Cinco años - 2. La segunda sesión

Todos los acontecimientos y personajes aparecidos en este relato son pura invención. Este relato está escrito para mi Ama, con el deseo que sea de su agrado. Por supuesto también espero que les guste a todos aquellos lectores que quieran leerlo.

Tras la primera cibersesión con mi Ama, esperaba con muchas ganas la segunda, pues a pesar de que me gustó la experiencia, no la disfruté tanto como imaginaba, seguramente por los nervios ante lo desconocido hasta ese momento para mí, ya que no había tenido ninguna experiencia previa de ese tipo, por eso deseaba volver a tener otra sesión.

Mi Ama me había emplazado para la segunda sesión este jueves a las 10 de la noche, pero antes me enviaría por correo su dirección de Skype. Desde entonces, me conectaba al correo a cada hora o menos para ver si tenía un nuevo correo suyo, pero éste no llegaría hasta el miércoles por la tarde.

En el correo me enviaba su dirección de Skype y una lista de cosas que debía tener preparadas para la sesión, esta vez había algunas cosas específicas que tenía que comprar en una tienda especializada (en el sex shop). Por suerte al ser la sesiónpor la noche, tenía tiempo para salir del trabajo, pasar a comprar los materiales necesarios y tenerlo todo listo para la sesión. También había añadido una nota de cómo debía esperarla para la sesión: "por supuesto, totalmente desnudo, como deben ir los perros como tú, aunque me gustó la capucha y te permitiré seguir con ella puesta, al menos de momento, quiero que me recibas de rodillas, con una erección y las manos en la nuca. Entraré justo a las 10, tu polla tendrá que estar erecta a esa hora, sino lo pasarás muy mal, pero como te portaste bien en la primera sesión, te ayudaré a mantener la erección, quiero que una vez erecta, te pongas una goma en la base de tu polla, espero que no me falles perro.".

La agregué al Skype, y volví a releer su correo unas cuantas veces, no quería pasar por alto nada, la verdad es que me excitaba de solo leer sus instrucciones, y eso, a la vez que me causaba placer por la excitación, un sufrimiento, por llevar ya una semana sin correrme, y no poder hacerlo hasta que mi Ama me lo permita. No es que sea un pajillero que se masturba a diario, pero si que empezaba a sentir una necesidad de descargar, de vaciar mis huevos, y esa sensación a veces era muy angustiosa, necesitaba distraerme con otras cosas para no pensar en ello.

Por fin llegó el jueves por la tarde, ya había pasado por el sex shop (por cierto, no sé qué pensará el dependiente, la verdad es que me dio vergüenza esta segunda vez, cosa que la primera no sentí, tanto por volver en tan poco tiempo y que me reconociera de la última vez el dependiente, como por los materiales que adquirí esta vez), y media hora antes de la sesión, ya tenía todo preparado, solo faltaba desnudarme y ponerme la polla a punto para mi Ama.

Diez minutos antes de la sesión, me desnudé por completo, me puse la capucha, y me conecté al Skype, mi Ama no aparecía conectada. Comencé a tocarme para ir poniendo a punto mi pene, tenía que ir con cuidado, no quería tener un "accidente" y correrme, pues al llevar una semana sin hacerlo, tenía bastantes ganas de descargar.

Cuando, muy poco después de empezar a tocarme, tuve una erección, cogí una goma elástica, y dándola un par de vueltas, me la puse en la base de mi pene, mi polla en ese instante, se puso aún más dura. Faltaban dos minutos para las diez, y tenía la polla a reventar, manteniéndose la erección por la goma que aprisionaba la base de mi polla, no tuve necesidad de tocarme más para mantener la erección hasta las diez, momento en el que debería de conectarse mi Ama.

Y así ocurrió, justo a las diez, un aviso sonoro me indicaba que mi Ama se había conectado, y diez segundos después recibía una videollamada de mi Ama.

De rodillas, acepté la llamada y me puse las manos en la nuca, como se me había ordenado. En vez de la cam de mi Ama, apareció una foto de su bosa, una boca que me recordó la voz dulce de mi Ama, aparecía con una mueca muy sensual, mordiendo ligeramente el lado izquierdo de su labio inferior.

[Ama] Hola perro, no quiero repetir las indicaciones de la primera sesión, debes ir absorbiendo todas las instrucciones de comportamiento que te voy dando y aplicarlas siempre cuando estés delante de mí, a no ser que te ordene lo contrario, ¿entendido perro?

[lobo] ¡Guau!

[Ama] Bien, mmm veo que tu polla está a tope, y tus huevos deben estar llenos de semen. Bien, si te portas bien, quizás puedas descargar, o quizás tengas que estar una semana más sin hacerlo, depende de cómo se me antoje al final de la sesión.

Mientras oía a mi Ama, no podía dejar de pensar en lo que me había costado sobre todo este último día aguantar sin masturbarme y descargar toda mi leche, no podía ni quería imaginar tener que soportarlo durante una semana más, esperaba que mi Ama se apiadara de mí y me dejara aliviarme al terminar la sesión.

[Ama] Aunque también puedes desahogarte ahora si lo deseas, pues como recordarás te dije, que hoy te preguntaría y tendrías que decidir si deseas seguir con esto, y cuidado con lo que respondes, pues si decides continuar, ya no podrás echarte atrás, deberás obedecer todas mis órdenes sin poner ni una objeción, si crees que algo no lo podrás hacer, quiero que primero lo intentes, y si veo que no puedes, no te preocupes, pararemos, o lo modificaremos para adaptarlo a tus posibilidades, soy una Ama muy comprensiva, pero solo si se lo merecen. Si tienes algún límite quiero que me lo digas cuanto antes, si no es ahora, te dejaré pensarlo hasta la próxima sesión. Te diré como iremos evolucionando con tu doma como perro, para que veas si es lo que quieres o no: seguiremos un tiempo solo con cibersesiones, hasta que yo decida pasar a tener sesiones reales, esto puede ser dentro de un mes, o de unos años, ya veré. Si decides seguir, te pediré que enfoques con la cam a tu cara, y que te quites la capucha, y digas con tu voz que desde este momento tu cuerpo y tu mente pasa a ser posesión de tu Ama, y estarás disponible para cuando ella desee utilizarte. Será una especie de ceremonia de entrega virtual, hasta que tengamos una real.

Bueno, ¿qué has decidido perro?

[lobo] Lo tengo claro Ama, deseo ser su perro Ama.

[Ama] Muy bien perro, pues así será desde este mismo instante. Ahora quiero que enfoques tu cara, te quites la capucha y digas lo que te he indicado, y quiero que lo grabes en un fichero de video, luego me lo mandarás por correo, para que ambos tengamos una copia de tu "contrato de sumisión".

Coloqué la cam, de forma que se viera solo un primer plano de mi cabeza y puse a grabarlo en video. Me quité la capucha, a la vez que hacía esto, desapareció la foto de mi Ama, y en su lugar apareció su cam, enfocando desde su cintura hasta su boca, llevaba un corsé rojo que realzaba sus pechos, era blanca de piel, y tenía un pelo negro, largo, ligeramente rizado que le llegaba hasta cubrir sus pechos. Su boca con labios carnosos, pintados de rojo intenso, a juego con el corsé y que eran todo sensualidad. Me centré en lo que tenía que decir, pues temía quedarme embobado contemplando a mi Ama, y la hiciera enfadar.

[lobo] A partir de este momento, este perro pasa a ser propiedad de su Ama, cualquier deseo suyo pasará a ser una orden para mí, mi cuerpo y mi mente pasan a ser de su propiedad, y podrá disponer de ellos cuando y como quiera.

[Ama] Bien perro, ya has podido disfrutar viendo a tu Ama, ahora me toca disfrutar a mí. Vuelve a ponerte la capucha, siempre que tengamos sesiones y aparezcas desnudo, quiero que lo hagas con la capucha puesta, aunque yo no te lo diga expresamente, te la pondrás, quiero demostrarte que soy una Ama legal y que no te voy a grabar en situaciones comprometidas, ni sacar fotos en los que se te pudiera reconocer. Obedece y no te preocupes por nada, mientras estés bajo mis órdenes, yo cuidaré de ti, y aunque hay cosas que probablemente nunca te pediría, me gusta saber que las harías por mí, si te lo pidiera. Ya puedes dejar de grabar, perro.

Escuchando estas palabras con su voz dulce y sensual que me hipnotizaba, y viendo de nuevo la foto de su boca (ya había quitado su cam), desde ese momento, me había hipnotizado, me tenía bajo el hechizo de su voz sensual.

[Ama] Ya puedes quitarte la goma, dejaremos que tu polla vuelva a su estado normal. Lo primero que haremos será marcarte como mi perro. No lo haremos con un collar, porque no podrás tenerlo hasta que no tengamos una sesión real, mientras tanto, te marcaré con una "M" en tu nalga derecha. Coge el rotulador Rojo y dibújate una M que se vea bien en tu nalga derecha, no la hagas demasiado pequeña.

Cogí el rotulador rojo, que ya tenía preparado, al estar incluido en la lista que me envió por correo. No era fácil escribirse uno mismo en la nalga, y que quede bien, así que lo hice despacio, con mucho cuidado para que se viera bien, menos mal que al ser en la nalga derecha, podía hacerlo con la mano derecha, sino lo hubiera complicado aún más, al ser diestro, yo creo que hasta ese detalle ya lo había pensado mi Ama, todo hasta ahora parecía estar bajo su más absoluto control, no había nada dejado a la improvisación o al azar, daba una sensación de que todo pasa según ella lo ha planeado, y eso me gusta, me da mucha seguridad, saber que lo tiene todo bajo control. Terminé de ponerme la marca de mi Ama, y me ordenó acercarla a la cam para poder verla bien, y darla su aprobado, lo hice, y pareció satisfecha con el resultado.

[Ama] Ya estás marcado perro, pero ahora debes demostrarme que eres merecedor de llevar esa marca.

Mientras estemos en una sesión deberás tenerla, aunque después te la quites, no me importa, siempre y cuando en las sesiones la tengas, recuérdalo. Hoy me apetece oír a mi perro hablar, no solo ladrar, así que en esta sesión, te eximiré de los ladridos, quiero que me contestes siempre con palabras, ¿lo has entendido perro?

[lobo] Si, le he entendido, Ama.

[Ama] Vale, vamos a empezar a divertirnos, creo que tu culo en la primera sesión se quedó bastante triste, sólo le tocó castigos, así que hoy vamos a empezar dándole una alegría. Ponte a cuatro patas, con el culo mirando a la cam, coge el bote de vaselina y úntate el ano, ya sabes, depende de cómo lo hagas te dolerá más o menos. - Sabía lo que me esperaba, y la verdad es que se podría decir que era virgen por detrás, sólo me había introducido un dedo por curiosidad, para saber qué se sentía, pero no me gustó, y no volví a probarlo. Y ahora, me temía que iba a tener que "desvirgarlo" delante de mi Ama. Cogí el bote de vaselina y con un dedo fui untando la entrada de mi ano, con bastante cantidad, siguiendo la recomendación de mi Ama, quería que me hiciera el menor daño posible. - Bueno perro, creo que con eso será suficiente, coge el plug anal con cola de caballo, y ya sabes lo que tienes que hacer, te recomiendo que lo untes también con vaselina. - cogí y unté también el plug, se trataba de un plug anal, de unos 3 centímetros de diámetro por la parte más ancha y unos 15 cm de longitud; en vez de mango tenía unos largos hilos negros simulando una cola de caballo. Una vez embadurnado con bastante vaselina, lo puse en la entrada de mi ano, y empecé a presionar despacio, el plug comenzó a entrar, sin tener que hacer mucha fuerza, debido a la labor que hacía la vaselina, no tardé mucho en introducirlo del todo en el interior de mi ano, sintiendo una sensación extraña, algo dolorosa, era extraño tener algo en mi interior.

[Ama] Bien perro, ahora mueve tu culo, quiero ver como se agita esa cola. - Moví mi culo, como pude, pues la verdad es que no sabía cómo debía moverlo, y creo que mi Ama lo notó enseguida. - Jajaja, vale perro, la intención es lo que cuenta, ya mejorarás tus movimientos. Ahora que tu culo ya está contento, marcado y follado, vamos a "acariciarlo", coge la fusta, y quiero cinco azotes alternando en cada nalga "suaves", luego otros cinco "fuertes", y por último tres muy fuertes en cada una, y como vea que te equivocas, o que no son suficientemente fuertes, volveremos a empezar pero serán el doble, y así hasta que quede satisfecha. Y acuérdate de lo que aprendiste en la primera sesión. Ya sabes que conmigo es mejor pasarse que quedarse corto. ¿Alguna duda perro?

[lobo] No Ama, ninguna duda, Ama.

[Ama] Bien, puedes empezar. - Cogí la fusta y empecé a dando un golpe despacio, en mi nalga izquierda, al mismo tiempo que contaba y agradecía el golpe a mi Ama, como me enseñó en la primera sesión

"¡Uno! gracias Ama"

, tenía que hacerlo bien y con cuidado, no quería tener que repetirlo y aumentar los golpes. Luego en la nalga derecha, así fui completando los 5 golpes suaves, que fueron como caricias, y más comparado con lo que iba a venir a continuación. Comencé con la tanda de los cinco golpes fuertes, no quería arriesgarme, y golpeé con fuerza cada uno de los 10 golpes, por supuesto contándolos en voz alta y agradeciéndoselo a mi Ama. Con los dos primeros golpes empezó a escocerme y a sentir calientes mis dos nalgas, pero continué, y al término de la tanda de azotes, ya tenía el culo rojo y bastante dolorido. ¡Y aún quedaban los tres golpes fuertes!, hice una pequeña pausa para que mis nalgas se "enfriaran un poco" antes de comenzar con el suplicio de los fustazos. Antes de que mi Ama se impacientara, empecé y golpeé con todas mis fuerzas mi nalga izquierda, ya dolorida por los azotes previos. Al impactar la fusta en mi nalga, no pude contenerme y solté un grito al tiempo que mis ojos se humedecieron con lágrimas de dolor, conté el golpe y se lo agradecí a mi Ama, me dispuse a golpear la nalga derecha, volví a hacerlo con todas mis fuerzas, y esta vez pude ahogar el grito, pero el dolor era igual de insoportable, mi nalga escocía y ardía, como si estuviera siendo marcada por un hierro al rojo vivo. - Para perro. - Me asusté, ¿habría hecho algo mal? me aterraba la idea de volver a empezar con los azotes y que estos se duplicaran, no podría aguantarlos. - Dime sinceramente, ¿Cómo tienes el culo, podrías con 5 golpes igual que estos dos últimos en cada nalga?

[lobo] Ama, mis nalgas están ardiendo y escociendo del dolor, aunque no me haya visto, mis ojos están llenos de lágrimas de dolor, pero si Usted lo desea, aguantaré otros cinco golpes más por hacerla feliz.

[Ama] Gracias perro, es lo que quería oír. Abre la cubitera y coge un hielo, Mételo en la boca, y luego pásalo por tus nalgas. - Cogí un hielo de la cubitera, lo chupé en mi boca y lo fui pasando por toda mi nalga, la verdad es que lo agradecí bastante, me alivió un poco el ardor que sentía. - ¿mejor perro?, puedes dejar la fusta, no habrá más azotes por ahora. - Oír esas palabras me hizo tener un subidón de alegría inmensa.

[lobo] Muchas gracias Ama, se lo agradezco de todo corazón.

[Ama] Ya sabes perro, según te portes, así obtendrás más o menos dolor, y más o menos placer, ya te lo dije, de ti depende. ¿Sabes perro, me gusta verte con esa colita, lástima que no sepas moverla bien, deberás practicar para las siguientes sesiones. - sentí una gran humillación en ese momento, quería que aprendiera a mover mi culo, como si fuera su putita, y en cierto modo así era, y a pesar de la humillación, también me excitaba que me hiciera sentirme así.

[lobo] Si Ama, aprenderé a mover mi culo para Usted.

[Ama] Mmmm perro, ¿sabes? entre tu culo rojo, y el agua del hielo, no se distingue casi la marca de tu Ama, vas a tener que volver a ponértela, pero esta vez usa el rotulador negro para que se vea mejor. Ya sabes despacito y con buena letra.

[lobo] Si Ama. - cogí el rotulador y con cuidado intenté seguir la marca anterior. A diferencia de la primera vez, en esta ocasión, debido a los azotes recibidos, al pintar con el rotulador me producía un dolor, como pinchazos en mi nalga. Aguanté el dolor y terminé de repasar la marca de mi Ama. Acerqué mi nalga derecha a la cam como la primera vez, para que mi Ama pudiera contemplar el trabajo realizado.

[Ama] Perfecto, perrito, ya vuelves a estar marcado por tu Ama. Pero hoy me he levantado con ganas de tener una perra, no un perro, así que habrá que hacerte un pequeño cambio. Veo que tu polla ya perdió cualquier rastro de la erección, eso nos vendrá bien para que lo que quiero que hagas a continuación. Coge una cuerda y en la mitad, vas a atar la cabeza de tu polla, bien fuerte, que no se suelte. - Cogí la cuerda y até mi polla como me indicó mi Ama. Al estar flácida, permitía apretar más la cuerda, me aseguré de que quedaba bien sujeta, para que no se soltase. - A ver perro, tira de ella hacia arriba, a ver si no se suelta. - tiré despacio hacia arriba, hasta llegar a estirarse del todo mi polla, dando la sensación de que si tiraba un poco más, ésta de arrancaría de mi cuerpo. - Vale, creo que aguantará. Ahora pasa los dos extremos de la cuerda entre tus piernas, cada uno por un lado del plug con tu colita, y tira de la cuerda hasta que tu polla desaparezca, pero quiero que coloques la polla de manera que al tirar con la cuerda de ella hacia atrás, quede un huevo a cada lado de ésta.

Coloqué mi polla entre mis huevos y la llevé hacia atrás, tirando de ella con la cuerda, hasta verla desaparecer por completo entre mis piernas. fue una extraña sensación, mezcla de humillación y vergüenza por verme así, desprovisto de mi miembro viril, y a la vez una excitación y morbo.

[Ama] Pasa los extremos cada uno por un lado de tu cuello, y átalos al frente, que quede bien tirante, no quiero ver asomar tu mierda de polla.

Tiré de la cuerda todo lo que pude y até los dos extremos al frente de mi garganta, apretando luego el nudo para que quedara bien tirante.

[Ama] Muy bien, perra, ahora que no tienes polla, te llamaré así, serás mi perra, mi putita.

[lobo] Si Ama ahora seré su perra putita.

[Ama] Pero para que sea más real tu transformación, píntate una rajita como si fuera tu coñito con el rotulador negro. Así, perfecto, ahora si que eres toda una putita. A ver cómo te sienta las braguitas que te compraste, puta.

Cogí las braguitas rojas que me ordenó comprar mi Ama, y me las puse, eran unas mini braguitas, con forma de triángulo en la parte delantera, y por detrás tan solo una tira, con lo que me permitía tener el plug con la cola puesta. Me sentía ridículo al verme con esas mini braguitas, mi humillación iba subiendo grados, ¿podría haber algo más humillante para mí? en ese momento no lo podía imaginar, pero en seguida mi Ama me demostró que sí, que aún podía ser más humillante aquella situación.

[Ama] Qué puta eres perrita, ¿sabes? me apetece sacarte a pasear, para que puedan ver qué perrita más puta tengo. - Hasta ese momento me sentía humillado, pero en ese instante me quedé helado. ¿Qué estaba diciendo mi Ama? ¿Sacarme a que me vea más gente? un miedo comenzó a apoderarse de mí.

[Ama] ahora quitarás la cámara de aquí, pero seguiremos con el Skype abierto, y entrarás en la siguiente dirección, una vez allí crearás una sala nueva en la sección de bisexuales, con el nombre de "perrita de Ama M" y pondrás tu cam, esperarás de rodillas y con las manos en la nuca, y sólo me obedecerás a mi, entraré con el Nick de "Ama M" ¿entendido?

[lobo] Si Ama. - entré en la dirección indicada y creé la sala. Era una página de salas de chat con cam, donde uno creaba su sala y se mostraba por cam o entraba en otras salas y podía charlar y ver al propietario de la sala. Esperé de rodillas y con las manos en la nuca hasta que entró mi Ama.

[Ama] Jajaja, bien perrita, ¿qué tal, como se siente mi putita?

[lobo] Un poco nerviosa y vergonzosa, Ama.

[Ama] Vaya mi putita tiene vergüenza. - En ese momento entró otra persona en la sala, por el Nick "Curioso" era un hombre. Aparecer así delante de otro hombre me hacía sentir una mayor vergüenza y humillación.

[Curioso] Hola, mmm me gusta esta perra.

[Ama] Hola, te presento a mi putita, es su presentación en sociedad. Saluda, perra y dale las gracias por visitarte.

[lobo] Hola Señor, gracias por entrar en mi sala. - Aparecieron dos personas más, una era un hombre, y la otra una mujer (al menos sus Nicks así lo indicaban).

[Ama] Bienvenidos a la sala de mi puta perra. Perra saluda.

[lobo] Bienvenidos Señor y Señora, gracias por visitar la sala de esta perra.

En menos de cinco minutos, la sala se fue llenando de gente, ya había 12 Nicks, casi todos hombres. Mi Ama me hizo saludar y agradecer uno a uno su estancia en la sala, al parecer la gente le gustaba lo que veía, pues nadie había abandonado la sala. Mi humillación había alcanzado cotas que antes ni hubiera podido imaginar, pero también me estaba poniendo a mil, si mi polla no hubiera estado atada y escondida, mi excitación estaría a la vista de todos.

[Ama] Perrita, enséñales tu colita a tus Señores, da una vuelta a cuatro patas despacio, que puedan verte bien, y enséñales lo orgullosa que estás de llevar la marca de tu Ama.

Me puse a cuatro patas, me costó cambiar de posición, pues llevaba ya un rato de rodillas, y las rodillas y tobillos se me habían quedado doloridos por la posición. Avancé despacito, girando delante de la cam, para que pudieran observar mi colita y la marca de mi Ama.

[Ama] Ahora muéstrales tu coñito, ponte de frente a la cam, bájate las braguitas hasta la rodilla y levanta las patitas delanteras, saca la lengua y jadea como la perra que eres mientras contemplamos tu chochito, quiero verte como babeas, que vean lo guarra que eres, puta.

No sé qué pensarían los que estaban en la sala, quizás están acostumbrados a observar cosas así, para mi era la primera vez, y me sentí humillado, degradado y violado por unos desconocidos. Menos mal que llevaba la capucha y nadie podía ver mi cara, ese era mi único consuelo. Adopté la posición de perra con las manitas levantadas y sacando la lengua fuera empecé a jadear, a la vez que iba produciendo saliva para dejarla caer resbalando sobre mi lengua, cayendo sobre mi pecho, y mis piernas, mi posición no podía ser más denigrante.

[Ama] pero qué cerda eres, y cómo te gusta, guarra. Ponte una pinza en cada pezón puta, a ver si se te baja el calentón. - Me puse las dos pinzas mientras seguía jadeando y salivando como quería mi Ama.

[Ama] ahora, por el orden de los Nicks de la sala, quiero que les preguntes uno a uno si les gusta lo guarra que eres. Por cada persona que responda que le gusta, tendrás que darte dos golpes con la fusta en cada pinza y ya sabes cómo, pero esta vez no me lo agradezcas a mí, sino a ellos, si dicen que no, serán cuatro los golpes en cada pinza y si no contestan, ningún golpe. ¡Empieza puta!

Los Nicks de la sala estaban ordenados alfabéticamente, el primero que aparecía, después de mi Ama, se trababa de otra Ama, al menos así lo hacía entender su Nick: "Ama Severa".

[lobo] Señora Ama Severa, ¿le gusta lo guarra que es esta perra?

[Ama Severa] pues no, perra de mierda, una perra guarra debería mover su cola indicando lo caliente y guarra que es, y se habría meado de gusto solo con ver la sala llena de gente mirándola. Te falta mucho perra para agradarme, así que empieza a golpear las pinzas de tus pezones, puta, y que lo oiga bien, a ver si al menos vales para algo, zorra.

[lobo] Si, lo siento Señora Ama Severa. - Tras la humillación recibida, empecé a golpear la pinza que aprisionaba mi pezón izquierdo. - ¡Uno! gracias Ama Severa. - luego otro en la pinza del pezón derecho. - ¡Dos! gracias Ama Severa. - cada golpe que me daba, el dolor aumentaba, sintiendo como punzadas en los pezones, terminé los ocho golpes, cuatro en cada pezón, y busqué el siguiente Nick de la lista, este era de un hombre: "Brutus", le pregunté cómo había hecho con Ama Severa y recibí su respuesta:

[Brutus] tienes mala suerte perra, me gustan más guarras que tú, aunque vas por buen camino, aún te falta para convertirte en una puta guarra, perra.

Me disculpé por mi falta de práctica y por no ser más guarra, y comencé con el castigo, contando, y agradeciéndole cada golpe. Los pezones me dolían cada vez más por el dolor causado por la presión de las pinzas, pero mucho más por los golpes que éstas recibían, que me hacían ver las estrellas, y saltar las lágrimas. Empecé a temer lo peor, y es que todos dijeran que no les gustaba, con lo que recibiría ¡48 golpes en cada pinza! un castigo brutal, pues llevaba ocho golpes y no creo que mis pezones pudieran soportar muchos más. Quería terminar cuanto antes con aquello, así que rápido me dirigí al siguiente Nick de la lista "cerdo mamón":

[cerdo mamón] jaja, que puta eres, a mi si me gusta lo guarra que eres putita, si estuviera ahí, te metería mi polla hasta el fondo de tu garganta, te obligaría a que me la mamaras hasta correrme dentro de tu boca de puta, te haría comerme el culo, y para terminar me mearía por tus pezones, y tu coñito.

En mi interior agradecí que le gustara, pero también agradecí mucho más que no estuviera aquí y no pudiera cumplir lo que había escrito...

Cumplí con los cuatro golpes correspondientes, pero al dar el último de los cuatro, en que correspondía al pezón derecho, la pinza se escapó, pues con tanto golpe, el trozo de pezón que presionaba, se había ido reduciendo, hasta que ayudado por el golpe, saltó la pinza, provocando aún más dolor.

[Ama] Vaya perra, qué torpe eres, me vas a hacer quedar mal delante de estos Señores, cógela y vuelve a ponerla en su sitio, y para evitar que se vuelva a repetir, te pondrás otra pinza más en cada pezón, así si se cae una, seguiremos teniendo otra.

Me volví a poner la pinza, enganchándola de modo que cogiera todo el pezón que pude, y puse otra a su lado, igual que en el pezón izquierdo, y aproveché para colocarme también la pinza del otro pezón, que llevaba el mismo camino que la que se cayó y ponerme una seguna, como se me había ordenado.

Seguí con la lista de Nicks, y tuve suerte, casi todos los siguientes contestaron que les había gustado, aunque eso sí, todos aprovecharon para humillarme aún más con sus palabras.

Sólo quedaban dos Nicks, los dos últimos alfabéticamente de la lista, y mis pezones habían soportado demasiado castigo, estaba deseando acabar con aquel tormento, y pasé al penúltimo Nick, se trataba de una mujer: "Nataly"

[Nataly] pues verás perra, tengo un dilema, me pareciste una perra muy "sosa", recatada, a la que su Ama le tenía que decir que se comportara como una perra caliente, pero en lo que llevo viéndote, has hecho que me corriera un par de veces, aun así, creo que deberías ser mucho más guarra y sucia, y mucho más puta, perra, así que mi respuesta será negativa.

A esas alturas, ya los comentarios aun siendo humillantes, no podían hacerme sentir más humillado de lo que estaba, y a pesar de que tendría que recibir otros 8 golpes, me puse a ello sin perder tiempo, quería poder acabar cuanto antes y que mis pezones se pudieran recuperar, pues desde que mi Ama me ordenó ponerme dos pinzas en cada pezón, estos parecían estar en carne viva, el dolor era cada vez más insoportable, las lágrimas caían entre mis mejillas y la capucha. Continué con la nueva tanda de azotes, mi mano temblaba, como todo mi cuerpo, acabé la nueva tanda y no sé cómo podía seguir soportando aquel dolor sin desmayarme, cogí fuerzas como pude para seguir y acabar con el último Nick de la lista, cuando en ese momento entraron dos Nicks nuevos en la sala, me aterré de sólo pensar que aquello se prolongaría aún más, no quise pensar en esa posibilidad, y me dirigí al que debería haber sido mi último Nick de la sala. Como la mayoría de los que había, se trataba de un hombre: "Torquemada", su nombre me recordó la inquisición, solo su Nick, ya me daba miedo y ya me estaba preparando para otro 8 golpes:

[Torquemada] Quiero dar las gracias a Ama M por dejarnos disfrutar con su perra, diré que a mí sí me ha gustado esta puta, me he calentado viendo como babea y jadea, y el castigo creo que es bastante divertido para nosotros, a la vez que humillante y doloroso para la perra, pero, a pesar de que me gustaría alargar el tormento, voy a ser justo con mi opinión, y mi respuesta es que si me ha gustado lo guarra que es esta puta.

Me sorprendió, con ese Nick no me esperaba que fuera a ser así su respuesta. Me alegré por haberme librado de cuatro golpes, con los que ya contaba, y empecé con el tormento de nuevo, esta vez mis pobres pezones solo tendrían que soportar dos golpes más cada uno, y eso, en cierta manera, me consolaba, aunque para mi desgracia, quedaban los dos Nicks nuevos que habían aparecido hace unos minutos. Empecé a golpear primero las pinzas del pezón izquierdo, como había hecho en todas las anteriores ocasiones. "¡Uno!, gracias Señor Torquemada". Respiré hondo para coger fuerzas para el siguiente golpe, esta vez en las pinzas del pezón derecho. "¡Dos!, gracias Señor Torquemada", repetí la operación de nuevo, para el tercer y cuarto golpe, y finalizar así esta nueva tanta de castigo. En ese momento sentí una rabia interior, de pensar que aquí podía haber terminado este suplicio que tenía mis pechos doloridos, mis pezones ardiendo y escocidos por la presión y los golpes y a mi llorando de dolor. Pero por desgracia aún quedaban los dos nuevos Nicks.

[Ama] Buena perra, has cumplido con los deseos de tu Ama, puedes quitarte las pinzas, tirando de ellas despacio hasta que se suelten. - Mi Ama o no se acordaba de los Nicks que habían entrado, o no quiso prolongar mi agonía, por lo que había podido observar de la conducta de mi Ama, creo que más bien es por esto último, gesto que internamente se lo agradecí con toda mi alma. - perra mójate los dedos con saliva y masajéate un poco los pezones. - Otro gesto de mi Ama aliviando mi dolor. Me llené de saliva los dedos y comencé despacio a acariciar en círculos alrededor de cada pezón, pues solo al contacto el dolor era inmenso, y sabía que no pararía hasta que volviera a reactivarse la sangre por todo el pezón, así pues seguí masajeándomelos durante al menos un minuto hasta que el dolor fue decreciendo.

[Ama] Perra, quédate así de rodillas y con las manos en la nuca mientras yo me despido de estos Señores. - Adopté la postura indicada, mientras mi Ama se dirigía al resto de la sala.

[Ama M] Bien, Señores esta ha sido la primera "presentación pública" de mi perra, aún la estoy domando, pero estoy muy contento con ella, aprende bien y rápido, es muy dócil y obediente, y creo que llegará a ser una perra excelente. Espero que les haya gustado esta breve muestra, y les invito a volver a verla próximamente en esta misma página. Gracias a todos. Si alguien quiere decir algo...

[Ama Severa] Quería darle mi enhorabuena por la perra, tiene buen aguante al dolor, tengo dos esclavos y dos esclavas, y esta perra promete bastante, si alguna vez quiere podemos intercambiar unos días las perras o hacer algo las dos con ellas. le mando mi dirección por privado por si le interesa.

[Ama M] De momento no entra en mis planes compartir ni ceder a mi perra, pero guardaré su contacto por si en un futuro me lo planteo, gracias. Bueno, si nadie más quiere decir algo, Nos vamos, y les doy de nuevo las gracias. Perra, puedes salir de la sala. Seguimos por el Skype.

Cerré la página web, y volví a poner la cam en el Skype para que mi Ama pudiera seguir viéndome.

[Ama] Estoy muy contenta contigo perra, te has portado muy bien. Pensaba en seguir con algún castigo más, pero quiero compensarte, en vez de castigarte. Puedes quitarte el plug y soltarte la polla, vuelves a ser perro. ¿Qué tal van tus pezones?

[lobo] muchas gracias Ama, ha sido un placer como siempre cumplir sus deseos, me gusta hacerla feliz. Mis pezones aún están algo doloridos, pero bastante mejor, Ama. - Me quité el plug anal, y al hacerlo hizo que mi culo volviera a sentir el dolor, al tener que abrirse de nuevo aunque esta vez para la salida del plug, solté la cuerda y mi polla volvió a aparecer entre mis piernas, solté la cuerda que rodeaba la cabeza de mi pene, y libre ya de toda atadura y penetración, esperé a que mi Ama me diera nuevas órdenes.

[Ama] Perro, te  ordené que no te corrieras hasta la sesión de hoy, quiero que seas sincero conmigo ¿te has corrido desde la sesión anterior?

[lobo] No Ama, he aguantado sin correrme como me ordenó. - Y tanto que así había sido, a pesar de las ganas que me entraban de descargar en los últimos dos días, había conseguido aguantar hasta este día.

[Ama] Bien, así me gusta, perro, porque quiero que te corras para mi, quiero que te corras en mis tetas, pero tienes tan solo cuatro minutos para hacerlo, sino tendrás que seguir aguantando sin correrte hasta nuevas ordenes. - En ese momento apareció su cam en directo, mostrándome sus pechos, entre sus manos, tocándose los pezones y juntándolos, moviéndolos como si tuviera mi polla entre sus dos senos. - ¿Te gusta perro? es para ti, un regalo de tu Ama, quiero que me des toda tu leche mmm, quiero que te corras sobre tu pecho.

Mi polla se puso a cien enseguida, viendo los pechos de mi Ama, y cómo se los tocaba para mí, mientras me hablaba con su dulce voz, una vez alcanzada la erección, y despues de tanto tiempo sin hacerlo, no iba a tardar mucho tiempo mássin correrme, notaba como subía el semen hacia la punta de mi polla para estallar en un chorro de esperma caliente que brotó por mi pene, llenando mi pecho de mi propio semen, notando cómo este iba deslizándose por todo mi pecho. Me había corrido miles de veces, pero aquella vez fue más intensa, y la primera que lo hacía delante de la cam.

[Ama] mmm cuanta leche, se nota que tenáis ganas de descargar, no has tardado ni tres minutos. Bien perro, puedes despedirte de tu Ama, y cuando lo hayas hecho, apagas la cam, cierras el Skype y puedes irte a duchar. te mandaré un correo en el que te diré cuáles serán los siguientes pasos en tu adiestramiento.

[lobo] gracias Ama, ha sido un placer volver a estar cumpliendo sus órdenes y deseos, y le estoy muy agradecido por el gran premio que he recibido, espero seguir siendo merecedor de Usted, mi Ama. - Apagué la cam, cerré el Skype y me fui directo a la ducha. Había sido una sesión bastante intensa para mí, y quería darme una relajante ducha caliente, mientras recordaba la sesión y se recuperaban mis pezones, mis nalgas, mi ano y mi polla...

Continuará...