Carmina la hermana de III
Tarde de piscina
Al llegar a casa me encontré solo y al poco de estar tirado en el sofá Carmina me empezó a escribir por WhatsApp. Me dijo que tenia todo el cuerpo dolorido que me agradecía la noche y la mañana que le había hecho pasar. Yo le dije que por mi parte había sido tanto una sorpresa como un placer haberla hecho pasar un buen rato y que al fin y al cabo para eso estábamos ahora que éramos hermanos…
- No sigas por ahí – me respondió ella en un mensaje. – Estas solo no – me puso a continuación. – Si claro – fue mi respuesta. – ¿Puedo llamarte y hablamos? – me pregunto. Claro que si – le respondí yo.
Cinco segundos después el teléfono sonó y yo descolgué… Comenzamos a hablar y me conto que estaba algo rayada que ella no quería ahora ninguna relación que aún estaba “de luto”. Yo por mi parte le dije que había disfrutado mucho con ella y que tampoco buscaba ninguna relación seria. Estuvimos hablando de continuar con nuestros encuentros y ella me dijo que si, que tanto la noche como aquella mañana habían cambiado su visión del sexo que era como haberla ampliado y ahora entendía lo que era disfrutar “una buena follada”.
Ahora fui yo el que le dije que no siguiese por ahí o la iba a obligar a correrse por teléfono para mí. – No me digas eso que mojo las bragas – me respondió. – Pero hermanita como te pones bragas sin pedirme permiso – le respondí. – Joder tengo las bragas empapadas y estoy en la calle – me susurro cachonda como una perra. – Hermanita ya vuelves a estar deseosa de polla – le pregunte. – Joder no te imaginas como – me respondió mientras respiraba como si le faltase el aire. – Por que he quedado con Mónica que, si no ahora mismo me iba en busca de tu polla hermanito, que en menuda zorra me has convertido – me dijo mientras me contaba que al cruzar las piernas el roce la hacia estar al borde del orgasmo. – Mónica es tu prima ¿no? – le pregunte. – Si, la de Avilla ya la conoces – me respondió. - Pues dile que te ayude como te ha ayudado tu hermanito – le dije mientras al terminar la frase pensé que a lo mejor podía molestarse. Ella por un momento se quedo callada. Oí como una especia de gruñido gutural por el móvil y de nuevo silencio con una respiración entre cortada. En ese momento me di cuenta – Vaya hermanita guarra que tengo – le susurre. – Que se acaba de correr imaginando a su prima follándose su coñito mientras se lo cuenta a su hermano – de nuevo silencio. – Me asombra hermano como lees mi mente. – Pues dile a tu prima que necesitas una buena comida de coño – le volví a susurrar de nuevo. – Al fin y al cabo, la familia esta para ayudarse, ¿no? –. Ella se quedo por un segundo mas en silencio y luego me sugirió mandármelo si ocurría en un video. – No si al final soy y el que se acaba haciendo una paja a tu salud – le dije. – La verdad en corridas entre anoche y esta mañana te gano por goleada – me dijo ella. – La verdad es que si, pero la última corrida me ha dejado vacío – le confesé. – Ya viene mi prima luego hablamos – me dijo. – Ok disfruta de tu comida de coño en los aseos de la cafetería en la que estas – le respondí justo antes de que ella me despidiese.
Miré el reloj y vi que eran las dos de la tarde. Me dispuse a comer y a descansar mientras no podía evitar a ratos acordarme de Carmina y empezar a rememorar una y otra vez lo que había pasado tanto la noche anterior como esa misma mañana. Me sorprendió que aquella que yo tenia por una modosita se había desatado conmigo y ahora quería ponerse al dia tantos y tantos años de sexo incompleto. Entendí que por primera vez en su vida se había olvidado de todo y únicamente se había dedicado a disfrutar. En uno de los mensajes que me mando me puso exactamente algo parecido – Gracias por liberarme, me encanta saber que te tengo para disfrutar de todas mis perversiones –. – Eso no lo dudes – le respondí. Mientras el calor y la comida provocaban que cayese en una maravillosa siesta.
Al despertarme serian cerca de las seis de la tarde. Miré el móvil y tenía varios WhatsApp pendientes de Virginia preguntándome por la noche anterior, de Raquel mi prima citándome para el lunes en su hotel y de Carmina que me preguntaba si podían venir a bañarse a la piscina además de algunos colegas preguntándome donde me metí ayer por la noche. Empecé a responder a todos. Le dije a Virginia que anoche todo un descubrimiento y le conté por encima algunas cosas. –¿Podremos compartirla? – fue su respuesta. – Lo vamos viendo – fue la mía. Le escribí a mi prima Raquel y le confirmé que el lunes sin falta a la hora que me había citado estaba en el hotel. Y por último le dije a Carmina que por supuesto si quería podía venirse a casa a bañarse en la piscina. A mis amigos les respondí que no había salido por que estaba cansado y que este fin de era de relax.
Carmina me respondió que estaba con su prima y que un rato llegaban las dos a casa. Se me jodió el plan pensé, pero en fin que le íbamos a hacer. No todo iba a ser follar hasta reventar.
No pasaron mas de veinte minutos cuando Carmina estaba en la puerta de casa llamando al portero. Le abrí y subió hasta el decimo piso que era donde vivía. Al abrirse la puerta del ascensor salí a buscarlas y juntos subimos al decimo quinto piso que era donde estaba la piscina. En el ascensor Carmina se acerco y me dio dos besos. Al pasar de una mejilla a otra me dijo – Hola hermanito – mientras su mano tapada por el bolso de playa que traía y mi toalla le tapaban la mano que hacia contacto con mi miembro recorriéndolo de arriba a abajo por dentro del bañador. Mi cara debió de ser un poema por que su prima me pregunto si estaba bien. – Si despertándome aún de la siesta – le dije mientras girándome hacia ella le decía – es que he tenido una noche toledana y ando algo empalmado – justo antes de darle dos besos a Mónica que al oírme me miro ojiplática y a la que aprovechare para describiros ahora. Mónica es de piel morena y rubia, mide entorno al metro sesenta y con dos globos por tetas que tranquilamente pueden ser uno 110 de pecho, un culo respingo y una sonrisa que derrite a cualquiera.
Fue inevitable que los pechos de Mónica hiciesen contacto conmigo al saludarnos y notar que aquellas mamas eran naturales puso mi calenturienta mente en marcha pensando en el gustazo que seria recibir una cubana que aquellas ubres mientras la mano de Carmina aún no había dejado de recorrer mi falo. Por un segundo vi como Mónica miraba a Carmina y pensé que algo hablaban entre ellas, pero al no saber que, no me dio tiempo a mucho mas al abrirse la puerta del ascensor. Me eche a un lado y como buen caballero que soy las deje a las dos salir delante de mí mientras la mano de Carmina abandonaba mi polla. Mónica salió primero y Carmina al llegar a la altura del dintel de la puerta del ascensor se asombro al comprobar como desde atrás mi mano se colaba entre sus piernas y acariciaba sus labios mayores ejerciendo algo de presión. Pero algo me dejo descolocado note como un bulto por debajo de su clítoris que dibujo en mi cara una sensación de extrañeza que ella respondió con una sonrisa picara y un pequeño espasmo de todo su cuerpo.
Nos pusimos en la parte mas alejada de la puerta de acceso a la piscina bajo la sombra de unos árboles que adornaban la azotea del edifico. Al llegar extendimos las toallas en batería quedando Carmina en medio, Mónica a su derecha y yo a su izquierda.
El calor era sofocante estábamos por lo menos a 40 grados y la piscina nos llamaba a voces. Debo reconocer que nunca he sido en la piscina una de esas personas que se ponen bañador tipo slip, siempre he sido de bermudas, ni soy de esas personas que se recrean en el agua media hora.
El caso es que me di una corta ducha, me tiré a la piscina y tras un par de largos volví a la toalla. Cuando llegue Mónica estaba tumbada boca abajo y Carmina estaba sentada a horcajadas sobre su culo extendiéndole crema protectora. Al llegar Mónica me pregunto cómo estaba el agua y yo le dije que espectacular mientras sin pensar acariciaba mi mano derecha por todo su brazo para que notase lo bien que estaba el agua. Carmina empezó a dejar caer crema protectora en su espalda y con un lento masaje a extenderla por sus hombros. En ese momento yo pare de acariciarla para volverme a su toalla. Ella levantando la cabeza me pidió que por favor siguiese.
Me senté a su lado mirando hacia ella con las piernas cruzadas y mientras apoyaba mi codo en mi rodilla me servía para balancear la yema de mis dedos por su brazo derecho mientras tenía las piernas cruzadas y mi glande parecía por la pernera del bañador. Carmina me miro y me sonrió justo al tiempo que le decía a Mónica – Prima te desato esto para poder extenderte la crema mejor –. Carmina dejo caer los tirantes del sujetador del bikini a ambos lados y empezó a descender a su media espalda mientras continuaba con el masaje y yo me perdía viendo aquellas dos hermosas tetas derramarse por su costado. Carmina se percato al instante de que aquella imagen me estaba empezando a excitar y mientras de nuevo cogía el bote de crema con el dedo meñique tiraba de las copas de su bikini dejándome sus tetas a la vista y dándole dos pequeños estrujones a la crema simulaba la muy cabrona para ponerme más cachondo mi corrida sobre su espalda. Carmina cogió un poco de esa crema de la espalda de Mónica y la llevo a su pezón izquierdo dejando una gota blanca de crema sobre él. Mi respuesta después de asegurarme de que Mónica estaba con los ojos cerrados y la cabeza hacia abajo fue morderme el labio inferior indicándole que aquello me estaba gustando. – Si prima lo que tú quieras – le susurro Mónica. – Al fin y al cabo, estoy en familia – dijo mientras hundía la cara en la toalla que se había colocado a modo de almohada. Carmina continuo extiendo la crema por la espalda de Mónica mientras sus pechos al aire se balanceaban de un lado a otro. – Si es cierto que estas en familia Mónica – le dije mientras las yemas de mis dedos ahora acariciaban la zona interna de su antebrazo y mis nudillos rozaban la parte exterior de su pecho. Aquella era la teta más suave que había tocado en mucho tiempo. Carmina se percato de ello y su respuesta fue pasar toda la palma de sus manos desde la parte central de su zona media de la espalda hacia la zona exterior de sus tetas. Aquello fue un magreo de tetas en toda regla. En ese instante Mónica abrió los ojos como platos, pero ni se movió. Carmina estaba desatada por segunda vez repitió el mismo movimiento y la respuesta automática de Mónica fue elevar su cadera. – Le estaba encantando!!! –. Yo estaba alucinado. Pensaba que ella debía estar siendo consciente de que los dos, tanto Carmina como yo la estábamos magreando a base de bien. Carmina ahora se metió el dedo meñique en las dos copas del sujetador y al mismo tiempo que se tapaba con el bikini sus preciosos pechos descendía hasta la altura de las rodillas de Mónica para continuar extiendo la crema por su cadera. – Sigo prima – dijo ella continuando su barnizare de crema. – Si claro – respondió ella sin entender que Carmina estaba desatada y aquello no era una pregunta si no por cortesía una mera afirmación.
En ese momento Mónica se incorporó olvidándose que el sujetador del bikini estaba suelto y se elevó lo suficiente para que ante mi vista apareciesen dos pezones marrones como dos galletas fontaneda como jamás habría imaginado. – Dios que maravilla – dije sin pensar. En ese momento Mónica se dio cuenta hacia donde estaba mirando y Carmina incorporándose un poco por el lateral tuvo la misma visión que yo. – Si la verdad es que mi prima tiene unas tetas preciosas – le dijo mientras tirando de la braga del bikini hacia que esta desapareciese dentro de la raja de su culo. Mónica por respuesta al notar aquel tirón suave pero contundente en la braga de su bikini noto como su clítoris se despertaba y elevando de nuevo su culo emitió un gemido de placer. Carmina paseo la lengua entre sus dientes y me confirmo que cada vez estaba mas caliente. Mónica tenía la cabeza hundida en la toalla avergonzada. Carmina se incorporo y poniendo su boca a la altura del oído de Mónica le dijo con la suficiente claridad para que yo pudiese oírlo – Prima no te preocupes por enseñarle tus pechos a mi hermano, es como antes cuando me los has enseñado a mi – le dijo justo en ese momento al clavar su mirada en la mía. – Desde anoche no te imaginas la confianza que tengo con mi hermano – guiñándome un ojo. Mónica me miro y sonriendo volvió a hundir la cabeza en la toalla mientras arqueando de nuevo su torso por un segundo más me permitía ver sus tetas desnudas de nuevo. – ¿A que son bonitas? – me pregunto Carmina. – Son preciosas y dan unas ganas de hundir la cabeza entre ellas que no te puedes hace cargo – le dije como respuesta. – Esta preocupada porque dice que ella cree que a su exnovio no le gustaban y por eso la dejo me dijo Carmina mientras se acomodaba encima de ella de nuevo. – No esta echa la miel para la boca del asno – respondí de nuevo. – Creo que uno de los mayores placeres de este mundo para mi seria incrustar mi polla en medio de estas dos ubres – dije mientras ahora le pellizcaba suavemente un pezón – y correrme hasta quedarme vacío – sentencia mientras Carmina volvía su mirada fuego puro.
Carmina siguió con el mansaje ahora por las piernas de su prima y desde mi posición podía ver como su mano se perdía más de la cuenta entre sus piernas. Mónica estaba claro que jadeaba muy bajito y además no paraba de mover su cadera en busca de la mano de su prima.
Miré a Carmina y con mi mano izquierda le hice la señal preguntándole si estaba pajeando a su prima. Ella de nuevo llevo sus dedos meñiques a ambas copas del bikini y tirando hacia abajo volvió a dejar sus tetas desnudas a mis ojos. No pude evitar gruñir. Aquella mujer estaba llegando a unos límites que se asemejaban a los míos y me encantaba. Dejé de acariciar el ante brazo de Mónica e incorporándome sobre mis rodillas por fin tuve una visión completa de como Carmina estaba dedeando a su prima. – Mira lo que has hecho de mi – me dijo mientras hacía que mi mirada se dirigiese hacia sus dos dedos que no paraban de follar a su prima.
Mónica no paraba de mover la cadera, movimientos sensuales y rítmicos hacían que ella misma se follase los dedos de Carmina. – ¿Puedo ayudar? – les dije lo suficientemente alto para que me escuchasen las dos. Mónica asintió con la cabeza mientras resoplaba y Carmina por respuesta paso su lengua por sus labios. Yo me acerque a ella y llevando mi mano a su entre pierna aparte la braga de su bikini dejando a la vista si coño. Estaba mojadísima comencé a mover mis dedos entorno a su clítoris y le dije – Como sigas a así te vas a mear en las piernas de tu prima – Carmina que se había elevado un poco me enseño el satisfayer que llevaba incrustado en su canal vaginal y en ese momento entendí por que estaba tan mojada. – Este ha sido mi compañero estos meses – me dijo mientras entregándome el móvil tomaba consciencia del sonido que hacia el aparato vibrando en su interior. En ese momento entendí el por qué su prima Mónica estaba también tan cachonda. Al subirse Carmina a horcajadas sobre ella la vibración había llegado a su coño y la había excitado a ella también.
Tomé el móvil de Carmina y vi la aplicación abierta era una especie de rueda que daba mayor o menor intensidad al aparato en su interior. Poco a poco retire la mano de su vagina y ella de nuevo me la llevo a su clítoris al tiempo que ella no había parado de dedear a su prima. – Anda que no tenéis vosotras guasa – les dije mientras aumentaba la intensidad del aparato y mi mano izquierda se aventuraba entre las piernas de Mónica. – ¿Podrás satisfacernos a las dos? – me dijo Carmina retadora. – Tienes queja de la follada que de anoche – le respondí. Ella negó con la cabeza ahogando un gemido mientras Mónica nos miraba tumbada por encima del hombro. – Así que te lo has follado – le dijo ella justo cuando había introducido un dedo dentro de su coño y al ritmo que estimulaba el clítoris de Carmina penetraba a Mónica. Esta ultima no pudo aguantar más y girándose poniéndose boca arriba se bajo las bragas y ella misma empezó a masturbarse. – Joder que cachonda estoy dijo mientras frotándose el clítoris con la mano derecha tres dedos de su mano izquierda se introducían dentro de su coño. Yo continuaba de rodillas a la altura de su cadera mientras Carmina de rodillas sobre sus piernas seguía agarrando mi mano para que continuase masturbándola. Yo me quede maravillado viendo aquellas dos tetas libres con aquellos pezones grandes que pedían ser chupados y follados a partes iguales. – Míralo se muere de ganas de hundir su polla entre tus dos tetas – le dijo Carmina a Mónica mientras veía mi cara. – Mira el rabo que te vas a comer ahora prima – me dijo de nuevo Carmina a Mónica mientras desabrochando el lazo de mi bañador lo bajaba por delante lo suficiente para que mi polla pudiese salir del bañador.
La cara de Mónica se desencajo. – No te he dicho mientras me comías el coño que esta polla era una delicia – le dijo de nuevo Carmina mientras la mirada de Mónica no se apartaba de mi polla. Su mano tomo contacto con mi polla. Y comenzó una rápida paja. Estaba claro que Mónica esta a punto de correrse y yo no dude un segundo mas y me lance a comerme aquellos pezones que tenia delante de mi mientras aumentaba al ochenta por ciento la vibración del satisfayer de Carmina. A partir de aquí todo se desmadro. Carmina tardo un suspiro en llegar a su orgasmo y en cuanto Mónica vio su cara fue el detonante para ella también llegase al orgasmo dejando abandonando mi miembro y llevando sus dos manos a su entre pierna.
El abdomen de Carmina se contraía mientras su orgasmo y el trabajo de satisfayer no paraban. Baje la vibración y de repente oímos como la puerta del ascensor se abría.
Momento de pánico para los tres. Yo solté sobre Mónica el móvil de Carmina y esta en un segundo se giro para quedar boca abajo mientras Carmina con un movimiento ninja había devuelto a si sitio la braga de su bikini y el sujetador.
Los tres nos dejamos caer en las toallas. Mónica y Carmina tardaron un momento en recuperarse de sendos orgasmos que acababan de tener y yo seguía con la polla como una estaca.
Me coloque detrás de Carmina que boca arriba miraba a Mónica mientras yo por encima de ella cruzaba mi mirada con las dos. – Me ha encantado – dijo Mónica. – Lo malo es que tu te has quedado con todas las ganas de vaciarte – sentencio mientras me miraba a mí. – Si quieres podemos bajar a tu casa y te arreglamos entre las dos – me dijo Carmina mientras disimuladamente acariciaba mi entre pierna. – No hay prisa – dije mientras invitaba a Carmina a girarse y ponerse de espaldas a mí. Ella me miro contrariada. – Ya te he dicho que es muy imaginativo prima –. – Mónica te puedo decir algo – le dije mientras para cualquiera que nos viese pensase que estaba con mi mano sobre la cadera de Carmina. – Si claro – me respondió mientras su mirada seguía mi mano que descendía por las caderas de Carmina en busca de apartar su braga y dejas de nuevo a la vista de Mónica el coño de Carmina. – Quítale el satisfayer a tu prima – le dije mientras yo mantenía la braga apartada. Ella se lo quito mientras Carmina emitía un pequeño suspiro y el aparato salía de ella lleno de sus fluidos. – Ahora límpialo con tu boca y métetelo en tu conejito – le dije. Ella hizo ademán de ir a buscar algo en su bolso y yo negué con la cabeza. – Usa esa lengua tuya – le dije mientras ella entraba en el juego. Se lo acerco a la boca y lamio los jugos de su prima. – ¿A que están riquísimos? – le pregunte mientras su lenga daba buena cuenta y dejaba el aparato nuevo. Una vez hubo terminado me miro esperando que le dijese que hacer. – Carmina – dije a modo de susurro en la oreja de mi primera amante. – Dile a tu prima que quiero que se clave tu satisfayer en su coñito que quiero ver como la folla delante de mí – en ese momento la cara de Carmina reflejo una sonrisa llena de lujuria. – Prima – empezó a decir ella – que dice mi hermano que quiere ver como te metes el satisfayer dentro de tu coño para que ahora te folle yo con él –. La cara de Mónica era un poema. A pesar de estar excitada me di cuenta que aquello estaba en el limite para ella. – Venga prima que lo vas a disfrutar te lo garantizo – le dijo Carmina que llevo su mano a su braga para apartarla y dejar a la vista un precioso coño sin un solo pelo. – Mira qué coño más bonito – le susurre a Carmina al oído. – Si lo acabas de follar con tus dedos ¿recuerdas? – me dijo ella estampando ahora su culo contra mi erección. – Si y ahora me voy a follar el tuyo – le dije mientras mi mano izquierda se colaba debajo de su sujetador y magreaba sus tetas. – Te voy a llenar el coño de lefa mientras – no acabe la frase. Deje de susurrar en el oído de Carmina mientras Mónica se había introducido en su coño el aparato por completo y ahora jugaba con él sacándoselo y metiéndoselo. – Mónica – le susurre llamando su atención. – Si dime – me dijo ella levantando la vista de mi mano magreando las tetas de su prima. – Te puedo decir un piropo – le pregunte. Ella asintió y me quedo a la espera. – Tienes unas tetas perfectas para mirarlas mientras me follo Carmina – le dije.
Ella me miro y me dijo – nos van a ver tus vecinos – me dijo mientras de frente a mi como a unos 30 metros los veía zambullirse en el agua. – A mi no me ven por que me tapa Carmina y a ti no te van a ver por que estas de espaldas a ellos – le dije invitándola a girarse para que se cerciorase de que lo que le decía era real. – Prima mi hermano esta cachondo y quiere que lo folle mientras ve tus tetas, por favor hazlo por mi – le dijo Carmina mientras activando el satisfayer al mínimo llevaba su mano al sujetador subiéndolo para arriba y dejando que aquellas dos enormes ubres morenas volviesen a ver la luz del sol. – Joder os voy a ver follar – dijo mientras se subía un poco mas el sujetador y ayudando a Carmina a bajar mi bañador por la parte de delante Mónica me cogía la polla y la dirigía a la vagina de Carmina. – Mira que prima más apañada tienes – le dije mordiéndole el lóbulo a Carmina – que coge mi polla y la lleva a la entrada de tu coño para que te la puedas clavar bien –. Por respuesta Carmina se preparo para empezar a moverse mientras hacia subir un poco más la vibración del satisfayer dentro del coño de Mónica. Esta tembló al notar subir la intensidad. – Prepárate prima porque, que sepas que no te vas a ir de aquí sin una buena cantidad de semen en esas tetazas que tienes – le dijo Carmina que a todo esto con lo mojada que estaba no dejaba de clavarse mi polla en su interior. – Prima viendo esta preciosidad de polla me muero de ganas por sentirla dentro de mi – le dijo Mónica.
Yo permanecía quieto detrás de Carmina mientras era ella la que moviendo las caderas se clavaba mi falo en lo mas profundo de su ser. Yo al mismo tiempo por respuesta llevaba mi mano izquierda desde sus tetas hasta su clítoris. – Tienes una buena polla – me dijo Mónica sin apartar la mirada de mi miembro que entraba y salía de la vagina de Carmina. - Que ganas de probarla – nos decía Mónica a los dos mientras veía como mi mano se posaba ahora de nuevo en el pecho derecho de Carmina mientras ella retorcía su pezón izquierdo. – Prima no sabes como me excita esta situación – le susurro Carmina mientras de una sentada mas fuerte se clavaba mi polla de nuevo en el fondo de su ser y las contracciones de su vagina abrazando mi polla me hacía saber que se estaba corriendo. Carmina en ese momento subió la cadera un poco mas y dejo que mi polla abandonara su coño.
Mi polla quedo apoyada entre sus piernas y al ver su ano al descubierto no pude evitar decirle – Que ganas de follarme de nuevo tu culo – le dije mientras mi mano izquierda se dirigía a la vagina de Mónica y estimulando su clítoris la hacia correrse en mis dedos justo antes de penetrarla con dos falanges. Carmina bajo la intensidad del satisfayer y el orgasmo de Mónica se alargo durante algo mas de un minuto de reloj.
– Joder que necesitada estaba de algo así – nos susurro Mónica mientras abría los ojos. – Prima quiero que seas ahora tu la que se folle a mi hermano – le dijo Carmina mientras empezaba a penetrar a Mónica con dos dedos y tirando del satisfayer lo hacia salir de su canal vaginal. – Por mi encantado dije mientras yo en ese momento sutilmente llevaba mi polla llena de fluidos al culo de Carmina y empezaba a puntear su ano. – Uuuum hermanito como eres – me dijo mientras agarraba mi mano izquierda y la llevaba a su clítoris. – Quiero follarme tu culo, te lo he dicho – le dije mientras me zafaba de su mano y cogiendo la mano de Mónica la invitaba a sustituir la mía tras darle el satisfayer y metérselo a Carmina en su coño. De igual manera una vez que la mano de Mónica empezó a hacer pequeños movimientos en el clítoris de Carmina cogí la mano de Carmina y la llevé a la entrepierna de Mónica. – Daros placer entre vosotras mientras yo me follo el culo de mi hermana – dije justo antes de empujar y que mi glande se encajase en el culo de Carmina.
Allí estábamos los tres mientras ahora era yo el que subía la intensidad del satisfayer y mientras ya había introducido la mitad de mi polla en el culo de Carmina sentía el aparato vibrar en el interior de Carmina. – Hermanita se una buena zorra y empieza a moverte para clavarte mi polla dentro de tu culito anda – Carmina gimió indicándome que aquello le encantaba. – Como tu me pidas hermanito – me dijo dando una fuerte sacudida de cadera y provocando que mi polla se hundiese hasta los huevos dentro de su recto. Carmina abrió los ojos como platos mientras decía – Hermanito ahora estoy llena de ti – mientras cimbreaba suavemente la cadera haciendo que su interior se acostumbrase a tener mi miembro alojado en su interior.
Para Mónica aquello fue demasiado y mezcla del espectáculo que le estábamos dando Carmina y yo y la masturbación que esta le estaba haciendo Carmina en su coño Mónica nos anunció que se corría de nuevo. – Primos me corro – dijo entre dientes Mónica mientras explotaba en gran orgasmo. – Prima sigue de costado mientras mi hermano me folla que si no nos van a ver – Le dijo Carmina a Mónica mientras esta se incorporaba de nuevo. De igual manera para Carmina y para mí el espectáculo de Mónica corriéndose y ahora viendo aquellos pezones que parecían que iban a estallar, el satisfayer que había subido de intensidad y los pollazos que Carmina se estaba dando en el culo fue determinante para Carmina. – Prima me corro con la polla de mi hermano en el culo – le dijo Carmina mientras empezaba a notar los estertores de su orgasmo en mi polla. Deje de nuevo el satisfayer al mínimo y por un minuto mas alargando su orgasmo.
Carmina dejo salir mi polla de su interior y se quedó desmadejada tumbada de lado.
Mi polla ahora aun dura descansaba apoyada en el culo de Carmina.
Mire a Carmina que decía en ese momento – Joder hermano eres todo un descubrimiento – se volvió hacia mi y quedando boca arriba vimos como los vecinos abandonaban la piscina. Los despedimos levantando la mano. En ese momento Carmina vio como mi polla se apoyaba sobre su cadera y quedaba a la vista tanto suya como a la de Mónica. Carmina desplazo su mano por debajo de mi desde mi baja espalda hasta mi cuello para llegar a mi coronilla e invitarme a besarla. Descendí, y mis labios fueron a hacer contacto con los suyos y nos besamos. Empezamos a comernos la boca. – Hermano me encantan las corridas que me das – me dijo mientras me besaba y notaba como una mano se apoderaba de mi polla y empezaba a pajearla.
En ese momento el tacto de aquella mano en mi polla que la recorría arriba y abajo me estaba haciendo tocar el cielo. Por un momento Carmina dejo de besarme e incorporando la cabeza miro hacia su cadera. La extraña mirada con la que lo hizo me hizo mirar a mí también y viendo en la cadera de Carmina el ante brazo de Mónica me di cuenta de que era esta la que me estaba masturbando Mónica con la mirada clavada en mi polla parecía que el mundo para ella había desaparecido. – Prima, ¿Quieres follarte a mi hermano? – le dijo Carmina mientras tanteaba de nuevo el coño de Mónica. Esta miro a Carmina y le respondió – Si prima – le dijo mientras se relamía y su mirada se llenaba de lujuria – me muero de ganas por sentir la polla de tu hermano clavada en el fondo de mi coño –. Carmina en ese momento se lanzo a devorar la boca de su prima mientras apoyando la palma de la mano magreaba el pecho derecho de Mónica. Se besaban y de nuevo las manos de ambas iban al coño de la otra en busca de darse placer de nuevo.
En ese momento y ya solos en la piscina cambiamos de posición y Mónica de rodillas entre mis piernas se lanzó a devorar mi polla. – Prima que buen sabor tiene la polla de tu hermano aderezada con tus juguitos – dijo mientras se clavaba mas de la mitad de mi polla dentro de su boca. Con Carmina aún tumbada a mi lado Mónica engullía mi polla mientras yo llevaba su mano a los pechos enormes de Mónica y de igual manera llevaba la mano izquierda libre de Mónica a los pechos de Carmina. – Gracias – dijo Carmina mientras de nuevo se lanzaba a comerme la boca desesperadamente y sentía la boca de Mónica engullir de nuevo mi polla. – Me puedo follar a tu prima sin problemas – le pregunte a Carmina. – Si, esta perra como a mi la dejaron hace unos meses y no ha dejado de tomarse la píldora mientras no ha dejado de buscar dueño – me dijo Carmina. – Mónica – le dije llamando su atención mientras veía como tragaba polla y su mano había descendido a su coño y no paraba de frotarlo. Ella me miró por un momento y esperando su respuesta volvió a engullir mi polla. – ¿Quieres polla en tu coño? – ella me miro a los ojos con mi polla en su boca y se limito a asentir.
Vi que ya el sol se había puesto hacia rato y la noche nos cubría por completo. – Si empezamos a follar te advierto que no solo me voy a follar tu coño – le dije mientras veía como no paraba de frotar su coño. – Si empezamos a follar te advierto que tu culo lo voy a hacer mío junto con tus tetas y tu boca también – le dije mientras ahora era yo el que clavaba mi polla en el fondo de su garganta. Quería que fuese consciente de entregarse por completo a mí. – Mi boca ya es tuya y todos los demás agujeros de mi cuerpo están a tu plena disposición esperando que quieras hacer uso de ellos – me dijo mientras ahora era yo el que veía como ella hundía mi polla hasta el fondo de su garganta. – Dios no es solo la polla que tienes es como la usas y como usas tus dedos y tu boca- me dijo mientras se sacaba mi polla de la boca y me la pajeaba.
Invite a Carmina a tumbarse y dejar las piernas abiertas y a su vez invite a Mónica a colocar su cara entre las piernas de Carmina. – Lleváis las dos mal folladas mucho tiempo y como os gusta como os follo yo me vais a ayudar a poneros al dia – les dije mientras invitaba a Mónica a empezar a comerse el coño de su prima. – Lo voy a hacer como me gusta que me lo hagan a mi – dijo Mónica antes de empezar a devorar el coño de su prima. Mónica quedo en cuclillas y yo me cole entre sus piernas. Ayude a Mónica levantar un poco la cadera e hice que con su mano dirigiese mi polla a la entrada de su vagina. Tras las corridas que ya había tenido al comenzar a follarla note que su coño a pesar de estar aun estrecho estaba blandito y me permitía clavarme hasta el fondo. – Joder la siento en mi estomago clavada – decía entre bocanadas de aire mientras no daba tregua al coño de su prima. – Prima te folla bien mi hermano – le preguntaba Carmina que ahora estaba semi incorporada apoyada en sus codos viendo como Mónica le comía el coño. Esta no podía hablar solo asentía con la cabeza.
Por un segundo en semi oscuridad miré a Carmina y le dije – Hermana no puedo follarme así a la prima Mónica – le dije en ya casi un estado de oscuridad. Las dos en ese momento me miraron con la cara desencajada. – Es ya de noche – dije haciendo que se diesen cuenta de que el sol se había puesto hacia rato. Llevamos follando unas horas – les dije mientras ahora mi mano derecha agarraba una de las enormes tetas de Mónica. – Y si voy a follarte y a correrme en el interior de tu coño o de tu culo – le dije mientras retorcía suavemente su enorme pezón - quiero que los tres podamos ver como me derramo dentro vuestra – les dije. Ambas no habían apartado la mirada de mí y vi cómo se encendía la mirada de ambas al imaginar lo que les estaba diciendo. – Ver estallar esa polla es un espectáculo – dijo Carmina. – Tienes toda la razón me dijo Mónica que echando su culo hacia mi cadera buscaba clavarse mi miembro en su interior.
Carmina me pregunto qué quería hacer yo mientras empujaba la cara de su prima de nuevo a su coño y esta se amorraba y continuaba comiéndole el coño a Carmina. – Quiero que te corras en la boca de tu prima y bajar a casa a follaros a las dos – le dije mientras me sentaba a su lado y mientras Mónica tenia la lengua metida todo lo que podía en el coño de Carmina yo empezaba a frotar con ambas manos el clítoris de cada una de ellas. Ninguna de las dos se esperaba aquello y en poco mas de cinco minutos Mónica llego a un nuevo orgasmo. A Carmina parecía que le estaba costando algo más llegar así que junto a ella me amorre al coño de Carmina y entre los dos la follamos con la lengua mientras nos comíamos la boca. La dedeábamos hasta con cuatro dedos en su interior y lengüeteábamos su coño. Carmina se retorcía y estirando sus pezones con ambas manos se retorcía mientras Mónica y yo la sujetábamos de la cadera haciendo que su orgasmo empezase a hacer acto de presencia. Prima no sabes el gusto de da morrease con tu hermano mientras de comemos el coño y el cabrón aun tiene manos para sobarme las tetas y follarme el coño – le susurro Mónica al oído a Carmina mientras ahora era yo el que le comía el coño y Mónica castigaba su clítoris. – Jooooooooooooooooooooooooooooooooooder – dijo Carmina mientras por segunda vez veía como explotaba en un orgasmo que la hacia parecer un aspersor del parque en un maravilloso squirt y nos regaba con su corrida a Mónica y a mí.
Por un momento nos quedamos quietos observando el maravilloso espectáculo que era ver a Carmina regodearse en ese orgasmo maravilloso que le acabábamos de provocar. – Joder como me habéis hecho correrme – nos dijo mientras se llevaba la mano a los labios mayores de su coño y el mero contacto de los míos le provocaba repetir el orgasmo. – Hermana córrete de nuevo para nosotros- le dije mientras me amorraba a las tetas de Mónica y empezaba a devorar aquellos pezones que había deseado desde que los había visto. -Cachorritoooo – gimió Mónica, mientras yo chupaba su pezón derecho con auténtico frenesí. Estaba absorto en ello, - como me estas dejando el pezón- fue entonces cuando comencé a golpearlo con mi lengua, a cogerlo con mis labios y tirar de él, fue cuando comencé a excitar cada vez más a Mónica que en ese momento empezó a gatear los pocos más de cincuenta centímetros que nos separaban y haciéndome estirar las piernas se colocaba a horcajadas encima de mi para elevarse algo más y guiando mi polla la colocaba a la entrada de su vagina y de una sentada se la clavaba hasta el fondo de su vagina. En ese momento Mónica sintió como su útero ocupaba más del espacio que tenia de su canal vaginal y su útero se abría para permitir la entrada de mi polla. Al igual que Carmina en ese momento Mónica estallo en un tremendo squirt y se meo de gusto sobre mi mientras permaneciendo ensartada por mi polla se corría como según ella dijo hasta ese momento jamás en su vida. Carmina mientras se recuperaba ya de su orgasmo fue testigo de la corrida que se acaba de dar su prima. – Joder primita y solo te la has clavado una vez – le dijo Carmina llevando su mano derecha al clítoris de Mónica y lo empezaba a acariciar mientras Mónica no dejaba de correrse una y otra vez y su orgasmo hacían que su vagina abrazase mi polla como un vibrador una y otra vez. Yo no paraba de comerme aquellas hermosas tetas que tenia justo delante de mi cara. El pezón derecho de Mónica estaba irreconocible. Más grande y duro, totalmente ensalivado y brillante … no recordaba haber chupado unas tetas de aquella manera nunca en mi vida. Mientras Carmina no paraba de sobarle el coño había empezado a comerse la teta que mi boca había dejado libre y ambos pezones parecían la primera falange del dedo meñique mientras más espasmos acompañaban los orgasmos de Mónica.
En ese momento sentí la necesidad imperiosa de correrme. – Poneros las dos de rodillas delante de mí – les dije mientras me ponía de pie. Las dos siguieron a pie juntillas lo que les dije y pegándose entre ellas tetas con tetas se colocaron delante de mi mientras le decía: - Pirma empieza a chupármela – Ella se amorro a mi polla y empezó a tragar polla mientras le dije a Carmina. – Tu ponte entre sus piernas y vele lubricando el culo que a este paso se lo hago aquí mismo. En ese momento miré a Carmina meterse entre las piernas de Mónica y le dije – ¿Has visto? – mientras ella seguía mamando y yo empezaba a follarle la boca. – Te van a preparar el culo para que te lo folle tu primo en la calle como una vulgar ramera – le dije mientras le clavaba la polla en la campanilla. Ella asintió con la cabeza y me invito a follarle la boca. Yo no desaproveche la oportunidad y seguí follándole la boca mientras Carmina habiendo follado y ensalivado bien su culo empezaba a sodomizar su recto introduciendo el satisfayer dentro de ella. Una vez lo hubo introducido por completo le dije a Carmina que se incorporase y se pusiese al lado de su prima. – Bueno putas prepararos para compartir mi corrida como dos buenas primas – ambas asintieron con la cabeza mientras sacando la polla de la boca de Mónica me empezaba a correr y dejaba que las dos primeras contracciones de mi corrida fuesen a parar a la boca de Carmina que deseosa sacando la lengua las alojo en su boca, suavemente me gire y deposité mis dos siguientes corridas en la boca de Mónica que imitando a su prima me recibió sacando la lengua. Las dos siguientes corridas con muy poca fuerza fueron a para a las tetas de Mónica. Por un segundo mas las dos esperando a cerciorarse de que había terminado de correrme enseñándome mi corrida en sus bocas se lanzaron a comerse la boca entre ella compartiendo mi corrida y dejando que por las comisuras de ambas partes de ella fuese a parar a las tetas de ambas. Una vez terminaron de tragarse cada una el contenido de la boca de la otra y su mezcla se lanzaron a comerse mi polla y a dejarla limpia. Luego entre ellas se limpiaron los senos la una de la otra.
Os animoa todos a comentar que se agradece. Un saludo!!!