Cambio de rubro 8

8

Con la música a otra parte.

PARA TENER EN CUENTA.

El presente relato es una continuación de “AVENTURAS EN GUARDAPOLVO BLANCO 1 al 5” y de “CAMBIO DE RUBRO 6 y 7” , los que se deberían leer antes de “Con la música a otra parte 8”, para comprender algunas partes del presente, que se dan por entendidas…

DE QUÉ SE TRATA ?

El presente es un relato sobre una etapas de la vida de un muchacho…

Habla de que trabajó como maestro de una escuela fronteriza, en medio de la selva, de que trabajó como concejal, ahora como representante legal de una escuela, de su trabajo en un diario, en la televisión, su actuación en un conjunto folclórico, todo en Iguazú, provincia de Misiones, República Argentina, sus amores, sus desengaños…

Arranca con unos ideales de ética y lucha, y con los golpes va transformándose…cuenta desde los 30 a los 33 años… casi 4 años de aventuras, romances, trabajos, peleas…

Compromiso.

Don José, el dueño del diario local y de la televisión local, el que me ayudó cuando era docente en una escuela de frontera, el que me asesoró cuando fui concejal, me pidió si podía pasar a verlo por su oficina en el diario…

Pasá Tito, querés tomar algo, sentate, tengo que conversar algo con vos, muy importante para mí, estoy cada vez más enfermo, creo que dentro de un tiempo muy corto no voy a poder moverme, por eso te quería pedir que ayudes a Teresa.

(es la esposa, cincuenta y algo de años, cuerpo proporcionado, es mí actual amante, don José me pidió como favor que me ocupara de tener sexo con ella, él no podía por su enfermedad)

Sí don José, sabe que la estoy ayudando…

No me refiero al sexo, quiero que la ayudes cuando tenga que encargarse del diario y de la televisión…

Bueno voy a estar en todo lo que pueda…

No, no vos vas a tener que ser la cara, el jefe, el conductor, el director, el que de las órdenes…

En esta sociedad machista no soportarían en principio a una mujer como eso…

Tenés que aprender el manejo de éstas dos empresas, Teresa será la que defina las políticas a seguir y tú deberás ejecutarlas…

Pero don José, por qué yo, no entiendo de dirigir un diario y menos una televisión!...

Y a quién querés que busque, mi hijo no existe.

(tienen un hijo médico en Córdoba, homosexual, que por un desengaño amoroso no quiere ni acercarse a Iguazú)…

Sos la persona más amada por mi señora, se la ve feliz en tu compañía, dime que aceptas y le buscaremos la vuelta…

(no puedo negarme a una persona que me ayudó tanto, pensé)…

Acepto don José…

En el quilombo que me metí!!!

PRESENTACIÓN.

Me llamo Roberto Mendoza, me dicen Tito, 1,80 m, rubio, de ojos grises, cuerpo estilizado, corro, practiqué natación, baile y artes marciales, toco la guitarra, por un desengaño con la que me iba a casar, estoy acá, en Iguazú, fui maestro de escuela fronteriza por cuatro años, concejal por cuatro años, ahora soy dueño de una parte de una escuela privada, soy su representante legal, hasta doy algunas clases especiales (música, soy profesor y educación física, soy atleta).

Soy huérfano, tengo bastante dinero ahorrado, por el accidente de mis padres y a los 30 años me acabo complicar bastante mi vida…

Aprendamos.

Cuando mis dos anteriores amantes se pusieron de novias me tuve que mudar, estaba alquilando un departamento frente a la plaza central (de ahí, con un grupo de hasta casi treinta personas, salgo todos los días a correr)

Teresa me propuso que viviera con ellos, con don José y con ella, si tenía que aprender a dirigir un diario y una televisión y ayudarla con la enfermedad de don José, que mejor que estar en la habitación de al lado…

Y me mudé, vivo en una gran hermosa casa, con pileta de natación, sala de ejercicios, sala de juegos, con todos los lujos, yo ya venía cada dos días a dormir con Teresa, pero ahora por las mañanas, después de correr y bañarme, voy al diario, a aprender de don José…

Me paso como 8 horas al lado del jefe, me interioriza de todo, hasta de las cosas más jodidas, en el caso de la televisión no es tan complicado, se maneja casi sola, tiene varios programas de entretenimientos para los que hay una gerente, Muriel de Segovia, tetona, culona, con unos cuantos  kilos de más, blanca leche, pelo negro, es una aplanadora.

El área periodística es supervisada desde el diario, todos los días se le envían las noticias que deben transmitir y se les arman los programas de debates o de entrevistas con personalidades de todo tipo y está Natacha Quiñones, una rubia hermosa con las medidas perfectas, seductora, que se ocupa del informe del tiempo y de las propagandas, una preciosura, lástima que se crea el ombligo del mundo…

Y tal como lo había previsto don José, a los 50 días de estar conmigo, continuamente tratando de enseñarme la dirección del diario y de la televisión, tuvo que quedarse en su casa, no se podía mover.

Pero cuando no dormía, hablaba, mandaba, ordenaba y pensaba como la gran puta…

Estaba postrado en su cama, pero tenía la televisión prendida, la radio y el diario…

De la cintura para abajo no se podía mover, tenía una enfermera continuamente para lo que pudiera necesitar…

Hicimos una reunión con todo el personal de la televisión y del diario, todo el que cobraba salario tenía que estar en la reunión…

Teresa notificó que don José, estaba postrado, que no se podía mover de la cintura para abajo, pero que seguía conduciendo, y desde hoy el nuevo director general del diario y de la televisión será el señor Roberto Mendoza…

No puede ser! no puede ser que uno que hace dos meses no pertenecía a nosotros sea nuestro director, dijo Natacha…

Se hizo un silencio…

Mi función a partir de éste momento es cumplir las órdenes de don José y de Teresa, los dueños de la empresa, sé que a algunos les podrá caer mal mi designación, pero lo han decidido ellos, tal vez cometa algunos errores, está en ustedes avisarme para que no los cometa, soy alguien que sabe escuchar, que aprendo rápido, estoy acostumbrado a dirigir, si bien nunca le he hecho con un diario y una televisión, entre todos saldremos adelante, quizás no me dé cuenta enseguida, pero sé reconocer a los que trabajan, también a los que no trabajan,  el que tenga algún problema me lo plantea, el que tenga alguna idea me la plantea, todo será conversado y el que no esté de acuerdo puede pasar por mi oficina y pedir su liquidación, así que, compañeros vayan a trabajar! cada uno a hacer lo que tiene encomendado, tengan buen día!!!...

Se fueron cada uno para su lado.

Natacha, venga a mi oficina por favor…

Mirándome con cara de susto, moviendo el culo de forma infernal entró, detrás de ella Teresa, y yo…

Siéntense chicas, Natacha, no quiero que…

Se me escapó, no lo voy a hacer más, no me eches!...

Empezó a defenderse…

Mo quiero (continué) que seas solamente una cara bonita y un cuerpo escultural, quiero que seas coordinadora de la propaganda del canal, que entrevistes a los anunciantes, que consigas más, de todo nuevos auspiciantes vas a tener un porcentaje en tu sueldo…

0h! yo pensé que me ibas a despedir! gracias, voy a poner todo mi esfuerzo en hacer eso que dijiste…

Listo, andá que ya te voy a llamar para combinar…

Y moviendo el culo se fue…

Estaba cagada de miedo, dijo Teresa.

Sí, lo hice para que lo sintiera, ya veremos…

Así comencé mis funciones…

COMIENZO DE CLASES.

Nuestra escuela se llama “Los maestros”, como el conjunto folclórico que tenemos, se inauguró el año pasado, tiene 15 aulas, de la cuales se ocupan 4 a la mañana y las mismas a la tarde, tenemos 200 alumnos aproximadamente.

Soy el representante legal y doy algunas clases de música, folclore y educación física, la señorita Aurora la directora y hay como 12 docentes más, impecables estábamos, hubo discursos y saludos a los alumnos y padres, una vez que cada maestro con su alumnado entró en su aula, llevamos a los padres a un salón de usos múltiples y les hablamos de lo que íbamos a hacer durante el año, todos contentos y felices.

El alumnado nuestro pertenece a la clase media, a la clase media baja, hemos otorgado muchas becas, desde el comienzo decidimos que seríamos una escuela para todos… Pegado a nuestra escuela está el “Jardín del Amor”, para chicos de 4 y 5 años, y su directora es la señorita Claudia…

Cuento todo esto porque son mis compañeras en el conjunto folclórico, tienen hermosas voces…

Para la vacaciones de invierno nos otorgaron el subsidio del 100% en los salarios docentes (es un reconocimiento que te da el estado por ayudar con la educación), que quiere decir esto, que ya no teníamos que pagar los sueldos de los docentes.

De las cuotas de los alumnos, nos empezó a quedar bastante ganancia, decidimos cancelar rápidamente el préstamo del banco que habíamos sacado para construir el edificio…

Les mencioné a mis socias que no les contaran nada a nadie de esta buena noticia…

Al año ya ganaba como tres sueldos de concejal, que cobraba hasta el año pasado…

No tenía mucho tiempo para descansar, a las siete desayuna con Teresa y don José, a las ocho Teresa iba al diario y yo a correr con un montón de amigos, por casi hora y media, por las calles de la ciudad.

Nos llamaban “los corredores del concejal Tito” y eso que ahora no soy más concejal, volvía a casa a bañarme, (tengo una hermosa moto), diez y media llegaba al diario, y estábamos hasta que nos íbamos a casa a cenar con don José.

Se mantenía constantemente en comunicación, sobre todo con Teresa, discutían las políticas a desarrollar, cada día me convencía que era Teresa la conductora y que a paso agigantados don José se deterioraba, algunos días o de mañana o de tarde iba a dar clase a la escuela.

Después de cenar y conversar, cuando don José se dormía, me iba a dormir con Teresa, todas las noches ya quería tener sexo, ella me complacía, pero notaba que no había esa pasión que solía haber, parecíamos un matrimonio de muchos años, también influye que tengo muchos años menos…

NOS FUIMOS DE GIRA.

Como ya dije, teníamos un conjunto folclórico llamado “Los Maestros”, lo habíamos creado hace ocho o nueve años, con Aurora y Claudia, cuando éramos maestros en una escuela de frontera en una comunidad llamada “El Remanso”, ellas cantan y yo a la guitarra, después se agregó Marcos, un paraguayo, que es la pareja de Aurora, que tiene buena voz y canta a veces canciones guaraníes, Narciso, un brasilero, negro, grandote, que toca el bombo como los dioses y baila lo mismo, Leonela, una concejal, con un hermoso cuerpo, que toca el violín y Teresita, una maestra jardinera del “Jardín del Amor”, chiquita de cuerpo de muñeca, que toca el piano…

Hacíamos folclore norteño, algunas veces canciones guaraníes,  habíamos agregado un zapateo de Marcos, Narciso y yo…

Salía prolijo pero era para estirar el espectáculo nada más, y otro espectáculo que presentábamos era un baile carioca con Narciso y yo y Estela (concejal), Josefina (hermana de Aurora, negociante) y Jennifer (hermana de Estela y jefa de secretaría de inspección de enseñanza de Iguazú)…

Las chicas no pertenecían al conjunto, ella venían cuando podían y lo hacían para divertirse, cuando lográbamos actuar era un éxito.

La que quería aprender a bailar era Teresita, la maestra jardinera, quedé con ella que podríamos practicar en un aula vacía de la escuela algunas tardes de seis a ocho, las primeras veces lo tomé con calma, la chiquita tenía un cuerpo de lo más amoldable, yo todo hecho un profesor, la apretaba lo necesario, comenzó a aprender rápido los movimientos básicos.

Cuando terminaba la clase, me iba con una calentura, pasaba a buscar a Teresa por el diario, íbamos a casa y con ella me desquitaba, le echaba cada polvo pensando en Teresita, la dejaba destruida.

Comenzamos a practicar movimientos más sensuales, ya no me detenía, le pegaba cada apoyada, nunca me decía nada,  un día comencé a besarle el cuello, morderle la oreja, apretarle los pechos, la di vuelta y la besé con pasión, en el aula que practicábamos estaba el sillón que había sacado de la oficina, es de cuatro cuerpos, grandísimo, la desnudé y la apoyé en el cuero casi nuevo, primero le comí los labios vaginales, su clítoris, cuando la penetré ya había acabado dos veces, estuvimos cogiendo como tres horas.

Cerca de las 10 de la noche pasé a buscar a Teresa por el diario, le conté todo, lo único que me dijo.

La próxima avisame y no te espero…

Igual a la noche le di para que no estuviera disgustada…

Seguimos cogiendo con Teresita una o dos veces por semana todo el año, ya sabía bailar como las mejores, se integró al baile carioca…

Recibimos una invitación desde El Dorado, una ciudad cercana, como a dos horas de viaje, para actuar…

Nosotros lo hacíamos para divertirnos, para pasarla bien, si bien cobrábamos, nunca habíamos hecho nada fuera de nuestra parrilla y de los que siempre venían a escucharnos, lo conversamos y salimos de gira.

Íbamos todos, alquilamos un micro grande, éramos como treinta, salimos después de una pequeña siesta, habíamos practicado toda la mañana, llegamos a las cuatro de la tarde, era una fiesta del pueblo, en un club del centro, con una pista inmensa (una cancha de básquet) y un escenario grande y elevado

A las 10 de la noche presentamos el baile carioca, Narciso y yo, solamente con unos pantalones pescadores, él negro musculoso y yo musculoso con unas rayas negras pintadas, las chicas, Estela, Jennifer, Josefina, Leonela y Teresita, pintadas como puertas, de todos colores, con vestidos floreados, labios exageradamente rojos, unas hermosuras, salió un espectáculo perfecto, no nos equivocamos en nada, termina con Narciso y yo cruzados de brazos a lo macho y ellas tiradas, desparramadas en el suelo adorándonos… Aplaudieron a rabiar, estaba repleto el club…

A las dos de la mañana anunciaron al grupo folclórico de mucho renombre últimamente “Los Maestros”,  arrancó Leonela con el violín, con Narciso con el bombo, seguimos Teresita con la pianola y yo con la guitarra y todos, todos a cantar, fue magnifico el comienzo, el medio bajó un poco y el final fue con toda la gente bailando haciendo trencitos, (se encargaron las chicas del carioca de hacerlos)…

Con nuestra actuación a  casi cuatro de la mañana se dio por terminado todo…

Débora que es contadora, novia del concejal Mario se encargó de cobrar y de distribuir el dinero entre todos, hasta el del micro se llevó propina…

Quedamos que cuando tuviéramos  invitaciones íbamos a concurrir, una por fin de semana, para divertirnos y pasear…

Así actuamos en varias ciudades…

Una vez cuando nos llegamos hasta Córdoba a un festival, un viernes, Jennifer sale disparada gritando.

Gio, Gio.

Me doy vuelta y la veo…

Gioconda, la primera docente que conocí en Iguazú, la que me convenció de ser maestro de frontera, la que fue mi amante varios meses, una mujer de cincuenta años, con el cuerpo justo, se abrazaron y vinieron hacia mí, yo la abracé y la levanté y le di un pico importante.

Esperó que actuáramos y nos acompañó a desayunar, nos invitó a su casa, una casa no muy grande pero con pileta y parrilla, allí fuimos con el colectivo, compramos todo para hacer una asado.

Conocí a las hijas, Cecilia, una hermosura, cuerpo estilizado, y a Natalia, igual que la hermana pero con unos kilos de más, que le quedaban divino, Cecilia estaba separada y tenía una hija de dos años, Candela, fue el juguete de todos nosotros

Éramos tantos que Gio tuvo que ir a pedir vajilla a los vecinos, comimos un asado espectacular, estuvimos en la pileta hasta casi la noche, cenamos y para casa, llegamos cerca del mediodía del domingo, destruidos pero felices…

PLANTEO ESPECIAL. LIBERTAD DE ACCIÓN.

Mi trabajo en el diario o en la televisión me llevaba tiempo pero no era agotador, por lo variado, y novedoso para mí, la que no descansaba era Teresa, llegaba a las ocho y se iba a las ocho, doce horas de intenso trajín.

Atender su marido enfermo, las enfermeras, la casa, y cuando nos acostábamos yo le pedía sexo, quedaba destruida y al otro día lo mismo…

Un día mientras estábamos en la oficina en el diario me dice…

Tito, no doy más, necesito no tener sexo por lo menos por un mes,  podrás buscarte algo por ahí, querés.

(yo creía que el darle todas las noches la ponía feliz, que era casi una obligación)

Sí Tere, vos decime y yo acato tus órdenes, ja ja…

Al otro día llovía, no fui a correr, estaba con un empalme brutal, al entrar Graciela, la enfermera, petisa, tetona, culona, con una sonrisa siempre y dispuesta a las bromas. No querés que te baje eso, que a don José le di el calmante y no se despierta por tres horas por lo menos, mirándome la carpa.

Siiii, pero vení despacito, me voy a hacer el dormido, y sacame la ropa con cuidado que no me despierte, después inventá…

Y así se arrimó a la cama, me susurró.

Tito, Tito.

Yo dormido, me sacó el bóxer y me hizo una espectacular mamada, cuando acabé se tragó la leche y siguió chupando hasta que se volvió a poner dura, se desnudó y se subió a la cama, puso una pierna a cada lado, acomodó mi miembro en la entrada de su vagina y se fue ensartando, despacio sentía como le entraba, cuando la tuvo toda adentro empezó a cabalgarme y me decía.

Despertate Tito y chupame las tetas, Tito las tetas.

Casi le arranco la ropa, que semejante pezones, se los mordí, chupé, estiré…

Cuando acabó por segunda vez, despacio se corrió para adelante y se empaló, se la metió en el culo, qué placer, sentir la estrechez, acabé dando alaridos…

Lo repetimos varias veces cuando venía a bañarme después de correr…

Dormía en cucharita con Teresa, nada de sexo, le hacía masajes para que durmiera descansada, empecé a llevarla a las siete al diario,

De ahí me iba a un bar frente a la plaza de la que partíamos todos a correr, me tomaba un cafecito, a correr, moto, casa, baño, sexo con la enfermera, al diario, momentos pasar por la escuela…

Esa era mi rutina…

Un día faltaba como media hora todavía para que llegaran los corredores, yo con mi cafecito, y aparece Priscila, (cuando era concejal le solucioné un problema con un carné de guía)…

Hola Tito, te puedo pedir algo...

(otro favor pensé)…

No nos podemos ir a un hotel y pasarnos una horas cogiendo en vez de corriendo...

Me quedé, con la boca abierta, semejante chica, que me encarara tan abiertamente.

Sí, salí y esperame acá a la vuelta, ya voy…

Di la vuelta, le di el otro casco y la llevé al hotel de la entrada a la ciudad, sobre la ruta, es una pantera, se le nota el estado físico, no se agota, quiere y quiere, decí que era lunes y hacía dos días que no tenía sexo, me defendí con todas mis herramientas, lengua y dedo a mansalva, al mediodía salimos, la llevé a su casa y me fui a la escuela.

No quise ir por el diario ni ver a Teresa, me daba vergüenza….

Como yo hay como seis que quieren coger con vos, me dijo, yo, si vos querés, les voy dando turno, ja ja.

Y así fue, cambiaba de compañera dos veces por semana, eso sí, varias veces  dejé de salir acorrer, ahora salía a coger…

PÉRDIDA LAMENTABLE.

No me digas eso dijo Teresa y se echó a llorar.

La enfermera le avisó que don José había fallecido, yo me ocupé de todo lo pertinente al entierro, parece que era muy querido don José, vinieron todo tipo de gente, de todos lados, flores, coronas, un dineral gastado para después tirarlo, el cortejo fúnebre al cementerio, fue de como treinta coches, yo recibía las condolencias, al lado de Teresa, me creerían el hijo, o lo que es peor, el mantenido…

El que no vino fue el hijo…

La entrega al trabajo por parte de Teresa fue total, la traía a las siete de la mañana y la buscaba a las 10 de la noche, era como la injusticia estaba en todos lados, y guay! del que se hiciera el oídos sordos, lo echaba al toque…

Yo me iba a tomar un café y si no tenía ese día “encuentro sexual” me iba a dar una vuelta por la escuela…

La escuela cada vez andaba mejor, los docentes se entregaban en cuerpo y alma, además de ser excelentes profesionales teníamos un sistema de reparto de ganancias, todos tirábamos para el mismo lado, a Marcos y a Narciso, si no tenían obras para hacer por afuera, las chicas los tenían dejando todo impecable…

Yo dejé de dar esas clases de música (se ocupó Teresita) y las de educación física, (vino una profesora, Elizabeth, potra infernal), al principio era para no gastar, pero ahora los sueldos eran abonados por educación y no quería sacarle trabajo a nadie…

FESTEJOS.

Para mi cumpleaños número 31 lo festejamos en la parrilla como casi siempre y para navidad y para la cena de fin de año, una vez más, y van…

Gran actuación del conjunto “Los Maestros”…

Puedo hablar con vos, me dijo Natacha.

Resulta que Teresa la había designado para que pase la navidad en la tele, se iba a perder la cena con su familia…

A ver si podés hacer algo, me dijo, te lo voy a saber agradecer.

Me dio por las pelotas que quisiera chantajearme…

Vas a tener que entregarte, tendríamos que tener sexo por lo menos 10 veces, grotescamente le dije…

Me quedó mirando, suspiró, y después de unos segundos, disparó…

Hago lo que me pidas.

(flor de puta pensé)…

Cuál es tu problema Natacha...

Es que no voy a poder pasar la navidad con mi familia, la cena navideña para nosotros es muy importante…

Si vos no vas a poder estar con ellos , que ellos estén con vos!, invitá a toda tu familia a cenar en directo en el canal, con todos los que tienen que trabajar en esas horas, yo me ocupo de que tengan las comida, ustedes se atienden, ningún mozo, las propias familias de los trabajadores, invitación del canal, y brindas con toda la gente de la ciudad…

Me quedó mirando.

Es una idea brillante, genial, no sabés cómo le gusta a mi familia estar en la televisión, mi mamá se va a volver loca, todos vestidos de gala, con luces, con y con y le ponemos y…

Se recontra entusiasmó, se lo fui a decir a Teresa.

Genial idea Tito, todos contentos y felices, a propósito, vos con quién vas a pasar las fiestas...

Que pregunta pelotuda Tere, con vos, con quién más!!!

No dijo nada pero noté que le encantó la respuesta…

Muriel, la gerente quiso hacer lo mismo para fin de año con su familia y la de los trabajadores…

Desde ese año no hubo más caras de culo si te tocaba trabajar para las fiestas, comida gratis y salir en la tele…

Si alguno del diario tenía que trabajar, los enganchaban en la misma cena, todo estaba en el mismo edificio…

Nosotros, los amigos y conocidos armamos una gran mesa, con las mesas de las aulas en el centro del patio de la escuela, invitamos a todos, cada uno que venía con su familia tenía que traer algo determinado.

Débora y Juana distribuyeron las obligaciones, a Teresa y a mí nos encargaron bebidas alcohólicas, don José tenía un bodega que quedó tecleando para después de las fiestas, música y baile.

Vino Soledad, (profesora de informática, compañera nuestra en la escuela de frontera, ahora es la directora, negra, petiza con varios kilos de más, tetona y culona, divertida y muy compinche), conocí a los padres de Estela y Jennifer, de la alta sociedad, muy alegres, se la pasan viajando, a los padres de Teresita, gente muy sencilla, de la clase que tiene que romperse el lomo para llegar a fin de mes, Leonela con el novio nuevo y algunos que no me acuerdo, éramos como cincuenta…

La cena comenzó a las ocho de la noche  y terminó a las ocho de la mañana…

A Teresa la tuve que ir a buscar al sillón, de un aula desocupada, es igual al de su casa…

Yo como tenía que ir con la moto no tomé mucho, pero los demás hombres, puedo decir que ninguno quedó sano…

Menos mal que no había que ir a trabajar, el almuerzo del primero también lo hicimos en el mismo lugar, no fuimos casi de noche…

LA CONDUCCIÓN NO SE DECLAMA, SE EJERCE.

El noticiero cada vez más completo, los programas políticos daban de qué hablar por la semana, los programas de entretenimiento eran atrapantes, creativos y didácticos, las películas, casi toda estrenos o clásicas, de las que siempre te gusta volver a verla.

El diario cada día tenía más suplementos, podían encontrar de lo que se te ocurriera,  tenía como dos o tres columnistas objetivos, bueno con el ojo de ellos, los tres opinaban diferente, alguno tenía que estar equivocado, en fin, el diario y la televisión estaban en su mejor momento, la gente trabajadora lo notaba, notaba también que en su sueldo venía un pequeño incentivo…

Personal femenino contento.

Natacha cada vez que podía se me insinuaba, yo estaba cogiendo poco, con Teresita dos o tres veces al mes y con alguna “corredora” una vez por semana, así que cuando tuve la oportunidad la encaré…

Natacha, vos sos de pagar tus deudas...

Si por supuesto me contestó, entonces me tenés que entregar tu cuerpo, acordate de cuando te solucioné el problema de cenar con tu familia!...

Es cierto, cómo querés hacer...

Qué tenés que hacer ahora...

Puedo arreglarlo me dijo.

Bueno esperame en la puerta, ya voy.

Avisé que me iba, agarré la moto, le entregué el casco y al hotel de la entrada de la ciudad, sobre la ruta…

Qué admiración, qué cuerpo, qué piel, qué belleza, qué desilusión, lo que tiene de hermosa, lo tiene de insulsa, que eso no, por ahí no, para, para, no aprietes, no chupes no y no…

Me pude echar un polvo, ella también acabó, creo, no vaya a ser cosa que se despeine, nos bañamos, separados, casco, moto, casa…

Con Muriel fue otra cosa, ella es tetona, culona, con bastantes kilos de más, pero una topadora.

Puto para coger sencillo tengo a mi marido, maricón cogeme como se debe, me decía.

No paró de insultarme para que la partiera al medio, que la traspasara, que la rompa toda, me pareció que mi iba a agarrar un infarto, oral, vaginal, anal, 69, cubana, mamada con tragada, no hubo cosa que no practicamos y ella más, más, cuando volvimos tenía el miembro casi en carne viva…

Lo que me faltó de volver a contar que con nosotros trabajaban Dorys, 27 años, hija de Débora y Camila, 24 años hija de Juana, las conocí hace nueve años, de Camila fui su primer hombre, con Dorys nunca tuvimos sexo.

Me invitaron un sábado a almorzar a su departamento, viven juntas, son pareja, al mediodía llegué con unos vinos y con helado, me recibieron en shorcito y una blusita, se notaba que no tenían puesto nada debajo.

(Cuando las conocí casi eran una nenas, pensé, y miralas ahora)

Me hicieron ravioles con estofado, saben que me encanta, para el  postre, el café y una bebida nos fuimos al living, tienen un sillón para dos, al lado mío se sentó Camila, como ya dije fui su primer hombre, después lo hicimos infinidad de veces más, creo que no me tiene vergüenza y me lo dijo. Tito, te invitamos a almorzar para conversar con vos y pedirte un favor…

Sí Cami, sabés que a vos no puedo negarte nada.

Es que no es para mí, es para Dorys.

Decime Dorys, qué...

Que te diga Cami…

Qué Cami...

Dorys nunca ha estado con un hombre y quiere que vos seas el primero…

Y por qué yo...

Le conté como disfruté yo con vos mi primera vez…

Y cuándo quieren hacerlo...

Y ahora podés...

Ja ja chicas déjenme por lo menos bajar los ravioles, me hubieran hablado antes de comer, hagamos una siesta los tres de una horita y continuamos quieren...

Siiii, vamos.

Y nos acostamos los tres en una cama grande que tienen, una de cada lado, no me estuve quieto, comencé a acariciar a Camila, con recelo a Dorys…

Amplia aceptación, pasé a desnudarlas muy lentamente, las besaba, lambía, mordía, chupaba, cuando estaban todas desnudas, les acariciaba los labios vaginales, el clítoris, les metía despacio los dedos, en un momento paré y le dije a Dorys.

Desnudame.

Cami, quiso ayudar, no la dejé…

Y Dorys, con lentitud pero con firmeza me dejó en pelotas, cuando saltó mi miembro dijo.

Ohh,

Cami, lo agarró y se lo metió en la boca, estuvo chupando un rato y le pidió a Dorys que se acerque, dudó pero se arrimó,  con desconfianza se lo metió en la boca, al rato chupaba como las mejores, cuando ya la tenía a punto de estallar, la saqué y me acomodé arriba de Cami, ella abrió las piernas y se la metí.

Agggg!!!

Empecé a bombear despacio, arrimate Dorys, agarrala para que no se salga y con su manito la acomodaba, yo a propósito la hacía salir, ella la embocaba, todo para que tomara confianza, después de un rato…

Ahora acomodate vos Dorys.

Se echó con las piernas abiertas, creí que iba a costar más, me acomodé otra vez y se la fui metiendo despacio, Cami le agarraba la mano y la besaba en la boca, cuando la tuvo toda adentro cerró sus piernas sobre mi cintura empujando todavía más adentro, mete y saca despacio.

Dame fuerte, dame fuerte, que acabo, acabooo!!!

Con un estremecimiento de todo su cuerpo acabó, yo seguía bombeando, la hice dar vuelta, poner en cuatro y al rato acabó de nuevo, quedó despatarrada, le dije a Camila que se pusiera en cuatro y acabamos juntos…

El sábado que viene el culo, Tito, si...

Ja ja, sí.

Y en el trabajo ni nos conocemos…

EL RESTAURADOR.

Con Teresa dormíamos en la habitación de invitados, en una cama de plaza y media, a la habitación principal, después de la muerte de don José no se había entrado más.

Mientras en su oficina, estaba sentada en mis piernas con mi miembro enterrado, únicamente se había corrido la bombacha, me besaba agarrada con las dos manos de mi nuca.

Quiero que te ocupes de que volvamos a la habitación principal, a una cama grande, pero no quiero ver nada de lo que hay ahí…

En un aula vacía de la escuela, estaban los muebles antiguos de doña Florinda, la vecina que vivía dónde se hizo la escuela, saqué todo lo del dormitorio de don José y lo llevé al aula y lo de doña Florinda a la habitación de don José…

Eran unos muebles que estaban deteriorados, una reliquia pero había que restaurarlos, la cama, inmensa, como de dos por dos, con un respaldar todo trabajado, adelante tenía unas especies de columnas en cada pata, era una obra de arte.

Con una lija muy fina, y mucha paciencia me pasé como una semana solamente con la cama, después le tocó a las mesas de luz, al ropero, un aparato para poner la ropa y el calzado, sillas, cuadros, como dos meses me llevó el trabajo.

Compré un colchón impresionante, espejos para el ropero, para la pared, pinté, cambié las luces, puse una pantalla gigante de televisión, música ambiental, puse alfombras, los juegos de ropa de la cama parecían de película, había ido a comprarlos con Dorys y con Camila.

En el baño hice instalar un hidromasaje para seis, te podías meter acostado, un viernes, después de cenar, no teníamos que madrugar mañana, la llevé a la habitación principal, se quiso oponer pero cedió, cuando abrí la puerta y vió semejante decoración, no quedó nada de la vieja habitación.

No creo que haya otra habitación así, parece una mezcla del lejano oeste con los árabes, el juego de luces, la desnudé con delicadeza, hicimos el amor, con cariño, cuando acabamos la llevé al baño y segunda sorpresa, estuvimos como dos horas en el hidro, parecíamos pasas de uva cuando salimos, durmió hasta pasado el mediodía.

Siento que he revivido, acabo de dejar el pasado atrás, gracias Tito, sos una persona excepcional, vení que te tiro un poco la goma, me dijo…

TODOS DE PASEO.

La idea fue mía, el de salir en las vacaciones de invierno de paseo todos juntos, con colectivo, autos, motos, lo que fuera, se llevarían carpas, y todo lo que haga falta para pasarlo bien, acampando, cocinando, folcloreando, la travesía era sencilla, no más de doscientos kilómetros por día, siempre al lado del río, trece días para dar la vuelta y  volver, yo iba con mi moto, en el colectivo mi carpa, mi alargue, mi aire portátil, mi compu…

Se prendieron todos, seis concejales con sus parejas, seis docentes con sus parejas, el chofer con su señora, Soledad con Juan (el encargado de la carpintería) y Teresita y yo que éramos la pareja no pareja…

Ella lo destacó apenas estaba por empezar la caravana, hasta se vino conmigo en la moto para que no fuera el único solo, Teresa no pudo venir, su trabajo no tiene vacaciones de invierno, bueno algunos de los que estábamos tampoco, pero…

A las dos horas de salir, pasando el mediodía, llegamos a un camping a la orilla del río y a acampar.

Busqué un lugar para poner la carpa, puse ahí mi moto y me fui a hacer el asado, había parrillas chicas con mesas y bancos de material, también había una parrilla inmensa con una mesa grande con bancos de madera, cuando los vi casi me pongo a llorar, bueno me puse a llorar, Marcos me vio y mandó a Aurora, me abrazó y me preguntó.

Qué te pasa Tito, por qué llorás...

Por, mirá y le señalé el logo de la carpintería “El Remanso”, Nos pusimos a llorar los dos, se agregó Claudia, tres llorando y llamamos a Juan.

Juan vení a llorar con nosotros.

Los cuatro abrazados contemplando la mesa y los bancos de madera, el resto nos miraba, mientras esperábamos la carne, contamos las anécdotas…

Comimos un asado que me salió para chuparse los dedos, guitarra, canto, nos metimos en el río, habían hecho una especie de represita que formaba una pileta, con el calor que hacía el agua era ideal.

Las chicas cada una más linda, a algunas maestras nunca las había visto en  malla, (tengo que atender más al personal femenino pensé y que no se enteren los maridos, ja ja). Cuando me cansé de estar en el agua, fui a armar mi carpa para cuatro, con el aire prendido y la compu con películas, la iba a pasar bomba…

Teresita había vuelto a aclarar que compartiría la carpa conmigo…

Nadie dijo nada, ella cree que no saben lo que hacíamos mientras practicábamos baile, Aurora y Claudia me conocen como si me hubieran parido y Débora y Juana también, y Jose y Leonora, va todas me conocen…

Después de cenar y guitarrear (digo guitarrear para ponerle un nombre, pero todos tocábamos los instrumentos, se formaba el conjunto a cada instante, a veces cada uno hacía de solista y todos lo escuchábamos)

Cuando nos fuimos a acostar, nuestra carpa estaba fresquita, era una delicia, puse música en el celular y una película, faltaba lo que después me hizo Teresita, una mamada, bueno yo también se la hice a ella, en un 69 sin mucho ruido acabamos los dos…

Así fueron pasando los días, música, comidas al disco, río, sexo, todos felices, ninguno se enojó con ninguno, extraño en un grupo tan grande, hacíamos sí, algunas “agrupaciones” los más amigos por un lado y las maestras con sus parejas por otro, pero siempre juntos a todos lados. Recorrimos Wanda, estuvimos en las minas, sacamos muchas fotos, El Dorado, volvimos a actuar el club que antes lo habíamos hecho,  Bernardo de Irigoyen, San Antonio, Andresito y a casa dimos una vuelta de casi mil kilómetros, afianzamos mucho la amistad y conocimos nuevos amigos…

En el diario y en la televisión no hacía falta, Teresa manejaba todo con una eficacia extraordinaria, le estaba dejando importante ganancia, a mí me pagaban como director general un sueldo muy importante.

Me empezaba a dar vergüenza el cobrarlo sin hacer mucho, pero mi cuenta de ahorro seguía aumentando, iba para hacerle compañía a Teresa, algunas veces Tere me mandaba, con indicaciones a acomodar algo que no funcionaba, algo de mi inventiva aportaba.

En la escuela más o menos lo mismo, no hacía mucho, tampoco había mucho para hacer, todo el trabajo lo hacían los docentes encargados de alumnos, al dar clase, controlar la disciplina…

Cobraba como representante legal, (tener en cuenta que reunión que me citaban allí estaba, una o dos al año), ganancia como asociado en la escuela y como dueño de la mitad del edificio, seguía aumentando mi cuenta...

ACTO DE FIN DE CURSO Y FIESTAS.

Actuación de todo el mundo, la totalidad del alumnado actuó, la cantidad de padres era infernal, armamos un escenario y desparramamos sillas para todos, cada maestro se lució en la presentación de los actos, el “Jardín del Amor” nuestro vecino también  compartió la fiesta de fin de año con nosotros, tenías que ver a las madres que tienen dos o tres hijos, en jardín y diferentes grados, iban de un lado para el otro, tratando de vestir a uno, pintar al otro, al final de la fiesta quedaban destruidas.

Se avisó que el año que viene se abría la escuela secundaria, ya había casi cien alumnos inscriptos y en consejo e inspección de enseñanza no teníamos ningún problema…t

También actuó el conjunto “Los Maestros”…

La alegría de los chicos ver a sus directoras cantar y al maestro Tito tocar la guitarra (así me reconocían)…

Todo igual que el año pasado, mi cumpleaños 32 de festejo en la parrilla, gran actuación del conjunto “Los Maestros”, baile carioca y la cena de navidad, la de fin de año y el almuerzo de primero de año en el patio de la escuela, con la novedad que vendimos números a las familias del alumnado para el que quisiera venir a pasarlo con nosotros, le cobrábamos más barato que si cenaran en sus casas, para navidad fuimos 150 personas, pero para la cena de fin de año el doble, 300 personas, hasta vino la televisión, el diario (quién los habrá mandado)…

Fue el comentario de toda la ciudad por muchos días…

IMPORTANTE ADQUISICIÓN.

Anduve averiguando, recorrí por todos lados, hasta que fui a ver una cerca del río, el hombre grande, de cuerpo y de años, parecía un linyera, todo sucio y grasiento, era mecánico, cuando golpee las manos, me ladró.

No quiero comprar nada, hacé de cuenta que no me viste, tomátelas muchacho…

Yo no vengo a venderle nada señor, me mandaron acá, me dijeron que usted vende una casa rodante, es así...

Si vendo pero no te la voy a regalar, se creen  que porque estoy todo grasiento y viejo me van a cagar, pasá…

Y la vi, le llaman motor home, porque tiene para andar y para vivir, con baño, cama rebatible, con heladera, cocina, tenía hasta aire acondicionado, me dijo que le faltaba gas, pero funciona perfecto,  estaba increíblemente en buen estado, sucia pero sin ninguna parte podrida o picada, el motor gasolero, arrancó al toque, sonaba como el violín de Leonela,.

Me preguntó, para qué la querés.

Le conté lo del conjunto y nos gustaría tener una para trasladarnos.

Vos que tocás...

La guitarra señor.

Oh, dijo, tocá algo para mí.

Y trajo una, muy buena, estaba destemplada pero tenía un sonido perfecto…

Qué le gusta señor...

Melódico, boleros, sabés...

Sí, el que quiera.

Y le fui tocando.

Y tango, sabés...

Sí, el que quiera.

Y estuve como una hora dándole a la guitarra, sonaba muy bien, me sentía cómodo con el instrumento…

Me contó que era de la hija, que se fue a la mierda con un macho, que era viudo, aunque nunca me casé y que quería vender todo e irse a vivir a Mendoza, con la hermana y los sobrinos.

Le compré las tierras, la casa rodante  y me regaló la guitarra y toda la chatarrería, tenía como 5 carros desarmados…

Cuando se las mostré a mis compañeros del conjunto, Marcos y Narciso la lavaron, la lustraron, perfumaron, parecía otra y si queríamos Marcos le pintaba lo que hiciera falta…

Aurora y Claudia se emperraron en que con las recaudaciones del conjunto pagaríamos la casa rodante y sería del conjunto…

Teresa nos asesoró y registramos el nombre y todo lo legal sobre el tema, todos los que en ese momento tocábamos éramos los dueños…

Y empezamos a salir todos los fines de semana, ya lo estábamos haciendo como trabajo, y varias veces empalmamos dos actuaciones por fin de semana…

Yo los hacía practicar y coordinaba las canciones y la música, pero a no ser de una canción nueva, ya todo salía justo, con precisión…

El novio de Leonela, Agustín, tocaba la guitarra, me preguntó si podía venir a practicar con nosotros.

Y por qué no me lo dijiste cuando fuimos de caravana.

Este es otro, ja ja…

Me encantó, tocaba bastante bien, empecé a dirigir únicamente…

Parece que me estaba entrando ganas de descansar, de descansar de responsabilidades…

Continuará.