Clientes para la hija
El señor Pedro llega a su casa con un amigo y llama a su hija Mariana. Mariana ven aquí traje un amigo Mariana sabía que si su papa llegaba con un amigo, era porque ya le habían pagado un buen dinero y tenía que complacerlo con sexo. Amor mira traje un amiguito se llama Juan y tenía muchas ganas de
El señor Pedro llega a su casa con un amigo y llama a su hija Mariana.
Mariana ven acá traje un amigo
Mariana sabía que si su papa llegaba con un amigo, era porque ya le habían pagado un buen dinero y tenía que complacerlo con sexo.
Amor mira traje un amiguito se llama Juan y tenía muchas ganas de conocerte
Mariana: Mucho gusto señor Juan.
El señor Juan la mira de abajo para arriba y dice Wow está más buena de lo que me había imaginado
Pedro solo se rie y dice, te dije que te iba a gustar mucho, recuerda que solo te puedes demorar con ella media hora, espera dice Juan, dame una hora creo que hay muchas cosas que puedo hacer con ella
Pedro: Si la quieres tener una hora me tienes que dar el doble de dinero,
Juan: seguro que si hará todo lo que yo diga?
Claro que sí, verdad Mariana que vas a ser una buena niña
Mariana: Si papi seré una buena niña con el señor Juan
Juan: Voltéate Mariana te veo el culo, wow que culito tiene
Toma te doy la otra mitad del dinero pero no me moleste durante una hora, ese culito necesita tiempo jajajjajaj
Claro Juan, volveré dentro de una hora, que la disfrutes, y susurrando al odie le dice, No la hagas gritar mucho que los vecinos pueden escuchar.
Juan se ríe y dice, tratare, pero no te prometo nada porque realmente me gusto ese culito.
Bueno, te dejo, vuelvo en una hora
El señor Juan se queda mirando a Mariana lascivamente y ella se empieza a asustar, Señor Juan que quiere que hagamos,
Juan sonriendo le dice: ven acá, arrodíllate, pon las manos tras de tu espalda, abre la boca, saca la lengua, cuando la tiene así toda sumisa le escupe en la boca y le dice, ya eres mía, así que espero que me complazcas en todo o te abofetearé, entendiste, la escupe en la boca varias veces
Mariana todavía con la boca llena asienta con la cabeza
Juan: ahora trágate que eso será lo más dulce que vas a tomar ahora.
Juan: Levántate, muéstrame las tetas, y tu vaginita
Mariana: Si señor
Cuando se quita la blusa y le ve las tetias pequeñas dice:
Las tienes muy pequeñas, no me podre hacer una paja en ellas, pero bueno, tráelas yo las toco
Mariana: Señor Juan no tan duro que me duele, ayyy, ayy ayyy pacito señor Juan.
Juan: Que chillona eres, ponte en cuatro como la perra que eres, ojala te hayas lavado bien el culito porque te lo voy a reventar ya mismo.
A mi mujer no le gusta que se lo meta por el culo, por eso siempre busco putitas como tú, para romperles el culo, cuando te meta la verga por tu culo no quiero que grites, te permito llorar pero no te vayas a quitar, déjame el culito bien paradito, Mariana no decía nada, y de un fuerte grito, le dijo, si me entendió maldita perra.
Mariana: Si señor,
Ni pudo terminar la palabra y Juan ya se la había metido por el culo,
Mariana no pudo aguatar y soltó un ahyyyyyyyyyy, cállate puta, ayyy señor Juan me duele, señor Juan me duele mucho, no más por favor, déjame comer en paz, otra embestida brutal, Mariana empezó a llorar por el dolor que sentía, A la tercera embestida se vio salir un poco de sangre del culo de Mariana, Juan se reía y decía, te lo rompí, pero no te preocupes la sangre también sirve como lubricante, después de un momento Juan saco su verga y le dijo:
Mariana que culo tienes, hace rato que no me comía uno así, lo tenías muy apretado, me toco sacarlo porque casi me haces venir.
Pero ven dame una mamadita mientras se te cierra otra vez el culito, Mariana se voltea y le mira el miembro lleno de sangre y un poco de excrementó.
Juan: Que te pasa, yo no tengo la culpa, esa mierda y esa sangre son tuyas, así que mama perra, la agarra del pelo y le mete la polla en la boca a la fuerza, ella hace arqueadas de lo repugnante que le sabe el miembro de Juan, el solo se rie y dice:
jajjajajajajajjaja Tu padre va a hacer mucha plata contigo, eres toda una mina para explotar, Dime la verdad, tu padre también te penetra.
Mariana solo decía si con la cabeza ya que no podía hablar por la polla que tenía en la boca.
Juan: Me lo imaginaba, viejo pervertido, él te lo hace gratis y a mi si me cobro mucho dinero, me saliste muy cara, por eso tengo que disfrutarte mucho, porque voy a tener que recoger un buen tiempo para poder disfrutar de ti nuevamente.
Juan: acuéstate en la cama boca arriba y abre las piernas y cierra los ojos, hizo una sonrisa muy maquiavélica.
Mariana obedeció presintiendo algo muy malo, de repente siente en su vagina un golpe, de inmediato abre los ojos y ve a Juan con una correa en la mano, azotando su vagina, inmediatamente cierra los pies por el dolor.
Juana: abre las piernas perra.
Mariana; Señor me duele mucho,
Juana: y que importa, ábrelas.
Marian no tiene otra opción que abrirlas nuevamente
Juan: cierra los ojos, y nuevamente siente un fuerte dolor en la vagina, después de darle varios azotes a la vagina, la penetro nuevamente, Tu vagina no esta tan cerrada como pensaba, Pervertido tu padre no te la deja cerrar bien para los clientes, voltéate mejor, quiero seguir jugando con tu culito.
Después de estarle comiendo el culito no aguanto más y la voltio para correrse en la boca no sin antes advertirle, que se lo debía tragar todo.
Mariana se lo trago todo pero inmediatamente vomito por el asco que le daba.
Juan simplemente sonrió y dijo, has sido uno de mis mejores polvos, muchas gracias mi amor, ven yo te baño que estas vuelta un asco y ya se me esta acabando el tiempo.
Cuando Pedro llego vio a Juan en el sillón mientras Mariana le daba una mamada.
Pedro: Dale Juan acaba rápido que ya se terminó tu tiempo,
Juan: bueno pero voltéate que no me dejas concentrar.
Mariana nuevamente siente el semen en su boca y sin más remedio se lo traga todo, ya era la tercera corrida que se tomaba de Juan.
Juan: Que buena hija tienes Pedro
Pedro: Cuando quieras ya tienes mi número, solamente me avisas.
Al irse Juan, Pedro le dice a Mariana, ojala volviera pronto Juan, me dio muy buen dinero
Mariana con tristeza en su rostro dice:
Si papi ojala vuelva pronto.
Pedro se baja la cremallera del pantalón y dice:
Chúpamela que me tengo dar ganas.