Carpe Diem XIV: Las aguas de Venecia

Trata de mirar al Sol directamente... Intenta hacerlo y siente el dolor que corroe los ojos como miles de agujas... Intenta hacerlo y siente las lagrimas correr por tus mejillas... Porque nunca podras alcanzar el Sol... Porque lo unico que puedes hacer es llorar mientras lo contemplas...

Ala aqui lo teneis el nuevo Carpe jajajaja debo explicar una cosita... Ejem

Lo primero esk he bajado mi actrividad tanto a la hora de comentar en TR como en el face como en el msn y la razon es secilla jajaja Estoy castigado jaja Digamos que volvi de fiesta un poc tarde (nada solo un par de horas mas o menos) y pues.... jajaaja

asi que es mas que probable que no llegue el primero a comentar y por eso hasta que se me vaya el castigo me retiro temporalmente de la competicion de a ver quien comenta antes jajajaja

Este Carpe esta integramente escrito mas a escondidas de lo que suelo hacerlo jajaja Espero que os guste muxo de verdad

GRACIAS POR LEERME Y COMO SIEMPRE OS ANIMO A COMENTAR

Valle

El maldito teléfono de la habitación sonó y mi mano se movió sola para, o cogerlo o tirarlo contra la pared (ni yo ni mano lo teníamos claro). Al parecer el sentido común pudo con la rabia por el despertar y lo descolgué… Lo coloque al lado de mi oído mientras me ladeaba sobre mi cama, aun tenía los ojos cerrados y sin querer di un pequeño bostezo. Una voz femenina empezó a hablar

-Aquí el servicio de habitaciones del hotel despertándole tal y como nos han indicado sus…- con un nuevo bostezo y sin mayor muestra de actividad colgué el teléfono a mitad de la frase

Con un suspiro me derrumbe sobre mi almohada y gire para encontrar una mejor posición… Mi mente dormida se comenzaba a ubicar, estaba en Italia…. En Venecia para ser exactos, eso era claro dado que esta no era mi cama… Además al parecer debía empezar a vestirme porque seguramente saldríamos a ver la ciudad pero… Me daba mucha pereza… y con un nuevo bostezo me estire sobre mi cama

Oí ruidos en la de al lado y oí como los muelles chirriaban muy suavemente (ayer ya comprobé que las camas tenían una suspensión más que aceptable). De golpe me vino a la mente que compartía habitación con Carlos, le oí desperezarse y su suspiro de placer al estirar su dormido cuerpo. Por un segundo la idea de girarme y ver el cuerpo de mi mejor amigo, el cual solo dormía en bóxers, en acción me resulto tentadora… Muy tentadora… Pero la pereza pudo más

Me coloque mejor sobre la cama, mi erección matutina hacia un poco difícil encontrar la posición en donde mi polla no quedara muy aplastada por mi cuerpo y no se alzara contra mis bóxers y mi pantalón de pijama como una tienda de campaña. Oí a Carlos moverse por la habitación, fue el baño y allí oí el grifo abrirse y el agua correr, luego paro un momento y después volvió a correr. Al poco se cerró el grifo, seguramente Carlos había ido a beber un poco de agua. Volvió de nuevo a la habitación y le oí pararse entre los huevos de las camas, me quede muy quieto aunque ya sabía perfectamente lo que iba a venir… Aun así como siempre me pillo de sorpresa…

La cama dio un bote enorme cuando el cuerpazo de gimnasio de mi amigo cayo al lado mía, yo salte junto con la cama y sentí la mano de Carlos entre mis omoplatos empujándome fuera de ella aprovechando el salto, me di medio de bruces contra el suelo, quedando apoyado con mis manos en él y medio cuerpo fuera. Escuche su risa y me gire rápido, aun seguía medio dormido pero me alce para verle, estaba tumbado, los duros brazos abultando con los bíceps duros detrás de su cabeza, sus bóxers negros estaban llenos de su dura erección mientras su tableta y sus pectorales se combaban un poco por la posición, me miro y me sonrió con su sonrisa chula, yo aun adormilado compuse una cara de enfado que desde luego solo sirvió para ampliar la sonrisa arrogante de mi amigo

-No te enfades…- me dijo tranquilo- Sabias perfectamente que iba a hacer eso-

-Si- dije yo desplomándome a su lado en mi cama, su cuerpo dejaba el espacio justo para el mío, caí boca abajo y mi mano quedo a la altura de su culo tapado por el bóxer, donde mi mano lo acariciaba un poco- Desde hace seis putos años sigues con la misma broma…- y hundí mi cara en la almohada

-Es que es muy divertida- se rio- Además es la única forma de despertarte-

-Pues me vuelvo a dormir- dije yo contra la acochada superficie de mi almohada

-No lo harás- me dijo el- Hay que bajar o nos volverán a castigar como ayer… Y yo paso de ir otro día en la cabeza del grupo-

-Quiero dormir- dije yo- Tu vete vistiendo que ya iré yo-

-Nop- dijo él, note como cambiaba de posición y se quedaba medio girado hacia mí, así su polla erecta dentro de sus bóxers se apretaba un poco contra mi culo- No me obligues a levantarte…-

-No podrás, no pienso moverme- respondí yo y esta vez bostece de nuevo anunciando que pronto me dormiría de nuevo

-Como quieras- dijo mi amigo

Carlos se movió entonces, levantándose de la cama, yo aproveche y me estire un poco más. A los pocos segundos sentí de nuevo el abobamiento en la cama y como Carlos colocando sus rodillas a mis lados se sentaba un poco sobre mis piernas. Yo le deje hacer más por cansancio que por otra cosa. Sentí las manos de mi amigo en mi fuerte espalda, eran cálidas y muy agradables al tacto, se deslizaron por ella hasta mis hombros, donde me los masajearon un poco y de allí descendieron siguiendo mi marcada musculatura hasta mi culo, me lo apretaron un poco y sus dedos se colaron en las tiras bajándome el pantalón pero dejándome los bóxers… Allí se dedico a sobármelo tranquilamente y disfrutando de ello

-Que culito más rico que tienes…- le oí decir con fingida y desmesurada teatralidad- Que gusto seria el… Ahhh se me ocurre una cosa…- dijo y pude sentir la sonrisa en su voz-

De nuevo sus dedos se colaron bajo las tiras de mis bóxers y desde allí me los comenzaron a bajar muy lentamente, casi como si siguieran un ritual del que yo no era consciente. Me tuve que alzar un poco para ayudarle a bajármelos, mi pollon entorpecía la bajada y no quería que me lo aplastara. Cuando lo hizo siguió hasta donde estaban mis pantalones de pijama, haciendo descender ambas prendas hasta las rodillas y levantándose luego para quitármelas del todo… Se volvió a sentar sobre mi y sus manos cálidas regresaron de nuevo a mi culo, esta vez se deleitaron mas en sobármelo, masajeándome las nalgas, separándolas un poco y soltándolas, disfrutando de mis firmes muslos de futbolista, sentí como me daba un pequeño azote mas con animo juguetón que de otra cosa

-¿Te piensas levantar ya?- me pregunto

-No…- respondí medio adormilado

-Menos mal- dijo el extrañándome por ello- Porque si no…- sentí como se inclinaba un poco y entonces caí en la cuenta de que él tampoco llevaba bóxers-…no podría hacer esto…-

Sentí la punta de su duro pollon, contra la entrada de mi culo, Carlos hizo un poco de presión y el glande descapullado hizo una intentona de entrar. Yo alce mi cabeza de golpe y rodé sobre la cama, Carlos me dejo ir y cayó de lado apoyándose con un brazo y flexionándolo para apoyarse en la mano. Yo con el impulso casi me caigo de nuevo de la cama pero conseguí colocarme de forma similar a Carlos. El corazón me latía un poco deprisa y le mire a los ojos, ya despierto del todo, por un segundo la idea de ser penetrado por él me pareció atractiva pero luego, recordándome mi limite autoimpuesto de follar con él para no traicionar a mi novio me hizo apartarme. Carlos me sonrió más

-Ves como te has movido…- me dijo y se rio, al ver mi expresión se acerco un poco a mi- Valle… Sabes que nunca te forzaría a follar si no quieres… Que eres mi hermano tio…- e inclinándose me dio un beso en la frente

-Entonces iremos al infierno de cabeza por incesto- dije yo acercándome más a él, nuestros pectorales se rozaban ya y nuestras pollas se acariciaban entre ellas, saludándose como si de dos viejas amigas se tratasen, cosa que no era del todo mentira…

Carlos se rio ante mi comentario

-Si existe Dios y si lo que dicen por ahí es cierto iremos al infierno de todos modos- e inclinándose me beso

Yo abrí mi boca para recibirle, mientras me relajaba. Como siempre la marea de sentimientos que ello me provocaba me volvió, por un lado me sentía mal por hacer algo que, aunque yo no lo entendiera así, entraba dentro de lo que se consideraba la infidelidad hacia Dani, mi novio; pero por otro lado sabía perfectamente que yo era la única vía de escape que tenia Carlos para todo aquello que guardaba dentro y eso, por mucho que me pesara, se merecía que fuera un poco más flexible en cuanto a infidelidad se refería… Al fin y al cabo era Carlos, mi mejor amigo y mi hermano y mientras estas cosas menores le pudieran ayudar tenía claro que no se las pensaba negar, además aun me quedaba mi límite…

La lengua de Carlos invadió mi boca con suavidad pero dejando ver el fuego que imprimía su ritmo aun en ese nivel, yo acostumbrado ya a ello deje que mi lengua fuera mera seguidora y que mi amigo llevara la iniciativa, se comenzaron a masajear, enroscándose entre ellas y disfrutando del tacto de la otra, primero fue lento pero luego Carlos aumento la velocidad para darle más pasión, yo me deje llevar, mientras nos besábamos Carlos se comenzó a inclinar mas y mas sobre mi hasta acabar tumbados ambos sobre la cama, yo abajo y Carlos sobre mí, mi mano salió para cogerle la nuca y allí hundir las manos en su sedoso pelo revuelto por el sueño, el coloco una en mi cuello para masajeármelo disfrutando de su firmeza. Nuestras pollas se restregaban la una contra la otra y yo pedí mentalmente otra follada de tableta como la de ayer, sinceramente había sido increíble y deseaba otra de nuevo… Pero Carlos seria el que decidiera…

Seguimos con el beso un poco más y luego Carlos se separo, no sé como lo hizo pero leyó en mis ojos lo que deseaba, me sonrió con una mezcla de chulería y ternura y me aparto el pelo de la frente

-No hay tiempo para eso Valle…- me dijo- Hay que bajar a desayunar- se rio al verme deprimirme un poco ante sus palabras- Pero sí que hay tiempo para un vasito de leche…-

Se movió, deleitándome con las vista de sus músculos y firme cuerpo en acción, cada musculo se marcaba perfectamente al ser tensado y relajado mientras el cambiaba de posición, girando sobre mi tableta hasta que me dio la espalda. Desde allí y apoyándose en el colchón con las manos, desplazo su cadera con deliberada lentitud hacia atrás, mis ojos se quedaron fijo en su firme culo de deportista, paso sobre mi cabeza donde le deposite un suave beso una nalga que provoco una risa en mi amigo, desde allí se alzó haciendo que su pollon me acariciara con la punta la cara para luego quedarse suspendido sobre mi boca semi abierta, mi amigo inclino la cabeza y desde esa posición en donde se le marcaban tan perfectamente los pectorales me dijo:

-¿Quieres un vasito de leche?-

Yo asentí e impulsándome un poco me la introduje en la boca. Mi amigo suspiro un poco y se rio

-Ahora a por mi parte…-

Sentí como se inclinaba y segundos después su boca y su lengua ya acariciaban y lamian la punta de mi polla descapullada, la presión que ejercían en el glande desnudo era deliciosa y no me extrañaba que fuera una de las cosas preferidas de Dani, yo me dedicaba a lubricar bien esa polla para facilitar la mamada que aunque la había empezado aun no era ni la mitad de lo que estaba dispuesto a hacer… Le coloque las manos en el culo y desde allí le incliné un poco dejándomela más accesible a la boca, lamí el tronco con ganas, sintiendo las venas contra mi lengua bombear la sangre en su pollon como un corazón vibrante, desde el tronco ascendía (o descendía, según como se mire) hacia la punta donde lamia el glande con vigor, el cual debido a la excitación ya soltaba el liquido pre seminal que se mezclaba con mi saliva y se extendía por toda su polla por mi lengua ansiosa. Carlos por su parte se dedicaba ahora a lamerme los huevos, repasándolos con fuerza con su lengua y humedeciéndomelos, coloco su lengua de nuevo en la base de mi pollon y desde allí ascendió regándolo entero con su saliva, se lo metió de nuevo en la boca y comenzó a mamármela mas en serio

Yo le imite y mientras dejaba la cabeza quieta mis manos en el culo de Carlos se lo sobaban mientras le empujaban las caderas para follarme la boca, tenía los ojos cerrados y mis gemidos de placer se ahogaban contra la dura pieza de carne que tenía en mi boca, era deliciosa y sobretodo cálida, al bajar los huevos de Carlos me acariciaban la frente como queriendo recordarme la preciosa carga en leche que llevaban y que yo debía beberme, cosa que desde luego me daba mucho gusto cumplir. Mi mejor amigo comenzó a aumentar su ritmo mientras una de sus manos se colocaba en la base de mi pollon, rodeándolo, Carlos redujo el recorrido de su boca desde casi todo mi pollon hasta solo la mitad, dejando la otra mitad lista para ser pajeada y acaricida con maestría por su otra mano, la sensación de tener mi polla descapullada siendo mamada por Carlos mientras su mano me pajeaba a su vez, pero sin cubrir mi glande, era toda un orgia de sensaciones en donde el placer lo abarcaba todo… Deseaba poder hacer los mismo pero la posición invertida no jugaba a mi favor, de modo que para intentar imitarlo en parte apreté mis labios con fuerza contra el pollon de Carlos, este jadeo con mi polla en su boca frenándose un poco para luego volver con más ganas, mis manos separaban su nalgas mientras se las apretaban y mis dedos recorrían sin pudor su raja (no tenia intención de hacer nada con los dedos, Carlos ya me había dejado claro que eso no era lo suyo), la firmeza de su culo me embriagaba… Ambos gemíamos contra la polla del otro y nos aferrábamos a ellas en espera de la leche que tan desesperadamente reclamábamos ya

Sobre mi sentía el poderoso cuerpo de Carlos, moldeado en el gimnasio a base de sudor y esfuerzo, una maquinaria perfecta que a pesar del ritmo de nuestro 69 y a pesar de estar solo sujetándose con un brazo no tambaleaba ni daba muestras de ceder… El ritmo ya era intenso a más no poder, yo sentía mis huevos, húmedos aun por la saliva de Carlos, listos para soltar su preciosa leche, la polla de Carlos ya palpitaba, síntoma de que el también estaba próximo a correrse… En el último tramo ya nos follabamos sin pudor las bocas con potentes y enérgicos golpes de cadera… En un momento dado Carlos gimió con intensidad contra mi polla y sentí como su dulce néctar se derramaba en mi boca, sin poderlo evitar, pero tampoco con ganas de ello, me corrí en su boca a modo de respuesta dejando que mi leche bañara esa cavidad que tan impresionante mamada me había dado

Su leche era caliente y estaba deliciosa, de sabor un poco más fuerte que la de Dani pero igual de cremosa… Mi lengua se dedicaba a masajear su glande con sucesivas lamidas, metida en su papel de lechero y dispuesta a repartir el preciado liquido por toda mi boca. Esta vez la posición jugaba a mi favor, dejando que mi lengua y la gravedad hicieran el resto me tumbe con tranquilidad mientras paladeaba la corrida. Carlos por su parte recorría incansable mi pollon para saborear los ríos de leche que mi glande dejaba manar como agua mansa, ni una sola gota de mi leche baño mis huevos ni llego a la base de mi polla

Al acabar nuestras pollas de soltar su leche, nos quedamos unos segundos quietos saboreando los restos que habían quedado en nuestras bocas. Nos sacábamos la polla del otro, ya medio duras. Carlos se giro moviendo su musculoso cuerpo para encararse a mí. Sus ojos brillaban como siempre tras hacer estas cosas, realmente se le veía muy parecido al Carlos de hace tres años… Al Carlos que siempre había conocido… Sin ningún rastro de reflexión, ni de introspección, ni de dolor ni de tristeza en ellos… Me sonrió y se inclino para besarme en donde los restos de nuestras corridas se juntaron para darnos un último y delicioso trago mientras continuaba nuestro beso. Nos separamos y nos levantamos de la cama, Carlos se estiro suspirando relajado y lo le imite, miramos el reloj y con rapidez nos metimos en la ducha…

No es que llegáramos tarde… Pero si con la hora un poco pillada…

Dani

Entrecerré los ojos mientras respiraba hondo, hacia como dos minutos que el servicio de habitaciones nos había llamado para avisarnos, yo había dormido con un sueño ligero e intranquilo y por ello me desperté nada mas sonar por primera vez, al extender mi mano para descolgarlo sentí el cálido tacto de otra y al alzar la mirada pude comprobar a Sergi contemplándome. Su poderoso cuerpo estaba inclinado y estirado hacia la mesilla donde descansaba el teléfono, nuestras manos sobre el auricular del mismo mientras sonaba. Nos habíamos quedado callados durante un segundo, mi dormida mente intentaba lo más rápido posible componer una sonrisa mientras recordaba cómo dar los buenos días. Los ojos de Sergi no lucían cansados, seguramente se había despertado poco antes de que sonara, su mirada si bien no era dura sí que tenia cierto deje amargo, como si en vez de mirarme a mi contemplara una fría obra de arte… Luego sus ojos de tinta negra brillaron un poco y cuando yo me disponía a darle los buenos días el descolgó, dejando mi mano caer inerte entre ambos…

Su mirada se paseo por la habitación evitándome en lo que esperaba que no fuera algo deliberado, me sentía como un tonto con mi mano allí, como tendida en una ofrenda rechazada… Como si pidiera clemencia o limosna… Tras unos pocos segundos, conseguí sobreponerme y recogerla, Sergi colgó el teléfono y fue entonces cuando me dirigió las primeras palabras del día

-Dicen que bajemos en quince minutos a desayunar- y dicho lo cual se levanto y se fue hacia el baño

En ese momento sentí una especie de patada en el pecho, la presión que ayer se había instalado en él regreso con clamores de dolor triunfantes… No era una presión en sí, entendida de forma física, era más bien… Una especie de entumecimiento como si mi corazón se cansara de latir… Era un frio en pecho, como si estuvieras al borde de un precipicio infinito… Era, sinceramente, frustrante

Me quede tumbado, intentado hacer memoria, intentado descubrir en mis recuerdos aquello que había hecho mal… Aquello que hubiera provocado esto… Pero no lo encontraba… Respire hondo, acción que mi dolo coreo con un pinchazo tajante… Cerré los ojos… Por alguna razón Sergi estaba… frio... conmigo y no entendía el porqué, del mismo modo tampoco entendía la corriente de sentimientos que me embargaban, sentía el dolor del amigo al ver distante al otro pero bajo esa capa sentía muchas más… No escapaba a mi entender que la relación que yo mantenía con Sergi era, cuanto menos, más profunda que la que mantenía con el resto de personas, incluidos mis padres o mi familia. Siempre había estado muy unido a Sergi y siempre nuestra amistad había sido muy profunda… Pero por alguna razón esa unión tan fuerte parecía que se resquebrajaba… Y eso me daba mucho miedo… Porque...yo…

Me gire sobre la cama furioso tanto conmigo mismo como con Sergi, me sentía furioso conmigo por ser incapaz de entender por un lado lo que me pasaba y por otro lo que le pasaba a él y por otro lado me sentía mal porque al parecer lo que le pasaba a él era un secreto para mi… Porque lo que le pasaba a él lo sabia Gabi y yo no… Porque no había confiado en mí… Y eso me dolía profundamente…

Me tumbe de nuevo en la cama, me sentía cansado… Muy cansado… Ese maldito sueño no me había hecho nada, simplemente me había cansado más… Para despejarme intente recordar los sucesos del día anterior que no tuvieran que ver con Sergi y simplemente encontré uno… La estatua… El resto estaba impregnado de una u otra forma por el… Pero la estatua no… Solo yo la había encontrado entre la oscuridad de aquella Iglesia… Solo mis ojos la habían visto… Religio Amoris, Ignis Amoris… Así se llamaba la obra… Mis conocimientos de latín básicamente se fundamentaban en el parecido que este tenía con el español y por ello creía que no comprendía del todo su significado pero básicamente parecía alguien que sufría por amor…

Eso encamino mi corriente de pensamientos hacia Alex… No quería ni pensar lo que había hecho ayer por la noche aunque sabía que no había dormido en la habitación de Gabi, así que solo había que sumar dos y dos para entender lo que había estado haciendo… Y con quien lo había estado haciendo… Seguramente la chica esa con la que estaba hablando en la Iglesia… Al menos se que no es Cris, pensé sin saber porque, Porque ella es de Sergi… Y hasta a mi me impresiono la oscuridad que impregnaba ese pensamiento…

Decidí que debía dejar de pensar en ello y la única forma de hacer eso era ocupar mi mente en otras cosas, me levante, dormía con un pantalón de pijama blanco con cuadros más o menos grandes negros, la verdad era que me quedaba muy bien esa combinación de negro sobre blanco con mi piel… Debía vestirme, pero para hacer eso tenía que ir al baño… Que era donde Sergi estaba ahora y a juzgar por el sonido del agua corriendo seguramente duchándose… Antes hubiera entrado sin ningún pudor en el baño, ya había visto cientos de veces el cuerpo de Sergi desnudo y del mismo modo lo había visto cientos de veces en las duchas y sinceramente era un espectáculo digno de contemplar… Pero por alguna razón ahora no quería entrar, no con el allí… Si se notaba cierta tensión en una habitación de trece metros cuadrados no quería ni imaginar la que podría haber en un cuarto de solo dos…

Pero debía hacerlo porque el tiempo ya iba justo y no podía llegar tarde, seguramente me castigarían… Así que cogiendo aire entre con determinación, Sergi estaba duchándose como supuse, la mampara de la ducha era semi trasparente (más transparente que otra cosa debo decir) así que aunque dejaba ver el cuerpo de Sergi sí que difuminaba sus formas un poco, aun así eran claros sus músculos y su cuerpo brillante por el agua, mi polla en semi erección matutina se alzó un poco pero aparte mi mirada… Mi mano se movió hacia el grifo pero se quedo quieta… Si lo abría tal vez cortara el agua caliente a Sergi… Y no quería joder más las cosas… Aunque no supiera que había hecho para joderlas

Mi mano y mi mente estaban indecisas, de repente oí el sonido de la mampara abriéndose y el de Sergi saliendo

-Ya puedes entrar pe…- dejo el final inacabado y eso fue incremento el dolor de mi pecho…

Iba a decir peque… Sergi iba a decir peque… Y se ha parado… Eso me dolía como cientos de cuchillas heladas en el pecho… Yo siempre había sido el peque de Sergi… ¿Qué había pasado para cambiar eso?... ¿Que había hecho mal?... No lo sabía… No lo sabía… Y eso me hacía sentirme morir por dentro…

-Va-vale Sergi- dije yo abriendo el grifo e inclinándome para beber agua… Con ello no tendría porque mirarle

Estuve un par de segundos tragando agua, Sergi se movía a mi espalda mientras se colocaba una de las dos toallas… Al final no pude aguantar más y me alce, lo hice repentino y listo para agacharme de nuevo para seguir bebiendo pero el impulso me hizo chocar contra el duro torso de Sergi que se movía para irse… Sentí su piel cálida contra mi espalda y eso me provoco una corriente que desentumeció los numeroso nudos que agarrotaban mis cansados hombros, Sergi se aparto a la misma velocidad con la que yo me había alzado… Me sentí muy mal por ello, escapaba de mi contacto como si le quemara… Por alguna razón sentí ganas de llorar, pero mis ojos estaban muy cansados de modo que era normal la sensación, pero no por ello menos turbadora… Cuando Sergi estaba saliendo me dirigió unas pocas palabras

-No bebas tanta agua que luego te sentara mal el desayuno...- lo dijo con un tono de voz uniforme pero en el que se le escapo una nota de sentida preocupación

-Tranquilo no lo hare- dijo yo y le sonreí a pesar de que no me veía

Entro en la habitación y yo me desvestí para ducharme… Esa pequeña nota de preocupación que era la señal de una mayor me demostraba que al menos yo no le era del todo indiferente y eso me animaba… Sí, me animaba… Un poco, pero algo era algo… Un vaso de agua en mitad de un desierto…

Me metí en la ducha pensando en ello… Y en mitad de ella un pensamiento trunco mi felicidad…

…Acaso después de ese vaso… No iría a tener mas sed…

Carlos

En un tiempo ciertamente record para Valle conseguimos salir de la habitación, el andaba a mi lado con la ropa un poco revuelta, mientras trataba de colocarse la sudadera sobre la camiseta que llevaba, yo chasquee la lengua y le ayude un poco, Valle gruño en respuesta concentrado en colocarse la ropa. Tenía el pelo como yo, un poco revuelto, pero donde el mío estaba cuidadosamente colocado para darle ese aire entre rebelde y chulo que tanto me gustaba el de Valle era fruto de sus prisas por no llegar tarde, el dorado relucía más de lo acostumbrado y el recuerdo de esos mechones, que eran como oro, pegados a su cara por el agua de la ducha mientras nos besábamos y reíamos me hizo sonreír. No fue una sonrisa de enamorado, simplemente una sonrisa como al del amigo que recuerda alguna travesura con algún compañero… Por desgracia las sonrisas de enamorado las reservaba para los recuerdos con Adri y el tiempo y las circunstancia había teñido esas sonrisas con dolor y pena…

Entrecerré los ojos un poco, enfadado conmigo mismo, era inevitable que acabara pensando en Adri pero hubiera preferido no tener que hacerlo hasta después del desayuno… Para distraer tanto mi mente como mis manos, deslice estas últimas por debajo de la camiseta de Valle, ya cubierta esta por la sudadera, y allí acaricie sus pectorales y su dura tableta, donde la apreté un poco… Valle se giro un poco y me sonrió radiante… El tener a mi bro cerca siempre me ayudaba a estar más alegre, era como un bálsamo para mis heridas… Aunque como siempre tuve miedo y sentí pena al mismo tiempo por el… Miedo porque no quería que lo que hiciera con Valle le llevara a creer que existía algo mas a parte de lo que yo sabía que había y pena porque en el fondo no dejaba de utilizarle como una distracción para alejar mi mente de Adri, como si Valle fuera un caramelo o un juguete… Mi juguete…

Suspire, el tiempo diría a donde nos llevaba todo esto. De momento Valle no había hecho nada que indicara que esperaba algo más de mí y tampoco se le veía incómodo con lo que hacíamos así que lo mejor y lo más prudente era esperar y ver que sucedía… Y así de paso me ayudaba con lo de Adri…

Tras colocarse del todo la ropa y tras peinarse un poco con las manos Valle y yo nos dividimos, yo fui para la habitación de Gabi y Alex y Valle para la de Dani y Sergi. Al llegar a donde iba alce mi mano y di un par de golpes en la de nuestros amigos mientras Valle hacia lo mismo, al segundo mi puerta se abrió mostrando a Gabi con tejanos un poco caidos dejando ver la tira de los bóxers, su camiseta aunque estaba metida se encontraba hecha un lio a la altura de sus macizos pectorales, seguramente se la acababa de poner ahora. Gabi me dedico una pequeña sonrisa

-Vaya… Que sorpresa que seáis los primeros- y se rio

-Ya ves tio- dije con apoyándome en el marco de la puerta, mis ojos se deslizaron con tranquilidad desde sus potentes pectorales bajando por su blanca y marcada tableta, que sin embargo no lo estaba tanto como la mía- Quería pillarte con la polla dura al despertar pero no ha podido ser….- alce mi mirada para cruzarla con la suya, Gabi se rio mas y yo le guiñe el ojo de forma chula…

Mire un poco dentro de la habitación, la cama de Gabi estaba deshecha pero la de Alex solo tenía un par de arrugas y estaba preparada… No hizo falta pensar mucho…

-Que dormiste solo anoche eee…- dije yo quitándome del marco de la puerta, Gabi ya se había colocado del todo su camiseta y en estos momentos agarraba su abrigo del perchero del pasillito

Gabi se lo hecho al hombro y al girase sus ojos brillaron un poco

-Más o menos- dijo el tranquilamente

Yo capte el suave tono que indicaba que aunque deseara no debía preguntar mas, no porque Gabi se fuera a enfadar (muy pocas veces lo hacía) si no porque no iba a sacar nada y hacerlo sería gastar saliva sin motivo… Me rasque un poco la barbilla, tal vez tuviera un poco de fiesta en la habitación… Puede que la compañera de la tía a la que Alex había hecho una visita por la noche… Yo no había oído nada, pero era bien cierto que a esas horas yo estaba liándome con Valle mientras nos hacíamos una paja mutua y poco o nada escuchaba o sabia de lo que pasaba fuera…

En fin, pensar en ello solo haría que me aumentara la curiosidad y me desesperara tratando de sacarle algo… Me di la vuelta, saliendo al pasillo con Gabi tras de mí. Allí vi que ya estaban Sergi, Dani y Valle. Estos dos últimos estaban hablando tranquilamente de lo íbamos a visitar hoy en la excursión, el pelo de Dani estaba peinado en su típica crestita, de aspecto mojado y con su pelo casi rubio por ello, contrastaba bien con el dorado de Valle, les hacía parecer dos adolescentes extranjeros… Aunque no había que olvidar que por la venas de Dani corría la sangre sueca de su madre

Sergi pos su parte estaba apoyado contra la pared, cruzado de brazos mientras miraba al techo, tal vez me lo imaginara pero en un momento en el que Valle riéndose le apretó el hombro a Dani que le sonreía creí ver como se le tensaba la mandíbula… Gabi paso a mi lado, adelantándome y llegando primero hasta el grupo, le palmeo el hombro a Sergi y saludo a Dani y Valle, a mi bro con un golpe en su bíceps y al pequeño del grupo revolviéndole el pelo. Dani retrocedió un paso para colocárselo pero antes de que pudiera hacerlo me acerque en una zancada y se lo revolví, haciendo un poco de fuerza para que Dani no pudiera escapar… Me soltó un par de insultos, más de coña que de otra cosa mientras se recomponía la cresta…

Valle y yo nos reímos un poco y como estábamos obstruyendo el pasillo nos fuimos hacia el comedor del hotel. Nos movimos por un par de pasillos mientras saludábamos a nuestros compañeros, al llegar a los ascensores tuvimos que quedarnos a esperar que uno bajara libre o nos tendríamos que dividir para entrar mejor… Parados delante de ellos nos pusimos a hablar de nuevo de lo que haríamos el día de hoy

-Iglesias, iglesias y más iglesias…- estaba diciendo Valle- Solo vemos iglesias….-

-Las iglesias están bien- dijo Dani- Aunque suele hacer mucho frio…-

-Lo único interesante de las iglesias es que algunas salen en el Assasin Creed- dije yo riéndome un poco, Valle me sonrió mientras Dani agachaba la cabeza como dándonos por perdidos

-Yo me quede atascado casi al final- dijo Sergi, entrando en la conversación- En la parte esa que tienes que saltar a la lámpara y llegar al piso de arriba… No paraba de hostiarme y lo deje-

-Yo aun no llegue ahí…- dijo Valle- Aunque tampoco es que juegue mucho-

-Nah yo ya me lo pase- dije yo hinchando un poco el pecho- Así se demuestra la habilidad-

-Si…- empezó Gabi pasándome un brazo por el hombro- Y por eso suspendiste Literatura ¿verdad?-

Yo me reí girando mi cabeza para mirar a Gabi a los ojos

-Tiene que ver si…- admití- También tiene que ver que es más fácil copiarse de Dani que de ti… Escribes demasiado pequeño-

Dani al oír su nombre alzo la cabeza, se había quedado mirando al suelo pensativo. Sergi estaba al lado suyo pero a diferencia de otras veces tenía las manos metidas en los bolsillos y no sobre los hombros de Dani como Gabi en estos momentos conmigo… Seguramente estaban los dos molidos del viaje y de dormir en una cama extraña

-Ya lo suponía- dijo Dani sonriéndome- Que sin mí no apruebas-

Yo me reí

-Eso no es cierto… Pero por alguna razón saco mejor nota cuando estas cerca- me separe de Gabi y acercándome a Dani le abrace, sentí su atlético cuerpo contra mi- Eres mi talismán de la suerte-

Dani se rio un poco e intento soltarse colocando las manos en mis pectorales endurecidos por la posición… Yo pasando completamente de él lo alce un poco

-Ohhhh pobrecillo que se quiere escapar- dije yo riéndome- Pobre Señor Abracitos- termine usando el mote que Valle y yo le habíamos puesto a Dani en una de nuestras borracheras

Dani intento soltarse mientras su mirada se oscurecía un poco… Yo fruncí levemente el ceño… No había dicho nada, normalmente Dani solía responder a estos piques… Y más los que tenía que ver con el Señor Abracitos… Ese mote se lo habíamos puesto porque cuando Dani bebía y se emborrachaba se enrojecía con mucha facilidad y las erres se le trababan en la boca y eso juntado a su personalidad tímida daba unas ganas increíbles de abrazarlo… Pero sobre todo se lo pusimos hace un par de años, porque en esas situaciones Dani y Sergi siempre acababan abrazados… Mire al Sergi, normalmente solía salir a defender a Dani aunque solo fuera de palabra, ya que entendía que solo era coñas… sin embargo el estaba mirando al pasillo, su cuello se veía tenso y seguramente no había escuchado la conversación… O había hecho como que no la habia escuchado… Pero eso sería rebuscar demasiado las cosas, además no había motivos para ello que yo supiese

Solté a Dani y este me dio un pequeño cabezazo en el pectorales y luego se quedo colocándose la ropa, estaba al lado de Sergi pero parecía que estuvieran a kilómetros de distancia… se notaba algo entre ellos… Vi como Dani le miraba de reojo y también vi como Sergi tragaba saliva mientras apretaba un poco la mandíbula y entrecerraba los ojos… Gabi, cerca nuestra, les miraba con compresión… Yo cruce una mirada con Valle, el al igual que yo, estaba completamente perdido. Ambos nos encogimos un poco de hombros a la vez… La situación se había vuelto muy tensa de repente

Por suerte el ascensor llego y pudimos entrar, la bajada también fue un poco tensa. Todos íbamos callados y sin hablar… Al salir al pasillo Valle y yo con la excusa de adelantarnos para buscar sitio en el comedor pudimos adelantarnos. Entramos y olvidado ya el tema de la tensión nos dedicamos a ver mesas… Valle buscaba según el numero de sillas o lo cerca o lejos que estaba de los profesores o de la comida…Yo por mi parte me fijaba en los lejos que estaba de Adri… Valle me señalo una y yo negué con la cabeza

-Esa no- Demasiado cerca, añadí para mis adentros

Señalo otra

-Tampoco- Demasiado lejos…

Valle se estaba empezando a desesperar y yo le deje y seleccionando mesas para que se entretuviera… Adri estaba en la suya, rodeado de sus amigos, al lado suya estaba la chica esa del avión, por la posición del brazo de ella supe que tenia apoyada la mano en la rodilla de Adri, este por su parte hablaba animadamente con la gente de su mesa mientras bebía de un vaso de café… Se le veía feliz, tranquilo y a gusto en un entorno que controlaba… Allí, rodeado de sus fieles… Sin embargo no se me escapaba que cuando creía que nadie le miraba sus ojos relucían tristes y sus sonrisas descendían un poco… Valle seguía diciéndome mesas y yo las seguía descartando, ninguna me gustaba… No sabía lo que quería… Si, si lo sabia… Le quería a él…

Al final accedí a una pero más porque Gabi, Sergi y Dani habían llegado hasta nosotros que porque realmente lo quisiera… Cuando me senté mire por una última vez a Adri y nuestras miradas se cruzaron un segundo, Adri pronto desvió la vista y se puso a hablar con sus amigos… Yo suspire y me derrumbe en mi silla, cansado…

Dani

Lo sucedido antes delante del ascensor había sido muy doloroso… Porque cuando Carlos me dijo lo del Señor Abracitos, no se me puedo evitar pasar por la mente las numerosas veces que al final de un noche de juerga Sergi y yo acabábamos abrazados, sus fuertes brazos rodeándome mientras los míos intentaban abarcar su potente torso… Los dos ayudándonos a sostener mutuamente mientras hablábamos de chorradas fruto del alcohol…

Pero lo que me dolió de verdad… Lo que más daño me provoco fue que sabía que Sergi había escuchado eso y no había hecho ni dicho nada… Eso en si no me preocupaba, a veces para hacerme de rabiar Carlos y Sergi se compinchaban pero esta vez no había sido así… Incluso al mirar a Sergi pude ver como el había girado la cabeza para hacer como que no había escuchado… Pero yo sabía que lo había hecho… Después de que me soltara Carlos, y mirando a Sergi de reojo pude ver como apretaba la mandíbula un poco, señal de que estaba tenso… Dentro del ascensor también sentí esa tensión en el… Y al salir comenzó a hablar con Gabi, dejándome al margen mientras Valle y Carlos iban a buscar una mesa…

Me sentía fatal porque sin poder hacer nada o sin saber que hacer sentía que Sergi se estaba distanciando un poco… O al menos que estaba tenso conmigo… y eso me mataba por dentro… No sabía que podía haber hecho para provocar eso…. Y juro que me rompía la cabeza para encontrar mi culpa en todo esto pero era incapaz de verla… No sabía que había pasado… Que había hecho… Y el no saberlo casi era más doloroso que la certeza de haberlo hecho…

Sergi estaba sentado a mi lado, pero se le veía indiferente en todo lo que a mi refería… Hablaba con Gabi o con Carlos, al lado y delante suya respectivamente pero a mí ni me dirigía la palabra… No podía más

-Voy a buscar un bol para la leche- dije yo levantándome y sin esperar a que nadie más me siguiera o me mirara me di la vuelta y me fui

Esquive las mesas y las sillas de mis compañeros, saludándoles cuando pasaba cerca de ellos. En la zona donde estaba la comida y los paltos y demás me pare, había mucha gente por allí dando vueltas y me daba un poco de corte meterme allí entre todos ellos a coger las cosas… Por un breve instante pensé que si Sergi hubiera estado a mi lado seguramente me habría puesto las manos en los hombros y me habría empujado suavemente, dirigiéndome por el mejor camino para llegar hasta donde quería… Pero no estaba allí…

Rodeando la masa de gente pude llegar hacia una zona más apartada, allí estaban los boles que yo quería, las jarras con leche estaban en cada una de las mesas así que eso no sería problema. Me acerque rápido antes de que esa zona se volviera a colapsar, estaba cogiendo el bol cuando sentí como me palmeaban la espalda… Alce la mirada y pude ver a Alex, respiraba un poco agitado y vestía la ropa un poco movida, seguramente había ido corriendo a la habitación y había bajado para no ser castigado corriendo también… Suspiro un poco y cogió otro bol

-Menos mal que está aquí tio- me dijo- Que Fernando me está buscando así podre decir que estuve siempre contigo-

Yo suspire un poco cansado… Con lo de Sergi aun reciente no me apetecía tener a Alex dando vueltas a mí alrededor… Pero tampoco podía pedirle que se fura… Además, aunque me costara admitirlo el tener a Alex cerca si bien era doloroso también me distraía… Alex se movió para coger los boles cuando yo le conté que nadie los había ido a coger, de paso pillo unos platos para no manchar nada… Yo estaba alejado de la marea de gente en donde Alex se movía con tanta naturalidad, tenía mi bol entre mis manos con mis dedos sujetándolo suavemente, uno de ellos repasaba el borde del mismo, de forma lenta y suave. Alex volvió junto a mí, mientras andaba pude ver su pelo revuelto y lo que parecía una suave marca de un beso más ardiente de lo normal en su cuello… Suspire, la presión en mi pecho se ahondo un poco… No había nada que pudiera hacer para evitarlo…

Al llegar a mi Alex me sonrió con esa media sonrisa que tanto amaba… Yo extendí mis manos, rotando el bol en ellas para poder coger los platos quedándose Alex así con los boles solo. Aunque no quisiera tuve que obligar a mis pies a volver hacia la mesa, iba hablando tranquilamente con Alex, por suerte él no era de los que presumía de conquistas a menos que se le preguntara directamente. Me empezó a preguntar sobre lo que habíamos hecho por la noche y yo tragando un poco de saliva le dije que como tenia sueño me había ido a la habitación directamente. Alex se rio y fijo sus preciosos ojos grises en mi

-Que sosos Sergi y tú- dijo y en su cara se pinto una media sonrisa perfecta- De cabeza a sobar en la habitación-

Mis dedos atenazaron un poco los bordes de los platos, en un apretón del que no fui consciente… En mi mente llameo una imagen… Sergi entrando en nuestra habitación de madrugada, sin camiseta y con sus tejanos con la bragueta abierta… Acostándose en silencio y creyéndome dormido…

-No…-dije yo tratando de aparentar tranquilidad- Sergi no se vino conmigo… Estuvo por ahí…-

Alex abrió la boca para seguirme preguntando pero por suerte, o por desgracia, llegamos a la mesa… Cuando la vi sentí una patada en la boca, Sergi estaba sentado en su silla y en la que antes había sido mía y estaba al lado de la suya estaba Cris. Tenía a una amiga de pie al lado de ellas, estaban hablando con Sergi y con Gabi… Se les veía animado, es decir, las chicas sonreían y a Sergi se le dibujaba el inicio de una media sonrisa, Gabi muy en su línea de comportamientos sociales estaba serio aunque se le veía relajado… Carlos y Valle estaban hablando mientras señalaban disimuladamente a gente de las mesas y se reían, delante de ellos había varios croissants agrupados, seguramente mientras yo había ido a por las cosas ellos habían ido a por la comida... Yo me quede quieto, no sabía qué hacer, si ir hacia mi sitio, ahora ocupado o si quedarme de pie… Por suerte Alex decidió por mí y dejando los boles encima de la mesa dirigió un saludo de grupo

Todos se quedaron callados ante la interrupción de mi amigo, vi como tanto Carlos, como valle y Gabi y las dos chicas miraban a Alex. Sergi por su parte pasó su mirada por encima de Alex, como si no existiera, y de reojo vi como la posaba en mí. Yo me acerque y deje los platos encima de la mesa… Las conversaciones se reanudaron, yo seguía haciendo como que estaba a mis cosas pero de reojo espiaba a Sergi el cual aunque había vuelto a hablar con Cris y su amiga me seguía observando… Distribuí los platos formando un pequeño círculo y todos se extendieron a cogerlo, Alex hizo lo mismo con los boles… Yo trague saliva, terminado ya eso no tenía mas excusa para no sentarme a desayunar… Pero en mi sitio estaba Cris…

Alce la vista y pille a Sergi apartándola de golpe… No sabía cómo coño tomarme eso… Me evitaba pero luego hacia eso… Estaba tenso y luego… El cansancio dio paso a una pequeña furia… Mire a Cris, estaba tranquila hablando con Sergi pero la amiga me vio y dándole un golpecito en el hombro la dijo que seguramente ese era mi sitio… Cris me miro y se levanto mientras se disculpa de forma genuina, yo sentí ganas de coger un plato y estrellarlo contra el suelo… Ella de verdad era buena persona pero por alguna razón no la tragaba… Dios, que ganas de gritar y salir corriendo

Se levanto y se fue, yo solo me senté en mi sitio y eche la leche en mi bol mientras cogía el chocolate con la otra… No le dirigí ni una palabra a nadie en todo el desayuno…

Solo Sergi permaneció callado como yo…

Carlos

Venecia olía a agua estancada… Esa era el único aspecto que sobresalía sobre los demás. Era cierto que las iglesias eran bonitas, los campanarios altos y con una vista magnifica, las grandes calles y sus pequeñas callejuelas adyacentes y la brisa marina que refrescaba el ambiento caldeado por el sol pero… Olía a agua estancada

Los canales mantenía el agua quieta, de un tono verduzco que sugería que caerte y empaparte la ropa en esa agua era lo peor que te podía pasar… Viéndolos no era extraño que fuera la ciudad más acosada por la Peste Negra. Cerca mía Valle iba ajeno al olor (especialmente fuerte) de esta zona de la ciudad, el iba mirando cada calle y cada casa, medio atontando mientras comentaba lo mucho que le gustaría hacer un boceto de alguna de ellas… Yo iba mirando al frente mientras mi mirada no paraba de seguir la tranquila superficie verduzca de los canales, a la espera de que un pez de tres ojos hiciera su aparición…

Hacía ya cuatro malditas horas que no parábamos de patearnos la puta ciudad, calle arriba calle abajo. Eso en si no era un problema, yo no estaba especialmente cansado, pero el tener que ir todo el curso por esas calles tan estrechas nos hacia formar una enorme fila que menos mal, seria partida por la mitad mañana… Llevaba en mi oreja un auricular en donde el guía explicaba las cosas del principio de la fila, el cual estaba a bastantes metros de distancia, por lo que básicamente solo los del principio se enteraban de que hablaba. Moví mi mano y apretando el botón de la petaquita que iba unida al cable del auricular lo desconecte, no pude quitármelo porque los profesores se enfadaban si lo hacías pero al menos no tendría la voz del guía (un poco cascada por el tabaco) en mi oído… Deslice mi mirada por la gente

Al lado de Valle iba Dani, ambos miraban las cosas pero mientras Valle lo hacía con ganas e ilusión Dani las miraba con desgana y como si el mirarlas le provocara una pena inmensa… Seguramente el cansancio. Detrás de nosotros tres iban Gabi y Sergi, ambos un poco alejados, gire mi cabeza para verles. Estaban hablando, Sergi iba tranquilo mientras señalaba las casa y hacía comentarios, Gabi por su parte le respondía pero dirigiéndole miradas un tanto preocupadas. Tras ellos dos iba Alex hablando con María (su ex desde Navidades), contrariamente al resto María era la única ex de Alex que no se esforzaba por recuperarle, tal vez sería porque mientras estuvieron saliendo tanto Alex como María se pusieron los cuernos. Ahora eran amigos y por lo que conseguía pillar del inicio de su conversación cuando aun íbamos juntos, se estaban dando consejos sobre cómo hacerse a tíos o tías del curso. Por desgracia María tan bien era una de las mejores amigas de Adri por lo que detrás de ellos dos iba su grupo, con él en la cabeza y detrás de María, dejando a su amiga y a mi amigo como enlace entre ambos grupos…

Me moría de ganas por retrasarme para poder ponerme a la altura de Adri. Desde nuestro castigo forzoso en el avión no habíamos vuelto a hablar y lo dicho por ambos en esas horas me mantenía en vilo… Algo pasaba… Algo más de lo que yo creía se ocultaba bajo el zafiro de Adri… Algo le estaba destrozando por dentro como un cáncer… Y saberlo me hacía sentir unas ganas locas de ir con él para no dejarle solo… Pero aunque quisiera no podía porque… Porque él no quería que lo hiciera…

Deje caer la cabeza, sentí un poco de sudor caer desde mi nuca pero lo deje estar, ese maldito sol y esa humedad de la ciudad eran una sauna… Mis manos fueron al inicio de mi camiseta… Deseaba quitármela y poder sentir la brisa en el torso pero eso picaría a los tutores… De modo que me contentaba con llevar mi camiseta de manga corta con la larga anudada a la cintura…. Valle iba como yo pero con su sudadera en la mano, en la otra una botella de agua que nos íbamos turnando… Dani por su parte seguía llevando su camiseta de manga larga, pero estaba hecha más fresca que las nuestras y por ello se mantenía fresco con solo arremangándosela por encima de los codos… Además intentaba en la medida de lo posible andar por la sombra, era un bonito contraste ver las sombras deslizarse por su atractivo rostro, con su verde profundo iluminándose de tanto en cuento con la luz… Eran unos ojos bonitos pero no como el zafiro de Adri…

El grupo se paro, la gente que aun llevaba puestos los auriculares con sonido indicaron que íbamos a entrar a la fábrica de cristal de Murano de la ciudad… Los tutores se acercaron mientras iban separando a la gente por grupos. Seguramente tenían miedo de que rompiéramos algo si entrabamos muchos de golpe… Los tutores hicieron un corte justo delante de Valle y de mí y siguieron andando, nos giramos, Dani se había poyado en la pared, donde daba la sombra, con los brazos cruzados delante del pecho estaba observando la talla de una casa cercana… Los tutores siguieron avanzando pasando detrás de Alex y María que seguían hablando y abarcando a la mitad del grupo de Adri, dejándole a él en el mío… Sonreí un poco mientras la imagen de Adri y mía pelando en una fabrica llena de cristal se formaba en mi mente… A pesar de ser una imagen graciosa era dolorosa… Me apoye en la pared junto a Dani y cerré los ojos, mientras respiraba de forma tranquila para relajarme

Los grupos delante del nuestro fueron pasando mientras el nuestro aprovechaba para descansar, la zona con sombra era la más demandada y pronto estuvimos todos apoyados contra la pared, algunos de pie y otros sentados… Yo estaba en el extremo de la fila, con Dani al lado mía y con Valle a su diestra, seguidos de Gabi, Sergi, Alex, María, Adri y el resto de su grupo… Yo respire hondo intentando librarme por un lado del maldito calor y por otro de mis pensamientos sobre Adri… Pero era imposible hacer una u otra cosa…

Dani estaba más callado de lo que era habitual en él y solo daba cortos comentarios a lo que Valle le estaba diciendo, por lo que veía tan bien Sergi estaba callado al no oír su voz, Gabi como era normal estaba mirando cosas callado… Solo Alex y María estaban hablando, al igual que el resto del grupo de Adri, a excepción de él, por más que me esforzaba no podía oír su voz… Suspire, estaba cansado, no era un cansancio físico si no más bien mental… Todo era demasiado… Siempre era demasiado… El amor solo era un camino de espinas… Un laberinto de zarzas en donde yo no paraba de sangrar y sangrar…

Alce la cabeza y aun en la sombra sentí la cálida caricia del sol en mi rostro, entre mis parpados cerrados se colaba la luz del sol… Mirarlo directamente seria doloroso…. Solo podría hacerlo en su reflejo… en el agua, en un espejo… En unos ojos… Como en el avión, cuando sobre las nubes el sol se alzo, sin la restrictiva contaminación… Puro y perfecto… Y más doloroso que nunca, porque a pesar de que no lo había visto directamente si que había contemplado su luz reflejada en su zafiro… Y allí había visto todo lo que guardaban… O al menos las trazas de lo que era… Y era dolor, simple y puro… Un dolor y una tristeza oscura y penetrante… Una carga tan pesada… Que yo sabía que en parte era culpa mía, pero sospechaba que una parte de ella no… Y me daba miedo el pensar que era la parte más oscura… Porque ello supondría que Adri lo sufría solo, porque en el dolor provocado por nuestro amor estábamos juntos de alguna forma… Pero en lo otro no… En el otro… Adri… Lo que más quería en mi vida… Estaba solo… Y eso me mataba por dentro

Sentí un golpe suave en mi hombro y al abrir mis ojos vi que Valle estaba frente a mí. En sus ojos vi preocupación por mí y me sentí reconfortado por mi hermano… El se preocupaba por mí de forma sincera y autentica y yo a cambio… Yo… Solo le usaba como si fuera un juguete que siempre estaba mano…

Intentando apartar esos pensamientos de mi mente seguí al grupo hasta la fábrica… Se entraba por un pequeño puente en arco y de allí se pasaba a una sala presidida por un corcel hecho entero de cristal de tonos verdes, la luz se colaba y refractada por el mismo parecía iluminar desde dentro al animal… Como si tuviera un corazón hecho de luz… Me quede un poco parado mirándole, sentí como Valle se colocaba a mi lado del mismo modo que el resto del grupo se paraba, allí había un tutor, por suerte no era Fernando. Nos indico que le siguiéramos, a él y a un guía propio de la fábrica que nos empezó a contar la historia de la misma… De momento solo el corcel y las ventanas daban muestras de la presencia de cristal… Subimos por unas escaleras dando vueltas hasta que entramos en una sala donde el calor era más intenso, tenía una tarima en el fondo y en pared opuesta una especie de armatoste de metal de aspecto burdo… El guía nos indico que nos colocáramos sobre la tarima… Yo me moví absorto como estaba en descubrir la función del enorme cuerpo de metal no me di cuenta de que chocaba con alguien, al retroceder y disculparme vi que me había chocado con Adri

Este se giro para mirarme, nuestras miradas se cruzaron un segundo, no fue nada más que eso un mísero segundo… Mascullo un pequeño insulto y se fue hacia otra parte de la tarima en donde estaba la chica del avión… Se coloco a su lado y vi como la chica se agarraba de su brazo… entrecerré mis ojos mientras una sonrisa cansada se extendía por mi rostro… Porque a pesar de todo no podía dejar de amarle… Porque el dolor no solo no mataba el amor si no que lo hacía más profundo… Como si lo clavara más hondo en el corazón y en el alma… Como si me lo marcaran a fuego como un estigma…

De repente entro un hombre en la sala interrumpiendo el curso de mis pensamientos. Era grande, de espaldas anchas con unos brazos y unos pectorales increíblemente marcados, era calvo y de aspecto rudo… Tal vez tenía demasiado volumen… Le debería costar dar un abrazo, pensé… Había visto tíos como esos en el gimnasio se pasaban demasiado tiempo allí y al final era igual de malo el no llegar como el pasarse… El guía dijo que era uno de los artesanos de la fabrica y yo no podía imaginarme como un tio como el podría moldear el cristal…

Apenas nos dirigió palabra, se le veía incomodo allí con nosotros, seguramente no estaba acostumbrado a hacer su arte con gente observándole… Abrió el cuerpo de metal y pude ver en su interior las llamas bailando en una pequeña cavidad… Era un horno… Un horno enorme… El guía iba explicando lo que hacia el hombre… Con una barra saco un trozo candente de algo gelatinoso y mientras lo giraba iba soplando por el tubo, al principio no se veía nada pero luego se empezó a combar… Los colores cambiaban sobre el cristal goteante, pasando de un blanco pristísimo a un morado que luego fue dejando paso a una naranja que finalmente se diluyo en la transparencia típica del material… El hombre había creado una cavidad lo suficientemente ancha, entonces dejo de soplar y saco unas tenazas estilizadas, las coloco en un punto de la pequeña circunferencia que había creado y allí ayudándose del tubo lo fue rotando mientras ejercía una suave presión con las tenazas, estas deformaban el material caliente combándolo y dándole forma, movió las tenazas mientras daba forma a lo que parecía ser un fino cuello, luego se centro en redondear el cuerpo central… Estaba haciendo un jarrón…

Yo estaba como embelesado, realmente lo hacía con una fluidez que dejaba pasmado… La seguridad y la firmeza contrastaban con la delicadeza con la que ejecutaba sus movimientos… Finalmente dio forma a asa de la jarra… era delicada y perfecta reflejando la luz de su superficie… Mire al tio… Miraba su obra de forma cansada e indiferente, insensible ante la belleza de algo que el mismo había creado… Sin mayores miramientos abrió el horno y arrojo allí el jarrón… Nos miro, se le veía que quería irse de allí… Y eso fue lo que hizo, saliendo de la sala a paso firme mientras mascullaba algo en italiano

La gente que había estado como en un sueño contemplando la creación del jarrón pareció despertar… El guía nos saco de la salas, descendiendo y dando paso a una zona más lujosa, entramos en una enorme sala repleta hasta los topes de figurillas de cristal, colocadas en estantes o en boles de aspecto delicado… De todas las formas y colores… Nos dio permiso para movernos por allí y en la medida de lo posible no romper nada (a fin de cuentas si lo hacíamos lo pagábamos nosotros). Nos dividimos, cada uno explorando los estantes a su aire…

Yo andaba tranquilo, no tenia intención de comprar nada de modo que me dedicaba simplemente a curiosear por allí… Localice a Valle mirando unos caramelos hechos en cristal… Dani miraba una rosa mientras cerca suya Gabi sujetaba con delicadeza un pequeño angel… Alex estaba hablando con María mientras pasaban por una zona repleta de pequeñas personitas de cristal en diferentes poses…Yo torcí un pasillo y allí pude ver a Adri solo, mirando diferentes edificios de cristal… Por un segundo la idea de acercarme e intentar mantener una conversación o lo que más se pareciese paso por mi mente pero… Sabía perfectamente cómo iba a acabar… Sentí la pena inundar mi pecho y seguí andando…

Pegado a la pared vi un estante un poco escondido, en donde Sergi ojeaba lo que parecían ser animales… Me acerque a él, Sergi se medio giro para mirarme y luego señalo con un cabeceo los animalitos

-¿Cómo podrán hacer tantos detalles?- dijo- Y tan perfectos…-

Yo contemple lo que allí había: perros, gatos, serpientes, pájaros… Pájaros… Uno en especial me llamo la atención, un pequeño gorrión colocado acurrucado sobre sus patitas como si se dispusiera saltar… Lo que me llamaba la atención del era el color del cristal… Un azul profundo y penetrante… Un azul que conmovía… Como el zafiro de Adri… Cerca suyo habia mas pajarillos pero en diferentes colores…

-Me gusta el azul- dije yo sin poderlo evitar

Sergi lo miro y luego a otro cercano a el

-Yo prefiero el verde de allí- dijo tranquilo- Me gusta mucho su tono de verde-

-Este azul mola mas- dije yo y me sentí como si estuviera defendiendo a Adri- Ese color zafiro es genial-

-Para azules tengo el cielo por el día y por la noche- dijo- Pero ese verde es muy difícil de encontrar… Es muy bonito- dijo bajando un poco la voz

-A mi me sigue gustando mas el azul…- dije y mi mano se movió sola tomándola y mi boca sin pedirme permiso hablo…- Lo voy a comprar-

Sergi me miro

-Vale setenta pavos tio- indico y con una mano acaricio el pájaro en verde profundo

Yo trague saliva, era más dinero del que me había traído… Sergi me sonrió

-¿Lo quieres de verdad?- me pregunto

Antes de que pudiera pensar mi cabeza y mi corazón actuaron solos dando una respuesta afirmativa asintiendo. Sergi se rasco la barbilla y antes de que me diera cuenta me quito el pajarillo de las manos, se agacho haciendo como se ataba las zapatillas, sentí sus manos en mis pies y como me movía el calcetín, subiéndomelo mientras metían el pájaro en ellos…Era incomodo sentirlo allí pero entendí lo que íbamos a hacer, me coloque los vaqueros bajándomelos y colocándomelos bien, Sergi se alzo y me dirigió una media sonrisa

-Ya esta- me dijo- Ahora trata de andar normal-

Nos movimos un poco

-¿No pillas el verde?- le pregunte

-Que va… He cogido un colgante con el mismo tono de verde- me dijo mientras taconeaba un poco con el pie- Se clava un poco pero es precioso- y se rio un poco

Sin más dilación, pero aparentando normalidad, salimos de la tienda y nos reunimos con el resto de grupos… Yo mire a Sergi, se le notaba raro…

Pero el pájaro distrajo mi atención y en poco tiempo mi mirada estuvo inundada por su zafiro… El color de mi vida y de mi muerte…

Dani

Me seguía sintiendo mal… Durante toda la salida apenas si había hablado con Sergi… El actuaba como si fuera invisible… Y eso me dolía mucho… Después de la salida de la fábrica fuimos a un pequeño embalse en el que confluían varios canales… Allí nos esperaban tres góndolas…

La gente se emociono un poco, seguíamos siendo los mismos del anterior grupo dado que nos reuniríamos ya todos para ir al hotel dentro de una hora u hora y media… Pronto atardecería. Nos repartimos sin dilación, dado que nuestro grupo y el de Adri se repelían un poco, el nuestro ocupo una góndola, a excepción de Alex que se sentó junto a María… Eso fue una patada en el estomago, Alex no solía hacer mucho caso a sus exs pero con María era diferente, se mostraba más desenvuelto con ella a pesar de haber roto… Tal vez sea porque la quiere, pensé amargamente

Ya estaba acostumbrado a darme cuenta de que nunca tendría a Alex… De que nunca me besaría o de que nunca me susurraría un Te quiero al oído…Pero aun así… Dolía… Y mucho… Porque era un amor no correspondido… No porque tuviera pocas probabilidades de salir bien si no porque directamente no había ninguna… Porque aspiraba a un trofeo sin si quiera poder participar en el torneo donde se ganaba… Era tan injusto sentir algo tan precioso por alguien y que se eche en cara de una forma tan cruel y sádica…

Entre en la góndola inmerso en esos oscuros pensamientos que solo ahondaban el dolor de mi pecho… Me senté en la cabecera al ser el más pequeño, detrás mía entraron Sergi y Gabi seguidos de Valle y de Carlos que movía en sus manos algo que se había comprado en la fábrica. El gondolero en la parte de atrás dijo algo en italiano y comenzamos a movernos los primeros dejando a los demás pronto atrás. Me medio gire sintiendo el aire rozarme la cara, nos movíamos por un canal estrecho, Gabi y Sergi hablaban un poco, no mucho pero lo que si hablaban me dejaba totalmente al margen de la conversación… Me sentía fatal y mis ojos fueron a las negras aguas de los canales intentando aunque fuera de ese modo ahogarme en ellas y dejarlo todo atrás

La góndola se deslizaba rápida en las aguas del canal, silenciosa como una navaja de filo cortante… Mire a Sergi este evitaba mirarme mientras hablaba con Gabi, a este se le notaba incomodo con la tensión que palpitaba en el aire y alternaba miradas preocupadas entre Sergi y yo pero no intentaba actuar ni hacer nada… De haber hecho cualquier cosa solo lo hubiera empeorado… Sergi… ¿Qué te pasaba?...

La góndola cobro velocidad de repente y yo sentí el aire en mi nuca revolverme el pelo. Sergi seguía hablando con Gabi… Salimos al canal principal con un potente giro… Vi como toda la góndola se inundaba con una luz anaranjada y cálida, oí la frase de Sergi morir en sus labios y vi como me miraba directamente… Yo me quede un segundo quieto con el corazón palpitándome fuerte… Era la primera vez que Sergi me miraba directamente en todo el día y parecía estar absorto en algo… Cautivado…

-¿Qué pasa?-pregunte yo un poco tímido

Vi como Sergi tragaba saliva con dificultad

-El atardecer es… es…- empezó a decir- Es precioso….-

Yo sentí como mi corazón se desangraba por dentro… Como se rompía y como el dolor del pecho se hacía insoportable… Parpadee con fuerza al sentir las lagrimas en mis ojos… Sergi no me había estado mirando a mi… Si no al atardecer… Me seguía evitando y para él seguía sin existir… Me gire de golpe mirando ese maldito sol poniéndose que había causado esto… El dolor manaba de su luz dañándome los ojos pero… ¿Qué era fin de cuentas un poco mas?... Al menos este si entendía de donde venia….

Al menos sabía que sufría por amar a Alex…

Al menos sabía que me dolía mirar al sol directamente…

Pero lo que no sabía es porque lo de Sergi me estaba destrozando de esta manera…

Apreté mis manos en puños para controlar la cuadratura de mis hombros… Para evitar el sollozo… Para contener las lágrimas…

A pesar de ello una se escapo rodando por mi mejilla de manera silenciosa, como la góndola sobre las aguas del canal… Con la luz del atardecer haciéndola relucir como estrella…

Gabi

Sabía que Sergi no había estado mirando el amanecer… Había estado mirando a Dani… Pero le había mentido… A mi lado Sergi seguía con la vista calvada en la nuca de Dani mientras su mano en su bolsillo movía algo en el… Su otra mano cerrada en un puño y su mandíbula tensa… Tratando de controlar el dolor… Tratando de controlar el amor… Y fracasando completamente en ello

Gire mi cabeza para verle mejor… Y vi una lágrima caer por su mejilla… Sin sollozos… Sin ojos rojos… Sin nada… Solo una lagrima y ya está… Solo una lagrima que era prueba palpable de todo lo que sufria por dentro…

Agache mi cabeza para no verle… Aunque no lo dijera sabía que Sergi no quería que le viera en este momento…

Le deje solo con su amor… Solo con su dolor… Solo con Dani…

Solo con el atardecer sobre Venecia como testigo…

-----

Espero que os haya gustado jajaja os animo a comentar que aunque este castigado me metere a escondidas a cotillear por TR jajaja Y para los que quereis mas os pido que espereis jajaj sed pacientes que este viaje solo acaba de comenzar....