Claudia y Raul

El placer de Claudia con su hermano adolescente... a las chicas nos encantan nuestros hermanos

CLAUDIA Y RAUL:

Después de lo ocurrido en la fiesta me sentía avergonzada… Creo que fue el alcohol y alguno droga que me añadieron en la bebida… Pero me sentí reconfortada cunado vino mi hermano..

Al dia siguiente Raul entré en mi habitación. Noté que se ponía colorado. Parecía tenso y nervioso. Me encantaba cómo disimulaba

--Te has puesto colorado… Lo viste todo...Seguro que lo viste, seguro que te gustó....

--No, no me gusto... pero tú les pusiste muy cachondos...

--Anda ven acá; mi hermanito esta preocupado pero seguro que te habría gustado estar con ellos

Me acerqué a él y le puse mi brazo sobre los hombros.

Sentí como nuestros cuerpos se tocaban. Apreté mi pecho contra él y me froté algo, muy despacio. Se removió un poco pero no se apartó. Me di cuenta de que le crecía el bulto de la entrepierna, que intentaba disimular cruzando las piernas. Sin darle importancia, puse mi mano sobre él. Me miró sorprendido un segundo, inseguro, y noté que se encogía.

--¿Nunca has estado con una chica?

Seguí rozándole, mientras apretaba con insistencia, despacio,… despacio Enrojecía por momentos. La verdad es que me estaba gustando notar cómo se excitaba. Lo había hecho ántes con algunos chicos, pero hacérselo a mi hermano tenía un morbo especial... Estaba duro, y notaba cómo su erección crecía en segundos

--Eres todo un hombre… estas muy bien dotado

De repente se volvió y me besó con fuerza y torpemente, mientras colocaba sus manos sobre mis pechos. Noté la erección demis pezones.

--No deberías..., soy tu hermana...

Le notaba, notaba su poder, su fuerza, su dureza... Me sentía caliente, con una sensación de temblor y gusto entre mis piernas. Me aparté, confusa y algo nerviosa

--Raul te estas calentando. No deberías tocarme, te estas empalmando y a ver que haces luego...

Le notaba, notaba su poder, su fuerza, su dureza... Me sentía caliente, con una sensación de temblor y gusto entre mis piernas. Me aparté, confusa y algo nerviosa

--Raul... anda déjalo ya... estás a cien...

Pero, sin hacerme caso, me agarró con fuerza, y forzó mi cuerpo sobre el sofá, tumbándose encima. Noté la dureza de su erección sobre mi vientre. Oh, Dios mío... estaba buenísimo... Sus manos me acariciaban los pechos, mis pezones estaban tiesos... Entonces, introdujo la mano en mi escote y me comenzó a sobar con pasión un pecho.

-- ¡Tu sí que estás buena, Claudia!... me gusta mi hermanita… ¿te gustan las cosquillas?... –dijo riendo nerviosamente

Aunque trataba de aparentar que era un juego, yo sabía que no lo era.

--Raul… estate quieto… estate quieto o te hago yo también cosquillas… --dije tratando de seguir su juego, mientras bajé mi mano tratando de agarrar su pene... Estaba duro… estaba durísimo… Le apreté con más insistencia.

--¿Qué quieres?... ¿qué quieres hacer?

Se detuvo apartándose algo… Mi mano seguía asida a su polla y parecía completamente sorprendido, con la boca entreabierta y mirándome fijamente, mientras respiraba hondo… Había conseguido excitarle, como yo sabía que había que hacer con un hombre… primero algún coqueteo, alguna insinuación, luego un rozamiento, luego dejarte tocar un poco, … y al final tocarle el sexo

Raul era un adolescente. La verdad es que su miembro era durísimo, y casi tan grande como lo de un hombre de mayor edad

--Claudia… déjame que te mire

Sin saber porqué lo hice, me desabroché la blusa, mientras él me miraba con ansiedad.

--Bueno... pero solo mirar ¿eh?

De repente se avalanzó sobre mí y metió su mano dentro de mi sostén. Inicié un movimiento para apartarle, pero me detuve… Me gustaba que me tocase… me excitaban sus manos sobando con nerviosismo mis senos… ¡me estaba tocando mi propio hermano, y me excitaba por momentos!

Bajó su cabeza y comenzó a chuparme un pezón con fuertes succiones. ¡Dios mío, qué placer comencé a notar!... Se me estaban poniendo durísimos, como si fueran a estallar. Oí un gemido... era yo misma … ¿qué estaba pasando?. Intenté besarle, buscando alocadamente su boca. Pero no respondió a mi beso, ...solo quería chuparme los pezones... primero uno... luego el otro...Mis manos le abrieron la bragueta y sacaron su polla. La vi. Era grande, me encantaba... nunca se la había imaginado así... creí que solo los mayores... Mucho más larga de lo que me había imaginado... aunque no muy hinchada… y notaba que estaba húmeda su punta… como me ocurría a mi misma en mi sexo

--Me gusta... me gusta... – decía frenéticamente mientras seguía masajeando mis pechos y a la vez comenzó a mover sus caderas, apretándose contra mí. Noté cómo se frotaba entre mis piernas, tratando de colocar su polla entre ellas.

--Por favor...espera... no sigas..— dije en voz baja -- Por favor párate... No puedes. No puedes hacer esto, eres mi hermano...

Mi sexo estaba completamente húmedo. Me volvía loca su cuerpo duro de adolescente sin experiencia, alocado por la primera mujer que tocaba con pasión, noté su polla ansiosa frotándose con fuerza sobre mi braga...... Entonces recordé que algunos chicos se corrían solos, ... y le aparté un poco...

--Despacio, despacio... Vas a correrte...

--Claudia te quiero.. te quiero... – con temblor, comenzó a abrirme por completo la blusa, a bajarme del todo el sostén, …mientras miraba mi desnudez con la boca entreabierta y los ojos llenos de pasión

Mirándole fijamente, le dije en voz baja

--Raul... ¿quieres hacerlo?...

Se lo había preguntado, pero yo estaba ansiosa por follar con él. Cuando lo hizo otro día, todo había sido rápido… y ahora era yo quien le había provocado..,. quien quería disfrutar de su cuerpo juvenil…Le así la polla y deslicé con suavidad su piel una y otra vez… una y otra vez… Se hinchaba por momentos… ántes era una polla larga, pero no muy hinchada… como suelen tenerla los chicos jovencillos… ahora crecía monstruosamente… tenía el glande brillante y parecía a punto de estallar

--¿Te gusta?.... ¿es así como te haces una paja? – y lo dije mientras aumentaba el ritmo de mis movimientos sobre su miembro.

--Sigue..sigue…sigue—decía con voz entrecortada

Cuando ví cómo en su polla comenzaban a aparecer los primeros espasmos me detuve de golpe.

--¿Quieres que dure?...

Me miró con una cara que me dio miedo. No era el rostro de mi hermano, sino el de un hombre que me deseaba… casi tanto como debía desearle yo

-- Desnúdate... despacio, despacio...

Vi como se desnudaba sin apartar la vista de su miembro rígido balanceándose enfrente de mí... ¡era enorme!. Pocas veces había visto una polla así!... No se porqué, pensé en chupársela… y se la volvía a coger con la mano

Raul me apartó con fuerza.

--Quiero joderte… quiero joderte… --- y se tiró sobre mí con furia, estrujándome los pechos y hundiendo su cabeza entre ellos, mientras apretaba fuertemente su polla contra mi sexo

--Raul,…me estas asustando… por favor… Raul,…para…por favor, no sigas… no sigas…-- pero su ardor me extasiaba, notaba su cuerpo apretado con pasión, cómo buscaba torpemente mi sexo. --oh dios mio… Raul… por favor…oh …ohhh

Y comencé a abrir mis piernas. Entonces, noté cómo me penetraba, y yo misma me forcé contra él. Su polla se había deslizado con fuerza dentro de mí… y se agitaba brutalmente, casi tratando de atravesarme por completo

–Uaaaaa… – esto no sucedía, era una pesadilla, mi hermano me estaba follando Al principio despacio... luego con locura con fuertes empujones

Hundí mis uñas en su espalda con furor retorciendo mi cuerpo y a la vez enrosqué mis piernas sobre su espalda.

--Uuuaa…. Oh dios…oh dioooooss…. –gemí

El siguió bombeándome, cada vez más rápido y con más fuerza. Estaba loco... no podía parar... y yo no quería que lo hiciera...Enrosqué mis piernas alrededor de él y le mantuve apretado, mientras intentaba seguir su frenético ritmo mientras me follaba…. El siguió bombeándome, cada vez más rápido y con más fuerza. Estaba loco... no podía parar... y yo no quería que lo hiciera...

-- Claudia, qué buena…qué buena…qué buena…--decía espasmódicamente

Notaba cómo llegaba hasta el fondo…cómo retrocedía y volvía a cargar sobre mí… así una y otra vez… y otra… y otra… cada vez con más fuerza… cada vez más rápido… Me retorcía alrededor tratando de notar toda su virilidad en mi interior… un éxtasis de placer me invadía, … ¡cómo follaba!... como un animal joven aprovechando su presa

--Oh dios…Oh diooos… sigue…sigue…más…más… así…así… si…sí…siiiii…. —jadeaba con cada empalamiento mientras él callaba y jadeaba sobre mí, hasta que comenzó a quedarse rígido, apretándome con fuerza

-- Me voy a correr... me voy a correeer...

Y fue entonces cuando me llené de pavor

--¡Raul!… ¡salte, salte!… ¡dentro no!…¡salte…Raul, por favor…!

Pero él siguió sin oírme, mientras yo notaba cómo su polla se hundía cada vez con más fuerza, manteniendo la tensión, …y noté cómo sus testículos se apretaban…se iba a correr…iba a eyacular

Sentí la tensión dentro de mi cuerpo y el estallido de su orgasmo y la proyección de su esperma en mi interior con fuertes espasmos

--RAUL!!! …NOOOOO!!!! --chillé

--Uaaa…ua….uaaaaaa…..---jadeaba mientras eyaculaba, pero siguió bombeando, aunque yo tratara desesperadamente de separarme de él, notando el estallido de mi propio orgasmo que me invadía en oleadas….

Finalmente se colapso encima de mí respirando con fuerza.

Respirando pesadamente, pensé en lo que había ocurrido. Me había cepillado a mi hermano… El placer aún me invadía y solo pensaba en él, mientras observaba su cuerpo desnudo respirando con fuerza….

Raul pareció despertar y se volvió hacia mí:

--¿Lo hacemos otra vez?

Me di cuenta de la monstruosidad de lo que había ocurrido.

--Mira Raul… lo que hemos hecho no está bien…tu eres mi hermano

Sin hacerme caso adelantó su mano para tocarme el pecho, pero le aparté.

--Oye, ya esta bien… si te vuelves a calentar te haces una paja… eres un chiquillo…buscate alguien de tu edad

Y me fui al baño, simulando que no tenía ningún interés por él.

¡Pobre Raul!. Espero que no le haya afectado mucho, estas cosas a los 13 años pueden dejar huella

OS AGRADEZCO VUESTROS COMENTARIOS: delgak2002@yahoo.com