Cogiendo en la discoteca
Mirta y yo cogimos en el Mx, un antro al norte de la ciudad de México... que rica cogida, leé, te va a gustar.
Las luces ya estaban jugando al ritmo de la música, los humos grises hacían de las suyas también, el show estaba en su comienzo y la noche apenas también.
La música iba calentando el ritmo, era el comienzo de la noche, lo que se conoce como "apertura de pista", las luces seguían su ritmo y su rutina de cambios, de claro a oscuro, de grises a rojos, el espectáculo era impresionante.
Yo estaba en nuestra tradicional mesa de la zona VIP, suena muy mamón pero es la verdad, acompañado de Mirta y de sus amigas, que ya eran amigas mías también, la botella de tequila ya había sido servida, algunos vasos llenos y otros medio vacíos adornaban nuestra tabla, unos ceniceros servían de apoyo para cigarrillos que echaban humo sin que fueran fumados, otros tenían ceniza y colillas apagadas, algunas cajetillas de cigarros de distintas marcas terminaban por decorar nuestro entorno, además de algunos sacos y bolsas de mujer colgados de los respaldos de las sillas.
Yo apreciaba todo el contorno apoyado en la pequeña barandilla que estaba junto a la pared, que tenía detrás de la mesa, misma que no servía para nada, más que para decoración de la pared, o sí, servía para que yo estuviera sentado en ella, con mi espalda apoyada en la pared, mis piernas entreabiertas y Mirta apoyada en mi, sus nalgas apretaban a mi verga y sus brazos se apoyaban en mis piernas, lo mismo hacía su espalda en mi torso, nadie reparaba en lo que hacían los demás, cada cual atendía su juego.........
Mirta tiene un par de piernas más que apetecibles, mismas que por los celos de sus hermanos mayores cubría siempre con pantalones o largas faldas, pero que gracias a mi reclamo esa noche engañó a todos al salir de su casa con las piernas cubiertas y en el primer momento que pudo cambió su larga falda por una minúscula minifalda, tal vez pasada de moda.......pero, como me gusta decir a mi, las buenas piernas jamás pasan de moda......o no?
Yo podía sentir como mi falo tomaba sus dimensiones de batalla por el roce con Mirta, ella lo notó también y jugaba con la situación.........yo aprovechaba el juego de luces y la tocaba entre las penumbras, la tocaba toda, ese cuerpo que ya había sido mío en muchas ocasiones pero que me seguía excitando a tope.
Abrazándola desde atrás, cubriendo todo su cuerpo con mis largos brazos, le pasaba mis manos sobre sus tetas, enormes, como ya les conté en relatos anteriores, y le apoyaba mis muslos en la parte posterior de sus piernas........yo estaba muy caliente, y ella también, no hacía falta que me lo dijera, la conozco y mucho, sin palabras nos entendemos muy bien.
Sabiendo de su pasión, de su exhibicionismo, eché una mirada muy atenta a todo nuestro alrededor, nuestras amigas estaban disfrutando del comienzo de la noche, de la tradicional apertura de pista del lugar, otros brindaban, bebían y fumaban, nosotros estábamos en nuestro tema, sin hablar, sólo sintiéndonos.
Yo quería penetrarla, pero no me animaba, soy un descarado exhibicionista, pero no me animaba......ella quería ser penetrada, lo sabía.........retiré mi mano derecha del abrazo que le daba, y la puse por detrás, y le levanté disimuladamente su cortísima falda por detrás, no hizo falta levantarla mucho......además, de levantarla más de lo que lo hice, se le habría visto mucho su tanga por delante, lo que tampoco era buena idea......si alguien nos veía, el show lo daríamos nosotros y no la distoteca.
Tenía la verga durísima, entre la excitación y el morbo, el exhibicionismo y la calentura, los nervios del momento provocaban taquicardia.......la sangre hervía y los deseos eran irreprimibles.......y bajo el zipper de mi pantalón, para dejar a mi verga salir de su encierro de calzoncillo, y se la froté por sus nalgas, viendo por su perfil como se dibujaba una hermosa y sensual sonrisa, algo sorprendida.
Acomodé mi verga por su canal vaginal, su tanga impedía mi entrada, por lo que con la mano la muevo hacia un costado, y ubico con la cabeza de la verga su vagina, completamente húmeda, lubricadísima, deliciosa. Ella mueve ligeramente hacia adelante su torso, de cintura hacia arriba, para permitir mi penetración, que es lenta en los primeros segundos, pero veloz luego, y enseguida la tengo ensartada por detrás, mientras la música y las nubes provocadas por el humo de los d.j. seguían adornando la noche.
La situación nos tenía completamente excitados, no nos hablábamos, solo nos gozábamos, mi verga hasta el fondo de su vagina, ella sentada en mí, la música nos hacía mover suavemente aunque sin ella también nos hubiéramos movido, y la gente seguía fumando y bebiendo, observando el show en el escenario que teníamos a unos cuantos metros.
Tomo con mi mano un caballito de tequila y se lo ofrezco a Mirta, inmediatamente tomo otro y brindo con ella, bebemos mientras seguimos cogiendo........y comienzo a derramar dentro de ella toda mi leche, un rico y delicioso orgasmo, algo prolongado, siento como de a borbotones mi leche brota de mi verga para pasar a inundar su interior......ella lo siente, lo nota, y brinda conmigo otra vez.........la música y las nubes de humo seguían en el final de su show, la gente aplaudía, la noche comenzaba en la discoteca, pero para nosotros había comenzado hacía unos cuantos minutos ya.......
Estábamos en una disco-bar-antro llamado Mx, ubicado en una plaza comercial llamada Mundo "E". Comencé a ir al MX porque Vladimir , mi amigo cubano, trabajaba ahí. Vladimir y yo somos "príncipes consortes", como los cubanos acostumbran a llamar a sus amigos de grandes correrías.......
Yo era un gran habitué del lugar, ya tenía un lindo grupo de amigas, todas ellas muy buenas por cierto, aunque a decir verdad sólo me pude coger a una más, intenté con otra pero por el momento no lo he logrado.........
Esta es otra Historia Real 100 %