Chatix

Chatix, la app en la que, sin saberlo, empecé una sesión de cybersexo con mi madre.

Antes de nada, dejad que me presente; me llamo Eduardo, pero todo el mundo me llama Edu, tengo 18 años y estoy empezando a estudiar la carrera de informática.

Vivo sólo con mi madre, ya que mis padres se divorciaron hace unos años y mi hermana mayor vive con su novio.

Como buen informático, soy un salido sexual y tengo dificultades para encontrar novias, y cuando lo consigo, me duran poco. Es por esto que soy un usuario asiduo de páginas web porno, app de citas  y chats

Hace unos días, alguien envió en un grupo de Whatsup, un enlace que me llamó la atención.

Se llamaba “Chatix”, ojeé la ficha en la store de Google y acabé por instalarla. Sin duda valía la pena, entre otras cosas porque estaba acostumbrado a usar las chats de IRC típicos como el Hispano que visualmente no valen nada.

Pero sólo encontré canales genéricos y nada…. sexual, que precisamente era lo que buscaba, así que salí de la aplicación y busque porno para masturbarme en las típicas páginas web de streaming.

Fue el fin de semana siguiente cuando charlando con unos amigos me hablaron de la app de Chatix. La recordé al instante y no perdí la ocasión de criticarla:

-         Si, ya la conozco. Esta bien pero no hay canales porno, ni de fotos… sólo es para charlar – dije

-         ¿Ah, pero no conoces el password? – respondió Carlos. – “iwantsex”.

-         ¿? De que hablas ???? que es “ivantases”

Todos se rieron.

-         “iwantsex” – remarcó Carlos pronunciando claramente – “quiero sexo” en ingles.

-         Ya, ya sé que significa “iwantsex”.

-         Es la contraseña que tienes que poner para tener acceso a canales porno, hay de todo, desde BDSM, hasta cornudos, pasando por lesbianas, swingers….

-         Vaya, yo creí que el password era para registrarte como usuario y no para acceder a canales porno – dije intentando hacerme el entendido.

Aquella misma noche, cuando regresé a casa, nada más terminar la cena, me encerré en el cuarto y abrí la aplicación.

….. Chatix …. Cargando….

Nada más abrir la app me pide un Nick y un password, introduzco mi Nick habitual, y en el password introduzco la clave secreta: “iwantsex”.

Y… “voila”, en el listado de canales aparecen los canales para mayores de 18. Mis amigos tenían razón, había de todo: “Cornudos”, “Intercambio de parejas”, “Lesbianas”, “Gays”, “Orgias”…  o sea, las típicas secciones porno.

Entré en varias de ellas, había poca gente, tal vez la hora o tal vez el hecho de que poca gente conoce la clave secreta, pero me lo pasaba en grande.

Pasadas unas horas, decidí intentar buscar alguna chica y entré en el canal “Cybersexo”. En la lista de usuarios sólo había 10 personas y de ellas, sólo una chica, “Susy” de 45 años.

Tenia pocas esperanzas de recibir respuesta, seguro que todos estaban intentando charlas con ella, pero aun así, le mandé un privado.

-         Hola “susy”, te apetece charlar ? –

Vaya gilipollez de mensaje, pensé, pero ya estaba enviado.

Me mantuve en el canal un rato, leyendo los mensajes públicos, naturalmente todos pidiéndole alguna guarrada a la pobre Susi.

De ahí mi sorpresa cuando me responde por el privado:

-         Hola “mapache” – ese era mi nick – ¿que quieres?

-         Charlar de sexo, claro. – respondí – ¿tienes 45?

-         Si, ¿ demasiado mayor?

-         Que va…. Las mujeres de 40 a 50 son las mejores. Liberadas, sin prejuicios ni las canijadas de las de 18.

Estuvimos hablando varios minutos, la conversación cada vez era más picante.  Mientras hablábamos estaba desnudo en la cama, masturbándome poco a poco.

Susy estaba divorciada, hacia 2 años que no estaba con ningún hombre y le gustaba ir a la playa a hacer topless.

Apenas dijo esto, aproveché la ocasión:

-         Pues envía una foto, seguro que estas de infarto.

Pocos segundos después, recibí una foto. Se veía el cuerpo de una mujer de 45, con la cara difuminada y con un cuerpo espectacular, pechos grandes, pero… la miré con detalle… el corazón me dio un brinco…. No podía ser…

-         ¿¿¿¿ Mama ????? – escribí – ¿ eres tu ?

Inmediatamente oí un golpe en la habitación de al lado y poco después un mensaje…

-         Que vergüenza….. ¿eres tu Edu?

-         Si – respondí

Entonces, pude ver como “Susy” abandonaba el chat dejándome sólo. No sabía como reaccionar. Por un lado estaba muy turbado, pero por otro, aquella foto me había puesto la polla durísima. Y sabía que el único modo de bajar la erección era masturbándome mirando la foto.

Estaba sumido en estos pensamientos cuando mi madre dio unos golpes a la puerta.

-         ¿Puedo pasar Edu?

-         Claro – respondí mientras me tapaba con la sábana.

Mi madre abrió la puerta, estaba vestida con un camisón de noche y se sentó en la esquina de mi cama.

-         Lo siento Edu, que vergüenza, ¿ que vas a pensar de tu madre?? – dijo casi con lágrimas en las mejillas

No sabía como responder, pero mi polla hacia las veces de tienda de campaña con la sábana. Así que la dije:

-         ¿ Que voy a pensar ? Que tengo la mejor madre del mundo, y encima está buenísima.

-         ¿Cómo?

-         Pues eso – balbuceé mientras apoyaba una mano sobre su pierna, y poco a poco la desplazaba hacia arriba

Noté como mi madre vibraba con aquel contacto y en lugar de enfadarse y quitar mi mano, se quedó quieta y cerró los ojos

Poco a poco la mano subió hasta las caderas, la metí dentro de su camisón, la acaricié por el costado hasta alcanzar sus tetas y masajearlas con fuerza.

Eran tan grandes que mi mano no podía abarcarlas al completo, con la otra mano, deslicé la sábana dejando a la vista mi polla. Aquello, acabó por romper los prejucios de mi madre que se tumbó encima mio, agarrando mi pene y masajeándolo de arriba a bajo.

Nos besamos, ella se quitó el camisón mostrándose completamente desnuda y atrajo mis labios a su pecho para que los lamiera mientras ella continuaba con un suave masaje.

-         Ummmmmmmm – casi estaba a punto de correrme cuando se detuvo, acercó su boca a mi polla, y se la tragó entera.

Empezó poco a poco, pero acelerando el ritmo hasta que no pude aguantar mas y me corrí en su boca.

-         Me coorrrroooooo… que gusto…. Mama….. que bien la chupas…. Ummmmm… diosssss.

Cuando terminó de tragarse toda la leche, se tumbó, y con firmeza me acompaño para que le lamiera su coñito. Estaba completamente depilado, y los labios estaban hinchados y eran carnosos. Lamí su clítoris mientras acariciaba con los dedos, primero introduje uno, arrancándole un suspiro. Luego metí otro, y otro más. Creo que si hubiera forzado un poco, habría podido meterle la mano entera. Ella se retorcía de placer y con aquella imagen, no tardé en volver a tener mi polla dura como nunca.

-         Siiii…. Ahhhhhhh. Más fuerte…… ahhh….. métemela…. Ahhhhh metémela – suplicaba

Su coñito estaba correando y la polla entró con una facilidad pasmosa.

-         Ooohhhh siiiii. Diossss…… que grande….. que gorda….. la notoooo

Jadeaba, se retorcia, se notaba que realmente llevaba mucho tiempo sin estar con un hombre.

Aceleré el ritmo, clavando mi polla mientras me sujetaba sobre aquellas espléndidas tetas que se balanceaban descontroladamente.

Pero finalmente, no pude aguantar más y me corrí llenándole el coño de leche.

-         Oooohhhhh siiiii maammmmmaaaa me corrrooooo

Caí rendido en un lado de la cama, mientras mi madre, me acariciaba el pelo. No tardé en dormirme en sus brazos.

A la mañana siguiente, cuando me desperté, mi madre estaba desnuda a mi lado, la besé y acaricie su sexo hasta que se despertó.

Pero esto, amigos míos, ya es otra historia.

PD: Por cierto, la app existe realmente busca "chatix" en Google PLay, y el password "iwantsex" da acceso a los canales porno. Disfrutadlo.