Chantajeando a Erika

Erika debería haber comprobado que no había nadie mirando antes de colarse en el despacho del director.

Chantajeando a Erika

(Este relato se desarrolla en el mismo mundo ficticia que el relato Amigos, Amos y Esclavas , un mundo basado en las historias publicadas por COLLAREDSLUT GIRLS en la página BDSMLR)

Creo que es la primera vez que me despierto tan pronto para ir al instituto, pero este viernes tengo muchas cosas que hacer y si quiero que todo salga bien nadie puede verme, tardo casi una hora en prepararlo todo y cuando miro el reloj de la pared del gimnasio sonrio al ver que he acabado a tiempo y que si Erika sigue las órdenes que la he dado nada más despertarme llegará en unos pocos minutos.

Mientras espero a Erika repaso mentalmente todo lo ocurrido en esta semana desde que el lunes comenzaron las clases.

Siguiendo mi costumbre de todos los lunes del curso llego media hora tarde, no por nada en concreto, simplemente me gusta demostrar a las chicas que al contrario que ellas puedo llegar tarde sin temor a ser esclavizado. Entro media hora tarde a la clase de historia del Señor Roberts, que mueve la cabeza decepcionado conmigo. A los pocos minutos soy castigado por no haber hecho los trabajos de clase, aunque en cuanto empiezan las preguntas le demuestro al viejo profesor que soy el mejor alumno que tiene.

Mientras las clases continúan, no soy consciente de que ese último castigo del curso va a llevarme a vivir la mejor semana de mi vida, una semana que puede acabar de forma gloriosa sí todo sale como lo he planeado durante la noche.

Mientras salgo de cumplir el castigo me cruzo con Erika, la mejor alumna del instituto, extrañándome mucho de encontrarla por allí a esas horas. Por unos momentos estoy a punto de ignorarla, pero al final llevado por la curiosidad decido seguirla en silencio.

En cuanto la veo entrar en el despacho del director sé que algo raro ocurre y saco el móvil para empezar a grabarla. Me hubiese gustado ver la expresión de mi cara en un espejo mientras observo en el móvil como Erika entra en el ordenador del director y cambia una de sus notas.

Todos en clase sabemos que Erika es lesbiana y que no ha tocado una polla en su vida, por eso mientras espero que salga para abordarla y enseñarla el vídeo que he grabado, nunca pensé que fuese a aceptar mi propuesta.

‘Buenas tardes Erika;’ la digo agarrándola del brazo al pasar a mi lado, ‘Tengo una cosa que deberías ver.’

Erika se suelta de mi agarre y me empuja contra la pared, ‘No tienes nada que yo quiera ver;’ me dice dándose la vuelta.

Vuelvo a agarrarla y girándola contra mi la agarro por la cintura mientras coloco mi móvil delante de su cara reproduciendo el video que acabo de grabar.

Noto como Erika se tensa al ver el video y decido soltarla el agarre de su cintura. ‘Hare lo que quieras Cole;’ me dice Erika muy asustada al ver el video que he grabado, ‘Sabes lo que me pasará si descubren que he entrado en el despacho del director y manipulado su ordenador;’ me sigue diciendo con la mirada baja.

‘Entre seis meses y un año con collar en una cadena de prisión siendo follada todos los días por una docena de guardias;’ la digo esperando su reacción. ‘No conozco ninguna zorra que después de ese periodo de condena no haya acabado en una granja de cría con un bebe creciendo en su vientre;’ continúo hablándola intentándola asustar todavía más.

‘Estas en lo cierto Cole, no quiero ser una yegua de cría ni acabar vendida como esclava por no aprobar el curso;’ me explica Erika cambiando su actitud acercándose más a mí, ‘Soy la mejor alumna del instituto y no puedo permitir que ese pequeño fallo en el examen de física arruine mi vida. Repito que hare lo que quieras;’ finaliza Erika insistiendo en sus palabras.

‘Quiero que me chupes la polla;’ le digo a Erika sin pensar, arrepintiéndome al momento sabiendo que seguramente podía haberla pedido mucho más. ‘Todos los días tres veces hasta que el viernes den las notas;’ añado subiendo la apuesta.

‘Trato hecho;’ me dice Erika sin dudar ante mi sorpresa, ‘Empezaremos mañana por la mañana;’ añade dándose la vuelta para alejarse de mí.

‘Empezaremos ahora mismo o no hay trato;’ le digo a Erika agarrándola del brazo para impedir que se vaya, ‘Y voy a grabarlo todo con el móvil para recordarlo siempre.’

Noto la derrota en el rostro de Erika que sin decir una palabra se arrodilla colocando su cara a la altura de mi entrepierna, llevando al instante su mano a mis pantalones para liberar mi polla.

Cuando mi polla salta libre de sus ataduras noto la cara de terror de Erika al verla, no es que sea demasiado larga, tiene sus buenos dieciséis centímetros pero si es bastante más ancha. Erika agarra mi polla con las manos y comienza a acariciarla y besarla lentamente.

‘Las manos quietas Erika, usa solo tu boca;’ la ordeno.

Después de un rato lamiéndome la polla con sus manos colocadas a la espalda, Erika empieza a tragársela lentamente, sus labios se estiran para abarcar mi polla y veo como comienza a llorar haciendo que su logrado maquillaje se estropee manchando su cara.

Pocas de mis parejas han conseguido tragarse por completo toda mi polla, y solo con algunas esclavas he intentado empujarla hasta lo más profundo de su garganta procurando no hacerlas daño, con Erika todo eso me da igual, coloco mis manos en su nuca y sujetando firmemente su cabeza, comienzo a empujar con más fuerza, por suerte para ella la sensación de sus labios envolviendo mi polla hace que me corra sin pretenderlo, descargando mi semen por su garganta su cara y su pecho.

'Mañana espero que lo hagas mucho mejor; sino consideraré seriamente romper nuestro acuerdo;' le digo a Erika limpiando mi polla en su cuidada melena oscura.

Antes de dejarla ir me cuelo en la enfermería y cojo uno de los consoladores que usan las enfermeras con las nuevas esclavas. 'Práctica con esto;' le digo a Erika arrojando el consolador junto a ella.

Los días siguientes disfruto puntualmente de la boca de Erika como acordamos, la uso dos veces en el horario de clase, mientras que para usarla la tercera vez la obligo a ir a un callejón cercano a mi casa y me follo su boca en plena clase como si fuera una vulgar puta. Según han ido pasando los días Erika ha mejorado considerablemente sus habilidades orales y he ido abusando cada vez más de nuestro acuerdo, atándola las manos y forzándola una mordaza de anillo en su boca para follarmela sin ningún cuidado, incluso masturbándome entre sus hermosas tetas.

Si Erika se hubiese mostrado un poco sumisa y agradecida por no revelar el video, seguramente me habría conformado con una última mamada el viernes al llegar a clase, pero debido a su actitud de zorra arrogante va a recibir una lección que nunca olvidara.

Miro de nuevo el reloj del gimnasio, y apenas tengo que esperar un par de minutos más hasta que Erika entra vistiendo como la he indicado esta mañana por teléfono, lleva un corsé de cuero rojo y una minifalda negra que apenas oculta su coño cubierto con un minúsculo tanga, las medias de seda con liguero por debajo de la minifalda le dan una aspecto de puta barata que hace que mi polla se ponga cada vez más dura.

En cuanto Erika entra en el gimnasio le arranco la falda y le ato las manos a la espalda, me siento en uno de los bancos con mi polla fuera y le ordeno que se acerque, ‘Espero que por ser la última vez te la tragues toda entera zorra;’ le digo.

Como siempre los labios y la boca de Erika me llevan al clímax antes de lo deseable, aunque esta vez en lugar de correrme en su boca descargo mi semen sobre sus tetas y su vientre manchando su ropa con mi semilla.

Sin dejar tiempo a que Erika se levante le cierro un collar de pega con mi nombre alrededor del cuello y mediante una correa le engancho a una de las patas del banco, ‘Ahora vas a volver a chuparme la polla mientras repites todo lo que te diga:’ la ordeno.

Los siguientes diez minutos Erika lee todo el humillante guion que la he preparado de una manera muy convincente.

‘Desátame y vete al diablo;’ me grita Erika. ‘Te juro que no volverás a tocarme en tu vida.’

En vez de desatar a Erika la doy una bofetada y me arrodillo detrás de ella pasando mi polla por sus húmedos labios vaginales; ‘Debería haberme follado este coño virgen;’ la digo empujando ligeramente mi capullo entre sus labios, ‘Pero prefiero ser el primero en follarme este culo estrecho y sin usar;’ añado empujando fuerte en su culo sin lubricar.

Estoy seguro de que el grito de Erika se oye en toda la escuela, pero todo el mundo pensara que se trata de alguna alumna descendiendo a la esclavitud. Cuando después de diez minutos follándome el culo de Erika noto que me voy a correr, me salgo de su culo y coloco mi polla entre sus rodillas corriéndome en sus muslos y pies.

Desato a Erika y la retiro el collar falso, sonrio al ver toda su ropa manchada de semen, es imposible que pueda cambiarse, apenas quedan cinco minutos para que empiecen las clases y sabe bien lo que le ocurre a una alumna a la que pillan en los pasillos fuera de hora.

Estoy sentando en mi clase, cuando justo unos segundos antes de que suene la campana, Erika entra y me mira sonriendo señalándose el traje de animadora que ha podido ponerse para no mostrar la ropa cubierta de semen; en vez de enfadarme sonrio satisfecho, es evidente que Erika no ha tenido tiempo de mirarse en un espejo después de ponerse el traje de animadora.

‘Bonitas tetas;’ le digo cuando pasa a mi lado.

Erika ve como todos la miran y se ríen y es entonces cuando al mirar su jersey de animadora se da cuenta de que la parte que debería cubrir sus tetas ha sido sustituida por un trozo de tela transparente que a falta de sostén deja ver completamente sus pezones erectos.

Antes de que Erika pueda decirme nada, el profesor Roberts entra acompañado por dos miembros de la policía de esclavas y varios miembros del personal del centro que arrastran tras de sí seis picotas de violación que fijan al suelo de la clase, la presencia de los policías y de los terribles objetos hacen que la mayoría de las chicas se encojan de miedo en sus asientos.

Desde mi sitio veo como Erika levanta la mano para llamar la atención del profesor.

‘¿Pasa algo Señorita Louis? la clase ya ha comenzado;’ le pregunta el profesor.

Erika retira el libro con el que ha estado cubriendo su pecho, sintiéndose avergonzada de mostrárselo al profesor, ‘Alguien me ha gastado una broma profesor, me gustaría que me diera permiso para ir a casa a cambiarme;’ le dice.

El profesor guarda silencio durante unos segundos repasando una lista que tiene sobre la mesa, ‘No será necesario que se cambie Señorita Louis, suspendió el último examen de física, por lo tanto desde este momento es una esclava y no volverá a usar ropa a no ser que su dueño se lo permita;’ dice el profesor haciendo una señal a los dos miembros de la policía de esclavas que se acercan a Erika arrancándola la ropa y colocándola el collar de acero alrededor de su cuello.

Erika está en estado de shock y no muestra ninguna resistencia mientras se la llevan hasta la mesa del profesor obligándola a colocarse de rodillas a su lado.

‘Vamos a seguir con la lista de alumnas suspendidas;’ dice el profesor Roberts.

En ese momento levanto la mano llamando su atención.

‘¿Tiene algún problema que no nos permita seguir con la clase Señor Davies?’ me pregunta el profesor Roberts con tono enfadado.

‘¿Puedo acercarme a mostrarle una cosa?’ le contesto.

El profesor mueve la cabeza afirmativamente y me acerco a su mesa entregándole una tarjeta de video que procede a ver rápidamente.

Después de visionar el contenido de la tarjeta de video el profesor asiente con la cabeza y activa la pantalla de reproducción de video que tenemos en la clase. ‘Antes de continuar creo que toda la clase debería ver esto;’ anuncia el profesor iniciando la reproducción del video. Al momento la pantalla muestra una imagen de Erika chupando una polla.

‘¿Qué eres Erika?’ se oye una voz preguntando.

‘Soy una puta chupapollas señor;’ responde Erika deteniendo la mamada.

‘¿Y que se debería hacer con todas las putas chupapollas?’ pregunta de nuevo la voz.

‘Colocarlas un collar al cuello y esclavizarlas a todas;’ contesta de nuevo Erika.

‘Y dime Erika, ¿De quién te gustaría ser esclava?’ pregunta la voz.

‘Me gustaría ser su esclava Maestro Cole, que este falso collar que llevo al cuello fuera de verdad un collar de esclava con vuestro nombre;’ responde Erika mientras la polla descarga su semen cubriendo su cara completamente.

El plano se abre y me muestra al lado de Erika con mi polla todavía dura al lado de su cara, ‘Dilo para la cámara Erika;’ la ordeno en el video.

‘Si alguna vez soy esclavizada quiero que se me entregue a mi amo y señor, mi único dueño el Maestro Cole;’ dice Erika sonriendo en el video pensando que todo es un juego.

Evidentemente el video esta editado y todos los insultos posteriores que Erika me lanza han sido cortados, ahora solo tiene una manera de evitar ser mi esclava y es contando toda la verdad sobre el allanamiento de la oficina del director.

‘Visto este video la esclava numero 1218893131 antes denominada Erika Louis pasa a ser propiedad del Señor Cole Davies;’ anuncia el profesor Roberts a toda la clase mientras los dos policías de esclavas la colocan en una de las picotas.

Apenas presto atención a lo que sucede a partir de ese momento en la clase, me coloco detrás de Erika y bajándome los pantalones coloco mi polla a la entrada de su coño virgen encontrándolo ya mojado como corresponde a una nueva esclava, empujo fuerte rompiendo su virginidad y haciéndola gritar de dolor, tras unos minutos fóllándome a Erika que ya ha comenzado a gemir de placer, un coro de gritos y chillidos se unen a los de mi nueva esclava y al girar la cabeza veo como otras cinco alumnas han sido colocadas en las picotas y están siendo folladas por algunos de sus compañeros.

‘Si alguno quiere utilizar la boca de mi nueva esclava mientras esperan su turno, ya han podido ver en el video que es una experta chupapollas;’ les digo a mis compañeros de clase mientras Erika llega a su primer orgasmo de esclava.

Cuando al finalizar las clases me dirijo a casa guiando a Erika con una correa unida a su collar de esclava, cualquier rastro de odio hacia mi ha desaparecido, después de que cinco de sus compañeros se corriesen en su coño Erika empezó a suplicar por más, pugnando con el resto de las nuevas esclavas por ver quien conseguía más orgasmos, logrando para mi satisfacción ser la mejor de la clase también en eso.

Incluso ahora mientras caminamos hacia la oficina de registro de esclavas para que Erika reciba su marca de esclava, y a pesar de haber llegado a una docena de orgasmos durante toda la mañana, su coño no deja de gotear mientras me suplica continuamente que me la vuelva a follar.

Noto como mi polla se pone dura de nuevo, e inclinando a Erika sobre un banco del parque por el que estamos pasando comienzo a follarmela de nuevo, oigo las campanadas de un reloj cercano marcando las horas y no puedo evitar pensar en que hoy llegare tarde a comer.

FIN