Como encontre a mi hombre - 4
CRISTINA llega a la casa madre y conoce a la familia de Arturo
COMO ENCONTRE A MI HOMBRE – 4
Cuando llegue al aeropuerto, me dirigí a información para averiguar si el vuelo llegaba en hora, me dijeron que si, faltaban 15 minutos para su llegada, aproveche el tiempo y me fui a la cafetería hasta que anunciasen que había aterrizado, estaba muy nervioso, y un café no era precisamente lo que me convenía,
pedí un refresco de naranja. Fue ese momento en que por los altavoces anunciaban la llegada del vuelo de Cristina, me dirigí, a la puerta de salida del pasaje para que ella me viese tras pasarla.
Se hacía interminable la espera, salían pasajeros de otros vuelos, fue cuando a lo lejos la vi estaba recogiendo su equipaje, espere unos momentos y tan pronto paso la puerta salte la barandilla me fui hacia ella y con toda mi fuerza la abrace besándola con todo mi amor.
Me hice cargo de su maleta, y arropándola con mi brazo, nos dirigimos a la salida, retire el automóvil del parking y pusimos rumbo a casa.
Al llegar en la puerta habían puesto un cartel en el que se podía leer “BIENVENIDA A TU NUEVA CASA CRISTINA” , fue abrir la puerta y Alfredo, Raquel y Felicidad se abalanzaron sobre ella abrazándola y dándole la bienvenida.
Cristina te voy a presentar a la familia:
Esta pequeñaja, es Felicidad, mi hermana pequeña, se le puso así, porque cuando nació, mi madre dijo que con ella había llegado la felicidad a casa.
Estos dos traviesos, son Raquel, las señoritas primero, y Alfredo, gemelos y tienen 12 años.
Detrás, esta James, mi padre el que nos cuida a todos y el gran amor de mi madre, Ingrid, que como puedes ver por su esbelta figura, ama mucho a mi padre.
Mama, se acerco a ella, la cogió de las manos, y le dijo.
Hija, gracias por hacer feliz a mi hijo, se que lo amas y el te ama. Seréis muy felices,
y tenemos que contarnos muchas cosas, tu a mí y yo a ti, como ves, nos unimos dos mujeres y lo único que hacemos es hablar de hombres, así me va, me falta poco para que conozcas a tu próximo cuñado.
Las risas invadieron la casa James recogió la maleta del coche y la subió al cuarto de invitados.
Almorzamos y después con calma en una placida sobremesa, Cristina, que casi había permanecido callada pues tolo lo que oía eran halagos a ella y a mi .
Yo le había pedido a mama, que contara su historia y que le enseñase la casa madre, entre mujeres se iban a entender mejor pero no lo haría hoy.
La llegada de Cristina, el traqueteo en casa con su llegada la emoción de conocer a tanta gente en tan poco tiempo la tenían un poco desorientada, y con tal motivo, salimos de casa y fuimos a caminar un rato por los jardines, yo sabía que ella me quería decir algo pero no se atrevía los nervios le cerraban la boca.
La cogí de la mano y caminando nos fuimos alejando de casa, ella se agarro a mi brazo y apoyando su cabeza en mi hombro y sin decir nada comenzó a emitir unos sollozos, le pregunte que le pasaba, y me contesto:
Arturo, tienes una familia maravillosa, pero cuando sepan cómo soy, seguro que me rechazan y yo quiero estar siempre a tu lado, como vamos a poder vivir con ese secreto, te voy hacer un desgraciado, me vas a odiar.
Cristina, ya te dije que no te preocupes, que todo se arreglara, mañana, saldrás de paseo con mama, te enseñara la residencia, donde tu trabajaras a mi lado, así os conoceréis mejor como suegra y nuera, ella te contara muchas cosas de mí, ya verás como os aréis muy buenas amigas, además en el estado en que esta, me supongo que le echaras una mano con mis hermanos, incluso si quieres podrás asistir al parto yo la atenderé, se lo prometí antes de empezar la carrera. Te gustaría ver cómo nace tu futuro cuñado?, es maravilloso.
Pero Arturo, porque quieres que presencie el parto para aprender? Si yo no podre darte hijos.
Eso que importa, cuantas mujeres han ayudado a otras a dar a luz, y ellas nunca han tenido hijos. El ver nacer a un niño, es la cosa más maravillosa del mundo, el saber que dentro de ti esta latiendo un corazón, y que está ahí por el amor que sientes sus padres es maravilloso. No te preocupes, mi amor.
Nos paramos y sin darnos cuenta estábamos besándonos sin importarnos quien estaba viéndonos, cuando nos dimos cuenta, Cristina se ruborizo y sonrió, y así cogidos de la mano comenzamos a correr por el parque hasta que el cansancio nos hizo parar.
Al llegar a casa, mama le pregunto a Cristina si le gustaba el recinto, y como se encontraba.
Bueno, Ingrid….
Llámame mama, de acuerdo?
Bueno, han sido muchas las emociones en tan poco tiempo, estoy metiéndome en una familia maravillosa y no quiero desentonar, al principio estaba nerviosa y ….
Se me puso a llorar, dije.
Tonto, porque dices eso, va a creer que soy una tonta.
No hija, lo comprendo perfectamente, entras en una casa en la que no conoces a nadie, con un montón de gente haciendo ruido por todas partes, no te dejamos hablar, es lógico que pienses que es una casa de locos y que no encajas en ella. Pero ten la seguridad, y Arturo lo sabe, que desde que nos dijo que os casabais, ya sin conocerte, te queríamos y como la queríamos…
Mucho, mucho, mucho, dije yo abrazándola por la espalda.
Mañana, tu y yo saldremos de paseo, tenemos muchas cosas que contarnos, y cuanto antes mejor, no tengas miedo, ya verás cómo vamos a ser muy buenas amigas. Ha te digo, que te llevas una joya como médico.
Cuando nació Felicidad, me dijo que en el próximo parto me iba atender el, fijante acababa de parir y ya me estaba invitando a que tuviese otro más. Y como ves está en camino de cumplir su promesa, ayer fui su primera paciente en la clínica, me tocaba la ultima revisión antes del parto y él me atendió con sus manos de ángel que no me entere de nada, yo le había dicho cuando me anuncio lo de su carrera y con Felicidad mamando de mi teta.
“Tu, hijo, lo que quieres es verme el coño” – pues te digo que ayer lo vio, cuando se lo contaba a la enfermera se moría de risa, igual que tu lo estás haciendo ahora.
Si, Cristina sin darse cuenta se estaba riendo de la anécdota, mi madre le había sacado una risa, risa no era una sonrisa de compromiso, las dos terminaron riéndose y yéndose a la cocina como madre e hija.
Al terminar de cenar, fue a bañar a los gemelos y a Felicidad, Cristina inmediatamente se ofreció a ayudarla.
Claro hija, que con esta barriga casi no me puedo mover, así cuando este en la clínica, me sustituirás y además, te conviene hacer prácticas para un futuro.
Eso hizo que Cristina se sonrojara un poco, mama la vio por el rabillo del ojo pero no le dio importancia, ella sabía su secreto y todo lo que pasaría.
Mientras, papa y yo en el salón comentábamos sobre Cristina, que le parecía, la impresión que había sacado de ella.
Me dijo: Hijo escogiste bien, se la ve, tímida, pero es normal en este momento, es guapa, sabe estar ella te ama y tu a ella, seréis muy felices sé que me vais a dar muchos nietos.
Los dos nos pusimos a reír comentando que eso tardara un poco pero llegara.
Cuando mama y Cris, terminaron con los niños, los acostaron y ellos pidieron que fuésemos a darles un beso de buenas noches, primero fueron papa y mama, Raque y Alfredo, les preguntaron si Cris era mi novia, les dijeron que si, Alfredo enseguida dijo:
Pues mi hermano tiene muy buen gusto, es muy guapa,
Raquel, como una niña de 12 años decía:
Mama si le pido a Cris que me enseñe a vestirme como ella, crees que querrá hacerlo.
Claro hija, además cuando llegue vuestro nuevo hermano ella os cuidara mientras yo esté en la clínica y luego me ayudara con él.
Quedaron satisfechos les dimos un beso y salimos hacia la habitación de Felicidad, ya estaba media dormida por el cansancio del día, solo nos llego a decir.
Mama, Cristina, es muy guapa y yo la voy a querer mucho, mucho, much…..
Quedándose dormida, salimos despacio y les dijimos a Arturo y a Cris
que Felicidad se había quedado dormida, que no fuesen a la habitación, se podía despertar.
Cris y yo fuimos a darles las buenas noches a Raque y Alfredo, Cristina se dirigió a la cama de Raque y sentándose en ella le dijo que estaba muy contenta de haber venido y conocerlos y que esperaba que fuésemos buenas amigas.
Raquel dijo que no, que íbamos a ser cuñadas, porque tú te vas a casar con Arturo, verdad?
Claro Raquel, pero no solo seré tu cuñada, seré como tu hermana mayor y te querré, mucho, mucho, mucho.
Entonces Raquel de un salto se sentó en la cama y agarrándose al cuello de Cristina le dio un beso y le dijo, yo también.
Alfredo estaba hablando con Arturo y muy bajo para que Cris no se enterase le dijo.
Oye hermano, tienes muy buen gusto, Cris es muy guapa, yo cuando sea mayor voy a tener una novia así de guapa.
Cris lo había oído y sonrió, se acerco le dio un beso de buenas noches y en silencio abandonamos su dormitorio.
Cuando llegamos al salón, les contamos la conversación que habíamos tenido, y las exclamaciones fueron unísonas. “Pero bueno, este Alfredo lo tendremos que atar corto, hijo como te descuides te quita la novia”, decía James.
Nos retiramos al dormitorio, acompañe a Cris al suyo y a la puerta del mismo, le di las buenas noches dándole un beso en los labios, ella cerró la puerta, yo me acerque al dormitorio de mis padres para darles las buenas noches, mama me dijo:
Dentro de un ratito voy a darle la buenas noches a Cris, espero que se cambie, no quiero que se encuentre incomoda, no te preocupes, me dio un beso, diciéndome hijo, has escogido bien, te quiero.
Mama, se acerco al dormitorio de Cris, toco en la puerta pidiendo permiso para entrar, tardo unos momentos en contestar y le dijo que pasase.
La encontró ya en la cama, sentada, se acerco, y se sentó al borde de la cama.
Hija, gracias por querer tanto a mi Arturo, en mi no solo tendrás una madre, tendrá a una amiga y confidente y cogiéndole la mano, la puso sobre su tripa, Cris se extraño por el gesto, le dijo, pero ..
No te preocupes, es que quiere darte las buenas noches y está dando el visto bueno sobre ti, por eso se mueve tanto, porque está contento, en su día lo sentirás en tus carnes y veras que feliz te hace.
Cris se escurrió dentro de la cama, mama se acerco a ella y dándole un beso, le dijo “Buenas noches hija, que descanses”
“Buenas noches mama, igualmente” se sonrieron y mama apago la luz.
El sueño se apodero de Cris como si hubiese tomado un somnífero, el cansancio, los nervios y las emociones habían hecho el efecto que estaba pasando. Tras un sueño reparador en toda la casa amaneció un hermoso día.
Continuara