Campamento del Lago Tahoe - I

Campamento del lago Tahoe – El comienzo

Hola, buenas a todos, este es el primer relato de una serie, es el primer relato que escribo así que espero que les guste y sean comprensivos si cometo algún error, espero ir mejorando poco a poco. Quiero agradecer a los autores que involuntariamente gracias a sus relatos me animaron a escribir esta serie, de manera especial un agradecimiento para Caractato, Bambino y Sebastian Wine. Y de manera muy especial a Andrew por su ayuda, si tienen tiempo por favor lean sus relatos, son excelentes.

También quiero aclarar que este primer relato no contiene sexo, es una introducción pero poco a poco las cosas se irán dando.

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Zac:

¡Por fin! Éste será mi hogar durante los próximos tres meses, mi nombre es Zac Villalba, tengo 15 años y recién acabo de graduarme de secundaria, físicamente soy alto, mido 1.80, de piel blanca ligeramente bronceada, cabello café castaño y ojos color avellana, con pequeñas manchas verdes y el cuerpo tonificado por el deporte.

Soy miembro de un equipo de natación y como parte de una recompensa por haber ganado el campeonato estatal estos tres meses estaré en el Campamento del Lago Tahoe en California.

Lo primero que noto al llegar es que el campamento se divide en tres enormes cabañas, por lo que tengo entendido dos de éstas están reservadas para una escuela, la primera aloja al equipo de football y la segunda a las porristas, por último esta mi cabaña, en ésta nos quedaremos mi equipo y yo, estos tres meses estaré conviviendo con mi equipo y con los miembros del equipo de football y las porristas, lo sé, muchos de ustedes pensarán que sería genial estar rodeado de hermosas porristas, sólo que hay un detalle…

Soy gay. Aunque nadie lo sabe. No es que sea afeminado pero siempre he sabido que lo mío no son las mujeres, nunca he tenido una relación con un hombre y mucho menos con una mujer. Espero que este verano eso cambie y por fin tenga algo con alguien, aunque no sea sentimental. Estoy viendo al equipo de football cuando siento que alguien me toca el hombro.

-       Oye Zac ¿ya viste que sabrosas están las porristas?

Volteo y me encuentro con mi mejor amigo Víctor.

-       Sí por supuesto que lo son –Pero están aún mejor los chicos del equipo, en especial ese de la gorra azul,  pienso para mí-

Víctor físicamente es parecido a mí en estatura y complexión, solo que él tiene la piel más bronceada el cabello más oscuro y unos profundos ojos negros, lo mejor de él es su sonrisa y su rabo, ¡Dios! Que pedazo de pene de carga, se lo he visto después de entrenar cuando vamos a las duchas, flácido debe de medir unos 12 cm. No es muy grande pero tiene el grosor y la forma perfecta.

-       Anda, vamos a desempacar.

Lo sigo y entramos a la cabaña donde ya están algunos miembros de mi equipo.

-       Creo que estos serán los mejores tres meses de mi vida -Sonríe y me da un golpe en el hombro

-       Sí, la verdad el entrenador se lució con este viaje, Yo ya tengo hambre ¿tú no?

-       La verdad sí –Y como si nos hubieran escuchado se escucha el parlante anunciando que todos los campistas pasen al comedor-

-       ¡Qué bien! Vamos de inmediato –Y sin esperar una respuesta mía Víctor se va corriendo y yo lo sigo-

Entramos a un gran comedor con muchas mesas, varios de mis amigos se encuentran sentados con algunas porristas y miembros del equipo de football, yo sigo a Víctor y nos sentamos en una mesa donde se encuentran dos porristas, una de ellas es hermosa, no puedo evitar fijarme en su cabellera roja.

-       Hola, mi nombre es Víctor, ¿mi amigo y yo podemos sentarnos aquí?

-       Por supuesto –responde la pelirroja-  Mi nombre es Amanda y ella es mi amiga Amber

Saludamos educadamente a las dos chicas y me presento.

-       Mucho gusto, mi nombre es Zac y somos miembros del equipo de natación.

-       ¿Es la primera vez que vienen a este campamento verdad? –Pregunta Amanda sin esperar respuesta- Les explicaré cómo funciona esto, primero nos traerán el desayuno y después los capitanes de los equipos se presentaran y dirán un pequeños discurso acerca de la convivencia que se debe de dar entre todos los miembros de los equipos, en el caso de las porristas yo soy la capitana y el capitán de Football es Alejandro ¿Quién es su capitán?

-       ¿Capitán? Nosotros no tenemos.

-       Bueno creo que deberían de elegir uno cuanto antes –Nos aconseja Amber mientras se pinta las uñas-

-       Enseguida volvemos chicas –Se despide Víctor y lo sigo-

Reunimos a todo el equipo y les comentamos la situación, ellos proponen una votación y así lo hacemos.

-       Bueno creo que hay un empate entre Zac y yo –Dice Víctor esperando una idea del equipo-

-       Lancen una moneda –Intento ver quien hablo pero no logro hacerlo entre todos-

Víctor acepta el concejo, cara él y sol yo, la verdad espero que no me toque a mí.

-       Y esto es… sol, felicidades Zac eres el capitán del equipo – Maldición pienso para mí entre felicitaciones de mis amigos-

Regresamos a la mesa con Amanda y Amber que por suerte aún tiene nuestros lugares vacíos.

-Y bien, ¿Quién es el nuevo capitán? –Pregunta Amanda-

-Soy yo –ambas me felicitan y Amber comienza a platicar con Víctor-

Nos traen el desayuno a la mesa, pan francés, tocino, huevos, puré de papa, jugo de naranja y leche, definitivamente estoy empezando a amar este lugar. Tal y como lo dijo Amanda la directora del campamento anuncio que el capitán del equipo de football daría su discurso. El chico que paso a dar el discurso no era otro sino el chico de la gorra azul.

-       Amanda ¿Quién es él?

-       Es el capitán del equipo de football, su nombre es Alejandro

Alejandro, todo él era perfecto, es alto, más alto que yo, posiblemente casi llegue a 1.90, muy musculoso con unos enormes brazos, cabello negro medianamente largo y ligeramente ondulado, ojos verdes y una sonrisa incluso aún más perfecta que la de Víctor, nariz perfecta y unos labios que te invitaban a besarlos.

-       Y a continuación viene el capitán del equipo de natación a presentarnos su discurso.

Dios por estarlo viendo perdí la noción del tiempo, paso al frente entre aplausos de todos, en especial de Amanda, Víctor y Amber.

-       Hola mi nombre es Zac y soy el capitán del equipo de natación, o eso creo –todos ríen con mi ocurrencia, es cuando noto que Alejandro me ve fijamente y al percatarse de que yo lo veo sonríe- La verdad no tengo preparado ningún discurso largo así que seré breve y sólo les diré que disfruten éstos tres meses de campamento, convivan entre ustedes, se conozcan y hagan nuevos amigos, gracias

Dejo el micrófono y me siento, la verdad no me salió tan mal para ser un discurso improvisado.

-       Estuvieron genial tus palabras –dice Amanda- ahora deséenme suerte.

-       Suerte –respondemos Víctor, Amber y yo al unísono-

No escucho lo que dice Amanda, sólo veo disimuladamente a Alejandro, debe estar diciendo algo muy gracioso, porque seguido se ríe, y que sonrisa por Dios, él es simplemente perfecto, perfecto e inalcanzable, eso me pone muy triste y alejo mi mirada de él, Amanda me hace reaccionar chasqueando los dedos.

-       ¿Zac?

-       Sí, sí, ¿Qué pasa?

-       ¿Qué si te pareció bueno mi discurso?

-       No me pareció bueno –su expresión cambia a tristeza- me pareció excelente – me devuelve una gran sonrisa-

-       Ya me habías puesto sentimental –hace un puchero que después cambia a una sonrisa-

-       Sólo fue una broma.

-       Sí, lo sé, no te preocupes.

Después del discurso fuimos Víctor, Amanda, Amber y yo a conocer el lugar, caminamos un poco, fuimos a la orilla del lago, nos presentamos con varias personas, comimos un banquete de campamento y finalmente decidimos volver a nuestras cabañas a descansar, cuando íbamos es camino una voz que creí reconocer grita mi nombre.

-       Zac, Amanda vengan.

No lo puedo creer es Alejandro, no lo pienso dos veces y camino hacia él.

-       Hola –sonrío-

-       Hola –me devuelve la sonrisa, y que sonrisa-

-       Quería hablar con ustedes dos –No había notado que Amanda se encontraba ahora a mi lado-

-       Pues dinos, que es lo que nos quieres decir –contesta Amanda-

-       ¿Ya están enterados de los cambios en la competencia final de este año? -Si de lejos es guapo de cerca lo es aún más, pienso para mí, se nota que lleva por lo menos un día sin rasurarse, tiene esa barba de la tarde que me vuelve loco, no puedo evitar notar un bulto de considerable tamaño en su entrepierna por lo que supongo que debe de estar bien dotado-

-       No –respondo-

-       Pues habrá una competencia entre los tres líderes en donde tendremos que internarnos en el bosque

-       Que bien – una semana solo con Alejandro, bueno Amanda también irá-

Alejandro se despide sólo con una sonrisa y lo veo alejarse junto con sus amigos, hay uno en particular que es muy guapo, no tanto como Alejandro pero sí que lo es, siento que me ve de una manera rara, como de desprecio, seguramente sólo es mi imaginación. Me despido de Amanda y de Amber y me voy a la cabaña junto con Víctor.

-       Está genial eso de la competencia final no lo crees – Víctor ni me voltea a ver, está muy concentrado en ver como se aleja Amber, no lo había notado, las dos chicas sí que tienen un buen cuerpo-

-       Sí, sí claro, como digas.

Le doy un golpe a Víctor para que reaccione.

-       Joder y ahora que hice.

-       Nada sólo quería que reaccionaras, vamos a la cabaña, estoy tan cansado que a pesar de que sea media tarde dormiré como tronco.

Caminamos juntos hasta la cabaña y me recuesto sobre la cama, sorprendentemente cómoda para ser un campamento, pienso en varias cosas que sucedieron hoy para finalmente quedarme dormido con la imagen de Alejandro.

Despierto de golpe y no puedo evitar darme cuenta de que tengo una gran carpa en mi ropa interior, la causa simple, un sueño más que erótico en el que me imagino a Alejandro y a mí teniendo sexo en el lago.

-       Hasta que despiertas, un poco más y daría por hecho que estabas hibernando

-       ¿Qué hora es?

-       Las 11:00 pm dormilón, cuando dijiste que dormirías como tronco no creí que te lo tomaras tan enserio, ya todos están dormidos y se ducharon, tienes dos opciones volver a la cama y no ducharte hasta mañana por la noche y apestar como cabra o puedes ducharte ahora aunque lo harás sólo.

La respuesta era obvia, no tengo ningún pudor en ducharme frente a otros chicos, lo hago siempre en natación así que tome mis cosas y una linterna para diferenciar las regaderas de hombres de las de mujeres por si estaba muy oscuro, camine hasta ellas con un poco de preocupación, no preocupación a que de entre los arbustos saliera Jason con su cuchillo, preocupado por si alguien había notado mi erección. Llegue al baño y este campamento me sorprende aún más, son muy limpios y espaciosos aunque no tenían división las regaderas, me pareció oír una regadera abierta, seguro alguien olvido cerrarla pensé, realmente me asuste al escuchar una voz.

-       Zac, pensé que era el único aquí –mis piernas temblaron al reconocer aquella voz-

-       Alejandro, este sí, yo solo –no podía disimular mi nerviosismo- me quede dormido y desperté hasta después de que todos se habían ido a la ducha, ¿Pero tú que haces aquí?

-       Es la mejor hora para tomar una ducha, cuando todos lo hacen se termina el agua caliente y terminas tomando una ducha helada, ven toca –Tomó mi mano y la llevo hacia el agua, la verdad no sé qué estaba más caliente si el agua o yo-

-       Tienes razón.

-       Vamos, quítate la ropa

Alejandro se estaba duchando en ropa interior así que opte por hacer lo mismo y tomar la ducha de al lado.

-       Bueno yo ya me voy a vestir, te dejo – se fue y me duche lo más rápido posible para poder verlo cambiarse-

Parece que este es mi día de suerte Alejandro aún no se quitaba su ropa interior

-       Parece que te he alcanzado.

-       Jaja sí, me llego una llamada al móvil y tuve que contestar por eso me retrase.

Finjo secar mis pies mientras veo como se seca lentamente las gotas de agua de su cuerpo perfecto, sus brazos son sencillamente perfectos y bien trabajados, su pecho es duro y muy bien definido, pero sus abdominales vuelven loco a cualquiera, perfectamente modelados, dignos de una escultura de un Dios griego, y es ahí cuando sucede, se quita sus calzoncillos y me deja a la vista algo que me deja sin habla, una hermosa polla de por lo menos 17 cm en reposo con un par de huevos grandes y cubiertos por vello negro al igual que su polla y un capullo enorme y rojo que se antoja para tenerlo en la boca y no soltarlo nunca más, me contengo para no abrir la boca y babear.

-       ¿Te gusta? –dice Alejandro, yo solo lo veo y me quedo en shock.

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Bueno este es todo el capítulo, espero y les haya gustado, es mi primer relato así que habrá errores, espero y me hagan saber que les gusto y que no les gusto para así ir mejorando la historia, muchas gracias por leerlo, comenten el relato o escríbanme a mi correo, espero tener la siguiente parte de la historia muy pronto, nuevamente muchas gracias.