Complacerte...

Complacerte en lo que desees...

...Era temprano, me desperté al notar  tus dedos en mi coño, como lo abrías para meter esas bolas que tan caliente me ponen. Intenté moverme sin saber exactamente que pasaba pero con un brusco movimiento de tus manos, supe que no debía hacerlo. Ya me las sentí dentro, con maestría y rapidez separaste los labios del chocho y las introduciste de un solo golpe, primero una, después la otra sin esperar nada.

No tenía ni idea de lo que querías, tampoco me apetecía mucho hablar, acababa de despertar, solo sentía que estabas hurgando en mi y eso hacia humedecerme.

Me ordenaste que me preparara...ibas a depilarme, a dejarme bien perfecta y bien limpia dijiste. Lo hacías casi a diario, pero hoy, esta vez, tomaste más atención, no parabas de pasar tu mano, entera, abierta una vez y otra de arriba abajo por todo el coño, diciendo una vez y otra....-el coño de mi puta debe de estar bien preparado- Sólo de oírte, sólo de sentir las bolas dentro, sólo de sentir tu mano una vez y otra recorriendo mi chocho me estaba poniendo bien cachonda.

Así te lo dije, imaginando como en otras ocasiones, que dirías...- pues córrete puta, córrete...- Pero tu respuesta me dejó clavada, ni se te ocurra ya puedas estar lo más caliente que quieras pero como te corras sin mi permiso, nos vamos al cuartito y te pondré el coño a base de fustazos que no podrás follar en una semana por muy caliente que estés...-

Joder, no se que estabas buscando hoy....durante todo el día, no parabas de tocarme los pezones, tocar mi culo, mi castaña, y diciéndome lo puta que era.....

Cuando me veías casi a punto me dejabas te separabas de mi y me recordabas que no debía corrererme, que no querías que me corriera...Y de nuevo cuando menos lo esperaba llegas por detrás y metes tus dedos en mi coño, y vuelves a decirme como soy, que estoy chorreando que quiero...

No entiendo nada, no se que quieres, deseas verme bien cachonda pero no quieres que me corras, te llamo cabrón mil veces, me tienes como loca todo el día, ya no se que hacer, ya no se que decirte, sólo me miras con cara de canalla y medio te sonríes y vuelves a magrearme toda entera, a volverme loca perdida, a ponerme como una perra....

Ya por la tarde pensé que quizás a última hora, querrías verme como me corría, o quizás follarme una vez y otra.

Nada, no obtenía respuesta de ningún tipo. Ya no podía más, intenté quedarme un rato sola en el baño, pero no me dejabas ni un instante. No entendía que querías, que estabas haciendo conmigo, porque me castigabas de este modo....

El timbre sonó fuerte, una sola vez...mi sorpresa fue grande una mujer joven, de aspecto no desagradable, me llamó la atención sus labios gruesos pintados de un rojo excesivo, muy fuerte.

La hiciste pasar hasta el salón, yo te mire extrañada, y mas cuando me hiciste abrir de piernas sentada sobre la mesa, mi desconcierto era grande, no dejaba de mirarte contrariada pero sólo me devolvías una mirada dura, fria, sólo me ordenabas....- que abras el coño puta- y sin más dilación comenzaste a azotarme el chocho una vez y otra. Bien abierto que lo puse, como querías, bien expuesto para esa extraña a la que ordenabas que me husmeara, que me oliera el coño de puta decías una vez y otra.

Ya me puse como loca, cuando empezaste a usar ese vibrador, fallándome fuerte el coño, follando la boca de la otra, y de nuevo a mi coño del cual salía chorreando, otra vez el vibrador a la boca de ella. Tu no parabas, yo estaba desquiciada...para correrme, pero ahora llegabas con el azote en el coño, fuerte, capaz de parar esa corrida, yo gritaba....-he dicho que la puta no se corre- decías una vez y otra mientras volvías a azotar el chocho.....ya no podía más. Todo esto aún me ponía más caliente.

Volvías a empezar de nuevo a mojar el vibrador en la boca de la intrusa, para follarme de nuevo con él...

De nuevo notaste como casi explotaba, como me retorcía...y de nuevo volviste al azote en mi coño, pero esta vez si cabe más fuerte que las anteriores, volviste a cortar mi corrida, y al momento otra vez el vibrador....poniéndome en celo, poniéndome puta, poniéndome cerda, poniéndome guarra.................

Hasta que no pude más, hasta que a gritos, le pedí a la mujer que me comiera el coño, que quería correrme en su boca, que ya no podía más, que necesita correrme, que me volvía loca....

Y entonces te miré, entonces entendí lo que querias, vi tu cara, me encanto tu cara. Y mientras la mujer comía mi coño te pedí con gran ansia la polla, entonces sí, entonces sin dudarlo metiste todo el nabo en mi boca, hasta la garganta, hasta los huevos, hasta ahogarme....y así me corrí como una puta perra. Como querías que me corriera.

Complaciéndote y complaciéndome.

Gloria