Como folle a la jovencita amiga de mi hijo
Abrió el cierre de mi pantalón y saco mi polla afuera, comenzó a besarla, su lengua la recorría humedeciéndola con sus labios mientras sus ojos me miraban, me estaba volviendo loco , no sabía que hacer así que me deje llevar. Me soplaba su aliento caliente, metió la cabeza en su boca, la saboreo...
Mi hijo más chico tiene 23 años y siempre vienen sus amigas y amigos a casa, se reúnen a tomar algunas bebidas antes de ir a bailar, siempre me llaman la atención las jovencitas con esas cortas faldas y top reducidos que dejan ver bastante y se hacen desear.
Esa noche habían estado charlando y bebiendo como era costumbre y una jovencita que tiene 20 años llamada Leila había bebido demasiado, estaba ebria como para ir con ellos y decidieron que se quedara en casa hasta que volviesen, me quede hablando con ella y le di un café esperando que se mejorase, la bebida la había puesto muy cachonda. Estaba sentada en uno de los sillones que hay en el salón, yo estaba en otro sillón frente a ella, su faldita no le tapaba mucho y además muy abierta de piernas dejando ver una pequeña tanguita muy hermosa que seguro se había puesto para la ocasión, sus pechos se notaban pequeños y casi podría apostar a que no tenía puesto un sostén.
Yo trataba de hablar cuidadosamente pero mi polla no pensaba lo mismo se había endurecido viendo tan hermosa escena. Hablamos de distintos temas yo deseando que mejorase y de pronto me dice:
- Que espera don Héctor, ahora estamos solos
La miro sin entender, entonces me dice
- Usted también se había creído que estaba mal, yo tengo mucho aguante con la bebida solo que quería que se fuesen y quedarme a solas con usted
- Vaya y porque querías quedarte conmigo
- Aun no lo entiende quiero follarlo, bueno te tuteare y te lo diré más claro, hace tiempo que deseo follarte papi me vuelvo loca cuando te veo
- Me dejas pensando y que te dice que quiero hacerlo contigo Leila, ya soy un hombre maduro tengo 69 años
- Vamos no te hagas el que no me deseas, no estaba tan borracha para no darme cuenta como me mirabas cuando quedamos solos y ahora estoy notando un bulto en tu pantalón
- Tienes razón me gustas mucho pero nunca me hubiese animado a decírtelo, y además no lo niego verte así en el sillón y con tu piernas abiertas y esa hermosa tanga que asoma me ha excitado, pero eres amiga de mi hijo
- Vos lo has dicho, amiga, solo eso, por lo tanto no engañaría a nadie follandote, y te deseo mucho y no dejare de hacerlo
Ella se levantó y se sentó sobre mí, ahí sintió mi polla entre sus nalgas, las que froto un poco y notando que mi polla se endurecía se paró nuevamente y se arrodillo entre mis piernas. Abrió el cierre de mi pantalón y saco mi polla afuera, comenzó a besarla, su lengua la recorría humedeciéndola con sus labios mientras sus ojos me miraban, me estaba volviendo loco , no sabía que hacer así que me deje llevar. Me soplaba su aliento caliente, metió la cabeza en su boca, la saboreo y de a poco empezó a meterla toda, jugaba con su lengua, su boca era una delicia , como si fuese un dulce coño follando mi polla, cuando vi que se la metía profundamente y si seguía así yo iba a acabar quise perdurar aun , la tome de los pelos y la levante la hice echar sobre mí con sus piernas abiertas, la senté de golpe y mi polla se deslizo al costado de su tanga penetrándola fuertemente , su coño estaba muy mojado, ahí me percate que no tenía puesto un preservativo y le dije
- Paremos nena busco un preservativo no quiero que quedes embarazada
- No te hagas problema papito - me respondió – tomo pastillas porque yo tampoco quiero quedar, seguí dándome duro
Después de esas palabras mi energía volvió a mí, nos movíamos desenfrenadamente, mientras le saque su top y no me había equivocado no tenía sostén, sus pechos eran muy pequeños, parados y duritos con dos hermosos pezones muy duros por la excitación, comencé a jugar ellos, ya no aguantaba más, de pronto Leila aumenta sus gemidos
- Si papi , dame más, aaaaaaaahhhh , dame, dámela toda
Empecé a acelerar mis movimientos, su vagina convulsiono y su gemido fue estrepitoso y mi polla ya no aguanto, empezó a vomitar semen penetrando todo su interior y mezclándose con sus jugos, nos abrazamos y quedamos inmóviles por un rato.
Mi polla sentía su calor interior y se mantenía activa, no quería salir de ella para que no se fuese aun la seguía deseando, y ella me mira y me dice
- Qué esperas esto recién empezó ahora vamos a la cama papi hoy te violare, tendrás mi cuerpo de todas formas, será una noche especial que no olvidaras.
Dicho eso se paró y salió de entre mis piernas, me tomo de la mano y me hizo levantar, llevándome hacia mi habitación, eso me hizo pensar que algún día habrá follado ahí con mi hijo no estando yo.
Me hizo acostar en la cama y fue quitando mi ropa, jugando con mi cuerpo hasta dejarme desnudo, se fue unos segundos y volvió con su celular puso una canción, era Michael Bublé y su tema Feeling Good.
Se subió a la cama y empezó a bailarme, era alta yo calculo 1,75 desato un rodete que tenía en su cabellera y su pelo cayó sobre sus dulces pechos, al compás de la música y al ritmo de las trompetas quito su faldita, y esa hermosa tanga blanca que tenía puesta quedo ante mi vista haciéndola ver muy deseada
De pronto bailando se dio vuelta, quedando ese hermoso culo quedo ante mí, ese hilo dental metido entre las dos nalgas tan formadas llamaban a acariciarlas, morderlas, nalguearlas, penetrarla, todo era deseo.
Siguió su baile hasta que termino la música yo cada vez la deseaba más, y me dijo
- Sé que eres dominante Héctor , pero déjame hoy ser quien dirijo todo, no lo hago ni quiero dominarte , si quiero entregarme totalmente a ti , que goces comiendo algo que pocas veces podes comer
- Ok es cierto siempre me gusta llevar las riendas en todo pero bueno deseo sentir que es lo que tienes para darme
- Todo papito, todo
Y dicho eso se quitó la tanga y se tiró en la cama, se puso sobre mí al revés y empezó a chupar mi polla embebida en sus jugos y los míos. Arrodillo un poco sus piernas y su coño quedo ante mis labios estábamos en un perfecto 69
Empecé a succionar ese rico coño bañado en jugos, y mis manos recorrían su cuerpo, era todo excitación, mi polla en su boca, y mi dedo jugaba con su culo penetrándolo, cada vez nos estábamos excitando más y le dije
- Me gusta lo que me haces Leila pero tengo 69 años y si acabo ahora me quedare sin lo que deseo
- Que quieres Héctor
- Quiero ese hermoso culo que tienes
- Si he notado que jugabas en el con tu dedo, pero aunque me veas así tan loca en la cama, siempre tengo miedo que me lo penetren, alguna vez han probado pero no soporte el dolor
- Prometo que el dolor será mínimo pero después sentirás una gran placer
- Pero si te pido que pares lo harás
- Claro, no lo dudes
La hice levantar tome dos almohadones e hice que se acostara boca abajo y los almohadones quedaron debajo de su pancita, quedando así el culo bien parado.
Yo sabía que estaba ella muy caliente por la chupada de coño que le venía dando hasta hace unos momentos, tome un gel relajante y dilatador que tenía en el cajón de mi mesa de luz, me puse en el dedo y comencé a jugar en la puerta de su culo, y mi otra mano acariciaba despaciosamente su clítoris
Ella estaba muy excitaba, penetre un dedo en su culo, luego dos y con ellos lo fui abriendo, le puse más gel la quería bien lubricada para que mi polla entrase de golpe pero acompañada por el gel, cuando la note más dilatada, deje de acariciar su clítoris me puse de rodillas tras ella, puse mi polla en la puerta de su culo y sin darle tiempo a nada presione y lo metí hasta el fondo
- Aaaaaaayyyyy para me duele, no lo metas más, detente
- Ya lo tienes adentro y hasta el fondo nena, esperemos unos segundos que te habitués
- Por favor Héctor , me dolerá mucho cuando te muevas
Mi polla se mantenía dura adentro, ese culo tan apretado se sentía mucho, me volqué hacia adelante para que mis manos acariciasen sus pequeños pechos a ella le excitaba mucho eso, me empecé a mover muy despaciosamente, cuando note que no se quejaba me enderece y empecé a subir el ritmo
- Despacio Héctor me gusta pero me duele, estoy sintiendo algo diferente
- Déjate llevar, goza, eres mi putita, mi zorra – la tome de su cabello con una mano y con otra le empecé a dar pequeñas nalgadas , eso la encendió ya nos movíamos los dos
- Aaaaagggg que me estás haciendo no pensé en que podía gozar por el culo así , me duele pero también estoy gozando
- Si goza nena, te dejare el culo bien abierto
Me empecé a mover con todo, las nalgadas cada vez más fuertes, sus pequeñas nalgas estaban enrojecidas y llego ese momento divino, en que los gemidos dan tanto placer, los dos acabamos casi juntos, me quede un par de minutos no tenia deseos de salir de tan rico culo
Ya recostados uno al lado del otro, nos quedamos un tiempo tranquilos, ella me miro y me dijo
- Gracias papi todo sucedió mejor de lo que esperaba, no tenía pensado entregar mi culo, aun siento un poco de dolor , pero paso todo ese temor sentí un placer muy diferente, a cuando lo hago por el coño
- Yo sabía que lo ibas a disfrutar, solo había que vencer ese miedo, me gusta lo puta que sos en la cama
- No soy siempre así , lo fui para vos, siempre me gusto follar con un hombre mayor y tú fuiste el elegido, cada vez que te veía no sabía cómo hacerlo hasta que se me ocurrió lo de la bebida
- Lo hiciste muy bien todos te creímos borracha, me sorprendiste, me gustó mucho, lo disfrute.
- Bueno eso es lo que quería, que disfrutásemos los dos, este es nuestro secreto, por favor se muy disimulado cuando vengo a ver a tu hijo, yo de alguna forma te avisare para que lo repitamos, aún tengo deseos pendientes, este será nuestro secreto
Ella se levantó y se vistió, tomo su celular, salió de la habitación y se dirigió al sillón en el salón, se recostó en el, durmiéndose como una santa a la espera que volviese mi hijo y sus amigos y yo en mi dormitorio acostado con ese sabor aun de lo disfrutado, de haber follado a esa jovencita que tanto me gustaba.