Cómo me follé a mi tierna vecina

Su joven mirada suele darme los buenos días cada vez que nos cruzamos en el portal, apenas tendrá dieciseisy es la chica más morbosa que he conocido. Suele llevar una trenza marrón que le acaba en sus descomunales pechos, redondos y blancos, al igual que su inocente cara de sonrojadas mejillas y azulados ojos. Bajita de estatura, cintura estrecha y un culo respingón en el que se intuye dureza cada vez que lo viste con vaqueros ajustados.

Llevamos toda la vida siendo vecinos, aún recuerdo cuando era apenas una cría y solía hacerle carantoñas cuando coincidíamos en el ascensor. Su madre murió cuando ella era joven y su padre, militar de profesión, suele ausentarse una vez al mes en alguna misión, lo que la ha hecho madurar con bastante rapidez. Cómo ha cambiado la situación. Ahora, cada vez que coincidimos, es todo tensión. Noto cómo se sonroja y me mira intimidada en esos silencios incómodos en el elevador, le suelo preguntar qué tal los estudios y su vida en general, conversaciones triviales en las que yo me encuentro muy cómodo porque me sigue pareciendo la misma niña de siempre, a pesar de que cada vez que coincido con ella entro en mi casa con una poderosa erección; conversaciones en las que ella se suele trabar, porque nota una fuerte electricidad entre ambos, incluso siento cómo se le humedece el coño en ese espacio reducido del ascensor que solemos compartir. Se produce un calor extraño cada vez que estamos juntos en ese habitáculo, como si se transpirara sexo.

En el día de ayer, cuando volvía del trabajo y ella del instituto, volvimos a coincidir en el ascensor. "Hola" la saludé con una media sonrisa, "hola" dijo ella tímidamente, como siempre. Este día estaba más cachondo que de normal, era verano y hacía un calor sofocante, y para colmo nada más verla mi polla se había puesto como una piedra. La conversación fluyó como de costumbre, pero esta vez me apetecía hablarle de otro tema:

-¿Y que tal los chicos? seguro que tienes un montón de pretendientes

-(Se sonroja al instante) Bueno...

-Vamos ya no eres una cría, podemos hablar de estas cosas, ni que no me conocieras jajaja que ya son muchos años!

-Ya... jeje, la verdad es que tenía novio pero justo ayer lo dejamos...

-No me digas, ese chico no sabía lo que tenía...

(En este momento me mira sorprendida, no sé por qué había dicho eso, parecía que poco a poco mi polla se adueñaba de mi cerebro y hablaba por mí. Nos miramos en silencio durante unos segundos, yo mantuve la tensión, hasta que rompí el hielo)

-Verás, los chicos de hoy en día no saben lo que quieren, son unos inútiles que tienen miedo de todo (me acerco a ella, nunca habíamos estado tan cerca, ella no me aparta la mirada y está roja como un tomate, parece intimidada, pero en ningún momento se aparta) Tú eres una chica muy madura para tu edad... además, tienes unos ojos preciosos (le acaricio levemente la mejilla, a ella le brillan los ojos como nunca) y un cuerpo de infarto, (bajo la mano y le acaricio despacito por los hombros y la cintura)

Justo en ese momento llegamos al piso, me separo repentinamente de ella y le abro la puerta, ella se queda unos segundos inmóvil, como en shock, hasta que reacciona y pasa sin dirigirme la mirada. Cada uno entramos a nuestra casa sin despedirnos. Mi polla iba a agujerear el pantalón, y estoy seguro de que lo primero que hizo ella nada más llegar a casa fue masturbarse, al igual que yo. Fue extraño, nunca había tenido tanto valor para dirigirme así a mi vecina, quizás el saber que su padre estaba en una de sus habituales misiones, me daba más confianza en este aspecto, no podía recibir ningún tipo de reprimenda, sé que a ella le pongo tanto como ella a mí, pero siempre había tenido la duda de que su mentalidad de niña de dieciocho años la echara para atrás.

Esta mañana llevaba todo el día pensando en la conversación que tuvimos ayer, y cuando entré al portal, ahí estaba ella, esperando el ascensor. LLevaba unos shorts vaqueros muy cortos, en los que se intuían perfectamente los mofletes de sus glúteos, tersos y firmes. También llevaba una camiseta roja de tirantes, con un escote del que brotaban sus enormes y perfectas tetas de piel blanca, acariciadas por su trenza marrón. Madre mía.

-Qué suerte, por poco pierdo el ascensor (digo mientras entro y ella me sujeta la puerta) gracias

(Ella se mostraba sonriente, no parecía muy afectada por lo de ayer, hubo un silencio en los primeros segundos pero en seguida rompí el hielo como de costumbre)

-Qué calor está haciendo estos días (fue lo primero que se me ocurrió al verle su brutal escote y su trasero perfecto)

-Pufff pues si... (se acaricia el pelo, parece menos rígida que otras ocasiones)

-Y más en sitios como éste, así pequeños y cerrados, a veces parece que cueste respirar...

-Si (me sonríe y me mira directamente a los ojos) yo en seguida me pongo a sudar con estos calores

-Sí jeje, yo siempre acabo con la ropa empapada, es una lata que haga tanto calor, además hay situaciones que no ayudan 8guau, no sé por qué dije esto último, definitivamente mi polla se había adueñado de mis pensamientos)

-(Ella se limitó a sonreír, pero noté cómo bajaba su mirada hasta toparse con mi polla erecta, que sin duda se marcaba bajo mis vaqueros, 20cm de carne endurecida y caliente, yo hacía como que miraba a otro sitio, pero pude apreciar perfectamente cómo sus ojos permanecían clavados en mi paquete, como hipnotizada)

-Ya hemos llegado (abrí la puerta del ascensor y ella hizo un aspaviento, salida de su fantasía con mi polla. Había tenido novio así que deduje que no era una total inexperta en temas sexuales)

-Ah por cierto (le dije antes de entrar a mi casa) como me dijiste que has cortado con tu novio... si necesitas algo, hablar, lo que sea, ya que no está tu padre puedes decírmelo a mi, quizás sepa ayudarte, al fin y al cabo te conozco desde que eras una niña (la sonreí cómplicemente. Definitivamente quería follármela, mi polla rugia dentro de mi pantalón y no podía hacerla callar.)

-Bueno la verdad es que lo dejé yo, estuve pensando en lo que me dijiste y la verdad es que tienes razón, los tíos de hoy en día no valen para nada... pero estoy bien, aunque ahora que lo dices puedes quedarte a comer si quieres,

-No querría ser una molestia... (por dentro estaba como loco por entrar a su casa y follármela, ni siquiera esperaría a la comida)

-Al contrario, estoy cansada de comer sola cada vez que se va mi padre (sonríe)

-En ese caso de acuerdo, veamos cómo cocina mi vecinita (sonrío y entro a su casa, no sin antes fijarme de nuevo en sus perfectos glúteos, que en mi mente eran ensartados por mi pollón)

Fuimos a la cocina. Ella comenzó a sacar sartenes y material de cocina, yo estaba a su lado ayudándola y haciendo bromas, le hacía rabiar, como cuando era una niña, le hacía cosquillas y sacaba cubiertos y platos a tutiplén. Ella se enfadaba como una niña y simulaba pegarme. En una de estas nos enzarzamos y acabé estampándola contra la nevera.

Nos miramos a los ojos, la tengo sujeta por los brazos y ella no para de mirarme los labios, noto cómo su respiración se acelera. No puedo esperar más, la beso. Ella besa como una loca, me muerde el labio, noto como me respira en la cara, una respiración aceleradísima y caliente, no sé quién de los dos estaba más cachondo. Por fin, me estaba dando el lote con mi vecina. Ella me agarra el culo y aprieta mi polla contra su vientre, empieza a gemir y ni siquiera le estoy estimulando el coño.

-Yo ya sé lo que te gusta, seguro que te la has imaginado ya (le cojo la mano y se la aprieto contra mi polla, que se va a salir del pantalón) en el ascensor, cómo la mirabas... eres una niña pero ya eres toda una viciosa, llevas años y años deseando probar mi polla ¿verdad?

-Pufff sí....

-(Yo estaba fuera de mí, descontrolado, jamás había estado tan cachondo. La agarro del cuello y le susurro al oído) Mi polla hay que ganársela, yo ya sé que la quieres sentir dentro de ti, quieres que te llene como nunca...

-Síi... (me interrumpe)

-(La agarro más fuerte del cuello) Poco a poco zorrita, si quieres mi polla vas a tener que complacerme

-Haré lo que me pidas....

-Agáchate, vamos

-(Se agacha al instante)

-(Me desnudo por completo, ella contempla mi polla como un perro esperando la comida, puedo ver el deseo animal en sus ojos)

-¿Quieres esto eh, lo quieres? (Le restriego mi polla durisima por su cara, ella abre la boca esperando que se la meta ahí pero yo lo evito) pues chúpame el culo, vamos (me doy la vuelta)

-(Ella no duda ni un segundo, lo que me pone aún más cachondo, y mete su cara entre mis dos glúetos para empezar a lengüetearme el ano, mueve su lengua con movimientos ágiles y noto su respiración de gatita en mi trasero)

Cada vez lo hace con más ganas, a lo que yo la alento: Sigue así, ¿ves que guarrita eres? como te gusta chuparme el culo, eres todo vicio, qué diria tu padre si te viera, vamos, chupa, succioname el ano, quiero que me dejes el culo lleno de saliva.

Ella le pone más y más énfasis, oigo como me succiona el ano, cómo lame su propia saliva sobre mi piel, incluso llega a morderme el glúteo y a agarrármelos con ambas manos. Está cachonda perdida.

-Lo has hecho muy bien, toma, te la has ganado

Sin darle tiempo a reaccionar, le meto mi polla en su boca de golpe. No iba a dejar que me la chupara, me iba a follar su boca.

-Uff me encanta sentir el roce de tus labios sobre mi polla... vamos eso es... haz que resbale con tu saliva (empiezo a percutir su boca con mi pene, primero suavemente, y voy acelerando el tirmo y metiéndosela cada vez más profunda, hasta que empieza a emitir ruidos guturales. A cada rato dejo que descanse y se la saco)

-Vamos putilla coge aire que ahora te la voy a meter hasta el fondo

-Me encanta como sabe tu polla

-Mirame a los ojos, vamos dilo otra vez y mirame a los ojos

-(Me mira con esos ojitos azules, totalmente sumisa, roja y sudando por estar metiéndosela y sacándosela de la boca) Me encanta como sabe tu polla

-Ohh si, seguro que te encanta, vamos que está cogiendo frío (se la vuelvo a meter y esta vez soy mucho más agresivo, la agarro del pelo y literalmente empiezo a follarme su boca, le dan arcadas pero sigo. Le estoy metiendo más de la mitad y le obligo a mirarme a los ojos mientras lo hago, veo como sus ojos se enrojecen, seguro que nota mi polla en sus retinas) ¿te gusta sentir el calor de mi polla en tu garganta eh putita mia? vamos, ahora te la voy a meter hasta el fondo.

Poco a poco se la voy metiendo hasta la garganta, quiero que se meta mis 20cm. Ella cierra los ojos con fuerza pero en ningún momento se resiste, hasta que se la consigo meter entera y mis huevos cuelgan por debajo de su labio inferior. Se la saco de golpe y ella emite un fuerte gemido y vuelve a recobrar el aliento impulsivamente.

Sin mediar palabra, la pongo fe pie y le arranco la camieta y el sujetador. Joder, menudas tetas, eran enormes y tenían los pezones grandes y redondos, sonrosados como sus mofletes. Comienzo a comérselas impulsivamente, siempre había querido tocar esas preciosas tetas y ahora las tenía en mi boca mientras ella gemía de placer. Con una mano comienzo a estimularle el coño por fuera del short, lo tenía completamente empapado, se le había quedado la ropa interior pegada.

Voy bajando y le quito con fuerza los shorts. Veo que lleva un tanguita blanco de lo más sugerente. No puedo esperar más, quiero ver ese culo, ese culito con el que tanto he fantaseado, esos glúteos firmes que tantas veces han sido protagonistas de mis pajas. Le doy la vuelta y la estampo contra la nevera inmovilizándola con un brazo en su espalda, me retiro unos centímetros y veo ese culo, ese precioso culo, más bonito incluso que en mis fantasías, no puedo evitar soltar un "ohhh" de puro vicio al pensar que lo iba a reventar.

La agarro de pel por detrás y me acerco a su oído:

-Mucho tiempo esperando este momento putita mia, mucho tiempo... hoy eres mia y solo mia, te voy a violar como nunca antes lo han hecho

-Sii follame, soy tu putita

La doy la vuelta, le doy un tirón al mantel e la mesa de la comida cayéndose a suelo todo lo que había encima, y cogiéndola en volandas la tumbo encima de la mesa en apenas unos segundos. En ese momento era un animal.

Le arranco el tanga rompiéndoselo, cada respiración de ella se convierte en un gemido, sin decirle apenas nada, se abre de piernas, y veo como sus ingles están completamente bañadas en lubricación y flujo. Le empiezo a acariciar suavemente el chochito y me acerco a unos pocos centímetros de su cara.

-Ohh, que pasa, ¿te cuesta respirar? aqui abajo tienes una piscina, ¿quieres que te la meta?

-Siii metemela por Dios!

Le empiezo a acariciar el clítoris y los labios del coño, mi mano en seguida se empapa.

-¿No te basta con un dedito?

-Noo quiero tu polla, dame tu polla grande y dura

-No sé... esto está mal... somso vecinos, eres mas pequeña que yo... (empiezo a jugar con ella, le muerdo el cuello)

-Ohhh (su nivel de excitación es brutal, me agarra del pelo y aparta mi cara de su cuello) por favor metemela te lo ruego, metemela ya

-Eres una viciosa, no te basta con mis dedos tambien quieres mi polla, eres una guarra, pagarias porque te follara. Si quiers que te la meta llamame amo, porque eres i perrita

-Metemela amo

-No te oigo

-Metemela amo!!

-(Le empiezo a restregar la punta de mi enorme polla por la entrada de su coño, sin llegar a metérsela) quiero que se enteren los vecinos, grita mas joder!

-Metemela amoo!!!!

-(Le meto solo la puntita y se la saco rapidamente. Ella comienza a llorar, esta en un estado de excitacion y frustracion bestial)

-¿En que piensas perrita mia?

-En tu polla amo, no dejo de pensar en tu polla caliente

-(En ese momento le meto los 20cm de golpe. Ella se estremece y da un alarido ensordecedor, abre los ojos como platos para despues cerrarlos de golpe, un escalofrio le recorre el cuerpo y le comienzan a temblar las piernas. Noto mis huevos bañados en flujo y al bajar la vista veo que ha dejado la mesa totalmente encharcada. Se había corrido a la primera penetracion)

-Una penetracion me has durado perrita,

-Ahhh amo... ahhhh me voy a morir (sigo percutiendola a un ritmo normal, los dos encima de la mesa de la cocina)

-Chsst ahora ya no quiero que nos oigan los vecinos, si quieres que te siga follando quiero que te calles, que no hagas ningun sonido y que no me apartes la vista de los ojos...

-(Ella me mira fijamente haciendo caso a mis instrucciones pero no puede evitar soltar varios gemidos, a lo que yo paro)

-Conténte perrita mia si no quieres que tu amo deje de follarte

-(Ella se esfuerza, pero varias veces pone los ojos en blanco o se le escapa algun grito orgasmico y tengo que parar. Comienza a emitir gemidos fuertes y no me mantiene la mirada apenas)

-¿Es que no me has oido? vamos perrita, ni se te ocurra correrte, mirame, he dicho que ni se te ocurra correrte!

-(Se vuelve a correr, respira cansada y me mira como una perrilla) Puff no puedo....

-(La cojo en volandas y la estampo contra la pared, ella permanece contra la pared y sujetada a mi espalda mediante sus piernas, comienzo a follarla de pie)

-Has nacido para ser follada por mi, tu coño es un molde de mi polla... oh si... te gusta sentir mi pollon entro de ti eh?

-Me encanta tu enorme polla amo

-Tienes mucho vicio, a saber la de veces que te has imagindo siendo follada por mi, en esta posicion en el ascensor, sucia perrita... que pensarian los vecinos si nos vieran ahora eh? dirian "esa jovencita parecia recatada, sin embargo es una guarra y una viciosa, a la que le encanta la polla de su vecino de en frente"

-(Ella no para de gemir, medio llorando)

En esa misma posición me la llevo al salón y la arrojo contra el sofá como si fuera un saco, la pongo de espaldas y l hunda la cara e un cogín impiediendo que respire. Comienzo a follarmela en esa posicion. De vez en cuando aflojo la presion sobre su cara para que respire un poco. Me vuelve loco su culo rebotando contra mi tripa. Mi polla entra y sale cono si fuera una barra de hierro incandescente en una caja de mantequilla, lo tiene totalmente ecnharcado y cada penetración suena como si estuviera cortando una sandía. Creo que era la sexta vez que se corría.

Ella quita la cabeza del cojín como puede, dice que se ahoga. Me levanto y me la llevo al baño.

-Arrodillate perra

-(Se arrodilla en frente del lavabo. Esta rojisima y no para de jadear. Veo sus enormes tetas con los pezones rojizos e irritados de cuando los he chupado como un caníbal)

-(Le echo agua del lavabo en la cara para que se refresque, y hago que beba de mis manos)

-Que se dice perrita

-Gracias amo

-(La vuelvo a coger en volandas y me la llevo al salón. Era el momento, tenia que follarme a ese culo de una vez por todas. Hoy iba a ser el dia.) Ponte a cuatro patas en el suelo, vamos

-(Lo hace)

-(Le empiezo a follar el coño en esa posicion) No te cansas de que te folle eh perra? (La agarro de pelo y le meto los dedos en la boca, aprovecho para tirar de sus labios mientras ella no puede parar de gemir) vamos dime que eres mi puta dimelo!

-Soy tu puta

-(La abofeteo un par de veces) Más alto!

-¡¡¡Soy tu putaaa!!! (grito como nunca, hasta a mí me sorpendio, creo que nos oyo todo el edificio)

-(Le empiezo a meter un dedo por el culo, lubricandolo con saliva y con flujo de su propio coño. Luego lo saco y se lo meto en la boca, ella lo chupa somo si llevara mermelada) este es tu sabor, el sabor de tu culo y de tu coño, vamos prueba otro poco (le meto un par de dedos mas y repito el procedmiento)

De lo cachonda que esta parece que su ano tambien este lubricando de forma natural, le meto cuatro dedos sin problema mientras me la follo. De pronto, sin decir yo nada me grita:

-Follame el culo amo, quiero que me revientes el culo con tu polla enorme!!

-(Este momento se me quedara grabado de por vida. Por fin iba a follarme al mejor culo que había visto nunca, y encima me lo pedía de esas maneras) Por supueso que te voy a follar el culo, te lo voy a petar perrita, la vas a sentir en tu estomago

Se la meto poco a poco... puff yo estoy a punto de correme, la imagen de esos gluteos perfectos entre mi polla no la olvidare jamas. Comienzo a follarla el culo mientras gime de puro vicio, sus carnes tersas rebotan en mi pelvis, cada vez me la follo mas y mas fuerte, el ruido de su culo rebotando en mi me pone cada vez mas cachondo

-Ahhh duele amo duele

-Callate perrita (le empiezo estimular el coño mientras tanto, para que se olvide del dolor)

Estoy a punto de correrme.

-Vas a sentir mi leche calentita perrita mia, la vas a sentir muy dentro de ti

-Sii quiero sentir tu leche dentro de mi, quiero sentir tu calor

-(En ese momento me corro dentro de su culo y suelto un rugido espectacular. Pasan unos segundos y veo como sale mi semen lentamente de su ano. Me embadurno un dedo con el y se lo meto en la boca, ella lo degsuta mirandome, jamas se me olvidara esa mirada, una mirada de sumision total, la mirada de mi vecina, de la vecina a la que le hacia carantoñas desde que era cria, la vecina con la que mantentia conversaciones triviales en el ascensor plagadas de tension, la vecina con cuyo padre militar tenia una cordial relacion de respeto entre vecinos, la vecina que parecia una niñita pero cualquiera que la viese por la calle pensaba en hacerle todas las cosas que yo la hice, la vecina con la que pronto compartiria polvos esporadicos en el ascensor en vez de conversaciones, la vecina con la que quedaria a escondidas para darla por culo en la escalera sin que nadie se enterara, la vecina que soñaba conmigo y pensaba las veinticuatro horas en mi polla. La mirada de mi perrita.