Compartiendo a mi novia Martha

Lo que inicio como una fantasia, Martha lo llevo mas alla, condicionando mi placer a que ella tenga sexo con desconocidos...

Compartiendo a mi novia Martha

Autor: uioppp

Esto que les voy a contar aquí es algo que en realidad me paso. Mi novia, Martha, tiene 29 años igual que yo. Normalmente era muy calmada en lo que se refiere a sexo, pero un día me dio una gran sorpresa.

Midiendo 1.70, pero sobretodo, con el buen cuerpo que tiene, no es exagerado decir que a donde quiera que vamos, roba miradas. Yo ya ni me enojo, pero siempre está claro que la voltean a ver. Ella suele ser muy conservadora al vestir, pero aun así llama la atención. Un día estábamos haciendo el amor en casa, cuando de pronto nos dimos cuenta que se nos haría tarde para llegar al centro comercial. Por lo mismo, nos vestimos a las carreras y ella se llevo la blusa que tenía puesta, la cual tenía un escote bastante grande. No les puedo explicar la cantidad de gente (hombres) que la volteo a ver. Se lo dije estando en la tienda pero ella solo me decía que era mi imaginación. Regresando a casa volvimos rápidamente a donde nos habíamos quedado y yo le decía mucho que me gustaba su blusa, que se le veía muy bien. Ella me pregunto si no me ponía celoso y mi respuesta fue que no y me pregunto si me gustaría que se empezara a vestir con minifaldas y escotes y no tuve que contestarle porque ella NOTO que mi erección se hizo más fuerte y me dijo "está bien, por lo que veo, te encantaría!".

Desde ese entonces, no hay un día en que no se vista de una forma provocativa. Yo en ocasiones le he dicho que su blusa está muy abierta o que su falda está muy arriba, pero siempre que le digo me contesta "y qué? no te gusta?" y se baja más su blusa o se sube mas su falda. En una ocasión, fuimos a un bar a tomar un poco y ella llevaba una de mis blusas favoritas. Digamos que se veía un poco más de la cuenta. Ya llevábamos unas cuantas copas cuando le dije a Martha: "Martha, me gusta mucho verte con esta blusa, pero si vamos a jugar billar, sería mejor que te la subas un poco". Ella contesto "ya te había dicho que cada vez que me dijeras, me la bajaría mas y hoy no será la excepción" y habiendo dicho esto, bajo su blusa de una forma exagerada y se levanto, llendo hacia una de las mesas. Tomo un taco de billar y tiro. Yo, aun desde la barra, pude notar como la gente de otras mesas se quedo boquiabierta tras ver tremendo escote expuesto totalmente mientras se preparaba para tirar.

Después del primer tiro de Martha, me levanté de la barra y camine rumbo a la mesa para jugar con ella, pero antes de que hubiese llegado, la abordaron 2 sujetos preguntando si podían jugar con ella y Martha contesto que no. Llegue yo a la mesa, Martha no dijo palabra sobre los tipos y pasamos una noche divertida jugando billar.

De regreso, ya en casa, mientras hacíamos el amor, Martha me pregunto: "te gusto la blusa que me puse hoy?" sin dudarlo le dije: "claro que si, bastante, no podía evitar mirarte todo el tiempo, te veías muy bien" y ella respondió "si, por lo que vi a todos los hombres del bar les gusto, en especial a los dos chavos que me invitaron a jugar, porque en toda la noche no dejaron de verme un segundo". Yo le pregunte que qué le habían dicho y ella contesto "me invitaron a jugar con ellos, pero les dije que no porque venía con alguien, insistieron pero me mantuve firme y luego me dijeron que al menos bailara con ellos dos un rato, pero era obvio que solo estaban buscando sexo". No sé por qué pero en ese momento, al escuchar a mi novia hablar de tener sexo con un(os) desconocido(s), me comencé a excitar rápidamente. Ella lo noto, puesto que tenía su mano en mi pene, masturbándolo, y me pregunto: "acaso te excito lo que te dije? Te excito que yo haya estado con una blusa muy sugestiva y que dos chavos llegaran para intentar ligarme?". En ese momento mi respiración comenzó a acelerarse y ella, al notarlo, pregunto: "o te excito la idea de que estaban buscando tener sexo conmigo?" En ese momento no pude mas y estalle, me vine con una fuerza que pocas veces había alcanzado. La cantidad de esperma que saque fue mucho mayor que la normal y Martha lo noto.

Al día siguiente, mientras hacíamos el amor, Martha me tenía muy excitado y me pregunto: "de verdad te gustaría que tuviera sexo con alguien más? te habría gustado que en el billar, les hubiera aceptado jugar con ellos y que hubiera terminado haciéndolo con ellos?" Yo no podía creer su pregunta, pero a decir verdad me empecé a excitar mucho más. Martha insistió: "pero a ver, te habría gustado que se salieran justo antes de correrse o que se corrieran adentro de mi?" Yo no podía mas y dejándome llevar le respondí "adentro, me habría gustado que tuvieras sexo con ellos y se vinieran adentro de ti, regresaras a casa ya tarde, y me contaras que venías de una buena sesión de sexo". Ella me contesto: "de verdad lo quieres?" y yo respondí que si por el calor del momento. Tuvimos una noche de buen sexo y no se toco más el tema.

Cuatro días después, llegue a casa después del trabajo y no vi a Martha. Subí a mi cuarto y me estaba esperando. Me sorprendí al verla porque llevaba una falda extremadamente cortita que hacia lucir sus increíbles piernas y una blusa con tres botones desabrochados que dejaba ver una generosa porción de escote. Sabía que vendría una noche de acción. Ella empezó a besarme y yo empecé a acariciarla pero al poco tiempo saco unas esposas que habíamos comprado tiempo atrás. Ya que me tenia indefenso comenzó a hablar: "hace unos días me dijiste que te excitaría que yo tuviera sexo con alguien más, así que hoy puede ser la noche en que haga realidad tu deseo. He preparado un pequeño juego que de hoy en adelante jugaremos cada vez que vayamos a hacer el amor. En este contenedor, meteré 10 bolitas: 5 negras y 5 blancas. Tú deberás sacar 2. Si de esas 2, sale al menos una negra, te dejare esposado, me iré a aquel bar que fuimos la semana pasada y regresare a casa después de una sesión de sexo desenfrenado con algún desconocido. Al llegar, dejare que me hagas el amor. Pero si las dos bolitas son blancas, se acabo el juego y no habrá sexo esa noche ni dejare que me toques en una semana. De esta manera, tu desearas que salga una bolita negra para que puedas descargar tu pasión, es decir, te estarás condicionando a que la única forma de que obtengas placer sea si otro hombre me hace suya."

Por supuesto, me quede boquiabierto, no sabía que decir y ella metió las bolitas al bote y me lo acerco. No podía moverme de la impresión de lo que había dicho pero ella me dijo "si no la sacas tu, la saco yo", así que no tuve más remedio que sacar una bolita. Salió negra a la primera. Ella se rió y me dijo "empezamos bien! no me esperes cariño!", tomo su bolsa y se fue.

No hace falta decir que mi pene estaba a punto de estallar de lo excitado que estaba. Pasaron 2 horas y aun seguía excitado. De pronto recibí un mensaje al celular y como pude me las ingenie para leerlo. "Ya voy para la casa, llego en veinte minutos, vaya que si estas falditas me dan resultados inmediatos!". Con esto me confirmaba que había estado con otro hombre. Lo increíble es que más que celos, solo me excité más. Qué extraño. Como ella dijo, a los veinte minutos cruzo la puerta del cuarto. Me quito las esposas y me monto, yo le pregunte que qué había pasado y contesto "no preguntes lo que ya sabes" y siguió moviéndose. Lo hacía de una forma impresionante, tuvimos una gran noche.

Esto ocurrió apenas ayer, no sé cuándo va a volver a usar su jueguito pero resulta muy excitante imaginar todo lo que pueda pasar con Martha. Tan pronto pase algo nuevo, lo publicaré!