Como mi mujer conoce la sumisión 8

Ana y yo solíamos comentar lo mucho que me gusto a mi verla a ella dominada por otra mujer y lo mucho que disfruto ella y que a mí me gustaría volver a verla en esa situación pero de momento se quedaba solo en un comentario.

Un día estamos tomando un café con Kati, una amiga nuestra 11 años menor que yo y que trabajo conmigo hasta hace un par de años y con la que yo he tenido algún rollo que otro, hablando de todo un poco Ana le pregunta que piensa de las relaciones amo-sumisa y de los tríos y si le gusta esos temas y nos contesta que nunca se lo ha planteado pero que no cree que dependiendo con quien no tendría problemas y seguimos hablando de otros temas hasta que nos despedimos.

Pasa el tiempo y un día que vengo de trabajar al abrir la puerta de casa me encuentro a Ana desnuda a cuatro patas con el collar de perra, la correa y el plug de cola de perro en el culo, este plug es bastante grande.

Cojo la correa y tiro de ella hacia la cocina , preparo la mesa, me bajo los pantalones y calzoncillos y me pongo a comer mientras Ana se mete debajo de la mesa a comerme la polla mientras como.

De pronto aparece Kati en la puerta de la cocina vestida con unas botas por encima de la rodilla y un bodi de cuero y le pega con la fusta a Ana en el culo, yo pego un bote y instintivamente me intento tapar con las manos.

Kati: Perra que haces aquí, llevo un rato esperándote en la sala.

Yo: ¿Qué coño haces tú aquí y vestida así?.

Kati y Ana se empiezan a reír y me cuentan que un día Ana la llamo para tomar algo y hablar y le cuenta los gustos que tenemos, le cuenta alguna de las cosas que habíamos hecho y como disfrutábamos  y que tenemos ganas de que otra mujer se uniese para ejercer de ama suya por lo menos una vez y luego ya veríamos, luego le pregunto si no le apetecería ser ella , dicen que estuvo un rato pensándolo y que luego accedió para probar, pero con una condición.

Yo: Una condición, ¿Qué condición?

Kati: Pues si voy a hacer de ama junto contigo que sepa que vamos a follar delante de ella mientras ella mira como una perra sin hacer nada.

Yo: ¿Y tú has accedidito sabiendo que me voy a acostar  con ella?

Ana: Por supuesto, porque sé que voy a seguir siendo tu mujer y tú me vas a seguir queriendo.

Yo: Como no voy a querer a una mujer así.

Kati: A llegado la hora de jugar con ella, tu acaba de comer mientras yo la preparo, y tu perra saca todos los juguetes que tengas.

Y se van para la sala mientras acabo de comer y me avisan, cuando voy para la sala me encuentro a Ana de pie doblada hacia delante, apoyando la tripa sobre el respaldo de una silla con las manos atadas al radiador y las piernas abiertas atadas a las patas de la silla.

Yo: Menuda vista más bonita.

Y le sacudo en el culo con la mano.

Kati: Tu siéntate y déjame a mí.

La empieza a pegar con la fusta en el culo, la espalda, tetas y de vez en cuando en el coño, Ana con cada golpe pegaba un pequeño grito.

Kati: Me estoy cansando de tus gritos.

Y le pone una mordaza de bola en la boca.

Kati: ¿Para qué son estos juguetes?

Yo: Esos son para el culo, ese es un plug de joya, ese de cola de caballo, ese otro de cola de zorro, eso son pinzas para las tetas, esas tienen cascabeles y esa otra pinza une las tetas con los labios del coño, eso es un huevo vibrador y eso unas bolas chinas, esos son bocados para la boca, eso es una paleta para pegarle en el culo.

Kati miraba todo un poco sorprendida y cogiendo las pinzas con cascabel se las puso a Ana para luego pegarle en el culo con las paleta y así hacer sonar los cascabeles, coge el huevo y se lo mete poniéndolo a tope, la suelta y le quita las pinzas de cascabeles para ponerle las que se unen con pinzas al coño y luego tira de la cadena para acercarla hasta mi.

Kati: Mira a tu amo porque me lo voy a follar mientras tú me chupas el culo.

Kati se empieza a quitar el bodi enseñando las buenas tetas que tiene, se acaba de quitarlo dándome la espalda y enseñándome el culo en pompa, le quito el bozal.

Yo: Empieza a chuparle el agujero del culo y Ana empieza a chuparle el culo mientras yo juego con sus tetas, pasa un rato cuando Kati se sienta abierta de patas y nos enseña el coño que esta sin depilar, solo arreglado.

Kati: Nunca pensé que le diría esto a otra chica, perra cómeme el coño.

Ana se lo va comiendo mientras yo le saco el plug del culo y empiezo a metérsela  dándole por el culo un rato, al cabo de un rato.

Kati: Aparta puta que voy a follar con tu amo mientras tu te masturbas en el suelo.

Me pongo a follar con Kati mientras le como las tetas y le pego algunos mordisquitos en los pezones, la doy la vuelta poniéndola a cuatro patas y follándomela por detrás dándole de vez en cuando alguna nalgada, cuando estoy a punto de correrme se la saco le digo que se de la vuelta y me corro encima de sus tetas.

Yo: Perra límpiame la polla y luego le limpias el coño a ella.

Ana obedece y me la limpia con la lengua y luego continua con Kati, al acabar nos empezamos a vestir.

Kati: Pues al final me ha gustado esto, si tenéis pensado seguir así podéis contar conmigo, que bien que me lo voy a pasar.

Yo: Pues claro que vamos a seguir pero con una condición.

Kati: ¿Qué condición?

Yo: Pues que Ana seguirá siendo tu sumisa pero tu también lo vas a ser mía, por lo que seremos yo el amo tu mi esclava y ella nuestra perrita.

Kati estuvo pensándolo un rato y luego accedió.

Yo : Vale, para la próxima vez no quiero verte ningún pelo en el coño, a mi me gustan depilado del todo y suave.

Cuando hemos descansado un poco me dice Ana que tengo que ir a por la niña a particular porque hoy me toca a mi llevarla al entrenamiento, y yo me quedo con cara de tonto pensando que voy a tener que empezar a hacer ejercicio para poder aguantar,

Aquí se acaba esta historia, mas adelante os contare mas.