Celos 3

Alejandra: Fran, tienes que irte. Es tarde y en tu casa te están esperando.

Francisca: eres toda una pepe grillo (la voz de la conciencia), pero igual te quiero, cuantos besos me vas a dar para poder vivir sin ti?

Alejandra: Pues solo uno porque es solo hasta mañana.

Francisca: UNOOOO? Esta bien, si no me quieres, me voy pero para uno mejor es ninguno. Así  que hasta mañana. Chao, tomo mis cosas y salgo, me va a dejar irme sin besarla, grgrrrrrrrr. Que rabia.

Alejandra: jejeje, la dejare irse sin un solo beso, aunque me arrepienta toda la noche, jajajaja. Puchis que es bella cuando se enoja, le sale fuego por esos ojos.

Francisca: Portazo. No la entiendo a que esta jugando, y si me devuelvo, seguro que es lo que espera. No lo haré,…

Ring ring, si. Ahhhh hola Arturo, bien de camino a la casa.

Arturo: olvide decirte que llego tarde,  tengo que terminar algo en la oficina, ya que mañana viajo a Buenos Aires por el día.

Francisca: esta bien, nos vemos entonces, chao tesoro.

Ring ring, si Arturo,

Alejandra: pues no soy Arturo, pero sigues  afuera de mi casa, y no te despediste y ya te extraño, puedes volver y te regalo unos cuantos besos.- horror, ni siquiera pude aguantar que llegara hasta el auto- Se abalanza sobre mi y me tapa a besos, si serás loca mujer

Francisca: ya casi lloraba y tú solo te diviertes, eres mala.

Alejandra: pues entonces te tendré que dar muchos besos para que me perdones. Comienzo a besar su cara, su cuello con pasión,

Francisca: Arturo estará ocupado hasta tarde, así que tenemos un buen rato para nosotras.

Alejandra: Fran, se que te vas a enojar, pero no voy a pasar más adelante hasta que no conversemos

Francisca: en todo furioso, que tanto tenemos que conversar cualquiera diría que yo soy la lesbiana y tú virgen que le pones tanto color.

Alejandra: Pues si estas en esa parada dejemos todo hasta aquí, no te das cuenta que esto no es un juego al menos para mí. Claro tú lo quieres todo y lo puedes tener todo. –siento como una lagrima se esta asomando, por favor no caigan, no en este momento-

Francisca: Así es al menos se lo que quiero, - sin darme cuenta, tomo mis cosas y voy saliendo de la casa- ya a varias cuadra comienzo a llorar, lentamente hasta que cae torrentes por mis ojos, que he hecho

Alejandra: Me siento en mi cama y lloro y lloro, siento como Ángel (mi gato) me mira y se acurruca  a mi lado, al menos tu eres razonable y no esperas más de mi.

Es tarde y me pongo ha escribir,

Cuenta la leyenda que una mujer un día amó, después de muchos años su corazón se abrió y un suave latido se sintió. Pero su latido iba a ser breve, ya que su amor luego partió.

Cuenta la leyenda que tanto lloró, que su alma se secó y un río nuevo nació, un río donde todo floreció, un río que se llamó amor.

Es una leyenda que habla de alegría, de ilusión hasta que a su fin llegó, cuanto dolor resurgió, con qué ganas hubiese seguido latiendo ese corazón, pero el impulso no bastó.

De la leyenda nunca se ha sabido el fin. El río a un gran lago abasteció, y la mujer volvió a llorar al ver la belleza que de ella nació, pero aún hoy, ese corazón no ha vuelto a latir.

Todo fue tan simple, un día empezó y al otro día acabó, fue un suave y único acorde que sonó, creo que te tendré que olvidar.

Creo que será mejor que la olvide y la arranque de mi corazón, estoy segura que terminare como mi leyenda.

Ring ring, le contesto o no, ring ring, sino de seguro que estará toda la noche.

Ale: Hola, como estas?

Fran: Mal, podemos conversar.

Ale: era la idea

Fran: ya  no empieces

Ale: Tienes razón, perdona. Puedo decirte lo que pienso y siento

Fran: dale

Ale: Te amo, pero tengo miedo, tengo miedo de mí, de enamorarme aun más de ti y que ya no pueda vivir sin ti. Sabes eso duele y duele mucho. Tengo miedo que después de un tiempo te vayas o Arturo se de cuenta y tu vuelvas por completo con él. (me caen las lágrimas y que cuesta hablar, siento como Francisca también llora)

Fran: Ale, yo también te amo, me di cuenta cuando te vi junto Haydee. No te puedo ofrecer dejar a Arturo, porque se que no lo haré, pero te puedo ofrecer que compartamos los momentos que tengamos, de la manera más bella y sublime que las dos podamos crear, yo sé que te pido todo, arriesgo poco y tu mucho, pero te prometo amarte hasta el último de mis días. No me excluyas de tu vida, por favor...

Silencio,……………………………….

Ale: esta bien, te amo. -No puedo, no puedo no amarla y desearla como lo hago, sabia que si me lo pedía iba hacer así-

Fran: puedo entrar estoy afuera en el auto

Ale: te abro, el corazón me salta, mientras seco mis lágrimas. Pues tienes peor cara que yo, le digo con una sonrisa, mientras la tomo entre mis brazos y la beso, como si fuera el primer y último beso que le daré.

Fran: Pues, yo pienso lo mismo de tu cara, pero por otro beso… empieza una guerra de besos que parece no terminar, cuando me toma de la mano y me dice, ven subamos.  Subimos entre caricias y besos, cuando entramos siento sus ojos en mi, como me tocan, como aman cada rincón, y suavemente sus manos desabrochan mi blusa y buscan mis pecho, los toma, los besa, que placer que sensación el sentirla en mi ….

Pues nuevamente, las dejo con las ganas hasta la próxima, así le ponemos emoción