Cena de empresa

Todos nos sentamos en la mesa, muy guapos, casi no nos podemos reconocer sin la ropa laboral y tan arregladitos. El nivel de alcohol ya está alto y las risas y la desinibicion aparece para no irse. Se puede ver en el brillo de los ojos el deseo sexual entre unos y otros.

A mi me toca sentarme al lado del jefe, maduro, no muy atlético pero muy atractivo y con una mirada penetrante. Su voz es muy melosa y me habla tan dulce que poco a poco me hipnotiza y mi rajita se va humedeciendo, deseando me que posea.

La cena avanza y las conversaciones van aumentando de temperatura, las risas y cuchicheos van precediendo a caricias y arrumacos.

Mi conversación con el jefe a pasado ya a temas más íntimos y picantes. Mi lengua ya está muy suelta y confesora de deseos y fantasias sexuales. Mis piernas we abren un poquito buscando que sus dedos se posen en mis desnudos muslos para acariciarlos. El deseo quema mi vientre cuando acaricia el interior de mis rodillas. Ya estoy oficialmente cachonda. Siento como su mano me recorre delicadamente hasta llegar a mi humeda rajita mientras le susurro al oido que me encantaria follar encima de la mesa delante de todos. Y mos pezones erizados y duros que se marcaban en mi vestido asi lo corroboraban.

Pasamos a la sala de baile, ya con una copa en mi mano, y me acerco a él para bailar una bachata. nuestras piernas se entrelazan y puedo notar su polla muy dura rozándose con mi pelvis. Me abrazo a su cuello y apreto mis tetas contra su pecho , haciéndole sentir el calor de mi cuerpo y mi excitación. Con los movimientos, mi faldita se ha subido hasta limites extremos y sus manos ya buscan el calor de mi humedad excitada. La luz fe la sala es casi inexistente para dar cobijo a los más ardientes instintos y ya hay parejas escondidas dando rienda suelta a su calentón.

Sus dedos han llegado a mi empapado clitoris y dan rienda suelta a mis deseos escondidos mientras con su otra mano agarra mi culito por debajo de la falda. Mis labios buscan los suyos y el sabor de su lengua para ahogar con besos los gemidos del placer que me dan los orgasmos de sus deditos en mi rajita. Cuando llego a mi limite le pido ir al baño, y disimuladamente nos metemos un uno de los cubículos para que termine de follarme. Libero su dura polla y me la meto en la boca, la chupo de arriba a abajo, endureciendola mas y mas hasta tenerla a punto. Me quito el tanga y me subo la falda hasta la cintura y me abrazo a él para que me penetre duramente. Mis tetas quedan a merced de sus besos y lametones, poniendo mis pezones a punto de explotar de placer con sus chupetones. Aumenta 3l ritmo con sus caderas y siento cada vez más dentro su polla y ya no puedo parar de gemir de placer, corriéndome y mojando todas sus piernas. El éxtasis está cerca y le pido que no pare de follarme y que deseo que se corra dentro de mi. Me agarra del pelo y besa mis labios, metiéndonos la lengua hasta el fondo, y empotrandome más contra la pared hasta que nos corremos en un violento grito de placer y mi rajita se llena con su caliente semen y mis orgasmicos flujos.