Como me coji a Claudia

Me uso para vengarse del marido. Yo feliz de que lo hiciera.

Hola amigos, este es mi segundo relato, como el anterior 100% real. Como siempre los nombres están cambiados por las dudas alguien se vea reflejado en el.

Esto sucedió hace aproximadamente 5 años, yo tenía 41 años en aquel momento, estaba separado y sin pareja estable. Yo vivo en un pueblo al sur de Argentina desde hace ya muchos años. Me vine siendo muy joven buscando un futuro, como muchos jóvenes de aquella época. Estaba recién casado y con un hijo pequeño, por lo que en un principio vine solo. De esa época tengo algunas historias que luego contaré. El tema es que es esos momento llamo mi atención una chica algunos años menor que yo (23), ella tendría unos 18 o 19 años. Conversamos 2 o 3 veces, nos insinuamos muchas cosas, pero nunca paso nada, ya que ella estaba de novia, con quien luego se casaría. Pasaron los años y en el año 2000, sucedió lo que no había sido entonces. En todo ese tiempo solo nos saludábamos cuando nos encontrábamos ocasionalmente.

Las cosas pasaron así.

Era verano y yo tenía por costumbre caminar hasta el Banco Nación donde hacia depósitos y transferencias relacionados con un negocio de electrónica del que soy propietario. En una de esas ocasiones siento que un auto se detiene a mi lado, miro y era Claudia, que en ese tiempo trabajaba de remisera o taxista, con el auto de su marido, quien se dedicaba a la música y a otros menesteres. La miro, la saludo y ella se ofrece a llevarme a lo que accedí, me pregunta si estoy apurado, a lo que mintiendo respondí que no. Dijo "Buenos entonces te llevo a dar una vuelta", yo intrigado y curioso por la situación la deje hacer, le pregunte que le pasaba, si nunca antes me había dado bola en todo este tiempo, a lo que respondió y bueno pero ahora si. Esa respuesta abrió las puertas de mi imaginación y rápidamente la conversación tomo un giro intimista y sexual. Quedamos en vernos en mi negocio en dos días y cerca de la hora de cerrar.. Espere ansioso ya que no dejaba de pensar en lo que podría pasar. Déjenme decirles que a pesar de que a mi siempre me gustaron las mujeres entre 18 y 25 años, Claudia es una hermosa mujer, no muy alta, pelo largo negro casi hasta la cintura, unos labios muy sensuales, morena de cara, con un cuerpo muy bueno para su edad (38), ya que según me dijo después, hacia gimnasia 4 veces por semana, lo que la mantenía durita y muy, pero muy deseable.

Pasaron los dos días y esa tarde/noche, la vi atravesar la puerta de mi negocio y casi me quedo mudo, venia vestida con un pantalón de cuero negro, súper ajustado una camperita al tono que le quedaba como pintada (les recuerdo que en el sur de mi país, de noche refresca bastante y a pesar de ser verano, a veces usamos ropa abrigada). Despache rápidamente a quien atendía en ese momento y me dispuse a dedicarle toda mi atención a Claudia. Conversamos animadamente un rato y le propuse cerrar con llave para que nadie nos molestara. Me dijo que no tenía problema, así que cerré apresuradamente y le dije que siguiéramos conversando atrás para que nadie que pudiera pasar nos viera y sacara conclusiones erradas (Pueblo chico, infierno grande).

Una vez en la oficina de atrás, que oficia de taller de reparaciones, me contó que había encontrado a su marido con otra mujer, unos diez atrás y desde entonces pensaba en vengarse y que cuando me vio caminando pensó que quizás era su oportunidad. Yo no pude menos que asombrarme ante tanta franqueza, pero tuve muy en claro a lo que había venido. Le dije que no tenia que hacerse mala sangre y que yo trataría que olvidara tan mal momento, se rió, nos acercamos y comenzamos a besarnos, tocaba sus partes intimas y ella hacia lo propio conmigo, luego de unos minutos de estar así, ya no aguantamos mas y empezamos a desvestirnos, llevaba puesto un conjunto color blanco, con una bombachita casi diminuta, pude apreciar sus tetas que para los años que tenia podíamos decir eran casi perfectas, tenia pezones grandes, los que empecé a chupar con muchas ganas, mientras metía mis dedos en su concha. Ella me pedía por favor que me la cogiera, pero yo tenía en mente algunas cositas antes de eso. Le dije que me la chupara, a lo que accedió con la condición que no fuera a acabarle en la boca, le dije que no, que mi intención era hacerlo en su culo, a lo que respondió que con gusto accedería a eso. Me chupo la verga durante unos minutos en los que disfrute pensando en el cabrón del marido, ya que en verdad el tipo no me caía nada bien, siempre pensé que era un pedazo de pelotudo que se creía el más vivo del pueblo. Cuando me canse de que me la chupara y para disfrutarla por la concha, me coloque un profiláctico y la puse de espaldas, se apoyo con sus manos en una mesa que uso para reparar los equipos, y comencé a cojermela por la concha, mientras ella disfrutaba como una perra y me decía "por favor quiero que la próxima vez me re-cojas en una camita mi amor", luego de darle un rato de esta manera la puse de frente y me la seguí cogiendo por la concha mientras metía mi dedo en su culo, lo que la hacia disfrutar a lo loca, estuvimos así un largo rato y viendo que ella no daba más, la puse nuevamente de espalda y poco a poco introduje mi miembro en su ano. Me costo un poco al principio, pero luego de lubricar un poco mi pene con saliva, todo fue mas fácil. Les puedo asegurar que yo disfrutaba como un loco mientras me la culeaba, y ella hacia lo propio dando pequeños grititos y gemidos. Creo que una de las cosas que más me calentaba era pensar, que estaría haciendo el boludo del marido, mientras yo me cogia a su hembra. Después de algún tiempo derrame toda mi leche en su culito, mientras metía mis dedos en su vagina, logrando que ella acabara también.

Nos lavamos y ella se fue tranquilamente a su casa. Después de esa ocasión tuvimos sexo tres veces más y se ve que eso le alcanzó como venganza, ya que después solo nos hablamos telefónicamente. Ahora ella trabaja en el correo y cada vez que tengo que llevar una carta, nos miramos y nos sonreímos, ella volvió con su marido al poco tiempo de nuestra aventura y yo ahora tengo pareja (lo que no me impide cada tanto tener alguna que otra aventurilla). Espero que mi relato les haya gustado y pronto volveré con otro, en el que les contaré como me pude coger a la mujer de un dentista, la que según creo yo, fue la mujer mas linda que me he cogido en mi vida, ya que tiene un parecido asombroso a Demi Moore (la de la película Streptease) y un cuerpo que es un sueño. Tal como dije que haría, aquí les mando una foto de mi relato anterior.