Cassandra
Historia de una mujer abusada durante toda su vida.
Casandra.
El siguiente relato es de por sí muy diferente a la mayoría, ya que a parte de que se trata de hechos reales, los mismos quisas suenen crudos o exagerados.
Casandra, que es como llamaremos al personaje central, por guardar su verdadera identidad y por que dicho nombre fonéticamente es semejante al de la verdadera persona a la que le sucedieron estos hechos, tiene una triste historia. Hija de quien sabe que padre y la tercera o cuarta de una madre alcohólica, vivía desde su nacimiento en una zona de abundante pobreza, en esos sacos de miseria hechos de cemento donde sus habitantes día a día se enfrentan al dolor (que cursi).
A la temprana edad de seis años fue violada por su propio hermano mayor de catorce años, no fue un juego en el que ella participó por curiosidad o voluntariamente, no. Casandra se encontraba en el apartamento de su madre, la cual por encontrarse borracha ese día como la mayoría de las veces, compartiendo su cama con dos ebrios más. La niña se encontraba en cama enferma con un fuerte catarro, que le había producido unas elevadas fiebres, durante gran parte de la noche, su vieja abuela se lo había controlado dandole remedios caseros como un jarabe de ron miel y limón, además de abundantes fricciones de alcohol por todo su pequeño y desnudo cuerpo, casi hasta la madrugada. En la misma habitación dormía la abuela, los dos hermanos mayores que Casandra, las tres hermanas menores de la niña y un par de tíos hijos de su abuela. Los tíos de Casandra he hijos de la vieja abuela de ella, eran unos adictos a la heroína, pero para completar el cuadro el menor de esos tíos era un homosexual declarado, de esos que no disimulan su condición, y la pregonan por donde pasan.
Así que se pueden imaginar, el grotesco cuadro de esa habitación a la hora de dormir. En la mañana la abuela partía con todas las hembras para dejar a las tres menores en un cuido de infantes del Gobierno Municipal, y continuaba con la pequeña Casandra para mendingar por las urbanizaciones ricas y luego ir al mercado para ver que recogía o le regalaban. Ese día debido al precario estado de salud y condición física de la niña su abuela la dejó al cuido del tío maricón. Los hermanos mayores de Casandra supuestamente habían salido para la escuela pública donde recibían clases, pero a la medía hora de que saliera la mayoría de la casa, Pedro el hermano mayor de Casandra regresó y su tío al verlo llegar, loco de contento se vistió con sus mejores galas para poder visitar en el Penal de la ciudad a su último marido que se encontraba preso pagando una condena de cinco años por trafico de drogas.
Al quedar Pedro a solas con la pequeña Casandra se dedicó a revisar primero todo el apartamento, al entreabrir la puerta de la habitación de su madre la encontró totalmente desnuda en la cama con la compañía de dos hombres, que al parecer se encontraban en igualdad de condiciones que ella borrachos y desnudos aparentemente la noche anterior se habían estado divirtiendose mucho, todavía se podía ver abierta una media botella de ron sobre la mesa de noche. Debido al fuerte hedor a ron, cigarrillos y ropa sucia, el joven cerró la puerta de la habitación donde se encontraba su madre, pasando la borrachera de la noche anterior, en silencio.
Pedro se dirigió a la habitación donde se encontraba dormida bajo una pequeña sabana blanca su hermana menor, al llegar tiró los libros a un lado, y luego se acercó a la cama, sin ninguna consideración le retiró la pequeña sabana con que su abuela había cubierto el desnudo cuerpo de su nieta, observó por breves segundos el desnudo cuerpo de su pequeña hermana, se le fue acercando a ella, la cual se encontraba profundamente dormida, por el desgaste físico a consecuencia de las altas fiebres, que le habían durado casi hasta la madrugada, con ambas manos le separó las piernas de la delgada niña lo más que pudo, procurando no despertarla al principio se puso a pasar sus dedos por la vulva sin pelos de ella, Casandra no respondía y continuaba durmiendo profundamente sobre el sucio y viejo colchón donde hace muchos más años de los que ella tenía, su abuela dormía acompañada de uno de sus hijos.
Pedro fue tomando confianza exploraba más profundamente la vulva de la niña, mientras su pene se comenzaba a hinchar a consecuencia de lo excitado que se encontraba, para su edad se encontraba muy desarrollado en esa área de su cuerpo. Llegó el momento en que no aguantando más se sacó su miembro y comenzó a masturbarse al tiempo que continuaba metiendo sus dedos dentro del área genital de la menor, no conforme con eso pasó sus manos una y otra vez por el torso desnudo de la niña, para luego comenzar a tomar posición sobre el dormido cuerpo de ella.
Cuando Casandra despertó ya su hermano había logrado penetrarla lo suficiente como para desvirgarla, lo cual hiso sin ninguna consideración o remordimiento de su parte, la niña se despertó y al ver a su hermano mayor sobre su cuerpo le produjo una fuerte sensación de miedo y posteriormente un gran dolor entre sus corta he infantiles pierna, Casandra trató de gritar pero Pedro colocando una de sus manos sobre la boca de ella apagaron sus gritos. Su hermano no se levantó hasta que sintió que se venía dentro de ella, Casandra se quedó acostada sin saber que hacer o por que su hermano le había hecho eso que le produjo tanto miedo y dolor. Pedro al terminar se cambió de ropa, quitandose su uniforme de escolar para luego dirigirse a donde sus amigos, a contar su hazaña.
Casandra se sentía toda adolorida, al levantarse se asustó más, al darse cuenta de la mancha de sangre que había quedado en la cama de su abuela, en ese momento se dio cuenta que era sangre de ella, y corrió desnuda al cuarto de su madre para pedirle ayuda o que la curase, pero al ver el estado en que su mamá se encontraba salió de esa habitación y se volvió acostar llorando en la cama de la abuela ha esperar que esta llegase para contarle todo.
Al día siguiente cuando la menor se quejo del dolor entre sus piernas frente a una de las empleadas en el cuido Municipal, la que le preguntó que había sucedido y la niña aterrada por las amenazas del hermano a duras penas y pudo contar su calvario. Era la hora de buscar a las más pequeñas en el cuido, y antes de salir de la casa, Casandra se había quejado a su abuela, pero tanto a su madre como a su abuela las que al escucharla decir lo sucedido, le ordenaron que no lo repitiese a nadie. La empleada llamó al médico y posteriormente fue llamada la policía, Pedro fue enviado a una correccional para jóvenes de su edad, y en la casa tanto su madre como su abuela la culparon todo el tiempo de lo sucedido.
Cuando Casandra tenía entre ocho o nueve años de edad , se repitió casi lo mismo con el mismo hermano, que recién se había fugado de la institución donde se encontraba "rehabilitandose", la diferencia fue que en esa ocasión le colocó una navaja en el cuello de ella y la estuvo abusando por espacio de un mes bajo amenazas constantes de muerte.
Pedro un buen día se presentó al hogar de su familia, según él dijo ya lo habían soltado por buen comportamiento, y todos se lo creyeron menos su tío menor, el que era maricón. Pedro se acercó a Casandra esa tarde y frente al resto de la familia dijo que la había perdonado por lo que ella había dicho, dandole un pequeño regalo. Como a la semana Casandra encontró a Pedro en medio de una negociación de drogas, él luego de recibir el dinero tomó a su hermana por el brazo y la condujo a un apartado edificio, que se encontraba medio demolido, de ahí sacó un paquete y se lo entregó a la menor, diciendole que se lo diese a determinado tipo. Casandra cumplió al pie de la letra lo dicho por su hermano, luego regresó a donde este se encontraba, contando una gran cantidad de dinero.
Al verla Pedro regresar la condujo dentro de la demolición y cuando él pensó que se encontraba lejos de miradas indiscretas, sacó una navaja de su bolsillo y tras abrirla se la colocó a su hermana en el cuello diciendole "vas hacer todo lo que yo te diga de ahora en adelante o soy capaz de matarte con esta navaja" a partir de ese momento, Pedro se vino a convertir a la fuerza, en el primer marido de la pequeña, en esa oportunidad le ordenó que se bajase unos rojos pantalones cortos que la niña usaba en esos momentos, al igual que las pantaletas que ya le quedaban pequeñas, ella llorando quedó desnuda de la cintura para abajo calzada con una viejas chancletas de color naranja que eran de su abuela. Pedro a un con la navaja en su mano le ordenó arrodillarse mientras se sacaba con dificultad del pantalón su erecto pene, una vez que lo tubo afuera tomando a su hermana por su desordenado cabello de color negro, acercó la cara de está hasta su verga la cual daba la impresión de mirar al cielo.
Casandra fue introduciendo esa cosa colorada dentro de su boca, con mucho asco ya que ella sabía que los hombres orinaban de pie por esa cosa que tenían entre sus piernas, a diferencia de ella y el resto de las mujeres que ella conocía que todas se agachaban para mear. A pesar de las muestras de asco que expreso su hermana, Pedro le ordenó que continuase diciendole "acuerdate de cuando eras una nena y te daban el biberón, esto es lo mismo" guiada por la mano de Pedro sobre su cabeza Casandra comenzó a mamarle la verga al desgraciado, en su pequeña boca entraba y salía la pinga de su hermano una y otra vez, ese movimiento fue siendo más fuerte, realmente ella únicamente mantenía su pequeña boca abierta, mientras que Pedro se estaba masturbando con ella en vez que con sus propias manos, al fin Pedro comenzó a lanzar sus chorretes de leche dentro de la boca de Casandra, la cual trató de escupirlo de inmediato pero un jalón de su cabello y la sub siguiente amenaza de su hermano ordenando que se lo tragase la hiso desistir de esa idea, al terminar Casandra se había chupado hasta la última gota del semen de su hermano, tras lo cual él le ordeno que se pusiera el pantalón, pero que desde ese día en adelante, no usaría pantaletas a menos que él se lo ordenase directamente, y le comentó que no volviera hacer lo que había hecho antes de ir a contarle lo sucedido a nadie.
A Casandra no hacía falta repetirle las cosas dos veces, y se acordó de lo mal que la trataba su mamá mientras que su hermano estuvo fuera de la casa. En otra ocasión en el mismo sitió Pedro le ordenó a su hermana que se subiera la falda del vestido que estaba usando ese día, dejando ante la vista de su hermano su lampiña vulva. Pedro había acondicionado el lugar para saciar sus gustos, tenía un numeroso paquete de revistas de mujeres desnudas, al igual que una nevera portátil llena de cervezas y otras bebidas, además de unas cuantas cajetillas de cigarrillos y unos paquetes del tamaño de un ladrillo envueltos en hojas de papel de aluminio.
El joven se sintió contento al ver que su victima estaba obedeciendo sin poner reparos, y que como él mismo le había ordenado andaba sin pantaletas. Casandra mantenía la falda de su vestido entre sus manos y comenzó acercarse al cuerpo de su hermano dispuesta arrodillarse para comenzar a mamarle su cosa nuevamente, pero él la detuvo diciendole que se esperase a que sacase su verga del pantalón. Al terminar de extraerla esa cosa que había estado en su boca y había soltado esa leche que su hermano le obligó a tragar días antes, se veía muy diferente mucho más pequeña y floja que lo que ella recordaba haberla visto la última vez, Pedro agarró una de las manos de Casandra y se la colocó sobre su miembro y comenzó a decirle que era lo que ella debía hacer, la menor mientras que con una mano se sostenía la falda por orden de su hermano con la otra había comenzado a masturbarlo siguiendo sus direcciones, lentamente ella fue viendo como esa cosa se comenzaba a endurecer entre sus dedos, hasta que volvió a tener el tamaño y forma que ella recordaba.
Pedro le ordenó a su hermana que abriese las piernas mientras él con sus dedos comenzaba a pasarlos por la superficie de su vulva, lentamente fue introduciendo su dedo indice por la corta raja de su hermana y con suavidad la acariciaba por dentro, centró su atención en la pequeña almeja de Casandra la que luego de un rato comenzó a sentir unas cosquillas por dentro de ella, a medida que masturbaba a su hermano. Pedro fue introduciendo el resto de sus dedos y a Casandra le estaba agradando eso, no se sentía bien pero le agradaba la sensación, cuando Pedro lo consideró pertinente saco sus dedos ligeramente humedecidos, tomó a su hermana por los brazos y la hiso soltar su erecta verga, mientras que él se encontraba sentado con los pantalones abajo, luego comenzó a meter la cabeza de su verga dentro de la pequeña vagina con suavidad, a Casandra le vino a la mente el dolor que un tiempo a tras eso le había producido, y su cuerpo se puso tenso pero la voz de su hermano la comenzó a tranquilizar, lentamente Pedro continuó introduciendo su verga dentro de Casandra la que dio ligeros quejidos, llegó hasta un punto donde la niña con mayor confianza le dijo que le estaba doliendo, por lo que él se lo comenzó a sacar de igual forma en que se lo había introducido, Pedro comenzó a follar con su pequeña hermana sentada sobre su regazo con las piernas abiertas sobre las desnudas piernas de él, hasta que el rostro de Casandra reflejaba que disfrutaba lo que él le estaba haciendo, la boca de Pedro buscó los labios de su hermana y comenzaron a besarse, la niña en todo momento se dejó llevar hasta que su hermano la abrazó con tanta fuerza que por poco le saca todo el aire de sus pulmones, y los cuerpos de ambos se convulsionaban a medida que su velocidad y fuerza aumentaba.
Terminada la relación Pedro le ordenó a Casandra que se bajase y se lavase echandose bastante agua dentro de su raja. Dicha situación era casi a diario, para la niña era una especie de juego divertido del que ella disfrutaba, era verdad que su hermano en ocasiones la lastimaba pero eso era en pocas ocasiones, pero luego le hacía algún tipo de regalo como para contentarla, pero siempre como para que no se olvidase sacaba la navaja y se la pasaba muy cerca de su cara. En una ocasión Pedro a penas ella llegó le ordeno que se quitase todo lo que tenía puesto quedando toda desnuda ante él, quien le ordenó que se pusiera en cuatro patas después de que por largo rato le mamase su verga, tras lo cual el se puso de tras de Casandra, y por espacio de casi media hora se dedicó a meter sus dedos llenos como de aceite entre su pequeño fundillo, mientras tanto Pedro se fumaba un cigarrillo de marihuana el solo, Casandra en par de ocasiones se quejó pero él dandole una fuerte nalgada la hacía callar, tranquilamente Pedro se paró de tras de ella y agarrando su verga se lo comenzó a empujar por el culo a la menor la que al principio comenzó a llorar por el dolor que eso le producía, hasta que Pedro terminó de meterselo hasta casi llegar a su final, Pedro la estaba dando por el culo a su pequeña hermana y el cuerpo de lla comenzó a responder adaptandose a la situación, las manos de Pedro de vez en cuando acariciaban la pelada vulva de su hermana y hasta jugaba con su minúsculo clítoris de ella, cosa que a la niña le agradaba mucho.
Una vez que terminaron, Pedro le dijo a su hermana que no se vistiera que permaneciera así hasta que él le dijese y que no tocase nada de lo que había en ese sitio, que si quería ver las revistas que las viese pero más nada, tras lo cual Pedro salió de su escondite, durante el tempo que Casandra permaneció a solas haciendole caso a lo dicho por su hermano se sentó en un banco y se puso a ojear las revistas que este tenía sobre una caja llena de bloques forrados de papel de aluminio, en esas revista solo había fotos de mujeres desnudas acostadas con todo tipo de hombres que aparentemente hacían lo que su hermano y ella. Cuando Pedro regresó, estaba acompañado de unos tres chicos entre las edades de 13 y 14 años, no eran del vecindario pero al parecer Pedro los conocía desde hacía tiempo ya que los llamaba por sobre nombres o apodos, rápidamente les dijo, ahí la tienen los que les prometí sí están de acuerdo en traerme compradores, claro que eso es aparte del dinero que se van a ganar conmigo.
Los tres se vieron y asintieron con estar de acuerdo, se comenzaron a quitar la ropa y comenzaron hacer con la hermana de Pedro lo que este hacía con regularidad con ella, Casandra no dijo una sola palabra y menos luego de que Pedro sacase la navaja y se la enseñase. Había pasado más de un mes en que Pedro había llegado a la casa, pero minutos antes de que la policía por una confidencia llegase a buscarlo, escapó.
Justo en esos días en la escuela de Casandra estaban realizando exámenes médicos a todos los estudiantes, al médico examinarla a ella encontró que recientemente había sido abusada sexualmente, la niña a solas le contó a una señora muy simpática todo lo que su hermano bajo amenazas la obligaba hacer, el caso fue referido a investigación por parte de la policía pero no pasó nada. Unos años más tarde Pedro apareció muerto dentro de una cárcel donde se encontraba preso por la venta de drogas, cuando su familia se enteró ya habían pasado unos cuantos meses.
A los trece años al salir de una fiesta de quince años de una vecina, Casandra fue asaltada y violada por tres sujetos adultos que la esperaron en las oscuras escaleras del edificio y a punta de un cuchillo de esos que usan en las carnicerías fue violada y sodomizada por ese trió. Realmente los tres la esperaron en las oscuras escalera y tras colocarle el cuchillo a la altura de su cuello, la metieron en un apartamento desocupado. Uno de ellos le dijo que si daba aunque fuese un solo grito la apuñalarían sin misericordia, Casandra ya tenía conocimiento de lo que era una violación, tanto por las experiencias sufridas por ella con su hermano mayor, como por la información que corría por el vecindario de que tal o cual mujer, niña o joven había sido violada.
Su delgado cuerpo fue zarandeado por dos de los tres tipos mientras subían las escaleras del pequeño edificio, al llegar frente a una de las puertas del tercer y último piso, el tercer hombre la abrió con una ganzúa con tal habilidad de que cualquiera que lo viese pensaría que estaba usando la llave de esa cerradura, una vez abierta la puerta de un solo empujón enviaron a la pre-adolescente contra el suelo de ese vacío apartamento, al caer Casandra la falda de su corto vestido floreado se le subió y gracias a la luz proveniente de un farol de la calle, sus agresores la podían observar a ella en todos sus detalles, sus delgadas piernas, muslos, y parte de su ropa intima de color rosa.
Ellos lascivamente se le fueron acercando al cuerpo de la joven, mientras que ella procuraba controlarse y no llorar, por temor a que cumpliesen su palabra y la apuñalasen con ese enorme cuchillo, llena de terror les pedía a ellos que no le hicieran nada, fue el mayor de los tres tipos un hombre que en la oscuridad de esa sala se le colocó a su lado y con gruesa voz, le ordenó callar al tiempo que con sus gruesas manos le rompía su vestido de fiesta floreado, la niña o mejor dicho la joven quedó tan solo vestida con unas pantaletas rosadas con dibujos infantiles y una corta blusa que usaba bajo su vestido, la cual de igual forma también fue arrancada por ese tipo sin compasión alguna, ella trató de ocultar la desnudes de sus pequeños pechos en formación mientras que él se reía de las acciones ejecutadas por la joven que inútilmente, volvió a repetir una y otra vez que no le hiciera daño.
El hombre colocó una de sus manos sobre el desnudo pecho de la muchacha y aplicando algo de fuerza la llevó hasta que las espaldas de ella pegaron contra el frío piso de la oscura sala, Casandra realmente no sabía que hacer quería gritar pero su temor a ser apuñalada era grande y parcialmente no la dejaba, apenas su fino hilo de voz repetía una y otra vez que no le fueran hacer daño. El tipo le bajó las pantaletas de un tirón y ella procuró salirse debajo del cuerpo de él, fue cuando recibió una fuerte bofetada en su rostro, que además pegó con fuerza su cara contra el piso, Casandra casi pierde el sentido a consecuencia de ese duro golpe que le asestó ese abusador, la chica se llevó sus manos al rostro en señal de dolor y procurando apagar el sonido incontenible de un gritó involuntario que dio, mientras que él se había soltado la hebilla del pantalón y se los bajaba junto con su ropa interior dejando su erecto miembro fuera.
Las manos de él abrieron totalmente las delgadas piernas de ella, ante sí él tenía una vulva con apenas una casi inexistente vellosidad propia de una niña de su edad, y con muy poco desarrollo de su físico sexual, quisas debido a la desnutrición o a la mala alimentación que la madre le proveía. Ella toda asustada con sus propias manos sobre su boca observó aterrada como ese hombre que debía pesar dos o tres veces lo que ella pesaba le tomaba por las piernas y como si fuese una muñeca dirigía el cuerpo de ella contra el cuerpo de él, su miembro todo erecto comenzó a introducirlo por la pequeña vulva, los gritos de dolor de la menor no se hicieron esperar, fue cuando uno de los otros dos tipos que estaban dandose un trago de ron haciendo un lío con la misma ropa de ella se la metió a Casandra dentro de su boca y la sujetó con una de sus manos mientras que con la otra acariciaba torpemente los pequeños senos en formación de la jovencita, y con su boca sin dientes le mamaba los pequeños senos de ella.
En cosa de segundo y tras dos o tres de los embates de la verga del hombre contra la vulva de Casandra esta comenzó a sangrar, ella no lo sabía pero se lo pudo imaginar debido al fuerte dolor que sentía en esos momentos al ser penetrada sin ningún tipo de misericordia por ella. El aliento alcohólico de los tres la tenían mareada, mientras uno de ellos el mayor de peso y quisas de edad la penetraba brutalmente, los otros dos acariciaban el desnudo cuerpo de ella, luego uno de los otros dos al ver que ella permanecía completamente a la merced del primero, se sacó su verga y retirando el lío de tela de la boca de ella le introdujo su miembro dentro, esto de inmediato le produjo un ataqué de nauseas a la pequeña que inútilmente trataba de sacar esa cosa caliente que ese otro hombre insistía en metersela dentro de su pequeña boca con la amenaza de que si lo mordía la atravesaría de lado a lado como si fuera un bacalao con el largo cuchillo. Casandra optó por quedarse inmóvil no resistirse más y dejar que pasase lo que fuera a suceder para que no le siguieran haciendo daño, en esos momentos el primero de ellos se vino dentro de la menor, y tras terminar se levantó limpiandose con el mismo vestido de ella. El segundo cuando comenzó acabar casi la ahoga por lo que tubo que sacar su pene de la boca de ella y gran parte de su semen lo derramó sobre el rostro de su victima.
Casandra pensaba que todo terminaría en cosa de minutos, una vez que el tercero se lo introdujera y se corriera dentro de ella, pero no fue así de fácil. El tercero a diferencia de los dos primero se encontraba completamente desnudo, y con un rápido movimiento de sus manos le dio vuelta al cuerpo de ella, dejando su delgado vientre contra el suelo de la habitación, ella no entendía que pasaba hasta que sintió que él levantando las nalgas de ella casi a la altura del rostro de él, le pasaba la lengua por su ojete y le echaba un escupitajo de saliva en el mismo sitio, exactamente sobre su pequeño hueco, para luego colocarla nuevamente con su vientre pegado al piso. La verga del tipo fue dirigida por el hasta el esfínter de Casandra, y su glande comenzó abrirse camino entre las nalgas de ella, debido al terrible dolor que eso le produjo, ella perdió el sentido por un corto lapso de tiempo ya que cuando regresó en si el mismo hombre continuaba dandole con todas sus ganas por el culo de ella, y el echo de que ella hubiera quedado inconsciente no fue un estorbo para que ese tipo continuase sodomizandola a su completo gusto y placer, mientras los otros dos se burlaban, reían y hacían comentarios sobre Casandra, una vez que el tipo que se encontraba desnudo sobre las nalgas de la menor le dieron ganas de venirse sacó su verga y derramó su semen sobre el pequeño cuerpo de la ex-niña.
Cuando ella pensaba que todo había terminado se sentaron a su lado los otros dos tipos prendiendo un cigarrillo de marihuana, mientras manoseaban su cuerpo una vez más, para ella el olor no le era extraño, si bien era cierto que nunca la había fumado, en su casa tanto su madre como sus tíos y hermanos mayores lo hacían descaradamente, y en ocasiones hasta su abuela le daba unas cuantas chupadas a los cigarrillos que sus hijos preparaban. Fue cuando por primera vez Casandra fumó de la hierva maldita, ante la insistencia y amenazas de sus violadores, no le quedó más remedio que darles unas cuantas chupadas a un enorme cigarrillo hecho por uno de ellos con papel de estraza o mejor dicho con el papel de la bolsa donde guardaba una botella de ron, mientras que los dos tipos pasaban sus sucias manos por los muslos de la joven.
A medida que Casandra fumaba comenzó a toser pero, en cosa de unos minutos se acostumbró a la penetrante sensación de ese humo en su boca y pulmones, como era de esperar el efecto en la pre-adolescente fue casi inmediato, mientras que le tocaba la segunda oportunidad de fumar dejó de ser esquiva a las caricias y besos de los dos hombres que estaban a su lado, para cuando le tocó por tercera vez era ella quien se encontraba acariciandolos a ellos, abiertamente ofreciendo su pequeño cuerpo para que ellos se sirvieran como mejor les pareciera, abría sus delgadas piernas y se introducía la mano de uno de ellos dentro de su golpeada vulva una y otra vez hasta que comenzó a disfrutar de los orgasmos que eso le producía, en una de esas se puso a mamarle la verga a uno de ellos mientras le ofrecía su pequeño culo al que al principio le había mamado su verga, el cual ni tonto ni perezoso se dedicó a nuevamente penetrarla pero con la diferencia de el dolor no era algo que la aturdiese o que tan siquiera apareciera o no la dejase actuar como ellos querían que ella se comportase en esos momentos.
No habían comenzado a disfrutar del pequeño cuerpo de Casandra, cuando apareció el desnudo, y con sus grandes manos comenzó acariciarle sus labios vaginales así como el clítoris de ella, lo que la hacía responder de manera más ardiente y él tipo decidió introducirselo por el calvo y golpeado coño de la menor. Los tres nuevamente comenzaron a venirse pero en esa ocasión los tres lo hicieron dentro del cuerpo de la joven, por lo que es de suponer que uno de esos tres fue el padre de su primer hijo.
Cuando terminaron los tres se levantaron, uno de ellos comenzó a pensar que más podían hacer con la pequeña, para seguir disfrutando de su cuerpo por el resto de la noche, a solicitud del mayor de los tres le dieron a fumar nuevamente del grotesco tabaco que habían preparado para ellos, y mientras la observaban fumar el desnudo le ordenó que se acostase en el piso boca arriba, la pobre Casandra ya no era dueña de sus acciones, actuaba como una zombi, por lo que obedeció sin chistar la orden dada. Acostada en el piso el tipo desnudo colocó sus nalgas sobre la cara de la pequeña y le ordenó que comenzara a lamerle el culo, ella sacó su pequeña lengua y comenzó a pasarlo sobre el esfínter de ese tipo una y otra vez hasta que uno de los otros dos tipos le preguntó al primero que tal se sentía eso. Debido a los elogios que derramó el tipo desnudo, sobre lo sabroso que la pequeña lo estaba haciendo sentir, el preguntón le solicitó que le dejase probar al tiempo que también se bajaba los pantalones.
Quien sabe a ciencia cierta que cantidad de abusos recibió esa noche y gran parte de la madrugada la pobre Casandra, ellos según llegaron se fueron la tomaron desnuda como se encontraba y la dejaron en el mismo sitio donde la habían raptado en la noche, ella prácticamente se encontraba sin sentido, balbuceando estupideces. Tras soltarla ellos se desaparecieron en la oscuridad de la madrugada de ese funesto día para Casandra, por un largo rato durmió al pie de la escalera en que se encontraba, pero los ruidos de la mañana la medio despertaron y tal como se encontraba drogada, golpeada, toda sucia de semen, desnuda y sin idea de lo que estaba sucediendo a su alrededor le dio por comenzar a caminar sin rumbo fijo, hasta que un empleado de mantenimiento la observó y reconoció como una de las hija de una vecinas, el pobre viejo se compadeció de la condición en que se encontraba Casandra y tras cubrirla con su vieja chaqueta, detuvo a una patrulla de la policía que se encontraba por el sector, gracias a ese viejo se pudo ubicar rápidamente a los familiares de Casandra el mismo día. La menor permaneció hospitalizada cerca de un mes recuperandose del castigo recibido, su cuerpo presentaba múltiples laceraciones y traumas, además de una fractura en el área facial, el examen reveló que había sido sodomizada y violada en repetidas ocasiones.
De dicha violación no se pudo responsabilizar a nadie, Casandra había quedado embarazada de su primer hijo a la temprana edad de trece años. Después de la investigación de rigor y los consiguientes exámenes médicos, ella abandonó la escuela sin haber terminado el quinto grado de elemental. Su auto estima se encontraba por el subsuelo, en ocasiones tanto sus familiares y algunas de sus amigas la responsabilizaban de lo sucedido, a tal grado que ella así lo creía. Luego que parió, Casandra se buscó un mari-novio realmente no lo quería mucho pero debido a su condición de joven violada y madre soltera Casandra pensaba erróneamente que no podía aspirar a más nada y que se debía dar por satisfecha por tener a un tipo que era la envidia del resto de sus amigas aunque en ocasiones él saliera abiertamente con otras jóvenes de su edad y ella se muriera de rabia sin decirle nada por temor a que la abandonase, él era un chaval de su edad con el que se la pasaba acostada en la casa de los padres de él manteniendo todo tipo de practicas sexuales denigrantes para ella a exigencias de su marido.
Para hacerles el cuento largo corto, Casandra quedó embarazada un total de cinco veces, su primer marido "formal" luego que ella le parió su segundo hijo fue detenido por la policía de la ciudad por estar traficando con drogas. A los quince años se encontraba presente cuando su madre con la puerta abierta de par en par mantenía una escabrosa relación sexual con un tipo que para poder venirse la golpeaba salvajemente. Casandra se encontraba toda asustada por lo que estaba sucediendo, pero ya estaba acostumbrada a que su madre invitase al apartamento, a ese hombre mucho más joven que la madre de ella. Al ver esa noche como el tipo le sonaba la cara a su madre con la mano desnuda, una y otra vez, Casandra estuvo a punto de salir al pasillo a pedir ayuda, no lo hiso debido a que en una ocasión había pasado algo parecido con otro hombre, y cuando llegaron los vecinos para ayudar a la señora, se molestó he insultó a todo el mundo y le gritó a su hija que lo que pasaba era que le tenía envidia, por no tener un verdadero macho como el que ella tenía.
De momento los golpes cesaron y el tipo desnudo, se levantó como se encontraba y se dirigió al baño del apartamento, pasó por el lado de Casandra sin aparentemente prestarle la menor atención, para esa fecha ya ella había parido al tercero de sus hijos, Casandra se encontraba en la sala viendo televisión vestida con un corto y ajustado pantalón y una pequeña banda de tela de esas que tan solo tapan los senos , el visitante de su madre, luego de orinar en el baño al pasar por su lado de regresó a la habitación, tomó a Casandra de la mano y a pesar de sus rechazos el tipo la condujo a la cama de ella, y comenzó a desnudarla a pesar de sus protestas. Ya gran parte del pantalón corto de ella se encontraba por las rodillas.
Los tres hijos de ella se encontraban durmiendo en su habitación cuando debido al alboroto se despertaron y comenzaron a llorar, el tipo molesto por el rechazo de la joven a mantener una relación sexual con él y por los llantos de los niños, le propinó un fuerte golpe con el puño cerrado por la cara a Casandra, lo que la dejó parcialmente fuera de sentido, tiempo que el amante de su madre aprovecho para terminar de arrancarle la poca ropa que le quedaba sobre su cuerpo a la muchacha, abrirle las piernas con brusquedad y comenzar a penetrarla de inmediato, Casandra volvió en si y se vio bajo el cuerpo de ese hombre que momentos antes la había golpeado, ya por experiencias previas sabía que si se quedaba quieta es decir si no se oponía no recibiría más castigo, por lo que procuró facilitar las cosas para que el tipo terminase lo más pronto posible, su agresor le exigió que se moviera y le gritó que parecía un maniquí, Casandra sabía que de no seguir sus exigencias recibiría un castigo mayor, por lo que a pesar del odio que sentía por ese marido de su madre en esos momentos, comenzó a moverse para no continuar siendo golpeada, como momentos antes había visto que él se lo había echo su madre.
La madre de Casandra, se le acercó al tipo por la espalda y sin decir nada le clavó un cuchillo en repetidas ocasiones rápidamente, el reguero de sangre era impresionante, él falleció sobre el cuerpo de Casandra, al final llegó la policía arrestaron a la señora bajo las protesta de su hija la cual procuraba por todos lo medios de explicar lo sucedido desde su propia óptica. El proceso judicial fue largo, y por espacio de casi seis meses la madre de Casandra, no se pudo beneficiar del derecho a fianza por falta de dinero, fue declarada inocente por actuar en defensa de su hija y de ella misma, esa experiencia para la madre de ella fue muy fuerte y a partir de esos momentos se abrazó a una secta fundamentalista cristiana. Contrario a Casandra que comenzó a ser uso de drogas narcóticas y otras sustancias, como alcohol en cualquier tipo de presentación, pastillas barbitúricas y desde luego marihuana de la que vendía su nuevo marido de turno. Debido a ese estilo de vida sin control ninguno, ella se vio envuelta en una pelea con una mujer policía que la arrestó por orinar en medio de la calle una noche en que la botaron a ella y a su novio de una discoteca por estar haciendo uso descaradamente de un cigarrillo de marihuana, por lo que debido a su edad fue puesta al resguardo del tribunal de menores, el cual dio ordenes para que la ingresaran a una institución correccional de adolescentes donde años antes había estado su hermano por violarla a ella. Casandra permaneció una año y medio, en dicha institución y nunca llego a salir de pase debido a los multiples problemas de conducta en los que se encontraba envuelta casi a diario.
Desde que Casandra ingreso en el correccional, comenzó a tener problemas con el resto de las internas,
ya que un par de ellas se habían enamorado de ella, la joven al principio se no se percató de las intenciones de las otras dos que mantenían una especie de competencia por agradar a Casandra, ambas vestían como chicos, se recortaban el cabello extremadamente corto, y las dos no usaban ropa intima de mujer, andaban sin sostenes debajo de las camisas, con las mangas recogidas hasta los hombros mostrando en sus brazos toscos tatuajes hechos dentro de la misma institución, y la mayoría de las veces usaban interiores o calzones de hombre como ropa intima, en otras palabras eran unas lesbianas marimachos. Cuando Casandra se dio cuenta de las intenciones de las dos chicas ella procuró separarse de su compañía, por lo que ellas comenzaron a castigarla, para que se decidiera por una de las dos. Como el asedio de ambas era muy fuerte, Casandra decidió solicitar a su consejera que la trasladasen a una área de mayor seguridad con el fin de alejarse de las dos tipas que la perseguían. Su consejera rápidamente la trasladó a un área de mayor seguridad, donde el numero de internas era mucho menor, pero en su gran mayoría padecían de desordenes mentales y se encontraba sin medicación adecuada, en la mayoría de los casos el estado era crónico y en ocasiones condiciones agudas, en su mayor parte debido al uso de sustancias alucinógenas o a cualquier otro tipo de drogas.
En su primeras noche Casandra se vio obligada a permanecer despierta ya que una de sus nuevas compañera de cuarto, se la pasó casi toda la noche dentro de una crisis llorando y amenazando al resto de sus compañeras hasta que por fin en la madrugada se quedó dormida. Al día siguiente le solicitó a uno de los guardias que le pusiera en contacto con su consejera, pero cual no fue su sorpresa al este preguntarle que pensaba hacerle para que él le hiciera ese inmenso favor, Casandra se retiró de nuevo a su cuarto y charlando con una de las locas que mejor se encontraba, esta la orientó que la mayoría de los guardias a cambio de hacerle cualquier tipo de favor a una de las internas, desde darle un sencillo cigarrillo hasta traerle droga de la calle, cobraban por ello y la moneda de uso común lo era el mismo cuerpo de la interna o de otra que se prestase para ello, dependiendo del guardia y de la que solicitaba el favor se ponían de acuerdo en cuanto al precio, que podía ir desde un simple agarrón de tetas hasta mantener relaciones sexuales, pasando por masturbaciones, mamadas, penetraciones anales, o cualquier otra cosa que se le ocurriera al guardia y la interna estuviese en condiciones de hacer.
Desde el primer día Casandra se vendió muy cara, regateando mucho por cualquier cosa que fuera a pedir, y procurando no pasar más haya de hacerle una paja a lo sumo al guardia, pero la mayoría de las veces el trato se basaba en que ella se dejaba sobar sus pechos. Por medio de ese sistema se pudo acomodar y aprender a sobre vivir dentro de esa infausta institución. Pero cada día las cosas se le ponían mucho más difíciles ya que con la llegada de nuevas internas la competencia era mayor, para ella no era raro ver a uno de los guardias tras la puerta de seguridad con los pantalones abajo, mientras alguna de las locas le mamaba su verga, y todo a cambio de un misero cigarrillo. Debido a ello Casandra decidió vivir lo mejor posible dentro de esa institución, por lo que a penas pudo se convirtió en la mujer de uno de los guardias, el cual le exigía de todo en sus poco comunes relaciones sexuales, esto trajo para ella una especie de descanso y tranquilidad, ya que el guardia le exigía de todo, pero ella vivía relativamente bien. Hasta que cierto día por un error una de las internas que era paciente mental le ofreció al Director de la institución una mamada a cambio de una llamada a su madre, el administrador extrañado por la forma en que la loca se le había ofrecido decidió hacer una investigación sobre el caso descubriendo el gran burdel que tenían los empleados de seguridad dentro de la misma institución.
Debido al escandalo que se originó, rodaron muchas cabezas es decir botaron a la mayoría de los guardias y reclasificaron a las internas de acuerdo a sus necesidades, por lo que Casandra regresó al modulo donde originalmente había ingresado, y donde la esperaban las dos tipas, que al verla comenzaron de inmediato a pelear por ella, la más gorda resultó con una grave herida en la cabeza por lo que la trasladaron al área médica, quedandose dueña del modulo la que salió victoriosa, es cierto que estuvo como tres días en solitario, pero a penas se supo que regresaba dejó saber cuales eran sus intenciones con Casandra por medio de las lleva y trae de la institución, por consejo de las otras internas la misma noche que regresó Tula, que era el apodo de la chica que la había roto la cabeza a la otra, Casandra se presentó en su habitación, realmente no era tal cosa, solo que ella se las había ingeniado para colocar su cama en una de las esquinas del modulo, y por medio de unas cuantas sábanas y unos cordeles había levantado una especie de pared que la separaba del resto de las jóvenes de la institución.
Casandra se desvistió completamente al entrar al espacio reservado por Tula, y tal como se encontraba se acostó en la cama fumandose lo que le quedaba de un pequeño cigarrillo de marihuana, cuando Tula regresó al modulo de inmediato preguntó por su trofeo, pero realmente ninguna de las otras internas se había dado cuenta que Casandra se encontraba en el área vedada al resto de ellas, por lo que cuando Tula entró en lo que le servía como habitación se llevó la agradable sorpresa de encontrar a su trofeo dormida completamente sin ropas sobre su propia cama, sin demora se desvistió completamente y comenzó acariciar el cuerpo de la joven que se encontraba en su cama, Casandra se despertó sobre saltada, y se dio cuenta de quien era la que la había despertado, mientras que Tula comenzaba a pasar su boca sobre la piel de ella.
Casandra había decidido de ante mano entregarse completamente a su nueva protectora, por lo que tomó una actitud completamente pasiva a los avances de la otra, se dejó acariciar completamente por todo su cuerpo, sus senos fueron manoseados nerviosamente por Tula, luego la boca de la otra buscó los labios de Casandra, y la lengua de Tula comenzó a bailar dentro de la boca de Casandra, en pocos segundos las dos hembras se encontraban abrazadas magreandose y dandose todo tipo de besos, lo que para Casandra había comenzado como algo necesario para sobre vivir dentro de ese ambiente se fue tornando en algo sumamente agradable, una experiencia a la que en innumerable ocasiones le había sacado el cuerpo en la calle por diversas razones, pero en ese momento en que compartía la cama con Tula su opinión había cambiado radicalmente, y se lamentaba de la decisión que tomó de pedir traslado a otro modulo cuando recién había ingresado a la institución, las manos de su compañera de cama ya no se sentían frías y temblorosas en ese momento Casandra las sentía como se introducían dentro de su vagina y sobaban su clítoris produciendole un enorme placer como hacía tiempo no disfrutaba.
Posteriormente la boca de Tula se fue abriendo camino hasta el coño de Casandra la cual apenas sintió los labios de la otra rosando su monte de venus, abrió sus piernas completamente dejando a la entera merced de los labios y lengua de Tula su peludo coño, lentamente Casandra comenzó a gemir a medida que comenzaba alcanzar un orgasmos tras otro, y mientras Tula le mamaba y lamía completamente su vulva, Casandra se fue moviendo buscando el coño de su compañera, esperaba encontrar una mata de pelos similar a la de ella, pero contrario a ello su boca se topó con un depilado coño, lo que la sorprendió, pero aun y así con todo y la sorpresa que recibió su boca y lengua continuaron explorando el cuerpo de su compañera. En innumerable ocasiones Casandra había sido puesta a mamarle el nabo a la mayoría de los hombres con quien había compartido, desde que fue violada a los trece años por ese trío de desgraciados que la dejaron viva de milagro, hasta el guardia que le daba protección a cambio de que se acostase con él, pasando por los distintos maridos o compañeros que había tenido a su temprana edad, pero jamas había disfrutado de ello, hasta que esa noche con Tula le provocaba continuar toda la noche con su cara metida entre las piernas de su nueva amiga amante y protectora.
La primera vez tan solo fue una pequeña muestra de lo que le esperaba con la Tula, gracias a ella Casandra pudo conseguir droga cada vez que se le antojaba, comía lo que se le daba en gana, hacía uso de un teléfono oficial para comunicarse con su madre, todos esos eran alguno de los beneficios marginales que le proveía el ser la mujer de Tula. En cierta ocasión debido a una pelea entre los módulos, Tula fue puesta en aislamiento medico porque resultó cortada en la pelea, no habían terminado de decirselo a Casandra cuando ella tomó una navaja y se cortó en repetidas ocasiones uno de sus brazos para luego dirigirse a la guardia del portón, la que diligentemente la sacó y notificó a su supervisor lo sucedido, Casandra fue atendida de emergencia y llevada a la misma área en que se encontraba Tula mal herida, a los pocos días Tula falleció debido a que su sangre resulto infectada, o por lo menos eso fue lo que se dijo en la institución.
Al ella quedar sin su protectora, fue el blanco de varias que intentaron tomar su lugar, pero ninguna tenía el carácter combativo de la muerta, la única que se daba a respetar como lo hacía la Tula era la misma Casandra, al fallecer su amiga ella cambió drásticamente, convirtiendose en una segunda versión de Tula, sus modales forma de andar y hasta de hablar habían cambiado, cuando a la semana llegó una nueva interna Casandra la reclamó para sí, no hubo quien le llevase la contraria, a diferencia de Tula a ella le gustaba el verse más mujer que el resto de las otras internas, y se las había agenciado para ir a las clases tan solo por el interés de lucirse y compartir con los jóvenes varones de la misma institución, que hasta esos momentos debido a su relación con Tula no había tomado en cuenta para nada.
Cuando Casandra salió de la institución, su habito de usar drogas era algo serió, pero gracias a las clases a las que había asistido en la institución sacó un certificado de recepcionista y en esa linea procuró encontrar empleo, su consejera en la calle rápidamente la ubicó en un empleo, con una firma de abogados. A penas terminaba su empleo se dirigía directamente al contacto que le conseguía aquello que le hacía falta. Casandra mantenía una doble vida, una cosa era en su empleo como recepcionista y otra cosa lo era su adicción a las drogas y la desorganizada vida que llevaba los viernes y sábados por la noche, se la pasaba de discoteca en discoteca trasnochandose y amaneciendose hasta cuando ya no pudo mantener su vicio sin tener que hacer gastos que no podía cubrir, por lo que cuando su contacto para conseguir la droga que era su tío homosexual, le sugirió que se dedicase a trabajar de noche como Dama de Compañía a Casandra no le resultó difícil el aceptar, a sabiendas de que la mayoría de sus clientes en realidad deseaban era pasar una buena noche y finalmente acostarse con ella, para luego desaparecer de su vida.
Gracias a su tío rápidamente encontró a un chulo que le conseguía los clientes, por lo general hombres que se encontraban de visita en la ciudad en gestión de negocios y que no querían arriesgarse a perder su tiempo, durante por espacio de unos tres años Casandra pudo gozar de su estilo de vida hasta que por estar envuelta con las drogas se descuido y quedó nuevamente preñada, durante ese tiempo se vio obligada a dejar de usar drogas tan a menudo como regularmente lo hacía, estando en su sexto mes de embarazo su barriga a pesar de la mala nutrición y su esporádico uso de drogas era relativamente grande, y nuevamente gracias a su tío encontró un segundo empleo que le permitía vivir mejor, al tiempo que milagrosamente continuaba trabajando para el Bufete de Abogados, en ese otro empleo lo único que se le pedía era que hablase por teléfono, atendiendo llamadas en una linea sexual, a muchos de sus clientes les agradaba escucharla gemir por el auricular del teléfono, y que les dijese que se encontraba desnuda dentro de una tina, pasando sus dedos por su clítoris, fue de esa manera que conoció a un tipo raro que le dijo que lo que más le encantaba era el mantener sexo con una mujer embarazada, aunque le habían advertido de lo peligroso que podía ser el llevar a cabo un contacto personal con los clientes a Casandra eso no la amilanó, antes del mes ya tenía una cita con ese cliente, el cual quedó maravillado al ver que realmente se encontraba embarazada.
Rápidamente la convenció de que lo acompañase a un hotel, la rutina para ella no era nueva, es decir apuntarse con un falso nombre en la recepción, entrar a la habitación y desvestirse, pasar al baño para darse una ducha y luego de secarse introducirse en la cama y esperar que su amante de turno comenzara, todo hasta ese momento era similar, la diferencia comenzó cuando el tipo aun vestido le dio por acariciar su redonda barriga al principio, luego de eso fue colocando sus labios sobre los oscuros pezones de sus sénos y se dio a la tarea de mamarle las tetas profusamente a tal grado que los senos de ella comenzaron a producir el calostro, unas pequeñas gotas blancas algo transparente coronaban sus pezones, es cierto que eso le produjo algo de molestia, pero pensando en la droga que podía comprar luego con en el dinero que ese tipo le daría, el dolor se apartó de su mente, sin mucha prisa el hombre se comenzó a desnudar a medida que se daba su tiempo para seguir mamandole las tetas a Casandra, ella ya se encontraba algo cansada de estar dandole su pecho al tipo ese cuando la boca de él fue cambiando de posición y se dirigió a directamente al coño de ella, la que pensó que él se dedicaría a mamarselo, pero no fue así por lo menos de inmediato, luego que ella abrió las piernas lo más que pudo su temporal amante comenzó hablar como si se dirigiese al feto que estaba en su vientre, diciendole lo que en pocos momentos haría con ella y como lo haría.
Eso a Casandra la produjo un cierto temor, pensando que se había metido en la cama con una loco y en su condición le era ha ella muy difícil salir corriendo, lo que de no estar en tal grado de embarazo de seguro habría hecho sin importarle un comino salir desnuda para la calle, pero el tipo cada vez hablaba menos y acercaba más su erecto pene al coño de ella, para Casandra fue una rara sensación ya que después de unos cuantos meses de abstinencia al fin volvía a sentir la verga de un macho dentro de ella, para facilitar la penetración él se tiró boca arriba sobre su espalda mientras que ella casi en cuclillas se sentaba sobre la erecta masa de carne, durante casi una hora estuvieron hechos casi una sola figura, no fue hasta que él debido a los múltiples encuentros que ambos mantuvieron en esa oportunidad, que el tipo se vino dentro de ella, luego de eso continuaron revolcandose más tarde sobre la cama nuevamente pero en esa segunda oportunidad él le ordenó que se lo mamase una y otra vez para luego comenzar a darle por el culo a ella, al principio él trató de penetrarla colocandola en cuatro patas a ella, era para Casandra era sumamente agotador por lo que a solicitud de ella él se volvió acostar boca arriba y ella lentamente se comenzó a introducir la verga del tipo por su esfínter, agachandose lentamente hasta que gran parte de esa verga había desaparecido entre sus nalgas.
La relación de Casandra y ese "cliente" duró tanto como su embarazo, una vez que Casandra parió un raquítico niño, el tan solo le hiso llegar una ramo de flores acompañado de una tarjeta de felicitaciones y un cheque de regalo, en la nota le deseaba felicidades y decía lamentar el no haberla conocido por lo menos tres meses antes, para disfrutar un mayor tiempo de su compañía y que no se molestase en llamarlo a menos que se encontrase embarazada de nuevo. Casandra al salir de ese parto hiso lo mismo que había hecho con los anteriores, se lo entregó a su madre y se dedicó a putear de gratis, es decir asistía casi a diario a cualquier discoteca, continuaba usando drogas y consumiendo una gran cantidad de alcohol, pero siempre se las arreglaba para llegar a su trabajo en el Bufete de Abogados.
Para ella todo estaba funcionando bien hasta que cierto día en una discoteca encontró a un joven muy caballeroso, el cual la invitó a compartir su mesa con él y un grupo de invitados, todos y cada uno de los que se encontraban se podía ver que eran personas de dinero, por sus ropas y prendas, a demás de su manera de comportarse entre ellos y con las demás personas, Casandra aceptó una invitación a la casa de campo del joven con quien había pasado gran parte de la noche bailando, sin pensarlo mucho lo acompañó a el y a otras parejas a ese retirado paraje.
A penas llegaron todo cambió de inmediato, entre ellos comenzaron hablar y de golpe y porrazo tres de los tipos que se encontraba esa madrugada acompañandola saltaron sobre ella y sin anuncio alguno la emprendieron a golpe contra su persona, aunque Casandra se encontraba algo borracha la paliza que le estaban propinando rápidamente la hiso ponerse en pleno contacto con la realidad, llorando pidió que no le continuasen golpeando, pero para esos hombres era como si no dijese nada, ya que lejos de detenerse continuaban dandole con saña, hasta casi hacerla perder el sentido, tras lo cual la arrastraron por el centro de la sala y la condujeron a empellones hasta un oscuro y húmedo sótano. Donde con rapidez fue bruscamente desnudada y asegurado su cuerpo por medio de cadenas a un par de postes, tal como eso había comenzado así de momento la dejaron en paz, un fuerte foco de luz blanca bañaba su desnudo y muy golpeado cuerpo, prácticamente se encontraba colgada ya que no se podía poner de pie pero tampoco se podía sentar y mucho menos recostar.
Casandra perdió la noción del tiempo, habían pasado horas, quisas hasta un día desde que fue salvajemente golpeada, y ella se encontraba hambrienta, se había orinado en la posición en que se encontraba en unas cuantas ocasiones se había puesto a gritar sin obtener respuesta, se devanaba los sesos pensando que era lo que deseaban de ella, y no podía entender por que le había pasado eso. Consumida por el cansancio y el agotamiento, ella se durmió en la incomoda posición en que se encontraba encadenada a ese par de postes. Casandra fue despertada por un fuerte y frío chorro de agua que daba contra su cuerpo a presión mientras escuchaba reír a un grupo de personas a las cuales por la oscuridad reinante a su alrededor, tan solo podía pensar que eran varios hombres y mujeres por el sonido de sus voces y risas. Fue cuando escuchó la voz de alguien la cual creyó reconocer como la del joven que había conocido en la discoteca, un cuerpo a su espalda se fue acercando y a medida que les decía a la concurrencia lo que le pasaría a Casandra, de vez en cuando le daba un azote con una fusta de montar a caballo, en esos momentos comentó el tipo que ese cuerpo se encontraba a la entera disposición de todos los presentes, para lo que gustasen desde flagelarla, follarla y hasta quemarla si eso les placía, al escuchar esas palabras Casandra entró en pánico y gritando comenzó amenazar a toda la concurrencia con matarlos, pero su reacción más que todo se debía al inmenso temor de ser lastimada físicamente, el grupo en pleno se retiró y posteriormente uno a uno fueron bajando al sótano donde ella se encontraba encadenada, alguno de los hombres se la follaron como les vino en su real gana, otros se divirtieron arrancando los vellos de su monte de venus, mientras que otros la golpearon sin razón alguna, de vez en cuando pasaba alguna mujer de ese grupo y flagelaba el cuerpo de Casandra como si se tratase de su peor enemiga, pocas fueron las que por breves segundos la hicieron disfrutar de al explorar con sus dedos la vulva de ella.
Quisas paso otro día y Casandra continuaba sin comer y de vez en cuando un chorro de agua sacudía su cuerpo sin piedad, fue cuando la bajaron de donde se encontraba y colocaron su cuerpo sobre un pequeño banco de madera volviendo a encadenarla pero en esa ocasión contra el suelo, nuevamente el grupo se reunió a su alrededor mientras que s cuerpo desnudo permanecía temblando de frío y lleno de pequeñas heridas por todas partes, ella ya se estaba durmiendo sobre el banco de madera cuando sintió que su coño era explorado por algo totalmente desconocido para ella, fue cuando levantó su cabeza y dirigió su vista a sus piernas cuando vio la gran cabeza de un perro grande y grueso de pelaje corto y oscuro, husmeando con su fría nariz por sobre su coño, trató inútilmente de cerrar sus muslos y apartar su adolorido cuerpo de la cabeza del perro, pero no le fue posible, la áspera lengua del can para esos momentos comenzaba a ser pasada por sobre el coño de la indefensa muchacha, com si el animal hubiera sido entrenado para esos menesteres confiadamente continúo metiendo su gran hocico dentro de la vulva de Casandra, la que horrorizada miraba con ojos incrédulos lo que le estaba sucediendo de momento comenzó a chillar y a moverse para tratar de salirse de donde se encontraba, pero a ratos se quedaba extasiada observando lo que el gran perro negro le hacía a su coño con su lengua y boca, de momento como que se acordaba que era observada por otras personas y nuevamente se ponía a chillar, pero a medida que el perro le lamia el coño ella se quedaba mayor tiempo quieta y disfrutando de los lengüetazos del can.
Cuando Casandra se comenzaba a sentir más a gusto, uno de los hombres tomó al perro por la correa del cuello y lo retiro haciendo algo de fuerza, ella se quedó como esperando más y así se lo preguntó uno de los presentes, a lo que ella por un momento pensó mentir y decir que no pero bajando su rostro aceptó que le había agradado lo que le hacía el perro, su interlocutor le inquirió que fuera franca y que dijese sin tapujos que no era que no tan solo le había agradado, si no que lo que ella deseaba en realidad era ser poseída por el animal, Casandra repitió todo al pie de la letra, sin apartar su mirada del piso del sótano, luego que ella dijo eso reinó un gran silencio, y lentamente comenzó a escucharse un suave murmullo que poco a poco fue tomando fuerza, eran las persona asistentes que comenzaban a realizar sus comentarios al respecto, las opiniones eran diversas, había quienes se refirieron a ella como una perra que buscaba esperaba que su perro la montase, otros directamente la tildaron de sucia y puerca, no faltó quien se refiriera a ella como una enferma sexual, y desde luego no faltó quien la llamase loca.
Nuevamente el tipo que le hiso la pregunta, le volvió hablar con ella para decirle que si había escuchado lo dicho por las demás personas a lo que ella respondió que si, y nuevamente le preguntó si deseaba que el can la penetrase como la perra que era, y Casandra respondió de manera afirmativa moviendo su cabeza sin hacer ruido. Cuando ella confirmo lo dicho, el tipo que la interrogaba mandó a pasar al animal, el que de inmediato volvió a enterrarle su hocico dentro de su raja produciendole gran placer a Casandra, y nuevamente el encargado lo retiró de inmediato, ordenandole a la mujer que se volviese acostar pero en esa ocasión le ordenó que se acostase sobre su propio vientre, sobre el banco de madera, lo que ella obedeció de inmediato y sin chistar. Casandra en toda su vida no se le había ocurrido en ningún momento el mantener relacione sexuales con un perro y menos de ese gran tamaño, el hombre que estaba hablando con ella de inmediato permaneció pegado al inicio de las escaleras que daban al primer piso, separó al animal y lo fue llevando hasta que tanto el perro como la mujer se encontrasen en condiciones para comenzar.
El animal apenas lo montaron comenzó a introducir su verga en el coño de Casandra, y comenzó a realizar los movimientos propios de su especie al momento de copular, la verga del perro se fue abriendo camino dentro de la vulva de ella hasta que gran parte de su miembro se encontraba dentro de Casandra, por su parte Casandra se dedicó a disfrutar de esa singular relación, en su vida se había acostado con todo tipo de personas voluntaria he involuntariamente, pero jamas lo había hecho con un perro. Al perro a medida que se movía se le fue formando una especie de masa en el tallo de su verga, de la cual Casandra no estaba al tanto, de momento sus movimientos aumentaron en velocidad y ella sintió como las paredes de su vagina eran bruscamente espandidas, mientras que el perro continuaba moviendose sobre las espaldas y nalgas de ella, hasta que pasado un rato ella sintió como el semen del animal comenzaba a correr por entre sus muslos, Casandra que desconocía los detalles de las relaciones con perros pensó que pronto todo pasaría, pero no fue así, ella se había quedado pegada al animal y debía esperar un buen lapso de tiempo a que el miembro de este recuperase su tamaño normal, mientras que ella era follada por el can uno que otro de los concurrentes comenzaron a tomarles fotos, lo que molestó algo a Casandra. Ella trató de despegarse del animal pero sintió que su vagina reventaría si continuaba tratando, fue cuando uno de los asistentes a tan particular espectáculo le gritó que no fuese bruta que debía esperar a que el animal reposase un rato para poderselo sacar, por lo que ella se quedó quieta.
Cuando el grupo regresó ya el perro se había bajado de Casandra y se encontraba tirado a un lado de la escalera, alguna de las personas le trajeron al animal unos pedazos de carne los cuales devoró rápidamente ante los ojos de ella, la cual le pidió comida a todos los que estaban llegando. Nuevamente el tipo que le puso al perro sobre su desnudo y golpeado cuerpo, lo tomó por la correa y se acercó con él hasta donde la cara de Casandra reposaba, y secamente le ordenó que se lo mamase, a duras penas Casandra se tiro al piso colocando su boca frente a la cosa del perro, y casi sin fuerzas debido al hambre que la habían hecho pasar se dio a la tarea de comenzar a pasar su lengua sobre la punta rojiza d ela verga del can. Se extraño en ver lo rápido que el perro se encontraba nuevamente en condiciones de mantener otro encuentro cercano con esa mujer, a diferencia de la vez anterior ella agarró la verga del animal y se dio cuenta de la cosa que comenzaba a formarse nuevamente sobre su tallo.
Al terminar Casandra de mamarse la verga del perro y de tragarse completamente todo lo que el animal había dejado en su boca, el animal fue retirado quedando ella encadenada al banco, lentamente las personas que asistieron a ver eso, se fueron retirando lentamente hasta quedar nuevamente a solas. Cando Casandra despertó se encontraba tirada en un basurero público desnuda y siendo usada sexualmente por un viejo borracho que la había encontrado en esas condiciones, a pesar de lo sucia y mal oliente que ella se encontraba el viejo se la comenzó a clavar por donde a él en lo particular más le agradaba y eso era meterselo por el culo a la pobre joven.
A penas cuando pudo se levantó y comenzó a deambular sin rumbo fijo, de esa manera llego a la autopista y debido a la acción de la policía no fue golpeada por un auto. A Casandra se le observaba muy mal, realmente no se acordaba cuando fue la última vez que comió, solo decía que el perro se convirtió en hombre y le comió el culo, manifestaba escuchar voces que le ordenaban desnudarse, y hacer todo tipo de barbaridades con su cuerpo hasta el punto que un día descubrieron que la paciente caminaba todo el día con una botella de refresco dentro de su vulva y otra enterrada en su culo. En crisis se ponía amenazar a todos con cortarle la cabeza, no se bañaba ni aseaba, en ocasiones jugaba con sus propios excrementos y orines.
Si no se le daba algo se ponía a llorar como una niña pequeña y sin aviso podía tratar de agredir a las personas a su alrededor. Si se sentía que no le ponían atención se auto mutilaba sus brazos y piernas o se quemaba con los cigarrillos, y de paso no era el tipo de paciente que se toma la medicación de manera voluntaria. Casandra se encontró internada en un manicomio, era muy famosa entre el personal ya que la mayoría de los enfermeros y algún que otro Doctor, se acostaban con ella por un cigarrillo eso fue antes de que se le hicieran todos los exámenes, su familia nunca llegó a visitarla, cuando lograba salir de pase al poco tiempo regresa en peores condiciones de que cuando había salido. A los 30 años, se le detectó HIV+, hepatitis A, B y C, sufrió de todo tipo de enfermedades infecto contagiosas, y de todas las relacionadas con transmisión sexual. Pero en su mundo de loqueras ella murió feliz. Pobre Casandra, Dios la tenga en su seno (y no permita que abusen de ella).