Cena para Tres...La Recaída
Tras la primera cena entre mi novia, Liliana y yo...La vida me da otra oportunidad
Tras la situación vivida y descrita en mi anterior relato, mi novia Elena y yo, proseguimos con nuestras vidas. Prácticamente no habíamos vuelto a hablar de esa noche, en la que entre ella y yo, hicimos que su compañera de facultad, Liliana no se olvidara de nuestro salón…
Como os expliqué en mi anterior relato, mi novia me había dejado clara su intención de que no le gustaría que se repitiera la situación de meter a otra persona en nuestra relación, y pese a que me moría de ganas, nunca volví a insistirle sobre el tema, pero la vida, es algo que siempre nos da una segunda oportunidad, y esa oportunidad es la que os voy a contar en este relato, y la cual sucedió el pasado mes de mayo…
Todo comenzó como os digo el pasado mes de mayo, por aquel entonces, mi novia estaba bastante agobiada con los exámenes, por lo que, en un arrebato de romanticismo, y para que se desestresara un poco, decidí reservar un fin de semana en una casa de turismo rural.
-Joder, cielo…no sé que decir… Dijo mi novia cuando conoció la noticia
-Anda, que necesitas un descanso de tanto estudio, además nos vendrá bien para relajarnos Le dije yo
-Ya…eso si
-No pareces muy contenta…Si no quieres ir, no pasa nada…Le contesté ante el poco entusiasmo mostrado
-No cariño, no es eso…¿Has pensado qué haremos con el perro?
-Pues…no, se puede quedar en casa, y que mis padres, lo saquen un poco en lo que no estamos Le dije yo
-No sé cielo, me da pena dejarlo sólo tanto tiempo…
La verdad, no creía que el tema de dejar al perro sólo, supondría un inconveniente, pero sí que lo resultó para mi novia, no le servía que mis padres vinieran un par de veces al día para darle la comida y lo sacaran de paseo. Mi plan fracasaba…Pero al día siguiente, todo cambió
Mi novia, volvió muy alegre de clase, le habían dado la nota del examen que tanto había preparado y había sacado un 8.5. Estaba muy contenta, por lo que aproveché para incidir en el tema de la escapada…
-Pues que bien cielo…Me alegro un montón por ti…Y ahora ¿qué te parece si hacemos la maleta y nos vamos a esa casa rural que nos está esperando? Le dije con media cara de pena
-De eso quería hablarte, porque resulta que le comenté el tema a mis amigas de clase, y Liliana, se ofreció a cuidarme al perro en su casa, y que si queríamos, podíamos dejárselo hoy, dormiríamos allí y mañana por la mañana, nos iríamos a la casa de turismo rural…¿Qué te parece? Me preguntó Elena
-¿En serio? Bua, pues genial!!!
Recuerdo perfectamente, que en el momento en el que escuché que dormiríamos en casa de Liliana, mi polla, me dio como un espasmo de excitación…Era mejor que un sueño
Así pues, preparamos la maleta que íbamos a llevar, y nos dispusimos a salir hacia casa de Liliana. Vivía en una calle bastante céntrica, y nos costó algo aparcar.
-¿Qué piso es? Pregunté cuando estábamos en el portal…
-Es el 5º C
Tras apretar el timbre, la puerta se abrió. Ibamos algo cargados, ya que llevábamos una maleta y al perro, además de unos pasteles que le habíamos comprado a Liliana, en señal de agradecimiento.
Y así, por fin…Volví a verla…Estaba preciosa, con esa mirada hipnotizante, y ese pequeño lunar en la mejilla izquierda, que hacía que la reconocieras entre mil mujeres…Tenía el pelo un poco más largo que desde la última vez que la había visto, pero por lo demás estaba exactamente igual…Llevaba puesta una camiseta de tirantes, blanca, y un pantalón vaquero bastante corto…
-Hola Lily…Joder, casi no damos aparcado, jejeje…Dijo mi novia
-Es que esta zona se llena de coches, y más en viernes…Hola Ángel…dame dos besos anda…
Ese perfume…Lo había olvidado, había olvidado ese penetrante perfume que me hacía estremecer, ese perfume que sólo a ella le había olido…
-Hola Liliana…Muacks, Mucaks…¡¡Que casa más bonita!! Le dije mientras cerraba la puerta de la entrada…
Nos enseño la habitación, dejamos las cosas y nos sentamos los tres en el sofá. Liliana, estaba sentada a mi lado, en un sofá de dos plazas, y Elena, se había sentado en un sofá de una sola plaza, que estaba casi enfrente al nuestro…
-Joder Lily, muchas gracias por quedarte al perro, porque sino no hubiéramos podido irnos a la casa de turismo rural…Le agradecí
-No pasa nada, si a mí me encantan los perros, y diciendo esto acarició a nuestro perro que se había acercado a ella.
-Por cierto, los pasteles ponlos en la nevera, porque alguno lleva nata, y pueden estropearse…Dijo Elena.
-Ya lo hice…jajaja…Si es que…”CUANDO TU VAS…” Dijo Liliana empezando a cantar la canción de Chenoa mientras todos nos reíamos.
El ambiente era algo que me preocupaba, temía que nos cohibiéramos a la hora de hablar, por lo que había sucedido meses atrás, pero las conversaciones transcurrían entre bromas y risas.
-Uff, tengo frío…Dijo Liliana, Voy a por una manta para ponerme por encima…
Nos habíamos quedado solos Elena y yo en el salón, momento en el que ella me lanzó un beso, en señal de complicidad…Estaba claro que estaba relajada…A lo mejor era yo el único que estaba tenso…
-Mira que pedazo de manta…Jajaja, Dijo Liliana, mientras se sentaba y extendía la manta de manera que cubría su cuerpo y el mío hasta el cuello.
-Jooo…¿y yo qué? ¿Para mí no hay manta? Dijo Elena quejándose entre risas
-A ti no te hace falta manta, petarda…Le contesto Liliana entre risas…
-Bueno, pues me voy a sacar al perro a la calle, a ver si hace pis, pero como me acatarre, te paso a ti la factura del médico, le dijo entre risas a Liliana.
-Coge las llaves que están encima de la mesa, que yo no me levanto a abrirte Le dijo Liliana riéndose, mientras mi novia cerraba la puerta.
La situación para mí, se había vuelto tensa, pues estaba a solas con mi sueño húmedo de los últimos meses…El corazón se me aceleraba, mientras mis poros respiraban ese embriagador perfume que desprendía su cuello. Me había imaginado todo tipo de situaciones mientras conducía el coche hacía casa de Liliana, pero nunca me hubiera podido imaginar el quedarme a solas con ella, sentados en el mismo sofá, y tapados por una manta…
De repente, una frase…De repente, una mano…De repente, ese perfume más cerca de mi…
Mientras Liliana, ponía su mano en mi pierna, acercaba su cabeza hacia mí, y susurrándome al oído me dijo…
-¿Me habías echado de menos, Angelito?
Y mientras decía esto, su mano, se apresuraba a llegar a mi entrepierna, por encima de mi ya abultado vaquero…
Sin mediar palabra, giré la cabeza y empecé a besarla, con deseo, con el mismo deseo que habia reservado durante meses…Mientras ella, me bajaba la cremallera de mi pantalón y escurría su suave mano hasta mi polla…
Me giré un poco para poder acariciar sus preciosos pechos por encima de su camiseta, mientras mi boca recorría su cuello…Ese cuello empapado en perfume…
Liliana seguía con mi polla agarrada, me masturbaba con muchas ganas, con frenesí, después de todo, a lo mejor, no había sido el único que deseaba repetir lo que meses atrás habíamos iniciado…Bajé mi mano hasta su pantalón, desabrochándole los botones, metí mi mano por debajo de éstos, pudiendo notar la humedad que reinaba debajo de sus bragas…De repente, ella soltó mi polla, y metiendo la cabeza debajo de la manta que nos cubría empezó a chuparme la polla, notaba su lengua jugando con mi glande, llenándola de saliva…Mi polla entraba y salía de su boca, al ritmo endiablado que marcaba su cuello…estaba en la gloria…Sin embargo, se oyó como se abría la puerta…era mi novia, habia vuelto de sacar al perro. Liliana dejó de chupármela, sin embargo, protegidos por la manta blanca que nos cubría, volvió a agarrar mi polla, llena de su dulce saliva…
-Ya he vuelto, casi no hace pis…Dijo Elena
-No tardaste tanto, mujer Dijo Liliana mientras suavemente me masturbaba…
-¿Y que tal vosotros? Dijo Elena, mirándome
-Pues…Bien...Aquí hablando de la casa y demás, acerté a decir entre vacilos.
-Jajaja, ¿Qué pasa Ángel? ¿Te falta el aire? Dijo de manera pícara Liliana…
Sólo pude sonreír ante esa pregunta de la chica que me estaba masturbando debajo de una manta delante de mi novia...La situación no podía ser más morbosa, y me moría en ganas de apartar esa manta que nos cubría y decirle a mi novia que quería que nos volviéramos a follar a la puta de su amiga…pero tenía miedo a la reacción de mi novia, ya que a lo mejor no estaba muy conforme con la idea…
La conversación fue avanzando, pero no por eso Liliana dejaba de masturbarme. Ella había cruzado las piernas, de manera que no se notara mi tienda de campaña, yo tenía miedo a que nos pillara Elena, sin embargo, con el paso de los minutos me fui relajando, tanto que notaba que me iba a correr…Pero ¿Cómo podía hacerle ver a Liliana que parara porque estaba a punto de correrme, sin que se diera cuenta mi novia?
Era demasiado difícil, y por ello, no pude hacerlo…cuando estaba a punto de correrme, mi novia se fijó en mi cara...yo, casi tenía los ojos cerrados del placer, cosa que a mi novia le llamó la atención. Se levantó, y para su asombro en cuanto levantó la manta que nos cubría, vio como mi polla empezaba a bombear semen sobre los dedos de Liliana…
-Pero…¿¿¿Qué está pasando aquí??? Gritó Elena visiblemente enfadada…¿¿¿¿Le estabas masturbando delante mía????? Tía, tu eres muy puta…de verdad te lo digo…¿Qué pasa, que quieres su polla, guarra? Pues cómetela puta…
Y diciendo esto, le agarró del pelo a Liliana, y acerco su cara a mi polla, haciendo que me la chupara otra vez…Come polla, puta
Mi novia estaba muy cabreada, o muy cachonda, no lo se muy bien, el caso es que tenía cogido por el pelo a su amiga, empujándole la cabeza hacia mi polla.
Pero se vio que la escena le debió parecer muy morbosa, porque no tardó en ponerse de rodillas y unirse a la mamada de Liliana…
Yo por mi parte, estaba recostado en el sofá, pero lejos de estar disfrutando, estaba dolorido, ya que me acababa de correr, y no tenía fuerzas para mantener la polla levantada…
Mis chicas se dieron cuenta enseguida, y Elena, volvió a coger de los pelos a Liliana, esta vez, más suave, y poniéndola de rodillas delante de ella, le dijo:
-Ahora te toca masturbarme a mí…Vamos puta!!
Diciendo esto, Liliana le subió la falda a mi novia, y empezó a masturbarla por encima de su tanga rojo, ante los primeros gemidos de placer de mi novia…
Si…Me encanta cómo lo haces Lily…y apartándose el tanga, le pidió que la lamiera.
Su amiga, deseosa de complacerla no perdió el tiempo, y empezó a darle zarpazos con su lengua en el depilado coño de mi chica...mientras con una mano le apretaba el culo, haciendo que se acercara aún más a su cara…
Poco a poco, mi polla empezó a recuperar vigorosidad, y no era para menos, ante el espectáculo lésbico que estaba presenciando…así que me acerqué por detrás de mi novia y empecé a rozar mi polla contra su culo mientras con mis manos le abrazaba las tetas, y le desabrochaba la camisa…Mi novia estaba disfrutando de las lamidas de Liliana que se esmeraba en que Elena no dejara de gemir, mientras yo la besaba en el cuello, mientras le pellizcaba los pezones…
En eso, me acerqué por detrás de Liliana, y poniéndola a cuatro patas, le bajé el pantalón que antes le había desabrochado…Mientras ella se entretenía en meter dos dedos en el mojadísimo coño de mi novia…Yo, ya estaba muy cachondo otra vez, por lo que aproveché mi posición y empecé a follarme a Liliana por el coño…
-Fóllatela Cabrón…Me dijo mi novia mientras se mordía su labio inferior…Dale duro, vamos…
Mis embestidas eran cada vez mas fuertes y más profundas, procurando que Liliana no se olvidara fácilmente de mi polla.
-Siiiii…No pares, joder…Qué ganas tenía de volver a sentirte dentro de mí Gritaba Liliana…
En eso mi novia, se acercó a mí, y se puso con el culo hacia fuera, en una clara señal de que quería mi polla dentro de su culo…Sin demasiado esfuerzo, hundí mi polla dentro de su hermoso culo, mientras ahora era mi novia la que le lamía el coño a Liliana.
-Te gusta ¿verdad, puta? Vamos, di que eres mi puta…DILO…Le gritaba a mi novia mientras le tiraba del pelo…
Siiii…Sabes que soy tu perra…Gritaba de manera jadeante mi novia…
Mi novia, volvía a estar fuera de sí. Necesitaba sentir mi polla dentro, y ya no le llegaba notarla dentro de su coño, necesitaba que me la follara por el culo…
Esta vez, fue Liliana la que sacó sus juguetitos mientras me follaba por el culo a mi novia. Le preguntó a mi novia, si le gustaría tener otra polla en la boca, mientras yo me la follaba por el culo…
-La necesito!!!! Suplicó Elena…
Y casi sin tiempo a acabar la frase, Liliana le hundió en su boca una enorme polla de látex, mientras le decía a mi novia que la chupara con las mismas ganas con las que ella se comio mi polla antes…
-Vamos putita, chúpala…Necesitas muchas pollas, ¿verdad zorra? No te conformas con una…Vamos…y diciéndole esto, le dio un cachete en la cara a mi novia, el cual le puso mas caliente aún.
Ese cachete le gustó a mi novia, porque me pidió que le diera más, que la estaba poniendo más cachonda aún, y Liliana entre más insultos, siguió abofeteandola, hasta que mi novia se corrió como nunca antes había visto…
Desde que mi chica se corrió, me dijo…Cariño, fóllate a esta puta hasta que pierda el conocimiento…
Y así, con las manos puestas contra la pared, cumplí el deseo de mi novia, y me follé a Liliana, con las ganas con las que la había deseado durante tantos meses, hasta que fui incapaz de seguir porque necesitaba correrme…Así que las puse, de rodillas ante mí y les llené la cara de semen, e hice que se lo lamieran la una a la otra de su cara.
La vida me había dado una segunda oportunidad, y no la desaproveché…
Quizás, ahora, mi novia se piense algo más el decirme nuevamente que es mejor no meter a nadie más en nuestras relaciones seXuales…
(Gracias a todos por leer mis relatos y sobre todo por comentarlos…Sois mi aliento)
Yo, por mi parte, casi me había obsesionado con Liliana, eran muchas las noches en las que me imaginaba follando con ella, mientras mi novia, estaba sentada tranquilamente a nuestro lado, mirándonos. Mis pensamientos durante mis masturbaciones recreaban, con todo lujo de detalles lo que había sucedido aquella noche de octubre. Incluso aprovechaba cualquier excusa para que mi novia me contara cosas de Liliana, ya que estudiaban juntas la misma carrera.