Chicas lesbianas

Chicas lesbianas

Siempre pensé que mi mejor amiga sería Lidia... Ella y yo tuvimos una amistad diferente al resto de compañeras de clase.

Todo comenzó en último curso de Bachillerato... Comencé a notarla que me miraba de una manera diferente a la habitual... A ella la notaba como muy caliente hacia mí y eso me gustaba pero no se atrevía a más, ni yo tampoco.

Era bajita y delgada con cabello largo y rubio... Yo, en cambio, era más alta y con el pelo rubio más corto.

Durante ese curso habíamos empezado a acercarnos y charlar entre nosotras... De hecho, me enamoré completamente de ella, sólo que nunca le dije nada, ni ella a mí, tampoco me dijo nada.

Una noche, dos años más tarde, ya en la universidad y con 18 años, coincidimos ambas en una fiesta y decidí invitarla a pasar la noche en mi casa para estudiar juntas... Ese era mi pretexto y ella acepto de inmediato sabiendo cuales eran mis intenciones y yo las suyas.

Cuando llegó, iba con pantalones cortos muy ajustados... Lidia tiene un culo increíble... Después de hacer nuestras tareas, fuimos a mi habitación y nos acostamos en la cama viendo la televisión durante un rato.

Oímos a mis padres irse a la cama... Miré hacia arriba y ella tenía la camiseta levantada hasta la mitad... No pude evitarlo y comencé a besar, lentamente, su estómago.

Ella sonrió y pareció disfrutarlo tanto como yo.

Lo siguiente que vi fue que me estaba quitando mi camiseta y acariciando mis pechos... Estaba pasando su pulgar sobre mis pezones haciendo que se pusieran muy duros.

Me quitó el sostén por completo y comenzó a chupar lentamente, primero un pezón y luego el otro... Sin prisas... Yo gemí de placer... Se sentía increíble.

Lentamente le desabroché el cinturón y le quité los shorts súper ajustados que llevaba... Y ella, muy suavemente, tiró de mis pantalones cortos y bragas hacia abajo... Me dejó desnuda.

La desnudé por completo y empezamos a tener sexo.

Empezó a tocar mi coño y a jugar con mi clítoris... Yo comencé a responderle mojándome mucho y ella se dio cuenta.

Insertó lentamente su dedo medio en mi coño y lo movió... Luego lo sacó y colocó su dedo índice en mi apretado coño e hizo un movimiento hacia adelante que golpeó mi punto G y tuve mi primer orgasmo, con grandes gemidos de placer.

Lidia no me dejó descansar... Quería que me corriese más y ella inmediatamente comenzó a comerme el coño... Fue una gran sensación, que disfrute tanto que mis gemidos aumentaron de volumen.

Hizo esto durante unos 20 minutos más o menos... Fue una sensación muy agradable y me corrí muchas, muchas veces... Me lamió muy bien el coño y el ano.

Luego, vi que sacó un vibrador que había traído, separó los labios de mi coño y me lo metió dentro... La sensación fue maravillosa... Era la primera vez que fui follada.

Debimos hacer bastante ruido porque la puerta del dormitorio se abrió y entró mi madre para decirnos que procurásemos no gemir tan fuerte... Sonrió al ver a Lidia con el arnés puesto, follándome y luego se marchó poniendo un dedo en la boca en señal de que no hiciéramos tanto ruido.

Ambas nos reímos por cómo nos había pillado.

Después de aproximadamente 4 horas de tener sexo lésbico entre nosotras, estábamos muy cansadas ​​y decidimos dormir.

Nos dimos muchos besos antes de quedar dormidas.

Supe desde esa noche que Lidia y yo éramos lesbianas enamoradas.

A la mañana siguiente nos despertamos muy tarde... Era sábado y mamá nos dio un beso en los labios a cada una como muestra de su aprobación en nuestra relación... Nos dijo que siempre teníamos su casa para que disfrutásemos si eso era lo que realmente quisiéramos hacer.

Y así lo hicimos.

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