Cita A Ciegas

Conocer a alguien en línea tienes sus riesgos, y Toby descubrirá que no todo es como lo pintan.

Viernes; 11 pm. En un baño de un club nocturno, un joven de 18 años de nombre Toby; estaba siendo enculado por una chica negra de 25 años llamada Jasmine. Se habían conocido esa misma noche en persona, y horas antes chatearon en un foro en línea. El chico gemía sin parar mientras Jasmine le follaba el culo con su enorme verga. Pero mejor retrocedamos unos días antes; para comprender como Toby terminó en ese lugar.

Lunes, 10 am. Toby, un chico de lentes; rubio, delgado y simpático de 18 años del oeste de Londres, estaba tocando la puerta de una casa en Charing Cross Road, unos segundos más tarde; una chica rubia de su misma edad abría la puerta con una sonrisa de oreja a oreja. ‘’Pensé que no ibas a venir’’ – dijo alegremente la chica – ‘’Pasa, mis padres estarán fuera todo el día y la casa será para nosotros’’ – añadió, guiñándole un ojo. Toby sonrió tímidamente y entro. Siguió a su novia escaleras arriba, que vestía un pequeño vestido rosa hasta los muslos. Peggy lo llevaba de la mano muy emocionada y entraron en su habitación.

‘’No seas tímido, Toby’’ – dijo Peggy mientras acorralaba contra la pared a su nervioso novio. La muchacha comenzó a masajear el enorme bulto en la entrepierna del chico, que seguía muy nervioso; pero la mirada de Peggy era de completa lujuria, pues había esperado ese momento por varios meses.

‘’Estas duro como roca, cariño. Me muero de ganas de chuparte tu enorme verga’’ – dijo sensualmente Peggy acercándose a su novio.

‘’Eh… podríamos no se… esperar un rato más… Aún no he visto tu casa’’ – dijo Toby con nerviosismo sin poder quitar la mano de su novia de su tieso bulto.

‘’Pronto la vas a conocer… lo haremos en cada rincón. Todas me van a envidiar, pues este monstruo de aquí – dijo masajeando la verga de Peggy por encima del pantalón – va a ser todo mío.’’

‘’No deberíamos de… acelerar las cosas… ‘’ – tartamudeo Toby algo sudoroso.

‘’No te preocupes, te enseñare lo mío en un momento’’ – coqueteo Peggy, sin dejar de acariciar el descomunal paquete de Toby con una mano, y soltando un tirante de su vestido a un lado con la otra.

‘’Detente… por favor…’’ – rogó el chico a su lujuriosa novia.

‘’Mmm no temas, este gigante de aquí saldrá enseguida’’ – dijo Peggy desabotonando el pantalón de Toby y bajando la cremallera. La chica se relamía al hacerlo pero cuando bajo el pantalón de Toby, palideció por completo…

Un gran pepino salió despedido de la entrepierna de Toby, y casi golpeo a Peggy; que vió además un pequeño trozo de carne de unos 5 cms adornada por dos pequeños testículos, Toby tenía un micropene…

‘’¿¡Pero qué demonios!? – exclamo en shock Peggy con lo que estaba viendo.

‘’Yo-yo-yo… lo pu-puedo explicar… lo juro…’’ – titubeó desesperado Toby.

La chica gritó histérica; e intento golpear a Toby. El joven como pudo esquivó el golpe y con dificultad salió de la habitación, en la carrera se subió lo más que pudo sus pantalones y bajo a toda prisa las escaleras, con Peggy a su espalda gritándole enloquecida. Toby cruzo como un rayo la sala de estar y llegando a la puerta, se resbalo con la alfombra y Peggy logro alcanzarlo y asestarle una patada. La chica abrió la puerta de la casa y a puntapiés saco al pobre Toby.

‘’¡Lárgate, mentiroso depravado!’’ – gritó Peggy al tiempo que cerraba la puerta violentamente. Toby quedo de rodillas, completamente avergonzado por lo sucedido cuando la puerta volvió a abrirse.

‘’¡Y llévate tu asqueroso pepino, idiota!’’ – dijo la chica lanzándole el pepino directo a la cabeza.

Toby, dolorido por el golpe, tomo el pepino y se lo guardo a un costado y se puso de pie, caminando lentamente hacia el metro; cabizbajo. Ya en el metro, espero un tren que lo llevase a casa, y tratar de encontrar una solución. Pero lo peor para el infortunado Toby vendría al día siguiente en la escuela.

Toby llegó temprano, como era habitual, y se sentó en un salón vacío esperando encontrarse con Peggy para explicarle todo, pero en eso escucho un murmullo de voces y risas en el salón contiguo; y decidió asomarse para ver de quien se trataba.

‘’Chicos, chicos, adivinen. La polla de Toby no es el monstruo que todos creíamos…’’ – escuchó Toby, y supo que era Peggy la que estaba hablando – ‘’…solo se mete un pepino bajo su pantalón.’’

Hubo un estallido de risas, y algunos se sobresaltaron por la revelación que les hacía Peggy pues no daban crédito a sus palabras. Varias voces hablaban al mismo tiempo ‘’¿Y qué tan pequeña la tiene?’’ o ‘’No bromeas, ¿en serio?’’

Toby espió a través de un pequeño vidrio en la puerta y vio a Peggy frente a todos sus conocidos y compañeros de clase y cómo con sus dedos índice y pulgar les indicaba lo pequeño de su miembro

‘’…así de pequeña es. Necesitarían un microscopio para poder verla bien’’ – escucho decir Toby a Peggy. Otro estallido general de risas y burlas se oyó con mayor fuerza. Toby ya sabía que su vida estaba arruinada, pronto todos sabrían su secreto.

En eso, alguien exclamo – ‘’¡Miren, Toby está ahí afuera!’’ – y de pronto la puerta del salón se abrió y un coro de risas lo recibió. Una mano lo jaló y entró al salón, muy avergonzado para mirar a todos a la cara.

‘’Enfermo pervertido’’ – escuchó decir a Jane.

‘’Eres patético’’ – dijo Betsie.

‘’Apuesto a que te comes ese pepino al final del día, a que sí?’’ – se burló Gareth.

‘’Así que ese era el secreto de tu ‘’legendario’’ paquete… ¡ja!’’ – dijo con sarcasmo Edward.

‘’Oye, puedo entender cómo te sientes… pero meterte eso ahí es un poco… no sé, extraño tal vez…’’ – dijo James con algo de consternación en su mirada.

Al salir del aula, todos en el pasillo empezaron a reírse y señalarlo. Ya la historia había corrido a través de mensajes de Whatsapp y ya toda la escuela lo sabía. Ese día fue fatal para Toby, pero los siguientes tres días la cosa se puso peor para él y deprimido, decidió no ir el viernes a la escuela.

La verdad, no era la primera vez que Toby padecía por su micropene. Se había mudado de Cambridge a Londres por la misma circunstancia dos años antes, cuanto tenía 16. Entonces salía con una chica de nombre Anne y pues la misma situación se le presento, terminando a causa de su increíblemente pequeño miembro. Anne empezó a hablar de ello con sus amigos y estos difundieron la información en su escuela, las burlas y rumores se pusieron muy feos para él y le pidió a sus padres cambiar de escuela, con la excusa de que prefería estudiar en la capital.

Toby no quiso volver a vivir la misma experiencia en Londres, así se le ocurrió la idea de verse más ‘’dotado’’. Un día tomo ‘’prestado’’ un pepino del refrigerador y se lo colocó en su entrepierna, y a pesar de su cara infantil y cuerpo delgado, le gusto la atención que recibía cuando todos se fijaban en el enorme bulto entre sus piernas. Así fue como logro conseguir una nueva novia, Peggy. Toby pensó en decirle la verdad, pero las cosas sucedieron muy rápido que paso lo que el joven no quería volver a repetir.

Esa era la historia de Toby antes de conocer a Peggy y bueno… tras terminar con Peggy. Sin ánimos de ir a clase ese viernes el chico encendió su computador y ya una vez iniciado el sistema, accedió a la Internet. No sabía qué hacer, pues no se atrevía a abrir sus redes sociales por temor a encontrarse con más burlas, así que entro en un foro online y estuvo por largo rato mirando en los distintos links, sin fijarse en nada. En eso encontró una categoría – Sexualidad – e hizo click en ella. Miró cientos de preguntas de usuarios anónimos que discutían acerca de sexo, suspiró profundamente antes de presionar la opción de ‘’Pregunta’’.

‘’¿El tamaño importa?’’ – escribió Toby.

El muchacho estuvo varios minutos sin recibir comentarios, hasta que una lluvia de respuestas inundó su enlace. Distintas y variadas, algunas le levantaron el ánimo, pero otras… solo hicieron que se deprimiese aún más en su situación desesperada. De pronto, una ventana de chat privado se le apareció y alguien que se identificaba como ‘’SweetSeduction’’ le estaba escribiendo. Dudando un poco, eligió responderle.

‘’Estuve leyendo tu pregunta y los comentarios, supongo que tienes problemas con ello’’ – escribió SweetSeduction.

‘’Si, algo así’’ – respondió Toby.

‘’¿Es tu nombre real Toby?’’ – preguntó SweetSeduction.

‘’Si.’’

‘’Mi nombre es Jasmine, un placer’’ – respondió SweetSeduction.

‘’Igual’’ – respondió el chico.

‘’Me gusta tu foto de perfil, te ves muy lindo’’ – escribió Jasmine.

‘’Gracias’’ – respondió Toby, muy cohibido con ese comentario.

‘’¿Cuántos años tienes?’’ – preguntó ella.

‘’18 ¿y tú?’’ – dijo Toby.

‘’25. ¿Te gustaría ser amigos?’’ – escribió Jasmine.

‘’Si, pero…’’ – escribió dubitativo Toby pero otro mensaje de Jasmine llegó.

‘’Bien, no te preocupes. No creo que valgas por el tamaño de tu pene. Me gustan las personas por como son, y tú eres muy lindo’’ – escribió la chica.

‘’Gracias’’ – atinó a escribir el joven, muy sonrojado y agradeciendo no tener ese conversación en persona.

‘’Cuéntame algo de ti, ¿qué te trajo al foro a hacer esa pregunta?’’ – quiso saber ella.

Toby no dudo, y se desahogó con la desconocida. Le conto toda su historia con Peggy, y como se había dado cuenta de su pequeño problema y como ahora todos en la escuela se burlaban de él. Jasmine le dio moral y palabras de comprensión – no dudo en denigrar a Peggy y su ‘’actitud de zorra’’ – y que él no tenía la culpa de lo sucedido. Toby agradeció las palabras de aliento y conversaron por largo rato.

‘’Si te soy sincera, a mí no me importa el tamaño del pene de un hombre, sino el de su trasero’’ – escribió al cabo de un rato Jasmine.

‘’¿Cómo?’’ – escribió Toby un tanto sorprendido.

‘’Jaja, solo bromeaba, ¿o tal vez no? ;)’’ – respondió ella.

‘’Oh jaja’’ – respondió Toby menos incómodo.

‘’Siento que después de tanto chatear contigo, como si en verdad te conociera de toda la vida. Te prometo que si nos llegamos a conocer en persona, te ayudaré a encontrar a una buena chica para ti’’ – aseguró Jasmine.

‘’Oye yo también pienso lo mismo. De verdad apreciaría la ayuda’’ – respondió contento el chico.

‘’Y si no te consigo a una buena novia, estoy dispuesta a ser tu novia’’ – escribió Jasmine.

‘’¿Qué? ¿No bromeas?’’ – respondió Toby medio atontado.

‘’¡Claro que no! A menos que no te gusten las chicas mayores’’ – aseveró ella.

‘’No-no. No es problema para mí’’ – respondió Toby apresuradamente.

‘’¿¡De verdad!? En ese caso, me veo tentada a no buscarte a otra chica y ser tu novia. Te tendré solo para mí :P’’ – afirmó Jasmine.

La conversación siguió discurriendo en ese tono y pronto supieron que vivían en Londres, así que Jasmine sugirió conocerse en persona en su club favorito, esa misma noche. Toby sin pensarlo aceptó y quedaron de verse a las 10. Se despidieron al rato y Toby comenzó a saltar de emoción y a buscar en su closet las mejores ropas para salir esa noche. Pidió permiso a sus padres (mintió acerca de ir a conocer a una chica de internet) diciendo que iría con sus amigos de la escuela.

Paso toda la tarde mirando su reloj cada pocos minutos, esperando a las 7 de la tarde para meterse a la ducha y prepararse. Llego el momento y no perdió un segundo, se duchó y salió de regreso a su cuarto. Se puso una camisa de mangas largas color crema y un pantalón azul oscuro, remato con unos zapatos deportivos negros y se vio en el espejo de su cuarto; se veía bien y casual para la ocasión.

Salió de su casa a las nueve menos veinte, y rápidamente tomo un bus hacia el lugar acordado con Jasmine. Toby se sentía muy nervioso, era la primera vez que iba a salir con una chica mayor que él y la idea le causaba mucha emoción, y algunas inseguridades propias de un adolescente pero se infundió aliento durante el camino de que todo iría bien. Llego al sitio a tiempo, y entro al club no sin dificultades, dentro; la atmosfera era increíble. Música a todo dar, luces de colores y reflectores enceguecían y distorsionaban el panorama, haciendo apenas reconocible a la gente que bailaban en el centro del lugar.

Toby encontró una mesa para dos vacía y ocupo una las sillas, revisó su móvil y eran las diez menos diez. Pensó que no era el mejor lugar para una primera cita (y a ciegas), pero en la premura no quiso rechazar la propuesta de Jasmine. Toby jamás había estado en un club y la verdad se sentía algo incómodo, el ruido y la sensación de no pertenecer a aquel ambiente lo acosaba.

Otra duda paso por su mente. ¿Y si todo era una broma y se quedaba plantado allí? Pero de inmediato ahuyento esa posibilidad latente, la siguiente fue que Jasmine había aceptado ser su novia después de ver su foto en el chat, y haber hablado por unas horas. ¿Porque? Apenas y se habían conocido más no lo suficiente, y lo otro fue que tal vez, Jasmine fuese una chica fea y desesperada por conseguir un novio. Aquello cobro fuerza en su cabeza, aunque también se dijo que no estaba en posición de ser muy exigente, pero y si fuese verdad; no soportaría salir con una chica que no pudiese atreverse a mirar a la cara por su apariencia.

‘’Tal vez me apresure en aceptar esta cita’’ – se dijo Toby mientras seguía esperando.

Inmerso como estaba en sus pensamientos y temores, una chica alta se acercó hacia su mesa y le saludó – ‘’Hola cariño, te he reconocido al instante. No muchos van a un club así como te vistes’’ – dijo con una sonrisa.

Toby alzo su mirada, y prácticamente sintió que dejo de respirar. Una chica negra con cabello algo revuelto, senos generosos y sensuales curvas estaba de pie frente a él. Vestía una blusa blanca ajustada que tapaba parte de sus brazos y dejaba sus hombros al descubierto, a excepción de un par de tirantes blancos del sujetador, la prenda acentuaba el curvilíneo contorno de su dueña, una pequeña minifalda negra con cinturón rojo. Las piernas eran largas y sensuales. El joven miró de arriba abajo sin poder creerlo – ‘’¿Es esta sexy chica Jasmine? – pensó – ‘’Pero que tetas… y esas piernas largas… pero que suerte la mía.’’

Se saludaron y se sentaron en la mesa, Jasmine ordeno una botella de vodka y empezaron a conversar animadamente. Toby seguía sin creérselo, pero ahí estaba ella; tan increíble y hermosa. Pronto descubrió que la sonrisa de ella lo cautivaba al extremo, era muy divertida además. Comenzaron a beber, y Toby no se controló a la hora de los tragos, bebía como si de agua se tratase. Jasmine continuaba llenando su vaso a cada rato y el joven iba a ello, vaciando su vaso casi de inmediato. El chico se preguntaba como una chica como Jasmine – tan hermosa – había preferido estar con él, cuando podía tener al hombre que quisiese, pero pronto esa duda se desvaneció de su mente con tanta bebida; ya era difícil pensar.

En eso, la música cambio; y un rugido de emoción se oyó en todo el club.

‘’¡Ven, vamos a bailar; ya comienza lo bueno!’’ – exclamó Jasmine agarrando a Toby del brazo.

‘’Es-espera’’ – tartamudeo Toby, pero ya se encontraban en medio de la zona de baile.

Jasmine comenzó a moverse muy eróticamente al ritmo de la música, Toby, con los tragos que tenía encima se sentía muy confuso y sin saber qué hacer. Pronto lo recordó.

‘’Erh… no-no no se bailar’’ – balbuceó el chico algo apenado, teniendo que repetirlo un par de veces por el ruido.

‘’No hay problema, te enseñare’’ – dijo Jasmine con una sonrisa al comprender lo que decía – ‘’Acércate a mí’’

Toby se acercó a Jasmine lo más que pudo, la chica lo tomo de las caderas y las nalgas del chico se pegaron a su entrepierna. El joven quedo algo sorprendido mientras Jasmine lo acariciaba con morbo recorriendo su área intima por encima de su pantalón.

‘’Creo que nos vemos extraño… la gente nos va a mirar’’ – repuso Toby.

‘’¿Y? Déjalos que miren’’ – dijo Jasmine a su oído y al mismo tiempo se frotaba contra las nalgas del chico.

Toby en ese instante sintió un bulto que presionaba contra él, pero pensó que todos esos tragos le hacían imaginar cosas. Jasmine le pidió que levantase los brazos y empezaron a moverse – o más bien, Jasmine llevaba el ritmo de todo – Literalmente, pareció a Toby que ella se le había pegado con pegamento, pues adonde se movía, ella estaba detrás de él sin despegarse un centímetro de sus nalgas y manoseando sus caderas. El chico sabía que no era bueno en eso de bailar y pensó que se veían ridículos, pero nadie les prestaba atención. De nuevo volvió a sentir aquella extraña punzada en sus nalgas pero no se mortifico por ello, solo quería seguir bailando con Jasmine; que en varias ocasiones se abrazó al joven, que sintió como los senos de su compañera se aplastaban contra su espalda.

Las canciones iban pasando y Toby no supo con exactitud cuánto tiempo estuvo bailando con Jasmine de esa forma. Eventualmente, la misma pregunta que mucho rato atrás; sobre porque Jasmine quería estar con él, regreso a su mente. Pronto empezó a sentirse algo mareado y dejo de pensar con claridad, los efectos del alcohol lo afectaban con más fuerza cada momento que pasaba hasta que ya no pudo seguir bailando.

‘’¡Cr-creo que… necesito ir al baño!’’ – exclamó Toby a su novia, terriblemente pálido y sin fuerzas.

‘’Tranquilo, te llevo hasta allá’’ – respondió Jasmine y se puso el brazo derecho de Toby sobre sus hombros, pasando ella su brazo izquierdo alrededor del torso del chico, borracho; y lo guio lejos de la pista de baile en dirección a los baños.

En el trayecto, Toby perdió el conocimiento. La chica sonrió con algo de malicia y continúo llevando a su novio al baño de mujeres. Entraron y Jasmine cerró la puerta.

‘’Creo que bebí demasiado… la cabeza me duele. Siento algo en mi boca… duro y grande’’ – pensó Toby con la vista algo nublada – ‘’No creo que este soñando, ¿Dónde estoy?’’ – caviló unos segundos antes de que su vista aclarase un poco más y pudiese ver con claridad. Estaba de rodillas dentro de un baño, con una verga larga, gruesa y negra en la boca; el chico abrió bien los ojos horrorizado y saco aquel miembro de su boca.

‘’¿Jasmine? Pero que… ¿tienes un pene? ¿Qué está sucediendo?’’ – dijo Toby en shock.

‘’No te detengas ahora, apenas llegamos a la mejor parte’’ – respondió Jasmine con una radiante sonrisa. La mujer puso una mano en la cabeza del chico y con la otra le acerco su enorme y masivo miembro a sus labios. Toby los apretó, negándose a recibir de nuevo esa magnífica polla dentro de su boca, pero Jasmine seguía insistiendo y frotaba su glande por los labios del chico – ‘’Abre esa linda boca para mí, no te resistas’’ – dijo la chica tras varios segundos intentando pero sin éxito, y ya algo irritada retiro su mano sobre la cabeza de Toby y le apretó la nariz.

‘’Dije, abre la boca, perra’’ – dijo frustrada Jasmine, que empujaba su glande entre los labios de Toby; que trataba de resistirse pero eventualmente la falta de aire hizo efecto y abrió la boca. Jasmine deslizó su verga entre los labios abiertos de Toby e inexorablemente esa monstruosa tranca negra se introdujo de nuevo en la boca del chico. El joven trató de farfullar pero era inútil – ‘’Ya casi llegamos’’ – dijo Jasmine cuando más de la mitad de su polla había sido engullida. Eventualmente, Toby alojo toda esa verga en su boca, el glande de la chica le llegaba hasta la garganta y apenas podía respirar; su nariz estaba pegada a la pelvis de Jasmine; que apoyaba sus dos manos en su cabeza y muy satisfecha por haberlo conseguido.

‘’Que bien… toda mi polla hasta las pelotas… buena perra,’’ – murmuró Jasmine.

Así estuvo por unos segundos hasta que Jasmine se la saco a la mitad y volvía a hundirla hasta su campanilla. Toby no entendía nada, como una chica tan hermosa como Jasmine podía tener… una verga, y de semejante tamaño; la mujer lo tomaba de sus cabellos y lo obligaba a chupar sin cesar. Era tan fuerte que apenas se oponía a ser usado como juguete sexual, solo tragaba y tragaba polla, Toby por momentos creyó que eso no le podía estar ocurriendo, pero se resignó ante la cruda realidad: le estaba dando una mamada a una chica negra.

Llego a un punto en que de tanto ir y venir de la verga de Jasmine en su boca, que el joven dejo de resistirse; no obstante se dio cuenta que empezaba a disfrutar un poco de la situación, pero tal vez era por todo el vodka que había ingerido previamente. De pronto sintió que Jasmine aumentó la velocidad y adivinó que estaba a punto de llenarle la boca de semen; el chico solo se dejó hacer y esperó lo inevitable. Jasmine lo agarró de los cabellos con mayor rudeza y con un empujón brusco, le hundió su polla de una al tiempo que eyaculaba incontrolablemente – ‘’Me corrooo!!!’’ –exclamó la chica.

La cantidad de leche fue abundante, y Toby tragó gran parte en tanto por la comisura de sus labios escurría algo del espeso néctar que había fluido de la polla de su novia. Después de eso, el chico se volvió a sentir muy débil y todo se nubló.

Al poco tiempo, Toby comenzó a sentir una ligera punzada en su trasero, algo trataba de penetrarlo; crecía más y más en su interior – ‘’¡Aaargh!’’ – gimió medio consciente el chico. Luego recobró la noción de la realidad y se dio cuenta que estaba encima del retrete a cuatro patas, sin pantalón ni ropa íntima y Jasmine se encontraba detrás de él; sujetando con firmeza sus nalgas e introduciendo ese enorme mástil negro en su culo. Toby trató de escapar pero estaba fuertemente sujeto y con un empujón, Jasmine enterró más de la mitad de su verga en el culo del chico.

El joven no podía creer lo que le estaba ocurriendo, tenía que detenerla o le destrozaría el ano. Jasmine lentamente metía y sacaba su polla, ayudando a dilatar el orificio y facilitar la penetración.

‘’No…’’ – gimió Toby con la angustia del desvirgue.

‘’Hmmm…’’ – fue la respuesta de Jasmine mientras continuaba su lento penetrar.

‘’Por favor…’’ – suplicó el chico con la agonía reflejada en su mirada.

‘’¿Por favor qué?’’ – respondió Jasmine hundiendo un poco más su polla.

‘’Por favor detente…’’ – rogó Toby en cuanto sintió su interior aún más lleno de verga.

‘’¿Detener qué?’’ – dijo la chica terminando de pegar su pelvis a las nalgas de Toby.

Toby aulló quedamente al sentirse lleno de verga, la sentía hasta los intestinos y la agonía era indescriptible. Jasmine sacó un poco su verga para hundirla con una salvaje estocada hasta el fondo; Toby gruñó presa del dolor y su novia comenzó a follarlo a saco. Sujetado firmemente y debilitado por el alcohol, Jasmine embestía con violencia y profundidad a su joven cita, que gemía sin descanso y apenas resistía la totalidad del miembro de su novia.

Toby percibía su esfínter palpitando salvajemente mientras Jasmine hundía su verga al fondo de sus intestinos, y ya adentro al completo; la movía en círculos rítmicamente logrando rendir al chico a ese asalto anal.

‘’Rayos… estas jodidamente apretado. No recuerdo la última vez que folle un culo así de apretado’’ – dijo Jasmine muy excitada, en tanto continuaba el desvirgue. La chica dejo de moverse en círculos para darle embestidas bien fuertes y profundas; a pesar de la brutal enculada y del incesante dolor y ardor en su retaguardia, Toby no parecía querer detenerla. Con ambas manos apoyadas en la porcelana del WC, solo se dedicaba a gemir como zorra en celo y notaba que ya después del desagradable embate inicial, ahora se sentía diferente. El dolor no disminuía y la insensibilidad de Jasmine con su culo tampoco, pero en el fondo pensaba de otra manera.

‘’Oh si, que bien’’ – gemía Jasmine con los ojos cerrados y algunas gotas de sudor en su frente y mejillas.

En el fondo de su ser, Toby no deseaba que terminase. Lo estaba disfrutando ahora y solo quería seguir siendo enculado por esa morenaza y su poderosa verga. Ser follado sin importar nada más, incluso ya no le interesaba si Jasmine tenía polla o era producto del alcohol, ya no importaba; si podía ser su novio no le interesaba ser el pasivo, ya que con su micropene jamás follaría a una chica como lo estaba follando Jasmine, así que tal vez esto estaba destinado a sucederle y eso fue lo que lo hizo rendirse al agresivo asalto de su nueva novia.

La mujer aceleró sus embestidas durante varios minutos, y Toby parecía un muñeco ante la arremetida. Pronto, la chica sujeto con mayor fuerza las nalgas del joven y con unas cuantas estocadas demoledoras, enterró su polla en el culo de Toby ‘’Oh jodeeerr’’ – exclamó Jasmine al verter chorros y chorros de leche dentro de su novio. Toby se limitó a cerrar sus ojos y gritar extasiado al ser llenado de leche caliente.

Tras unos segundos unidos cual perros en celo, Jasmine saco su polla del culo de Toby. El chico sintió un enorme vacío en su ser, además de la gran cantidad de leche en su interior; por suerte no era capaz de ver cómo había quedado su ano, dilatado por semejante monstruo de carne. Jasmine sonrió al ver ese otrora estrecho culo, ahora totalmente abierto y chorreando algo de semen fresco.

‘’Uff… esto ha sido jodidamente genial’’ – repuso la chica muy satisfecha y algo exhausta.

Toby aún seguía recobrando el aliento, y gemía débilmente. No podía ponerse de pie, y menos después de lo acontecido; se mantenía en cuclillas sobre el WC por pura inercia tras la intensa culeada.

‘’Sabes Toby, naciste para esto. Serás mío… tal vez no tengas lo que se necesita en la delantera, pero tu trasero es magnífico… Soy tu complemento perfecto, ¿no crees?’’ – dijo Jasmine.

Jasmine levantó a Toby y se sentó encima, luego puso al chico sobre ella de forma que quedase empalado sobre su verga; aun dura. Toby gimió por lo bajo mientras su amante le susurraba al oído – ‘’Toby, mañana vendrás a mi casa y vamos a follar como locos’’. El joven cerró los ojos como queriendo contenerse y luego respondió entrecortadamente – ‘’Si… Jasmine, yo-yo… ¡me vengo!’’ – y al tiempo que lo decía, de su pequeño miembro salía un pequeño trallazo de semen, para placer de Jasmine.

Así fue como conoció Toby a su nueva novia. Y vaya novia que ahora se gastaba el chico…