Cancion solitaria II
Lisa es un alma alegre, con sus debilidades y virtudes. Trata de aprovechar el tiempo todo lo que pueda, le gusta hacer amigos. Conoce a Fiona y no deja de pensar en ella. Fiona es diferente.
6.30 am suena la alarma y me levanto de buena gana, tomo una ducha y me dispongo a hacer el desayuno, estaba de tan buen humor que quería sorprender a la familia con una buena comida. La verdad no entendía mi buen humor, quizás porque era el primer día de clases y ya tenía bastante expectativas, ansiaba conocer gente nueva, ya tenía un mes en el curso de ingles y en una academia de danza y teatro.
Su relación con sus padres y hermanos era excelente.
Bajo a la cocina con el Ipad en mano, leo el Twitter para estar al tanto de las actualizaciones del día. Sigo algunas cuentas nuevas referentes a la saga. La verdad me encanta. Termino el desayuno, me preparo mi jugo de limón y preparo mis cosas, poco a poco van bajando mis padres y Joel, mi hermano menor, la verdad desde que Sara se mudó a su nuevo apartamento, el ambiente de la casa no ha sido el mismo, todos la extrañamos, pronto yo me mudaría con ella, por petición de ella y Joel en un par de años años se irá a Santiago de Chile donde empieza la universidad. Su nueva vida. Y nuestros padres podrán tener la vida que siempre quisieron. Viajar, conocer y hacer todo tipo de deportes juntos.
Alguien está de buen humor.
Estoy bien, me siento tranquila, Sara tiene 6 meses fuera de casa y ya había que normalizar las cosas, no?
¿Cuando regresa mamá? Ya llega mañana, es importante que vayamos los 4 al aeropuerto a recibirla, ya saben, le recuerdan a Sara por favor, igual yo la llamo ahora más tarde.
¡Claro!
Todo momento en familia era preciado para mí y mis hermanos, somos nuestro soporte, somos todo para uno y uno para todos. Sara era nuestra hermana mayor. Solo me lleva 2 años, es los ojos de papa. Mi relación con ella es excelente. Soy amiga de sus amigos y ella de los míos. Siempre ha llamado la atención más que yo, con su carisma, su encanto, es hermosa físicamente, la única envidia que le tengo es su cuerpo bien trabajado y senos voluminosos, solo ha tenido un novio y aún sigue con él, tiene el espíritu aventurero al igual que nuestros padres, adora viajar y conocer nuevos lugares.
Ingresé al curso de ingles a petición de Sara, quien quiere que viaje con ella a todas partes para conocer juntas el mundo. Tiene planes para nosotras, incluso para Joel, aunque este haya preferido irse a estudiar en otro país.
Tomé el carro, regalo de mis padres por cumpleaños 17 y por mis buenas notas en la preparatoria. Era mi orgullo, un Nissan March color turquesa. Llamo a Sara, para saber si está despierta, es muy difícil lograr que despierte temprano, su novio, Gerard, es piloto comercial y cada cuanto que está en la ciudad no perdían ni un segundo de estar separados. Si ella está feliz con ese estilo de vida, yo soy feliz por ella.
Sara: Hermanaaaaa!
¿Sara? ¿Que ya estas despierta? ¿Y ese milagro?
Sara: Ningún milagro, no seas exagerada jajajaja, bueno, Gerard se fue ayer en la tarde y no me apetecía hacer nada, estudié un poco hasta quedar dormida, bien temprano por cierto.
Enhorabuena, ¡ya te extrañaba! ¿Estás lista para la uni?
Sara: Claro! Si ya voy saliendo, te veo al rato hermana. Muacks!
Si claro, ya anda saliendo, seguro que hasta se sigue arreglando y me colgó rápido para que deje de preguntar.
Bueno, ya estoy llegando a la uni. Estaciono y me bajo del carro sin darme cuenta del carro que estaba estacionando a mi lado, lo esquivo rápidamente, quizás el conductor ni se haya dado cuenta, pero me dio un mini infarto, ¡que susto! Me quedo observando el carro vecino para disculparme con el conductor por mi descuido, al bajar veo que es un chica quizás de mi edad, cabello negro con un corte muy genial, piel muy blanca, labios carnosos, ojos tristes, tímida, no distingo ver bien sus ojos, lleva una franela con un corte muy original, me gusta, no distingo ver el diseño de adelante. La chica se detiene en frente de su auto, y por un rato se queda mirando la universidad, sola, silenciosa, solo contemplaba la estructura, me pregunto que estará pensando. Luego de un largo rato, unos 10 minutos quizás, ella se va... Me había quedado viéndola y olvide que quería hablar con ella para disculparme, en fin, quizás la vea luego, quizás ni se dio cuenta tampoco. La perdí de vista y llegué a mi primera clase, ahí estaba Diana, mi amiga de hace años. Estaba conmigo en la academia de Danza y Teatro.
Mientras hablaba con Diana cualquier banalidad, ya que prácticamente la veía todos los días, me fijo en que la misma chica del estacionamiento entra a la clase, silenciosa, tímida, tal como había estado antes, con un rostro inexpresivo, no quiere llamar la atención, no quiere hablar, solo se sienta, saca sus libros y se sumerge en ellos. Es una chica extraña. Ella no miraba a los lados, solo dio un vistazo rápido sin mirar a nadie realmente. Nuevamente esa chica no me mira. Pero yo si la miro a ella, no puedo dejar de mirarla, incluso Diana se da cuenta.
Diana: Que chica rara, ¿no?
No sé si es rara, quizás solo es tímida.
Transcurre la clase de lo más normal, no podía prestar atención en nada, no lo lograba, tenía que mirarla a ella, a ver que hace, ya todos estaban socializando, ella no, ella no miro a los lados nunca. Estaba en su mundo. Sentí curiosidad de saber cuál es su mundo.
A la hora del almuerzo sin darme cuenta había dejado a Diana sola y fui a buscar a esa chica, tenía que hablarle, conocerla, desconozco la razón. Al rato veo a Sara con los amigos y me acerco a ellos, escucho que ella me grita, la siento emocionada, eso es lo que me gusta de mi hermana, expresa mucho sus emociones.
- Sara: ¡¡¡Lisaaa!!!
Al ir acercándome noto que hay una chica de espaldas, ya estaba por levantarse cuando saludo a mi hermana y a sus amigos. No puede ser, es ella. Es ella. La chica misteriosa. Sara no deja de mirarla y de hablar. Yo tampoco dejo de hacerlo, de cerca es hermosa, necesito hablarle, saludarla, quiero oírla.
Vaya nombre. ¡Qué exótica esta chica!
- Lisa: Hola Fiona. Vaya nombre, que peculiar, ¿eres extranjera? calma Sara, intimidas a la chica. Soy Lisa.
Landon, un amigo de Sara, empieza con sus tonterías y al final no logro escucharla, no dice nada, toda la atención se fue a Landon, es un tonto, pero es buen amigo. De la rabia me senté y empecé a tomar mi jugo favorito, de limón, realmente me encanta todo sabor a limón, sobre todo los pastelillos de limón, son mi debilidad. Me doy cuenta de que Fiona tampoco está prestando atención, comienza a sudar, se ve hasta tierna, provoca decirle que se calme, que todo está bien. Quizás no le gustan este tipo de reuniones, o quizás solo le caímos mal, ¿pero por qué? Si solo sabe de mí mi nombre, que engreída es entonces.
Se termina de ir. Quiero ir tras ella, pero no. Es una chica hermosa, al irse, Sara no dejaba de hablar de su franela, su franela es genial, su diseño espectacular, veo que es fanática de la saga. Es eso, quizás solo por eso quiero hablarle, me está haciendo dudar y eso no me gusta, necesito olvidarla ya.
Regreso a la nueva clase y la verdad me encontraba algo desanimada, había pasado parte de mi día pensando en una chica, me sentía extraña. Bastante.
Recorro los pasillos y los escalones con mucha calma, pues aun me quedaban 10 minutos. Sin darme cuenta pensé en ella, en Fiona, y en la primera vez que la vi, como observaba esta estructura, quería ver lo que ella veía. Quería pensar lo que ella habría estado pensando al detenerse por largo rato aquí, frente a la uni.
En fin, llegué, algo malhumorada ya. Sara me decía que a pesar de estar siempre sonriendo, un mínimo detalle era capaz de hacerme pensar tanto que podría olvidar sonreírle a la vida nuevamente. Tengo muchas debilidades al parecer.
La veo. Sonrío. Siento un calor en el estomago. Acidez. Necesitaba otro jugo de limón. Aunque sabía que mi acidez la causaba eso. ¿O no? ¿Que era entonces?
Me acerco a ella, la tomo por sorpresa.
-Si me gusta tu franela, Sara no dejaba de hablar de ella, hasta que te vi ahorita, la pude detallar. Me parece muy interesante.
-Lisa...
Hasta que por fin la escucho un poco más. Habla muy bajo. Muy seria.
-Si, veo que me reconoces Apenas y dijiste algo en el comedor, estamos en esta materia juntas, quizás aquí te escuche más. < ¡Di algo, mujer!>
Y así transcurrió la clase, me senté a su lado, me llamaba la atención poderosamente. Necesitaba saber porqué. De reojo pude sentir que ella me miraba, pero no quise voltear para no intimidarla. Je, al menos ya sé que no le caigo mal, al menos me mira, traté de acomodarme el cabello, no sabía porque me miraba. Sentí mas curiosidad todavía.
Al terminar la clase trate de estar muy tranquila, necesitaba buscar palabras precisas para hablarle. Me quede un rato pensando hasta que volteo, ya no estaba, se había marchado. ¿Pero que se cree? No puedo creerlo, esta chica es un caso. ¿Piensa que la voy a morder? Ya luego cuando pensé eso sentí rabia, rabia con ella y rabia conmigo por estar pensando tanto en ella. Me quede paralizada. Seria. Me fui a casa, primero pasé por una heladería, necesitaba comer helado, de limón, de alguna manera necesitaba pasar la rabia, y me encontré con Cindy.
Cindy: Siempre de limón, nunca cambias vale.
No, espero no cambiar nunca.
Cindy: Te quedó algo en la barbilla, permíteme.
Gracias
Como estás Cindy? Hace ya más de un año que no te veo, eres la última persona que esperaba encontrarme aquí. < ¿Por qué estás aquí? No te necesito en mi vida ahora> Cindy: Estoy recién mudada, encontré trabajo en la ciudad, en un local, una discoteca nueva, es algo pasajero mientras me establezco mejor. Toma. es de la discoteca, para que vayas conociendo. Me gustaría verte en la inauguración. Es dentro de dos semanas.
Claro, le diré a Sara para ir, le encantará
Cindy: Genial.
< ¿Por qué me ve tan fijamente? Sabe que eso me derrite>
Ehh, yo, me, me tengo que... Yo... ¡Sara! A que no adivinas a quien me encontré, Cindy si, se ha mudado a la ciudad. Si. Ok ya voy para allá. ¡See you sis! Me tengo que ir Cindy.
Cindy: Definitivamente no cambias. No dejas de mencionar a Sara ni en cada minuto.
Vendedora de helado: Señorita su pedido está listo
Me sonrojo un poco, sabia que a Cindy le molestaba que mencionara tanto a Sara, en realidad me tengo que ir es a casa. Sara llamó solo para preguntarme por su lápiz labial que estaba conmigo. Pero usé la llamada solo como excusa para alejarme de Cindy lo más pronto. Su presencia es una vieja herida. Tenía que irme lo más pronto. Quizás deba pedir más helado. No me siento feliz.
Cindy: ¿Tienes alguna fiesta de helado o algo asi?
Vienen unas amigas, necesitamos helado para ponernos al tanto
Cindy: Genial que tus amigas también adoren el helado de limón.
Adios Cindy
Llegue a casa y estaba Joel jugando videojuegos con sus dos amigos, todos aplicaron para irse juntos a Chile en un par de años, desde entonces son inseparables. Los saludé y me senté un rato con ellos, la verdad adoro los videojuegos, pero tengo poco tiempo para estar retomando ese vicio. Abrí mi helado y no les ofrecí, temí que dijeran que si. Ellos ni me miraron, dos estaban jugando y uno de ellos solo les gritaba que hacer.
Estuve un largo rato en eso hasta que miré el reloj, eran las 4:35 pm ya casi era hora de mi curso de ingles, recordé a Fiona, la chica de la extraña mirada y la voz tímida. Pensé en Cindy y en como de repente mi tristeza se había multiplicado al doble. Me sentí sin ánimos de ir al curso de ingles. Pero fui.
Hoy nos tocaba taller de música. Escuchamos All you need is love de The Beatles. Reí bastante apenas escuche la canción empezar, la conocía. Reí sin parar, el destino me hacia una buena jugada, solo quería reír. Canté y canté una y otra vez. Saque nota sobresaliente, mi ánimo cambio totalmente, tenía ganas de llamar a Fiona, de reír con ella... ¿Reír con ella? ¿Cómo será la risa de Fiona? Reí más mientras la imaginaba riendo. Debe verse mucho más tierna. Si tan solo ella supiera. Además, no tengo su número. No sé nada de esa chica y ya quiero saberlo todo.
Llegue a casa tarareando la misma canción una y otra vez, Joel y sus amigos ya no estaban, me tome un baño y descargué esa canción en mi teléfono, quería seguir oyéndola. All you need is love. Love is all you need. Le escribí un whatsapp a mi amiga Diana diciendole que hoy escuche la canción perfecta. Respondió diciendo de qué trata. No le respondí mas, reí un poco más, me acosté y seguí pensando en Fiona, en sus ojos grises. Fiona Fiona, solo se de ti que te gusta la saga, por tu actitud solitaria supongo que habrás leído los libros, ¿Qué otros libros habrás leído Fiona? Me quede pensando hasta quedar dormida.
A las 2:14 despierto en medio de un sueño confuso donde había mucha gente discutiendo y lanzando libros, otros leyendo, otros peleando, otros armando una gran hoguera con otros libros, libros viejos, libros importantes, gritaban palabras que no conozco. En ese momento desperté con una nueva idea en mi cabeza. Pensé en Fiona y no pude sentir más emoción.
Crearé un Club de lectura. Haré que Fiona quiera estar en el grupo.
Tomé un poco de agua, me costó retomar el sueño, ya que la ansiedad no me dejaba, pensé si Fiona estaría pensando en mi o en quien. Al final caí rendida. Había pasado un dia lleno de sorpresas, y por más que haya estado de mal animo, pondré lo mejor de mí para crear este Club.