Como nos convertimos en amantes (1)

al ver mis pezones su mano acaricio mi busto lo que provoco que mi cosita se comenzara a mojar, tenia mucho tiempo sin cojer y a mi jefe le tenia muchas ganas. Sin pensarmelo dos veces lo tome por el cuello y lo bese apasionadamente.

El, mucho mayor que yo, para ser exactos 36 anos, gerente de ventas y con mucha experiencia, aunque tenia un pequeno defecto: era casado con dos ninos. Yo una cordinadora de ventas, recien egresada de la universidad con 21 anos y muchas ganas de conocer el mundo. Esta de mas decir que soy de buen ver y que si eres joven y guapa, se te abren las puertas muy facilmente.

Y claro esta tambien que cuando eres joven muchos te quieren abrir las piernas y vaciarse dentro de ti. No me pregunten como nos enrollamos lo que si recuerdo es que fue en viaje de negocios. Primero fuimos a hacer tratos y cerrar negocios con los clientes en un restaurante bastante elegante, motivo por el cual decidi vestirme lo mas sexy y provocativa para que los clientes no pudieran decirnos que no.

Mi vestimenta consistia en un vestido negro escotado que dejaba ver la mitad de mis hermosos y firmes senos y un poco transparente por lo que se podia apreciar el hilo de mi tanga, zapatos de tacon plateados y un bolso y joyeria que hacian juego. El, como siempre de un traje gris oxford que ponia a volar mi imaginacion. La cena transcurrio sin ningun imprevisto, el cliente fascinado conmigo tratando de ligarme y yo dejandome ligar. Pero mi objetivo no era el cliente sino mi jefe. Y tenia que aprovechar ese viaje.

Aunque si lo confienso mi jefe no me era indiferente, cuando me llamaba para tratar algo relacionado con el trabajo, a veces me tomaba de la mano, me hablaba muy suavemente y en dos que tres ocasiones llego a rozar su pene contra mi trasero, claro esta segun el, como un accidente.

Despues de la cena, los clientes nos dejaron en el hotel. Cuando se retiraron mi jefe en el lobby me abrazo y me dio un beso en la boca, me pidio que fueramos al bar a tomar algo y luego nos iriamos a dormir. Una vez en el bar nos sentamos en una mesa apartada de todo, el comenzo hablar sobre la cena pero yo no le ponia atencion, estaba pensando en el beso que me dio antes y al recordarlo no pude evitar sentir un escalofrio por el cual mis pezones se erectaron, cosa que èl se percato.

Como estabamos en una esquina, al ver mis pezones su mano acaricio mi busto lo que provoco que mi cosita se comenzara a mojar, tenia mucho tiempo sin cojer y a mi jefe le tenia muchas ganas. Sin pensarmelo dos veces lo tome por el cuello y lo bese apasionadamente, introduci mi lengua poco a poco, se abria paso hasta encontrar la suya hasta que por fin, me respondio el tan ansiado beso.

Mientras sus manos habian sacado uno de mis senos del vestido y lo pellizcaba con fuerza. No podia quedarme atras asi que deslice mi mano hacia su herramienta y cual fue mi sorpresa! Estaba a punto de reventar. Ya no podia mas, ( y eso que apenas habiamos empezado ) necesitaba sentirlo dentro de mi… empece a sobar su herramienta por encima del pantalon hasta que el me suplico que fueramos a su habitacion.

Lo habia conseguido… me iba a acostar con mi jefe. En el ascensor, continuamos besandonos y cada vez nuestras caricias eran mas fuertes. Yo le ofrecia mi cuerpo, le pegaba mis senos y mi sexo contra su sexo. Por fin llegamos a su habitacion. Comenze por quitarle la corbata y el saco. Iba desabrochando poco a poco su camisa y cinturon. Mientras el hacia muy bien su trabajo sin yo darme cuenta, el cierre de mi vestido estaba completamente abajo solo faltaba que yo sacara los brazos para que se delizase hacia abajo y quedar solamente con mi tanga.

Al verme el con tanga, no lo pudo evitar se avalanzo hacia mi.. no paraba de besarme de tocarme recorrio cada centimetro de mi cuerpo hasta que su mano se poso en mi sexo por encima de mi tanga, pero estaba tan mojada que el solo atino a decir: pero si estas mojadisima!!!! Y finalmente lo que yo habia deseado desde hacia tiempo me despojo de mi tanga y me miro detenidamente (les he de decir que me depilo) puso uno de sus dedos sobre mi clitoris y comenzo a masajearlo.

Lo hacia con tanta suavidad y una forma muy delicada. Sin pensarlo dos veces lo tumbe en la cama y lo desnude. Y sin pensarmelo tome su hermosa verga entre mis manos y la introduci en mi boca, succionaba su glande y mi lengua jugaba con su delicado agujerito, con mi otra mano jugaba con sus huevos y mi boquita seguia haciendo su trabajo, subia y bajaba, lo metia por completo para que sintiera la humedad de mi boca. Pero el todavia no habia hecho lo que yo queria.

No dude ni un segundo cuando me puse encima de el, mis piernas en sus hombros de modo que mi sexo estaba a la altura de su boca, por un momento me miro, penso y luego me respondio que nunca hacia sexo oral. Senti tristeza porque pense que no lo haria pero no tuvo otra opcion pues le dije que si queria penetrarme tenia que besarme. Lo hice que se tragara todos mis jugos, le ensene a poner su lengua en mi entrada vaginal.

Poco a poco fue adaptandose a mi, me tumbo en la cama y se dispuso a hacerme el mejor sexo oral que he tenido en mi vida. Su lengua entraba y salia mientras su dedo indice hacia circulos sobre mi clitoris que estaba mas que erecto. Mi flujo era demasiado, pero el lo tragaba, parecia que se habia vuelto loco hasta que logro darme mi primer orgasmo. Recibio mi juguito vaginal en la boca y se lo trago sin decir nada.

Pero aun faltaba lo mejor: la penetracion. Una vez que me recupere, aun mojada me subi en el, su verga estaba en tal estado de ereccion que de haber cogido en ese instante hubiera explotado. Me avalance sobre su verga y en menos de lo imagina me la ensarte hasta lo mas profundo provocando un gemido en ambos, era delicioso, sentia su verga dentro de mi, comence a moverme muy rico, su pelvis frotaba mi clitoris y no tarde en tener otros dos orgasmos. El sin embargo, aguantaba y bien.

Me puso de a perrito y me pregunto si me gustaba asi. Le respondi que si.. que si no me la metia en ese momento me iba a volver a subir asi que pude sentir su garrote atravesandome, me tomaba de las tetas y me la metia con tanta fuerza que comence a sentir las contracciones de mi vagina al mismo tiempo que el se vaciaba en mi. Era tan delicioso sentir su leche caliente invadiendome.

Nos tumbamos en la cama, exhaustos y sudando, me abrazo y me confeso que tenia mucho tiempo pensando en como seria acostarse conmigo. Platicamos un par de cosas sin importancia cuando de nueva cuenta ambos sentimos el deseo de hacernos uno….. pero eso lo dejare para otro relato.

Besos y disfruten del sexo