Carpe Diem V: Vista atras

Nunca debes mirar atras, dice la gente y la mayoría de las veces es facil, pero a veces el dolor es tan profundo y los recuerdos tan fuertes que a veces es imposible no recordar...

Como siempre os pido que comenteis, esta obra es tanto vuestra como mía y vosotros me ayudais a contruirla, vuestras ideas son valoradas y algunas me han resultado interesantes. Leo cada comentario con atención y trato de mejorar. Espero que os guste este relato algunas escenas han sido dificiles y os pido vuestra sincera opinión... Gracias a todos los lectores de Carpe Diem de corazón... !Ey! ya son mas de 10.000 visitas en Carpe Diem I... Cometad sin miedo, siempre necesito vuestra ayuda

Carlos

Hola, soy Carlos Lopez y ya era hora de que nos presentaran formalmente. Como ya os han ido diciendo soy alto, no tanto como Gabi y desde luego como Sergi pero mas que Alex,Valle y por supuesto Dani. Estoy bastante bien y me encanta ir sin camiseta para que todos vean el cuerpazo de gimnasio que tanto esfuerzo me ha costado conseguir, además desde este verano se ha añadido el hecho del tatuaje, me encanta enseñarlo y el efecto que da sobre mi enorme pecho y mi fuerte hombro me encanta, le vi un tatuaje igual a uno de los tios del gimnasio hace un año y me quedé enamorado ( del tatuaje, no del tio). También soy gay, lo llevo bastante bien dentro de lo que cabe y tampoco es que el hecho de ser gay en si me quite el sueño, no lo sé a ciencia cierta pero si Valle o alguno de mis amios me lo preguntara directamente pues a lo mejor se lo diría... Lo que me quita el sueño y lo que será el tema de este relato es, como la mayoría supongo que habries supuesto, Adri...

Miraba por la ventana de mi habitación, el cielo plomizo estaba surcado de nubes creando un filtro para la luz y oscureciendo un poco el ambiente. A traves del cristal notaba el frio erizándome la piel, siempre duermo en boxers en invierno y desnudo en verano, el frío invernal empezaba a calar ya y los dias de dormir desnudo y los de ir sin camiseta por ahí se estaban acabando. Suspiré y pegé mi frente al crisal, se veía la parte interior de mi urbanización, la piscina cubierta y los arboles cada vez más deshojados, el frio me ayudaba a pensar mejor. Era sábado y como cada sábado se supone que habíamos quedado para ir al centro de Madrid y pasarlo bien pero me encuentro con que Dani tiene fiebre, Valle se tiene que quedar a estudiar, Gabi necesita seleccionar y tirar la ropa vieja y Sergi tiene que preparar la comida para su madre que vuelve de trabajar a la noche y Alex... bueno yo no lo comprobé pero seguramente estaría con Nati... De modo que estaría solo todo el dia, pues que bien... Volví a suspirar

Sergi

Oí el timbre y fui hacia la puerta con paso ansioso. Al abrirla me encontre con Gabi apoyado en el marco de la puerta y cotilleando su movil, su genial brazo se flexionaba acolchando su postura de forma perfecta, llevaba una de sus camisetas viejas que se le pegaba al cuerpo y unos vaqueros sueltos que enseñaban la goma de los boxers. Le miré y sonreí, Gabi dejó el movil y guiñandome el ojo pasó. Cerré la puerta, Gabi estaba cruzado de brazos mirandome y marcando músculo

-¿Empezamos?- me dijo

Yo no le respondí me acerqué a él y le besé, Gabi me abrazo pegandome a él. Me separé de él y hablé contra sus labios

-Tengo que hacerle la comida y la cena a mi madre...- dije- Puedes ayudarme y luego te prometo que follaremos-

-Nunca he cocinado- me besó suavemente- ¿Y que la haremos?-

  • Ya lo verás...- nos volvimos a besar

Carlos

Salí del portal con paso tranquilo, llevaba un abrigo negro que se me pegaba al cuerpo y de forma ma suave que las camisetas se abultaba por mi cuerpazo. Al salir un aire glaciar me recorrió entero, el frio ya era muy intenso, el gris plomizo del cielo se contagiaba a la luz que filtraba dándole un aspecto deslustrado a las cosas. Salí al interior, apenas había nadie, el frío era muy buen repelente. La mañana era fresca y gris... Demasiado gris. Pasé al lado de la piscina aún no estaba cubierta y el azul del agua y del fondo parcía ser el único color que se beneficiaba de la fría luz... Era tan azul, de color zafiro como sus ojos, agité la cabeza desterrando esos pensamientos, no quería pensar en eso ahora aunque sabía perfectamente que como siempre acabaría pensando en él... En mi amor

Salí de la urbanización y dirigí mis pasos al azar, caminado si rumbo mientras mi mente vagaba. Pensé en Valle, era como mi hermano y nos habíamos criado juntos entendía cada pequeña reacción y supe que algo le pasaba, era muy sutil y se le veía feliz de modo que decidí no presionarle, también pensé en Sergi se le notaba más callado y pensativo como si algo le comiera por dentro, se lo comenté a Valle y me dijo que Dani decía que le pasaba algo, Valle opinaba que el le veía normal pero también Valle era el tio al que una tia podía sobrale todo el paquete desnuda y gimiendo y no pensar que quería algo con él... Mi amigo era demasiado inocente, demasiado despreocupado, nunca había sufrido y eso le había echo quedarse en un estado de incomprensión emocional... Yo si había sufrido y mucho, demasiado como para pasarlo por alto. En público me comportaba como Valle y cuando eramos pequeños eramos dos gotas de agua en cuanto a personalidad... Pero yo maduré antes, yo maduré demasiado pronto... El divorcio de mi padres a mis trece años ayudó, mis padres me tuvieron muy jóvenes cuando aún eran novios y la presión de mi nacimiento obligó a mis padres a casarse, los primeros años fueron buenos se amaban pero pronto el amor temperamental de la juventud fue dejando paso a un resentimiento tácito, mis padres no estaban echos el uno para el otro, todo debería haber acabado en un noviazgo fugaz pero yo lo fastidié todo... Comenzaron a discutir al principio por la noche cuando creían que dormía pero luego durante el dia delante mía o a gritos en su habitación... Lo pasé muy mal creía que era culpa mia, creía que yo lo provocaba, hoy en dia lo sigo pensando... A los trece años mis padres se divorciaron, mi padre se quedó conmigo y mi madre por trabajo renunció a la custodia... Se que mis padres me quieren pero aún asi...

Entré en un descampado, el aire frío dejaba de ser refrescante para calar los huesos, me arropé en el abrigo... Había madurado demasiado en demasiado poco tiempo, el divorcio de mis padres ayudó pero no fue eso lo que me obligó a hacerlo... El aire era tan frío, tal vez con suerte nevara, casi nunca nevaba en Madrid... Nieve... Sin poderlo evitar comencé a recordar...

---Hace tres años---

-!Una pelea de nieve!- dijo Valle a mi lado mientras brincaba de la emoción

-Vamos- dije yo mirando a mis amigos

-Si- coincidió Alex

Gabi como siempre solo asintió

-Nunca he hecho una- dijo Sergi mirando el maremagnum del descampado- ¿Y tu Dani?-

-No- dijo mi amigo, estaba pegado a Sergi como si despues de tres años siendo mi amigo aún le diera verguenza estar con nosotros

Sergi le pasó el brazo por el hombro, parecía su hermano mayor. Valle me cogió del brazo

-Vamos tio corre- dijo- !Que se va a acabar la nieve!-

Fuimos corriendo, el descampado era muy grande y estaba a rebosar de nieve, por lo menos de medio metro de espesor. Era alo muy raro ver nieve en Madrid y mucho más en esas cantidades. Había montones de niños jugando con ella, reconocía a muchos, los había de todas la edades... Cuando nevaba hasta el más maduro se vuelve niño otra vez. Valle a mi lado corría con los ojos brillantes, el pelo dorado le caía sedoso sobre la frente, su cuerpo de espaldas anchas pero aún así delagado se movía como el rayo, me giré detrás nuestra Alex y Gabi corrían como locos, Gabi era mas alto que yo y daba un poco de miedo hablarle y Alex con su cuerpo delgaducho destacaba a su lado. Detrás de ellos iban Sergi y Dani andando tranquilos como si disfrutar del pasisaje fuera mejor que la pelea de nieve, Sergi tenía el brazo sobre los hombros de Dani. Llegamos al centro y nos reunimos todos

-Hay que hacer un montón de nieve- estaba diciendo Alex emocionado- Y así podremos coger mucha más nieve-

-Tardaríamos mucho- dijo Valle- Mejor que cada uno coja la nieve que necesite...-

-¿Y si uno hace las bolas de los demás?- pregunté removiendome incómodo quería empezar ya

-Yo las hago- dijo Dani mirando con sus ojos verdes abiertos al maximo a nuestros compañeros perseguirse y lanzarse la nieve-

Sergi le miró

-Pero así tu no tirarás ninguna- dijo serio- No, cada uno se hará las suyas-

Yo suspiré, Valle fue a protestar pero Gabi le paró

-No hay tiempo- dijo mi amigo agachandose y cogiendo nieve entre sus brazos- Vamos...- comenzó a amasar

Valle se lanzó al suelo mientras hacía bolas como loco, Sergi se había colocado en cuclillas y Dani a su lado parecía terner miedo de que le dieran aunque supongo que en realidad era miedo a conocer gente... Dani era muy tímido, cuando Sergi se alzó Dani se pegó a él de forma inconsicente, Sergi le miró y sonrió mientras agarraba a Dani de la mano y le movía para esconderse detrás de una roca para tirar las bolas. Alex tenía ya dos proyectiles en la manos, Gabi uno y Valle como unos siete a sus pies y dos en sus manos. Yo les miré, se miraron entre ellos, asintieron y se metieron de golpe en la pelea. Yo miré las bolas de Valle... Que inconsciente, me agaché y cogí dos. Estaba solo y parado y eso era muy peligroso, me moví en zigzag mientras corría, las bolas volaban sobre mi cabeza o a escasos centímetros de mi cuerpo. Corría rápido, tenía fuerza en las piernas y a pesar de ser delgado tenía las espaldas anchas y fuerza en los brazos

Vi a una chica, tendría unos quince años, estaba desprevenida. Cogí la bola y la alcé poniendo en juego toda mi juvenil musculatura la lanzé, la bola se estrlló en su cadera, la chica alzó la cabeza y me miró. Yo me reí y me escapé, las bolas no me tocaban... Era el maldito amo... Vi a Valle revolcandose por la nieve con Gabi al lado suya lanzándole bolas, parece que la alianza se había roto... Alex cubierto entero de nieve se batía en un duelo personal con una chica de nuestra edad. La roca de Sergi me pillaba de perfil y vi como mi alto amigo se agazapaba mientras Dani se agachaba y como loco le hacía bolas... Sergi le miraba trabajar absorto como si él fuera más interesante que la pelea... Que bobada

De repente sentí una bola en todo mi pecho, justo en el centro, lanzada con fuerza. Me quedé quieto, alguien me había dado, no debía distraerme... Me moví para evitar más golpes mientras mis ojos recorrían el blanco paisaje buscando al responsable. Vi a un chico a unos cinco metros de mí, me miraba sonriente y supe que había sido él. El chico se giró y dijo algo a un amigo suyo y se fue corriendo a otra zona. Yo le seguí me había dado y eso exigía venganza, en mi mano la nieve seguía allí congelandome la mano desnuda. Le perseguí sin que se diera cuenta, el chaval era rápido y costaba seguirle pero yo aprovechando los entrenamientos del equipo de futbol conseguía mantener el ritmo. Se fue a una zona desierta, allí la nieve era mas espesa y formaba una pequeña cuesta que apilaba la nieve como una pequeña montaña

El chico se paró y la subió, yo me escondí bordeando la base para que no me viera. Vi como el chico se agachaba y como comenzaba a hacer mas bolas. Yo me moví por la nieve sigiloso con paso rápido y constane, costaba subir solo con la fuerza de las piernas y al hacerlo sudaba un poco. Llegué casi a la cima, allí el chico estaba de espaldas a mi, de cuchillas y absorto en su trabajo. Tenía una espalda fuerte, el pelo de color negro despeinado por la pelea... Mi mirada se movió por su abrigo negro, se le pegaba al cuepo y sin saber como le miré el culo, estaba marcado por la posición y lo miré detenidamente, aparté la mirada tras largos segundos de contemplarlo. Que narices me pasaba... Me alzé detras del chico y cuando este comenzaba a alzarse le estrellé la bola en la nuca, lo hize con delicadeza algo que también me sorpendió. El chico se giró a una velocidad increible, me miró. Era unos centímetros mas alto que él, tenía la piel morena y los ojos de un raro color zafiro, su boca estaba curvada por la sorpresa en una sonrisa, sus finos labios rojos por el frío me llamaron la atención, su pelo de aspecto sedoso tenía pequeños trozos de nieve por él y le daban un aspecto curioso

-Tu eres al que dí antes- dijo

Yo asentí

-Si- le dije- Esta es mi venganza-

El chico se rió, tenía una risa preciosa, cristalina y los dientes blancos resaltaban con su piel morena

-¿Se acabó la venganza?- me preguntó sonriendome

Iba a decir que si cuando una idea fugaz me pasó por la cabeza, era muy rara y nunca la había tenido pero por alguna razón mi corazón palpito un poco más fuerte

-Aún no- dije y retrocediendo un poco le sonreí- Alla va la parte final...- me lanzé sobre él

El chico alzó las cejas, le había visto en acción y sabía que de querer se apartaría. Pero no lo hizo, se quedó quieto, mi cuerpo chocó contra el suyo. Sentí sus brazos agarrarse a mi e imitandole hize lo mismo, su cuerpo era delgado pero aún así se notaba duro. Perdimos el equilibrio y como yo esperaba caímos de la montaña de nieve, rodamos por ella. La ladera tenía una pendiente suave de modo que la caida duró un poco más de lo normal, sentí la nieve por todos lados, fría, durante la caida apreté el cuerpo del chico y sentí como él hacía lo mismo. Acabamos de rodar y nos quedamos tumbados sobre la nieve, al otro lado de la montaña, en la cara oculta donde no nos veía nadie. El estaba sobre mi, con los brazos a ambos lados de mi cabeza, yo con mis manos en su delgada cintura. Respirabamos fuerte, sentía el calor de mi cuerpo y el del suyo frente al frío ambiente, vi que sudaba un poco, igual que yo. Jadeó un poco y se rió, sentí su cuerpo vibrar con esa risa que me encantaba, clara y diafana. Me miró y me sonrió, yo le imité

-Ha sido genial- me dijo

-Es verdad- coincidí con él, aunque para mi lo verdaderamente bueno era esta posición y eso era lo raro...¿Que me pasaba?

El chico me sonrió

-Me llamo Adrián- dijo-Pero todos me llaman Adri- su tono era afable y cálido

-Yo soy Carlos- le dije y sin poderlo evitar le apreté mi cuerpo contra el suyo

-Vamos a descansar un poco Carlos- me dijo Adri- Y luego haremos mas bolas-

-Vale- dije yo, sentía mi corazón en la cabeza, lo achaqué al cansancio... Aún era demasiado inocente como para entender nada más

---Actualidad---

Suspiré y le di una patada a una piedra. Estaba en el descampado en la misma zona donde antes se alzaba la montaña de nieve, miraba un trozo de tierra, el lugar de mi primer encuentro con Adri. Tenía las manos en los bolsillos del vaquero, el abrigo negro me reconfortaba pero casi desaba no tenerlo... Apreté los puños en los bolsillos y bajo la tela del abrigo mis brazos abultaron duros y firmes... Cerré los ojos con fuerza, muchas veces he deseado volver atrás, impedir conocerle de ese modo, impedir si quiera verle o hablarle... Impedir que me empezara a enamorar de él...

Sergi

-Ahora pones el fuego y los dejas...- le dije a Gabi- Así..-

Gabi se rió y se limpió las manos en un paño. Estábamos en mi cocina, preparando nuestra comida y la de mi madre. Es exagerar mucho decir que se cocinar, se hacer unos pocos platos pero los que se hacer me salen muy bien. Gani me miró, yo estaba apoyado contra la encimera mirando a mi folloamigo trabajar

-¿Y ahora?- me preguntó

-Ahora tenemos como media hora- le dije

Gabi asintió y sin decir nada más se quitó la camiseta. Su fuerte torso quedo al aire en apenas quince segundos, su piel blanca, sus musculos duros bajo ella, sus increibles pectorales con los pezones semierectos, sus vaqueros caidos un poco dejando ver sus boxers. Mi polla se despertó un poco, yo miré a Gabi a los ojos. El pecho no me dolía, desde ayer no había visto a mi peque y no tenía necesidad de hacer nada con Gabi pero tener ese cuerpazo delante mia era muy tentador...

Me acerqué a él y nos comenzamos a besar, las manos de Gabi me recorrieron el cuerpo sobre la ropa y al llegar al final de mi enorme espalda me agarraron la camiseta, tiró de ella hacia arriba, yo me dejé quitar la ropa y gruñí un poco cuando tuve que separarme de Gabi. Las manos de mi amigo fueron a mis pectorales y me los masajeraon, yo me reí e inclinandome le mordisqueé el duro pectoral, bajé directo hacia su pezón, jugueté con él con los dedos, acariciandoselo hasta que estuvo erecto. Me acerqué y comencé a lamerlo, Gabi gimió un poco y comenzó a masajearme el cuello y los fuertes hombros... La punta se restregaba por mi lengua a cada pasada, algo que me encantaba, seguí lamiendo un poco más y luego alzándome volí a besar a Gabi, le empujé hacia mi habitación y Gabi se dejó guiar, sus manos me acariciaban mientras nos seguíamos besando, chocamos un par de veces y en todas Gabi gemía por la sopresa y profundizaba el beso, nuestros torsos se pegaban, sentí sus duros pectorales contra los mios y su trancazo erecto presionado mi polla en igual estado, llegamos a mi habitación y nos caimos sobre la cama

Gabi pasó a mordisquearme la oreja mientras yo repasaba ese cuerpazo con las manos. Su dura tableta era la que mas caricias recibía, era como acero, duro y firme pero cálida, no cedía a mis apretones. Gabi gemía y comnezó a gruñirme al oido

-Hagamoslo...-

-No hay tiempo- jadeé- Que se me va a quemar la comida..-

Gabi gimió de disgusto, yo coloqué mi frente sobre la suya, le acaricié el rostro

-Tranqui tio que en cuanto venga mi madre a comer y se vaya tendremos toda la tarde-

Gabi asintió y me besó suavemente

-Vale pero no te vuelvas a poner la camiseta hasta que venga tu madre-

Me reí y esta vez le besé yo

-Como quieras pero tu tampoco...-

Nos levantamos y fuimos a la cocina, de camino Gabi me abrazó y comenzó a acariciarme el torso de forma suave. Yo le dejé hacer, hoy era como unas minivaciones, sin dolor, sin ira, sin celos, sin amor... Solo deseo en estado puro, solo simple y dulce deseo. Un dia perfecto...

Carlos

Salí del descampado a paso rápido deseando no haber entrado nunca en él, los recuerdos se me cruzaban en mi cabeza... Cuanto deseaba tener a Valle allí conmigo o a Sergi o Gabi o Alex o Dani para distraerme, para despejar mi cabeza, para engañar a mi corazón... Pero nada servía, no debía haber salido hoy de casa... Los recuerdos siguieron golpeandome, apreté el paso intentando dejar atrás mi dolor... Pero no cedía seguía allí constante y eterno, inmortal y perpetuo, recordandome que aunque quisiera negarlo nunca dejaría de amarle... Y los recuerdos seguían...

---Hace tres años---

Llamé al timbre, esperé mientras oía ruidos al otro lado de la puerta. A los pocos segundos me abrió una chica de unos diecisiete o dieciocho años, llevaba cascos pero solo uno en el oido, hasta yo escuchaba la música que de el salía, tuve que admitir que era guapa pero me removí inquieto, tenía los mismos ojos zafiro que Adri

-¿Pu-puede salir Adri?- pregunté

-No, aún no, es muy pronto tiene que comer y...-

-!No Carla!- dijo una voz del salón salió Adri con un tazón de humeate sopa-Ya casi terminé-

-Que vuelva luego- dijo la hermana con cansancio

-No- Adrí cogió el tazón y se lo llevó a la boca, se lo bebió de golpe, al terminar me sonrió- Ya puedo-

-Eres idiota- dijo Carla- Te tuviste que quemar toda la boca... Vete- terminó arrebatandole el tazón vacio y colocandose los cascos- A las nueve y media en casa-

Adri salió disparado y se rió, yo como siempre me quedé tonto con su risa. Vivíamos en la misma urbanización y desde el invierno eramos amigos, desde el dia de la pelea con la nieve... Pasabamos mucho tiempo juntos, a la salida del colegio el iba con sus amigos y yo con los mios pero al llegar a la puerta de la urbanización nos poníamos a hablar como si no hubieramos estado separados. Adri me sacó de mi mundo personal con un golpe en la espalda

-Me he quemado la boca- se volvió a reir- Vamos fuera que me muero de sed... Ahhh como quema- fue al ascensor

Entramos, Adri se miró al espejo y sacó la lengua estaba más roja de lo normal. Yo le miré a él, su cuerpo delgado parecía no poder llenar aun su ropa, su piel con un suave moreno, sus ojos zafiro, sus dientes blancos, su pelo sedoso cayendole sobre la frente... Era tan... tan... No se me ocurría una buena palabra, solo guapo pero esa no podía ser, un chico no me podía resultar guapo... Pero es que lo era. Me pasaba algo, eso estaba claro pero no sabía muy bien que... Cada vez pensaba más en Adri y los momentos que pasaba con el se me hacían tan cortos a pesa de ser tan largos que siempre tenía ganas de mas... Siempre tenía ganas de él... Agité la cabeza, me pasaba algo pero no tenía ni idea. Adri me miró

-¿Estás bien?- me preguntó mirandome directamente, sus ojos zafiro eran muy profundos

-Creo...- dije yo- Que tengo fiebre- mentí, bueno no era una mentira tal vez una improvisación

Adri me miró, se me acercó yo era unos centímetros mas alto que él pero mi cuerpo comenzaba a muscularse por el futbol. Adri levantó la mano y antes de que pudiera parale la colocó sobre mi frente me quedé quieto, la piel de Adri era tersa y agradable, miré a Adri tenía el ceño levemente fruncido mientras miraba su mano, tenía aspecto concentrado... Suspiró

-No se si tienes fiebre...- dijo finalmente separando la mano- No se como lo hace mi madre-

Yo simplemente me encogi de hombros haciendo gala de una total falta de elocuencia. Adri me miró, el ascensor se paró

-Podriamos subir a tu casa por si acaso- dijo mirando las teclas de los pisos, alzó la mano para marcar el mio

Yo le paré. En esos momentos mis padres estarían discutiendo... Con el tiempo habia aprendido a ver las señales que indicaban una proxima discusión entre mis padres y simplemente me iba. No quería ir ahora a mi casa... Quería estar con Adri. El me miró cuando alzé la mano y atrapé la suya, de nuevo sentí su piel tersa y cálida, Adri me miró pero dejando que cogiera su mano

-No me pasa nada- dije yo- Seguro que el aire me sienta bien-

-Está bien..- dijo, me sonrió-Pero como te pongas malo y me lo pegues...- me apretó la mano suavemente- Vamos que llegamos tarde- salió tirando de mi mano para hacerme moverme

Yo le seguí, se estaba muy bien así, la mano de Adri enlazó los dedos con la mia. Salimos al aire de la calle, al luz le bañó entero y por un momento no puedo dejar de admitir que era guapo, muy guapo...

---Actualidad---

Entré en mi portal a pasó rápido y cerré de golpe, en el ascensor me desplomé contra la pared... Deseaba tanto tener a Adri allí, deseaba tanto volver a estar con él, deseaba tanto que dejara de dolerme... Suspiré mientras el ascensor subía. Le quería tanto... Y todo había salido tan mal... Vendería mi alma por que dejara de dolerme...

Sergi

Estaba concentrado removiendo el agua hirviendo y añadiendo la sal con cuidado cuando senti a Gabi abrazarme. Como prometimos ninguno de los dos llevaba camiseta, sentí su duro torso pegarse al mio y sus musculosos brazos alrededor de mi cintura

-Esto me recuerda a las duchas del gimnaiso- dijo tranquilamente, me recorrió el torso con las manos- ¿Te acuerdas?-

Yo me reí

-Maldito cabrón que miedo me hiciste pasar...- reconocí yo

-Pero nos lo pasamos bien- concluyó Gabi besandome el hombro, se colocó a mi lado e inclinando su increible cuerpazo contempló el agua burbujeante

-¿Que es?- preguntó

-La cena...- dije yo- Bueno aún falta mucho pero se podría decir que es la cena-

Gabi me sonrió y me palmeó la espalda apretandome el hombro luego

-No sabes lo que me pone verte cocinar...- su mano bajó por mi espalda hasta mi culo masajeandomelo suavemente- Crees que...-

El timbre le cortó yo le sonreí

-Es mi madre- dije, me acerqué y le besé- Luego, te lo prometo...- le apreté el paquete y lo noté duro- Ponte la camiseta y baja eso que mi madre nos llega por la cintura- bromeé

Gabi se rió, uimos medio corriendo a la habitación y nos pusimos las camsisetas bueno yo me la puse, Gabi se embutió en la suya,se había traido una de las viejas y se pegaba a su increible cuerpazo, los musculos se le marcaban una barbaridad... Gabi me sonrió y flexionó los brazos haciendo que sus musculos tiraran de la tela hacia atrás

-Te gusta ¿eh?- dijo

-Va tio para que mi madre espera- le regañé pero el pasar no me pude contener y paseé mi mano por su increible torso- Que bueno está cabrón...-

Gabi se rió, fuimos a la puerta, mi madre talonaba el suelo con el zapato me miró

-Ya era hora- dijo- Llevo la eternidad esperando...- miró a Gabi- Hola Gabriel-

Gabi y mi madre se saludaron y lo expliqué ( mas bien mentí) a mi madre diciendo que Gabi venía para ayudarme con un tema de Mates que no entendía y que estaría todo el dia. Mi madre felicitó a Gabi y me dirigió una mirada de : "Ya era hora" ( Joder tengo un seis de media en Mates pero para ella es como si fuera un puto cero). Entramos y la saqué la comida, mi madre comía poco y rápido, estaba muy estresada era abogada y en el bufete donde trabajaba estaban muy ajetreados. Por eso ella descargaba su estres como solía, es decir hablando

-Pues qe bien que Gabriel ese aquí para ayudarte- decía ella- ¿Que media tienes tu en Mates?- le preguntó a mi amigo

-Antes era ocho pero en el ultimo examen bajé un poco y ahora es siete y medio-dijo mi amigo

-¿Ocho?, que bueno. otra vez la mirada, suspiré- ¿Hoy no salís con los demás?-

-Hoy todos están ocupados mamá- respondí yo y cruzando una mirada complice con Gabriel

-Me he encontrado a la madre de Daniel de camino- me envaré en la silla, la madre de mi peque- Dice que está con Alberto ( Valle) en su casa jugando a la maquinita esa...- lo dejó en el aire

-A la Play- la ayudó Gabi tranquilo

-Esa, esa... Bueno dice que está con Alberto y que estará todo el día allí al parecer Mari está todo el día fuera... Depues de estudiar os podrías pasar a saludarles-

-Pues es buena idea...- dijo Gabi, me miró- ¿A ti que te parece?-

Yo no respondí, solo asientí sin haber escuchado la pregunta... Iba a ser un dia perfecto, un dia sin dolor... ¿Por que no podía tener ni un misero dia para descansar?... ¿Por que cada vez que intentaba avanzar el dolor me golpeaba haciendome retroceder dos pasos?... Mi pecho de nuevo volvió a dolerme, de forma lenta como si el dolor se regoderá triunfante de mi derrota, rodeó mi corazón y encogió mi estómago... Tragué saliva... Valle y Dani estaban en una casa, solos, durante todo el dia como yo con Gabi... Pero yo me iba a acostar con Gabi y tal vez ellos... Miré por la ventana girando la cabeza para no ver ni a mi madre ni a Gabi... Todo parecía perfecto, todo encajaba o parecía encajar y de repente todo se desmoronaba... ¿Por que?...

Mi madre terminó de comer y se despidó se puso de puntillas para besarme y luego salió disparada para volver al trabajo, volvería para la cena creo que me dijo al irse. Gabi la despidió en la puerta, yo seguía en mi silla mirando la ventana, intentando que mi dolor se reflejara en ella, intentando ver el rostro de lo que me corroía por dentro... El rostro de mi peque... Gani volvió al salón

-Bueno pues...- me miró- ¿Estás bien?-

Yo miré a Gabi ahora si que le necesitaba, tenía que desaparecer este dolor, ahogarlo en un mar de pasión y deseo. Forzando una sonrisa le dije

-Si tio estaba pensando que hacerte- dije yo, tal vez Valle y Dani estuvieran manteniendo esta conversación ahora, tragué saliva

Gabi se rió

-¿Y que se te ocurre?- me preguntó acercandose a mi

-No lo se son tantas ideas que...- Gabi giró mi silla, me miró con ojos ardientes

-Mientras se te ocurre algo deja que yo tome las riendas un rato...- me sonrió

Yo me levanté y me senté en el sofa, reclinadome en el respaldo, Gabi se sentó en el reposabrazos

-¿En que pensaste?- le pregunté

Gabi me giñó el ojo y se quitó la casmiseta, de nuevo su cuerpazo me impresionó, se inclinó hacia mi y me besó, fue un beso lento pero yo quería pasión. Le acaricié la lengua con la mia y la nuca con mi mano, me recliné tumabandome en el sofa con Gabi encima. Gabi aceptó de buen grado mi pasión y alzandose sobre mi me quitó la camiseta, me recorrió el torso con las manos y cuando lo hubo echo se agachó para hacerlo con la boca. Empezó por mi fuerte cuello, besandolo y lamiendolo, luego a mis pectorales con suaves mordiscos, siguió hacia mis pezones y los lamió un poco cada uno mientras que con sus manos comenzaba a masajearme mi polla dura a través del pantalon, pasó de los pezones haciendo resbalar su lengua por el canal de carne entre mis musculosos pectorales, pasó a mi tableta apretando mis abdominales de acero con la lengua y dejando que ella los acariciara y disfrutara de los cambio de nivel, fue bajando lentamente casi con reverencia religiosa por mi tableta, pasó mi ombligo que besó y dejó su boca en el incio del pantalon, mi polla se presionaba contra los vaqueros, estaba colocada hacia una lado y mostraba su genial extensión aún incluso bajo la restrictiva tela vaquera, Gabi me desabrochó los pantalones pero no me los bajó

Pasó la boca por encima de donde se adivinaba mi polla, rozando la tela cuando llegó a la punta la presión con los labios, yo gemí y Gabi empezó con el recorrido inverso esta vez apretandome suavemente la polla con los dientes y los labios, arrancandome gemidos de placer al notar ambos amortiguados sobre la tela como un suave masaje. Gabi seguía con su tarea haciendo nuevamente otra pasada, tenía los ojos cerrados, yo apoyandome sobre los codos me alzé un poco. Contemplé sus fuertes y redondeados hombros flexionandose con las pasadas de su boca, su maciza y herculea espalda, moviendose felxionandose y marcando un suave canal que le recorría la columna acabando en su caderas. Sus fuertes brazos le sustentaban mientras se movía y las venas que los surcaban se marcaban de forma suave alimentando esos increibles musculos... Gabi pasó una ultima vez y luego con un suave gruñido me bajó los pantalones y los boxers

Mi pollón saltó y Gabi haciendo gala de unos reflejos increibles se apartó para evitar ser golpeao por esa vara de carne candente, mi polla cayó sobre mis abdominales, yo gemí al sentirla libre. Gabi se siguió alzando y comenzó a lamerla todo el tronco, desde la base hasta la punta en donde juguetaba con su lengua, una de sus manos pasó a acairciarme la tableta apretando suavemente y sintiendo la dureza de mis abdominales. Yo moví una mano para acarcialre la nuca y comenzar a masajearsela... El dolor cedía terreno de forma lenta pero constante... Gabi agrró mi polla y comenzó a pajearla de forma lenta, lamiendo el glande, yo gemi y me tumbé del todo dejando mi mano masajeando uno de los enormes hombros de Gabi. Gruñendo algo por lo bajo Gabi se la metió en la boca, sentí sus labios bajando la piel y su mano en la base de mi pollón aprtandome la base

Su lengua se enroscaba entorno a mi polla cuando bajaba y al subir me pajeaba haciendo ascender mi piel para volver a bajarla. El ritmo empezó siendo lento pero luego cobró velocidad a medida que la boca y la mandibula de mi folloamigo se abrían para abrcar mi pollón. Cerré los ojos por el plecer, desde luego Gabi le había cogido el truco. Su mano seguía en mi base alternado los apretones con suaves caricias, mi polla palpitaba por la mmada como loca marcando el ritmo a Gabi, mi mano se movió de su hombro a su nuca al igual que la otra. Le masajeé la nuca disfrutando del tacto de su corto pelo, Gabi ya había alcanzado un ritmo rápido pero no pude resistirme a empujarle la cabeza para follarme su boca. Gabi lo entendió y me dejó hacer, destensó el cuello y los homrbos dejando que yo guiara las operaciones, le agarré la cabeza y desde entonces comenzé el mete saca, al principio tanteaba de forma un tanto lenta por si Gabi daba muestras de arcadas o incomodidad pero desde luego mi amigo sabía chuparla... Profundicé más hundiendo mi polla hasta casi la base, Gabi se contrajo un poco y anoté su limite en mi mente, era muy bueno casi todo mi pollón... Se la saqué y sin volver a rebasar el limite pude follarme su boca con tranquilidad y velocidad. Le miré apoyando mi cabeza en el reposa brazos, era un poco incomodo pero la visión lo merecía

Su fuerte espalda contrayendose cuando bajaba y subía, la flexión de sus hombros, sus ojos cerrados, su piel balnca en contraste con la morena de mi polla, las suaves venas que bombeaban la sangre necesaria para alzar mi pollón... Comencé a gemir y noté como Gabi me imitaba, no pude contenerme

-Joder que gusto da...- dije- Me encanta follarte la boca...ahhh...ahhh-

Gabi solo gemía, mi polla palpitaba, la mano de Gabi fue a su base y comenzó con los partones pero esta vez con mayor fuerza, dadndome más placer

-Si no pares...- gruñi- Joder que buenos estas... Que gusto-

El dolor no estaba lo había parado antes de que llegara a más y eso me hacía feliz, anticiparme a él, cortarlo aunque luego volviera a salir era una pequeña victoria, una pobre recompensa pero era lo que me pedía a gritos el corazón en estos momentos. Me agité moviendo las caderas para aumentar el ritmo, ya no podía más, ya venía...

-Me voy a correr...- dije yo- Quiero correrme en tu boca- terminé

En ningún moemento Gabi hizo intención de parar y supe que el también lo quería... Joder que suerte tenia con Gabi...

-Ya va... ya va...- aparté mis manos y le apreté los hombros, Gabi gemía como yo

Y descargué, unos seis trallazos, no se... Estaba demasiado excitado como para contarlos, lo impotante es que Gabi lo aguantó como un puto campeón. Se tragó todo y seguía apretandome la base mientras tanto forzando hasta la ultima gota a salir. Gemí y luego suspiré, Gabi se deslizó hacia al suelo y cayó, dandose la vuelta se rió, su polla se notaba dura contra sus vaqueros, yo le miré, su fuerte pecho, una fina capa de sudor haciendole brillar, su increible tableta y sus torneados pectorales. Me moví y me tumbé encima suya, Gabi me besó, noté los restos de mi lefa y los saboreé, en estos momentos yo ya estaba desnudo, Gabi me masajeó el culo, al separarnos se volvió a reir

-Joder tio casi me ahogas- dijo- Era demasiada lefa-

-Pero aguantaste toda- dije yo- Maldito cabrón eres el amo- le volví a besar

-¿Te ha dado tiempo a pensar algo?- me preguntó y comenzó a mordisquearme el oido

Yo me retorcí de placer sobre él y me aparté para poder hablar

-Tal vez...- dije yo apoyando mi frente en la suya- ¿Quieres darte una ducha?

Gabi se rió y aceptó con un nuevo beso. Yo sonreí interiormente, el dolor no estaba... Todo volvía a ser normal...

Carlos

Me derrumbé en mi cama, mi padre se había ido a una reunión de última hora... Los recuerdos no paraban y lo peor es que cada pequeña cosa, cada mínimo ruido o cada estúpido acto mío me llenaban más y mas de recuerdos, quería que parara daría mi vidad porque parara... Pero no lo hacía, los recuerdos me traspasaban como puñales, mi corazón latía por y para él... Y con latido se desangraba más... El dolor que había sido el telón durante estos años se me caía ahora de golpe dejando salir todo lo que intentaba selllar... Y los recuerdos seguían...

---Hace tres años---

Valle se movía sobre mi cama al lado mía, estaba frenético. Los dos estabamos sin camiseta y una fina capa de sudor nos recorría el cuerpo, contemplé el cuepo brillante de mi mejor amigo. Los entrenamientos habían comenzado a muscularle y ya se le notaban los abdominales de forma suave, sus pectorales comenzaban a alzarse sobre su pecho y hasta sus brazos tenían una suave vena... Su pelo dorado se pegaba a su frente, su mano estaba caida a su lado mientras que la otra le pajeaba. Su polla tenía un color moreno como la mía pero yo le ganaba por un par de centímetros, tenía como yo los pantalones y los boxers por las rodillas, su mano llevaba un ritmo rápido dejando ver que pronto se correría... Yo aparté la vista y me centré en mi paja, el cuepo de Valle seguía atrayendome pero cerrando los ojos me centré en quien realmente quería... Sus ojos zafiro, su cuepo atlético y delgado, su risa cristalina, sus blancos dientes... Adri... Valle a mi lado comenzó a gemir

-Yo ya casi Carlos...- dijo- Si...- y gimió

Yo no pude evitarlo y entreabriendo los ojos vi su leche bañarle, su juvenil torso quedó manchado. Valle suspiró y yo retomando a Adri me corrí gritando su nombre para mis adentros. Y eso era todo lo que podía hacer, guardarmelo dentro de mi... Hace dos meses por casualidad oí la palabra homosexual y se lo pregunté a mi madre, ella me explicó detenidamente lo que era, aunque en resumen venía a ser un chico al que le gustaba un chico... Por lo tanto yo era homosexual, recordé además la expresión que usó mi madre para empezar su explicación : " A los chicos normales les gustan las chicas pero hay chicos que..."

Así que había una palabra que se relacionaba intimamente con homosexualidad y era anormalidad... Yo era homosexual y por ello debía ser anormal... Hace poco había visto X-men con mis amigos en el cine, ellos eran anormales pero les llamaban mutantes, en ese momento creí que mutante era mucho mejor que decir anormal pero tras consultar el diccionario en casa vi su definición: que sufre una mutación, es decir, que presenta un funcionamiento anormal y pernicioso... Lo cual fue peor, ahora resulta que estaba enfermo... ¿Pero cuando puede enfermar?... Yo me sentía bien pero al parecer lo que yo sentía era una enfermedad, ya había visto a gente del colegio opinar sobre chicas y me había dado cuenta de que era el único al que le pasaba... Y eso dejaba otra pregunta, ¿si yo estaba enfermo debía haber más gente enferma?... Pero eso me dejaba otra pregunta: por mucho que yo sintiera esto por Adri creo que el no estaba enfermo, es decir, no era homosexual y eso me destrozaba por dentro, mas que el conocimiento de estar efermo, más que la certeza de tener que esconderlo...

Valle a mi lado suspiró y se estiró, yo le imité. Hace como cinco o seis semanas habíamos descubierto lo que los chicos mayores llamaban pajas y he de decir que eran increibles. Valle y yo las habímos descubierto juntos una tarde después de merendar mientras nuestros padres se tomaban algo en el bar... Fue un momento un tanto torpe por la inexperiencia pero había sido genial, al terminar tanto Valle como yo nos corrimos sobre el otro, nos habíamos mirado y nos habíamos reido jadeantes y felices. Desde entonces cada tarde Valle venía a mi casa y tras merendar nos hacíamos una o dos juntos y luego bajabamos a jugar a la calle... Mi madre ya no vivía con mi padre y conmigo, se había ido a otra casa y a veces iba a cenar con ella, mi padre decía que mama estaba muy ocupada por su trabajo y era más facil que durmiera más cerca de la empresa... Yo sabía que se habían separado pero no dije nada, ya me consideraba responsable como para encima sacar el tema...

-Te juro que cada vez me gustan más- dijo Valle bostezando un poco

-Ya te digo- dije yo

-Vamos a limpiarnos- dijo Valle, el chico era muy higiénico

Se movió sobre mi cama cuidando que los restos de su leche no la mancharan, yo le seguí. Al levantarnos nos miramos los torsos, mi cuerpo estaba un poco más musculado que el de Valle pero aún así ni de lejos llegaba al nivel de los chicos mayores como el hermano de Sergi o el primo de Dani. Me reí

-Yo gano- dije yo sonriente

-Espera...- dijo Valle

Yo sonreí más y moviendo mi mano coloqué mi dedo indice sobre el pecho de Valle justo por debajo de uno de sus trallazos

-Uno...- dije- Dos- moví mi dedo por su pecho disfrutando de que a pesar de no tener los musculos formados su torso era duro y firme- Tres y... Cuatro- terminé- Yo cinco- le mostré mi torso- Cuenta si quieres...-

Valle gruño por lo bajo y se fue hacia el baño, tantos sus boxers como sus pantalones resbalaron hasta el suelo. Me reí y le seguí, mi ropa acabó en el suelo, nos movimos con cuidado de no manchar el suelo. Su espalda ancha y su culo me atraían. Nos moviamos sin miedo mi padre trabajaba casi todo el dia, en el bañó Valle cogió el papel higiénico y comenzo a limpiarse, me pasó un trozo de papel. Yo le miré, fingía enfado pero conocía demasiado bien a Valle como para saber que dentro de un minuto estaría feliz otra vez. Y así fue, al terminar de limpiarse me sonrió

-Ey tio- dijo tirando el papel al vater- A Sergi le han comprado un nuevo balón de futbol-

-Hoy no puedo bajar Valle que quedé con Adri para ver una peli-

-¿A sí?- me preguntó

Yo suspiré

-Si Valle te lo dije esta mañana y antes de merendar-

-Ahhh es verdad- se rió- ¿Cual vais a ver?-

-Scream- dije yo- Dicen que no da miedo-

Valle se encogió de hombros

-Yo hubiera elegido Saw- a Valle le encantaban las pelis de terror, el cabrón nunca se asustaba

-No pienso ver eso con Adri- dije yo y luego pensé- Ni con cualquiera- añadí

Por suerte Valle ni se dió cuenta

-Como quieras tio- salió del baño

Fuimos a mi habitación Valle cogió sus boxers y se los puso yo contemplé su cuerpo mientras hacía lo mismo... Estoy enfermo, enfermo... Me repetía pero no podía dejar de mirar. Valle se echó la camiseta al hombro, los dos comenzabamos a coger la costumbre de ir sin camiseta en primavera y en verano. Me miró

-Ya te diré como va- dijo

-No llegues tarde- le regañé, no serviría de nada llegaría tarde

-Que si... Pareces mi madre- dijo- Además tengo que cuidar de Ana (su hermana pequeña), me la tendré que llevar conmigo-

En ese moemento sonó el timbre, Valle y yo fuimos a abrir, yo solo llevaba los pantalones, había dejado mi camiseta en mi habitación. Se que suena raro pero me gustaba ir así delante de Adri. Como supuse era Adri, tenía el brazo levantado para volver a llamar. Se envaró de golpe, Valle le saludó con un fuerte apretón en el antebrazo, Adri ya estaba acostumbrado a mi amigo y le correspondió aunque se le notaba un poco incómodo tal vez... Sonreí, Valle era demasiado alegre y explosivo para Adri... Conocía demaisado bien a mis dos amigos como para saber que nunca llegarían a entederse... Valle se despidió de los dos y tomando el ascensor por el que había subido Adri se fue. Adri me miró y sonrió, sus dientes blancos le daban una sonrisa perfecta y hacían que sus ojos zafiro relucieran... Estaba enfermo, me recordé y devié la vista

Me aparté para dejarle paso, los meses me habían echo un par de centímetros mas alto que antes y por ello Adri tenía que mirarme un poco desde abajo, me gustaba, eso me daba seguridad cuando estaba con él. Tras entrar ambos, cerré la puerta, Adri me miró sin camiseta, estaba un poco incómodo aún no se acostumbraba a eso. Le sonreí para relajarle

-Bien, bien- dije- ¿Quieres algo de comer o beber?-

Adri negó con la cabeza

-De momento no- me dijo- ¿Que peli vamos a ver?-

-Una de terror- dije yo- Scream- evité mecionar que no daba mucho miedo

Adri se tensó un poco

-¿No puede ser otra?- me preguntó tratando de parecer tranquilo

Con la confianza que da tener información privilegiada me acerqué a Adri y le pasé un brazo por los hombros. Había cogido el habito de hacerlo cuando nuestra diferencia de altura se agrandó hace unos meses. Adri ya estaba acostumbrado pero el echo de que no llevara camiseta le puso incómodo, me derretí viendo esos zafiro que tanto me gustaban... Unos ojos que no deberían gustarme...

-Tranqui Adri- le dije- Que estando conmigo no te pasará nada- le sonreí, le empujé suavemente hacia mi habitación

-Eso mismo dijiste de saltarse la clase de gimnasia y nos castigaron-

-Era Viernes y a última hora es que casi nos piden que nos escapemos- me justifiqué- Pero fue divertido ordenar la biblioteca-

Ya estábamos en mi habitación. Adri me miró furioso haciendole irresistible como el pecado

-Yo ordenaba tu solo te sentabas a mirarme-

No podría dejar de mirarte aunque quisiera, pesé sintiendome mal por ello

-Te ayudaba a mover los libros- dije y para lucirme me pasé la mano por el torso, no era musculoso como los de los mayores pero los pectorales se alzaban ya sobre el pecho y mi tableta estaba mas marcada que la de Valle

Adri se quedó mirando mi mano y luego me miró

-Podría habelo hecho solo...- dijo y se sentó en mi cama separándose de mi

Suspiré Adri era muy tozudo y cuando se le metía algo en la cabeza... Cogí el DVD de Scream y lo coloqué en mi tele nueva (era un regalo de mi madre que ahora se peleaba con mi padre para ver a quien quería más) a los pocos segundos empezaron los creditos iniciales. Bajé las persianas lo suficiente para que hubiera oscuridad pero no tanta como para que no pudiera ver a Adri, cerré la puerta. Y me tumbé en la cama apoyando mi espalda en la pared, Adri estaba en el borde mirando la tele. Contemplé su rostro de perfil, marcado por la cambiente luz del televisor creando un juego de sombras y luces y en el que solo sus ojos zafiro conservaban su color. Le vi saltar levemente al primer susto del asesino con una rubia creo... No prestaba atención al peli, solo miraba a Adri, como reaccionaba, cada pequeño movimiento de su atractivo rostro... Estaba enfermo, enfermo, enfermo... Pero era muy guapo...

Noté como la prefecta cuadratura de sus hombro se derrumbaba un poco por el cansancio, era una oportundiad y había que aprovecharla. Me sentí mal por pensar así, por dejarm earrastrar de ese modo

-Te estas cansando- dije- Ponte como yo-

Adri se giró para mirarme, debía de ser una imagen curiosa yo despatarrado en mi cama sonriendole y diciendole que se pusiera como yo... No sabría como describir la personalidad de Adri pero desde luego no me cabía duda que la palabra aristocrático estaría entre las que usaría

-Venga- dije palmeando la cama al lado mia- Estarás mas comodo, ademas la pared está fresca seguro que tienes calor-

-Vale- cedió- Estoy un poco cansado-

Se apoyó a mi lado y antes de que se terminara de colocar le pasé el brazo por el hombro, Adri no dijo nada. Solo se movió para apoyarse en mi, yo tragué saliva... Esto era algo con lo que llevaba fataseando mucho tiempo pero no podía terminar de la forma que quería...

La película seguía pero yo solo podía centrarme en Adri, en su respiración acompasada o en su sedoso pelo acariciandome la piel... Si no hubiera sido por la paja creo que estaría empalmado, llegó una escena bastante desagradable y Adri saltó mas por asco que por otra cosa. Yo me reí

-Si te da cosa mirar cierra los ojos- le dije

-No tengo miedo- saltó él

-Se que no tienes miedo Adri...- dije y sin poderlo evitar le besé el pelo, lo sentí estremecerse... Lo noté tensarse

-¿Por que has hecho eso?- me preguntó

-No sé- respondí sintiendo mi corazón en mi cabeza- ¿No te gusta?- le pregunté y por un momento quise que no respondiera, un si imaginario a veces es mejor que un no real

-Si...- respondió de forma timida sorpendiendome, por una parte la respuesta afirmativa me descolocó pero lo que me dejó en shock fue su tono tímido, Adri siempre era resuelto y decidido la timidez no le pegaba- Pero es raro-

-A mi me ha gustado - dije yo- Y si a ti también no es raro que lo hagamos...- seguí tragué saliva y de nuevo le besé el pelo-¿No crees?-

-Vale- dijo estremeciendose de gusto-Pero solo hazlo cuando estemos solos...-

Me reí, el apreté contra mi

-Claro que si Adri...- estaba enfermo y lo que hacía estaba mal, no era normal no estaba bien y eso me hacía querer gritar al aire...

---Actualidad---

Rodé por mi cama recordando ese precioso momento, era de mis favoritos. No podía dejar de pensar en el, los recuerdos fluían como un torrente imparable... Ese momento fue de los mas dulces pero no fue el mejor. Me levanté de la cama de un salto, dado que no podía dejar de recordar haría que lo hiciera lo mas rápidamente posible... Ya había pasado la hora de comer, no había desayunado ni comido pero no sentía hambre. Era como si los recuerdos me matuvieran en un estado de suspensión, como si mi mente solo puidera centrarse en el dolor, regodearse en él... Estaba enfermo, pensé en aquella época y era verdad pero no como yo pensaba... El amor es una enfermedad que te destroza y da la vida, que te rompe y te reconstruye... Pero a veces te quedas tan roto que ya nada puede hacerse...

Sergi

Gabi y yo rodamos por mi cama jadeantes y sudorosos, yo acabé encima suya e inclinandome le besé. Estabamos completamente desnudos ya y tras una sesión de mamadas en el salón habíamos ido a mi habitación para llegar al siguiente nivel...

-Follame...- me gruño Gabi contra mis labios

Yo le mordisqueé la mandíbula. Tras la follada de ayer me había traído el lubricante a escondidas para hoy

-El lubricante está en la mesita de noche dentro de una bolsa...- le dije lamiendole el oido, me separé un poco de Gabi- Cógelo tu-

Gabi se rió y se movió para cogerlo, caminando a cuatro patas llegó al borde de la cama y abrió el cajón. Yo me eché sobre el y comencé a acariciarle la espalda, disfrutando de sus firmes músculos bajo la piel blanca. Bajé por la espina dorsal con la lengua mientras le masajeaba las caderas, tenía una espalda fuerte e increible, musculosa y firme como si fuera un gladiador del Coliseo. Gabi buscaba el lubricante con una mano para no caerse, gemía suavemente

-Tio aquí no está-

Yo subí con la lengua por la mitad de su espalda haciendole arquearse por el placer, llegué al oido y se lo lamí con suavidad

-Busca bien...- le dije con los ojos cerrados y mordisqueandole la oreja

-Sergi no hagas eso...- me dijo- No puedo buscar...-

-Las cosas buenas cuesta conseguirlas- le dije tras meterle la lengua en la oreja, me aparté- Buca a gusto-

Despues de dejarle Gabi trabajó con velocidad y encontró rápido la bolsa, sacó el lubricante y me lo tendió

-Y esta vez no uses tanto- me dijo Gabi- Que el de la tienda me mira raro-

-Tal vez quiera algo contigo- dije yo, mi pollón llevaba empalmado desde que empecé a acariciarle la espalda- Tiratelo-

-No es mi tipo- dijo Gabi- Pero creo que haré una excursión a Chueca...- me sonrió- Te vienes-

Me reí terminado de extender el lubricante sobre mi polla que brillaba ya

-Lo siento tio- le dije- Contigo me basta...- dije en voz baja

-¿Te basto para que?-preguntó Gabi suspirando cuando pasé mis dedos extendiendo el lubricante por su culo

Para impedir que lo de Dani me doliera, pensé

-Para bajar los calentones- le dije, metiendo el dedo indice cuando terminé con el lubricante-¿Y yo no te basto a ti?- comencé a mover el dedo para dilatar

Gabi se rió pero su risa se cortó un poco cuando pasé al segundo dedo

-En bastantes cosas si... y de sobra- gemia- Pero en otras no-

-¿Como cuales?- pasé a besarle las caderas y la espalda

-Pues a la hora de follar...- dijo- Quiero ver como sería metersela a alguien- siguió- A menos claro que tu te ofrezcas-

-Lo siento tio- dije, la posición de pasivo no me iba, coloqué mi polla en la entrada de su culo-Pero si no te gusta ser el pasivo podemos dejar de follar y quedarnos en las mamadas y sobadas...- le dije, no quería que Gabi estuviera incómodo

Mi folloamigo se rió y con energico movimiento de sus caderas se hundió mi pollón hasta casi la mitad. Gabi gimió y se arqueó

-Soy pasivo y activo- me dijo Gabi- Soy versatil... ahhh-

Me reí, yo solo era activo y admiraba a Gabi por poder ser ambas cosas. Comencé a bombear agarrandole de las fuertes caderas de guerrero, su musculosa espalda se arqueaba con cada embestida, aumenté el ritmo. Gabi jadeaba de forma suave y supe que se estaba mordiendo el labio, mis manos resbalaron por su espalda y masajearon sus hombros que empujaron hacia atrás para aunmentar más el ritmo. De vez en cuando lo reducía para sacar mi pollón casi entero y ensartar a Gabi despues. El cabrón era un puto campeón, yo no podría meterme un pollón como el de Gabi o el mío sin retorcerme de dolor, el sudor comenzaba a recubir tanto mi cuerpo como el suyo haciendo brillar mis músculos y los suyos como si fuera aceite, volví a colocar mis manos sobre sus caderas y aumenté el ritmo pero aún no había llegado al tope que nuestros cuerpazos de gimnasio nos permitían y Gabi lo sabía

-Sergi mas fuerte...- me dijo Gabi- Joder más fuerte-

-Te vas a enterar- dije yo y poniendo en juego toda mis musculatura aumenté el ritmo de golpe

Gabi gimió y contribuyó moviendo sus caderás para hacerlo más rápido.Yo también comencé a gemir como loco

-Joder así...- dije yo- ¿Te gusta... mas así?-

-Siiii...- gimió Gabi

Mis manos en sus caderas las aprisonaban como tenazas y mis brazos como gruas hidraulicas guiaban el ritmo frenético de la follada. Una de mis manos se deslizó aprisionado su pollón, no hizo falta pajearle solo dejando la mano quieta y aprovechando el movimiento Gabi se follaba mi mano como un profesional. Los dos gemíamos y no me incliné pegando mi pecho a su espalda y clavandole mis erectos pezones, Gabi gimió y subiendo para arriba se pegó más a mi yo comencé a mordisquearle la oreja y a morderle los hombros. Gabi gruñía como loco, giró la cabeza buscando mi boca y nos comenzamos a besar ahogando nuestros gemidos contra los labios del otro. Mi polla apretada por el culo de Gabi palpitaba como loca y la de mi folloamigo hacía lo mismo contra mi mano. Mi lengua exploró su boca, acaricando su lengua y moviendose lentamente, Gani gemía y su lengua se enroscó con la mia, gemí por la sorpresa, mi pollón estaba proximo a la descarga, como un corazón al borde de un infarto, me separé de él

-Me voy a correr...- le dije, forzando al maximo mis brazos aumenté el ritmo hasta el limite

Gabi gemía, le ensarte de golpe, su culo apretó la base de mi polla y la estrujó haciendome gritar de placer. Me corrí al segundo bañando el interior de su culo con una abundante descarga... Cada trallazo hacía que el culo de Gabi me apretara más y nos sacudiera de forma espamódica como descargas electricas. Mi mano apretaba en cada descarga el pollón de Gabi y cuando yo iba por la mitad de mi corrida Gabi comenzó con la suya, su gemido de placer se unió al mio mientras los dos nos vaciabamos al unisono. Notaba sus trallazos recorrer su tronco como palpitaciones nerviosas, desde sus huevos pasando por la base hasta la punta y saltado desde allí al vacio. No solté mi mano y noté como la lefa la cariciaba un poco lubricandola, no pude contenerme y le seguí pajeando mientras se corría... Gabi gimió más yo termine mi corrida pero la de Gabi seguía, se arqueaba y jadeaba por pajearle mientras se seguía corriendo. Se alzó de golpe y giró la cabeza para besarme, le metí la lengua con violencia buscando la suya, los dos cerramos los ojos, notaba el fuerte pecho de Gabi vibrar con los gemidos que se perdían contra mis labios.... Y todo acabó, los dos perdimos toda la fuerza de nuestros musculazos y nos derrumbamos jadeantes, caí sobre Gabi. Mi folloamigo se estiró colocando las manos sobre su cabeza y yo alze las mias para entrelazar los dedos

Los dos nos reimos y yo le empujé con las caderas un poco

-¿Te ha gustado?- pregunté con los ojos cerrados

-Ha sido la puta ostia...-

Los dos nos quedamos así, hablando del Instituto, de los examenes... Como si nada de lo acababa de pasar fuera real, como si todo fuera un sueño perfecto... Un mundo sin dolor

Carlos

No podía mas tenía que recordarlo todo para que acabara este dia de perros... El dolor se hacía insoportable y solo recordandolo todo se volvería tolerable, se volvería como siempre un dolor sordo más llevadero... Mi dolor se había vuelto lo único que me recordaba día tras dia, hora tras hora, segundo tras segundo, como un corazón imparable, que estaba enarmorado, que no podía hacer nada para impedirlo, que nunca pararía de sufrir... El amor, el dolor y los recuerdos se mezclaban haciendome revivirlo todo...

---Hace tres años---

La noche era cálida y en el descampado eramos como treinta chicos. En esos momentos discutiamos, vi como Sergi hablaba con otro chaval sobre que jugaríamos... A mi lado Valle estaba inquieto, le miré

-Estate quieto- le regañé

-Quiero jugar...- dijo el justificandose- ¿Por que tardan tanto?-

Yo suspiré y me moví para dejar a Valle con su impaciencia. Cerca mia vi a Gabi como siempre cruzado de brazos y mirando sin intervenir, cerca de él Alex hablaba con una chica de nuestra edad, se reían y estaban bastante pegados. Vi a Dani cerca de Sergi mirando a Alex con los ojos abiertos y brillantes, su mandibula estaba tensa. Por su parte Sergi hablaba con el otro chico pero de vez en cuando dirigía miradas a Dani para asegurarse de que estaba bien... Me separé del grupo y salí a por aire fresco, una sombra hizo lo mismo. La dejé acercarse

Adri caminaba con paso seguro, la espalda erguida, parecía inalcanzable pero al llegar a mi me pasó el brazo por la cintura y me sonrió de forma sincera, sus ojos zafiro captaban la luz y parecían brillar. Yo le pasé el brazo por los hombros y le besé sobre la sien, Adri se estremeció de gusto. Como acordamos hace un mes solo lo hacía cuando estábamos solos...

-¿Estás bien?- me preguntó

-Hace demasiado calor- respondi

Adri asintió conforme y si no hubieramos estado abrazados me hubiera quitado la camiseta para lucirme delante de él. Aún seguía pensando que estaba mal sentir eso pero cada vez con menos intensidad, repitiendome a mi mismo que no había peligro en ello. Mi cuerpo seguía creciendo y mis espaldas ya eran mas anchas que las de muchos chicos de mi edad, mi torso empezaba a estar marcado pero aún quedaba mucho por recorrer. Adri también había crecido, aún seguía siendo unos centímetros mas bajo que yo pero ambos eramos altos y superabamos a los demas chavales, su cara al igual que la mía empezaba a perder la redondez de la niñez y a afilarse, Adri se estaba convirtiendo en un chico muy guapo y ya empezaba a atraer miradas de las chicas, a mi me daban unos pequeños celos pero de momento yo era el único, chico o chica, al que Adri prestaba más atención

  • Tardan mucho- dijo Adri

-Cuesta discutir con Sergi- me reí-Impresiona bastante-

Adri asintió y miramos al grupo, se notaba a Sergi sobre los demás mas alto y mas musculoso a su lado el chico con el que discutía parecía una hormiguita. Suspiramos a la vez por el cansancio, nos miramos y sonreimos. Nos quedamos callados, abrazados en la oscuridad, yo tenía mis labios en su pelo y de vez en cuando lo besaba haciendo estremecerse a Adri. Me encantaban estos momentos y deseaba dar un paso pero tenía demasiado miedo... El grupo se dispersó un poco y Valle vino corriendo, cuando llegó se quitó la camiseta

-Vamos a jugar a polis y cacos- dijo Valle saltando- Somos cacos-

Yo miré a Adri y este sonrió, era muy rápido, mas que Valle y mas que yo, mas que ningún otro chaval a excepción tal vez de Dani. En este juego llevaba ventaja

-¿Y yo que soy?- preguntó tranquilo

-¿Tu?- Valle frunció el ceño recordando- Los de tu clase creo que son polis... Si, poli sin duda-

Adri se rió y me miró, su mirada brillante me dejaba claro que vendría directo a por mi. Le sonreí y le besé de nuevo la sien de forma suave, Adri se estremeció y miró a Valle pero mi amigo estaba demasiado emociaonado como para haberse dado cuenta. Nos separamos deshaciendo el abrazo y seguí a Valle. Nuestros amigos esperaban impacientes, Gabi me miró

-Ya era hora- dijo usando el mismo tono que mi padre pero de forma mas afectuosa, le pegaba hablar así

-Lo siento- me disculpé

-Vamos, vamos...- dijo Sergi echando a correr con Dani al lado

Le seguimos, subimos una calle sin miedo. Había berbena en el barrio y las calles interiores como esta estaban cortadas durante todo la noche. Corrimos y a lo lejos oímos a los polis salir a perseguirnos. Sonreí sabía que Adri vendría directamente a por mí, que no pararía hasta encontrarme. Nos unimos a otros cacos y nos escondimos en un portal. Ninguno de nosotros jadeaba ya que los entrenamientos de futbol daban sus frutos pero los otros parecían proximos al infarto. Sergi estaba apoyado contra la pared y abrazaba a Dani que miraba nervioso calle arriba, yo miré a Valle, como a mi el sudor le recorría el cuerpo en forma de fina pelicula. Cogí mi camiseta y me la quité para estar mas cómodo. Valle saltó

-Nos han visto- dijo señalando a tres polis que venían corriendo, Adri no estaba entre ellos- Vamos-

Salimos corriendo, los polis se dividieron obligandonos a hacer lo mismo. Sergi cogió a Dani de la mano y los dos subieron corriendo calle arriba, el poli que los seguía desistió de seguirles. Valle me agarró el hombro

-Tio por aquí- y se lanzó calle abajo, le segui

Delante nuestra corrían Gabi y Alex que torcieron por una calle, nosotros la pasamos de largo, nuestras piernas de futbolistas pronto dejarón atrás a los polis pero por si acaso no aflojamos el ritmo. Tocimos por una calle y luego por otra, oíamos gritos de nuestros compañeros y risas juveniles y cansadas por el juego. Nos cruzamos a varios polis pero los conseguimnos esquivar. En una de estas veces nos metimos en una plaza, justo donde los polis tenían la carcel en donde se quedaban los cacos que pillaban hasta que los salvaran. Había como cinco polis rodeando la carcel que nos miraron. Sobre un banco vi una sombra alzarse y reconocí a Adri

-Son mios- gritó a los demás y pude notar la sonrisa en su voz- Que venga solo uno más-

Uno salió hacia nosotros mientras Adri con parsimonia bajaba del banco. Valle soltó un insulto y nos dimos la vuelta para huir. Corrimos, vi al otro poli seguirnos pero Adri caminaba por la plaza sonriente y dejandonos ventaja... Maldito chulo, pensé. Torcimos por una calle, Valle a mi lado seguía soltando insultos

-Joder nos persigue Adri- dijo- Correr, corre-

Yo giré la cabeza, el poli estaba cerca pero no mucho, el parque se extendió ante nosotros. Vi a Valle gemir y al girarme vi una sombra increiblemente rápida viniendo hacia nosotros, alcanzó al poli y lo pasó en cuestión de segundos. La luz de una farola iluminó la figura de Adri, tenía el rostro concentrado su mirada de zafiro se cruzó con la mía y supe que solo me miraba a mi. Entramos en el parque, yo sudaba a mares al igual que Valle, mi cuerpo estaba muy caliente por las carreras. Tragué saliva con dificultad y me pasé la lengua por los labios, miré a Valle

-Hay que separarse en el proximo cruce- las sombras de los arboles pasaban por su cuerpo rápidas

-Vale...- dijo- !Ahora!- gritó

Nos separamos

-Carlos es mio- oí a Adri decir con voz autoritaria- Ve a por el otro-

Me giré un poco y vi al otro poli seguir a Valle que corría como loco. Yo aumenté el ritmo, tenía a Adri persiguiendome y pensaba hacerme de rogar. Me giré y le vi venir hacia mi rápido como una pantera, estaba muy cerca... Seguí corriendo sintiendo mi corazón latir como loco, me volví a girar Adri ya estaba casi encima mía... Giré en una esquina metiendome en pleno bosque, vi a Adri derrapar y como haciendo gala de una agilidad increible apoyarse en el suelo con al mano y saltar hacia mi en pleno derrape. La oscuridad ya era mayor, solo la luna ilumina esta parte... Sentía a Adri casi encima mía. Forzé mis piernas al maximo, salimos a un claro, llegue a la mitad cuando noté el cuepo de Adri lanzarse sobre mi abrazándome la cintura

-Te pillé...- dijo y caimos al suelo por el golpe

Me reí, Adri seguía abrazado a mi cintura como si temiera que me desvaneciera

-Sueltame Adri que no me voy a escapar-

-Lo siento- dijo un poco jadeante

Se colocó a mi lado, su pecho se alzaba y bajaba rápidamente al igual que el mio, la camiseta se pegaba a su cuerpo y su pelo sedoso se arremolinaba sobre su frente y sobre sus sienes. Se rió con esa risa que me daba la vida

-Joder si que ha costado- jadeó

Me reí

-Estás suadando tio- le dije, me tumbe sobre el mullido cesped y miré el cielo había cuarto creciente como si la luna sonriera-Ponte como yo-

Adri miró mi cuerpo, brillaba por el sudor y mi tableta se marcaba por la respiración no mucho pero si lo suficiente. Asintió y se quitó su camiseta, movió el pelo lanzando pequeñas gotitas. La luz baño su cuerpo dandole un tono grisaceo a su moreno, Adri tenía el cuerpo atletico con los brazos y la piernas fuertes además me sorprendí al ver que su torso se marcaba más que el mio, sus abdominales estaban mas definidos y sus pectorales mejor torneados pero sin mi volumen.... Me sonrió sus dientes blancos reflejaron la luz de la luna copiando la sonrisa del cuepo celeste, su mirada de zafio capataba la luz brillando en la oscuridad. Me golpeó el pecho con el puño, ya casi no jadeabamos pero mi corazón latía como loco, su puñetazo fue suave y rebotó contra mi firme cuerpo

-Tengo que llevarte a la carcel- dijo, se empezó a levantar- Vamos...-

Yo cogí su brazo y tiré de él, Adri cayó sobre mi y girando me coloqué sobre él. Adri estaba sorpendido y con los ojos abiertos de par en par, me tumbe sobre él y atrapé sus manos con las mias sobre nuestras cabezas, me reí haciendonos vibrar

-Me has pillado porque corres más que yo- le dije-Pero si quieres llevarme a la carcel tendrás que ser mas fuerte... Y no lo eres- terminé sonriendole en lo que fue una de mis primeras sonrisas chulas

Adri forzó sus brazos hinchandolos y tratando de soltarse, tenía bastante fuerza pero yo tenía más, le retuve con mis brazos haciendo que los biceps abultaran duros, su cuerpo estaba recubierto por una fina capa de sudor como el mío, ambos estaban calientes y nuestras pieles se acariciaban entre ellas, notaba su corazón palpitando en su pecho debajo del mio, nuestras piernas estaba enredadas sobre la fina hierba, una nube ocultó la luna dejando sin luz el claro solo un tenue resplandor. Me reí y dejé que Adri lo intentara un par de veces mas sin exito, disfrutaba sintiendo su cuerpo bajo el mio moviendose, sus brazos marcando músculo...

-Eso es ...trampa- dijo Adri jadeante tras intentar soltarse por tecera vez- Te he pillado-

-Si, pero no puedes llevarme a la carcel- le recordé

-Tramposo...- me dijo y giró la cabeza enfadado

Yo me reí y sin soltarle le besé la sien. Sentí su piel caliente y el sudor salado, la caricia de su pelo sedoso y su estremeciemiento ante el beso

-No te enfades...- le dije, le volví a besar en la sien- Por fa no te enfades...- otro beso- Adri...- terminé con un beso muy cerca de su ojo-

A cada beso notaba el cuepo de Adri estremecerse, el mullido cesped era un suave colchón. Adri giró la cabeza para mirarme con sus ojos zafiro

-Eres un tramposo- me dijo- Pero no puedo enfadarme contigo-

Yo me reí y me incliné para besarle la mejilla pero en el ultimo momento no se porque varié el rumbo y le besé en la boca. Fue un pico, solo un roce pero fue maravilloso... Adri me miró con los ojos abiertos y trate de tartamudear una disculpa

-Lo siento tio con esta oscuridad... yo... yo no quería... pe-pero- Adri seguía mirandome callado- Adri yo...-

-Hazlo otra vez- me dijo tranquilo aunque notaba su voz ansiosa- Otra vez-

Yo me quedé en shock, había dejado de hacer presión con mi manos pero Adri no se soltaba

-¿Que?-pregunté dejando escapar el aire de golpe

-Dame otro beso...- me dijo Adri- Me ha gustado...- admitió tímido

Yo tragué saliva y de forma lenta empecé a inclinarme, los ojos zafiro de Adri me miraban brillantes y cálidos... Adri tambien se alzó un poco, no dejábamos de mirarnos mientras nos acercamos. Yo abrí la boca, Adri me imitó, nuestros labios se rozaron estremeciendonos a ambos y tras un segundo que pareció eterno nuestras bocas se juntaron. El roce con una boca extraña era diferente a todo lo que había pensado, los labios de Adri eran suaves pero firmes y acariciaban los mios, mi boca acariciaba la suya de forma lenta, los dos teniamos los ojos cerrados disfrutando del beso. Sentí su cuerpo bajo el mio, su respiración profunda y pausada acompasando la mia, nuestros corazones palpitando juntos como un profundo tambor, mis manos sobre su cabeza buscaron las suyas para entrelazar los dedos, su piel acarició la mia al cambiar de posición... La luna seguía oculta dandonos intimidad, nos separamos para respirar dando termino a nuestro primer beso, las manos de Adri estaban a la altura de su cabeza, sobre la hierba entrelazando los dedos con las mias de forma tierna.Nos miramos, los ojos de Adri relucían

-Me ha gustado- dijo

-Y a mi...- seguí yo tímido- Me gustas- terminé soltandolo de golpe

Adri se quedó callado y luego me sonrió

-Y tu a mi Carlos- y juntandonos nos volvimos a besarnos

Rodamos sobre la pradera, sintiendo la caricia de la hierba y el calor de nuestros cuerpos, mis manos le acariciaban la piel y mis labios masajeaban los suyos, todo parecía un sueño perfecto un momento mágico y divino. Adri me acarició la nuca pegando mas nuestros rostros, profundizando en nuestro beso. Mi lengua en mi boca se movió sola, como actuando por instinto y acarició la de Adri invadiendo de forma dulce su boca. Adri gimigó por la sorpresa y unió su lengua a la mía en un suave masaje. Seguimos rodando por la hierba de forma lenta, variando la posición siempre con los ojos cerrados dejando que nuestra piel notara el cuepo del otro, que nuetras lenguas fueran las que nos unían. Le acaricié el pelo y Adri me masajeó el cuello... Nos volvimos a separar y nos miramos, Adri estaba encima mia. Jadeabamos un poco

-¿Vas a llevarme a la carcel?- le pregunté

Adri se rio

-Te he pillado- dijo- Pero tenemos tiempo- empezó a inclinarse de nuevo hacia mi- Te quiero-

-Te quiero- repetí yo antes de volver a besarnos

Sobre nosotros la nube destapó la luna. Sonreía como si se riera de nosotros...

---Actualidad---

Mire con tristeza el claro del parque, había sido un momento perfecto. Ideal, mágico... Había sido todo cuanto deseaba volver a tener... Los recuerdos del cuerpo de Adri, la tenura de sus ojos,la suavidad de nuestras caricias, la timidez de los besos... Las palabras de amor susurradas, las miradas cruzadas... Todo se había desvanecido dejandome frío y solo... Dejandome solo este dolor como recordatorio... Solo este dolor como recuerdo permanente de mi mayor error...

---Hace tres años---

Había fiesta en la piscina y a mi lado Valle con pinta de aburrido contemplaba la gente de nuestra edad ir y venir. Yo me apoyaba en la silla y al igual que Valle estaba aburrido, mi mente volaba y como siempre iba hacia Adri... Hacia mi novio... Sonreí como siempre hacía cuando pensaba en ello, Adri y yo eramos novios desde hacía mes y medio, desde aquella increible noche... Nos encontrabamos a escondidas en el colegio o en mi casa cuando mi padre no estaba para besarnos y para decirnos mutuamente cuanto nos queríamos. Lo llevabamos en secreto porque al igual que yo Adri tenía miedo de que nos descubrieran... Me soprendió ver que Adri se había enarmoado de mi al mismo tiempo que yo de él y que el había pasado por lo mismo con lo de la homosexulaidad, aún recuerdo sus palabras... No estamos enfermos Carlos, me había dicho, Te quiero y tu me quieres eso no puede ser malo, y luego nos habíamos besado... Le amaba con todas mis fuerzas...

Había musica suave, el exito del verano, aún no eran las vacaciones pero para nosotros casi lo eran, no había debares, veíamos películas en clase, saíamos a jugar todas las tardes, volvíamos tarde... Esa fiesta era e la urabanización de Gabi, Valle y Alex. El primero estaba dando vueltas alredor de la comida picoteando y con un vaso en la mano, Alex estaba cerca de nosotros hablando con una chica y riendose con ella de bromas que no oía. Sergi estaba sentado con Dani entre sus piernas bastante lejos, por lo que veía hablaban tranquilos, el brazo de Sergi estaba alrededor de su cintura y por lo que veía compartían el mismo vaso. Valle y yo hablabamos, mi amigo se había quitado la camiseta pero yo no tenía animos para hacerlo. La razón era que esperaba pasar la fiesta con Adri pero mi novio tenía que quedarse en casa por no se qué movidas y a mi la fiesta se me estaba haciendo muy cuesta arriba... Suspiré recostando en mi silla. Vi a Gabi acercarse, me sonrió

-¿A que no sabes lo que he oido?- me preguntó

-¿El que?- suspiré yo

-Pues que Marta quiere quedarse a solas contigo- dijo sonriente

Me sorprendí

-Ah- dije, recordaba a Marta y durante estas semanas ellas y sus amigas habían estado un poco pesadas conmigo

Valle a mi lado me pasó su brazo por los hombros

-Pues me voy tio...- dijo Valle

Yo le cogí el brazo

-No te vayas- le dije- Yo no quiero nada con ella-

Gabi me palmeó la espalda sentándose al lado mia

-Venga tio que hablaban alto y cerca de mi para que las oyera- dijo mi amigo

-Marta no me gusta- dije yo tajante pero tanto Valle como Gabi no se dieron por vencidos

-Va tio no seas así- me decía Valle- Habla un poco con ella y ya está-

-Eso solo un poco- seguió Gabi- Solo un poco-

-Un poco- dije yo- Muy poco- puntualizé, solté el brazo de Valle

Mis amigos sonrieron y se fueron a una zona alejada pero no lo suficiente como para no poder ver bien... Me sonrieron cuando se sentaron, malditos cabrones... A los pocos segundos vi a Marta venir hacia mi, era delgada, rubia y con los ojos azules, pero su azul era demasiado sucio, demasiado imperfecto, nada comparable al zafiro de Adri... Me sonrió tímida y yo mirandola serio pensé que era estúpida por ello... No paraba de pensar en Adri... Pero Adri no estaba y si la despachaba rápido sería como si no hubiera pasado

-¿Me puedo sentar?- preguntó sin mirarme a los ojos

-Si quieres- la dije, ella se sentó rápida y pegó la silla a la mía, yo me eché para atras recostandome contra el respaldo

-¿Y que tal todo?- me preguntó

-Bien- respondí, la mirada de la chica resbalaba por mi cuerpo y senti ira... Pero me contuve la chica no tenía la culpa

-¿Te acuerdas de lo que pasó ayer en clase de Lengua?-

-Si-

-¿A que fue divertido?-

-Un poco-

-¿Quieres algo de beber?-

-No- estaba siendo borde pero la chica no captaba el mensaje

-¿Quieres ir a otro sitio?-

-Aquí estoy bien-

-Pero si estas sudando... -se rio se pegó a mi extendiendo su brazo para tocarme la piel, yo me aparté una cosa es que me mirara pero no pensaba dejar que me tocara, Marta se extendió mas y yo casi me caí de la silla evitandola, era tozuda la chica

-Estoy bien- repetí tajante, mi mirada se tornó dura pero al parecer Marta se creyó que era tonteo

-Que bobo eres- me dijo sonriente volvió a intentar acercarse

-No lo soy- dije yo apartandome de nuevo

-Pero si se que te gusto- dijo ella sonriendome

-¿!Que qué!?-

-Me miras mucho en clase- dijo convencida

-Eso es mentira- respondí, caí en la cuenta de que se sentaba en diagonal a Adri y que a veces me lo tapaba cuando nos mirábamos el y yo

-Es verdad- dijo ella- Se que te gusto y tu también me gustas-

-Tu no me gustas- repetí yo, ella intentó acercarse de nuevo y yo colocando mis manos en sus hombroas la pare- Y no te acerques-

Ella me miró obstinada y yo ya empezaba a cansarme, estábamos muy juntos

-Se que te gusto- dijo ella y lanzandoseme encima me besó

Yo me quedó en shock y la dejé besarme al principio. Primero sentí confusión, la chica besaba mal, metía demasiado la lengua y era muy brusca, seguramente sería su primer beso... Luego sentí una furia increible, solo Adri podía besarme, solo el era dueño y señor de mi boca, solo él podía tocarme y acaricarme como Marta intentaba en esos momentos. Mis manos había resbalado por su espalda y mis brazos la medio rodeaban simulando un abrazo que no pretendía... Marta gimió y yo la separé

-Sabía que te gustaba- me dijo, inentó acercarse y besarme de nuevo, yo la paré iba a repetirla esta vez cabreado que no me gustaba cuando vi a alguien... Mi corazón dejó de latir

Adri nos miraba, estaba quieto en la entrada de la piscina, estaba lejos pero vi su mandibula tensarse y hasta su mirada de zafiro relampagueando por la confusión. Estaba clavado en el suelo, sus mano en puños y sus hombros tensos, me miraba a mi, solo a mi... Y sentí que mi alma se rompía, Marta se acercó de nuevo para reptir su beso pero yo me levanté de golpe. Salí disparado hacia la salida, Valle y Gabi se levantaron pero llegaron tarde para parame, las amigas de Marta se lanzaron a ayudarla por que cayó del impulso de su estúpida obstinación... Adri me vio acercarse y se dio la vuelta, saliendo al jardín desierto en estos momentos... Yo le seguí sintiendo como mi corazón aún no latía... Le alcanzé a mitad del jardín...

-!Adri espera! !Adri!- le cogí el brazo

Adri se giró como siempre a una velocidad increible, se soltó con violencia y se quedó quieto mirandome

-Adri yo...- empezé- Lo que has visto...-

-¿La has besado?- me preguntó, vi sus bellos ojos zafiro brillantes por las lagrimas que trataba de ocultar, mi alma se retorció de dolor

-Si- dije- Pero yo...-

-La has besado- repitió el, como tratando de hacerse a la idea

-Ella me besó a mi- intenté desesperadamente justificarme

La ira brilló en sus ojos tras su capa de lagrimas que aún no caían

-Vi como la abrazabas- dijo él- Y he visto como ella intentaba besarte de nuevo-

-No yo...- las palabras para explicarme se atragantaron- Es que Gabi... y Valle... Ella fue la que vino y... Intenté pararla- seguí tartamudeando- Y tu no estabas y...- me callé de golpe

-Quería darte una sorpresa- dijo él, una lagrima escapó y cayó por su mejilla- Quería sorprenderte y... y... Y te encuentro besando a esa- me sonrió de forma triste- Tal vez si yo no hubiera estado no ta habría destrozado la diversión- otra lagrima se escapó

Yo estaba en shock, verle llorar, el dolor en sus increible ojos zafiro era tan profundo, tan enorme... Mi corazón y mi mente gritaban con todas sus fuerzas las palabras a decir pero mi boca no acertaba a moverse, como si el beso con Marta la hubiera matado... El amor que sentía me pesó sobre el corazón hundiendome en el fango...

-Adri yo...- empezé

-¿Todo era mentira verdad?- me preguntó, ya lloraba sin tapujos, las lagrimas surcaban sus mejillas- Las caricias, los abrazos, los besos... Todo era mentira-

-Yo te quiero...- y en toda mi vida nunca dije una frase con tanta verdad

-¿Y por eso la besabas?¿ Porque me querías?- me preguntó, su voz era dura pero sus ojos rezumaban dolor- ¿Por eso la abrazabas?-

Me acerqué un paso y vi como Adri retrocedía otro. Lentamente mi corazón se partía en pedazos cada lagrima que el derramaba me ahogaba en un mar de culpa

  • Pero supongo que es normal
  • siguió Adri- Es normal que un chico esté con una chica...- dijo recalcando la palabra- Es normal que la ames- las lagrimas intensificaban tanto el zafiro de sus ojos que me hacía daño contemplarlos- Es normal ...- y dandose la vuelta se fue con paso firme

Vi sus hombros convulsionarse por lo sollozos e intenté seguirle para decirle que le amaba con todas mis fuerzas, que era el amor de mi vida, que daría mi alma por él, que era la razón de que viviera... Pero una sombra se interpuso y Adri salió de la urbanización... Enfoqué la vista... Era Marta... Y la ira creció dentro de mi como un torrente de lava, hirviente y burbujeante contrastanado con el frio dolor que aprisionaba mi corazón...

-Que sepas que te perdono por irte- dijo- Mis amigas dicen que...-

-!!TU NO ME GUSTAS VALE!!- la grité con todas mis fuerzas, intentando quemar este dolor con la ira-!!NUNCA ME HAS GUSTADO, METETELO EN LA CABEZA: NUNCA TE ME VUELVAS A ACERCAR!!- y la dejé allí quieta y con la boca entreabierta, sus amigas cerca nuestro se lanzaron a consolarla. Mi ira las apartaba a golpes con la mirada

Salí a la calle pero no vi a Adri y gritando lancé una patada a la pared... Y luego otra... Y otra... Acabe jadenate y llorando apoyado contra la pared mientras el dolor llenaba mi ser y se mezclaba con el amor que supe que nunca dejaría de sentir...

---Actualidad---

Me quede quieto viendome más joven llorando contra la pared que tenia en frente... Suspiré y luego miré la urbanización... Todo se había desmoronado... Durante un año intenté hablar con Adri, intenté acercarme a él y tratar de arreglarlo de algún modo, pero el me evitaba, apenas me miraba y cuando lo hacía leía en sus ojos el dolor y la tristeza... Y luego vivnieron las discusiones, el dolor se protegió con arrogancia y la tristeza con frialdad, discutíamos mucho y muy fuerte pero era la única forma en la que me miraba y cuando lo hacía veía las pequeñas trazas de dolor tras el muro que había levantado... Nuestras broncas ya eran legendarias y todos se preguntaban que las había motivado... Si supieran la verdad... Volví a suspirar, ya era de noche, fui hacia mi casa, andaba con paso lento, pausado, pensando y notando como el dolor se hacía mas llevadero. Tres años con este dolor... Tres años amandole cada día más... Tres años muriendo de amor... Tres años sin dejar de sufrir... Suspiré y cerrando los ojos sentí las lagrimas allí, negandose a salir, negandome la posibilidad de mostrar mi dolor al mundo....

Sergi

Gabi dormía sobre mi cama desnudo, roncaba suavemente. Yo sonreí y le acaricié el rostro con la punta de los dedos, Gabi rebulló y moviendo su enorme cuerpo se coloco mejor. Yo me fui al salón solo en boxers, mi madre no había venido a cenar y se quedaba a dormir en el bufete porque tenía una caso importante, me moví de forma lenta sintiendo el frio aire erizándome la piel. Entré en el salón y fui directo hacia las fotos, cogí una y sin mirarla me senté... La alzé para que la luz la bañara

Era una foto de mi peque y mia en la piscina, hace como dos años, estabamos en las toallas, yo sentado y Dani sobre mi apoyando su espalda en mi pecho, yo le besaba la sien y Dani sonreía... Era mi foto favorita... La miré largo rato sintiendo una mezcla de dolor y tristeza... Dani, mi peque... El sueño me empezó a dominar, mis brazos perdían la fuerza... Me dormí sobre el sofa con la foto sobre mi pecho, el nombre de Dani en mi boca y el dolor en mi corazón...

Para los Sergi-adictos:

Siento que Sergi fuera un "secundario" y que no haya descrito mucho de su dolor en este relato pero quería centrarme en Carlos

Para el resto de lectores (incluyendo los Sergi-adictos):

¿Cual es vuestro personaje (secundario o no) favorito? ¿Os han gustado los flash-backs de Carlos? Tengo curiosidad por saberlo... Y seguid dandome vuestros consejos sobre la trama y animos para escribir. Gracias a todos