Camino sin retorno. Escapando de la rutina 2
Estaba más curiosa de lo normal.
Estaba mas curiosa de lo normal.
No lograba entender realmente que la sucedía. Nunca se había sentido así. Pasadas unas horas, quizás minutos, volvió a revisar la pagina. Tenia varios mensajes privados en la bandeja de entrada. Entre esos mensajes había uno del chico aquel que le dio la bienvenida antes que nadie, y tranquilamente la dejó terminar de rellenar el perfil, a diferencia de otros que ya la proponían follar o poner la CAM para enseñar sus pollas, eso no la daba morbo, ella no buscaba sexo sin más, eso lo podría encontrar en cualquier lado aún estando casada.
Lo abrió sin dudar el primero. Sonrío. Le gusto. No contesto al momento, reviso los otros mensajes. Realmente lo que esperaba. Invitaciones, propuestas... le parecía interesante, pero mas interesante le pareció el mensaje de aquel chico. Así que volvió a leerlo, pensando por un momento que iba a responder. Respondió lo primero que se le vino a la cabeza. Sin más.
Siguió en sus rutinas, aun pensado en que terminaba todo esto que ella estaba explorando. Y así siguió los siguientes días, semanas.. escribiendo, respondiendo. Estaba claro que aquel chico había llamado de mas su atención.
Sabia expresarse, sin parecer desesperado por echar un polvo, no eran como los otros mensajes, le gustaban.. la hacían desear conocerlo, la hacian desearlo. Estaba claro que aquel chico era un seductor nato. En cada frase escrita, en cada mensaje había algo que la excitaba, no sabia como ni porque, pero así era. Después de tanto mensaje, había llegado el momento de conocerse, de ponerse cara. No había mas medio de comunicarse que esos mensajes privados de la pagina. Era reservado. La gustaba ese detalle.
Se contaron muchas cosas, al parecer el estaba en la misma situación... tenia todo lo que una persona normal podía llegar a desear, pero le faltaba algo... ese algo que en ese momento te hacia sentir vivo y que había llegado a la conclusión de que no encontraria en su matrimonio, y después de sopesar todo lo que tenía que perder, que era mucho, y el daño que podía hacer si le pillaban, decidió que nadie moriría por el cuando llegase su hora, y debía buscar saciar sus deseos, minimizando los daños. Nadar y guardar la ropa.
Se citaron una tarde de sábado. En un lugar neutro. La idea era conocerse y ver que pasaría. La verdad es que ella tenia mucho deseo hacia ese chico, pero luego la daba mucho miedo. Aun así, las ganas de aventura la hizo superar ese miedo, por lo que esa tarde, se preparo... lo mas normal posible. Un vaquero y una sudadera blanca cubriendo una camiseta de tirantes.
Realmente ella no es muy sexy al vestir, pero fuera lo que fuera que se pusiera se sentía morbosa... y esa era la idea. Cogió su coche y se dirigió al sitio, era un sitio solitario, y mas aun porque era un día lluvioso. Mientras conducía estaba muy nerviosa, le temblaban las piernas. Aparco como pudo y espero. Pensó que quizás el no aparecería.. pensó que tal vez a el solo le gustaba "calentarla" mediante los mensajes.. y ella deseaba otras cosas. Primordialmente, deseaba besarlo. No pasaron mas de diez minutos, cuando vio a alguien dirigirse hacia su coche, sabia que era el... se le notaba nervioso también. Era guapo, por lo menos no era un orco... llevaba chandal (punto negativo). Sonrió aliviada... por lo menos no le dio plantón.
Se subió al puesto de copiloto, y hablaron un poco, los nervios no le hicieron recordar después lo que hablaron. En su pensamiento solo quería besarlo... en mensajes anteriores comentaba que besaba bien, quería comprobarlo... se acercaron y juntaron los labios. Ella nerviosa, el deseoso.. tan deseoso que le contagio ese deseo y la hizo perder los nervios. Dios! -pensó-, besa realmente bien!!.. siguieron comiéndose la boca... sintió húmedas sus bragas, no podía ser!!! Era solo un beso!!!
El noto su excitación, porque aún con algo de dificultad desabrocho su pantalón y metió la mano por dentro de él y de sus bragas, estaba claro que estaba cachondo y sabía lo que quería, quería darla placer. Enseguida acaricio sus labios vaginales, que estaban literalmente chorreando, y con mano experta comenzó a acariciarlos, para a continuación empezar a meter primero un dedo... después dos, y comenzar a tocarla de una manera que posiblemente nunca la habían tocado. Era como si aquel chico hubiese leído su libro de instrucciones, y sin llegar a ser brusco, alternaba movimientos suaves con otros más fuertes haciendo que su mano estimulase su clítoris mientras sus dedos jugaban dentro de su vagina al juego más rico que existe, mientras le comía la boca como nunca antes se la habían comido.
No sabría decir cuanto tiempo estuvieron así, posiblemente un buen rato, pero a ella le parecieron segundos y estalló en un orgasmo intenso ahogado por los besos de el. Quería gemir, pero no quería dejar de besarlo, y el parecía que disfrutaba recogiendo sus gemidos en su boca, como si se alimentase de ellos. Fue un orgasmo largo, intenso, la temblaban las piernas, y en la parte final del mismo, y sin dejar de mover sus dedos dentro de ella, el separó su boca y se quedó mirándola de cerca, con mirada de deseo y disfrutando de los sonidos y respiraciones que salían de la boca de ella. Era como el artista que se deleita ante su obra de arte. Se sintió en sus manos, deseo ser suya, y no sólo físicamente, quería ser su objeto de deseo y morbo, en ese momento hubiese hecho cualquier cosa que el la pidiera.
Cuando ella terminó su orgasmo, el la cogió la cabeza y la dirigió hacia su entrepierna.. se saco la polla y la invito a meterla a la boca. Ella no dudo y se la metió entera... estaba muy húmeda, le pareció deliciosa, le pareció lo mas excitante que había hecho en muchisimo tiempo... se recreo un buen rato saboreando aquella polla de aquel chico que sin saber porque le gustaba tanto. Combinaba pasadas de lengua arriba y abajo por su tronco, con suaves lamidas en su capullo y meterla hasta el fondo en su boca, entera mientras le acariciaba los huevos. Todo ello provocaba mucha salivacion por parte de ella, una saliva que lubricaba toda su polla y resbalaba por ella mojando sus huevos y llegando a manchar el asiento del coche. El se estremecia con cada lamida y engullida que ella le daba, subía y bajaba la cadera acompañando los vaivenes de su cabeza al mamarle. No sabía que tenía aquella polla de especial, a simple vista se podría decir que nada, las había probado más grandes. A decir verdad, alguna tan grande que ni si quiera sabía cómo había cabido en ella, y está no era de esas grandes y espectaculares, pero sin lugar a dudas era la más rica que había probado. Y estaba dura, muy dura, y eso la excitaba, porque ella se sintio muy cachonda al comerse esa polla y más cachonda la ponía saber que estaba así de dura por ella, que todo era recíproco. Era justo el tipo de morbo que buscaba, ahora estaba empezando a saberlo, incluso estaba superando sus expectativas a nivel de sensaciones y excitación. Siempre había disfrutado dando placer en general y especialmente con su boca, una boca grande, de labios carnosos casi siempre pintados de rojo, que hacían resaltar la belleza de sus labios y de sus blancas y alineadas filas de dientes, pero esto era más que eso, la daba placer sentir el placer de el, sentir sus gemidos, sus espasmos, sus movimientos buscando disfrutar más de su maravillosa boca, follandola hasta el fondo de su garganta e incluso un poquito más, pero además, se había viciado con aquella polla. Era realmente deliciosa y sintió a que podría estar comiendola durante horas, quería poder comerla para siempre. Y además el morbo de estar haciendo todo esto aparcados al lado de un parque.
No se llego al final. Alguien paso caminando junto al coche, paseando un perro con su paraguas, y miro hacia dentro del vehiculo. Pudo ver claramente como ella le estaba comiendo la polla, incluso aminoro el paso para recrearse, y el se puso nervioso... los nervios al final jugaron malas pasadas. Hablaron un poco mas. Del siguiente encuentro.. ya hablarian se dijeron. Se despidieron y se marchó. Ella se recompuso, y se marcho a casa. No podía creer lo que había acabado de pasar,realmente la había gustado, y se sentía satisfecha aun sin llegar a tener nada mas que una mamada a medias un coche.
Llegada a casa.. se metió a la ducha, necesita una ducha caliente, relajarse y pensar que en lo que había sucedido.
En la ducha se toco, se masturbo pensando en él, en sus labios, en su polla. Imaginado que era el quien le acariciaba el coño húmedo, imaginando que era el quien la ponía tan cachonda... se masturbo hasta correrse, no tardo mucho, estaba realmente excitada. Salio de la ducha aliviada.
Ya pensaría que hacer con todo esto, quizá ya tenía lo que buscaba y era hora de parar, o por el contrario había abierto la caja de Pandora, y esto era sólo el comienzo... Estaba confusa.