Camping

Madre e hijo salen de camping

Todo comenzó en la baulera, en el fondo del garaje;  revolviendo una caja con viejas fotografías, verlas me traian recuerdos que me hacían llorar.

Eran  de los campamentos que hacíamos cuando novios, eramos unos chicos y disfrutábamos con la aventura de sentirnos exploradores, veraneantes sin ninguna obligación y muy baratito.

Disfrutar de la naturaleza, con el ser amado, era lo mas; la incomodidades no solo no importaban sino que por el contrario nos gustaban.

Pasa mi niño y escucha mis gimoteos, se arrima y me pregunta que me pasa, que hago y me reprende por revolver el pasado  amargandome.

Ven mira, como nos divertíamos en los veranos, mira que pocas cosas llevábamos en nuestra mochila, sabes viajábamos a dedo, hoy seria muy peligroso.

Mucho no le atraía verme con una diminuta biquini abrazando embobada al que luego fue su padre.

Me decía, mama, ya deberías haberte olvidado de lo que ocurrió. Y no seguir martirizándote angustiándote por quien no te mereció, mama ya paso casi un año, que esperas para dejar de sufrir y comenzar una nueva vida.

Para entender este dialogo es necesario comentar de que se trata.

Con mi novio, mi único novio, desde niña, crecimos juntos y nos amamos, nos casamos y tuvimos un hijo: Daniel, hoy es un muchachote de 18 años, de mas de 1,80, fornido, bastante peludo, barbudo, morocho, ojos negros, para mi y para muchas chicas amigas, una belleza.

Mi marido también es, era, bueno sigue vivo, asi que es; de 1,90, unos cien kilos, morocho, ingeniero, también usa barba, pero candado, es muy prolijo y atildado.

Yo una gurrumina al lado de ellos, escasos 1,55 de alto delgada, poco culo redondito y duro, tetas que parecen dos naranjas, redonditas duritas pero pequeñas, sin panza, y para colmo me gusta vestir como una pendeja a pesar de que ya cumpli los 36.

Mi marido tiene dos mas que yo, pero por lo serio parece ser mucho mayor.

Desde que se recibió, estuvo empleado en empresas constructoras de nivel internacional y ya dirigió varias obras, ninguna cerca, por lo que la falta de el durante días en mi cama era una costumbre que al regresar  suplía con tanto sexo que quedaba rendida;  la ultima obra es muy importante y esta en medio oriente, por lo que solo vino a casa al pasar el mes de ausencia.

Por los primeros tres meses fue asi, pero ya llevaba otros tres meses sin venir, siempre justificándose por lo importante que era lo que estaba haciendo y que para todo lo requerían a él.

No tuve mejor idea que ir a visitarlo.

Quise que fuese una sorpresa pensando lo contento que se pondría al verme.

Llego al aeropuerto arrastrando mi valijita y tomo un auto hasta el campamento, donde la obra.

Al llegar pregunto por él, me dicen esta en la otra orilla, les aclaro están haciendo un puente gigantesco.

Pero seguro la atenderán vaya a su casa es aquella, un par de containers blancos, rodeada de jardín apartada de las barracas de oficinas y viviendas mas próximas.

Llego me atiende una mujer alta grandota una modelo local, con un vestido gris perla, enterizo hasta los tobillos, un contorno y una cintura de estatua, unos pechos, si hasta pensé: cada teta de ella equivale a un cachete de mi culo, que mujer,!!!, ojos grandes renegridos como su cabello que le llegaba a la cintura. Supuse de unos 25 años.

Me presento soy Daniela, dando mi segundo nombre, no se porque lo hice, me da el suyo Leila, la mujer del jefe.

El jefe?. Si el ingeniero .

Quede paralizada.

Para que desea entrevistarlo, me pregunta, invente que eramos compañeros de estudio y sabiendo de esta importante obra y de quien esta a cargo quería saludarlo.

Pero ud. esta con equipaje, si claro ya regresaba a mi país, por eso pensé antes de embarcarme llegarme hasta aquí.

Bueno él estará de regreso en unas tres horas, me informó, me convido con café y conversamos trivialidades, le dije que pena en tres horas tengo mi avion y al aeropuerto hay como media hora, lamentablemente debo retirarme y dejar la entrevista para otra oportunidad.

La mina, no se si sospechó algo, que me pregunta viaja seguido aquí?

Hasta ahora no, pero probablemente lo deba hacer pues mi empresa esta por tomar también una obra aquí.

Le pido si puede pedirme un taxi pero llama a una camioneta de la empresa para que me alcance al aeropuerto. Se notaba tenia ascendencia sobre el personal. No era para menos, era la mujer del mandamás.

Recien al hacer el pre embarque mis ojos no aguantaron mas y llore, llore todo el viaje.

Eso paso hace casi un año, los tramites de divorcio están bastante avanzados.

Por suerte económicamente no lo necesito, mis trabajos de decoración cubren nuestras necesidades y mi hijo puede estudiar sin necesidad de trabajar.

Sigo con lo que ocurrió luego de aquel dia donde lloré luego de un tiempo, por los bellos recuerdos.

Al cenar, pobre apiadándose de mi, Daniel me propone ir de camping dentro de unos días, ya que la primavera esta en su apogeo y le gustaría aprender a acampar ya que nunca lo hizo y que yo le enseñase a hacerlo.

Contenta le respondo cuando lo dispongas.

Presurosa voy a ver que queda de aquellas mini aventuras, la carpa, la abro todavia esta buena,   el sobre techo impecable, el farol sol de noche funciona, el anafe a querosene también, hay una botella de querosene todavia sin usar, velas, los cacharros y esos filosos cuchillos  de exploradores que más, estaba todo.

Los sacos de dormir, um!!!;  tienen olor a humedad, los sacare al sol, todavia están aceptables.

El sobrepiso, esta malo, habrá que comprar otro.

Cuando llega de tarde le cuento y juntos vemos las cosas, me dice: querosene? Sos una antigua ahora se usa gas y para iluminación hay unos faros led que son a pilas y duran meses.

Para cocinar hay unos anafes con un cilindrito de gas, recambiable, nada de garrafas.

A los dos  días se me aparece con todo eso nuevo, diciendo: ahora si estamos completos.

Esta semana no puedo tengo dos parciales, pero para la próxima prepara el auto y busca algún recreo donde ir, que sea sobre el mar asi aprovechamos la playa.

En la costa ahora hay muchos, elegí uno en una localidad que nunca había estado, para que repetir;  me traería nostalgias y deseo estar contenta, debía afrontar una nueva vida.

Preparé todo, cargué el auto y nos dispusimos a salir, hacia un nuevo  destino, hacia una nueva vida.

Luego de varias horas de viaje por fin llegamos al lugar elegido, que distinto era todo, respecto a los que conoci hace mas de 18 años.

Ahora las parcelas están numeradas, los sectores dividen la zona de casillas remolcables de la de los homedrivers  y la de carpas, sobre todas hay un pequeño fogón parrilla, mesa y asientos, y nunca falta un grifo con una pequeña pileta y el poste de electricidad, para luz, energía, cable tv, internet y telefonia.

Es como si armásemos la carpa dentro de un departamento.

Elegi una zona de arboles pequeños, no buscábamos sombra y son mas seguros si hay viento o alguna tormenta.

El club house es completísimo, bar, restaurante, proveeduría, baños y vestuarios.

Hasta un pequeño cine, que según dijeron funciona en temporada. Lo mismo que el pelotero y juegos para niños.

Por fin desempacamos y me apronté a armar la carpa, con la ayuda de Daniel,  sirviendo de profesora, pues el de esto nada.

Creíamos iríamos a parar a un lugar menos civilizado, con muy pocas comodidades, solo proveeduria y baños, con eso era suficiente.

Hay hasta servicio de emergencia medica, gimnasio y profesores de deportes.

Bueno con ignorar su existencia, el clima lo crea uno.

Lo primero devorar los sándwiches y la bebida que habíamos llevado, luego a ponerse las mallas y al mar.

Había muy poca gente, mucho sol por suerte que atenuaba en parte los efectos del fresco y el viento.

Pero una camperita sobre la espalda era suficiente, luego de unos minutos de paleta ya estábamos en clima y gozábamos plenamente de la playa.

Eran casi todas parejas, casi no había niños.

Algunas parejas se abrigaban cerca de lo medanos, eso pensamos hasta que al ir a buscar una pelota que se nos escapó, pude ver que no era para eso ambos desnudos cogían de lo lindo.

Al regresar le cuento y no lo podía creer hasta que de lejos se ve al hombre que se levanta y no tenia nada, solo blandiendo su pija al caminar.

Se podrá hacer nudismo? Nos preguntamos.

No claro que no, son unos transgresores, pero que aparato lucia el transgresor  !!!.

Es que se hace complicado cuando una va con su hijo ya mayor de camping, aparentando ser una pareja normal, para que no trascienda nuestro parentesco y la gente crea que somos incestuosos.

El correr, y jugar, darnos unos buenos chapuzones en el agua y el inocente embadurnado con protector solar, de ninguna manera hacia posible tal situación. Además ambos nos respetabamos como lo que somos madre e hijo.

Asi pasó la tarde. Luego el asó unas chuletas y cenamos con una buena ensalada y un tinto bien oscurito que me puso alegre.

Salimos a recorrer a ver si hacían fogones, pero no encontramos a nadie, de algún motorhome se escuchaba una guitarra, pero era asunto privado.

Al final fuimos al home  a tomar un buen café con coñac, la noche estaba fresquita, y estábamos todavia en malla pero con sendos pulóveres y yo además con un gaban de él.

Me comentaba que nos vamos a cagar de frio, yo lo tranquilizaba diciéndole que las bolsas de dormir eran muy abrigadas y además tenia una petaca con gin que había traido por si acaso.

De todas formas, vecino al campamento hay un hotel y en la periferia bungalows que alquilan, con aire acondicionado.

Si las cosas se ponían feas recurriríamos a los adelantos de la civilización.

Desde que tenia cinco añitos Daniel durmió en su habitación, asi que seria la primera vez ya de grande que compartiesemos el reducido y precario dormitorio que es la carpita que tenemos.

Eso me inquietaba un  poco, no por lo que puedan estar pensando, sino por algún ruido molesto, alguno acompañado de feo olor.

Pero, no, todo mas que bien dormimos cada uno encerrado en su bolsa, que por tener un interior de lana sobre la tela encerada exterior y cerrada con su doble cierre  relámpago, mas el licor ingerido, yo al menos hasta sentía calor.

Si era mi libido?, no, para nada, ni remotamente paso algo asi por mi cabeza.

Al otro dia al baño y luego a encender el anafe a gas, una belleza, y calentar agua para unos mates con bizcochos.

Lo despierto con mis mates lavados y los recibió con alegría, me dijo al final, no es muy distinto a dormir en casa, lo único el piso esta durito.

Maricon, levantate y respira el fresco matinal. Yo con pullover y pantalón y el en bóxer se cagó de frio. Abrígate sino te quieres enfermar.

Por suerte el dia era bien soleado y mas caluroso que el anterior.

De lo que llevamos solo quedaban bebidas asi que quedamos que  de vuelta de la playa iremos  a la proveeduría.

El con unas bermudas que le quedan a mi gusto malísimamente mal y yo con una bikini amarilla con soutien wonderbora y tanga hilo, yo en bolas y el abrigadito.

Verme asi no parecía causarle ningún efecto, claro las demás estaban igual que yo y tenían unos fisicos de novela, que se va a fijar en mi una  flaca escuálida. Pero ocurrió algo que cambio su óptica.

Y nuestra relacion.

Cuando me pasa el protector se desprende un cierre del corpiño y salta una teta, la ve y queda como petrificado.

Nene, que te pasa?, nunca viste una teta chiquita?, mira a ver si puedes arreglar a este corpiño que me costó una fortuna.

Sus broche son especiales, y sin un alicate y saber hacerlo es imposible ajustarlo.

Asi que con un cordon de zapatilla lo atamos y listo.

El episodio pasó pero la imagen de este chico me quedo en las retinas, tanto o mas que la pistola colgando del tipo de ayer.

Que me está pasando?

Bueno si solo fuese a mi no seria nada pero temo que  a él también.

Para colmo un golpe de mar me deja con ambas gomas al aire, allí si no sabia como taparmelas para colmo habia gente cerca y los ojos eran varios que se fijaban en mi.

Me lleva abrazada a la playa y con paciencia me amarra mas el corpiño, pero sentí como me acariciaba las tetas como si fuesen tesoros entre sus manos. El pezón se me disparó. Quedaron duros como nunca y mi cabeza me dolía.

Le pido volvamos, con la campera me tapó y regresamos.

En la carpa me sacó el corpiño y me besó las tetas, que haces?, nada, nada.

No te enojes. Me visto y al quitarme la tanga de espaldas le digo no me mires el culo, no mama, si total con la tanga se ve lo mismo, se te ve totalmente.

Tenia razón.

Ambos abochonados, nos vamos a almorzar al home.

Allí le pregunto si tanto se había impresionado con mis dos naranjitas y nada con mi grupa, porque había sido?

Me contesta no sé, costumbre, tu culito ya lo conozco pero tus pechos son adorables.

Me dejó contrariada asi que las tetas si y el culo no, total ya lo conoce, quien entiende a los hombres.

A la tarde fuimos al pueblo y a comprarme otra malla. De paso le compré una zunga a él.

Me dijo que no se la pondría, que es un relajo, pero si todos las usan, si y las llenan de trapo.

Que? Si; no te diste cuenta que todos son muy armados, de donde? A quien quieren engañar.

Quizás sea cierto, o no?, de todas formas a mi me encantan los tipos en zunga.

Paseamos fuimos al cine y paramos en varios cafes a tomar algo.

Se hizo de noche y no habíamos comprado comida, no importa cenamos por aquí.

Comimos unas paellas de locura y nos bajamos cuatro cervezas de a litro, mi panza parecía un tambor, pensaba esta noche lo voy a volver loco a los pedos.

Regresamos cantando y saltado como dos chicos.

Se iba al baño y le digo porque no te pruebas la zunga, hasta allí sin intención.

Lo hace al regresar me muestra, y lo cargo, cuanto trapo te has puesto. No me contestó, pues y le dije a ver desabróchame el corpiño yo me voy a probar mi malla.

Me quito la remera y asi sin nada le alcanzo el soutien. Me giro y le digo y?, nada, acariciando  me lo va colocando, allí sentí sus manos de hombre y ya no me importó que fuese mi hijo. Luego la tanga, me la coloqué yo, pero de frente, allí si su mirada se clavó en mi raja, creo que fue algo bueno para él que estuviese bien depilada, asi se notaba lo rosadita que la tengo.

Que tal me queda? Divina, y pensar que me salió la mitad de precio que la otra, tanta marca al pedo.

Bueno a cambiarse para dormir, me voy al baño.

Regreso con mi camisoncito y me pongo unas bombachas, allí el me vió. Ya tenia puesto su bóxer que usaba a modo de pijama.

No sabia como hacer, le doy gin y le pregunto anoche pasaste frio?, no por?, bueno yo un poco.

Es que tu bolsa es mas grandota y mas mullida que la mia, sabes con tu padre la mia ni la usaba.

Y donde dormías?, hijo que pregunta en la de él.

No se como  se atrevió y dijo: “ SI QUIERES”.

Si claro pero ojo que soy tu madre.

Debió haber notado que lo dije sin convicción, no sé.

Me meto junto a el, a su izquierda, el me pasa su brazo debajo mi cabeza y se lo uso de almohada, el esta boca arriba y yo de costadito contra él, levanto mi pierna y se la apoyo sobre las suyas y con mi mano izquierda me deslizo por su pecho y su pancita hasta llegar al borde de su bóxer, allí me quedo, él nada, creo que andaba con miedo, no sé.

Mi mano derecha la bajo a mi bombacha la siento mojadita, tengo unas ganas terribles y recuerdo cuando los chicos en el secundario nos cargaban y nos decían que eramos “las adoratrices de tremendo bulto”. Que locura, pensar en ello, pero me sentí adoratriz del de mi niño.

Me animo y me cuelo por debajo del bóxer, allí sobre su ombligo descansaba la cabeza humeda de su bella pija, pensé le llega la ombligo, que lindo largo la tomo con mi mano y pulso su grosor, es bien gorda, lo que necesita mi cosita que llora sus juguitos anhelándola.

Esta dura y con mi caricia se pone mas dura todavia, no se que hacer por donde comenzar pero son tantas mis ansias que me quito las bombachas y el camisón, asi en pelotas me le subo el mientras se había bajado el bóxer, tomo aquel trozo divino y me lo apunto me dejo caer mientras el levanta algo su culo, lo siento deslizarse despacio, hacia el fondo, me llena toda, que placer tan grande, sus huevos llegan a tocar mi   perineo y su cabeza mi utero, por fin soy su hembra, se lo digo y él apenas puede decirme, “mama”…..

Me vuelco sobre el y mis tetas contactan su pecho, siento en él un temblor, pienso ya se correrá?, no, comienza a moverse y yo a acompañarlo con cuidado para seguir degustando tan bello instante, no le llego a los labios, le beso el pecho peludo y una de su manos me acaricia la cabeza mientras la otra lo hace sobre mi culo.

Mi ardor es tanto que comienzo a sentir esa loca sensación que baja desde mi cerebro por la columna hace eclosion en mi ojete y estalla en mi concha, me viene, no deseo aguantarme solo acabar y asi mi primer orgasmo con mi niño, lo disfruto y padezco con todos mis sentidos deseaba que nunca terminase mientras el me bombeaba y acrecentaba mas mi placer, quizás también él?, no, cuando me calmé se detuvo un instante y luego retomó su movimiento, lo seguí, lo seguí, cada vez con mas fragor, siento que le viene se le hincha dentro mio, o al menos asi lo imaginé, escucho, la saco?, empuje con todas mis fuerzas para que se diese cuenta que necesitaba su leche dentro mio.

Asi lo entendió, comenzando a eyacular con pulsaciones ardientes que me resultaron un bálsamo,  de nuevo la sensación de un nuevo orgasmo me viene, gozo tanto que le pido quedate, abrazandolo mas, empujando para que esa pija no se saliese y por fin mi orgasmo llega, mitad con su miembro dentro y mitad ya afuera, sobre mi concha con su cabeza que rozaba mi lengüeta lo que multiplicaba mi gozo.

Al salirse de mi alcanzo su boca dándonos el beso mas profundo y largo de mi existencia.

Mamita, eres divina, me dice; no de ahora en adelante llamame con cualquiera de mis nombres, Monica o Daniela el que mas te ratonee.

Para mi seras Daniel mi macho, mi hombre y para ti quiero ser tu hembra, tu mujer, tu puta.

Mencionar nuestro parentesco solo servirá para que aparezca en nuestras mentes lo incestuoso de todo esto y  deseo vivir sin ese condicionamiento que impone la sociedad.

Asi abrazaditos con los jugos de ambos sobre la bolsa, nos dormimos.

Bien de madrugada una fuerte gana de mear me despierta, no se que hacer ir hasta el baño o mear al pie de la carpa, me asomo, nadie pero hay faroles que alumbran, antes no los habia y una podía mear tranquila, pero ahora…..

Lo hago  y espero que nadie me haya visto, regreso a la bolsa, mi amor se había puesto de costado, me daba su culo y asi en cucharita sigo durmiendo.

La claridad anuncia un nuevo radiante dia, mi amor estaba volcado hacia mi y lucia su pija dormidita con su cabecita escondida, allí recien pude apreciar como era, cuan grande  es.

Me agacho y me la pongo entre los labios y con mi lengua urgo dentro su capullo, la cabeza no tarda en despertarse y querer salir mientras que la arrugada vaina se va estirando mostrando que su lisura solo se ve interrumpida por un par de venas que parecen ir abrazandola desde la base hasta casi la punta.

En lo mas lindo de la mamada siento su mano acariciar mi desgreñado cabello, lo había despertado.

Me hice la desentendida y segui, metiéndomela parcialmente en la boca, estaba rica y olorosa, como a mi me gusta ese olor a bolas sudadas tan de macho.

Por fin su voz, amor, que lindo despertar, ahora siento que lo de anoche fue realidad y no un sueño. El sueño que tantas veces tuve, no imaginas desde cuando.

Tenia ganas de preguntar pero para eso debía abandonar lo que hacia y por su respiración adivinaba que lo estaba disfrutando, por fin, me dice deja sino voy a acabar en tu boca.

Sigo y con la mano le hago seña como que siga adelante, y siguió; unos fuertes latigazos de leche inundaron mi boca, que con trabajo y gusto fui tragando mientras con mi lengua limpiaba las ultimas gotas que podía succionar.

Levanto la vista y le pregunto: te gustó?, que pregunta tan boluda, como no le va a gustar.

Me contesta que si y que lo dejara pues ahora me tocaba a mi.

Con la loca calentura que tenia de mamarlo, poco duro su lambida sin que me desmadrara en un orgasmo tremendo, lo bañe de flujo, luego pensé con la concha toda sucia de anoche y de mi meada, que gusto tendría.

Pero al besarme en la boca comprobé que no estaba tan mal, esa combinación de jugos era sabrosa.

Luego al cambiarnos fuimos a los baños nos duchamos y descargamos nuestros vientres, ya livianitos y sin ganas de hacer ni siquiera unos mates desayunamos en el bar.

Felices, no parábamos de besarnos, pero solo eso, yo le pongo la zunga, y como ya la tenia morcillona, protestaba que se la comprimía bastante, por eso le gustan mas las bermudas, si se le para, no molesta y la oculta.

Le pregunto y cuando te paso eso?, desde que llegamos y contemple ese bello culito y no digo cuando pude ver tus tetas, con las que tantas veces había soñado.

Eres un depravado, asi que te querías coger a tu mamita?, si, seguramente.

Y desde cuando?

Desde siempre mi amor, me contesta.

Las pajas que te habras hecho a mi costa y yo ignorandolo?

Si innumerables, casi todas eran con tu imagen.

Y tu?, me pregunta, NUNCA…….., bueno recien hace unos días una remota idea rondó por mi mente, la deseché de inmediato, pero esto del campamento la reavivó y aquí me tienes.

Al regresar para ponernos las mallas y llevar los enseres de playa vemos que han acampado unos nuevos vecinos, en una carpita iglú de las mas chicas; que temblaba agitadamente, me dice mira como se están dando.

Al rato me llama para que vea al tarzan haciendo gimnasia y  la gordita que lo acompaña, son unos chicos.

En la playa se colocaron cerca nuestro, como para hacer amistad, los pobres con solo una lonita y con el sol de hay, están tan blancos, esta noche estaran tan quemados que no se podrán ni acostar.

Nosotros con la sombrilla, y todo el equipamiento, al pasar por el home cargamos el termo con agua caliente y compramos facturas, nos pasamos la crema anti UV y con sombreritos nos dispusimos a matear.

Lo observo a mi Daniel y pienso a lo que hemos llegado, que mira?

A la gordita que para colmo estaba tomando sol en top con las tetas al aire.

Le  reprocho lo que hace y me contesta que yo también le miro la zunga a los muchachos, lo que es verdad, son los cuernos “de mirada”.

La nena tiene un par de tetas grandes, pero el me hace notar que no tiene pezones.

No puede ser, mira;  … en efecto no se le notaban. Es que deben ser tan palidos que se confunden con el resto.

Se levantan y van corriendo al agua, el chico llevaba unos short pequeños y se le notaba el bulto, a la ida cuando  regresaban ya no lo tenia; el frio del agua lo había calmado o la nena lo ordeñó.

Me apiade de ellos en una corrida de regreso la llamo a la nena, y le ofrezco la crema UV, para que no se quemen demasiado y converso un poquito con ella, Daniel la miraba demasiado, esas tetas sueltas y un culazo indisimulado por la tanguita que usaba, lo estaban fascinando.

Luego lo reto y me dice muy orondo, solo miraba que sus pezones son rosados por eso no se notaban. Y su culo?. Me contesta: bien gracias.

Mira hijo de puta como esta esa zunga la vas a reventar, vamos al mar y te descargo.

Nos echamos un polvo debajo del agua, la verdad un desastre el movimiento del agua, el tener las mallas aferradas para que no se la lleve el mar y la preocupación de que nos estuviesen mirando, casi lo arruina.

Al final protesta, esta zunga no la uso mas, no hay como las bermudas, uno la saca por debajo y no hay peligro de que quede en bolas por una ola traviesa.

Ya casi mediodía, me comenta mira que incendio de pastizales por allá.

Se veía el cielo bien negro sobre los medanos hasta la playa, pero no sobre el mar.

Al rato comienza a ir sobre el mar y ya se ven relámpagos que bajan desde esos negros nubarrones, es una tormenta, rajemos.

Comenzamos a retirar los petetes y la descalzar la sombrilla, les avisamos nuestros vecinitos que seguían acurrucados ignorando todo lo que ocurría  a su alrededor.

Nos vamos hacia el campamento, pero la tormenta ya casi estaba sobre nosotros, nos alcanza cuando faltaban unos cien metros, agua y granizo, dolían los piedrazos, abrimos la sombrilla y nos aferramos  a ella para que no se nos vuele, llegan los chicos, les decimos que vengan abajo la sombrilla con nosotros, nos agradecen,  ella corriendo con sus tetas sueltas ajusto pegada Daniel, yo me moria de celos.

Llegamos a unos quinchos que se usan en verano cuando hay mucha concurrencia, son de madera y paja, es increíble lo que cubren, el granizo bastante grande y muy tupido habia sembrado toda la arena de un color blanco; hacia mucho frio, yo llevaba el gaban de mi niño pero ellos nada, a la nena me la traigo conmigo, para abrigarla un poquito y estamos muy juntos para no helarnos.

A los pocos minutos pasa todo y hasta parece despejarse, llovia normalmente por momentos s olo garuaba.

Llegamos al campamento y la carpita de ellos no estaba.

Al final la vemos contra el fondo de la nuestra, el viento la había arrancado y la hizo rodar hasta allí.

Los hombres se ocuparon de llevarla su lugar y volver a clavarla en el suelo.

Al abrirla era yerba y azúcar desparramada, todo revuelto y sucio, un desastre.

La nuestra destilaba agua por su suelo hacia la entrada, menos mal que yo previsora y de acuerdo a lo aprendido en mi juventud elegí un pequeño declive para ubicarla, por algún lado entró agua.

Al revisarla una rajadura del techo sobre la parte de atrás y sobre el fleje soporte en arco, seguramente las piedras la rasgaron, es que la pobre carpita tiene veinte años y estaba reseca.

Algunas cosas se mojaron y solo se solucionaba reparándola, pero donde conseguir cinta adhesiva de ese ancho para hacer una reparación de emergencia.

Le  digo, y si nos vamos al hotel, total ya la experiencia de camping la hemos hecho, le gusto la idea.

Y la carpa?

Se la regalamos a los chicos.

Si algún dia se nos ocurre hacer otra joda de este tipo compramos una.

Los llamamos y les dijimos nuestra decisión, locos de contentos nos abrazaban a los dos, por suerte la nena ya tenia puesto un mullido pullover.

Vamos al hotel, nos instalamos y nos disponemos a almorzar en el restaurante, me acordé de ellos, pobres ni comida tendrán, ve a llamarlos.

Vinieron e insistieron en pagar al menos las bebidas.

Luego iran por los elementos para reparar la carpa y esta noche usaremos la bolsa de dormir, le digo hay dos; se miran y me contestan con una nos alcanza.

Se sonrojan y ella agrega estaremos mas abrigados.

Habran pensado:  estos viejos dormían uno en cada  bolsa.

La tarde estaba gris, aprovechamos para disfrutar el hidromasaje y los adelantos de la tecnología, el campamento es lindo, pero muy sacrificado, hay que tener ganas y sobre todo edad para practicarlo.

Hicimos cuanta postura se nos ocurrió, también sentí su dedo urgando mi ojete, te gusta?

Si esta muy lindo, muy cerradito.

No creas hijo que me lo desvirgaras, has llegado tarde para ello, pero cuando quieras aquí lo tienes abriéndolo con ambas manos. Su lengua no dejó de gustarlo pero ese dia no me lo hizo.

Esa noche luego de haber gozado su hermosa pija, ahora él dormido, se la contemplo y me llegan tantos recuerdo, pensar que de bebe se la chupaba, es que aconsejaban bajarle la pielcita hasta descubrir la cabecita, asomaba tan roja, un rubí, asi la veía.

Ni por asomo se me cruzaba pensar que algún dia me llenaría la concha con ella, con su leche y quizás con algún crio que me haga.

Eso sucedió por poco tiempo porque el pendejo se deleitaba cuando lo cambiaba en mearme, y lo hacia seguido, con su pitulin siempre apuntándome.

Ahora me gustaría me lo haga, se lo pediré. Asi mi ensoñacion hasta perder el conocimiento en  profundo sueño.

Cuidarme?, no.

Con el no me cuidaré, ya lo hice por años con su padre, con él que pase lo que pase, disfrutar su carne y su néctar es lo principal.

Asi pasamos varios días mas, vida de playa y hotel, la mas bella luna de miel.

Al otro dia nos vemos en la playa con los chicos, ella, la gordita solo con la diminuta tanga, parece que andar en tetas para ella es normal.

Nos juntamos y aprovechaban un poco de la sombra de nuestra umbrela, nos contaron de sus vidas, de sus ambiciones y de sus sueños, yo por mi parte les relate una bella historia de amor si detallar nada comprometedor, Daniel callaba mientras miraba los limones y el culo de la nena.

Lo importante que a la noche querían que fuésemos al campamento pues Raul haría un asadito para los cuatro.

Al mediodía solo sanguches playeros y gaseosa medio caliente que vendían al paso.

A cada rato estos pendejos se franeleaban y corrian al mar, ella me dijo es que Raul no la puede bajar es algo maravilloso, siempre al palo.

Ahora era yo la que me engolosinaba mirando al bulto de Raul, ya que Daniel estaba con sus holgadas bermudas, nada exitantes. Aun pensando lo que ocultaban.

Se me ocurre otra locura, porque no le regalas tu zunga a Raul?, podría ser lastima que le quedará muy grande. Lo miro y le grito ”fanfarrón”.

Cuando vamos a cenar  se la entrego a la nena y enseguida se la hace estrenar a Raul.

Me comenta sabes? Y no te enojes por lo que te voy  a contar.

Que?

Que bien le quedaban a Damian, las calenturas que me daban.

Bueno ahora te calentaras con lo tuyo, no con lo ajeno.

Viste te enojaste,……..  no por favor y la beso, en el abrazo sentí sus tetas, me muero de envidia, con su tamaño y mis pezones soy mis universo.

No le dije que también Raul la llena con su aparato y le quedan bien, al final no les resultaron holgadas.

Asó cuatro rivets, estaban muy buenos, yo le  decía no lo dejes escapar hasta sabe cocinar.

Por fin luego de una bella tarde de sol y mar, la ultima pues al otro dia regresábamos mi culito lo recibó como solo  el lo merece, lo gocé y me sentí realmente suya, es que la enculada saca de mi la esclava que toda hembra que se precie desea ser de su hombre,  ya era completamente suya.

Quede un poco dolorida y en el viaje de regreso me senté un poquito de costado, sobre una nalga, es que la tiene realmente grande, para un ojete no acostumbrado resulta inmensa.

Allí me propuse que rápidamente debía adaptárlo a ella por eso la comencé a usar por ese sucio agujero bastante seguido.

En mi rutina diaria se agregó el sexo como el mas bello acto.

Adoro cuando me pide no use bombachas y cuando llega me toma desde atrás y sus labios se posan en mi nuca, allí comienza el delirio.

Hasta hemos dejado de cenar algunas noches de lujuria extrema, nada hemos dejado de hacer, temo algún dia termine tanta felicidad.

Ahora mientras escribo me acaricio mi pancita de cuatro meses, ya se que será varon, otro macho en casa, si crece rápido seguramente si el lo desea me tendrá como me tiene su padre, mi adorado hijo.

Y si lo desea, le enseñaré también a acampar.