Como me convertí en cornudo y me gusta

Relato de como me comenzó a gustar ver a mi esposa ser cogida por otros hombres.

Conocí a la que hoy es mi esposa cuando estudiábamos juntos en la universidad, el sexo siempre nos ha fascinado y en esa época era nuestra obsesión. Lo hacíamos casi a diario y en cualquier lugar, en una de esas sesiones de sexo le pedí que me contara como perdió la virginidad, al principio no quería pero luego accedió y me contó su experiencia con un vecino cuando ella tenia trece años me dijo que su vecino estudiaba ingeniería y tenia 20 años y le daba clases de matemáticas.

Me contó que el le gustaba mucho y que siempre se arreglaba para gustarle pero el ni caso le hacía, cierto día cuando ella estaba muy concentrada resolviendo unos problemas que le dejo de tarea, ella no se dio cuenta que tenía las piernas separadas, cuando volteó a preguntarle una duda a su vecino, lo descubrió viendo fijamente entre sus piernas, el se apenó mucho y se sonrojo al principió a ella también le dio mucha pena, pero luego se sintió bien ya que sintió que por primera vez el le prestaba atención.

Antes de ese día ella no se interesaba mucho por el sexo, le daba curiosidad como a todos, pero pensaba que llegaría virgen al matrimonio. Ahora el sexo se convertiría en su herramienta para conquistar a su vecino. Para ella no era cuestión de excitación si no más bien una cuestión de amor.

Comenzó a llevar faldas mas cortas y a sentarse de tal forma que su pantaleta quedara a la vista de su amado, el respondía la veía abiertamente, y un día posó su mano sobre el muslo de mi esposa, ella sintió una electricidad estremecedora recorrer su cuerpo, trataba de mostrarse tranquila. Mientras el subía lentamente su mano, mientras lo hacía le preguntó a mi esposa que si era virgen y ella con voz nerviosa le respondió que si, el siguió subiendo su mano hasta llegar a su vagina y sus dedos frotaban sus labios vaginales por encima de la pantaleta, ella estaba muy caliente y era la primera vez que sentía algo parecido, luego le bajo la pantaleta hasta los tobillos y le metió un dedo lentamente. Después de un rato la recostó sobre la cama y se saco el pene y le pidió a ella que lo tocara, como los dos ya estaban muy calientes el le abrió las piernas y se la dejo ir todita. Ella se vino de inmediato y el un poco después, cuando llego a su casa y se cambió las pantaletas estaban llenas de esperma con sangre.

A ella le encantó el sexo y trataba de tenerlo todo el tiempo con su nuevo amante. Su historia realmente me excitó, mientras ella me narraba los hechos yo imaginaba todo en mi mente, y nunca me había sentido tan caliente.

Le pedí que me platicara todas sus experiencias y poco a poco ella me las fue contando, no podía creer todo lo que había hecho antes de conocerla pero sobre todo no podía creer que me excitara tanto.

A veces yo llegaba a pensar que me inventaba las historias solo para excitarme, ya que había cosas que no podía creer que ella hacía. Después de dos años de novio su familia me tomo mucho cariño y en el verano me invitaron a pasar unas vacaciones en su casa de veraneo en Cuernavaca, éramos sus papas, su hermano casado con su esposa, su otro hermano y sus dos hermanas las dos mayores que ella, en la casa había tres habitaciones, en una se quedaron sus padres, en la otra se quedó su hermano casado y en la otra nos quedamos todos los demás, yo me pude haber quedado en la sala pero como nos pusimos a jugar y a escuchar música sus hermanos me insistieron en quedarme ahí, en el cuarto había solo dos camas y un catre, obviamente me quedé en el catre, mi esposa se quedo con su hermana en una cama y mi cuñado se quedo en la otra con su hermana mayor, no se porque razón pero esa noche tenía insomnio, y ya en la madrugada escuche que la respiración de mi cuñado se aceleraba, entonces lentamente y tratando de no hacer ruido volteé a hacía su cama, como solo les cubría una sabana se veía como subía y bajaba a la altura de su pene, pensé que se estaba masturbando pero luego me di cuenta que era la mano de su hermana, no tienen idea de lo excitado que me puse, mi respiración también se comenzó a acelerar, no lo podía evitar, creo que ellos no me oyeron porque estaban igual, ellos se abrazaban y se besaban por debajo de las sabanas y de repente mi cuñada se volteo y se puso de espaldas a mi cuñado, luego escuche un gemidito de mi cuñada y se comenzaron a mover muy lentamente, se la estaba cogiendo y delante de mi.

A la mañana siguiente tan pronto pude le conté a mi novia lo ocurrido y ella se sonrojo y se puso nerviosa, me dí cuenta que no le sorprendió, le pregunté si sabía algo y después de mucho insistir me confeso que las tres hermanas de vez en cuando lo hacen con su hermano y que incluso lo hacían con su otro hermano antes de que se casara, yo tenía el pene como roca, de imaginar todo eso, y le rogué que esa noche fuera ella la que se acostara con su hermano, por fin accedió y yo dormí una siesta para aguantar en la noche.

Mi novia se quedó en la cama con su hermano y apagamos la luz, yo tenía el pene a todo lo que daba y la horas se me hicieron eternas, yo no despegue la vista de su cama y no noté ningún movimiento sospechoso, de repente se pusieron frente a frente y se comenzaron a besar, las manos de mi cuñado se movían por las nalgas de mi novia, mi respiración se acelero sin control pero ellos parecían no notarlo, luego mi cuñado se puso boca arriba y mi novia lo masturbó, la sabana subía y bajaba, mi cuñado mientras tanto le metió el dedo a mi novia y ella dejo escapar un gemidito, el le tapo la boca con la mano, sus movimientos se veían más rápidos de repente mi novia se volteó dándole la espalda a mi cuñado y el se colocó tras de ella y le metió la verga mi novia volvió a gemir pero como una de sus hermanas estaba roncando apenas lo escuche, apenas se notaba su movimiento pero era muy obvio que se la estaba cogiendo. Me comencé a masturbar pero después de unos cuantos jalones me vine en un orgasmo delicioso, ellos continuaron cogiendo por un buen rato incluso me dio tiempo de jalármela de nuevo y tener otro orgasmo, poco después el movimiento cesó y se durmieron.

Por la mañana cuando nadie nos veía mi novia puso en mi mano su pantaleta, de inmediato la guardé y me metí al baño, era un bikini negro y estaba lleno de esperma reseco, me volví a masturbar. Fue delicioso. Nos quedamos tres noches más y mi novia se cogio tres veces más a su hermano frente a mi.

Me obsesioné con verla coger con otro y conmigo al mismo tiempo, pero a pesar de que ella quería hacerlo no sabía como.

Una noche fuimos a bailar con unos amigos a una disco, después de varios alcoholes la novia de mi amigo se levantó al baño, como tardaba mi amigo la fue a buscar y la encontro besándose con un exnovio, el se puso como loco y lo comenzó a golpear, llegaron los de seguridad, y nos sacaron del lugar yo usaba en ese tiempo una camioneta pick up la recogí del estacionamiento y como mi amigo había llegado en el coche de su novia le dimos un aventón a su casa. Mi novia quedo sentada en medio de los dos y traía una mini muy pequeña, mi amigo lloro un rato lo consolamos, paramos en una vinatería y compramos unos six pack de cerveza y nos los fuimos tomando en el camino, cuando mi amigo me hizo detener para bajarse a orinar yo le dije a mi novia que esta era nuestra oportunidad para hacer el trío, ella se me quedó mirando con sorpresa y no le dio tiempo a decir nada ya que mi amigo regreso, pude ver que ella se sentó de tal forma que su falda se subió más y sus muslos estaban expuestos, yo le susurre al oído eres una puta, y se nota que esto la excito, ya que comenzó a coquetearle muy descaradamente, le decía que no se preocupara por su novia ya que era muy guapo y muy sexy y que pronto encontraría a alguien mejor, cuando de repente volteaba y veía a mi amigo mirando las piernas de Sandra. Luego nos invitó a otra disco para compensar que nos habían sacado de la otra por su culpa.

Nos sentamos los tres en una mesa y el se levantó a sacar a alguien a bailar, bailó un rato y regresó con nosotros, Sandra seguía enseñándole las piernas y cuando pusieron una canción tranquila ella sin dudarlo lo saco a bailar, mi amigo me volteo a ver y yo le dije que no había problema.

Me tuve que subir a un balcón para verlos desde arriba. Mi novia lo tomo por el cuello y a el no le quedó otra que tomarla por la cintura, ella se frotaba contra su pene, y el trataba de hacerse para atrás, pero termino por aceptar, hasta pude ver como de repente bajaba las manos para tocarle las nalgas, y de repente mi novia le acerco los labios y se comenzaron a besar. Luego regresaron a la mesa y yo seguí espiando desde arriba, el le frotaba los muslos y la besaba de vez en cuando.

Después de un rato volví a la mesa, lo note nervioso y evitaba mirarme a los ojos, mi novia propuso salir de ahí y así lo hicimos, mi amigo se bajo a comprar más cerveza, cuando regresó Sandra estaba montada sobre mi con la falda hasta la cintura y yo le estaba manoseando los senos, como si nada ella volvió a sentarse y el nos dijo que por el no nos preocupáramos que si queríamos podíamos seguir, yo la subí la falda a Sandra le icé a un lado la pantaleta y le metí un dedo mientras conducía lentamente por unas calles vacías, mi novia cada vez se excitaba mas y de repente puso su mano sobre el pene de mi amigo y lo acarició sobre el pantalón, mi amigo se animó a acariciar la pierna de Sandra, saqué la mano de la vagina y seguí conduciendo lentamente, mientras ellos se fajaban, Cuando pude voltear Sandra tenía las pantaletas en los tobillos y masturbaba el pene de mi amigo con las dos manos mientras se besaban. Ella se inclinó para mamarle la verga y su coñito quedo apuntando hacía mi, yo aproveche para meterle dos dedos, su vagina estaba muy dilatada y entraron fácilmente y le metí uno mas. Mientras ellos fajaban conduje la camioneta hasta uno de estos hoteles con garage, cuando vieron que éramos tres me cobraron doble pero no me importó yo estaba muy caliente.

En el cuarto disfrute mucho viendo todo lo que le hacía mi amigo a mi novia, se la cogio de a perrito, de misionero hicieron el sesenta y nueve y de repente yo también participaba pero me gustaba más verla llena de semen, también se la cogió por el culo.

A Sandra le encantó la experiencia y desde ese día empezamos nuestras experiencias swingers, Si les interesa les contaré la cantidad de cosas que he incitado hacer a Sandra, ella ahora es mi esposa y seguimos con nuestros juegos sexuales.