que su presencia se debía a que tenía que firmar unos documentos y que se iría al día siguiente, permitiéndome cumplir con mis planes, pero también me dijo que pasaría el fin de semana de viaje
Al día siguiente mi papá se despidió de mí antes de ir al colegio, lo veía algo triste, incluso me dio la impresión de haber llorado pero no quise indagar, con mi papá tenía muy claro que si algo debía saber o si él quería que yo supiera algo, él me lo diría sin siquiera preguntar, tenía varios recuerdos con mi padre de momentos con preguntas sin respuestas de experiencia, tras regresar del colegio note a mi mamá algo ansiosa, sabía que algo pasaba pero al preguntarle si le ocurría algo simplemente me dijo que todo estaba bien, su respuesta en vez de tranquilizarme me dio la certeza de que algo pasaba pero que no querían decirme, pero no tenía cabeza para los misterios de mis papás, por lo que decidí olvidarme del asunto por el momento y concentrarme en lo que tenía planeado para esa tarde, al considerar oportuna la hora tome mi teléfono para llamar a quien me había jurado no volver a buscar
A: ¿Sergio?
S: ¿quién más?, has sido tú quien ha marcado, tan rápido ya me echas de menos
A: siendo sincero, si, ¿tienes planes para hoy?
S: sí, he quedado con unos amigos
A: que bien, espero te la pases…
S: ¿acaso querías verme?
A: si, pero será en otra ocasión
S: te espero en una hora en la esquina de antes, ¿imagino que sabrás a donde voy a llevarte?
A: allí estaré
Algo me decía que Sergio me haría esperarlo pero a pesar de que iba algo temprano, al llegar al lugar acordado, él ya se encontraba allí, subí al auto, lo salude con un tímido hola, el cual él me respondió con un: “ves como si eres tú quien termina buscándome”, sabía que no debía enojarlo si quería que todo saliera como lo había planeado, por lo que termine respondiendo: “no pude evitarlo”, lo cual hizo dibujar una gran sonrisa en el rostro de Sergio, las habitaciones de aquel motel estaban compuestas de dos plantas, en la primera que servía de garaje y la segundo que era prácticamente la habitación, al llegar él se bajó del auto y empezó a subir por las escaleras sin siquiera esperarme y yo tuve que seguirlo como perro a su amo, ya en la habitación Sergio se me fue encima inmediatamente y me fue imposible no corresponder a sus besos con pasión, en poco más de un minuto Sergio ya se encontraba totalmente desnudo frente a mí y estaba a punto de empezar a desvestirme, lo cual fue mi señal para tomar el control
A: ¡espera!
S: ¿y ahora qué?
A: no pienso seguir si no usas preservativo
S: y me lo dices ahora, ¿quieres que salga, vaya a la farmacia y luego regrese?
A: si quieres o puedes usar el que cargas en la billetera, ¿acaso se te ha olvidado reponerlo o ya lo has usado hoy?
S: ¿de qué hablas?
A: sé bien que siempre llevas un preservativo contigo
Trate de verme seguro en ese momento, realmente no tenía la certeza de que Sergio siempre llevara un preservativo con él, solamente había visto en una ocasión el interior de su billetera, por lo que Sergio muy bien pudo negármelo, pero en un total silencio levanto su pantalón que se encontraba en el piso y tomando su billetera, saco de ella un preservativo, no tenía que verlo de cerca para saber que no era el mismo preservativo que había encontrado hace unos meses, ni siquiera el empaque era igual
S: esto tiene una explicación
A: no te la estoy pidiendo, así como tampoco quiero que tú me las pidas a mí
Tomando mi playera de la parte de abajo la hale hacia arriba para quitármela para luego voltearme de espaldas a Sergio para desvestirme por completo, mi objetivo era que Sergio viera las marcas de mordidas que Alfonso me había dejado, las cuales a diferencia del golpe en mi cara, seguían muy visibles, aún estaba quitándome el bóxer cuando Sergio muy molesto me giro para darle lacara
S: ¿qué significan esas marcas?
A: no pienso decirte nada
S: ¿fue David?
A: ¿qué obsesión tienes con David?, pareciera que tú si tienes interés por él
S: entonces dime quién te ha dejado esas marcas
A: si te busque fue para olvidar lo que me ha pasado, pero si tú quieres seguir en tu rol de detective creo que tendré que buscar a alguien más
Las lágrimas en mis ojos mientras le decía eso ultimo a Sergio lo hicieron quedarse en silencio y besar mis labios, por mi parte no sabía si esas lagrimas eran fruto de mi talento como actor o si eran reales, parte de mi querían creer que era lo primero, Sergio termino por abrazarme por la cintura y en pocos minutos ya estábamos acostados sobre la cama de la habitación, yo me encontraba bocabajo permitiéndole a Sergio acceso total a mi trasero, él inmediatamente se concentró en comerme el culo, sentía su lengua dar círculos en la entrada de mi ano y minutos después introdujo sus dedos para dilatarme, me percate que Sergio dedico demasiado tiempo en dilatarme, tanto que incluso llegue a pensar que terminaría eyaculando mientras Sergio jugaba con sus dedos dentro de mí, minutos después sin siquiera pedirme ponerme en alguna posición específica, ni moverme él mismo, Sergio se colocó a un lado de mí y empezó a besarme, sabía que solamente tenía que girarme de lado para que él pudiera penetrarme de cucharita, pero espere a que fuera él quien me hiciera saber lo que quería que hiciera y después de unos besos coloco su mano en mi cadera para girarme
A: lo del preservativo fue muy enserio
En esa ocasión Sergio no busco replicarme, simplemente tomo el preservativo y se lo puso, note lo cuidadosa que estaba siendo al penetrarme, mientras lo hacía no paraba de besarme la espalda, demore en darme cuenta que aquellos besos eran justamente en donde tenía las marcas de las mordidas de Alfonso, eso y el hecho de que Sergio al finalmente tener todo su pene dentro de mí se detuviera para decirme: “te amo” y luego besarme me hizo cuestionarme el abandonar mis planes e intentar ser feliz con Sergio, pero mi orgullo no me lo permitía, quería desquitarme de Alfonso, además de haber comprobado que una vez más Sergio había estado con otras personas mientras juraba amarme
A pesar de todo, mentiría si dijera que no disfrute demasiado esa tarde en brazos de Sergio, sus besos, sus caricias, la forma en que estaba haciéndome el amor, porque eso fue para mí, la primera vez que Sergio me demostraba que lo nuestro era más que sexo, yo había eyaculado mucho antes que él pero aun así me sentí en el cielo cuando Sergio acelero el ritmo de sus embestidas para terminar dentro del preservativo, él tiempo se nos había acabado, era momento de que yo regresara a casa, por lo que tomamos una ducha rápida juntos, en la cual Sergio nuevamente me pregunto por quien había clavado sus dientes en mí pero decidí callar en ese momento, ese día Sergio decidió dejarme justo frente a mí casa, habíamos acordado en que si alguien se daba cuenta simplemente diríamos que nos encontramos cerca del gimnasio cuando yo me dirigía a mi casa, Sergio salió de su auto a esperar a que yo cruzara la puerta para entrar en mi casa, pero antes de hacerlo tome mi teléfono para marcarle a él
S: ¿qué sucede?
A: solo quería decirte que la pase muy bien
S: yo también, pero por qué me lo dices estando allá
Era obvio que a Sergio le pareciera tonta mi llamada, ambos estábamos a unos metros de distancia y podíamos vernos a la cara
A: quería poner distancia para cuando te dijera que siempre serás alguien importante para mí
S: Andy, ¿de qué demonios estás hablando?
A: no quiero más problemas con Alfonso, si él llegara a saber que la otra persona a la que amo eres tú no me lo perdonaría
S: ¿Alfonso, mi sobrino?, ¿quieres decir que fue él quien…?
Al ver a Sergio alterarse, cerrar la puerta de su auto y dirigirse hacia mí me hizo cortar la llamada, terminar por entrar a mi casa y cerrar de inmediato la puerta…