Cavé un pozo y caí. El pozo tiene tu nombre. 9

...¿O si?

Cuando al otro día informé al grupo que había vuelto con Leonardo hubieron reacciones diversas. Estabamos todas sentadas en forma ronda en la galería del patio escolar, era el segundo recreo, había esperado un poco para dar la noticia.

-Ayer me reencontré con Leonardo y no pude evitar volver con él. El me quiere, yo también, asi que bueno, después de conversar un poco sobre nuestra existencia, volvi a ser su novia. - Todas me miraron entre incrédulas y felices. - Si, de verdad. Hemos vuelto y por ahora me siento bien. -Dije, sonriente.

Cuando digo que fueron diversas, me refiero a que dependía de como conocían mi situación sentimental real.

Por un lado, Cristina. Ella sabía de mis confusiones interntas por varias conversaciones que habíamos mantenido fuera de la escuela, tambien que venía cometiendo errores graves  con Leonardo por ende  le parecía un error, según ella tenía que esperar un tiempo para aclararme a mi misma muchas cosas y después volver, de modo que nadie saldría herido. No lo dijo en público para no ser muy obvia, ya que solo ella sabía de "lo nuestro" fuera de Agustina y yo, porque es la persona a la que ambas le tenemos más confianza y se lo admitimos, por mi parte yo le conté detalles de nuestro "noviazgo" y Agus hizo lo mismo. Me dió su opinión sobre la vuelta solamente a mi en la tarde.

Por otro, Dani -que no tenía la menor idea de todo lo que había pasado con Agustina, solamente era una de las tantas personas que sospechaba pero no tenía la certeza de que tuviéramos "algo"- a la que le parecía genial, decía que mi pareja con Leonardo era perfecta y que le gustábamos juntos. Aparte que me veía más "triste y apagada" desde hacían unos días, tal vez era que extrañaba a Leo y su amor, seguramente me iba a hacer muy bien volver con él. -Lo que és no tener idea de que es lo que pasa por las cabezas de las personas, no?-

Ceci y Jane (que tampoco sabían nada) opinaron que debíamos ser más maduros para afrontar los problemas que nos habían distanciado en el pasado para no volver a pasar por lo mismo, entre otras recomendaciones más. Se dedicaron a aconsejar, ellas siempre parecían las madres o abuelas del grupo. Ser un año más grande que las demás -ya que ellas eran repitentes- las dotaba de una sabiduría que nosotras no teníamos, segun ellas, obviamente en broma nos decían eso.

Agustina se quedó en silencio incluso un rato después de que yo diera la noticia, cuando ya estábamos hablando de otra cosa, en el momento hizo un gesto de aprobación, pero nada más. A los minutos, sonó el timbre para volver al aula, todas nos levantamos para dirigirnos hacia allí. Agus se quedó un poco más atrás que las demás y yo me quedé con ella.

-Todo bien? Y Tonchi? -Pregunté. Todos los días preguntaba por el susodicho y me enteraba como iba progresando su relación.

-Bien, todo muy lindo,  vamos genial. -Dijo, mirando su celular. - Ya lo estoy empezando a querer.

-Me parece bien. - Respondí.

No volvimos a cruzar palabra hasta estar dentro del curso y sentadas en nuestro banco.

-Pasa algo, Agus? - Dios mio. Siempre tenía que estar al pendiente de su estado de ánimo?

-La verdad es que si...-respondió- tengo que admitir que no me gustó que volvieras con Leonardo.

.

¿Porque hacía todo lo que estaba a su alcance para confundirme? ¿Le divertía o que?

-A que vas con eso? - Pregunté, muy fastidiada.

-A que se me vino a la cabeza el hecho de que cuando empezamos nuestra relación "extraña" vos comenzaste a alejarte de Leo, porque en cierto modo me preferías a mi, ahora sentí que si volves con él es porque ya no me preferís o porque nuestra relación quedó más atrás de lo que yo creía - mi cara comenzó a trasformarse para mal y ella lo notó- es muy estúpido lo que estoy diciendo, verdad?

-Si, Agustina, demasiado. Es una estupidez, si te ponés a pensar todo pasó por una decisión tuya. No seas como el perro que no come ni deja comer, es muy egoísta de tu parte. Vos estás con otra persona, yo estoy con alguien que me quiere. Dejémoslo ahí, por favor.

Se dió cuenta de que había embarrado un poco la situación y no volvió a tocar el tema, ella misma nos confundía a ambas porque tenía sentimientos encontrados hacia mi todo el tiempo, me hacía notar -y no solo con eso, sino con varias escenas de celos que por ahí habían entre nostras- que no era tan fácil para ella aceptar que no iba a ser la única persona en mi vida -en mi cabeza si que era la única, pero no tenía porque saberlo- Nunca me lo dijo, pero la conocía demasiado como para saberlo sin palabras.

Desde ese día y esa charla, en la que yo no le respondí bien, lo admito, no volvimos  a referirnos a nuestra relación fuera de la amistad. Se ve que su orgullo quedó un poco herido y no he conocido persona más orgullosa que ella.

Llegamos a finales julio, habían pasado el 21 de mayo, junio y de julio mismo, no "festejamos" nunca más el cumplir mes, ni siquiera nos referimos a eso. Parecía que todo había terminado. Todo. Eramos mejores amigas, si. Lo compartíamos todo, pero no era mi novia, ni pseudo-novia, ni nada. No hubieron más escenas de celos, ni tomarnos de la mano, ni tirarnos una sobre la otra, ninguna demostración afectiva de parte de las dos.

En junio se puso formalmente de novia con Tonchi, pareja que todo el mundo amaba, salía todos los fines de semana a bailar e inlcuso salimos con Leonardo, los cuatro. Si bien Leo había comenzado a cultivar un malestar hacia Agustina porque éramos demasiado cercanas hacía un tiempo -hasta él sospechaba que había algo raro-, Tonchi (y la pareja que hacía con mi "amiga") le cayó super bien, a mi también me caía bien, debo admitirlo. Pasamos las mejores fiestas.

De todas maneras, tuve que soportar verla enamorarse de él, verla besándose con él, que cambiara las fotos de facebook y pusieran que tenían una relación, como vivían públicamente su amor. Yo también hacía lo mismo con Leonardo. Pero varias fueron las noches en la que me acosté llorando, queriéndo que esto terminara de alguna manera. No sabía cuanto tiempo podía soportar ver a la mujer que amaba enamorarse de otro, que pasara tantas cosas con otro. Y yo no reaccioné en ningún momento, seguía en pausa, intentando aferrarme a Leo pero sin conseguirlo.

¿Como una persona se puede desenamorar de otra si casi convive con ella? Si la ve todos los días y esté como esté le parece hermosa, si soporta cada uno de sus malos ratos, crisis y encima podría hacerlo hasta morirse. Como sea, los días eran cada ves más dificiles pero solo para mi. No le comuniqué a nadie, ni a Cristina, que todo en mi interior se derrumbaba excepto mis sentimientos por ella, porque era algo que no tenía explicación ni para mi misma. Ya tendría que haberla dejado ir, pero no podía, estaba aferrada a su sonrisa, a su mirada, a sus besos que hacían tanto que no sentía...

-Hice el amor con Tonchi. - Dijo un día que nos habíamos juntado todas en casa de Cristina y fue indisimulable lo que me hizo sentir, cayó como un baldazo de piedras, como una camionada de piedras, como una montaña sobrecargada de piedras. Nunca lo habíamos hablado entre nosotras, ni tampoco lo había plasmado aquí, pero obviamente el deseo de estar con ella estaba siempre presente en mi. Me tendría que haber imaginado que si eran novios lo normal era que tuvieran relaciones, pero saber que ya era algo real, saber que yo me acosté pensando en ella y ella se estaba acostando con otro, dolía y mucho.

No era virgen, había tenido un par de experiencias anteriores -obviamente, ninguna con una mujer- pero hacía mucho que no tenía sexo, con Juan Cruz nunca tuvo. O sea, en mi periodo de enamoramiento, ella no había intimado con nadie. Yo si, lo hacía continuamente con Leo, pero lo mio era más común, no tengo idea si le molestaba o no cuando yo contaba mis experiencias con él.

Todas preguntaron detalles, yo fingí que me llamaba uno de mis primos y debía irme urgente. Creo, que en el fondo ella se dió cuenta de lo que me pasaba. Por lo poco que escuché, la pasó muy bien.

Llore, Dios, como lloré ese día, desde que salí de la casa de Cristina hasta que me dormí, no fue necesario ni siquiera escuchar música, necesitaba silencio para poder escuchar mis gritos internos que decían que parara con este sentimiento,  no dejaba de perder todos los partidos, hay que saber aceptar los finales. Era una mala racha de todos los días, todos eran malos para mi o tristes, al enterarme de algo nuevo, al verlo llegar a buscarla y verla a ella tan feliz y que en parte me gustaba que estuviera feliz, porque la hacía ver hermosa.

Pasó julio y llegó agosto, estábamos un poco extrañas, peleábamos por estupideces y hasta sentí que había una especie de distancia entre nosotras, preferíamos hablar con los demás, cuando contábamos algo lo hacíamos a todo el grupo, nada se charlaba solamente entre ella y yo. Cada una estaba en su burbuja.

Me hacía un poco bien el alejamiento, pero la extrañaba tanto. Encima no sabía cuales eran realmente sus sentimientos hacia mi porque no demostraba nada, ni bueno, ni malo. Nunca supo de mis lágrimas, de mis reproches a mi misma, de mi sufrimiento por ella. Ella creía que yo era muy feliz con Leo.

Pero no era así, el martes 21 de agosto de 2012 -justamente ese número- decidimos cortar y por tiempo indeterminado, el notaba que yo estaba en otro mundo y yo lo justifiqué en que prefería disfrutar de mi último año de secundaria, quería estar sola. Él, otra vez y con todo el sufrimiento del mundo, lo aceptó. Estaba siendo tan injusta con un hombre tan bueno, cuando ese día se fue de mi casa, lloré y pedí que algo bueno sucedirera, por favor. Ya no sabía que hacer conmigo y todos mis sentimientos estúpidos.

Los dias continuaban pasando, con mucha rapidez en clases yo seguía permanente en pausa -ya expliqué lo que era- no le conté a nadie que había terminado con Leo, para seguirme aparentando feliz, cuando era una patética perseguida por la mala suerte.

Siempre había para contar una nueva anécdota con Tonchi, pero que fastidio tener que contarles a ustedes todo eso que me hizo muy mal en su momento, simplemente imaginen todas las cosillas tradicionales que se vivien cuando estas de novio (salidas, sexo, aventuras, planes, etc.)  esas las pasaron ellos, no quiero adentrarme tampoco porque la historia, que ya de por si es larga, se hará demasiado extensa.

Hasta el día de hoy, en febrero de 2015, no tengo la más mínima idea de que fue lo que pasó, pero la cuestión es que Agustina llegó un lunes a la escuela diciendo:

-Ya no estoy ni voy a estar nunca más con Eliseo, por favor. -Estaba llorosa y angustiada- Intenten no preguntarme nada por el momento.

Estábamos amuchadas todas en mi banco y nos quedamos completamente estáticas e incrédulas. Primero: Tonchi se llamaba Eliseo y ninguna lo sabía, nos costó relacionar el nombre con el apodo y hasta tuvimos que preguntar. Segundo: Eran la pareja del  mes, del año, del siglo, habían hecho y vivido bastante cosas juntos, se veían siempre. ¿Que carajo pasó?.

-Vos sabes que siempre estamos al lado tuyo, para lo que quieras -Dijo Cristina y todas estuvimos de acuerdo. - Cuando tengas ganas de contarnos, lo hacés. Todas la contuvimos, sin saber aún que había pasado.

Volvieron todas a sus respectivos bancos  y nos quedamos solas. Intenté distraerla con todo lo que estuvo a mi alcance, cada tanto Cris y Dani se daban vuelta para aportar buena onda.

-Lo único que quiero es un abrazo tuyo. - Me dijo en el recreo cuando salimos a comprar algo para desayunar, con la voz más quebrada y adorable que escuche en mi vida.

No espéré a que terminara de hablar y la abracé, sentí millones de mariposas agarrándose a patadas en mi panza, por un lado las pro Agustina y por otra las anti, ganaron las pro.

Pocas veces nos habíamos abrazado con tanto sentimiento. No era necesario hablar, todo lo dijimos en un abrazo. Todo.

-Yo ya no estoy con Leo desde hace un tiempo, asi que te entiendo y estoy con vos para lo que sea. Siempre, siempre al lado tuyo. Mano? -Pregunté, cuando nos habíamos soltado y nos dirigíamos hacia el curso. Tomó mi mano como siempre y ese día, después de meses, volvimos a parecer novias otra vez.

¿Que fue lo que motivó que terminaran? Nunca tuve el suficiente coraje de preguntarlo y ella, en los días siguientes a terminar no quiso contarlo, después pasó el tiempo y también el interés paraque lo cuente, lo que importaba era que ella se sintiera bien. Por retazos de historia que me llegaron por Mica -que estuvo presente y desde ahí lo odia con todo su ser, hasta hoy-  se que él la ofendió con respecto a su enfermedad o su cuerpo, algo así, de una manera imperdonable pero que realmente no tengo la certeza de que sucedió, fue en una de las noches en las que salieron juntos.

Fue un shock general, nadie lo podía creer. Pero había pasado, se habían eliminado de todos los lugares posibles de comunicación y nos pidió que todas lo borrarámos, cuando ingresé a su facebook para hacerlo, parecía que el ya estaba encandilado con otra chica, llamada Antonella -un tiempo más tarde nos enteramos que se puso de novio con ella, después de eso le perdímos el rastro-.

Ella estaba frágil y no quería aprovecharme de eso, pero la realidad es que  era mi gran oportunidad de volver a escena, de ser la persona que le de fuerzas para seguir, que se aferrara a mi. Y lo empezó a hacer desde el primer día. Pero, insisto, yo no quería aprovecharme de eso. Me hacía sentir un poco mal sacar ventaja de toda esta situación y no iba a hacerlo...¿O si?

HASTA AQUI LLEGA LA PARTE 9! -Perdón a la que no le gusta que escriba esto jaja- No ha sido de las mejores semanas y por eso la demora en esta entrega. El 11 de febrero se fue al cielo una persona hermosa, compañera de universidad y todavía no lo puedo creer. No he estado muy concentrada en escribir y tampoco he tenido muchas ganas, disculpen si el capítulo no está tan pulido como otros. Intenté enlatarme solamente en lo que fue "Tonchi"  Y reconozco que no me adentré bastante, porque -como dije antes- las ganas no se hicieron presente...los que vienen serán mejores, promesa!

GRACIAS A TODOS LOS COMENTARIOS, ME LEVANTARON MUCHISIMO EL ANIMO! Y A ESPERAR LA PARTE 10!!!!