Chantaje a mi vecina (segunda parte)
Después de conseguir su contraseña de email me enteré de su infidelidad, por lo tanto ya era mía, y podría conseguir de ella lo que yo quisiera.
Ya tenía a mi vecina Nuria de rodillas haciéndome una manada, mientras sus grandes tetas bailaban al son de cada chupada, y ver como esos labios que hasta ese momento solo podía soñar con besarlos, ahora me pertenecian, y me estaban dando un placer inmenso. A los 5 minutos estaba a punto de correrme y Nuria al darse cuenta de los latidos y espasmos de mi pene, abrió su boca e intento separarse, por lo que la sujeté fuertemente la cabeza, y volviendo a amenazarla con su infidelidad, la obligué a que volviera a mamar mi polla, y que sus labios apretaran aún más fuerte, y al momento.... mmmmm me corrí con un gusto increíble y ella se trago todo mi esperma, con arcadas, pero hasta la última gota. A continuación la digo, Nuria limpiame bien la chorra con tus tetas, y ella llamándome cabron e hijo puta, me dejo limpio mi aparato.
Me dice... Ya te has corrido en mi boca, has manoseado mis tetas y acariciado mi coño, que más quieres cabron, déjame ya. No Nuria, estas equivocada, a partir de hoy serás mi amante, mi puta, para hacer lo que yo quiera, y cuando yo quiera, eso o tu matrimonio se acaba, y te quedas sin la tutela de tus hijos, por puta. No, por favor José, ya te la he chupado, ya es suficiente, por favor, te lo suplico. Lo lamento vecinita, pero llevo mucho tiempo haciéndome pajas pensando en ti, en ese culo que tantas veces he grabado mientras no te dabas cuenta, viendo como se te marcaban las bragas, y mirando obsesionado ese par de tetas, aunque alguna vez te diste cuenta, y creo que hasta te sentiste alagada, y ahora tengo tu cuerpo, todo para mí, y te voy a comer hasta la goma de la braga. Ahora vamos a tu habitación y te diré lo que haremos.. No José por dios, déjame ya, que puede venir mi marido... No seas mentirosa, que el cornudo no llega hasta las 15,00 horas, y aún nos queda ufffff, toda la mañana, y toda la vida para manosearte y follarte. Me conduce a su habitación... La pregunto... donde tienes esas putifaldas que te pones a veces? Ahí... Ponte esta faldita, y a ver, donde guardas tus bragas, zorra, enséñamelas. Abre dos cajones y joder, lleno de bragas, braguitas, tangas, sujetadores sexys... Lo dicho, se pone una de las braguitas que más me gustó, una blanca transparente con unos dibujitos, pero que la raja era muy visible, y una minifalda blanca que cuando yo la veía en la calle me hacía empalmarme. También la mandé ponerse una camisa blanca que transparentaba el sujetador a juego con la braguita, estaba de 10,una súper hembra de 35 años muy atractiva. La digo recuesta te sobre el cabecero de tu cama, ábrete unos botones de la camisa, que se te vea el sujetador, y parte de tus grandes tetas, y empieza a masturbarme, o sea, ábrete de piernas, con la mano izquierda apartes tu braguita blanca, para que yo pueda ver tu chochito rasurado, y con la derecha te empiezas a acariciar el clitoris, despacito, después rozas tus labios vaginales, y después te metes los dedos, y quiero que gimas como lo haces cuando follas con tu amante, entendido. Ver a ese pedazo de mujer haciendo todo ese para mi era algo maravilloso. Antes espera zorra, que quiero rodear todo a tu alrededor con todas tus bragas y sujetadores, y allí estaba Nuria masturbandose rodeada de toda su lencería, mmmmmm.
Mientras ella empieza a tocar se yo me desnudo, ella mira mi paquete, mi paquete empalma do y sabe lo que va a ocurrir después. Ahora empieza a meter sus dedos en su coño y gime... Ainns... Ainssss. Así así puta, gime de gusto, y yo empiezo a hacerme una paja. Como siempre, porque me encanta, grabó todo, llevo grabando todo desde el principio, y cuanto más grabó, más la podré chantajear. Nuria gimiendo, yo pajeandome con una de sus bragas, una bonita braga azul cielo.... Me ponte frente a ella y la digo, mira que paja me estoy haciendo mientras te miro, y con una de tus braguitas, me estoy poniendo loco de cachondo. Cualquier otro ya se la habría follado, pero yo disfruto más humillando la, viéndola sufrir, no de dolor, sino de debilidad, y tengo todo el tiempo del mundo. Me corro antes que ella, y lo hago sobre su cara y sobre su ropa, le cae mi corrida entre el sujetador, entre sus muslos, y hasta en sus labios, ella aguanta el asco y sigue gimiendo, porque aunque obligada, ya con el rato que lleva masturbandose esta caliente y por fin se va a correr, la digo, gime alto y correte en la braguita, que la quiero para mi de trofeo, tu corrida, la corrida de mi vecina Nuria. Dime que te ha gustado masturbarte para mí, que a partir de hoy serás solo mía, que tu coño me pertenece, que seré el dueño absoluto de tus tetas y que yo solo mamare tus pezones, dímelo puta Nuria. Y ella lo dice todo. Ahora cuéntame como folla con tu amante... Quiero saberlo todo, y mientras lo haces, acaricia mi pene, suavecito, despacito, como rozandolo..... Le conocí en una reunión de trabajo, pronto nos sentimos atraídos, y aunque mi marido y yo nos llevamos bien, la atracción sexual era muy grande. Quedamos para cenar y una cosa llevo a la otra, empezamos a besarnos, el me sobaba los pecho, agarraba mi culo, yo acariciaba su pene, me levanto la falda y metió sus manos dentro de mi braguita, empezó a penetrar mi coño con sus dedos, yo estaba muy caliente, me lamia los pezones, manoseaba mis tetas, me tumbó en la cama, yo me abrí de piernas y su pene me follo una y otra vez hasta corrernos. Eso es lo que te gusta José? te pone cachondo eso? ya es suficiente no? Creo que ya he cumplido con lo que querías, pervertido de mierda.
Lo que tu digas puta, pero ahora me toca a mi, morreame como a él, meteme la lengua, sigue tocando mi chorra, ahora más intensamente. Yo empieze a sobar sus tetas, enormes tetas, se las saque por encima del sujetador, eso me encanta, metí después la mano entre su minifalda y la quité la braguita blanca empapada con su corrida, mi trofeo para oler en mi casa, empecé a manosear su coño húmedo, lo olí... Me encanta el olor de tu coño Nuria, te lo voy a comer, y se lo lamo de arriba a abajo, su clitoris, por la raja, se pone a gemir de nuevo, ya no puedo más, pongo mi pene enfrente de su agujero y la digo, coge mi polla y métetela hasta el fondo, puta, contoneate, follate y no dejes de abrazarme, morrearme y decirme lo bien que follo, que nadie te folla como yo, y que quieres mi semen dentro de tu chocho, venga zorra, y mi vecina Nuria obedece. Entre morreos y mientras la penetro con fuerza una y otra vez, la manoseo esas enormes tetas, y la chupo los pezones, los succióno, y ella los tiene duros. Al rato nos corremos juntos y la obligó a seguir unidos, quiero mi corrida dentro suyo, aunque la deje preñada, y la obligó a seguir besandome con lengua mientras se unen nuestras corridas. Una de las cosas que más caliente me ponen es besarla con lengua mamarnos la boca, ver sus labios junto a los míos y que mientras tanto manosee mi polla. La digo, joder Nuria, que bien follas vecina, seguro que te ha encantado hacerlo conmigo, verdad cerda?
Mientras la vuelvo a amenazar, por si con tanta corrida se la había olvidado, la empiezo a sacar fotografías desnuda, con ropa sexy, en lencería, haciendo poses, es que hago lo que quiero y ella nada puede hacer para impedirlo. Al rato... Nuria, ponte a cuatro patas que te voy a dar por el culo, ella sumisa y esperando supongo el final deseado, o sea, que me marchara, se pone a cuatro patas, la digo... Te voy a folla como un perro a una perra, pongo mi pene en la entrada del agujero de su culo y empiezo a arremeter, a empujar, y pronto su ano se abre, ya la han follado por ahí, y toma Nuria toma, por el culo, goza perra, goza, y después de estar enganchado a su culo me corro dentro, que gustazo haberte follado por el coño y por el culo Nuria, mi putita. Me has echo una manada y he hecho que te masturbaras para mi, me llevo tu braguita con tu corrida y un sugerente sujetador con el aroma de tus tetas, por hoy ya basta. Y ya sabes, mañana más, porque voy a jugar contigo a cosas que ni te puedes imaginar, nos correremos juntos y mucho más, me perteneces, serás mi puta sumisa para siempre, te metere mano incluso delante de tu marido, cuando esté distraído, que morbo, hasta mañana amor mío, hasta mañana Nuria, puta.