Carlos Paz, un primo cariñoso...

Cuando mi primo me comento en fin de año que había mandado un relato sobre nosotros me corrió un frió por la espalda y se me hizo un nudo en el estomago. Mi primera reacción fue ¿qué como había hecho eso?, Que no tenia sentido relatar cosas nuestras y un montón de cosas más. No sabiendo siquiera que era lo que había escrito. Tanto es así que mi primo que escribió la historia como Carlos Paz, dijo que iba a mandar un mail para no publicarla. No sé que pavadas mas me decía. Todo esto en secreto ya que esa noche de fin de año había muchos de nuestros familiares alrededor, como así también nuestros esposos. Ya que ahora soy una mujer casada. Al otro día quedamos en que me tenia que traer el relato que mando y así lo hizo. Le dije que no lo viese nadie al entregármelo. Así lo hizo. Me lo metí dentro del pantalón y me fui al baño a leerlo. Me temblaban las manos.

Al principio todo me parecía mal. Temía que todo el mundo se enterara de mis cosas. Y me señalaran como una puta o algo así. Al ver que los nombres estaban cambiados cosa que ya mi primo me lo había explicado y que la historia relatada era solo sobre aquel fin de semana se me fueron pasando los nervios. Yo sé que él podría haber contado otras cosas, pero al parecer empezó por el principio. Después mi marido se fue a comprar al supermercado, y en la pieza volví a leerlo y mis pensamientos se fueron aplacando. A tal punto que no estaba de acuerdo con algunos párrafos o quizás que había cosas de aquel día que no estaban bien aclaradas. Yo no soy escritora como mi primo que le gusta hacer estas cosas. Pero sentí la necesidad de aclarar ciertas cosas, que quizás hagan mas atractivo lo que sucedió aquel día y después según mi versión.

Mi primo toda la vida estuvo caliente conmigo. Teníamos una afinidad tal que solo nosotros sabíamos el significado de algunas palabras que utilizábamos. Siempre me miro el culo y hacia bromas en todo sentido. Hasta con gente adelante y en cualquier ocasión. En muchas ocasiones él me abraza de atrás haciéndose el primito amoroso pero en realidad lo que estaba haciéndome era apoyarme. Ese fin de semana en que se complico todo ya que mi amiga no iba, Carlos me iba haciendo bromas en el auto del gordo, de cómo nos íbamos a registrar en el hotel los 3 solos en una habitación. Que iban a creer que salía con los dos y cosas así. Todos esos comentarios me predispuso a lo que sucedió. Yo hacia 3 meses que había dejado de salir con mi novio, y creo que de los 4 últimos años que había pasado desde que deje de ser virgen.

Era la vez que más había estado sin hacer el amor. Quiero aclarar a mi no me gustaba para nada Quique. Es mas con Sandra pensábamos salir solas ese fin de semana para tratar de encontrar algo en Mar del plata, algún chico para transar y joder. Pensando en todo esto yo estaba caliente. Si el gordo mi hubiese propuesto algo cuando quedamos solos, cuando Carlos se fue a la cancha, seguro que le decía que no a cualquier propuesta ya que el no me gustaba. Pero si en cambio me hubiese metido una mano o besado de improviso seguro que me tranzaba fácil. Pero no lo hizo. Así que fuimos a buscar a Carlos y le dije que si quería que fuesemos los tres a bailar y él dijo que no porque se iba a las ocho de la mañana a Buenos Aires. Cuando nos acostamos yo lo busque a el, cuando me empieza a apoyar yo me recalenté, ya no era yo. Siempre me gusto el sexo en demasía y bueno como ya dije quería hacer el amor, y bueno no lo pensé mucho que se trataba de mi primo y todas esas cosas. Si sabia que iba a poder manejar sus comentarios porque mi primo siempre obedeció lo que yo le decía que haga, eso porque siempre anduvo detrás de mí como un perrito faldero.

Cuando le agarro la pija y empiezo a pajearlo no era para hacerlo acabar si no para lograr toda la erección así con solo ponérmela yo conseguiría acabar de inmediato. Pero como él estaba obsesionado con mi culo no puse reparos. Yo tenia experiencia en esa campo ya que mi antiguo novio era su predilección todas las veces que salíamos a encamarnos pasarme la lengua por el culo y después penetrarme y acabarme toda. Así que sabia todo lo que tenia que saber en ese aspecto. Y bueno le dije a Carlos que me hiciera la cola ya que no era algo novedoso para mí y sé lo que significaba para él. Pero enseguida me di cuenta que me iba a quedar caliente, que yo no iba a poder acabar, por eso yo gemí fuerte para que el Gordo Quique se alertara de la situación, pensando que después lo haría con él. Yo no pensé para nada en un trío, o que los dos me penetraran al mismo tiempo. Había vivido algunas cosas, como estar con dos chicos el mismo día, es decir hacer el amor con uno a la tarde y con otro a la noche, pero nunca con dos personas a la vez.

Sé que a partir de ese día cambiaron muchas cosas sobre mi actitud ante el sexo. Solo me arrepiento de esa noche de haberle hecho poner al gordo un profiláctico, porque me hubiese gustado en ese momento sentir la leche de los dos dentro de mí. Después al pensarlo me recalentaba esa idea, cosa que después me saque las ganas. Lo que quiero aclarar es que no soy una puta reventada que se acuesta con todos o por tener una linda cola, ya que gracias a dios todavía la conservo, se la entregue a todos. Es mas, al quedarme sola con Quique no paso nada, hablamos todo el día de cosas triviales y al otro día volvimos a Buenos Aires.

Cuándo retorne a Buenos Aires tarde unos días en llamarlo a mi primo, estaba segura que si lo hacia de inmediato no me lo sacaba mas de encima, pero en verdad tenia cierta calentura interior, entre miedo y perversidad por ser pariente mío y además ¿qué le iba a decir?. Lo llame unos días después y quedamos que me pasara a buscar por el trabajo para ir al cine. Enseguida me dijo que sí. La verdad, en el trabajo había pensado en lo que iba a suceder. Lo de Mar del plata había sido un aperitivo para lo que sucedería después. Soy una guacha. Me fui de mini falda al trabajo y antes de que él llegara me arregle de maravillas. No suelo pintarme los labios ya que en eso soy muy discreta, no me gusta andar como una puerta recién pintada. Cuando llego mi primo a buscarme a la Estación de servicio, no podía mantener una conversación se le renotaba el nerviosismo que tenia. Mi tío le había prestado el auto a mi primo y enseguida encaramos para el centro. Durante el viaje ni siquiera hablamos de la película que ïbamos a ver.

No interesaba. Me pregunto con cierto temor como la había pasado con Quique al quedarme sola, le dije que si quería saber si había pasado algo, le respondí que no, porque no me gustaba. Mi primo durante el viaje no dejaba de mirarme las piernas y fijamente mi boquita pintada. Me devoraba con la mirada, ya no era su primita adorada, me comía con la mirada como a una verdadera puta. Y yo me sentía como Gatubella dispuesta a comerme a un ratoncito. Estacionamos el auto y empezamos a deambular por la calle Corrientes, en busca de alguna película, "Y a tu mama también", nos llamo la atención porque trabajaba Maribel Verdu una española que suele hacer películas de subido tono. No sabíamos ni de que se trataba. Tampoco nos interesaba. Apenas empezado el argumento, era que dos chicos salían con esta mujer y se creaba un clima que en cualquier momento se la cogían y así fue. Esto es lo mas loco que me había tocado vivir hasta ese momento, veníamos de hacer un trío inesperado en Mar del plata y en menos de una semana estábamos en un cine viendo una película casi de idéntico contenido. Con mi primo nos miramos y al unisono nos preguntamos si cada uno sabia que esta película era así, ninguno lo sabia. Carlos tardo un siglo en acariciarme la pierna, y yo estaba loca. Estaba toda mojada. El cine estaba semi vació y en nuestra fila justo no había nadie sentado, lo que me permitió tomar su mano y sin miramientos la acerque a mi vagina para que me metiera los dedos en la concha.

Sin pensarlo empecé a besarlo con pasión le metí la lengua hasta la coronilla le parti la boca y la cabeza. Estaba reexitada pero me aplaque y le dije que termináramos de ver la película. Nos tranquilizamos y vimos el final. Salimos casi corriendo al telo. Recuerdo que me llevo a uno horrible perdido por ahí por San Telmo. Pero no me importo. Otra vez durante el viaje analizamos la película, éramos unos primos muy especiales, una calentura no iba a dejar de pasar el análisis de una película. Al llegar al Hotel yo me abalance sobre él y en dos segundos estábamos desnudos, comencé a chuparle la pija como pocas veces se lo había hecho a un hombre, sin duda alguna queria impresionarlo. Era fuego en mi interior esa es la palabra precisa "era fuego". Mi primo comenzó a chuparme las tetas y luego a morderme, primero despacio y después con fuerza, yo no sentía nada. Enseguida me subí sobre su pija dura y Carlos acabo sin yo ni siquiera moverme. Sentí su leche enchastrandome con los jugos de mi concha, estaba toda empapada, me incline sobre su pecho y mi primo comenzó a morderme los pezones vehementemente para que acabara rápido porque su pija comenzaría a caerse. Así lo hice, sentí un placer infinito, no por el sexo solamente, sino porque se mezclaban el éxtasis de lo prohibido de estar cogiendo con mi primo y estar entregada a alguien que de ahora en mas lo podría tener para todas mis calenturas. Como él haber encontrado un consolador humano, en este caso mi primo.

Cuando mire mis pechos luego de mi orgasmo veo que estaba toda marcada por sus mordidas, pero esto seguro que será motivo de otro relato de Carlos mi primo. Es mas pienso que envió el primer relato de nuestra relación para escribir lo que sucedería después con respecto a esto que me paso y sé que tiene para varios tomos. Ante todo quiero disculparme ya que no soy escritora, pero me motivo el hecho de verme reflejada en un relato y poder contar mi experiencia. También el hecho que tuve que hacerlo a escondidas ya que ahora soy una persona casada y me da ahora cierto temor estas cosas. Ah me olvidada, esa noche de hotel tuvimos una sola sesión de sexo, ya que por lo general soy una mujer que le alcanza un solo "orgasmo", pero este tiene que ser un buen polvo, sino es probable que reincida en una noche y busque la revancha.