Como un ladrón se convirtió en violador

Un ladrón es sorprendido por una pareja de hermanos adolescentes y la belleza de la joven lo hace obligarla a satisfacerlo a él y a su hermano, mientras lo graba todo en video.

Como un ladrón se convirtió en violador

Un ladrón es sorprendido por una pareja de hermanos adolescentes y la belleza de la joven lo hace obligarla a satisfacerlo a él y a su hermano, mientras lo graba todo en video.

Mi nombre es Jonathan, soy un sujeto normal de clase media que por decisiones equivocadas y por malas compañías caí en la mala vida y para darme mis lujos me dediqué durante varios años al robo de viviendas, en lo cual era bastante bueno, siempre tuve claro cuál era mi objetivo: las casas vacías de donde podía sacar un buen botín, porque era mejor hacer pocos robos pero rentables que muchos robos de pequeñeces, así que planeaba meticulosamente mis golpes y dedicaba muchos días a la observación de las viviendas en cuestión. Mi "negocio" iba de maravilla, nunca dejé huella hasta que un día se despertó un instinto en mi interior y es lo que les comento a continuación.

Era un sábado de enero y en mi país son días de intenso calor por lo que la mayoría de familias se van de vacaciones, estudié bien mi objetivo y me decidí a dar el golpe en la tarde, ya sabía que la familia Fernández (compuesta por el padre, la madre y sus 2 hijos Adrián un joven normal de 19 años y la joya de la familia su hermosa hija Gaby de 18 años) saldrían de paseo a su casa en la playa por lo que no tendría problemas para llevarme todo lo de valor de la vivienda. Me preparé y los vi salir en sus dos carros por lo que esperé que la oscuridad llegara y decidí ingresar por la parte trasera de la vivienda, dormí al perro guardián y pasé sin problemas. Encontré la caja fuerte y saque más de $10.000, joyas, una valiosa videocámara y una computadora portátil, contento por el buen botín me iba a retirar cuando escuché un carro que ingresó a la vivienda, la verdad me asusté porque ya no podía salir y tendría que resolver la situación, preparé mi revólver y me escondí. Para mi sorpresa sólo llegaron los dos hermanos lo cual me alegró por que sería más fácil salir bien librado del lugar, tuve paciencia y esperé el momento adecuado, acción que me permitió escuchar que se habían devuelto por una pelea con sus padres quiénes no volverían hasta el día siguiente.

Asustado y con el revólver en mano salí del armario donde estaba y los tomé por sorpresa, sólo escuché un grito de la hermosa joven a quien callé de inmediato tomándola del brazo y poniéndole el arma en su cabeza, les dije que si querían vivir obedecieran mis órdenes , ellos respondieron afirmativamente con sus cabezas, procedí a soltar a la ricura esa y les ordené que caminaran hacia la habitación y que me enseñaran donde guardaban las demás cosas de valor, no conseguí nada más pero la niña asustada en un ataque de nerviosismo se volvió a golpearme por lo que la tuve que contener y sin percatarme mi mano quedó agarrándole una teta y mi pene pegado a su trasero, en el momento que me di cuenta de la situación mi pene reaccionó con una erección enorme, acto seguido la solté y la niña se arrodilló al frente mío para suplicarme por su vida y pedirme perdón, al verla así tan hermosa y entregada se despertó en mí el instinto de depredador sexual.

Debo ahora proceder a describir a la protagonista de la historia, Gabriela era una jovencita buena, jugaba voleibol y era muy estudiosa, sin dudarlo virgen y dueña de un cuerpo de portada de revista, ojos verdes, pelo lacio negro , labios carnosos, pechos perfectos ni grandes ni pequeños, cintura de abeja y un trasero hermoso, sin duda el sueño de cualquier hombre y la tenía a mi merced, a pesar de que nunca pasó por mi mente ser un violador no podía dejar pasar la oportunidad, pero debía planearlo inteligentemente para no cometer errores que evidentemente me llevarían a prisión.

Analicé la situación y recordé que tenía entre mi botín una cámara de video la cual me daría mi boleto de libertad, le ordené que se levantara y que como teníamos bastante tiempo podría pagarme la ofensa cometida, ella se asustó al oír mis palabras y su hermano en un ataque de hombría intentó golpearme, le pegué, lo tiré al suelo y le apunté, la niña se lanzó al suelo y dijo que harían lo que fuera pero que no los matara. Seguí apuntándole a la frente y le pregunté:

-¿Te gusta tu hermana?

Se me quedó mirando sin saber qué decir, por lo que le di una patada en el estómago y le volví a preguntar

  • Que si te gusta tu hermana? Responde o te muelo a patadas.

No, ella es mi hermana y no me gusta.

Lo insulté y le dije que si era maricón, con el pedazo de hembra que tenía al lado, sólo siendo gay no le iba a gustar

Me contestó que no era maricón pero que ella era su hermana y no estaba bien que le gustara.

Entonces le pregunté

¿Te has masturbado pensando en las tetas y el culo de tu hermana? Y quiero la verdad o te vuelo los sesos, sé cómo descubrir a un mentiroso y lo volví a patear. La niña sólo lloraba.

Sí , me he masturbado pensado en ella contestó

Yo sonreí y Gaby quedó atónita al escuchar que su hermano la deseaba sexualmente.

Pues entonces es tu día de suerte cabrón, exclamé

Era el momento de empezar la acción, saqué la cámara de video y les dije:

  • vamos a ver si son buenos actores y vamos a rodar una película muy entretenida.

Se miraron entre sí sin saber a qué me refería, pero temían lo peor.

Les ordené que se besaran apasionadamente, la niña se negó, dijo que eso no lo iba a hacer, así que simplemente saqué el revólver y le apunté a su hermano, ella reaccionó y dijo que aceptaba.

Les volví a decir que se besaran al lado de la cama como si fueran novios y se fueran quitando la ropa, dudaron pero poco a poco acercaron su cuerpos hasta que sus labios se tocaron, pero no avanzaban de ahí, así que me acerqué y le di 3 golpes a Adrián y ella me rogó que no lo golpeara más que iba a colaborar pero que no lo golpeara más. El chaval se recuperó y les dije, que esa era la última advertencia que a la próxima lo mataría y a ella la violaría y mataría también.

Asustados porque sabían que hablaba en serio se besaron primero tiernamente y luego apasionadamente, lengua con lengua durante un largo rato, le ordené a Adrián que la siguiera besando y a la vez la tocara poco a poco, desde sus pechos hasta su culo, él acató la orden y ella se dejó tocar. Mi siguiente orden fue que se siguieran besando y empezaran a quitarse la ropa, dudaron un poco pero lo hicieron, ella se quitó la blusa y él la camisa, se besaron un rato más y Gaby procedió a quitarse el braseare dejando a la vista los 2 pechos más hermoso que haya visto, redonditos con el pezón rosadito a punto de reventar.

Les ordené que se acostaran en la cama se besaran y que poco a poco Adrián fuera bajando hasta llegar a sus pechos, lo cual creo que gustoso lo hizo, le besó y mamó los pechos durante varios minutos, a ella le ordené metiera la mano por debajo del pantalón de su hermano, ella con vergüenza lo hizo y le tocó el pene ya Adrián sin decirle nada también empezó a meterle mano por debajo de la falda, al cabo de 10 minutos les dije que se quitaran el resto de la ropa, Gaby siempre sonrojada lo hizo, enseñando una piernas torneadas por el ejercicio y un calzoncito con dibujitos, el cual ordené a su hermano que le quitara para dejar expuesta una apetecible panochita virgen, con poco pelo, debo decir que yo estaba al máximo de mi excitación y estuve apunto de quitar a ese inútil del hermano para tomar yo su lugar, pero esto arruinaría mis planes.

El espectáculo que brindaban era increíble, así que le dije a Adrián que le chupara la panochita a su hermana y a ella le ordené que gimiera un poco, lo cual le costó hacer pero lo intentó con grititos ahogados, él le chupaba toda la vagina e intentaba meterle la lengua lo más que podía, le dije que le chupara el ano, él hizo mala cara pero lo hizo, ella al sentir una lengua en su esfínter brincó y se ruborizó al máximo, sin duda estaba cerca del orgasmo, su hermano le mamó el clítoris un rato más hasta que ella explotó en un sonoro orgasmo que intentó callar pero su cuerpo la traicionó. Estaba lista para ser desvirgada, y le dije:

-¿Quién quieres que desvirgue tu hermano o yo?

Ella llorando no sabía qué contestar pero volvió a ver a su hermano, así que le ordené a Adrián que la penetrara profundamente, el sin duda quería hacerlo pero sabía que lo que iba a hacer estaba mal y se negaba a penetrarla, por lo que le dije:

Si no se la metes ya se la meto yo por el culo, ya ella escogió, siempre la has deseado y hasta te masturbas con su imagen así que es ahora o nunca… o es que sos un maricón?

Adrian la miró a los ojos, no lo pensó 2 veces y le fue clavando su herramienta (que era más bien pequeña) poco a poco hasta llegar al final, ella se quejó del dolor pero supo aguantar, inmediatamente le ordené al chaval que se la sacara y quedó un rastro de sangre como testimonio de el himen de Gaby ya no existía más. Él la volvió a penetrar unos instantes más, ella se quejaba del dolor pero el la empezó a embestir como loco y como también era un inexperto se corrió dentro rápidamente, se quedaron abrazados unos instantes hasta que se les enfrió la sangre al escucharme decir que ahora era mi turno.

Ya había conseguido el material suficiente para chantajearlas y evitar que me denunciaran, procedí a amarrar al inútil de Adrián y quedaba así Gaby a mi entera disposición, la quería disfrutar al máximo y no quería rastros del hermano en ella, la llevé al baño y me desnudé, ella se asustó al verme porque era más musculoso y con una verga más grande y gruesa que la de su hermano, empezó a rogarme que no le hiciera daño, que no me iba denunciar, que no la tocara pero sus súplicas no hacían más que excitarme al máximo. La metí a la ducha y empecé a bañarla, la tocaba por todo su cuerpo, me detuve bastante tiempo enjuagando su panochita y su culito, ella sólo lloraba, por lo que le dije:

Sé que te ha gustado, entonces por qué lloras?

Me dijo que yo era un maldito, que ella no quería que su primera vez fuera así. Le dije lo siento pero estás demasiado rica y no puedo dejar pasar una oportunidad así, pero que se preparara porque la iba a hacer gozar los mejores orgasmos que se podía imaginar.

La llevé entonces a la cama, al frente de donde estaba su hermano para que éste observara cómo se coge de verdad a una mujer. La empecé a besar pero ella se resistió, lo que me obligó a golpear al hermano de nuevo, ella resignada me respondió el beso, fue como besar la gloria, la estuve besando un buen rato mientras le metía mano por todo su cuerpo desnudo, seguí besándole el cuello hasta llegar a sus pezones los cuales estaban excitadísimos, los besé, chupé y mordí hasta hacerla quejarse, le toqué la panochita y estaba mojada, sin duda mis caricias habían surtido efecto. Le hice acostarse en la cama y le ordené que abriera las piernas al máximo

-Así se come un coño, maricón- pronuncié mirando a Adrián.

Y comencé un delicado trabajo en tan deliciosa zona, le chupe el clítoris mientras le masajeaba sus pezones, subía mi lengua de arriba abajo, me tragué todo el néctar que produjo, le metí los dedos hasta donde alcanzaba y la obligué a chuparlos para que ella también los saboreara, le mordí el clítoris y la acariciaba hasta que tensó su cuerpo y convulsionó en un estruendoso orgasmo que no pudo disimular, gran cantidad de jugos, me indicaron que había tenido el mejor orgasmo al punto de que le costó volver a su realidad, estaba siendo ultrajada pero había sentido el mayor placer de su vida.

Le indique que se levantara y se arrodillara frente a mí, lo hizo con recelo, le quedaba mi verga en su máximo potencial apuntado a su cara angelical y sin pensarlo le dije que se la metiera en la boca y me hiciera una buena mamada si no quería que algo malo le pasara a su hermano, lo pensó unos instantes pero no tenía más remedio, abrió sus carnosos labios y engulló mi miembro hasta la mitad, le dieron arcadas pero aguantó, casi me corro al saber que era la primera vez que una verga entraba en esa boquita. Le ordené que me la chupara pero no sabía cómo hacerlo, en un par de ocasiones me la mordió por su inexperiencia pero eso me excitaba aún más. Poco a poco fue haciéndolo mejor y le daba chupetazos -será una excelente mamadora- Pensé.

Luego de 10 minutos de la más excitante mamada que me han hecho (y no son pocas) le dije que parara y se acostara en la cama de nuevo, ella con la mandíbula que le dolía por abrir tanto la boca obedeció mansamente mis órdenes, le chupé de nuevo sus pechos y su panochita hasta dejarla empapada de nuevo porque quería que gozara al máximo, la acomodé en la posición de misionero y la penetré de golpe, ella gritó, así que me quedé en esa posición hasta que se le pasara el dolor y procedí a cogerla como se merece, a veces despacio a ratos rápido hasta que se excitó de nuevo y alcanzó de nuevo el éxtasis, aguanté porque quería seguir disfrutando de ese maravilloso cuerpo. Cambié de posición, me acosté boca arriba y le dije que se empalara, acción que hizo de forma magistral, se agachó hasta recibir toda mi tranca en su interior y le dije que era su turno que se moviera y me hiciera gozar, al inicio lo hizo despacio y con vergüenza porque su hermano la observaba pero fue aumentando el ritmo hasta convertirse en un vaivén maravilloso que me hizo llenarle todo su interior de grandes chorros de semen.

Quedamos exhaustos y volví a ver a su hermano, quién tenía una gran erección, detalle que le hice ver a Gaby

Mira cómo has excitado a tu hermano, estoy seguro que te quiere coger nuevo- le dije

Ella estaba enojada y ruborizada a la vez, yo en cambio quería gozar de nuevo de ése cuerpo, desaté al hermano y lo obligué a chuparle la vagina de nuevo a Gaby, hasta que se excitara de nuevo mientras ella me chupaba la verga, cuando estuve a punto de nuevo, amarré a Adrián y a Gaby la puse en posición de perrito, con su culote en pompa, la penetré desde atrás con fuerza, hasta que sus nalgas sonaban fuertemente al chocar con mis huevos y aprovechaba para tocarle su huequito menor, le introducía un poco de mi dedo meñique en cada embestida hasta que explote en un nuevo orgasmo, quería encularla pero decidí dejarlo para otra ocasión.

Luego me la cogí 2 veces más y para terminar los obligué a hacerlo de nuevo, ella le mamó la verga a su hermano y éste la penetró en varias posiciones, en cada acción obligué a Gaby a pedirlo con fuerza y que mencionara que eran hermano para que en el video se viera como una gran puta. Una vez terminada mi labor les advertí que no denunciaran la violación a la policía porque si lo hacían iba a divulgar el video por internet y se los enviaría a todos sus amigos para que fueran espectadores del incesto que acababan de cometer, además de que en el interior de Gaby había tanto semen mío como de su hermano... Tomé mi botín y me fui.