Clases practicas de educación sexual en Quito (2)

Clases practicas de educación sexual en Quito (2)

De cómo Belén y Alejandro inician su vida sexual.

Quito 22-11-2006

Lo primero que hicimos fue dirigirnos a mi casa, en el trayecto les pedí que me contaran como ocurrió el incidente donde perdieron la virginidad.

Como toda relación entre adolescentes fueron primero las miradas, luego acercamientos esporádicos y un día cualquiera el primer beso, que en las sucesivas visitas devinieron en manoseos a escondidas.

Aquel día en que nos reunimos para planear las vacaciones familiares todo se salio de control.

Iniciaron con unos besos ocultos mientras veían televisión esperando a que Patricia le venciera el sueño, cuando ella se fue a dormir ellos ya solos en el cuarto de Belén, empezaron a besarse.

Los dos de pie tan solo protegidos por el pequeño espacio que hay entre la puerta abierta y la pared (el hermano de mi esposa les tienen prohibido cerrar la puerta de los dormitorios cuando hay visitas, en especial de los primos.).

Alejandro introdujo una mano bajo la blusa, fue allí donde por primera vez acaricio un seno denudo, Belén con mas excitación que miedo palpo el miembro de Alejandro que ni tonto ni perezoso lo saco para que su prima lo pueda manipular libremente.

Belén quedo impresionada por el rosado intenso de la punta y lo grande que era, lo tomo con su mano, y se dio cuenta cuan suave era su piel y cuan rígido estaba.

Cada sensación que se provocaban se hacia mas intensa a sabiendas que en le piso de abajo nos encontrábamos los adultos cada vez mas alegres por los efectos del alcohol.

Alejandro muy excitado se dio modos para bajar hasta las rodillas el muy estrecho pantalón de su prima, Belén recordando alguna conversación con sus amigas de colegio pensó que solo se frotarían sus sexos como un juego nada más.

Alejandro que ya se había bajado su pantalón introdujo por entre las piernas de su prima su miembro, lo acomodo a lo largo de los labios mayores, y comenzó un mete y saca ayudado por la cada vez mayor cantidad de lubricante con que su prima le regalaba.

En los tres minutos siguientes los senos de Belén fueron amasados con cierta brusquedad por las inexpertas manos de su primo, ella no dijo nada primero porque le estaba gustando mucho el jueguito y segundo porque chupaba la lengua de su primo, y el sentir un pene de Alejandro luchar entre sus piernas le provocaban sensaciones que le hacían lubricar cada vez mas.

Le habría gustado sacarse la blusa para permitirle una mejor manipulación, pero el miedo a que suban alguno de los adultos se lo impedía, Alejandro decide tocar las nalgas de su prima y descubre que si las empuja contra si mismo se intensifica las sensaciones que le llegan a su pene, pero en una de estas empujadas el pene toma otra ruta que ayudado por la lubricación de su prima rompe el himen y la penetra por completo.

Apenas si pudo sentir algo más ya que la sensación de dolor de Belén unido a que un poco de sangre le empezaba a salir interrumpió el juego.

Belén asustada obligo a su primo a que retirara su pene, pero el flujo de sangre no se detenía, manchando en pantalón, como el flujo de sangre fue abundante fue necesario que se sacara el pantalón y pusiera un paño entre sus piernas para retener el flujo de sangre, ni idea de ir al baño ya que algún adulto podría subir.

Sin saber que hacer deciden que Alejandro despierte a su prima Patricia quien lo único que se le ocurrió fue ir en busca de mas paños y aspirinas, entraron en desesperación ya que si sus padres se enteraban tendrían muchos castigos incluso talvez el uso de violencia como correctivo (ya les he dicho que mis cuñaditos no son que digamos liberales), en estado de nervios la pequeña de Patricia baja a la cocina por mas paños llevando en la mano uno con los que ayudaba a contener el flujo de sangre.

Allí fue cuando entre en escena como ya les havia contado.

Pues bien de eso ya habían pasado meses y allí estaban los dos chicos en mi casa dispuestos a continuar lo que habían interrumpido pero esta vez seria yo quien les diría lo que tiene que hacer.

Y esta vez seria yo quien los guiaría en el descubrimiento de su sexualidad, en un lugar seguro tranquilo, sin miedo a interrupciones, ni enfermedades ni a una moral que les castigue por iniciar su vida sexual.

Continuara