Cadena De Tragedias 18

No me importa, ahora que he decidido apostarlo todo no me importa a quien tenga que enfrentarme, haré lo que tenga que hacer para ganarme el corazón de July.

>>>Julieta<<<

Me llevé las manos a la cabeza intentando hacer que toda la tormenta de pensamientos se acomodaran, cuando una voz que proveía del baño principal me heló el cuerpo.

Renata: ¿Hay algo que quieras contarme, Julieta?

Julieta: Re… Renata… te puedo explicar…

Renata: Te escucho – estaba muy seria y se cruzó de brazos y se recargó sobre el marco de la puerta.

Julieta: Gracias al cielo que eres tú, eres de las personas más centradas que conozco. – levantó una en señal de sorpresa – supongo que lo escuchaste todo – asintió – hoy al llegar tuve un pequeño accidente, ¿recuerdas los raspones de mis brazos? Me caí en un hoyo y Roxana me rescató, fuimos a caminar al lago y me besó, me tomó desprevenida, le respondí el beso por unos momentos pero recapacité y le dije que no debió pasar. Lo se, no debí hacerlo y como escuchaste pienso decirle a Violeta lo que hice pero… - me quedé callada por unos momentos y bajé la mirada.

Renata: Pero tienes miedo de que Violeta se le vaya a golpes a Roxana, ¿no? – asentí, estuvo un momento callada y se llevó la mano a la frente, suspiró y se sentó – sé que Violeta es una persona difícil, y estoy en un dilema porque es mi amiga y ella debe saber lo que pasó – quería decir algo pero no me dejó – pero entiendo tu punto, así que te voy a dar el beneficio de la duda July, y te dejaré tomarte tu tiempo para hablar con ella, porque se que sí, si se lo dices en estos momentos vamos a tener otro percance como con Valeria.

Julieta: Gracias por entender…

Renata: Aun no terminamos de hablar – dijo seria - ¿Qué vas a hacer con Rox? – mi corazón se estrujó cuando me preguntó eso, aún no había podido procesar toda la información cuando ella me preguntó eso.

Julieta: Me voy a alejar de ella.

Renata: Mira July, no llevo tantos años de conocerte como tus amigos, pero sí creo que eres una gran persona, pero como toda persona, puedes cometer equivocaciones. Sé que tu relación con Violeta no ha sido nada fácil, pero piensa qué es lo que realmente quieres.

Julieta: ¿De qué hablas? Yo amo a Violeta.

Renata: A mí no me tienes que convencer de eso, solo te voy a pedir que no lastimes a mi amiga, porque así con todo y como es, la quiero, y sé que ella está aterrada porque eres la primer persona con todo el poder del mundo para hacerle daño.

Julieta: No sé cómo tome Violeta lo del beso, tiene un temperamento muy fuerte, y estoy consciente de que cabe la posibilidad de que termine conmigo, no quiero perderla por este error, como tú bien dices, nuestra relación no ha sido fácil, así que apelaré a su razón y el amor que me tiene.

Renata: Creo que tendrá que ser flexible contigo, pero busca las palabras adecuadas para hablar con ella.

Julieta: ¿Por qué dices eso?

Renata: Nada más… - algo me oculta – porque creo que le has demostrado que la amas y creo que si lo platican lo pueden resolver. Volveré a la fogata, solo vine al baño y me llevé esta sorpresa. – Se puso de pie y se acercó a la puerta – Y July – volteó a verme – controla a tu amiga, o Violeta la va a controlar a su modo, y nadie quiere ver eso.

Julieta: Renata, espera… - se detuvo – tú… ¿crees que Violeta me manipula?

Renata: Mira July, yo no puedo opinar de eso, solo sé que ella efectivamente puede llegar a ser muy posesiva y temperamental, pero no es una mala persona. Eso tienes que hablarlo con ella, y analizar las cosas cuando estés tranquila, no en estos momentos.

Julieta: Ya… gracias, tienes razón. – nuevamente se volteó y salió de la habitación.

Demasiadas emociones por hoy para mí, de verdad necesito descansar, me va a explotar la cabeza. Me puse la pijama y me fui a dormir.

>>>Violeta<<<

El campamento estuvo más aburrido de lo que pensé, ni siquiera July se divirtió, básicamente nos quedamos en la cabaña y solo en raras ocasiones salimos a dar un paseo, estuve a punto de decirle que nos regresáramos solas, pero parece ser que se iba a enfermar o algo porque solo se la pasó recostada diciendo que no se sentía bien, aunque yo la notaba bien, no tenía fiebre ni nada parecido.

Cuando regresamos a la ciudad, tomamos un taxi a mi casa, no podía esperar más para hacerle el amor hasta que terminaran las vacaciones. Apenas y dejamos las maletas en la sala, le lancé sobre ella y comencé a besarla apasionadamente, me llevé la no tan grata sorpresa de que se alejó de mí y puso una cara muy seria.

Julieta: Amor, espera – se separó de mi y buscó algo en mi bolsa, sacó las llaves de mi casa y se acercó a la puerta para cerrarla con llave.

Violeta: ¿Qué haces, traviesa? Sabes que nadie va a entrar a interrumpirnos. – cuando vi que la cara de Julieta permanecía seria empecé a pensar que había algo mal - ¿Qué pasa? – puso sus manos detrás de su espalda y se recargó sobre la puerta, como si no quisiera que fuera a salirme. - ¿Julieta? Di algo, joder.

Julieta: Amor, yo… quiero decirte algo, no, varias cosas que debes saber. – eso no suena nada bien, mi corazón comenzaba a acelerarse.

Violeta: Te escucho. – tomé un vaso con agua que me había servido, mi garganta había comenzado a secarse.

Julieta: Hazlo, por favor escúchame antes de alterarte – bien, ya no podía.

Violeta: ¿Qué hiciste Julieta? – dije con un tono fuerte, sin llegar a gritar.

Julieta: Te mentí. – bajó la mirada.

Violeta: ¿Qué?

Julieta: En el campamento, te mentí. Después de que Rox me sacó del hoyo al que caí no regresé de inmediato a la cabaña. Fui a caminar por el lago con Rox, y… - tomó un suspiro – y me besó, nos besamos. – la vi lanzarse al suelo para esquivar el vaso que le arrojé a la cara y se rompió en mil pedazos sobre la pared.

Violeta: ¡¿Qué tú qué, Julieta?! ¡¿Otra maldita vez?!

Julieta: Espera Violeta, por favor, déjame terminar de hablar contigo… - ver a Julieta en el suelo hecha bolita, acorralada contra la pared, mirándome con cara de pánico y estirando sus manos para que me calmara hizo que me detuviera en seco ¿Qué estaba haciendo? ¿Acaso iba a lastimar a Julieta? Mi respiración estaba muy agitada y sentía que la sangre me hervía. No, sabía que quien me las tenía que pagar era Roxana. Avancé hacia la puerta pero Julieta se incorporó – por favor, espera, escúchame – sus manos temblaban y retrocedí.

Violeta: ¿Te acostaste con ella?

Julieta: No, para nada. Fueron solo unos segundos, me alejé de ella y salí corriendo. Volví a la cabaña y por eso estaba así. Quise decirte en ese momento pero… temía que te pusieras así y…

Violeta: ¡Ah, pero por supuesto que voy a ir a partirle la cara a esa tipa!, ¡¿Quién carajos se cree que es?! – Se interpuso en la puerta – ¡Hazte a un lado Julieta!

Julieta: No por favor, ya le dije a quien amo es a ti, le pedí que se alejara de mí.

Violeta: ¿Y qué se supone que yo haga? ¿Quedarme como idiota mientras ella te besa?

Julieta: Te juro que lo voy a arreglar, le dije a Rox que no volviera a acercarse a mí, ya no pienso estar cerca de ella si no piensa respetar nuestra relación.

Violeta: ¡¿Por eso estabas así de rara en el campamento, verdad?¡ - asintió, intenté calmarme un poco - ¿Qué sientes por ella?

Julieta: Es… era… siempre fue mi mejor amiga, nunca la he visto diferente… Yo te amo a ti.

Violeta: No te pregunté eso. Por algo le respondiste el beso – bajó la mirada – está bien – me miró sorprendida – me voy a calmar… - tomé un suspiro profundo – Te lo preguntaré otra vez. ¿Qué-sientes-por-ella?

Julieta: Cariño y amistad, nada más. – una parte de mí no podía creerle, pero en ese momento un plan comenzó a surgir en mi mente.

Violeta: ¿Le dejaste claro que no se vuelva a acercar a ti?

Julieta: Sí, pero si es necesario se lo volveré a decir. Discúlpame por favor, no quise herirte.

Violeta: Es que eres hermosa, no creas que me enojo solo porque sí, he visto cómo te miran los demás, y nunca he soportado la idea de que estés en brazos de alguien más.

Julieta: Yo solo te quiero a ti. – tenía lágrimas en sus ojos, miré al suelo y vi los restos del vidrio de vaso que le había lanzado.

Violeta: ¿Te hice daño?  - negó y se limpió las lágrimas – ven. – me acerqué a ella y la abracé, al principio se asustó un poco pero luego se relajó y se soltó a llorar, se notaba que estaba realmente arrepentida, pero yo no era estúpida, tal vez July me había encerrado por hoy, pero de que Roxana me la paga, me la paga.

Julieta: ¿Podrás perdonarme?

Violeta: Te perdono – abrió sus ojos sorprendida por mi respuesta. – No lo vuelvas a hacer, me hace daño. Gracias por contarme – si me vieran mis amigas me darían un óscar por mi actuación. - ¿Dormimos? – asintió con su cabeza, por supuesto que todas las ganas que le traía se esfumaron en esos segundos, así que solo nos quedamos dormidas. Esto no se iba a quedar así.

Después de que July se quedó dormida, entré al baño y me miré al reflejo, estaba demasiado desconcertada por haberle arrojado el vaso a July, pude haberla lastimado. No, quien tiene que responder por eso definitivamente es Roxana, pero tengo que pensar bien las cosas.

>>>Rox<<<

Aún no me creía lo que había pasado con July, después de confrontarla en su cabaña me quedó claro que si lo intentaba lo suficiente podría lograr que ella me hiciera caso. ¿Por qué otra razón se molestaría tanto porque yo la hubiera besado? Estoy segura de que está confundida y no sabe qué es lo que quiere, pero ahora que yo abrí la puerta no sabe si entrar o quedarse en su zona segura, yo me encargaré de que se atreva a dar ese paso, cueste lo que cueste. Durante el resto del campamento no me acerqué más y tampoco les dije nada a Theo y Valeria, pero ya era hora de decírselos.

Theo: ¡¿De verdad lo hiciste?!

Valeria: ¡Vaya, hasta que haces algo bien! ¿Y qué hizo?

Rox: Se puso como loca, cuando fui a su cabaña me gritó y me dijo que no volviera a acercarme a ella – la cara de preocupación de los dos me dio un poco de risa.

Theo: Rox, no creo que debas contarnos eso con una sonrisa en la cara…

Valeria: Espera… - se quedó pensando – si reaccionó así es porque… - me miró y asentí – se dibujó una gran sonrisa en su cara.

Theo: ¿Qué? No entiendo nada…

Valeria: Ay Theo… Te explico, cuando ella se acostó conmigo fue pura tranquilidad al otro día, ¿por qué crees que se molestó tanto cuando Rox lo hizo? – su cara de no entender nada fue muy cómica - ¡Pues porque es algo que le afecta, y le afecta porque muy probablemente sienta algo por Rox!

Theo: ¿Cómo pueden saber eso solo por su reacción? Ustedes las chicas son tan raras…

Rox: Y ustedes los hombres tan distraídos jajaja – todos terminamos riendo.

Valeria: ¿Y ahora, qué sigue?

Rox: Pues el plan de conquista. Ya empecé, no pienso detenerme.

Theo: Disculpen por ser el aguafiestas, pero estamos olvidando un pequeñito detalle… el ogro que tiene por novia.

Valeria: Ten cuidado Rox, porque debo admitir que tiene una derecha muy buena, seguro cuando se entere se va a poner agresiva.

Rox: No me importa, ahora que he decidido apostarlo todo no me importa a quien tenga que enfrentarme, haré lo que tenga que hacer para ganarme el corazón de July.

Theo: Cuenta con nosotros – Vale asintió.

>>>Julieta<<<

Tenía mucho miedo cuando le dije a Violeta lo que realmente había sucedido en el campamento, me espanté más cuando me lanzó su vaso con agua y se estrelló contra la pared haciéndose mil pedazos, no supe qué pensar, afortunadamente logró controlarse y me permitió explicarle la situación. Después de hablar un rato nos propusimos a ir a dormir, pero yo no podía. Estaba recostada dándole la espalda cuando sentí que se levantaba de la cama, estuvo en el baño cerca de 1 hora y cuando volvió a la cama pude ver que el cuarto se iluminaba con una pequeña sombra y escuché que tecleaba algunos botones de su celular, mandando un mensaje supongo, apagó su celular y me abrazó para dormir.

Cuando desperté al otro día no vi a Violeta por ningún lado, por un momento temí lo peor, creí que habría ido a buscar a Rox para enfrentarla y salí corriendo de la habitación.

Violeta: ¿Piensas salir corriendo a la calle en ropa interior?

Julieta: Violeta, yo… creí que…

Violeta: ¿Creíste que había aprovechado que te quedaste dormida y había ido a casa de tu amiga a golpearla? – me sentí mal por el tono en el que me lo dijo, pero era cierto, así que solo agaché la mirada – sé que cuando me enteré de lo de Valeria reaccioné muy mal, pero también estoy aprendiendo a controlarme, así que creo que más que ir a partirle la cara a Roxana, mejor te reconquisto cada día para que te quedes conmigo – jamás esperé esa respuesta de Violeta, me dejó completamente desarmada, pero esas palabras bastaron para hacer que me derritiera de amor, además de que en la mesa estaba servido el desayuno. Le regalé mi mejor sonrisa y ella me devolvió la suya.

Julieta: Compraste el desayuno… gracias.

Violeta: Te equivocas – no entendía lo que decía – yo misma preparé el desayuno – mis ojos se abrieron tanto que comenzó a reírse de mí – jajaja solo no te asomes a la cocina, quedó hecha un desastre.

Nos sentamos a comer y además de que el desayuno estaba salado, me tocó un trozo de cáscara de huevo entre mi platillo. Violeta apenas y lo probó y lo escupió lejos.

Violeta: ¡Madre mía! ¡No te comas esto! Está para matar caracoles… - nos dio un ataque de risa y decidimos salir a desayunar algo. Fuimos en su auto ante su insistencia y llegamos a un pequeño restaurant donde desayunamos ligeramente, después de eso fuimos al centro comercial.

Julieta: ¿Qué hacemos aquí amor?

Violeta: Venimos a comprar trajes de baño y algo de ropa.

Julieta: ¿Trajes de baño?

Violeta: Detesto el frío, quiero que nos vayamos a mi casa en la playa durante las vacaciones, solas tú y yo – me tomó de la cintura y me besó. - ¿Te agrada la idea?

Julieta: Sería estupendo – en realidad me gustaba mucho esa idea, alejarnos un tiempo de todo y todos, disfrutar de nuestra relación.

Violeta: Amor, ¿me haces un favor? Voy a ir a hacer un trámite al banco, ¿Te parece si empiezas a recorrer la tienda para que escojas un traje de baño? No me tardo, te alcanzo en la tienda.

Julieta: Claro mi vida, ahí te veo. – La fila del banco se veía un poco larga, así que visitaría con toda la calma del mundo cada sección de la tienda, deben haber pasado cerca de dos horas y no veía rastros de que Violeta fuera a aparecer, decidí salir a buscarla para ver si seguía en el banco y mis piernas flaquearon cuando vi que Violeta estaba hablando con Roxana, justo afuera del banco.