Cambio de ruedas en un taller en São Teotónio

Aquel mecánico no me quiso atender... no teniendo más remedio que llamar su atención, me puse en cuclillas delante de él y joder que me atendio

Cambio de ruedas en un taller en São Teotónio

Hola… me llamo Susana y desde este medio os he estado contando mis experiencias, ya sean buenas o malas… satisfactorias o traumáticas. Me tenéis que disculpar que a veces sea tan explícita a la hora de contar con todo tipo de detalles lo acontecido, pero pienso que es la única manera de poder expresar lo sucedido y de paso desahogarme.

El recrearme con lo sucedido no es por inmortalizar lo ocurrido… ni enmarcarlo, pero creo que es justo para todos que me pare y cuente aunque sea con todo lujo los detalles de esas experiencias, dándome cuenta que gracias a este medio es la única forma que me sincero… ya que en persona no me atrevo a contarlo, acabando por sentirme mal y no solo por los que les atañe.

São Teotónio es un pueblo o pedanía de la ciudad de Odemira… Portugal, cuyo fue mí último destino antes de tomar mis más que merecidas vacaciones, me mandaron a estudiar e inspeccionar posibles puntos, teniendo que hacer un estudio y valoración sobre estos, ya sea para ahora o para un futuro no muy lejano, teniendo que ser yo quien decidiera si era viable o en viable.

Bueno tras cerca de tres horas y media de viaje donde page una vez más cerca de diez euros tras pagar una pequeña cantidad en cada paso del peaje (2,00€, 0,85€, 1,45€, 0,40€, etc.), llegue a Monchique donde me aloje en un hotel y descanse un poco, refrescándome más tarde en la piscina del hotel. Tras cenar en el mismo hotel me recluí en mi habitación no siendo muy normal en mi, pues deseaba descansar y planificar mis visitas, ya que había informado en recepción que deseaba salir temprano al día.

Bueno tras despertarme a eso de las seis de la mañana... me duche y me dispuse a vestirme, decidid ponerme algo fresco… pues a pesar de ir por trabajo, también me lo tome como el inicio de mis vacaciones. Me puse un bikini y sobre este un vestido veraniego, chanclas tipo romanas y me puse en marcha, tras cerca de dos horas y media note algo extraño en el coche pero no lograba dar con él, tras recorrer diferentes posibles emplazamiento... me fije en una de las ruedas y me di cuenta que estaba más vacías que el resto, dándome cuenta rápidamente el motivo y este no era otro que una posible rotura.

Asustada me vi en la necesidad de buscarme la vida, preguntando en un supermercado una amable mujer me recomendó un taller y me informado de donde se encontraba este, por lo que me puse en camino donde poder comprar otra rueda como la puesta o poner dos iguales. Este taller según las indicaciones de la amable señora se encontraba en São Teotónio, tras ponerme en marcha no tarde más de media hora en llegar, dándome cuenta por el letrero del horario que aun le faltaba media hora en abrir, quedándome en el interior de mi coche a que abriera.

Tras no pasar más de diez minutos un hombre con aspecto… miento mas por su vestuario me hizo pensar que era uno de los mecánicos, tras abrir este las puertas se quedo en su interior saliendo yo del interior de mi vehículo para que este me informara si tenían ruedas del tipo de las mías o no.

Después de entrar me encontré a esta persona sentada sobre un latón… comiéndose una manzana, este hombre de físico delgado, alto y con aspecto canoso de no más de sesenta años, me indico muy amablemente al señalar su reloj que aun estaba cerrado, pero yo insistí… mas por cabezonería. Volviéndome este a indicarme que me fijara en un cartel en el cual se reflejaba el horario y que este era de 8:30 a 13:00 horas  y de 14:00 a 18:30 horas, no conformándome con sus indicaciones le insistí varias veces… cosa que este no quería ayudarme.

No teniendo más remedio que llamar su atención con mis encantos... eso sí, como si fuera de una forma casual y sin intención alguna. Me puse en cuclillas delante de él al tiempo que le enseñaba una especificaciones técnica, rápidamente me di cuenta que este adorable hombre de canoso cabellos acabo por clavar sus ojos entre mis muslos, dándose cuenta que mi prenda interior debía de ser un tanga… mmm. Sin retirar la vista de mi entrepierna se prestó a ayudarme, preguntándome primero por el tipo de rueda de mi coche.

  • “Mi rueda pone 205 / 55 / R16”, le dije.

Este me informo que de tales referencias solo le quedan de un tipo que eran: FARROAD (cuyas características eran: Consumo/Gasolina: E; Adherencia al Agua: B y Ruido: 92Db). Pero me informo que debía de esperar al oficinista para que este me informara de su precio. No quedándome otra que esperar a este… pero como me había gustado como llame a este la atención, continúe con mi jueguecito… mmm (joder, lo reconozco soy una calientapollas… ji ji ji).

Tras esperar un cuarto de hora apareció uno que dirigiéndose al primero comenzaron a hablar en su lengua… dándome cuenta que algo de mí era, pues este no dejo de mirarme y tras cinco minutos apareció el oficinista que en nuestro país España, llamamos administrativo.

Rápidamente el mecánico que me atendió puso en antecedentes al administrativo, él cual intento informarme sobre el precio de la rueda… haciéndome saber que cada rueda me saldría por 59,95€, pareciéndome un buen precio dadas las circunstancias… por lo que conforme acepte.

Mientras estaba gestionando con el administrador… entraron dos más primero y tras entrar una furgoneta de esta salieron otros dos, fijándome que a pesar de ser el taller pequeño tenía una amplia plantilla, contando que habría allí unas siete personas: un administrador (tendría unos 30 años), el dueño al cual me lo presentaron como el patrón (entre 50 y 55 años), tres mecánicos mas... el primero el cual me atendió (60 años), el segundo un cacha (45 años), el tercero con ropa de militar (21 años), acabando la cuadrilla con dos hombres de avanzada edad uno de ellos de unos 65 y otro más llamativo de unos 70 años, siendo más llamativo por lo enorme que era y el color de su piel.

No dejaban de mirarme de arriba a abajo... soltando palabras que no entendía pero imaginaba. Cuando me acerque a pagar y me di cuenta que tenia 100€, quise pagar con tarjeta cosa que no pude hacer por no tener estos aparato para tal. Tras hacerle saber el dinero del cual disponía... tuve que pedirle que me quitaran una rueda, siendo el mecánico de mayor edad quien sugirió con un español "espurreado"…

  • “Mira a ver qué te parece… si nos hace una mamada a cada uno de nosotros, no te cobraríamos la rueda que te faltaría, costándote finalmente solo 60€. ¿Qué te parece?”, me soltó.

Naturalmente proteste pues eran siete y el coste de la rueda era de 60€, le insulte llegándole a insinuar que le denunciaría… retractándose de sus palabras con rapidez y disculpándose al mismo tiempo. Siendo el patrón quien se dirigió a mí minutos después y con todo el rostro me soltó…

  • “Olha nena, proponho-te pôr-te as duas rodas novas, o equilibrado, a posta a ponto e algum extra… se estas disposta a chupárnosla à cada um de nós e aguentar que te magreemos (siendo su traducción… Mira nena, te propongo ponerte las dos ruedas nuevas, el equilibrado, la puesta a punto y algún extra… si estas dispuesta a chupárnosla a cada uno de nosotros y aguantar que te magreemos)”, me dijo.

Lógicamente me quede en blanco… no esperaba tal contestación, me quede callada… pensando en la propuesta, pues aunque era descabellada… tenía su morbo… mmm (joder, siete tíos para mi solita... mmm). Evidentemente titubee… pero acabe por aceptar ante la cara de sorpresa de estos... mmm. Acto seguido... escuche al patrón ordenar cerrar el portón de entrada y acto seguido me sugirieron que nos fuéramos detrás, donde había una especie de vestuario, unas taquillas con dos bancos... un retrete, lavabo y ducha. Sabéis una cosa... bien recuerdo cuando el patrón me pregunto cortésmente.

    • ¿Quem de todos nós desejarias que fosse o primeiro? (siendo su traducción… ¿Quien de todos nosotros desearías que fuera el primero?, me soltó.

Agradeciendo sus palabras... le hice saber que tal derecho para mi, debía de ser el mecánico mayor y en verdad propulsor de la idea… mmm. No me senté como me sugirieron, sino que delante del espere que se la sacara. Una vez que este bajo la cremallera y nervioso la saco de su interior del pantalón... la cogí, estaba flácida... quizás como os he mentado los nervios. Pero la verdad ver a ese hombre que con la edad que tiene estuviera como un flan… ya era un premio, aunque la verdad es que la escena me fue poniendo por momentos... uuummm (joder, como para olvidar la escena... mmm, ver como ese hombre se bajaba la cremallera de su pantalón, todo nerviosito).

Bueno continuo... se la agarre con suavidad... comenzándosela a masturbársela con mi mano derecha al tiempo que con la izquierda le magreaba sus testículos, dándole pikitos por su cuello… mmm. Escuchaba como suspiraba… entre los murmullos de los demás, notando como mis acciones iban haciendo efecto y notar las caricias de los otros... mmm. Sobre todo el subir de mi vestido hasta que unas manos se hacían de mi senos… ooohhh al tiempo que otras soltaban los nudos de mi parte superior del bikini.

Un segundo se puso a nuestro lado... ese musculoso cuarentón, calvo y tras quitarse su camisa sin vello alguno, no hizo falta decirme nada... pues nada más estirar mi brazo y tomarla con la mano, pude comprobar al cerrar mi dedos el grosor de esta… aaahhh. Os confieso que los magreos de los otros fueron en aumento, tanta fue la intensidad que algún envalentonado llego a bajarme la parte inferior de mi bikini.

Note como acariciaban mi espalda desnuda... como acariciaban mis cabellos, como unos labios furtivos se posaron en mi cuello y robaron algún que otro gemido... ooohhh. Sentí como unas manos ascendían desde mis rodillas hasta mi cintura... mmm, continuando por colocarlas en mis caderas echándome hacia atrás… haciéndome sentir el duro y caliente miembro… aaahhh.

Me incline hasta que mis labios chocaron con su grande al tiempo que masturbaba otra, tras retirarse el maduro calvo… otro tomo su posición, aquella polla como para olvidar… mmmuuuu (joder). Era gruesa… muy gruesa y muy oscura, alce la vista y pude ver que pertenecía al administrador… ooohhh. Aquellos hombres no perdían el tiempo... pues magreaban mis senos, vientre, espalda, nalgas e incluso mi orificio vaginal... aaahhh.

Aunque notaba como pasaban por mis nalgas... como cada uno de esos hombres se entretenían en magrearme, como cada uno de esos restregaba su bulto por mis nalgas a modo de hacerme saber cómo estaban... mmm. Hasta notar lo inevitable... notar como esos furtivos y extraños dedos se conforman con tocar o masturbarme, sino sentir como conducía su miembro por mi ingle hasta notar como su glande chocar contra mus labios vaginales... ooohhh. Acto seguido hacerme estremecer cuando su tronco entro... aaahhh, ignoraba quien coño incumplió el trato pero agradecí que lo hiciera y pude escuchar que se refería al chico militar... ooohhh (joder, fue el tercero... ese joven de cerca de 21 años con ropa de militar… que tendría 21cm).

Sus diabólicas embestidas me arranco mi primer orgasmo... aunque dada mi excitación no fue muy difícil, tal fue mi orgasmo que mas creí o mejor dicho creyeron que me había orinado. Aquellos mecánicos portugueses fueron pasando por "caja"... ooohhh, cobrándose aquel regalo y siendo el hombre mayor el primero en descargar... siendo su sustituto otro hombre mayor. Cuyo miembro no era precisamente la de mi sesentón pero tras no más de cinco minutos, dio su sitio a otro de su misma edad... ooohhh, mostrándome este que no todos están echo de la misma "tela"... aaahhh.

Ante la incomodidad me tumbaron sobre el banco... continuando el rol, continúe chupándosela a cada uno de los siete mecánicos y estos a su vez, aprovechando el momento de confusión en el cual me encontraba por el placer. Utilizaron cada orificio útil de mi cuerpo… penetrándome cada uno de ellos por orificio oral, vaginal y anal al tiempo que con cada una de mis manos masturbaba una polla.

Gemí de placer con cada una de esas pollas aun más con la del cuarentón, el administrador, el ex militar y por último el patrón, llegando a utilizar algunos de estos preservativos más cuando me penetraron analmente. Os debo confesar que no me quedo mas remedio de tragar los orgasmos de algunos... otros se vaciaron fuera… entre mis senos o rostro, otros más envalentonado... ooohhh, acabaron dentro de algunos de mis orificios.

Joder disfrute como la zorra que soy... mmm, aun más cuando me hicieron levantar y volverme a tumbar... en esa ocasión sobre otro. Clavándomela por mi ya dolorido orificio vaginal... pues no todos tuvieron tacto a la hora de penetrarme... aaahhh, siendo peor cuando los turnos eran ahora alternándolo con mi orificio anal... aaahhhyyy. Me sorprendí a mi misma cuando muy dispuesta acabe por comerle a alguno sus culos… quizás porque en aquellos momentos me estaban partiendo en dos, ya que me estaban penetrando dos al mismo tiempo… aaahhh, llegando a penetrarme por el mismo orificio dos pollas… no siendo otra la causa por la excitación de estos.

Os debo admitir que algunos me sorprendieron, no precisamente por el aguante de algunos, sino que todos aguantaron como mínimo dos asaltos, os prometo que no tomaron nada o al menos eso creo yo, que no se separaron de mi lado en ningún momento… mmm, pero eso si... me dejaron muy buena impresión, comportándose como machotes. Sobre todo ese enorme mecánico de algo más de 70 años que tras ver su enorme polla de color negra… me hizo presagiar lo mucho que le iba a echar de menos… ooohhh.

A medida que fueron acabando… se marcharon a trabajar en mi coche, dejándome exhausta y dolorido… agradeciendo que me dejaran usar su ducha y poder asearme, donde uno de ellos llego a enjabonarme con la intención de repetir. Cuando me marche… me marche dolorida, sintiendo el escozor en cada uno de mis orificios… ooohhh, marchándome con ruedas nuevas entre otros servicios, marchándome sin llevar bajo mi vestido mi bikini… mmm. Mi vuelta a casa… a España fue como siempre, pagando cada uno de mis peajes... desde el primero a 0.90€, el segundo a 0.50€, el tercero a 0.85€, el cuarto a 1.30€, el quinto a 0.85€, el sexto a 1,45€, el séptimo a 0.85€, el octavo a 2,00€ y paro de contar). Bueno me despido hasta una nueva confesión… quizás os cuente algunas que aun tengo en el tintero… vale, lo dicho hasta aquí llego mi confesión… me despido hasta otra, pero eso sí… sí deseáis saber más de mí, os invito a pasaros por mi blogs desfasado personal:

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Preguntarme aquellos que tenga la suerte de verme conectada por mí Skype, e incluso si deseáis pasaros por mi Facebox:

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Bueno queridos lectores… lo dicho, si alguno desea expresaros dejad vuestros comentarios os invito a que lo hagáis y porque no, haber si alguno desea calentarme... ya sabéis mis direcciones de contactos: [[

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