Cadena de Favores-Reunión anual (1)
De cómo mi mujer se ofrece como centro de atención de una orgia durante la reunión anual de cuatro amigos de gran popularidad social.
Reunión anual (1ª parte)
Quizá la gente con mucho dinero necesita tener hobbies, relaciones o vivir situaciones que de alguna manera superen lo que tienen, les hagan sentirse de alguna manera distintos a los demás, sentir, notar el dominio y el poder proporcionados por su riqueza.
Después de asentarnos en la capital (véase CADENA DE FAVORES-EL TRASLADO) El tener que vivir en la mejor urbanización de la ciudad, manteniendo el mismo nivel que nuestros vecinos, no era fácil, tener nuevas relaciones, buscar contactos profesionales tanto para mí como para Mónica.
El apoyarnos en Pedro y Ana era excelente, pero temerario, la relación que manteníamos con ellos era un tanto especial, podíamos fiarnos, sabía que no nos iban a fallar, pero después no estábamos seguros de las tramas en las que nos podíamos ver envueltos.
Para conseguir introducirnos en este entorno intentamos de alguna forma que Ana y Pedro nos debieran un favor. Pero ¿cómo? Os vamos a narrar la locura que hicimos para conseguirlo, algo que aunque fue satisfactorio para ambos no dejo de ser poco común y mas para una pareja no demasiado liberal como habíamos sido nosotros hasta ese momento.
Un mes después volvimos a quedar con Pedro y Ana, salimos a comer a un pueblo cercano.
Finalmente me voy a operar los pechos, dijo Ana.
¿ya lo has decidido? ¿Cómo ha sido eso? Dijo Mónica
Tenía que hacer algo por mí este año, Luis tiene la reunión anual y yo no podía ser menos que él.
¿Reunión anual?
Si, es una reunión entre amigos, se juntan cuatro amigos de la infancia, cada año y pasan el día juntos comiendo, bebiendo y esas cosas. Cada año lo organiza uno y tiene que dar la talla se puntúan para quien lo ha hecho mejor y se dan un premio, son como críos. Pedro anda loco con los preparativos, le toca organizarlo este año y quiere ser el mejor.
Yo hago lo mismo con los míos. Dije yo.
No creo que hagas lo mismo, nosotros somos los mejores. Dijo Pedro, muy orgulloso.
Todos esos encuentros de chicos acaban igual, no hay uno mejor que otro. Dijo Ana
Porque no puedo contártelo, si no cambiarias de opinión. Son realmente especiales, desde la gente que nos juntamos hasta las cosas que hacemos.
Pedro, creo que si puedes contárselo, ellos han demostrado ser discretos y de confianza. Dijo Ana
Está bien, pero máxima confidencialidad.
Que suspense, no creo que sea para tanto.
Conoces a Jose C.,
¿el actor?
Si, ¿y a Miguel M. el deportista? ¿y al Paco T. el joyero de la firma T? Ellos son los otros tres.
Caray, si que estas bien relacionado.
Me encanta Jose C. es guapísimo. Dijo Mónica
Pues espera a ver a Miguel M. esta mas bueno en directo que cuando sale en la tele. Dijo Ana, Mmm. Para comérselo.
Comenzamos el día, los móviles prohibidos, todo organizado de antemano por la mañana la limosina nos recoge en casa y vamos al club de tenis a echar un partido, después nos reunimos a comer en una casa de campo, donde el organizador cocinara para el resto, nuestra partida de Mus y la siesta, por la tarde iremos al futbol y después a cenar en un buen restaurante. Y por la noche después de cenar salimos de caza. Es la parte más excitante.
A cualquier cosa le llaman excitante. ¿sabes lo que hacen? Dijo Ana. Se van a la disco y se intentan ligar cada uno a una chica.
Sí que es innovador, eso no lo ha hecho nunca nadie antes. Dije yo apoyado por la risa de Mónica.
Déjame acabar-. Continúo Ana. Se las ligan y luego van a la habitación del hotel e intentan montar una orgia.
Que bestias. ¿y lo habéis conseguido alguna vez? Dijo Mónica
Bueno, no del todo, pero contando con Jose C es más fácil.
¿y tú se lo consientes?
Yo me tomo mi revancha con otras cosas, le dejo una vez al año que se desfogue sin mí, lo único que le pido es que lleve precaución. De todas formas nunca montan la orgia que pretenden.
Hace unos años contratábamos una putas y pasábamos la noche, pero acabo por aburrirnos. Ahora intentamos ligar, alquilamos una habitación en el gran hotel y montamos la fiesta.
Pero cuéntales, ¿Cómo han sido las ultimas? Dijo Ana.
Bueno, un poco desastre, porque las tías o estaban borrachas y se dormían o acaban follando con Jose C. Al día siguiente nos vamos a un balneario y pasamos la mañana allí, tenemos que comer con un personaje famoso y después de comer comenzar con las votaciones.
¿Qué votáis?
Tenemos una hoja de calificaciones que evalúa cada bloque de actividades, la comida, los restaurantes, el balneario, el ligue, hasta el personaje famoso.
¿Y cómo llevas la organización? Dije yo
Todo lo que puedo controlar lo tengo todo controlado, incluso he invitado a Fernando S. (el periodista y escritor) a comer con nosotros y ha aceptado.
¿y lo de ligar como lo llevas?
Esa es la parte que no tengo controlada, depende del azar. Ya me las apañaré.
Tendrás que esforzarte en tus técnicas de conquistador.- dije yo
No, si a la que se tiene que ligar es a mí. Dijo Mónica un tanto alterada. ¿te parece bien?
¿Tu? Pues sería buena idea. Si estas dispuesta.
Yo, con conocer a Jose C estaría dispuesta a lo que sea.
Si me haces quedar bien con esos capullos, sería algo impagable.
Todo se puede pagar, dije yo, un tanto confuso ante la proposición de Mónica.
No me asusta, pero te voy a poner algunas condiciones.
La primera es que no habrá sexo duro, será algo sencillo. Yo os hare un striptease, completo, me pondré ropa muy sexy y solo con eso os hare explotar las pollas. Me podréis tocar cuanto queráis, mi cuerpito para vosotros, os agarrare el rabo, y os masturbare entre mis tetas, que se que os gusta a todos, y yo lo hago muy bien. Nada de mamadas, ni anal, ni correrse encima, ah! Y todos con vuestros condones listos.
Que dispuesta eres, creía que lo del mes pasado en nuestra casa era solo una excepción. Dijo Pedro emocionado por la proposición.
Y lo era. Te debía un favor y te lo pague. Ahora me lo deberás tú a mí.
Segunda. Con Jose C. estaré el tiempo que quiera.
Tercera. Gabriel estará cerca, por si os pasáis.
Tendrás que buscar una habitación donde podamos estar. Porque yo también pienso estar presente dijo Ana. Así controlaremos que todo vaya bien.
Tienes que tener cuidado con que no descubran que está preparado si no haré el ridículo. No te preocupes eso es cosa mía, en cuanto salgáis del restaurante os seguiré, no hace falta si quiera que me llames por teléfono.
Cuando retornábamos a casa en el coche no pude dejar de preguntarle.
¿Por qué quieres hacerlo? Pregunte yo.
Por dos cosas primero porque siempre he soñado con follarme a Jose C. y la otra porque me encanta que me deba un favor.
Cuando te has ofrecido es porque te apetece.
Tú sabes que Jose C. ha sido siempre un amor platónico y tener la oportunidad de acostarme con él, no podía dejarla pasar.
Pero te vas a encontrar con cuatro pollas con ganas de guerra.
Solo pienso follarme a Jose C., a Pedro, como mucho una paja, ya tuvo bastante el otro día y al resto unas cubanas. Sabes que en eso no fallo y se corren seguro. Además estarán borrachos, no creo que se les vuelva a levantar.
La verdad es que prefiero que me lo digas a que lo ocultes. Pero no creas que me hace mucha gracia.
Tienes a Ana, crees que quiere estar contigo solo para vigilar, a ella le importa un bledo lo que haga su marido. Se nota que le gustas y quedo muy contenta con el encuentro del mes pasado. Además a ti te gusta su culo, rómpeselo. Tu lo haces bien, así estamos empate. De todas formas estate atento, no quiero que se compliquen las cosas y se sobrepasen conmigo.
Pasamos la semana sin acordarnos de la cita, liados con el asunto de la tienda de Mónica,
Llego el sábado noche, Mónica se acababa de duchar, olía de maravilla, yo estaba viendo el partido en la habitación y mirando cómo se vestía, se coloco un sujetador de florecitas muy juvenil, una braguita tanga, unos vaqueros ajustados, que mostraban toda la redondez de su culo, una camiseta blanca de licra, que marcaba el sujetador y los pezones, con un escote en V que permitía ver su canalillo y daba un tono muy voluptuoso a su figura; para disimular sus tetazas, opto por una cazadora vaquera y unas sandalias con tacón, para parecer más alta
Nos subimos al coche y sobre la hora prevista esperamos frente al restaurante donde cenaban, al poco tiempo salieron y los seguimos hasta llegar a la discoteca.
Mónica lo había planeado bien, había quedado con unas amigas que también se acercaban a la cita, de esa forma no levantaría sospechas al ir sola. Yo me haría el encontradizo con Luis para indicarle donde estaba.
Se encontró el grupo de amigas en la barra de la segunda planta. Pero después de una hora ni rastro de Luis y su grupo. Yo que merodeaba por allí, me lo encontré hablando con una morena guapísima, que enseguida le tiro la copa a la cara, en ese momento se acercaron los amigos riendo y ayudándole a limpiarse. El me vio y enseguida hizo que el grupo me siguiera.
vamos a otro sitio en esta parte ya nos hemos mojado bastante
Bajando las escaleras, se podía identificar enseguida al grupo de Mónica.
Mira, esas están buenas dijo Jose C. señalando al grupo de mi mujer.
Y además tienes donde elegir. Hay de todos los tamaños
Pedro aunque se dio cuenta de que estaba Mónica, no quiso lazarse para evitar suspicacias.
No, me gustan más jovencitas, esas pasan la treintena.
Mejor más expertas, dijo Miguel M., quizá nos enseñen algo.
A este ritmo, no ligas ni con sus abuelas. Dijo Paco T.
Son muchas, podríais ayudarme.
Ese es tu problema, yo voy a buscar por otro lado.
Pedro se acerco al grupo de chicas. Fingió no conocer a Mónica y empezó a presentarse, ellas lo acogieron bien, le dio un par de besos y entablo conversación. Yo, que estaba situado junto a sus amigos pude escuchar:
Esta vez está durando más, y hasta parece que le hacen caso.
Pues no están mal, excepto la de la falda hippie.
Mira que tetas tiene la de la cazadora vaquera.
Me gusta más la de la blusa azul, tiene mejor cuerpo.
La de la blusa azul era Gloria, con la que estaba hablando Luis, algo más separado del resto del grupo.
Pues creo que va a ser la de la blusa azul, míralos que acaramelados. Este es capaz de enamorarse e irse él solo.
Gloria dejo a Luis para saludar a un conocido y este se volvió hacia Mónica. Ella estaba apoyada en la barra bebiendo su mojito. Conversaron un rato hasta que ella dejo su vaso en la barra, y se puso a bailar con Luis en la pista.
Mira como baila. Dijo Paco T. refiriéndose a Luis.
Parece que ha pescado. ¿Cuál de ellas es?
La de la cazadora vaquera, la de las tetas grandes.
En ese momento dos chicas jóvenes un tanto bebidas se acercaron a ellos.
Tú eres Jose C. el actor, ¿verdad?
Si, cariño, ¿Cómo te llamas?
Comenzaron a charlar y a beber con ellas, hasta que llegaron Luis y mi mujer, que hizo las presentaciones. Al poco rato propusieron continuar la fiesta en otro lado y salieron los siete de la discoteca.
Por el tamaño de la historia he preferido dividirla en dos partes y la segunda creo que es mejor que os la narre ella. Si os han gustado los antecedentes de la historia, publicaremos en breve el desenlace.