Calle de Sombras

Héy tú, si tú, ven acércate un poco, si así, eso es. Me recuerdas, soy yo de nuevo, he salido de mi mundo de las sombras, y he venido, solo para relatarte otra más de mis historias, de tus historias. ¿Quieres saber de que trata?

Calle de Sombras

Héy tú, si tú, ven acércate un poco, si así, eso es.

Me recuerdas, soy yo de nuevo, he salido de mi mundo de las sombras, y he venido, solo para relatarte otra más de mis historias, de tus historias. ¿Quieres saber de que trata?

¿Tienes tiempo?

Seguramente si. Ya que de lo contrario no estarías hurgando entre estas paginas, escondiéndote del loco y estresante mundo que hay afuera, que te asusta, que te aterra, pero no te preocupes el miedo no es malo, al contrario te mantiene con vida, y es que tienes razón, afuera es muy peligroso, uno nunca sabe lo que le puede pasar, en cambio aquí tu tienes el control, aquí solo tu gobiernas, te sientes libre, puedes hacer cuanto quieras, y no hay nadie que lo impida, o que te detenga, desde tu asiento, puedes ir a lugares que en la realidad jamás podrás visitar, ¿no es cierto?. Si, si lo es, de lo contrario no estarías aquí. Tienes razón.

Aquí, puedes entrar a lugares en los que en la realidad, la misma sociedad te ha excluido, a los cuales el solo hecho de intentar poner un pie esta prohibido, te sientes libre pues en este lugar puedes ver y hacer cosas que ante la sociedad jamás podrías imaginar siquiera, sientes que la soledad te cobija, y la depresión te abraza, o quizás me equivoco, si es así me disculpo, pues quizás solo buscas distraerte, tratando de darle algo de emoción a tu vida, la cual no has podido encontrar afuera, te relajas e intentas olvidarte de los problemas del exterior, mientras lees, intentando encontrar en estas paginas y en sus historias la diversión y emociones que la vida tan rotundamente te ha negado, si es así, creo que la historia que voy a contarte, te ayudara en tu propósito, cualquiera que este sea, ¿quieres saber de que trata?.

Entonces siéntate, pon mucha atención, ya que esta historia trata de un tema algo parecido, al tuyo, quizás te parezca familiar, quizá te identifiques en ella, o con alguno de los personajes de la historia, quizá sin saberlo, ya seas parte de ella, un actor, o quizás protagonista ¿quieres escucharla?,

Pues bien, acércate un momento y escucha, pon mucha atención, esta historia trata de una niña, cuyo nombre no recuerdo, la cual llevo tiempo observado, quizás tu la conozcas, y nunca te has percatado de su existencia, quizá hasta sepas su nombre, quizás sea el tuyo propio.

Sara, Viridiana, Patricia, Cecilia, Marta… no lo se, solo tu lo sabes.

Esta pequeña niña "como tu" de aspecto reprimido, tímida, ante los ojos de sus compañeros, su mundo esta mas que nada detrás de un ordenador de PC, o de un libro, esa es su vida, su presente y su futuro, igual que tu, también tiene miedo, pues según ella no encaja en la sociedad, esta niña según mi opinión, creo que ronda sus primeras 13 o 14 primaveras, no lo se exactamente, pero su aspecto juvenil, irradia una inusual belleza, ¿que como lo se?, lo se porque yo la he visto, ella se sabe hermosa, pero teme mostrarse y prefiere permanecer oculta, tras una imagen de niña reprimida, ante los ojos de sus jóvenes compañeros de clases, que juegan y se divierten haciendo travesuras a sus demás compañeras, sin darse cuenta.

Todos juegan alzándoles las frágiles y pequeñas faldas, para ver lo que hay debajo, en tanto estas los persiguen con aparente enojo, mientras inconscientemente van pensando en el momento en el que los chicos lo vuelvan a hacer, les molesta cuando lo hacen, pero a la vez no, avanzan contentas, pues se sienten deseadas por alguien diferente a ellas

A su corta edad, no saben el por que, apenas comienzan a comprender sus sentimientos, sus emociones, y esas suaves sensaciones que surgen lentamente de entre sus piernas mientras son atacadas una y otra ves por sus compañeros varones, que inocentemente comienzan a aprender sobre el juego del amor, del amor hacia lo carnal, hacia lo prohibido. Empiezan a recorrer cada uno a su paso los diferentes caminos de la vida, de los cuales, solo los adultos conocen los destinos, A todos parece gustarles el juego, todos están aprendiendo, es una lección que solo ellos pueden aprender, nadie mas puede enseñarles, y tu.

Tu también aprendes, lo haces mientras observas desde tu asiento, mientras sujetas un libro entre tus manos, observas como los niños se lanzan en un feroz pero infantil ataque sobre las faldas de tus compañeras, en busca de sus delicadas prendas, haciéndolas volar sobre sus cuerpos, mientras estas en vano intentan cubrirse, lo que inevitablemente el mismo viento parece querer dejar al descubierto. Algunos incluso son más osados y meten las manos por debajo de las faldas, intentando tocar algo más, intentando descubrir algo nuevo.

Tu cuerpo al igual que el de tus otras compañeras también comienza a reaccionar, y un leve pero agradable cosquilleo comienza a nacer entre tus piernas y tu vientre. No sabes el por que, pero las sensaciones que lentamente invaden tu cuerpo al ver esas imágenes, te excitan sobremanera, aunque tu aún no lo sabes, pues desconoces las sensaciones. En ocasiones incluso te hacen estremecer, no logras comprenderlo, pero al ver los delicados y juveniles cuerpos de tus compañeras que por momentos quedan cubiertos, únicamente por la suave tela de las pantaletas de algodón mientras que algunas manos buscan entre sus piernas, se empiezan a recrear en tu mente las clases de sexualidad que torpemente te han sido impartidas, y en las que por medio de dibujos y esquemas tu maestro amablemente les mostró, y que apenas te ayudaron a comprender el por que de tu anatomía y las diferencias con tus compañeros varones, algo que antes ni siquiera comprendías, ahora comienza a tomar forma en tu cabeza.

En esos momentos quisieras estar en el lugar de tus compañeras, incluso en ocasiones sientes envidia por ellas, ¿no es así?, pero hay un problema, tu timidez no te permite participar en esos juegos, ya otras ocasiones lo has intentado, pero tus compañeros no parecen tomarte en cuenta. Por el contrario, más bien pareciera que te evitan.

Con tristeza observas a las demás niñas y no comprendes por que tus compañeros las prefieren a ellas en tu lugar, para ti todas parecen iguales, incluso te sabes mejor, pues en el fondo tu conoces tu verdadero aspecto, y no se parece en nada a lo que ellos perciben, pero eres incapaz de mostrarlo a tus compañeros, para ellos solo eres la niña reprimida y tímida de siempre, la que nunca rompe un plato y se pasa todo el tiempo estudiando y leyendo, o detrás de un ordenador de PC.

Tu misma vestimenta mas larga y holgada que la de tus otras compañeras, así lo indican, mas sin embargo sabes que no es así, sabes que por dentro eres distinta, muy distinta a lo que ellos creen. Sin embargo no puedes hacer nada mas que observar desde tu banca, el incansable juego de tus compañeros, que ya incluso en ocasiones logran sostener por cortos momentos elevadas al cielo las pequeñas faldas de las pobres niñas que indefensas solo pueden gritar tímidamente mientras con sus manos intentan cubrir su intimidad, a la ves que son observadas por los demás niños a su alrededor, que ya con algo de morbo meten sus manos entre las piernas de las niñas mientras cuidan que ningún profesor se acerque al lugar, todos se ríen y se divierten haciendo sufrir a las pequeñas, sin darse cuenta de nada mas, simplemente permanecen absortos en sus juegos.

De pronto algo llama tu atención, cuando levantan la falda de una de las niñas, logras percibir por leves segundos una pequeña mancha de humedad en las pantaletas de la infante justo en su entrepierna. Volteas hacia todos lados con la cara sonrojada, pero parece que ninguno de los presentes se ha dado cuenta aun, rápidamente la niña logra reacomodar su falda y corre hacia los sanitarios en busca de refugio.

Exaltada por lo que acabas de presenciar, y de lo cual aparentemente eres la única testigo, permaneces absorta, confundida, tu cuerpo reacciona, y tu temperatura se eleva, el leve cosquilleo que antes apenas percibías, se hace presente nuevamente entre tus piernas, sientes como una suave corriente de electricidad recorre tu cuerpo, desde tu vientre.

Y tus piernas que antes permanecían relajadas, se cierran y se tensan instintivamente, sientes como tus propias pantaletas se humedecen bajo tu falda, mientras la imagen de la niña pasa por tu cabeza, permaneces en tu asiento, confundida pero por alguna razón relajada, como si flotaras, no logras comprenderlo pero no te importa, te sientes muy bien así como estas, en un momento, y sin previo aviso el timbre del colegio te toma por sorpresa liberándote de tu letargo, e indicando el final del receso, rápidamente te levantas y corres rumbo a tu salón de clases, al llegar a el, tomas tu asiento y buscas en las miradas de tus demás compañeros un indicio de lo ocurrido, pero todos permanecen tranquilos, y solo en ocasiones voltean a verse y se ríen entre ellos, sabiendo sus maldades de las cuales, tu eres la única testigo.

El resto de la clase continua normal para todos excepto para ti, en tu mente solo pasan las imágenes de lo ocurrido, te confunden, te excitan, pero tu no te das cuenta. Sientes entre tus piernas la humedad de la pequeña prenda de algodón, pero no sabes el por que temes levantarte, permaneces quieta. En un momento el final de la clase es anunciado por el timbre del colegio, rápidamente todos los niños salen apresurados del salón rumbo a sus casas, pero tú.

Tú, absorta, confundida aun por todo lo ocurrido, te levantas lentamente de tu asiento y sales del salón, sin nada mas en tu cabeza que las imágenes de ese día, sales ignorando incluso la vos de tu maestro que te llama para despedirse de ti, caminas por las calles distraída, llegas a la parada de autobuses donde diariamente esperas a que llegue el bus de la ruta que te lleva hasta tu casa, no pones atención en nada mas que en lo que pasa por tu cabeza, sin darte cuenta que el bus se ha detenido frente a ti. El chofer amablemente te llama para que subas pues ya te conoce de tiempo atrás, en ese instante reaccionas y subes, llegas a un asiento vació y te acomodas.

Al poco rato de iniciar tu recorrido tu mente empieza a divagar, a lo lejos percibes a una pareja de perros aparentemente pegados de forma muy extraña, cola con cola, es algo que te inquieta, y atrae tu atención. pues nunca antes lo habías visto, mas atrás observas como una señora de edad avanzada intenta enfurecida despegar a los dos canes, sin lograr nada, la imagen lejos de parecerte morbosa, te parece cómica, pues tu corta edad y tu poca, o mejor dicho nula experiencia en el sexo te impide comprender. Tu atención se centra en el perro que tras varios tirones logra desprenderse de su pareja mostrando tras de si una enorme barra de carne que cuelga de entre sus patas, sin embargo, debido a lo poco que sabes del sexo eres incapaz de reconocer tal herramienta, mas sin embargo su imagen nuevamente se queda grabada en tu mente, tu cabeza comienza a recrear nuevamente esas imágenes, pareciera que jamás podrás olvidarte de ellas, se han quedado tatuadas en tu mente, de nuevo una corriente calida recorre tu cuerpo bañando tu entrepierna y humedeciendo tus bragas, mientras un leve gemido sale de tu boca exaltada, volteas hacia todos lados intentando saber si alguien se ha dado cuenta pero nada, todos los pasajeros parecen estar en su propio mundo.

Tomas tu mochila y colocándola sobre tus piernas te cubres con ella deslizando una mano por debajo de tu falda intentando alcanzar la zona húmeda entre tus piernas, tratando de que nadie te note, tus dedos rozan tu entrepierna justo sobre tu vulva, al sentir el rose de las yemas de los dedos sobre tu pequeño clítoris, una fuerte descarga de electricidad te hace suspirar, pero inmediatamente callas mientras miras a todos lados intentando saber si alguien te ha notado, mas no es así, nadie te ha visto.

¿que ha pasado?, ¿que fue eso?, te gusta como se siente, estas aprendiendo, quieres probar de nuevo, pero temes que te descubran, sacas tu mano de tu falda y tus dedos están impregnados, humedecidos por tu propio cuerpo, mas no sabes por que, confundida acercas tus dedos a tu nariz, para tratar de reconocer el olor, pero todo es en vano, ese olor es algo nuevo para ti, jamás lo habías percibido antes.

Extrañada como estas, no te das cuenta de que el bus ya ha pasado desde hace rato tu destino, hasta que es demasiado tarde, cuando por fin te das cuenta, desconoces por completo el lugar en el que estas, rápidamente tomas tus cosas, y bajas del autobús, que se aleja, dejándote, quien sabe donde, tu corta edad y tu falta de experiencia, no te dejan ver que era mejor permanecer dentro del mismo, asustada, comienzas a caminar mirando hacia todos lados, intentando ubicar el lugar buscando algún sitio conocido, una tienda, una casa, un edificio, cualquier lugar que te pueda servir de referencia.

Mas sin embargo todo es en vano, las calles, las casas, todo es muy diferente a lo que tu conoces, miras tu reloj y ya comienza a hacerse tarde, asustada comienzas a caminar buscando a alguien que te diga donde estas, pero al ver a la gente de la zona, prefieres seguir caminando intentando ocultar el miedo que te invade lentamente, caminas sin rumbo, no sabes donde estas, en tu cabeza la imagen de unos padres enojados que esperan tu llegada te atemoriza aun mas, sabes que te espera un fuerte castigo por llegar tarde, pero eso no es lo que te preocupa, lo que quieres es encontrar el camino a casa.

Caminas asustada por las calles sin darte cuenta que cada ves te alejas mas de tu destino, cuando por fin te notas perdida ya la noche te ha alcanzado, las calles se muestran obscuras, y no hay una sola alma en ellas, la soledad y la obscuridad que cobijan las calles te aterran, ya solo caminas sin rumbo, los sonidos de la noche hacen el ambiente tétrico para ti.

Una niña de tan corta edad como tu, sola y perdida en medio de la noche, en un lugar desconocido, es algo que aterraría a cualquiera, pero a ti no te queda mas que seguir avanzando hasta donde tus fuerzas te lleven, pues sabes que de no hacerlo, jamás regresaras a tu casa, entras en una calle, la cual se percibe solitaria, mas obscura y tétrica que las demás por las que has pasado, incluso dudas en seguir avanzando, pero la silueta de un grupo de individuos acercándose, te hace correr y esconderte entre las sombras de la obscura calle, el miedo te hace reaccionar sientes el peligro y en lugar de ir hacia ellos te ocultas entre un montón de basura, mientras esperas a que pasen. Desde donde estas puedes ver como un grupo de pandilleros pasan de largo haciendo alardes entre ellos y destrozando cuanto objeto se encuentra a su paso, ya algo mas tranquila por haber tomado la decisión correcta y de saberte sana y salva, esperas un momento a que se aleje el grupo de individuos, pero cuando te dispones a levantarte, el ruido de un bote de basura que cae a tus espaldas te paraliza todo el cuerpo, temes voltear, y el mundo se te viene abajo, creyendo que todo esta perdido, volteas lentamente intentando descubrir el origen de donde provienen los sonidos.

A poca distancia de donde te encuentras un bote de basura permanece en el suelo, pero no logras ver nada mas, al no percibir nada de peligro, un suspiro de alivio escapa de tu boca, mas sin embargo tus ojos se abren al máximo cuando ves como el bote de basura comienza a moverse, al mismo tiempo escuchas como arañan y rasgan las bolsas de basura que hay dentro, no logras ver nada pero el simple movimiento del bote te aterra, tu cuerpo nuevamente se paraliza y no puedes moverte, tus piernas no te responden, intentas controlarte y observas con detalle hacia ese lugar, intentando entender lo que pasa en el sitio, pero la oscuridad del lugar apenas te permite distinguir una silueta negra que se revuelca dentro del bote de basura, tus ojos se llenan de lagrimas y comienzas a temblar cuando logras identificar la figura de un enorme perro robusto de color negro, no conoces de razas pero el enorme tamaño del mismo te aterra.

Para ti todo esta perdido, intentas moverte pero tus piernas no te responden, el enorme animal negro levanta la mirada y observa en dirección tuya, permaneces quieta como estas, esperando que al no ver movimiento alguno de tu parte, el animal, se aleje sin hacerte daño, por un momento crees haberlo logrado, pues el enorme animal vuelve a su labor de hurgar entre la basura, sin tomarte en cuenta, lentamente comienzas a moverte para tratar de salir del lugar lo antes posible, pero tus movimientos llaman la atención del animal, que deja a un lado su labor y nuevamente dirige su mirada hacia ti, sus ojos se clavan en ti fijamente, comienzas nuevamente a temblar cuando ves que el enorme perro negro se acerca lentamente hacia ti. A cada paso que el da, tu también retrocedes un poco, intentando mantenerte alejada de el lo mas posible, pero una enorme pared a tus espaldas bloquea tu avance, sin embargo el animal sigue acercándose a ti, levantando su hocico sin dejar de observarte, Intentando reconocer tu olor, al llegar hasta donde tu estas, acerca su hocico y comienza a olfatearte es ahí cuando te das cuenta del verdadero tamaño del animal, lo ves enorme como un monstruo, que fácilmente sobrepasa tu cintura, pareciera que algo en ti llama su atención, pero no sabes que es, el perro olfatea entre tus piernas y un frió recorre todo tu cuerpo, al sentir como su hocico resopla en tus muslos, subiendo poco a poco metiéndose incluso por debajo de tu falda, separas tus piernas un poco y comienzas a llorar temiendo que el perro pueda morderte pero evitas hacer movimiento alguno, solo tus manos se mueven sobre tu falda intentando empujar ligeramente al animal hacia fuera de ella, sin hacer mucho esfuerzo por temor a ser atacada por ese enorme monstruo.

De pronto un gruñido del animal te hace estremecer, te sientes obligada a permanecer como estas, con el animal metiendo su cabeza por debajo de tu falda justo entre tus piernas, quieres gritar y pedir ayuda pero el miedo que tienes te lo impide, casi puedes imaginarte y sentir los colmillos del animal mordiendo tu cuerpo, haciéndote pedazos ahí mismo, te sientes perdida, de pronto sientes como debajo de tu falda el hocico del enorme animal se pega en tu vulva olfateando la humedad en tus bragas, y un suspiro sale de tu boca, mientras su enorme lengua te hace levantar del suelo, haciéndote parar sobre las puntas de los pies a cada arremetida.

No puedes ver que es lo que esta pasando bajo tu falda, pero puedes sentirlo todo, apenas comienzas a descender cuando un nuevo lengüetazo mas fuerte que el anterior vuelve a ponerte de puntas y nuevamente otro suspiro sale de tu boca,

HAYYY

NO ESPERA

QUE HACES

NOOO VETEE

HAAAAYYY

Poco a poco comienzas a sentir un cosquilleo que empieza a bajar desde tu vientre hacia tu entrepierna ayudado por los constantes lengüetazos que el animal hace entre tus piernas bañando todo por completo. Pero no puedes hacer nada para impedirlo cada ves que intentas moverlo te gruñe amenazante paralizándote de nuevo, dejándote indefensa, sumisa, resignada.

HH..HAAAAA

NNOOO

QUE HACESSS POR FAVORRRRRR NOOOOO

SS SU EL TAMMEEE HAHHHHHH

VETE DE AQUIIII

HAYYY NNOOO PORR FAVORRR YA NNNOOOOOOO

DEJAME EN PAZZ VETE YAAAAAAAAAAAHHHHHHHH

La fuerte oleada de sensaciones que te produce esa lengua enorme y áspera entre las piernas te lanza directamente hacia el primer orgasmo de tu vida, ¿el primero? Tal ves no, pero si el mas fuerte, a cada lengüetazo en tu entrepierna, el animal te roba un poco de tu energía, de tu voluntad, haciéndote perder las fuerzas en las piernas, y provocando que tu propio peso te venza, dejándote caer al piso, lo que hace que el enorme animal por un momento se aleje de ti y retroceda confundido, sin saber lo que pasa, ninguno de los dos se mueve del lugar, intentas comprender lo que pasa, ¿por que el perro tiene tanto interés en esa zona de tu cuerpo? ¿que es lo que ha pasado? ¿que es lo que acabas de sentir?, son tantas preguntas que pasan por tu cabeza, pero ninguna tiene aparente respuesta, en ese instante pasa por tu mente el recuerdo de tus pantalietitas mojadas por tus propios flujos.

Al ver que el perro no se aleja y permanece rondándote, buscando el lugar por donde acercarse nuevamente a ti, te armas del poco valor que te queda e intentas asustarlo pero nada funciona, parece ser que el único interés del perro es hacia ti, pero no logras entender por que.

Tan ingenua, tan niña, crees que el interés del enorme perro es hacia tus bragas, lentamente metes tus manos bajo tu falda y las deslizas hacia fuera, quitándotelas por completo, mientras el perro tranquilamente te observa, sin quitarte la vista de encima, puedes sentir la tela completamente mojada por tus jugos y por la saliva del animal, con las pocas fuerzas que te quedan, las arrojas lo mas fuerte que puedes, tratando de distraer al animal que te asecha obsesionado, pero todo parece estar en tu contra pues la prenda no cae muy lejos de donde te encuentras, el animal al ver el objeto que le has arrojado, se acerca curioso a el, atraído por el fuerte olor que mana de la pequeña prenda. La olfatea un momento y voltea hacia ti de nuevo,

Para ti pareciera que todo esta perdido, pero en un instante el perro vuelve a agachar su cabeza en el pequeño y delicado trozo de algodón, lamiendo todos los jugos que ahí se encuentran, al ver que el animal esta distraído intentas levantarte dándote la vuelta lentamente para no llamar su atención, crees que ya todo ha pasado, mientras el enorme can este distraído puedes escapar de ahí, pero no es tan fácil, en un instante cuando tu cuerpo comienza a incorporarse, dándole la espalda al animal, inclinada como estas, intentas levantarte, pero en ese instante algo frió se posa entre tus piernas, y tu cuerpo se eriza por completo, el miedo te paraliza nuevamente, ahora lo sientes con mas facilidad pues roza y resopla directamente sobre la piel desnuda de tu frágil y pequeña vulva, volteas por sobre tu hombro sin poderte mover de la posición en la que estas, y logras percibir a unos metros la pequeña prenda de algodón que hace unos instantes te cubría, y que ahora yace tirada en el suelo destrozada y sucia, , giras tu cabeza y tus ojos vuelven a abrirse enormes, al percibir nuevamente la figura del perro metida bajo tu falda, intentas moverte, pero nuevamente un gruñido te mantiene en tu lugar, es frustrante, te sientes vulnerable, no sabes de que pueda ser capaz el enorme animal si lo haces enojar, temes por tu vida, pero no puedes hacer nada, intentas pensar en algo que te ayude a librarte de la situación tan peligrosa en la que estas, pero no consigues respuesta, tu cuerpo y tu mente no reaccionan, has quedado completamente paralizada.

Sin avisarte, el perro nuevamente comienza a probar tu intimidad, lamiendo todo cuanto se encuentra a su paso, su enorme lengua recorre todo tu pequeño canal desde tu vulva hasta tu ano haciéndote estremecer sin control, caes hacia delante y tus manos se apoyan en el suelo para darte un poco de soporte, y ayudarte a resistir mientras el perro hunde su hocico entre tus piernas,

HHH HAAAAAAAAAYYYYYY

NNNOOOO PARAAAA YYYYYYAAAAAHHHHHHHHH

PP POR RRR FF FAVORRRRRRR

QUE HACESSSSSSSSSS

SSUELLLTTTAMMEEEEEE YAAAAAAAAAAAAA

NOOOOOOOOOOOOOOOHHHHHHHHHHHH

HAAAAAAAAAAA

Pero tus palabras parecen rebotar en los oídos del animal que continua lamiéndote sin importarle en lo mas mínimo tus suplicas, el no te entiende, solo sigue su instinto, pues en ti ha encontrado lo que tantos meces de soledad en las calles le han quitado, y no te dejara tan fácilmente, no hasta haberse saciado, y tu. Tu solo puedes tratar de soportar lo que venga, resignada, ya solo te queda esperar a que todo termine pronto, apoyando tu cabeza sobre tus brazos, que ya se doblan sin fuerzas en el piso, mientras enorme animal trabaja con su lengua presionando fuertemente sobre los delicados labios que cubren tu vulva, separándolos cada ves mas mientras avanza y se hunde en tus entrañas lentamente, escarbándote, hurgando en tu interior, intentando extraer el delicioso néctar que escurre en abundancia desde lo mas profundo de tu sexo, bañando tus muslos, mientras caen hacia el piso, haciéndote gemir. En ocasiones intentas espantarlo, pero es inútil, el animal se impone y te gruñe nuevamente, lentamente dejas de resistirte, ya no puedes, las sensaciones tan placenteras que poco a poco invaden tu cuerpo, hacen que tu temperatura se eleve cada ves mas, y tu voluntad disminuya a cada lengüetazo, cierras tus ojos, mientras que en tu cabeza intentas repetirte que nada es real, que todo es un sueño, del cual tarde o temprano tienes que despertar, pero las sensaciones que crecen nuevamente en tu vientre, te hacen saber que no es así, todo es real, de verdad te esta pasando, sin darte cuenta, en forma casi inconciente, tu cola se levanta, y tu cuerpo casi por reflejo intenta pegarse cada ves mas a la enorme y húmeda lengua que te invade, ofreciéndote al enorme animal, intentando aumentar las sensaciones que cada ves te parecen mas placenteras, tu boca comienza a lanzar leves suspiros con cada arremetida de la lengua del perro sobre ti, pero tus ojos cerrados no te permiten percatarte del error que has cometido, en un momento, la lengua que tan placenteramente te trabajaba entre las piernas súbitamente se detiene.

El calor que la enorme lengua, tan agradablemente te brindaba hace unos momentos, es ahora ocupada por un leve frió provocado por la suave brisa de la noche que ahora golpea libre, sobre tu húmeda y desprotegida hendidura, lentamente abres tus ojos mirando por debajo de tu cuerpo para saber que es lo que pasa, por que el animal se ha detenido de tan maravillosas caricias. En ese momento sientes como el animal se trepa sobre ti y todo su peso descansa sobre tu espalda, sientes como fuertemente se sujeta a ti aferrándose con sus patas a tu cintura, mientras empuja fuertemente hacia ti, nuevamente tu inocencia se hace presente, no entiendes lo que pasa, volteas por debajo de tu cuerpo y puedes ver un enorme trozo de carne que sale de entre las patas del perro, y comienza a crecer rápidamente, ensanchándose y alargándose, apretando tu delicado cuerpo entre el animal y el pedazo de carne, que se mueve y se frota en forma desesperada hacia delante y hacia atrás sobre tu vientre justo encima de la tela de tu uniforme.

Extrañada y asombrada por el tamaño del pedazo de carne, puedes ver como éste casi llega hasta la mitad de tu abdomen, su tamaño y su forma extrañamente, te hipnotizan, en tu mente se dibujan las imágenes de aquel perro de hace unas horas, cuando viajabas en el camión rumbo a tu casa, observas como se mueve bajo tu vientre en un vaivén desenfrenado, mientras en tu mente se dibuja la figura y el tamaño que tenia el otro perro, pero al estar tan cerca de este gran animal negro que descansa sobre tu espalda, el primero parece muy pequeño en comparación.

Mientras en tu mente pasan una y otra ves las imágenes de ese día, el enorme animal desesperado se baja por un instante de tu cuerpo, solo para volverse a trepar rápidamente sobre ti, sujetándote nuevamente con fuerza, y jalándote hacia el, pero esta ves comienzas a sentir como el enorme pedazo de carne golpea torpemente contra tu redondeada y pequeña cola, las sensaciones inocentemente te producen risa, hasta que en un momento, la punta caliente del enorme miembro encuentra un pequeño hueco y se apoya en el centro, justo contra la pequeña y húmeda entrada de tu concha, el perro al darse cuenta que ha acertado empuja con fuerza. Al sentir la enorme presión sobre tu vulva, tus risas se convierten en un fuerte grito, que se ahoga mientras intentas desesperada recuperar un poco de aire que la tremenda envestida del animal te ha quitado, a la ves que tus ojos se abren tan grandes como tus parpados lo permiten.

HAAAAAAAAAAAAA AAAAAAAAAAAAAAAA AYYYYYYYYYYYYY

NNNOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

PORRRRFAVORRRRRRRR RRRRRRRRRRRRR PARAAAAAAAAAAAAAAAA

YA SALTEEEEEEEEEEEEE SUELTTTAMEEEEEEEEEEEEEEEE

MM MME ESTSSS PARRTRRRRRRTIENDOOOOOOOOOOOOOOOOOO

YAAAAAAAAAAAAAHHHHHH HHHHHH HAAAAAAAAA NOOOOOO

NOOOOOO MAAAAAASSSSSSS PORFAVORRRRRRRRRRRRRR

Suplicas y lloras pidiendo que todo termine, que te deje en paz, pero todo es inútil, ahora que el perro a encontrado una hembra, con la cual aparearse no la dejara asta haber cumplido su propósito, ahora lo comprendes, ahora ya lo sabes, pero ya no hay nada que puedas hacer, no entiendes por que el animal te ha elegido a ti, en lugar de una de su propia especie, los conocimientos que tienes sobre la sexualidad, apenas te dejan entender lo que esta pasando, pero así es y ya nada puede impedirlo, desesperada intentas zafarte, pero es imposible sus patas aférran tu débil cuerpo con tal fuerza que te es imposible escapar, apenas logras tomar un poco de aire cuando sientes como el enorme perro nuevamente arremete sobre ti envistiéndote de nuevo, hundiendo otro tanto del enorme pedazo de carne dentro de tu cuerpo, sientes como va entrando cada ves mas profundo, recorriendo tu estrecho canal centímetro a centímetro, partiéndote a su paso, te va llenando poco a poco.

Con cada nueva arremetida de su miembro, un pedazo mas grande se entierra en ti, es enorme, puedes sentirlo completamente, sientes como palpita ya dentro de tu infantil útero, y no hay nada que puedas hacer, volteas nuevamente por debajo de tu cuerpo y logras ver como un pequeño rió de sangre corre por tus piernas cayendo hasta el piso, un mar de lagrimas corre por tus mejillas ayudadas por el dolor y la frustración por lo ocurrido, por la impotencia que sientes al no poder evitar lo que te ha pasado, lo que te esta pasando, pero nada puedes hacer, te tocas entre las piernas con una mano, lentamente intentando descubrir con el tacto, todo el daño que el enorme miembro ha hecho en tu cuerpo, y asombrada descubres como los labios de tu vagina permanecen abiertos y se tensan al máximo para hacer espacio al enorme miembro que te invade una y otra ves sin descanso.

La velocidad y la energía que el animal imprime en sus estocadas, apenas te permite sujetarte, sientes como cada ves entra y sale con mas libertad y fuerza, ayudado por tus fluidos que bañan su miembro y lubrican sus embates, los cuales cada ves parecen llegar mas profundo, sientes como te recorre las entrañas, mientras tu permaneces sumisa y resignada debajo del enorme can, que ahora te toma como si fuese tu dueño, eres su perra, y hace con tigo lo que su instinto le indica, para ti solo queda resistir el dolor, para el no existe la culpa.

Cierras tus ojos y aprietas tu mandíbula mientras intentas soportar el fuerte dolor entre tus piernas que se tienen que abrir al máximo para poder dar mas espacio al miembro que te ha invadido, al poco tiempo, después de unos minutos de interminable agonía tu cuerpo comienza a relajarse y el dolor comienza poco a poco a desaparecer, sientes una extraña fiebre que recorre todo tu ser, provocada por la fricción que las envestidas que el can le esta dando a tu concha, y estas comienzan a tornarse placenteras, mientras tu cuerpo comienza a disfrutar de un placer que hasta ese momento era desconocido para ti.

HAYY HAYY YAAAA NOOOO HAYYY PARA PARA

MAS DESPACIO HAYYY

ESSSPERAAA HAAAAAA YAAAAA

SIIIIIII ASIIIIII HAYYYY HAYYYY TRANQUILOOOO

HAAAAGGGGG

YAAAAAAAAAAA

Comienzas a decir palabras sin sentido, y te dejas llevar por el placer, un placer animal que solo en esas circunstancias podrías haber sido capaz de conocer, ayudada por tu nuevo macho que te toma y te posee a su antojo, mientras tu permaneces sumisa, y disfrutas lo que ahora se ha convertido para ti en el mas placentero de los vicios, el tiempo y el espacio dejan de existir para ti, en ese instante solo existen tu y tu nuevo amante, nada mas puede pasar, lo bueno y lo malo ya no existen para ti, ya nada mas importa, tu mente y tu cuerpo se han olvidado de todo aquello que no sea disfrutar las sensaciones que nacen en tus entrañas, cierras tus ojos mientras comienzas a gemir, levantando la cola y empujándote hacia tu macho, como intentando meterlo todo dentro de ti, su ritmo y el tuyo se hacen uno solo, como un erótico vals que ambos bailan moviéndose al unísono, mientras el te enviste tu lo recibes pegándote mas a el, para forzarlo a entrar lo mas profundo que tu anatomía te lo permita,

HAAAA SIIIIII ASIIIII

MASSSSSSS PORFAVORRRR

SIGUEEEE NO PARESSSS

QUE RRICOOO

DAME MASSS

DAMELO TTTODOOOO LLENAME TODAAAAAA

El enorme animal, al ver que su nueva hembra ya esta a su completa disposición te sujeta con mas fuerza de la cintura y deja caer toda su fuerza y su peso sobre ti, empujando fuertemente, tratando de meter el ultimo pedazo de su mástil que se muestra inflado, y que ya choca contra la entrada, sobre tus labios vaginales, al sentir la enorme presión en tu concha inmediatamente abres tus ojos y volteas por debajo nuevamente para ver que es lo que pasa, puedes ver como el enorme miembro ha desaparecido casi por completo entre tus piernas, a excepción de una gran bola de carne llena de venas, que permanece inflada y que choca contra la entrada de tu vulva sin poder entrar, mientras el animal empuja fuertemente provocándote un nuevo dolor.

QUE HACES NOOO ESSSSSSPERAAAAAA HAYYYYYYYYY

NNOO QUE ES LO QUE QUIERESSSSSSSS

YA ME LA METI SS STE TODA QUE MAS QUIERESSSSS

PORFAVOR DETENTEEEEE

HAYYYYYY ME DUELEEEEEEEEE

YA NO PUEDO MASSSSSSSS

POR FAVORRRRRRRYA NO CAVESSSSSSSS

Deslizas tu mano a tu entrepierna para ver que es lo que pasa, nuevamente notas tu concha completamente estirada, ni un solo hueco queda libre pues tu vulva ha sido sellada por la enorme barra de carne que se ha alojado en su interior pero aun sientes como la enorme pelota de carne presiona fuertemente desde afuera contra tu vulva intentando encontrar un pequeño espacio para entrar, te relajas un poco confiando en que es imposible que todo eso logre entrar a tu cuerpo, pero tu error lo pagas caro, pues los músculos en tu vagina se relajan también dando mayor libertad al miembro que esta dentro.

El perro al sentirse mas libre vuelve a empujar con fuerza y tus ojos se abren mientras sientes con tus pequeños dedos como tu concha se abre enorme para tragarse por completo la enorme bola de carne que se hunde en tus entrañas sin remedio, para después cerrarse tras de si, dejando a todo el miembro del animal atrapado dentro de tu pequeño y maltrecho canal, y al mismo tiempo como por instinto, tus piernas también se cierran presionando todo el mástil dentro de tu cuerpo,

HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYYYYYY

NNNOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

MEEEEEE DUELLLLLLLLEEEEEEEEEEEEEE MUCHOOOOOOOOOOOOO

SACALOOOOOOOOO PORFAVORRRRRRRRRRRRRRRRR

HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYYYYYYY

YAAAAAAAAAA NOOOOOOOOOOOOOOOO

no puedes creerlo, volteas con los ojos llenos de lagrimas mientras gimes por el intenso dolor en tu vientre, solo para confirmar que el enorme pedazo de carne ha sido devorado completamente por tu concha, la cual muestra un abultado monte de Venus, lugar en el cual parece haber quedado alojada la enorme bola de carne. Tus suplicas parecen ser escuchadas esta ves por el enorme can, que descansa sin hacer movimiento alguno sobre tu espalda, como sabiendo de la gran hazaña de la que has sido capas, permanece tranquilo, solo esperando como si quisiera darte tiempo para que tu cuerpo pueda acostumbrarse a la descomunal dimensión del miembro que guardas en tu vientre y a la que te ha sometido tu amante perruno, y tu, tu solo cierras tus ojos intentando recuperar nuevamente el aliento, intentado soportar el dolor que te invade, que te llena.

Ahora si que puedes sentirlo, tus ojos cerrados tratando de no ver nada, de no pensar en nada, solo sientes el dolor intenso en todo tu vientre, tratas de resistirlo, ya no te importa lo que pueda pasar, solo quieres que termine pronto tu sufrimiento, sientes como tu vagina y tu útero están inflados al máximo, no sabes como ha sido posible tal cosa, pero así es, puedes sentirlo, puedes verlo, puedes tocarlo, puedes sentir la enorme barra caliente que se infla en tu interior, palpitando, como si tuviese vida propia, te quema, te duele, y no puedes hacer nada para evitarlo, tus suplicas son escuchadas, el estado tan pasivo del animal que descansa sobre ti, te permite descansar y relajarte poco a poco, los extraños latidos que el miembro del animal ejerce dentro de tu cuerpo son como suaves masajes para tus entrañas, que los reciben agradecidas, nuevamente el éxtasis total llega a tu cuerpo, cuando ayudada por los latidos del calido pene tu amante te llevan a una gloriosa oleada de orgasmos que prácticamente te dejan noqueada.

Ya sin perjuicios, sin dolor, sin lagrimas, te relajas completamente y te entregas por completo a las nuevas envestidas que tu compañero comienza a propinarte nuevamente, sabiendo por instinto que ya te has relajado y comienza nuevamente el erótico vals del amor, en el que ambos cuerpos se unen en uno solo moviéndose como en el vaivén de las olas, encontrándose en el camino, y fundiéndose entre si. Hasta que sin previo aviso, una fuerte descarga lanzada por tu amante canino te inunda por completo ocupando el poco espacio que pueda quedar en tu útero, sientes como te recorre la calidez de un liquido que te lleva a la locura de tu, tan deseado final, para este instante estas exhausta, tu cuerpo cansado, parece el de una muñeca de trapo, sin moverte sin decir palabra alguna, solo dejándote llevar por tu macho. Sientes como aun palpita dentro de ti, esta vivo, hierve, sientes como va dejando en cada latido un pequeño chorro de su calido néctar, el cual se pierde en la profundidad de tu útero, tu mente viaja en ese instante, vuela hacia un mundo de paz, y tranquilidad, sientes como tu cuerpo flota, es un mundo que solo tu conoces, al que solo ese estado de placer que has alcanzado te puede llevar, regresas a ti misma solo para mirar a tu amante que permanece adherido a ti, cuidándote, protegiéndote, haciéndote suya mostrándote que ya no hay de que temer que ya nadie puede hacerte daño pues el esta con tigo, tu le perteneces, y el te pertenece a ti, y tu mientras tanto solamente te dejas llevar, te entregas, mientras permaneces abotonada a el, con tu colita de niña levantada como una verdadera hembra, como una verdadera mujer, como una verdadera perra, entregándose a su macho, ves esa imagen, te ves a ti misma entregándote a un placer sin fronteras, a un placer animal, y ahora ya no quieres que termine nunca. Quieres sentirlo adentro de ti por siempre, aunque sabes que eso es imposible, te resignas mientras disfrutas de cada último segundo que dure su maravilloso encuentro, acaricias en un gesto de amor a tu macho mientras este sobre ti, te brinda un calido beso en tus mejillas con su enorme lengua, para después bajarse de tu cuerpo, para quedar ambos justo como los dos perros que observaste unas horas atrás, mientras ibas en el camión rumbo a casa, ambos cola con cola, los movimientos que ejerce en ti hacen que su pelo roce tu clítoris estimulándote de nuevo, sientes como tu macho jala tu cuerpo intentando libertare, intentando liberarse, una ultima lagrima corre por tus mejillas, no tanto por el dolor que te produce, sino por la melancolía de saber que ha llegado el fin de tu encuentro, ya no quieres dejarlo, ahora lo sientes, lo necesitas, aprietas tus piernas intentando detenerlo con las pocas fuerzas que te quedan, tu hombre comienza a caminar, y tu lo haces con el, así te sientes mas suya, mas hembra, mas perra, ambos continúan paseándose en círculos por esa solitaria y obscura calle hasta que en un momento tus fuerzas te vencen y caes rendida sobre las bolsas de basura que hay amontonadas en el sitio.

Ya no te das cuenta de nada., ya no sabes mas de ti, sino hasta el día siguiente en el que despiertas, intentando recordar lo que ha pasado, lentamente tu cabeza empieza a recordar, miras a tu alrededor pero no encuentras por ningún lado a tu compañero, ¿será posible?, ¿habrá sido un sueño?, no, no puede ser, entonces que hago en este lugar, te dices a ti misma, estas segura de que lo que paso fue real, y no un simple sueño, volteas nuevamente hacia todos lados, pero no hay nada. En tu mente lo recuerdas todo como si fuera real pero no parece haber nada que te indique que en verdad haya pasado, tu mirada cae triste hacia el suelo, mientras lloras Observas tus piernas pero en ellas no hay rastro de la sangre o de liquido alguno que hace unos instantes salían de tu entrepierna a borbotones, intentas ponerte de pie, pero tus piernas no te responden estas adolorida, eso es, lentamente te incorporas, levantas tu falda cuidando que nadie te vea, y buscas con tus dedos algún rastro que te compruebe la verdad, te asustas, y a la ves te alegras al sentir el hueco que ha quedado entre los separados labios de tu vulva, como resultado de la noche anterior. Las lágrimas vuelven a caer de tus ojos llenas de alegría y de tristeza.

Alegría de saber que lo que hay en tu cabeza no fue un sueño, todo fue real, tu amado existe en verdad, pero con la tristeza de saber que tu compañero se ha marchado, tu mirada cae al suelo resignada, con los ojos empañados por las lágrimas, cuando de pronto logras ver que cae a tus pies una tela de color blanco algo sucia y maltratada, son tus bragas, te limpias las lagrimas un poco, y entonces lo ves, esta justo frente a ti, lo reconoces, es el, tu macho, tu amante, permanece sentado, tranquilo, con su porte elegante, tan solo observándote, esperándote, cuidándote, ahora puedes estar segura.

Todo fue real

Avanzas hacia el con paso tímido, el hace lo mismo al llegar a su encuentro te abrazas a el, mientras que tu amado te besa las mejillas con la misma alegría, de ahora en adelante puedes estar segura que toda tu vida va a cambiar jamás te volverás a sentir o a estar sola, ya no hay nada que temer, pues ahora tienes a un compañero fiel que llena tu vida, y es así como nuevamente sabiéndote segura y protegida emprendes el viaje de regreso sin temor, sin miedo, al lado de tu nuevo amigo, de tu nuevo amante, de tu amado compañero, Ha llegado la hora de emprender el viaje de regreso donde seguramente tus padres te esperan con ansias, el viaje hacia tu casa.

Y es así querido lector como termina mi relato, espero que así como yo he tenido la paciencia para contarlo, así también tú hayas tenido la paciencia para leerlo,

pero sobre todo espero te haya gustado, espero te haya servido, espero que cubra tus expectativas, tus propósitos, cualquiera que estos sean, pues a fin de cuentas este relato es para ti lector, para que reflexiones, para que pienses, para que medites, tu que al igual que la pequeña del relato, vive encerrado en su propio mundo, con miedo a salir de el, por temor a ser maltratado, por temor a ser despreciado, a ti te digo, no temas, sal por un momento date una oportunidad, pues ahí afuera existe un mundo mas emocionante y mas excitante aun, que el que puedas encontrar aquí adentro, y es que quien sabe, quizás igual que la pequeña, tu también logres encontrar la felicidad en el, o quien sabe, quizás tu formes parte de mi próximo relato. Y yo.

Yo también querido lector, es hora que regrese a mi mundo de las sombras nuevamente para poder seguir observándote, desde donde puedo seguir creando, dando forma y dando vida a mis historias, para que tu, a su debido tiempo las disfrutes las critiques y las juzgues, de forma buena o mala no importa siempre y cuando sea justa.

No dudes en dar tu opinión si es que así lo deseas, pero si solo has de molestar, evita gastar saliva, pues a mi solo me interesan aquellos que construyen con sus palabras, no los que destruyen con sus babas.

DarkGhost