Comenzando a ser la hembra de mi macho Parte IV

Como una simple mirada me llenó de orgullo

De nuevo aquí estoy para contar cómo sigue mi historia:

Al cabo del tiempo mis piernas y me cabeza volvieron a responder, fui al baño y me metí en la ducha, como siempre Danko no me perdía ojo, pero yo necesitaba limpiarme la cara del meado y la vagina y piernas por los flujos de ambos.

Al salir de la ducha no vi a Danko lo cual me extrañó pero no le di mayor importancia. Después de recoger algunas cosas y sacar a pasear a Danko me dispuse ha preparar la cena pero siempre primero para Danko y luego para mi.

Danko terminó de cenar su pienso y yo mi cena (no recuerdo que era). Transcurrió normal, al finalizar a ver la TV con Danko tumbado en el sofá y yo sentada rascándole la cabeza.

No sé en qué momento exactamente Danko se puso panza arriba y la señal era clara, poco a poco me acerqué con la mano para acariciar su pene. Su punta ya está fuera pero a mí me encanta jugar con el antes de mamarselo. Empecé a lamerle la punta mientras le tocaba los testículos, el me gruñía como para marcarme el ritmo, en mi boca su pene se le salió de la funda. Empecé a mover su pene en mi boca, (me lo estaba currando y mucho jejeje) a mi macho le encantaba y así me lo agradeció, llenándome la boca con su sabroso y espeso dulce nectar. No sé por qué pero cuando recogí la última gota abrí la boca enseñándole su semen y como me lo tragaba. Parece que le encantó pues se levantó y me volvió a marcar con su orín. Ya no me dió tanto asco, al revés me encantó, pues me puse a cuatro en el suelo esperando que me montará. Pegó un salto desde el sofá, me hizo mucho daño pero aguanté su peso sobre mí como buena perra sumisa, y después de un par de intentos le la clavó, pero esta vez no atinó en la vagina. Sentí un dolor inmenso en mi ano, me la metió hasta lo más hondo de mi ser, se me caían las lágrimas pero seguía aguantando como buena perra los deseos de mi macho, se le veía disfrutar, me gruñía, me arañaba fuerte y me jalaba del pelo con ansia, estaba desatado.

Danko siguió bombeando en mi ano mientras yo aguantaba inmenso dolor, mi ano no se adaptaba y con cada embestida me empujaba hacia delante, cosa que no le gustaba pues en un gruñido me enseñó los dientes. Con esa advertida plante fuerte mis manos en el piso y le dije "tranquilo amor ya no me moveré más" entre llanto. Él seguía a lo suyo, el dolor seguía pero que me marcara y me poseyera me puso a mil, mi vagina empezó a chorrear al sentir como me me embestía y de una introducía su nudo en mi ano. Dios que dolor, pero joder que rica me veía complaciendo a mi macho....

Empezó a jalar fuerte estando atorado, le intenté coger de las patas pero no le gustó nada, me ladró marcando territorio, así pues aguanté y de esas jaladas me inundó una sensación extraña pues comencé ha hacerme pipí encima y ahí estaba yo, aguantando las embestidas de mi macho, en un charco de flujo y de pipí. Al fin se le vino abajo el nudo, y de mi ano empezó a brotar el semen de mi macho, en vez de limpiar su semen como siempre se subió al sofá y se limpió su pene, me intenté levantar pero me ladró, señal que identifiqué como que me quedara quieta, al mirarle vi como su semen teñido de rojo, me había partido literalmente el ano y me había hecho sangre, pero como buena perra sumisa y complaciente de mi macho me quedé ahí quieta, aguantado, hasta que se acercó y empezó a darme lengüetazos en la cara, lengüetazos que fueron respondidos por mí parte, por fin pude levantarme, y rápidamente fui a lavarme (otra vez) y recoger el desperdicio de mis flujos. Él me miraba desde el sofá con orgullo y eso os diré que fue la mejor sensación que tuve.

Espero que os haya gustado este relato, seguiré subiendo más cuando pueda, por trabajo no sé si me dará tiempo, mi email es SamaraBarrera227@gmail.com, no hay que decir QUE SOLO RESPONDERÉ a gente educada, que ni me.enseñe nada ni pida nada, espero poder responder a todos y todas. Me estoy pensando subir más historias de mi vida, espero tener apoyo en los emails y me lo pensaré.

Besos