Chantaje (2: Entregada)

Hola soy de nuevo Raquel, después de que Oscar, me dejara en las dunas, fui al mar a quitarme todo ese semen de mi cara, y volví con los demás, nadie me dijo nada, ya estábamos de nuevo los siete juntos.

En cuanto pude quedarme a solas, con Oscar le pedí que por favor me dejara la cámara para borrar las fotos, se negó durante un rato, pero al final accedió, con la condición de ser él el que las borraras ya que tenía almacenado ahí "material muy valioso", ya borradas me quedé mas tranquila, aunque le contara a alguien lo sucedido en la arena, sería su palabra contra la mía.

Esa noche al regresar, me duché, cené algo ligero, y me fui a la cama, traté de dormirme, pero no hacía más que darle vueltas a lo sucedido, la sensación de estar medio desnuda y chupándosela en plena calle me excitó y comencé a calentarme, me levanté, fui a la caja de herramientas de papa, cogí un destornillador tamaño medio y otro grande, un guante de los que se usan para limpiar y regrese, cerré la puerta de mi habitación, me desnudé completamente y volví a acostarme, primero empecé con los dedos, me metí uno, luego dos y hasta tres a la vez, cuando ya tenía el chochito bien abierto metí el destornillador dentro del guante, haciendo que el mango entrase en uno de los dedos a modo de preservativo (el guante estaba sin estrenar), lo fui introduciendo en mi coño, suavecito, suavecito, hasta que me corrí como una perra.

A la mañana siguiente, nada más levantarme, recogí todas las pruebas, me duché, y como estaba sola en casa (mis padres trabajan los dos), me preparé el desayuno, me sentía mejor que nunca, había tenido en un día dos experiencias sexuales increíbles, que comenzaron a fraguar un cambio en mi, me senté a ver la tele, cualquier programa que pusiese, si salía un chico me excitaba, en ese momento, llamaron a la puerta, abrí, y era Oscar, entró sonriendo con un maletín y mirándome de una manera extraña, me dijo:

-¿estas lista?-

-¿ para que? - le respondí

-para ver esto – contesto él

Saco una cinta, la puso en el video, lo que vi me dejo de piedra, había grabado unos videos pequeños de un minuto aproximadamente cada uno donde se me veía chupandole la polla. La verdad es que me excite bastante, pero ¿por que me hacia eso a mi?, como si me leyera en pensamiento contesto.

-Vamos, no me mires así, ¿crees que iba a dejar pasar una oportunidad como esta?-

Se me quedo mirando, quieto, de pie, frente a mi, sin decir ni hacer nada, solo mirando, desnudándome con la vista, estiro la mano y me acaricio una teta por encima de la camiseta, cerré los ojos e inclinando la cabeza hacia atrás comencé a gemir, lo que interpretó como una invitación a alcanzar mi otro pecho con la otra mano; mis pezones no tardaron en reaccionar, endureciéndose tanto que se marcaban por encima de la tela, ya que no llevaba sujetador, al verlos, paro, me sonrió y comento, - vaya, al final no voy a necesitar más mi cámara, ¿te gustó lo de ayer?, ¿eh?, pero grabaré por si acaso, no te importa ¿verdad?- solo acerté a negar levemente con mi cabeza, ya me deba igual todo.

Entre sus caricias y recordando lo de la tarde anterior me estaba calentando por segundos, me dejo allí y se marcho hacia el cuarto de mis padres, yo continué viendo la grabación que me trajo, al cabo de unos minutos me llamó, cuando llegué al cuarto encontré una cámara de video con su trípode y todo, lista para grabar, me colocó en el centro junto al espejo de vestir de mama, puso la cámara a grabar y se acerco de nuevo, me quitó la camiseta y volvió a sobar mis pechos pero esta vez alternando con mordiscos a mis pezones, estaba perdiendo el control, deseaba de nuevo tocar su pene, así que acerque mi mano a su entrepierna y lo empecé a acariciar él volvió a sonreírme, solamente bajo la cremallera de sus pantalones y continuo trabajándome las tetas, metí la mano dentro de su slip, y noté el calor de su polla, su tacto, recordé su olor y sabor, se me hacía, literalmente, la boca agua.

Intenté arrodillarme para chuparsela, pero me lo impidió sujetándome del pelo, primero hizo que me quitase los culotes blancos mientras el se desnudaba por completo quedándome yo solo con un micro-tanga, que uso solo con la ropa muy ajustada para que no se noten - ahora si, pero no te arrodilles, chupamela en cuclillas – orden que obedecí encantada, y comprendí lo que quería, al ponerme en esa postura, el hilo medio de mi tanga se introducía entre mis labios vaginales, abriéndolos y permitiéndole a él contemplarlo desde arriba sin problemas, los tenia hinchados, lo que hacía que se me notasen más.

Esta vez le propine una mamada despacio, recreándome en cada milímetro de su palo de carne, la saboreaba y degustaba, la chupaba, lamía, besaba, todo lo que se me ocurría y/o había visto en alguna peli porno. Él mientras con el mando a distancia trataba de ajustar el zoom, hasta que pasado un rato... – aparta que no puedo más, me corroooo¡¡¡ - pero en vez de retirarme hice todo lo contrario, pose solo glande sobre mi lengua, y permanecí con la boca abierta lo más que pude, - Ahhhgg, toma leche zorra – lanzó cuatro o cinco directos al cielo de mi boca, llenándome la toda de semen, lo sostuve en ella, cerré la boca, lo miré fijamente a los ojos, me lo trague todo, y le sonreí, - Ohhh, que rápido aprendes, pronto serás una verdadera puta, pero no te creas que hemos terminado aún. -

Se tendió, metiendo su cabeza bajo mis piernas, hizo que me arrodillara, y comenzó a comerme el coño, en esa posición, solo tuve que echarme hacía adelante para introducirme en la boca su ahora pequeña polla, me la metí entera, y con una mano me ayudé a introducir tambien sus testículos, me quedé así, quieta haciendo todo el trabajo con la lengua, sintiendo como crecía dentro de mi, pasado un rato ya no me cabía entera y tuve que empezar a mover la cabeza. – para, para, vas hacer que me corra otra vez, prepárate, por que ahora te voy a follar-, me tendí boca arriba y abrí bien las piernas, - no, así no, para ser una autentica puta, te follaré como a tal-. Ese comentario terminó de volverme loca, me colocó a cuatro patas y me la fue metiendo despacio, hasta que llego a mi himen, de un empujón me la clavó por completo, rompiéndomelo, el dolor hizo que mis brazos flaquearan, y caí dejándome apoyada en los codos, y así comenzó a bombear, al principio suave, aumentado el ritmo que marcaba en mi cuerpo con sus brazos.

- Sigue, tu sola- soltó mis nalgas y paramos durante un segundo, justo el tiempo que tarde en reaccionar y empujar hacia atrás para continuar follándome, estuvo así durante un buen rato, sin tocarme, solo su polla entraba y salía de mi, - tu eres la que quieres ser follada, ¿no?, pues haz tú todo el trabajo-, me la sacó, se tendió en el suelo, y antes de que dijese nada me abalancé contra él, volviendo a clavármela entera, me quedé quieta, solo movía la cadera en círculos, despacio, sin que saliese de mi ni un milímetro, - ¿dónde has aprendido esto?, zorra. -

- en las películas porno - le respondí

- vaya, pues parece que estabas deseando practicar, ¿y que es como creías?-

- mejor, mucho mejor – respondí entre jadeos

• húmm, tú ya eras puta antes pasar por mi, lo que te voy a disfrutar, te follaré todos los días, harás todo lo que te pida y sin rechistar. -

• si, por favor- el "por favor" ese fue más un pensamiento en voz alta que creo no llegó a oír.

Ya me volvía a tener sujeta por las caderas, y marcaba otra vez él el ritmo de la follada, me levantaba, sacándomela casi por completo, y me empujaba hacia abajo, taladrándome por completo, todo eso sumado, a una más que considerable velocidad, hacia que, entre nuestra humedad y el choque de los cuerpos, sonase una especie de "chop, chop, chop" por toda la habitación, toda esa mezcla de sensaciones, me llevó a un orgasmo infinitamente mayor que el que había conseguido yo la noche anterior.

Me levanté, me tendí en el suelo a sus pies, y volví a chuparsela, esta vez apenas empecé se corrió derramando parte en mi boca y parte en mi cara, pero con un dedo fue rebañando toda la leche y dándomelo a chupar, luego me hizo limpiarle la polla, se vistió, recogió todo y se fue, pero se paro, se puso ante mí, me dio unas palmaditas en la cabeza, como si fuera su perrita. - eres una puta de primera - dijo mientras se marchaba.

Me dejo allí de rodillas en el suelo, desnuda, solo con el tanga y con mi coño irritado, encharcado y pegajoso, al igual que mi cara; "eres una puta de primera", esas palabras martilleaban mi mente, miré al frente, y me vi reflejada en el espejo, tal y como os acabo de describir, y lo comprendí, no sé si el no cobrar me excluye de serlo pero supongo que el usar mi cuerpo como moneda de cambio y disfrutar con ello, anula lo anterior. Salí corriendo tras Oscar, y lo alcancé sacando la cinta del video en el salón, lo miré, sonreí...- ¿mañana, a la misma hora? - pregunté

Me dio la vuelta, me inclinó formando con mi cuerpo un ángulo de 90 grados, y me comenzó a acariciar las nalgas, - es la segunda vez que corres tras de mi en dos días, no veas lo que han cambiado las cosas entre una y la otra, mañana tendrás más – diciendo esto me dio un cachete en mi culo dejándomelo marcado.

Gracias, a todos por vuestro e-mails, r24_79@hotmail.com