Como una yegua (La falsa esposa 3)

A Ágata la muestran y doman como si fuera un yegua. ¿ Lo hace por placer o por dinero?

Como una yegua.

( LA FALSA ESPOSA 3)

Estaba colgada en aquella habitación oscura y a medida que pasaba el tiempo y se me iban pasando los efectos del afrodisíaco comencé a sentirme mal.

Por un lado la postura, parada con los brazos en alto, y sobre todo las pinzas que me producían una molestia al principio y después un dolor continuo , que no podía controlar pese a intentarlo mentalmente. No me daba placer, solo me dolía. Me apretaban mucho y mi sexo y mis pezones me transmitían al cerebro una angustia e indefensión terrible.

No sé cuanto tiempo estuve así, creo que horas. Se abrió la puerta y entró Olga con dos indias. Me destensaron la cuerda y quedé medio tumbada en el suelo de la pileta. Las muchachas me sujetaron las manos y las piernas en esa posición semifetal.

Olga agarró la ducha y le quitó el teléfono , y me introdujo el mango en mi ano. Me quedé aterrorizada, si bien me han puesto enemas, nunca así. Abrió el agua y noté un chorro que me penetraba. Chillé y recibí un bofetón.

"Perra para usar tu orto, tiene que estar limpio."- y siguió metiéndome agua.

Me levantaron tirando de la correa y quedé de pie. El agua hizo su efecto y sin poder aguantar me defequé. Me disparó con la ducha lavando mis heces y volvió a dejarme caer. Esta vez me obligaron a estar arrodillada con la cola expuesta. Y volvió a meterme la ducha repitiendo la operación.

Y así otras dos veces. Ya solo salía agua de mi orificio trasero. Me sacaron de la tina y la lavaron con agua , me volvieron a meter y me ducharon con agua fría y caliente alternadas, De casi hirviendo a helada.

Me desataron, apenas podía mantenerme en pie.

Me dejaron parada, empecé a sentir de nuevo las pinzas.

"Tu amo ha dicho que te gusta que te digan yegua , hoy vas a ser una yegua de verdad. Quitadla las pinzas"

Al hacerlo sentí un enorme placer , el pasar del dolor al relajo. Me fijé que mis pezones estaban un poco inflamados .

"Vestidla"- me llevaron a otra habitación. Espere desnuda mi indumentaria.

Me pusieron un corsé negro de cuero apretando bien las cintas. Llegaba de la cintura a la parte baja de los senos que realzaba con unos aros que los dejaban al descubierto. Me pusieron unas medias negras que me llegaban a la mitad del muslo. Unos botines de taco muy alto. Sabía que asi estaba hermosa , alguna vez me había vestido así.

"Hay que poner el casco"- me colocaron un casco de cuero con una cola de crin , si querían que pareciera una yegua , aquel sombrero atado bajo la barbilla me daba el aspecto de un caballo.

Un collar con dos riendas adornó mi cuello.

Olga entró , llevaba una blusa blanca, impoluta que sus turgentes senos tensaba, un pantalón de licra negro y unas botas de montar.

"Lo que viene es duro, así que mira de nuevo lo que te vamos a regalar, si te portas bien."-me llevo de la mano hasta donde estaba la imagen que me había prometido. El verla y el dinero de la operación me animaron a seguir.

"Mi señora , hacé conmigo que lo que querás"- me excedí en la tonada argentina pensando que le gustaría.

"¡ Qué puta eres!"

Me agarró de las riendas y..

"Crema y cola"- tiró de las riendas y me hizo agachar . Me metieron en el orto aquella crema que me calentó inmediatamente. Me puse cachonda , necesitaba que me cogieran. Debía ser que las zonas inflamadas con las pinzas al untarlas de nuevo, se incrementaba el efecto. En aquella postura , noté un penetración salvaje por detrás. Me había puesto un mango en el ano del que salían cerdas como crines de caballo.

" Ahora eres una yegua. Vamos"- tiró de las riendas y abrió la puerta.

Estaba en medio de un circulo con suelo de madera , alrededor en un banco corrido había seis hombres vestidos de jinetes de campo, en medio Adolfo y Gabriel.

" Aquí está la yegua , véanla y pujen"

Me hizo andar rápido dando vueltas a su alrededor, yo estaba muy excitada, los pezones erguidos parecían estallar como mi concha. Me daba cuenta que el clítoris estaba salido de su funda. Y atrás el mango que me habían incrustado me daba un enorme placer que me tenía a punto del orgasmo.

"! 150 dólares!"- dijo un hombre. Se habían sacado la pija y se masturbaban delante de mí , lo que aun me excitaba más.

"Es poco"- era la voz de Gabriel, mi jefe.- "que baile para excitarlos"

Comencé a moverme como una danzarina exótica , esforzándome en dar erotismo a la danza.

" 250"- el que había dado la voz era un hombre de piel oscura , parecía un mulato brasileño.

"Usted el primero. Arrodíllate ante él y le sacas la leche"

Lo hice , me arrodillé ante aquel pene gordo , negro, grande , le retiré sus manos y puse las mías. Olga me dio una orden :

"Espera"- se acercó a mi me puso la crema excitante en las manos.

Al comenzar a masturbarle , mis manos deslizaban por su verga , apenas podía abárcala dado su grosor. Fui rápida , sin titubeos y de pronto ZASSSS su miembro empezó a escupir semen que me mojó toda.

" Ahora derribo. ¿ quién juega?"

Se levantaron varias voces y manos , ofreciendo dinero.

"Cuerpo 400 y pies 300 , recuerden que sólo es aceptado un latigazo"

Cuando se paró el primero y vi la fusta que llevaba en la mano, me aterroricé. Era un látigo para azotar los caballos de un carro.

"Ahora putita , si que vas a ser una yegua"

De pie frente a mí, movió el látigo , lo sospesó y RASS me enlazó por la cintura donde tenía el corsé , me dolió a pesar de la protección del cuero. Tiró de mi y caí al suelo.

Me acarició las nalgas y los senos como si yo fuera un animal , lo terrible es que me excitaba terriblemente.

Se paró ante mi y me ordenó: "Mastúrbame"

Volví a repetir la experiencia del anterior y de nuevo la leche me saltó sobre las lolas.

Su puesto lo tomó otro hombre que volvió a repetir mi derribo y tuve que satisfacer.

Yo cada vez estaba más cachonda , totalmente caliente .

" Nosotros usaremos boleadoras"- eran dos hombres parecidos , podían ser hermanos. Frente a mí movieron las boleadoras que al lanzarlas se enroscaron en mis tobillos tirándome al suelo.

Se arrodillaron frente a mi , que no podía levantarme y poniéndome una verga en cada mano dijeron:

"Invita el que acaba primero"

Tuve que menearles las pollas a la vez, quería sentir su semen en mi cara . aceleré el ritmo hasta que un chorro me cayó en el rostro.

"Has hecho trampas hermano , a mi me la meneaba con la derecha que siempre será mas hábil."

" No creas , es o zurda o ambidiestra"- Y VOLVIÓ A MOJARME .

Estaba en el suelo llena de semen, muy caliente cuando oí la voz de Olga.

"Señores , han cenado. Han disfrutado y el espectáculo se ha acabado. Les invitamos a champán en el salón de invitados."

Fueron saliendo acompañados por Adolfo y Olga. Mire a Gabriel , tenía esa sonrisa cínica que le caracteriza cuando se está divirtiendo.

"Ágata , me parece que estás muy caliente y te has encontrado con la horma de tu zapato. Queda atendernos a nosotros. Ahí te haremos gozar que creo estás que te sales"

"Por favor cógeme, estoy ardiendo"

Gabriel sabe ser bueno conmigo, me quitó el mango que tenía en mi trasero , se tumbó , se abrió la bragueta , sacó una verga enhiesta y me dijo:

" Anda , móntate"

Me arrodillé y me fui metiendo su carne dura en mi concha. ¡ Qué placer tan grande! notarla dentro y venirme fue todo uno.

"Ahora muévete despacio"- me ordenó. Lo hice , el subir y bajar notando como se deslizaba su pija en mi , me iba de nuevo reexcitando, y entré en un orgasmo continuado. No sé cuanto tiempo estuve cogiendo con mi amo, estaba en una nebulosa de placer.

" Ahora .Rápido"

Su voz mandándome cambiar de ritmo retumbó en mis oídos. Me dejé clavar y empecé a moverme con fuerza arriba y abajo.

"YAAAAAA….! – su grito al soltar el chorro de semen coincidió con una subida en mi nivel de placer. Cuando acabamos me quedé totalmente tumbada sobre su cuerpo.

"¡ Qué imagen de felicidad!"- era Olga la que se reía de mí.

Allí estaban Adolfo y ella ante nosotros, el hombre estaba desnudo de cintura para abajo totalmente empalmado. Su verga apuntaba al cielo. Olga , desnuda, hermosa , una hembra poderosa, tenía puesto un arnés con una minga enorme.

"Yegua, ahora nos toca a nosotros. Ponte como una perra , que es lo que eres"

Me puse a cuatro patas, Olga se colocó tras de mi. Y untó mi más oscuro orificio con aquella crema que te ponía a cien. Aprovechando su poder lubricante me metió la enorme minga de latex . Me quedé aterrorizada, me dolía, estaba superdilatada, pero aquello me llenaba mas de lo que yo podía creer..

Se movió adelante y atrás , creí que me rompía. Me pegó azotes en las nalgas , muy fuertes , me dolía todo, pero al tiempo el dolor , me excitaba cada vez más.

Adolfo se arrodilló ante mi rostro , y me puso su miembro en la boca. El vaiven de su mujer al hacerme mover, era el ritmo de mi chupada. Estallé , me vine y caí sobre su pene que me entró hasta lo más profundo de la garganta. Vomite en una arcada enorme. Apenas liquido , prácticamente llevaba casi veinticuatro horas sin comer, sólo líquidos.

"Guarra, limpia a tu señor"

Lamí mis vómitos que manchaban el pene del hombre. Tenía un glande enorme , como una ciruela , oscuro. Se levantó y cambió de posición con Olga. Esta se tumbó ante mi , ya sin el arnés , obligándome a que la comiera el sexo. Estaba totalmente mojado.

Adolfo volvió a entrar por mi orto , pero me empujó para que quedara tumbada. Me cerró las piernas. Allí estaba yo comiendo la concha de la mujer que me apretaba con los muslos la cabeza, con el hombre detrás sodomizándome. No sé el tiempo que transcurrió , yo estaba como drogada de sexo. Cuando el hombre eyaculó, su mujer me retiro de su entrepierna .

Estaba como muerta , cansada , derrotada. Apenas me podía mover.

A una voz de Olga aparecieron las muchachas indias que me arrastraron de nuevo a la habitación donde había pasado la tarde. Me ataron en una cama con los brazos y piernas en aspa. Y se marcharon dejándome sola.