Carta a una amante !!
Encuentro con mi amante !!
Te conocí por casualidad en una webb de contactos y enseguida me di cuenta de que íbamos a ser buenos amigos. La complicidad salió desde el primer instante y las risas en surgieron al instante siguiente.
Se que contigo no hay compromisos, lo tomas todo con alegría y disfrutas de esto tanto como yo. Nuestros encuentros son una fiesta, una fiesta de sexo sin tabúes, una fiesta de risas y de jadeos y sudores, una fiesta de fantasías y de lujuria.
Aquella mañana te esperaba ya muy excitado. Desde que habíamos quedado la noche anterior, estaba cachondo, tanto que tuve que masturbarme mientras miraba las decenas de fotos y vídeos que me has enviado. Pensaba en agarrar fuerte tus enormes pechos, como me gustas esos pechos. Desde pequeño he tenido una sana obsesión por los pechos grandes, aun que también me encantan los pequeños, jaja !! Y ahora los tenía delante de mi. Llegabas puntual a la hora que habíamos quedado, con un suéter blanco de cuello alto y sin sujetador, tal como te había pedido. No se si por el frío o la excitación tus pezones estaban ya duros y marcados. Como siempre, entraste en casa echándome la broca por algo con esa sonrisa de pícara que tienes. Nada más traspasar la puerta y aún si cerrarla, te tome fuerte con mi mano de tu cuello y te llevé hacia la pared, con mi mano derecha di un portazo para llevarla también hacia tu cuello y acariciar tus mejillas con mis dedos gordos, mientras te agarraba la cabeza por detrás. Te besé en la boca, dios, que ganas tenía te sentir tus labios, tu lengua jugando con la mía, de sentir tu saliva mezclándose en mi boca. Un beso largo, mordiendo tus labios, un beso de esos que es más lujurioso que cualquier penetración. Me vuelve loco besar, es lo que más cachondo me pone, por eso siempre te beso y me como tu boca mientras te corre, siento tu respiración fría en mi interior y me vuelvo loco, por eso siempre nos corremos juntos, por que exploto de verte tan excitada.
Mientras aún te besaba, bajé mis manos a tus pechos y los agarré fuerte, apretándote más aun contra la pared, con mis dedos apreté fuerte tus pezones y estiré como si de mi juguete particular se tratase, te encanta el dolor, un dolor suave, controlado, excitante, pero dolor, te vuelve loca, verdad?? sin soltarlos aún, bajé mi boca y los mordí suavemente sobre el suéter y los llené de saliva hasta dejarte esa parte empapada. Tomé tu mano y te llevé hasta la cocina. Tiré tu bolso sobre el baúl y te puse de espaldas a mi, apoyando tus manos en el poyo. Me encanta que gires tu cabeza y me mires de esa forma, eres la mujer más zorra que conozco, nadie tiene esa mirada de provocación que tu tienes. Pegué mi sexo, aun prisionero de mis vaqueros a tu culo mientras acariciaba tus pechos que colgaban rozando el poyo, tu de cara a la ventana y con los ojos cerrados disfrutabas ya como si hubieses tenido mil orgasmos. Desabroché tus pantalones y los bajé hasta medis rodilla, hice lo propio con los mios. Me puse a un lado apretando mi polla contra tu muslo y mientras con mi mano terecha apretaba ya por dentro de tu sueter tus pechos, jugando con una y otro, acariciando, pellizcando, manoseando como si fuese la promara vez, con mi mano izquierda busqué tu sexo que ya estaba empapado, chorreando de excitación y metí un dedo promero y luego otro, tu gemías y me mirabas seria y cerrabas tus ojos para abrirlos de nuevo y decirme sin palabras que te follara. Saqué los dedos de tu coño y los metí sin contemplación en tu culo, prmero lo empapé bien con tus propios jugos y luego para adentro. Con mis dedos aun dentro, acerqué mi polla a tu coño y la metí suabe, dulce, despacito, primero la cabeza y luego de golpe el resto, tomé con fuerza tus caderas y comencé a moverme dentro de ti, diossss, es el paraiso tu coño, tan calentito y tan mio en ese instante. Siempre he pensado, que es ese momento podría hacer de ti lo que quisiera, cualquier cosa. Tu cederías sumisa a mis deseos. Pero soy un buen chico, jaja !! de momento... Poco a poco fui acelerando mis movimientos, golpeando tu culo con mi pelvis, subí tu suéter dejando tus pechos al descubierto y pegé mi pecho ya desnudo y sin camisa a tu espalda. Tus tetas rozaban el frío granito del poyo de la cocina y yo seguía golpeando tu sexo con mi placer mientras agarraba ahora tus hombros, tu con la cabeza hacia arriba jadeabas enloquecida. paré entonces de repente y saqué mi sexo. De la mano te llevé a mi cuarto y te recosté en la cama, abrí tus piernas con mis manos y metí mi lengua hasta adentro en tu coño, te gusta, te gusta mucho que te lo chupe, que lo recorra de arriba a abajo, que meta mi lengua bien dentro y la mueva fuerte para volver a saborear de nuevo el jugo que hay en tus labios vaginales y que yo mismo provoco, me encanta crear círculos perfectos alrededor de tu clítoris y sentir como te estremeces, me encanta lamer tu coño con mi lengua entera como si de un perro se tratase y me encanta subirme y compartir, apoyado sobre tu cuerpo, tu sabor con tus boca. Ese es el momento en el que tu siempre tomas el control y me tiras en la cama de un empujón. Y te abalanzas sobre mi polla hambrienta, enferma de vicio. Me muero cuando la metes en tu boca y me miras de nuevo con esa cara de zorra, te encanta chuparme la polla, a veces pienso que tienes otro clítoris en tu garganta. Intento incorporarme por que me gusta ver como lo haces y tu me empujas de nuevo y te relames de placer. El tronco, mis testículos y de nuevo adentro, es el paraíso, de nuevo el tronco y mis testículos. Subes mis piernas con tus manos y tu lengua en mi ano, nunca te lo he dicho, pero me encanta sentirla húmeda jugando en mi culo y nunca te lo he dicho, pero me encantaría que dieses ya un paso más, jaja !! no se si me entiendes ?? ;-). Luego, de repente te subes sobre mi , desaforada, ardiendo de deseo y me metes en tu coño, te frotas de alante a detrás, siento mi culo mojado por tu saliva caliente y me vuelve loco ver tus enormes pechos moviéndose a tu ritmo arriba y abajo y los agarro fuete y me incorporo como puedo para lamerlos, para morderlos, para sentirlos míos para comérmelos, te pellizco los pezones, intento agarrar los dos pechos con una mano y los aprieto y te doy una nalgada fuerte en el culo y me dices que siiii, que te encanta y vuelvo a hacerlo, más fuerte aun y agarro fuerte de nuevo tus pechos y te levanto un poco para acompañar con mi cadera tu movimiento y golpear tu sexo, apoyas tu manos en mi pecho y te mueves rápido, no golpeas, solo te frotas, restriegas tu clítoris contra mi mientras me sientes bien adentro y me pides que te tire del pelo, agarro fuerte tu trenza y hago que ladees tu cabeza, se que te vas a correr por que aceleras el ritmo de tus jadeos "mis vecinos tienes que estar contentos " jaja !! me miras y cierras los ojos y tiro fuete de tu pelo y cierras de nuevo los ojos y sientes, y disfrutas y gritas, levantas tu cabeza mirando al techo y llega, te tomo de nuevo de tu cabeza y te acerco a mi boca y me como tus labios, y me como tu saliva y me como tu vicio y tu placer y me corro contigo y te lleno con mi leche con mi calor y te doy mi placer, que es el mismo que el tuyo, mientras sigues en un interminable y dulce espasmo. Poco a poco te detienes y una gota de sudor cae sobre mi pecho, detrás de ella caes tu exhausta, derrotada tras una victoria. Me gusta besarte y acariciarte, me gusta cuando comentas la jugada, jajajaj !! me gusta desayunar luego contigo. Hoy has traído tu los croissant... ;-)