Cinemateca: Calígula (1977)
Opinando sobre películas de cine erótico; Calígula de Tinto Brass: para leer y comentar.
¿Cine erótico?, ¿Cine X?, ¿XX?, ¿XXX?, ¿manga?, ¿hentai?; en cierta medida, todos los que participamos de una manera u otra en TR, "bebemos" de estas corrientes del llamado séptimo arte: unos por el simple deseo de disfrutar del placer solitario o en compañía; otros, como fuente de inspiración para nuestros relatos (o fantasías). Prácticamente todos hemos tenido un recuerdo entrañable y/ó excitante con algún film: nos vinculamos con el cine erótico y porno de una manera muy profunda, y viendo que muchos de los amigos de TR gustarían de opinar sobre el tema, lanzo algunas humildes opiniones personales sobre algunas películas de cada uno de estos géneros (comenzando por el cine erótico y de ahí para adelante), y sin ánimo de poner una voz cantante o erudita en el asunto: solo mi opinión, para de ahí desarrollar un intercambio de ideas y comentarios (y también esperando que otros más se animen, presenten y comenten sus películas preferidas, o no)
"Calígula" (1977), Director: Tinto Brass
Considerada como drama erótico/histórico (vetada, censurada y prohibida en más países de los que recuerde) TRAMA.- Producida por la revista "Penthouse", es un drama de muy alto contenido erótico que narra el ascenso y caída del emperador romano Calígula y sus crueles métodos para ascender al trono y su afición por todo tipo de orgías, humillaciones y demás vejaciones, las cuales componen la trama central del film. Destacan en el reparto conocidos y muy reputados actores (Peter OTooole, Malcom McDowell, Hellen Mirren, John Steiner, Paolo Bonaccelli, Teresa Ann Savoy, entre otros).
A FAVOR: La soberbia actuación de Malcom McDowell, refleja fielmente a uno de los tiranos más abyectos de la historia de la humanidad de una manera absolutamente magistral y sin complejos: exagerado, enajenado, pervertido, depravado y malévolo. Simplemente calca al personaje histórico. Se destaca en este film un espíritu profundamente libre. No hay recato ni mesura -ni ganas de tenerlas-, y tampoco pretende una visión "mitificadora" del personaje. Aquí la historia importa tanto como las felaciones, los cunnilingus y las orgías. La historia de Calígula es elevada hacia un protagonismo casi absoluto, pero aún así se permite el lujo de recrear las circunstancias históricas aunque estas recreaciones sean al igual, gráficas y surrealistas. Una película visceral, repleta de erotismo de alto grado (con algunas escenas directamente pornos) y un sadismo brutal. El discurso del argumento versa sobre la corrupción en el poder, sobre la impunidad descarada de quienes gobiernan a su antojo los destinos de un pueblo, y sobre todo acerca del lado bestial que subyace detrás de la persona humana: un claro ejemplo de cómo el ser humano se degrada en animal.
EN CONTRA: (opiniones en contra: no mías) una película sensacionalista al extremo, polémica y chocante para todos, absolutamente contraindicada para gente sensible y puritana. El filme se desarrolla en lo perverso y atroz, en lo lascivo e instintivo, en lo sádico y morboso, en lo irracional de los golpes bajos más repulsivos. En muchos casos a los actores renombrados se les nota "encartonados", no a gusto en sus respectivas actuaciones (como mostrando su molestia). Un nulo ejercicio cinematográfico, que la hubiese rodado mejor cualquier estudiante de imagen y sonido. Considerada por muchos casi "un porno amateur" por sus escenas menos logradas.
Si algo tengo yo en contra del film es que, como dice el refrán: "muchas manos amasan mal el pan" este último argumento es cierto en algunas escenas.
MI OPINIÓN: Esta no es otra película erótica cualquiera de Tinto Brass; en esta, el lujurioso genio italiano separa de forma brillante los conceptos narración y pasión, y propone un juego tan divertido como odiosamente perfecto. Reconstruir al emperador Calígula de una forma que solo se podría rodar: esplendor, decadencia y mucho sexo a medio camino entre el hardcore y el softcore Me encanta cómo recrea el imperio romano en su máximo esplendor/decadencia. Rompió tabúes en plenos años 70 y que está considerada un titulo imprescindible para los que sabemos valorar una buena película con alicientes sexuales, fuertes y directos, en la trama.
ESCENAS DESTACADAS: Ahí tenemos para todos los gustos, como en botica: desde la participación de extras menores de edad en la escena en la piscina de Tiberio (algo impensable en la época actual y no vuelto a ver), pasando por las perversiones en la villa del antes dicho emperador (latigazos, pissing, sado, morbo en todas sus variantes); presentes en esa escena y en las tres o cuatro orgías durante toda la trama. Sangre y efectos especiales por doquier. En fin, también este film es una oda a las denominadas "mujeres Brass" (exuberantes y de abundante bello púbico); los acercamientos a ellas, han sido una crítica constante en ese aspecto; es un debate que nos viene desde los griegos: ¿depilado o "al natural"?, por algo los griegos creaban sus esculturas tapando sea zona por considerarla "no bella". Para mí y para muchos, un coñito frondoso es algo digno de exhibirse. Escena chocante: la escena del nacimiento de la hija de Calígula. Las mejores e imperdibles: La escena de la violación, por parte de Calígula, de los recién casados, es la preferida de muchos (no exenta de ciertos toques de un humor muy brillantes), y también el trío entre Calígula, su hermana y su esposa.
HISTORIA DETRÁS DE LA HISTORIA: La idea de hacer esta película fué de Franco Rossellini, nieto de Roberto Rossellini. Por falta de presupuesto, recurrió a Bob Guccione, fundador de la revista "Penthouse", para que desempeñara labores como productor. La cosa comenzó bien y consiguieron reunir a reputados profesionales: Gore Vidal para el guión (adaptador de biografías sobre emperadores romanos (suya es la novela "Juliano", e incluso participó en la escritura del guión de "Ben-Hur"); un compositor colaborador de Ennio Morricone y un gran elenco de actores,... pero los primeros problemas surgieron en la pre-producción. La película inicialmente iba a llamarse "Gore Vidal's Caligula", pero debido a las constantes intromisiones en el guión de Tinto Brass (y sobre todo, de McDowell), Vidal decide retirarse del proyecto. Algunos actores, como Maria Schneider, también abandonaron el proyecto.
Lo peor vino cuando Guccione decidió rodar paralelamente -y en secreto-, fragmentos pornográficos para insertarlos por su cuenta, una vez finalizado el montaje original de Brass. Debido a su desconocimiento del arte cinematográfico, el resultado final fue un enredo con fuertes contrastes de calidad de imagen, interpretación y contenido entre las escenas originales y las añadidas. La mayoría de profesionales que intervinieron en el rodaje oficial (entre ellos el director), se sintieron traicionados y pidieron la retirada de sus nombres de los créditos.
Hoy por hoy se calcula que hay más de diez montajes diferentes de "Calígula" (en Sudamérica se proyectó censurada o mutilada).Yo he visto dos: uno erótico, de unos 110 minutos (y con evidentes cortes), y una versión extendida, que añade como unos 40 minutos de escenas porno y acercamientos. Este es uno de los motivos por los cuales se podría decir-, que cada persona que la ha visto, ha visto un film distinto. Asimismo, se cuenta que los actores, tras la presentación del film, John Gielgud o Peter O´Toole declararon que "no tuvieron conocimiento de que se incluirían escenas pornográficas en la película" y trataron de "marcar distancias" con la película; en ese sentido, se consideran esas declaraciones como falsas e improbables: yo he trabajado en televisión y alguna vez en una película y la posibilidad de que un actor desconozca algo así de un proyecto, con tantos extras y personal técnico involucrados, es simplemente impensable.
¿Porno semi-hardcore con trasfondo histórico?, para muchos, si.¿Película de estética "kitsch" decadente?, salta a la vista en muchas partes. ¿Contradictoria, obscena y polémica?, definitivamente. ¿Un Clásico de culto?, indudablemente, aunque muchos estén en desacuerdo. ¿Es buena?, la opinión final queda en cada uno: tu opinión es lo que cuenta,