Celebrando el 2005

Ocurrió tan solo hace tres días. Estábamos en la casa de un tío, celebrando la llegada del año nuevo. Nuestra numerosa familia se reunió casi por completa. Llegaron las 12:00 y comenzaron un sin fin de abrazos y besos.

Luego de eso, se corrieron las mesas y comenzaron todos a bailar. Primero baile con una prima, luego con una tía, luego con mi abuela hasta que terminé bailando con mi tía Ana.

Ella, sin ser la menor de la hermanas, mi tía Ana era la mas jovial de todas. Aun con sus 45 años encima, se veía muy bien para su edad. Hubo un tiempo en que estaba muy bien para mi gusto, estaba rellenita, con un buen par de tetas, buenas piernas y buen culo, aparte de ser bonita de cara. Ahora, después de su divorcio, estaba muy flaca , con poco poto, pero seguía manteniendo un muy buen par de tetas.

A esa altura estaba con una copas de mas, pero no borracha, solo un poquito alegre. Paramos a descansar un rato y me preguntó si tenía cigarros. Yo le dije que si y le ofrecí uno. Ella me dijo que no podía fumar ahí, ya que estaban mis primos y ella les tenía prohibido fumar. Me hizo prender uno y a escondidas le pegaba sus fumadas.

Me comentó lo buena que había sido en su juventud para los bailes, las fiestas, para tomar y fumar. Que había probado de todo. Le comenté que en mi billetera tenia un cigarro, de esos que dan risas y que si se animaba a pegarle una fumadita. Me miro muy sonriente y me dijo que si.

Disimuladamente salimos al patio de la casa de mi tío. Era una casa muy grande y al fondo del patio, tenia un cuarto, donde mi tío guardaba sus herramientas. Lo niños chicos jugaban en el gran jardín de la casa y no había ningún riego que fueran a este cuarto, ya que como las luces estaban apagadas, todo estaba muy oscuro, y no se veía casi nada. Pude notar que ella al salir por la cocina, ( yo ya la esperaba en la oscuridad) , había sacado una botella de champagne y la llevaba bajo el brazo. Al estar tan oscuro, ella se calló en el camino, lo que nos generó un ataque de risas a ambos, que tuvimos que aguantar.

El cuarto quedaba bien al fondo del patio y estaba cerrado con llave, como yo suponía. Sin embargo, como muchas veces yo le había ayudado a mi tío a cortar el pasto, me anticipe a esto y había sacado la llave de la cocina. Abrí el cuarto y ambos entramos. La oscuridad era absoluta.

Yo sabía las cosas que tenía mi tío en ese cuarto, incluyendo una luz de emergencia, la que prendí, al nivel mínimo y apuntando al piso para que no se viera desde la casa.

Mi tía destapo la botella y yo saque mi cigarro mágico. Comenzamos a beber y a fumar. A mi no me hizo efecto, ya que solo le pegue un par de piteadas al igual que mi tía, que tampoco quería que se le notase cuando volviera. A si que luego del par de piteadas por cada uno lo apague.

Mi tía le daba grandes sorbos a la botella, pasándomela a mi. Ambos nos reíamos silenciosamente hasta que ella me tomo de la mano y me acerco a ella. Tomando un poco de champagne, la dejo en su boca y colocándola sobre la mía, vació el líquido dentro de mi boca. Por unos segundos sentí el roce de sus labios con los míos. De igual forma hice yo lo mismo, pero esta vez la abrace y le metí mi lengua en su boca. Ella sin soltarse, volvió a llenarse la boca de champagne y me volvió a besar. El liquido corrió por nuestros cuellos y terminamos fundidos en un apasionado beso. Mis manos comenzaron acariciar su culo, mientras ella se apretaba mas y mas a mi cuerpo.

Mi verga se colocó durísima y la froté contra su pubis. Ella sintiendo el tamaño de mi herramienta, me rozaba su pubis con fuerza. Parecía que estábamos fornicando con ropa, los besos fuertes y apasionados, llevando nuestras lenguas lo máximo posible a la boca del otro. En ese momento no éramos tía y sobrino, éramos dos amantes calientes con ganas de sentir placer y lo estábamos consiguiendo.

Mi tía se arrodillo delante mío y casi a tirones me bajo los pantalones. Inmediatamente mi verga fue succionada por sus labios. Comencé a sentir una mamada exquisita, echa por toda un profesional, metiéndola hasta lo más adentro de su boca, para sacarla y hacerla rozar contra sus mejilla. Yo tome la botella de champagne y me vacié un poco en la verga. Ella me la quitó de la mano y bebiendo un gran sorbo, continuó dándome placer oral. Podía sentir el líquido que aun mantenía en su boca mojarme la verga. Ella saboreaba la verga de su sobrino haciéndole casi acabar de placer.

La levanté y la bese apasionadamente en los labios. Comencé a desabrochar rápidamente su blusa, ayudado por ella, hasta dejar libre una de esas tetas las que chupe con pasión, mientras con mi manos trataba de liberar la otra.

Sentimos a lo lejos la llamada de mi prima. Mi tía anduvo reaccionando un poco y quiso irse. Yo la detuve diciéndole que no nos encontrarían ahí, mientras seguía chupando sus tetas. Ella se arrodilló y me dijo que acabara en su boca lo mas rápido posible. Nuevamente mi verga fue absorbida por su boca, la que en menos de dos minutos logro llevarme al clímax y comencé a descargar todo mi semen en su boca. Ella al parecer no desaprovechó ese manjar y lo tragó completamente. Rápidamente se vistió y mirando por la ventana y percatarse de que nadie la veía, salio corriendo hasta la casa, dejándome a mi, con los pantalones abajo y una sonrisa de lado a lado.

Feliz 2005 a todos

Comentarios a Alexander_5149@hotmail.com