Como tuve una aventura con mi sobrina

Esta es una historia real y no inventada. En una ocasión en que me mandaron de mi trabajo a laborar a la Ciudad de Campeche, para ahorrarme los viáticos, me hospede en casa de mi cuñada, me recibieron en forma correcta y me dieron una habitación para mi solo. Así que muchas veces llegaba temprano a la casa y solamente encontraba a mis dos sobrinas solas y sin que sus padres estuvieran ahí. En una ocasión llegue y solamente estaba mi sobrina AnaKaren haciendo su tarea en la mesa del comedor. Así mucho calor, tenia su uniforme de la secundaria y en la forma en que estaba sentada se le observaba parte de las piernas, ya que no se sentaba en forma muy femenina que digamos; ella tiene 15 años, delgada, un poco alta para su edad ya que mide 1.78 de estatura, con un trasero y tetas en pleno desarrollo.

Así que viendo eso, y siendo muy caliento yo, (ya tengo 47 años y sigo de caliente) pues me empecé a calentar mentalmente y a imaginarme sus nalgas y sus tetas. Ella no se dio cuenta de lo que tenia en mente. Después de un rato, me digo: tío ya acabe mi tarea y tengo mucho calor, me voy a bañar.

Lógicamente le conteste que si que no había problema. Ella se metió al baño y yo me dirigí a mi recamara, me quite la ropa, me acosté en la cama y comencé a masturbarme, mientras tenia la erección, comencé a pensar como se vería mi sobrina desnuda, me imaginaba como seria besarle sus pechos y su clítoris. Cuando ya tenia la verga bien parada, me la toque y comenzó mi masturbación, me imaginaba que le metía mi pené y se quejaba pero me pedía más y más. Cuando me acercaba al clímax, paraba la masturbación para que no me viniera rápido. Cuando estaba en estos menesteres, alcancé a haber de reojo que mi sobrina me veía desde la puerta, estado yo tan caliente no me importo y solamente me agarraba la verga y se la mostraba en todo su esplendor, moviéndola de un lado para el otro. Ella había salido del baño con una toalla amarrada a su cuerpo. De un momento a otro, entro a la habitación y me dijo:

-¿Qué estas haciendo tío? Me pregunto acercándose a la cama y sin dejar de mirarme el pené.

-Pues masturbándome hija.

Ella no dijo nada y seguía viéndome, yo ya no aguantaba, al estar en esa escena, pero no quería venirme. Mi verga se ponía cada ves más dura.

• Hay tío nunca había visto algo igual

-En serio hijita.

-Si tío. Me contestó al mismo tiempo que se sentó a un lado. Eso me calentó aun más y me anime a decirle, te gusta lo que estas viendo. Ella me digo que algunas de sus amigas le habían platicado que los hombres tenían algo entre las piernas pero que nunca había pensado que fuera algo así de grande. La invite a que lo tocara y sin pensarlo AnaKaren, lo tomo con su mano derecha y yo sentí la gloria, le dije que lo apretara y me contesto que bonito lo tenia, lo sentía suavecito, grande, duro y caliente. Mientras lo hacia le comencé a tocar sus piernas que eran delgadas y se dejo hacerlo, ya que estaba bien caliente, ya que siendo blanca su piel estaba un poco roja y notaba que se comenzaba a estar caliente.

Poco a poco le quite la toalla y vi unos pechos pequeños con sus pezones duros y unos pelitos entre sus piernas, entonces le dije a mi sobrina que me subiera y bajara su mano por mi verga, ella acepto y me empezó a masturbar. Entonces me confeso que una ves había cachado a sus padres en la cama, que su mamá le estaba chupando el palo a su papá, eso me animo y le dije que si le gustaría intentarlo, se me quedo viendo y se rió un poco, pero poco a poco se inclino y comenzó primero a besarme la cabecita y después se comió toda mi verga me la chupaba como chupaba una paleta, mientras la obligue a abrirse de piernas y le comencé a tocar su clítoris, ella se dejo. Al cabo de unos minutos se detuvo y me dijo, hay tío que rica verga tienes y te sabe bien rico, nunca pensé que supiera tan rico chapártela, con razón siempre mi mamá se la chupa a mi papá y volvió a inclinarse a seguírmela mamando.

Después le dije que se detuviera la invite a que se acostara a mi lado y la comencé a besar en la boca mientras le sobaza las nalgas, Ella me respondía a los besos, después baje y le chupe los pezones ahí comenzó a quejarse y a decirme que estaba bien caliente baje más y le abrí sus piernas y le comencé a mamar su clítoris ella se dejo y al mismo tiempo me volvió a tomar la verga y a mamarla con gran placer. Así estuvimos como unos 5 o 10 minutos, Ana Karen se vino como unas 2 veces. Después le dije que si quería coger y ella acepto.

Pero en otra ocasión se los cuentos, ya que estoy bien caliente y en estos momentos quiero irme a la cama y cogerme a la tía de Ana Karen, o sea a mi esposa, solamente de pensar como le enseñe a mi sobrina a disfrutar la verga.